Etiqueta: cerebro

  • A crear un sitio de trabajo amigable para el cerebro

    Foro Económico Mundial (I)

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    Lo único constante en nuestras vidas, y en cualquier negocio, es la certeza del cambio. Este no está bajo nuestro control. Ningún líder puede prevenir sorpresas, interrupciones, desafíos o sucesos imprevistos.

    Entonces, ¿cómo organiza un líder una oficina construida con el objetivo de maximizar el talento de su fuerza de trabajo? ¿Cómo prepara una compañía a sus empleados de modo que tengan mayores probabilidades de resolver estos desafíos?

    Existen estudios científicos sobre cómo crear un lugar de trabajo amigable para el cerebro: herramientas y estrategias que nos hacen más creativos, productivos, felices y mejores tomadores de decisiones. Y aunque cada vez más empresas están incorporando estos nuevos hallazgos, hay muchas que no. Según Gallup, en todo el mundo solo el 13% de los empleados dicen sentirse comprometidos con su trabajo.

    ¿Cómo se puede influir en la productividad de los empleados?

    Desconexión

    La tecnología ha revolucionado todos los aspectos de la oficina moderna. Pero, a nivel individual, todos nos sentimos cercados. Según un estudio de 2012 del McKinsey Global Institute, el trabajador medio de la economía del conocimiento pasa 28% de su tiempo leyendo y respondiendo correos electrónicos. También hay estudios que muestran que el simple hecho de tener un teléfono en una mesa cuando las personas hablan les impide sentirse conectados, incluso si el teléfono no se utiliza. Para obtener un mayor rendimiento, mayor concentración y mayor colaboración, considere tener reuniones sin pantallas: ni teléfonos ni computadoras. Las personas se sentirán más conectadas, menos distraídas, y colaborarán de manera más eficaz.

    Libertad

    Un estudio de la Universidad de Exeter encontró que permitir que los empleados elijan la cantidad de plantas y fotos que querían en su oficina aumentó la productividad en hasta un 32% en comparación con los empleados a quienes no se les había dado ninguna opción. Y la investigación también ha demostrado que tener una sensación de autonomía aumenta nuestra capacidad de responder al estrés y, en consecuencia, la disminución de la sensación de autonomía nos hace más vulnerables al estrés.

    Vegetación

    A las personas nos encanta la naturaleza y la vegetación, y cuanto más tengamos en la oficina, más felices y productivos somos. De hecho, esta tendencia a responder de manera positiva a la naturaleza y a los entornos naturales se denomina “hipótesis de la biofilia”, denominación acuñada por Edward O. Wilson en su libro de 1984, Biophelia. La investigación lo confirma. Un estudio de 2010 de la Universidad de Cornell encontró que la presencia de plantas de interior tenía un efecto beneficioso en la atención de los trabajadores. Otro estudio, realizado por investigadores de la Universidad de Twente, en los Países Bajos en 2008, encontró que las plantas de interior reducían el estrés.

    Movimiento

    Moverse y caminar, es tan bueno para nuestras mentes como lo es para nuestros cuerpos. Un estudio llevado a cabo por los investigadores de la Universidad de Illinois descubrió que tan solo caminar durante cuarenta minutos tres veces a la semana a paso normal ayuda a mejorar las conexiones cerebrales y las funciones cognitivas. Así que anime a los empleados a caminar y moverse. Una manera de hacerlo es tratar de que los empleados no coman el almuerzo en sus escritorios. Más aún, anímelos a dejar sus teléfonos cuando van a almorzar. Caminar en las reuniones tiene el doble beneficio del movimiento, conexión y colaboración .

    Dar

    Hay trabajos científicos que demuestran que dar hace tanto bien para quien da como para quien recibe. Un estudio de 2013 realizado por UnitedHealth Group encontró que los programas de voluntariado de los empleados aumentaron el compromiso y la productividad; además, más del 75% de los voluntarios dijeron que se sentían más saludables, más del 90%, que estaban de mejor humor y más del 95% que sentían que tenían un propósito más importante en la vida. También se encontró que los empleados habían aumentado sus habilidades de gestión del tiempo y su capacidad para conectarse con sus compañeros.

