Etiqueta: competencias

  • Cinco habilidades laborales que serán necesarias tras la pandemia

    Carolina Enriquez

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    Tras el covid-19 será necesario que los trabajadores tengan nuevas competencias. Así lo afirma la red social LinkedIn en un artículo publicado esta semana, tercera de julio del 2020.

    De cara al futuro, asegura, las claves de la vida deben girar en torno a cuatro aspectos: equilibrio entre trabajo y hogar, seguridad, flexibilidad de horarios y buen estado de salud.

    En el marco del empleo hay cinco habilidades básicas poscovid-19 que se deben impulsar.

    1. La principal competencia que deberán tener las personas estará orientada a un buen manejo del tema digital. Es fundamental el aprendizaje continuo, particularmente sobre el uso de herramientas tecnológicas, plataformas de venta, conexiones remotas, redes sociales, entre otras.

    2. Es importante desarrollar habilidades blandas como la disciplina, la orientación a resultados y una comunicación eficaz. La primera permitirá organizar el tiempo que tiene para realizar las actividades laborales y manejar el hogar (aunque sea soltero); la segunda, cumplir tareas asignadas y no un horario. Y la tercera, mantener contacto con su equipo.

    3. Otra cualidad que deben tener los nuevos trabajadores es ser generalistas; es decir, tener las habilidades para realizar diferentes labores sin problemas. La educación a distancia ofrece posibilidades para aprender más de diferentes temáticas, que generen la posibilidad de ser contratados para diferentes áreas de labor, detalla la Universidad Católica Santa María La Antigua, de Paraguay.

    4. Es fundamental conseguir conocimientos en las áreas de empleo que más demanda tienen hoy: salud, agricultura, cuidado de personas y logística. No necesariamente se refiere a formación universitaria, sino a conocimientos para apoyar a los profesionales o empresas en esos ramos, indica el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

    5. El Banco Interamericano de Desarrollo, además, habla de las necesidades de que los trabajadores tengan habilidades socioemocionales. Entre estas se encuentran la solidaridad, la compasión, la empatía, resilencia, etc.

    Los trabajadores deben tener nuevas competencias tras el covid-19. Foto: Pixabay
    Los trabajadores deben tener nuevas competencias tras el covid-19. Foto: Pixabay
  • Seis competencias de la ‘nueva normalidad’

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    Adriana Martínez Guerrero, directora general de ID Hunt, habla de seis competecias claves para la nueva normalidad.

    1. Crear una visión. Son los ejecutivos que tienen la capacidad de imaginar nuevas ideas y estrategias. Es decir, son innovadores y piensan en grande. Asimismo, redefinen los limites de lo que es posible, tanto en los equipos de trabajo como en la organización.

    2. Crear estrategias. Se trata de transformar las metas e ideas en planes de acción que no sólo sean innovadores, sino también factibles. La innovación tiene que ver con sueños reales que se pueden llevar a cabo. Para lograrlo, los ejecutivos tienen que saber con qué recursos cuenta la empresa.

    3. Garantizar resultados. Los ejecutivos con el sello de garantía en los resultados son capaces de implementar prioridades organizacionales, se percatan de qué es lo más importante que se debe hacer en la organización y están al pendiente de que se ejecute de manera efectiva. Las personas con esta competencia, marcan muy bien el ritmo de trabajo, establecen las expectativas de calidad en los equipos y son resilientes.

    4. Inspirar. Esta habilidad está relacionada con fomentar la claridad y la unidad en torno a las ideas. Los ejecutivos con esta competencia comunican con mucho entusiasmo el nuevo proyecto o la nueva línea de negocio. Su seguridad se contagia y convencen a toda la organización de los méritos de la nueva aventura.

    5. Ser accesible. Los ejecutivos accesibles son los que empoderan a los miembros del equipo, permiten hablar, proponer y dar una retroalimentación. Tienen muy buena comunicación con el personal y su retroalimentación no se convierte en un regaño.

