Etiqueta: Adriana

  • Adriana Márquez: ‘La vida puede cambiarle totalmente a una mujer con un viaje’

    Redacción Quito

    Relacionadas

    Demostrar a las mujeres que viajar solas es una experiencia que transformará sus vidas es parte del día a día de la comunicadora Adriana Márquez.

    A través del periodismo de viajes ha mostrado diferentes destinos. Su formación se amplió gracias a un diplomado en artes visuales e industria creativa y cursos de fotografía documental que realizó en Australia.

    Entre el 2016 y el 2019 viajó sola por el mundo; cada vez que regresaba por corto tiempo a Ecuador halló mujeres quienes le preguntaban cómo lo hizo y cómo encontrar sus historias, pero no contaba con una página electrónica.

    Es así como desarrolló un blog en el que puso toda la información sobre sus viajes. Esta idea creció y se convirtió en una plataforma colaborativa de mujeres, denominada Plumaword.com, en la que cada una también podía contar sus experiencias por el mundo.

    Próximamente, Adriana busca abrir en su sitio de Internet una venta de asesoría para que las viajeras encuentren todo lo que requieren. Su idea es impulsar el empoderamiento femenino.
    Vida

    “Un viaje te puede cambiar completamente la vida. Mis ganas de viajar tanto tiempo sola se dieron tras la muerte de mi hermanito menor. Muchas mujeres pasamos por golpes duros de la vida de los cuales no encontramos una escapatoria; se cae en una especie de depresión, de problemas de carácter existencial.

    Apartarse de lo conocido, del statu quo, ayuda a descubrir cosas y a fortalecerse espiritualmente. Mejora la autoestima y la parte física. Uno puede reevaluar los problemas cuando hay tanta belleza y, a la vez, cosas shockeantes que existen alrededor”.

    Mujeres y viaje

    “Lo que necesitamos las mujeres para recorrer lugares es información. Es lindo llegar a un lugar y sorprenderse al descubrir nuevas cosas. Pero es básico llegar sabiendo mucho de esa cultura.

    Cuando me fui a Tanzania, lo único que quería era ir a la isla Zanzibar. Cuando yo llegué pasó algo que me shockeó un montón: es un país extremadamente musulmán. Incluso en la playa, las mujeres estaban cubiertas.

    Ante esto uno debe tener el conocimiento de la cultura porque no puedes llegar a imponer. No es el espacio donde uno creció y se debe ser respetuoso.

    Mientras las mujeres estemos informadas no pasa nada. Es una prioridad, además, un seguro de viaje. También debemos saber dónde nos vamos a hospedar.

    En mi plataforma existen los testimonios de mujeres en distintos países. Se encuentran ‘tips’ para no correr peligro alguno.

    Un problema que tenemos las mujeres para viajar es que poseemos mucho miedo de la parte que nos puede shockear de otras culturas, del machismo, etc. Hay un montón de factores que evitan que se pierda este temor”.

    Cultura y machismo

    “En el sudeste asiático no existe miedo porque en la religión y la cultura no predomina el machismo, en Latinoamérica sí. En la cultura musulmana hay ciertos puntos que pueden llegar a asustar.

    En Ecuador las mujeres viajan más que los hombres, pero más por trabajo o estudios. Al recorrer el mundo la cabeza se abre.

    Cuando yo recién iba a viajar sola, traté de encontrar foros sobre mujeres que habían viajado de esa forma desde Ecuador y no lo hallé. No ha sido parte de nuestra cultura que las mujeres viajen solas.

    Cuando yo recién me iba a ir me dijeron que estaba loca y me metieron muchos miedos.
    Luego regresé y les conté a mis amigos que hice un trekking cinco días sola alrededor de los Himalayas, igual me dijeron que estaba loca. Conforme fue pasando el tiempo, la gente empezó a sorprenderse sin juzgar sino a admirar, lo que me alentó a seguir.

    Conozco mujeres que se quedaron sin trabajo, luego de muchos años, y ahora quieren viajar solas. Otras lo hacen por migración; tengo un texto en mi plataforma sobre una mujer que salió de Venezuela y atravesó Brasil y Perú para llegar a Ecuador.