    Existen herramientas y estrategias que permiten crear un lugar de trabajo amigable para el cerebro. Foto: Ingimage
    Existen herramientas y estrategias que permiten crear un lugar de trabajo amigable para el cerebro. Foto: Ingimage
  • Despertarse rápido, la fórmula para ser más productivo

    Foro Económico Mundial (I)

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    ¿Tiene esa costumbre de retrasar el despertador hasta el infinito? Pues es una trampa mortal para la productividad y para tu salud. Cada vez que golpeas a ese pequeño subalterno del demonio procrastinador, cada vez que piensas en esa dulce batalla que ganas al quedarte un puñado de minutos más en la cama, estás haciendo más y más difícil el proceso de despertarte, y hundes a tu cerebro en el inicio del siguiente ciclo de sueño, que es exactamente el peor momento para despertarte.

    Cuanto más tiempo permanezcamos en ese punto, mayor será la sensación de cansancio y de haber tenido unas malas horas de sueño, aunque no haya sido así.

    Según la Universidad de Cambridge junto al organismo de investigación Rand Europe, tras realizar un estudio con más de 21 000 trabajadores británicos se concluyó que la correlación entre las horas de sueño que alcanzamos por la noche y nuestro rendimiento en el trabajo es mayor de lo que se podría pensar.

    Los empleados que duermen menos de seis horas cada noche son significativamente menos productivos que aquellos que consiguen de siete a ocho horas de descanso.

    Pero el estudio descubrió que hay actividades o factores que, aunque en un principio asociábamos a la baja productividad, en realidad no influyen en absoluto en el rendimiento laboral. Ni estar gordo, ni fumar o beber alcohol va a interponerse en tu camino para convertirte en empleado del mes.

    Cuando dormimos poco nos volvemos propensos a tener problemas metabólicos y endocrinos, inmunológicos y de muchos otros tipos. Exponiéndonos a la obesidad, a trastornos del de sistema inmune y a una mayor propensión a ciertos tipos de cáncer.

    Así que recuerda: para dormir bien hay que consagrarse al 10-3-2-1-0 (10 horas antes de ir a la cama: nada de cafeína; 3 horas antes de ir a la cama: nada de comida o alcohol; 2 horas antes de ir a la cama: nada de trabajo; 1 horas antes de ir a la cama: nada de pantallas; 0: el número de veces que tienes que aplazar la alarma de tu despertador). Descansar al menos ocho horas, espabilar rápido por las mañanas y pedirle a tu jefe que te deje entrar a trabajar más tarde. Es la ciencia la que habla.

    Imagen referencial. Los empleados que duermen menos de seis horas cada noche rinden menos que los que duermen más. Foto: Pixabay
    Imagen referencial. Los empleados que duermen menos de seis horas cada noche rinden menos que los que duermen más. Foto: Pixabay
  • Chips en el cerebro permitirán curar enfermedades y escribir con la mente

    Agencia EFE

    La estimulación cerebral con electrodos aplicada sin dolor será una práctica habitual en diez años para mejorar el rendimiento intelectual y la implantación de chips en el cerebro permitirá escribir con la mente a personas con discapacidad y curar algunas enfermedades neurológicas.

    Estos son algunos de los avances en los que están trabajando los neurocientíficos, que este miércoles 29 de abril expusieron estas novedades en la presentación de la jornada sobre estimulación cerebral B·Debate que se celebra en la ciudad española de Barcelona hasta mañana.

    Según los expertos, la estimulación cerebral sin dolor a través de electrodos podrá mejorar el rendimiento mental de las personas sanas, como lo hacen el café u otras bebidas energéticas, e incluso podrán estimularse con patrones personalizados.

    Entre los avances próximos para pacientes con parálisis figuran «poder escribir mensajes de texto y controlar otros dispositivos domésticos con el implante de un chip en el cerebro», explicó la neurocientífica Mavi Sánchez Vives.