    6. Ser mentor. Esta competencia tiene que ver con la guía que proporcionan los ejecutivos al resto de los colaboradores para desarrollarlos y formarlos.

    Inspirar y ser mentores son dos de las habilidades que más se valorarán en la nueva normalidad del mundo laboral. Freepik.es
    Inspirar y ser mentores son dos de las habilidades que más se valorarán en la nueva normalidad del mundo laboral. Freepik.es
  • Las competencias, clave para alcanzar el ascenso

    Redacción Líderes

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    Convertirse en gerente o lograr una dirección es la meta para muchos jóvenes que están ansiosos por crecer en sus posiciones, subir de nivel, ganar más o tener gente a su cargo… y mientras más rápido, ¡mejor!

    Pero siempre se necesita tener mucho cuidado. Hay algo que muchas personas olvidan: lo que generalmente se requiere para el nuevo nivel, no son solo los buenos resultados o el buen desempeño en el puesto actual sino las competencias que se deben tener para dar el siguiente paso.

    Un ejemplo: Un individuo que realizó un excelente trabajo en el año, a quien felicitaron y reconocieron públicamente, sabe que lo hizo muy bien y que es muy bueno en lo que hace, pero cree que por esas razones se ha ganado el derecho a una promoción.

    La realidad es que en muchos casos eso no es suficiente. No basta con hacer bien las cosas en el nivel actual, por muy bien elaboradas que estén y por muy talentosa que sea la persona. Hace falta que comience a desarrollar las competencias del siguiente escalafón. ¿Qué significa?

    Imagine que es un ciclista experimentado y que pedalea con maestría. Eso no quiere decir que solo por eso podría manejar una moto, pues aún no tiene las competencias (saber cambiar las velocidades, frenar, etc.) ni las calificaciones (una licencia de conducir o la motocicleta).

    Muchas personas obtienen una promoción porque han sido muy exitosas en lo que han hecho hasta ahora: quizá fueron técnicamente buenos o demostraron un gran compromiso, tal vez hicieron un trabajo en excelencia; pero eso no significa que ya estén listos para el siguiente nivel y al ser promovidos sentirán mucha frustración cuando se enfrenten a las nuevas responsabilidades sin estar completamente preparados.

    Hay un autor que dice que lo que te trajo hasta aquí no es lo que te llevará hasta allá. Muchas carreras se frustran por no entender este punto. Los expertos recomiendan que siga este proceso de seis sencillos pasos:

    Saber elegir

    Escoja dos o tres competencias del siguiente nivel (aquel hacia el que busques crecer) y empiece a mostrarlas, a comportarse de esa manera, a demostrar que su enfoque está en eso.

    Un role model

    El siguiente paso es elegir un ‘role model’, es decir, un ejemplo al cual seguir; de preferencia, alguien a quien admire, alguien que ya lo haya logrado y que sea afín a su personalidad.

    El enfoque

    Elija de esa persona las competencias que crea que le serán más fáciles de desarrollar o que le gusten más; es decir, párese sobre sus fortalezas y crezca desde ahí. Va a llegar más alto que si se enfoca en sus debilidades y lucha para corregirlas.

    Actúe

    Comience a actuar como si ya tuviera esas habilidades, trate de imitar el comportamiento de ese individuo que está modelando. ­Literalmente actúe ese papel como si quisiera ganar un Oscar. Trate de responder como esa ­persona responde, de comportarse como se comporta, de pensar como piensa, hasta que logre exhibir esas capacidades de for­ma natural.

    No a la guerra

    Nunca y por ningún motivo trate de pasar por encima de alguien, de quitarle a nadie o competir con alguien por una posición. Si entra en una guerra, todos van a perder. La única lucha es contra sí mismo, contra su forma pasada de hacer las cosas. Ahora tiene que comportarse de una nueva manera y toda su atención, así como su concentración, deben estar en eso.

