Etiqueta: 3D

  • Impresiones 3D para la industria, en Maker Group

    Redacción Líderes

    Relacionadas

    El ecuatoriano Luis Miguel Chiriboga decidió traer desde Estados Unidos una industria en crecimiento. Lo hizo tras observar los avances tecnológicos en materia de impresiones 3D (tres dimensiones) que existían en ese país.

    Hace cuatro años, cuando cursaba su carrera de economista en el país del norte, constantemente estaba al tanto de los avances que se registraban en el mundo de las impresiones, ya que siempre se sintió interés por esta ­tecnología.

    “Fue cuando las patentes de este invento expiraron, que los precios bajaron y la tecnología 3D se volvió mucho más asequible. Entonces, fue en este momento que me di cuenta del potencial que había y de las oportunidades de esta industria naciente”, comenta.

    Así, junto con su cuñada, decidieron experimentar y planificar el proyecto que se convertiría en el centro líder de impresiones 3D del Ecuador. Sin embargo, el proceso de desarrollo no fue nada sencillo, ya que ninguno de los dos tenía conocimiento académico sobre esta tecnología.
    Para poder entender el funcionamiento y alcance de las máquinas, Chiriboga decidió adquirir una impresora 3D y, de manera autodidacta, se capacitó hasta llegar a develar las mejores maneras para su utilización y los beneficios que la tecnología 3D podía traer a la industria, en general.

    Después de un año de pruebas y planificación, el emprendedor decidió regresar a Ecuador e implementar, finalmente, su proyecto. Es así que, en el 2014, con una inversión inicial de USD 40 000, nace Maker Group, un centro de impresiones 3D que, además, provee de suministros y ofrece capacitación para que los clientes conozcan el uso adecuado de sus productos.

    Además, esta empresa es la representante en Ecuador de varias marcas estadounidenses y chinas de última tecnología en impresiones de este tipo. En la actualidad, los precios de esta maquinaria se han reducido considerablemente, llegando a valores que oscilan entre USD 700 y USD 5 000.

    Asimismo, los precios de las impresoras varían de acuerdo con el tipo de material que puede ser utilizado para crear los diseños 3D. Maker Gorup ofrece máquinas que utilizan el último avance tecnológico que permite la impresión 3D en resina líquida, obteniendo un producto final de mejor resolución que los realizados tradicionalmente con plástico.

    No obstante, las actividades de esta pequeña empresa se centran, principalmente, en innovar usos para esta tecnología. De esta manera, han logrado implementar la impresión 3D en temas médicos, como la cirugía guiada.

    Este tipo de operaciones utiliza moldes impresos en 3D para que sirvan de guía para que los doctores sepan con precisión en dónde realizar una incisión. Así se consiguen operaciones poco invasivas que permiten una recuperación más rápida del paciente.

    Adicionalmente, este centro ha logrado crear moldes 3D para facilitar el trabajo de artesanos, como el de los joyeros que anteriormente tenían que utilizar moldes en cera, tallados a mano. Asimismo, los socios esperan introducirse en la industria del chocolate, creando moldes personalizados para la elaboración de estas golosinas.

    También, Maker Group se dedica a la “materialización” de las ideas que tienen personas y empresas que quieren obtener productos específicos, gracias al diseñador industrial especialista en tecnología digital, Renato Vargas.

    Él cuenta que la tecnología 3D abrió la puerta para que los diseñadores exploten su creatividad realizando productos que se pueden materializar. “Antes era casi imposible poder trabajar en plástico y los materiales que se utilizaba eran poco prácticos”, comenta el diseñador.

    Actualmente, los costos de producción de las impresiones de este tipo también han bajado; por este motivo, los clientes pueden acceder a los servicios de Maker Group a un valor aproximado de USD 8,50 por hora de trabajo. Esta situación hace que esta tecnología sea más asequible para áreas como la comercial, académica…

    Gracias a las innovaciones de impresión y diseño que la empresa ofrece a sus clientes, este emprendimiento logra facturar mensualmente USD 10 000.