    Además, «podrán registrar la actividad cerebral, analizarla en línea y escribir pensamientos y navegar ‘online». De hecho, según Sánchez, la neuroestimulación eléctrica de zonas determinadas del cerebro ya ha demostrado beneficios para tratar los síntomas de una depresión, bloquear los ataques de una epilepsia, inducir la recuperación de un ictus o controlar los temblores del Parkinson.

    Durante los próximos 10 años también se avanzará en las prótesis sensoriales y en las visuales, que generarán estímulos en la corteza cerebral y podrán proporcionar información visual a invidentes mediante una interfaz cerebro-ordenador.

    La científica se mostró a favor del uso de aplicaciones móviles para controlar alguna actividad cerebral como el sueño, pero advirtió de que «se ha de ir con cuidado con las estimulaciones en el cerebro, ya que no se conocen los efectos a medio y largo plazo».

    En su opinión, la vida de los pacientes con parálisis o con enfermedades que no les permiten comunicarse con el exterior «podría mejorar mucho durante estos años». Asimismo, distinguió entre dos tipos de tecnologías, la no invasiva, que podría ser utilizada para usos lúdicos, ya que no implica afectación al cerebro, y la invasiva, que necesita de neurocirugía y «sólo está justificada en el caso de pacientes». 

  • Las personas más inteligentes del planeta, según Super Scholar

    Redacción Revistalideres.ec 

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    La inteligencia de los seres humanos se mide por el grado de coeficiente intelectual (IQ) que poseen. Y la organización Super Scholar, especializada en asesoramiento estudiantil, ha creado una lista con los cerebros vivos que poseen el más alto coeficiente intelectual.

    Según una publicación del portal El Mundo de España, en esta lista aleatoria se incluyen a personajes famosos que destacan en diferentes campos profesionales. Entre ellos se encuentran científicos, empresarios, directores y hasta guionistas.

    A continuación la lista de personalidades que figuran en el top de Super Scholar:

    1. Stephen Hawking. Destacado científico de 70 años que ha ganado más de 14 premios y ha publicado 7 libros. Tiene un IQ de 160.

    2. Kim Ung-Yong. Fue un niño prodigio. A los seis meses comenzó a hablar y a los tres años dominaba cuatro idiomas. Es un físico de 50 años de alto nivel. Además, posee el récord Guiness por alcanzar un coeficiente intelectual de 210.

    3. Paul Allen. Co-fundador de Microsoft es además uno de los 50 hombres más ricos del planeta. Alcanza un IQ de 170.

    4. Rick Rosner. Es un caso muy particular. Pese a que posee un coeficiente intelectual de 192 se ha dedicado a oficios que no tienen nada que ver con el desarrollo de la ciencia. Rosner es guionista para un programa de televisión.

    5. Garry Kasparov. Es el ajedrecista que más tiempo ha estado en el número 1 del ránking de mejores del mundo en este deporte. Tiene un IQ de 190. Además fue candidato a la presidencia de Rusia.

    El top elaborado por Super Scholar también recoge los nombres de otros grandes talentos como el del actor James Wood (180 IQ); el matemático Andrew Wiles (170 IQ) y la niña prodigio del ajedrez Judit Polgar (170 IQ). Hay nombres que superan el IQ de Kim Ung-Yong como el físico Cristopher Hirata (225 IQ) o el investigador Terrence Tao (230 IQ).

    EL DATO:

    Según los investigadores de Super Scholar, en la actualidad el 50% de los habitantes de la Tierra tienen puntuaciones entre 90 y 110 de IQ. Este rango es considerado como el más común (normal) entre los seres humanos. Un 2,5% tiene valores inferiores a 70, que se denomina «deficiencia mental». Y sólo un 0,5 por ciento de las personas están cerca de ser genios, con más de 140 de IQ.

    El científico Stephen Hawking posee un coeficiente intelectual de 160. Foto: AFP.
    El científico Stephen Hawking posee un coeficiente intelectual de 160. Foto: AFP.