    Prepárese

    Prepárese para tener las calificaciones y las habilidades que se requieren. Estudie, lea, certifíquese, entreviste a los que ya lograron, prepárese y aproveche todas las oportunidades que se le presenten. Espero que estas ­recomendaciones le den una idea de un camino que muchas veces resulta efectivo para con­seguir una promoción y que le sean muy útiles.

    Recuerde que para ser un líder exitoso debe desarrollar la persuasión y la capacidad de influir para bien en su equipo de trabajo. También comunique sus ideas de forma clara para que sus colaboradores se sientan involucrados. También debe reconoce el esfuerzo del equipo.

    Muchas personas obtienen una promoción porque han sido muy exitosas en lo que han hecho, pero eso no significa que estén listos para otro nivel. Foto: Ingimage
    Muchas personas obtienen una promoción porque han sido muy exitosas en lo que han hecho, pero eso no significa que estén listos para otro nivel. Foto: Ingimage
  • Las competencias ideales del ejecutivo

    Redacción Quito

    Carla Fuentes es alumna de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador. Ella considera que el estudio, el esfuerzo y el talento son las características que la convertirán en una buena profesional. Pero solamente los conocimientos teóricos no son el reflejo de todas sus competencias; es decir, su inteligencia emocional y sus actitudes ante otras personas.

    Aquellas incluyen los valores y principios, creatividad y solución de problemas; así lo considera Daniela Andretta, gerenta general de la firma consultora Korn Ferry. Añade a esta lista otros aspectos relacionados con la proactividad, la comunicación efectiva, la experiencia, el análisis situacional y el trabajo en equipo.

    Korn Ferry realizó un análisis de perfiles profesionales en el 2011. En este participaron 1 569 evaluados a escala mundial. Se determinó que entre el 6 y el 9% de los niveles no gerenciales (administradores, oficinistas, entre otros), no cumplen todas las competencias esperadas. Además, el estudio indica que solo el 12% de los niveles directivos encuestados alcanzó la totalidad de las competencias.

    Andretta menciona que en América Latina se empezó a contemplar una relación directa entre los perfiles de capacidades laborales versus los resultados. “Las empresas han tenido mayor éxito cuando se enfocan en desarrollar más las competencias que otros aspectos”.

    Borys Aguirre, principal de la consultora de desarrollo empresarial Desempre, manifiesta que los valores y principios son cualidades que brindan confiabilidad, puesto que mejoran las relaciones interpersonales en el trabajo.

    La capacidad de un ejecutivo para solucionar conflictos, según Aguirre, también se considera una herramienta útil, puesto que es la capacidad de brindar varias soluciones a un mismo inconveniente.

    Ney Barrionuevo, gerente de la consultora de negocios Inclusys, considera que la comunicación efectiva en los ejecutivos les permite “mejorar la relación con sus compañeros, trabajar eficientemente en equipo, relacionarse mejor con sus clientes y crear un ambiente positivo de trabajo”. A su vez, añade que la comunicación impulsa a los ejecutivos a alcanzar un pleno conocimiento de la información que les compete y realizar sus obligaciones.

    La proactividad, es decir la capacidad de proponer ideas, es un elemento clave para Iván García, gerente de Farmaenlace. “Prefiero -en mi nómina de colaboradores- a alguien que proponga ideas, a diferencia de que solamente haga lo que se le pide. Esto no genera desarrollo”.

    Con respecto a la experiencia, los consultados coinciden en que es un valor indispensable para que un ejecutivo se considere eficiente. “No se debe contratar un magíster que no sabe absolutamente nada sobre su campo laboral; debe tener conocimientos teóricos como prácticos”, explica Barrionuevo.

    El trabajo en equipo es otro de los aspectos que los ejecutivos deben tener en cuenta; la inteligencia no es reflejo de las competencias. “Puede ser la persona con el coeficiente intelectual más alto, pero si no sabe trabajar en equipo, no generará resultados” indica García.