    LOS DATOS

    Maker Group es un centro de impresiones e innovación de tecnología 3D.
    El centro se abrió en el 2014 y contó con una inversión inicial de USD 40 000
    El costo de las impresoras oscila entre USD 700 y USD 5 000.
    El valor de las horas de trabajo es de aproxi­madamente ­ USD 8,50

    La facturación 
    mensual aproximada es de USD 10 000.

    Luis Miguel Chiriboga, Renato Vargas y Oriana de la Barrera son parte de Maker Group, marca que apareció desde el 2014. Foto: Galo Paguay / LÍDERES
    Luis Miguel Chiriboga, Renato Vargas y Oriana de la Barrera son parte de Maker Group, marca que apareció desde el 2014. Foto: Galo Paguay / LÍDERES
  • Con la tecnología 3D ya se imprime comida

    Barcelona. EFE (I)

    Relacionadas

    Las impresoras 3D ya han comenzado a imprimir comida, incluso menús sin gluten y con un control exhaustivo de los ingredientes, por lo que pronto se ganarán un lugar en las cocinas, entre la cafetera y la tostadora.

    Así lo augura el nutricionista Alex Vidal, profesor de los Estudios de Ciencias de la Salud de la Universitat Oberta de Catalunya (España). Él destaca que esta nueva tecnología a más de emplearse para imprimir piezas en el sector industrial, fabricar prótesis para la medicina o elaborar las figuras más diversas de decoración, también están entrando en la cocina.

    Según Vidal, de momento las impresoras 3D han entrado en las cocinas de grandes restaurantes y servicios de comida, pero en un futuro próximo aspiran a convertirse en un electrodoméstico más con fines gastronómicos.

    “Con esta nueva herramienta puedes diseñar elementos, volúmenes y texturas para dar una vuelta (opción) más a las diferentes propuestas y los platos que hacen grandes restauradores”, asegura Vidal.

    En un estudio realizado en octubre pasado, la consultora Gartner auguraba que en 2016 se venderían más de 455 000 unidades de impresoras 3D, una cifra que se incrementará en el 2020, de acuerdo con los cálculos de la consultora, hasta exceder los 6,7 millones de unidades. Aunque todavía no están implantadas entre el consumidor final, Vidal plantea ventajas en el caso de alergias e intolerancias alimentarias.

    “Cuando haya algo que se tenga que controlar mucho, como puede ser una alergia alimentaria o una intolerancia al gluten, puede ser muy útil. Puede ayudar a esquivar algún nutriente”, afirma este nutricionista.

    Varias empresas se han interesado por la impresión 3D de comida. Entre otras está Natural Machines, que es una empresa emergente con sede en Barcelona (España) y que comercializa la Foodini. Es una máquina que funciona con cápsulas e imprime una gran variedad de alimentos, tanto dulces como salados.

    En el extranjero, otras compañías también se han lanzado a trabajar esta técnica, como la estadounidense 3D Systems, que ha ideado la Chefjet y la Chefjet Pro y ha impulsado el 3D Culinary Lab para estimular la innovación gastronómica.

    Además, están la canadiense ORD Solutions, que ha impulsado la RoVaPaste Hybrid Food 3D Printer, o la también estadounidense Systems and Materials Research, que prepara un modelo que pueda nutrir de manera sana a los astronautas.

    Vidal lamenta que, aunque pueda ser útil para determinados grupos de personas, por el momento esta tecnología “no es accesible para todos” entre otras cosas por su precio. Por ello, hasta ahora solo se han introducido en la restauración y principalmente en establecimientos innovadores y de cierto nivel.

    La mayoría de impresoras 3D de comida funciona de manera similar a una manga pastelera: van añadiendo capas y capas de comida y es habitual que se empleen con ingredientes cremosos y no duros, como chocolate, crema de queso, pasta, helado, mermelada, mostaza o crema de cacahuete.