    Cuando las mujeres regresan de los viajes traen una seguridad en ellas mismas que se vuelve contagiosa. Miran el mundo con otra perspectiva, son distintas.

    Se trata de viajes por transformación y no por vacaciones o negocios. Es importante compartir las experiencias entre mujeres.

    A través de mi espacio de Pluma se arma una bitácora de todas, escrita por todas y para todas.

    Al leer toda la información es más fácil conectar directamente las personas. Viajar es un espacio personal y uno quisiera que otras mujeres vivan esas experiencias.

    Considera que viajar es una experiencia que le permite a las mujeres romper con el statu quo y mirar al mundo de manera diferente. Dice que hay que viajar informado sobre cada cultura. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
    Considera que viajar es una experiencia que le permite a las mujeres romper con el statu quo y mirar al mundo de manera diferente. Dice que hay que viajar informado sobre cada cultura. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
  • Adriana Rivera: ‘Los miedos se pueden transformar en ideas de negocio’

    Redacción Quito

    Relacionadas

    Antes de fundar Marketing School Ecuador, Adriana Rivera Andrade, de 34 años, estudió por un tiempo ingeniería agroindustrial y medicina.

    Rivera, que se graduó en administración de empresas y tiene una maestría en comercialización e internalización de productos y servicios por la Universidad Camilo José Cela (España), cuenta que pasar por otras carreras le permitió entender que la vida consiste en borrar y empezar de nuevo “hasta encontrar aquello que más te apasione”.

    En su escuela, fundada hace un año y medio, Rivera capacita a emprendedores en comunicación digital, gestión de redes sociales, orientación empresarial y otros temas relacionados al marketing digital. El 70% de sus alumnas han sido mujeres.

    Dotar a mujeres de herramientas para emprender desde sus casas, en temas que las inspiran y les permiten ser dueñas de su tiempo, “es como darles alas”, dice.

    Con su amiga Lula Villacrés en junio pasado Rivera lanzó I Women, un evento para compartir experiencias de mujeres que han sabido dar la vuelta a las adversidades y emprender. En junio se realizó la primera edición, con apoyo de la Cámara de Comercio de Quito, la cita contó con 800 asistentes. En septiembre se realizará nuevamente este evento
    .
    Miedos y debilidades

    “Hace unos 10 años, mi primer emprendimiento surgió porque tendía a comerme las uñas y tenía que contratar servicios de uñas acrílicas, pero no había lugares que brinden una completa experiencia de relajación al usuario. Me di cuenta que había una oportunidad de negocio que no estaba siendo aprovechada y puse un spa de uñas. Así mismo, recuerdo que uno de mis mayores miedos era hablar en público y hoy doy clases y conferencias en grandes auditorios. Más tarde, cuando estaba por abrir mi escuela, atravesé por un divorcio y una persona me dijo: ‘renuncia, te estás divorciando, no vas a poder’. Fue una cosa durísima, pero yo sabía que de mis caídas podía sacar fuerzas y hacer cosas increíbles, y aquí estoy. Por eso estoy convencida de que los miedos y las debilidades se pueden transformar en negocios si tienes objetivos claros ”.

    Emprender en el país

    “Ecuador es uno de los países con las tasas más altas de emprendimiento, pero lastimosamente se acaba la gasolina rápido y los negocios no prosperan porque la gente comete el error de pensar que porque a alguien más le va bien a uno también le tiene que ir bien y solo copian ideas. Emprender no es fácil, pero en Ecuador, a diferencia de otros lugares, hay mucho por hacer y eso es una gran oportunidad, siempre y cuando te formes y seas constante en capacitarte. Lo más importante es tener clara la meta, porque el plan puede cambiar. Siempre digo que al emprender hay que tener un plan A, B, C y D. Porque por cada 10 puertas que se cierran, dos se abren y la décima puede ser la puerta de tu vida. Emprender es un asunto de constancia”.

    Empoderamiento

    “He visto a muchas mujeres que a veces no pueden ir a eventos o charlas que doy, por el esposo o porque no tienen con quien dejar a los hijos, mujeres que no entran a un curso porque no tienen quien las apoye y es una pena. Las mujeres tenemos el mismo derecho a salir adelante, a formarnos, a emprender. Me da satisfacción que en la escuela más del 70% son mujeres. He tenido casos de mujeres que trabajaban en multinacionales y de repente se quedaron sin trabajo y vinieron a la escuela a reinventarse aprendiendo a manejar redes, crear páginas web. También hay mujeres que estaban en casa, quizás sin saber qué hacer y decidieron poner un emprendimiento y buscaron capacitarse en marketing digital para impulsar sus negocios”.