    El análisis situacional, en cambio, significa tomar provecho de la situación y obtener resultados positivos. Las experiencias negativas se encuentran dentro de este campo y el respectivo análisis ayudará a crear nuevas propuestas.

    Los gerentes empresariales, agrega Barrionuevo, buscan conferencias y seminarios para incentivar estas características.

    Fuentes indicó que en su curriculum, además de sus conocimientos, presentará sus competencias personales ya que estas la destacarán del resto de profesionales.

    Otros valores

    • La puntualidad. Es una muestra del carácter que debe aplicarse, para que un ejecutivo sea exitoso. Esta cualidad es un reflejo de su responsabilidad con el cliente.
    • La creatividad. Los títulos no siempre están ligados a la eficiencia laboral. Los profesionales deben ejercitar su creatividad para generar propuestas innovadoras.
    • El enfoque al cliente. La capacidad de responder con velocidad los mensajes o correos electrónicos y la manera en la que se contesta el teléfono son puntos que generan respuestas positivas.

  • Los robots protagonizaron una competencia de destrezas

    Redacción Quito

    La competencia de robótica Umebot celebró su séptima edición el pasado 6 de septiembre en las canchas de la Escuela Politécnica Nacional (EPN), en Quito. Los organizadores del evento tecnológico fueron la Unidad de Mantenimiento Electrónico de la Politécnica Nacional (UME) y el club de robótica del establecimiento.

    Nelson Parra, presidente del club de robótica, explica que el concurso consiste en una competencia de prototipos robóticos que se enfrentan en categorías.

    En esta edición hubo tres categorías en las que participaron 60 estudiantes de la EPN, la Universidad Salesiana de Quito y Guayaquil, la Escuela Politécnica del Ejercito, colegios…

    Las categorías fueron: estilo libre, minisumo y megasumo. La primera consiste en un seguidor de línea, es decir, un robot que sea capaz de seguir comandos de manera automática siguiendo una línea trazada en el piso esquivando obstáculos.

    El ganador de esta categoría fue Paúl Mosquera, con 17 años, estudiante del Colegio Spellman de Quito. “Cualquier persona puede concursar si tiene el afán de hacerlo”, cuenta Parra.

    Las categorías megasumo y minisumo consisten en peleas de robots. Estos se colocan en una especie de tatami (círculo de lucha) en el que los dispositivos se empujan mutuamente hasta sacar a uno del círculo. Las unidades en esta categoría son autónomos, es decir, se conducen solos sin necesidad de control.

    Las categorías megasumo y minisumo se diferencian en el peso. Los robots de megasumo pesan 3 kilogramos y miden 20 x 20 cm. Los minisumo pesan 500 gramos y miden 10 x 10 cm.

    Dentro de estas categorías se destacaron Víctor Ramírez, primer lugar en la categoría megasumo, y Nelson Parra, segundo lugar en la misma categoría.

    El premio por el primer lugar fue de USD 200 y para el segundo lugar USD 50; el costo de fabricar uno de los robots puede llegar hasta USD 2 000.

    Diego Aro, ganador del segundo lugar en la categoría minisumo, indica que el costo de su unidad fue de USD 150 y la patrocinó el mismo. El proceso de elaboración de la unidad fue tres meses. Él considera que lo importante no es el premio sino la posibilidad de utilizar sus conocimientos para construir robots. “La tecnología en nuestro país no está tan desarrollada así que nosotros debemos ser quien la mejore y la innove”.

    Las redes sociales fueron las plataformas que utilizadas para difundir la competencia. En Facebook tuvieron 400 usuarios.

    Datos adicionales

    Las ediciones anteriores. El concurso de robótica viene desarrollándose hace 8 años. El año pasado no pudo realizarse por falta de apoyo.

    La elaboración. El proceso de elaboración de un robot puede durar un mes y  se divide entre la fabricación y la programación.