    Vidal puntualiza que todavía no se puede imprimir con todo tipo de ingredientes. “Este es un reto que tiene todavía la industria, junto con la introducción de la cocción, ya que la mayoría de máquinas no cuecen y se necesita terminar el plato en el horno, en la sartén o en la olla”.

    Para imprimir una pizza o un pastel, hay que proveer la máquina de la materia prima, programarla y esperar a que prepare el plato, un proceso que puede tardar desde sólo cinco minutos hasta 20 ó 30, dependiendo de la receta y la dificultad. En muchos casos, las impresoras 3D se emplean y tienen éxito en la repostería porque, según indica Vidal.

    Las impresoras 3D preparan los platos capa por capa. El precio de los equipos es uno de los limitantes. Foto: Cortesía
    Las impresoras 3D preparan los platos capa por capa. El precio de los equipos es uno de los limitantes. Foto: Cortesía
  • Ellos le dan un efecto 3D a las historias

    Redacción Guayaquil

    Alejandro Armas fue parte del Cuerpo de Infantería de Marina del Ecuador durante 12 años, por lo que viajó varias veces a las Islas Galápagos. En el 2005, ideó una serie de televisión para niños con la temática del archipiélago, pero era una idea muy general y no recibió apoyo de las instituciones a las que acudió.

    En el 2009, en un viaje a las islas, tuvo la idea de realizar una película para niños, en 3D, usando a la fauna de Galápagos como inspiración para los personajes principales. Para esto, escribió un guión.

    Producir la película era su sueño pero, nuevamente, no consiguió el financiamiento. Por ello, en el 2010, se unió a su hijo Andrés, que cursa la carrera de Producción Audiovisual, y juntos formaron APC Digital Studio. Para iniciar, invirtieron cerca de USD 11 000 de ahorros personales. El valor lo destinaron principalmente a la compra de equipos electrónicos como computadoras y tarjetas de video.

    Hoy, APC tiene una cartera de clientes de más de 20 contactos. Realiza trabajos cinematográficos y publicitarios. Por ejemplo, rea- lizó un cortometraje sobre la leyenda guayaquileña sobre La Viuda del tamarindo, para el Municipio de la ciudad.

    Melvin Hoyos, director de Cultura del Municipio de Guayaquil, dice que el cortometraje se realizó como parte de un programa de difusión de las leyendas urbanas guayaquileñas. Hoyos cuenta que durante el proceso de producción, él aportó con información histórica sobre la arquitectura, vestimenta y otros detalles de la época. «Ellos supieron adaptar muy bien los requerimientos».

    El desarrollo del producto audiovisual, que dura 17 minutos, tomó aproximadamente un año, durante el cual los representantes de APC Digital Studio se reunieron una vez a la semana con Hoyos. Él califica el resultado como exitoso. «Es de primera. Puedo describirlo como un trabajo muy meticuloso».

    En el 2011, este cortometraje quedó como finalista en la categoría de Mejor Corto Animado en el festival audiovisual Curtas Film Fest, realizado en Villagarcía de Arosa (España).

    Otro los trabajos destacados de APC Digital Studio es un comercial 3D para cine, realizado para la marca Rey Leche. Este se proyectó en todos los Supercines a escala nacional, en el 2011, antes de la película el Rey León 3D.

    Además, el mes pasado, APC Digital Studio realizó un proyecto individual. En el marco de las Fiestas de Guayaquil, esta productora audiovisual lanzó el libro en 3D ‘Guayaquil, un poema al río’. El libro, que trae gafas especiales, contiene 200 fotografías de la ciudad con efecto 3D. Cada foto está acompañada de un poema dedicado a Guayaquil.

    LA CIFRA:
    USD 5 000 en promedio, factura este negocio.

  • La impresión 3D piensa en emprendedores

    Glenn Chapman, Las Vegas, AFP

    El auge de la impresión en tres dimensiones (3D) deja entrever un futuro en el que ya no se comprarán zapatos, monturas de gafas o juguetes, sino que se imprimirán en casa.