    Los retos de lo digital

    “Existen muchas agencias que lucran del marketing digital. Ahora todo el mundo se autodenomina experto en eso, hay lugares en donde te preparan en un par de semanas, pero yo tengo cuatro años en el mundo de las redes sociales y sé que esto es de formación continua, de actualización todo el tiempo. En Ecuador invertimos mucho en el vestido de 15 años, en el matrimonio, pero no en nuestra formación. El país necesita especialización. No es bueno hacer estrategias aisladas, hay gente que piensa que el marketing digital es Facebook o Instagram, pero no. Las marcas necesitan estrategias completas, de 360 grados, que involucren además de herramientas digitales, los valores de la marca, temas de responsabilidad social corporativa y más áreas”.

    Licenciada en administración de empresas con mención en marketing por la Universidad de las Américas (Udla).Foto: LÍDERES
    Licenciada en administración de empresas con mención en marketing por la Universidad de las Américas (Udla).Foto: LÍDERES
  • Dos hermanas llevan los negocios en al piel

    Redacción Quito

    Son jóvenes. Hermanas. Atractivas. Y no le tienen miedo al emprendimiento. Estos son los pilares para sostener su negocio dedicado a la belleza: Therapiel. Andrea y Adriana Martínez decidieron endeudarse este año para sacar adelante su proyecto.

    USD 35 000 en inversión sirvieron para levantar la idea. Y los resultados positivos han sido inmediatos, USD 7 000 mensuales en facturación.

    Therapiel es un centro de estética que ofrece tratamientos corporales, faciales, renovación de la piel, con máquinas de última tecnología, sin necesidad de llegar a técnicas invasivas, con cirugía o con inyecciones dolorosas. Ellas dicen que eso es lo que les diferencia de decenas de otros centros de estética en el país.

    Paula Chiriboga, una de sus clientes, resalta que lo que le motiva a ir a este centro es la atención personalizada y el seguimiento que hacen a cada una de las personas. «Los beneficios se observan inmediatamente, no son métodos invasivos. Eso me gusta. Y, además, te tratan como una familia».

    Para llegar a este nivel de excelencia, Andrea tuvo que luchar contra todo para hacer lo que más le gustaba. Pese a que ganó un Concurso Nacional de Economía, cuando cursaba sus estudios secundarios en el colegio Martín Cereré, y pese a que era buena estudiante universitaria de Leyes, abandonó todo por cumplir su sueño.

    Empezó a ahorrar parte de los ingresos que recibía por su trabajo a medio tiempo en American Airlines, recibiendo los vuelos en la noche. Con el dinero acumulado viajó a EE.UU. a estudiar estética, en Miami, en una escuela llamada Beauty School of America. «Ahí fue la experiencia más linda del mundo».

    Para costear los gastos en ese país, trabajaba en una tienda de ropa para hacer ejercicios, de lunes a viernes hasta las 23:00, viernes y sábado hasta las 01:00. Andrea, entonces, tenía solo 20 años.

    Al culminar sus estudios regresó al país y enseguida obtuvo trabajo de reemplazo en el concurso Reina de Quito, maquillando. Después entró al Miss Ecuador y allí empezó a hacer contactos para todo lo concerniente a maquillaje, especialmente para publicidad y novias.

    Posteriormente, viajó a Sao Paulo, Brasil, para especializarse. Estudió un año estética avanzada, con todas las nuevas tendencias que han salido al mercado para aprender a usar bien los equipos.

    ¿Por qué se considera de las mejores en el ramo? «Número uno, que me considero una persona que realmente estudió desde pequeña esto, que sé mucho, y que siempre voy a estar atendiendo yo. Aparte que hice la inversión en máquinas buenas, costosas, pero aparte de eso, es que siempre voy a estar yo y mi hermana, mi socia, que estudió lo mismo. Entonces siempre vamos a estar nosotras encargadas del cliente al 100%.».