  • Aprender una segunda lengua brinda mejores competencias

    Redacción Quito, redaccion@revistalideres.ec

    El dominio de una lengua extranjera es un requisito indispensable cuando se piensa en ejercer la profesión o cursar estudios de cuarto nivel. Esa es la opinión de Lucía Lemos, decana de la Facultad de Comunicación, Lingüística y Literatura de la Universidad Católica, con sede en Quito.

    Allí funciona la Escuela de Lenguas, donde se enseña inglés, francés, alemán, italiano, chino-mandarín, ruso, japonés, quichua, latín-griego y portugués. Las posibilidades de obtener una beca manejando adecuadamente una de estas lenguas también son amplias.

    Este año, luego del proceso de selección y evaluación de la primera fase de la Convocatoria Abierta de la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, 821 estudiantes obtuvieron una beca para estudiar un posgrado en una universidad del extranjero. Para esta clasificación se tomaron en cuenta los puntajes superiores a 75/100 en las pruebas de conocimientos.

    Artículo de:

    Logo posgrados

    Estas calificaciones no solo se basan en los aprendizajes de materias especializadas sino también en el manejo de una segunda lengua que pueda aplicarse en la universidad escogida. «Muchas de las maestrías, doctorados, clases o trabajos se reciben en el idioma del país al que el estudiante viaja. Sobre todo el inglés como lengua universal», dice Lemos.

    Carlos Monge, director del centro de enseñanza Wall Street English, sostiene que no solo se debe estudiar el inglés para superar las pruebas de ingreso a las universidades de posgrado. Para él, en un mundo globalizado es trascendental que se conozcan otros idiomas y que estos sean aprendidos de manera nativa.

    El profesional que cursó tercer nivel y que aspira a un cuarto, tiene que darse tiempo para aprender desde el inicio una nueva lengua. En este aspecto, las instituciones de enseñanza de idiomas de otros países como la Alianza Francesa o la Asociación Humboldt sugieren que se realicen los cursos en función del tiempo de cada estudiante. Para Alexandra Viollet, coordinadora de proyectos pedagógicos de la Alianza Francesa hay que tener calma por aprender. «Los cursos pueden llegar a dos años».

    Los aprendizajes en general pueden durar entre un año y dos años. Pero los especialistas consideran que para aprender un segundo idioma, comprenderlo e incluso estudiar a través de este se requiere un tiempo extra de adaptación y un acercamiento más profundo para comprenderlo como si se hubiera nacido en el país donde se habla esa lengua.

    Las ventajas La comunicación.  Aprender un segundo idioma puede ayudar al ejecutivo a reforzar la comunicación que entable en su vida profesional, de acuerdo con su desempeño.

    Las oportunidades. Conocer dos o más idiomas hace que el perfil profesional sea más valorado, dice Lucía Lemos. Las competencias de la persona aumentan.

  • Las marcas entran en competencia

    Distancias de carreras de atletismo como las 5K, 10K, 15K y otras se han popularizado en el país desde el 2011. Quienes han impulsado en gran parte esta cultura ‘running’ son las grandes firmas deportivas, cadenas de comidas, energizantes e incluso entes públicos. Marcas como McDonald’s, Gatorade, Profit, Powerade, Nike (cuya carrera será el 8 de junio próximo), Reebok y Adidas auspician sus propias carreras.

    El fin es posicionar la marca. Por ejemplo, María Fernanda Béjar, gerenta de marketing de McDonald’s Ecuador, dice que aunque la cadena no tiene relación directa con el deporte, realiza desde el 2010 la competencia McDonald’s 5K en Guayaquil. Otras firmas como De Prati (con la marca City Sport), Bankard, Johnson&Johnson, Movistar, Servientrega, Revista Hogar y Powerade auspiciaron la carrera. Para Cristhian Gruember, especialista en marketing, la estrategia sirve como recordación de la marca.