    El líder de la banda Black Eyed Peas, Will.I.am, que debutó en el Salón Internacional de la Electrónica de Consumo (CES) de Las Vegas como director creativo de 3D Systems, predijo que la tecnología hará para muchos objetos básicos lo que iTunes -la tienda virtual de Apple- ha hecho por la música.

    Para el cantante, de aquí a una década «las impresoras 3D estarán en las casas como las neveras, las televisiones y los microondas» y harán objetos como zapatos, cinturones y accesorios que actualmente se adquieren en comercios.

    La impresión 3D existe desde hace unos 25 años, pero en los últimos tiempos ha ganado popularidad con la mejora de la tecnología y un costo más accesible para amantes del bricolaje, artistas y emprendedores.

    Las impresoras para el mercado doméstico usan generalmente un plástico biodegradable hecho con maíz, que se aplica en capas y se plasma en láser con placas calientes. «Piensen en esto como capas de ladrillos microscópicos. Capas y capas de ladrillos. Si colocan suficientes ladrillos logran una construcción», explica Roger Chang, director general de Singapur Pirate 3D, cuya impresora para la firma Buccaneer se vende a USD 497.

    Las impresoras pueden hacer figurillas, piezas de ajedrez, picaportes, así como elementos mecánicos como rodamientos de bolas o piezas para creaciones con partes móviles.

    Las impresoras de MakerBot han sido incluso utilizadas por el grupo de aeroespacial estadounidense Lockheed Martin para fabricar una parte de un telescopio que debe ser lanzado en unos cuatro años, mientras que en África han servido para confeccionar prótesis de manos a una décima parte de su precio normal.

    Chang considera que los fabricantes de juguetes independientes podrían ser los que lleven las impresoras 3D al gran público. «De la misma forma que iTunes ha permitido a los músicos independientes expandirse, los creadores de juguetes independientes pueden permitir a sus clientes imprimir los juguetes sin tener que preocuparse de grandes presupuestos o acuerdos de distribución», explica.

    Ejemplo Descargas.  Los códigos numéricos de la «robo-mano» han sido descargados 55 000 veces, según MakerBot Database. Esta firma ofrece sin costo una amplia base de datos de códigos de impresión en su sitio web.Precio. Sus equipos valen entre USD 1 375 y 6 500.

    [[OBJECT]]

  • Emprendedores crean una mano en impresora 3d

    Josefa Suárez Buenos Aires / Agencia AFP

    Jóvenes argentinos fabricaron una mano con una impresora 3D que cumple con las facultades prensiles con las que soñaba Felipe, un niño de 11 años que nació sin su mano izquierda, y desarrollaron así una técnica capaz de reemplazar una prótesis de USD 40 000 por este modelo de 250.

    La responsable de esta historia con final feliz es Ivana Giménez, la mamá de Felipe y quien, con el afán de resolver el deseo de su hijo, se puso en contacto con Rodrigo Pérez Weiss, un emprendedor de 33 años, en Buenos Aires y que es dueño de la empresa 3D LAB Fab&Café.

    «Me había enterado del caso de un estadounidense que le había impreso una mano a su hijo y empecé a buscar en Internet. Ahí entré en contacto con 3D LAB y los dos socios», Pérez Weiss y Gino Tubaro, un inventor de 18 años.

    La familia de Felipe Miranda vive en Tres Algarrobos, a 500 km de la capital argentina, un pueblo de 3 500 habitantes de la provincia de Buenos Aires.

    Giménez dice que su hijo se encuentra feliz y ella agradecida por una prótesis que logró sustituir otras ortopédicas que cuestan USD 40 000, que están fuera de su alcance. Los dueños de la empresa 3D le obsequiaron a Felipe lo que terminaría siendo también para ellos una prueba de un alcance infinito.

    La prótesis de Felipe hecha por los jóvenes argentinos «además de ser más liviana y de poder calibrar la fuerza, la fabricamos a un costo de 2 000 pesos» (USD 250), precisó Pérez Weiss.

    «Iniciamos un proceso de investigación y bajamos modelos de Internet y trabajamos en las adaptaciones, teniendo en cuenta las fotos que nos había enviado la mamá del brazo de Felipe, las medidas del muñón y una impresión gráfica de su mano derecha», recordó Pérez Weiss.

    Finalmente, la mano fue enviada a Tres Algarrobos y Felipe mostró a los creadores de su prótesis su emoción en un conmovedor video que se puede ver en la página de Darwin Research de Facebook, de Pérez Weiss. Allí, con una sonrisa, el niño demuestra cómo puede rascarse la cabeza, acariciar el rostro de su mamá y agarrar el mate.

    Pérez Weiss trabaja con su socio Tubaro, que cursa la carrera de Ingeniería Electrónica y quien hace pocos días viajó a Tres Algarrobos para conocer a Felipe.

    USD 250  costó la mano elaborada en una impresora 3D, por un emprendedor argentino en Buenos Aires.

  • La impresión en 3D llega a la cerámica

    Redacción Guayaquil

    La tecnología 3D cada vez tiene más mercados. Uno de los segmentos más recientes es el de la industria cerámica.

    Uno de sus antecedentes está en el 3D Printshow, que se cumplió en noviembre del 2013, en París. Allí se mostraron los últimos adelantos en materia de impresión en tres dimensiones, que se comienza a usar en piezas metálicas y en cerámicas.

    La aplicación de esta tecnología permite que en estos materiales, usados en construcción y decoración, se plasmen imágenes y diseños que emulan texturas y otros materiales. Se trata de impresiones de alta calidad que pueden durar como mínimo 15 años.

    Durante la feria Construye y Remodela, que se llevó a cabo del miércoles 20 al domingo 24 de agosto en el Centro de Convenciones de Guayaquil, dos marcas de cerámicas ecuatorianas presentaron productos fabricados con impresión digital 3D Inkjet: Ecuacerámica, de Riobamba y Rialto, de Cuenca.

    Esta innovación permite que las imágenes tengan 129 600 puntos de impresión por pulgada, una resolución 20 veces superior a las opciones tradicionales que se usaban, como la serigrafía.

    Johana Vinueza, gerenta nacional de mercadeo de Ecuacerámica, comenta que la empresa invirtió USD 10 000 en la máquina que permite obtener esa textura. Actualmente, la capacidad mensual de producción de esta firma es de 600 000 metros; de estos, un 10% se exporta a Costa Rica, Colombia, Perú y Canadá. El 90% se comercializa dentro del país en 360 puntos de venta.

    Con la impresión en la cerámica, el cliente puede obtener acabados más elegantes a precios más cómodos. Se puede simular mármol, porcelanato, ladrillo, granito y otros tipos de piedras que en el mercado podrían tener costos más altos, explica el arquitecto Daniel Rosero.

    Los marmolizados satinados o mate así como las fachaletas (simulación de ladrillo) son los modelos más pedidos desde que Ecuacerámica comenzó a vender estos productos, cuenta Judith Alcívar, supervisora trade de Marketing.

    Saskia Crespo, gerenta de Mercadeo de Rialto, cuenta que desde que los productos salieron al mercado han tenido una acogida excelente. «No hay pixeles, se ve nítido y tienen una alta durabilidad». Jorge Naranjo, jefe de la zona Costa de Rialto, añade que en el último año las ventas de cerámicas en general en el mercado nacional han registrado un crecimiento de un 35%.

    La producción

    Planes de Rialto. La capacidad de producción de Rialto es de 350 000 metros al mes. En enero del 2015 planean incrementarla a 650 000.

    La variedad de Ecuacerámica. Actualmente la empresa con base en Riobamba ofrece unas 450 variedades de piso y pared gracias a este nuevo sistema. La producción mensual de esta fábrica es de 60 000 metros cada mes.