Los costos fijos son aquellas erogaciones de dinero que se deben hacer independientemente de que, las personas o las empresas, generen o no ingresos producto del trabajo ejecutado o de las ventas realizadas.
De ahí, cuando se presentan situaciones de crisis imprevistas, como el caso ahora de la cuarentena producto de la pandemia (covid-19), aparece como síntoma negativo de la salud financiera de las familias y las empresas -sobre todo de los negocios más pequeños con menor músculo financiero acumulado de respaldo-, un serio dolor de cabeza al momento de encontrar respuestas.
Luego del frenazo producido en sus actividades laborales y empresariales tienen la pregunta: ¿cómo cubrir “obligaciones fijas” relacionadas, principalmente, al pago de salarios, arriendos, pago de proveedores de bienes y/o servicios, cumplimiento de obligaciones de créditos contraídos, y los pagos de servicios básicos y obligaciones con el Estado, como impuestos y seguridad social?
Ante este escenario incierto, como es obvio, lo primero que se deberá hacer es encontrar formas de financiamiento que ayuden a fortalecer la liquidez familiar o empresarial y, así, poder mantenerse operativos -cubriendo esas erogaciones poco flexibles de reducción- hasta cuando, en los meses siguientes, la situación lentamente vaya mejorando.
Sobre este punto, se debe resaltar que en las circunstancias actuales han ido apareciendo alternativas que, dependiendo de cada caso particular, pueden ser aprovechadas; entre las más relevantes están: las instituciones financieras han dado la posibilidad de no cobrar y diferir para tiempo posterior al menos dos meses de cuotas de créditos pendientes, también, han abierto la opción de renegociar créditos sobre la base del alargamiento de plazos de pago futuros; de parte del Estado se están dando facilidades para el pago de servicios básicos pendientes y de las obligaciones tributarias y de la seguridad social; en cuanto al pago de arriendos, previo acuerdo de las partes, se abren posibilidades de facilidades de pospago en meses futuros; todo ello, con el propósito de cuidar -al máximo- que la cadena de no pagos no se rompa.
El otro punto a considerar producto de la crisis que se está viviendo es identificar, como “aprendizaje para la acción futura”, a los denominados “reductores de costos fijos” que se pueden activar -yendo a la economía familiar– por tres vías: eliminación o reducción de aquellos considerados como innecesarios -por ejemplo, cambio de contrato de un plan de telefonía móvil, TV pagada y/o internet que, actualmente, esté sobredimensionado a reales necesidades familiares-; conversión de costos fijos en variables -ejemplo: sustitución de la movilidad privada por el uso de transporte publico seguro-; y/o la disminución de cargas financieras fijas al momento de compartirlas de forma colectiva -un ejemplo puede ser: pago asociativo de deudas contraídas gracias al uso compartido de inmuebles o máquinas y equipos ya adquiridos-.
Con todas las reducciones que se hagan, al final, se estarán fortaleciendo los antídotos financieros que, en crisis futuras, nuevamente requerirán ser activados como medios para afrontar los fuertes impactos que, generalmente, tiende a sufrir el presupuesto de las familias.
Lo primero será encontrar financiamiento que fortalezcan la liquidez familiar o empresarial. Foto: Pixabay
Debemos ser precavidos al tomar decisiones. Cada decisión es una inversión, con sus potenciales riesgos y beneficios.
La mayoría se encuentra en una carrera desenfrenada por bajar costos y se entiende: El flujo es rey. Sin embargo, hay otra cara de la moneda que no debemos descuidar y que muchas veces es la única salida: Una cultura innovadora y ágil.
Hay que buscar que nuestras empresas y emprendimientos sobrevivan y florezcan a la vez. En 10 años voltearemos hacia atrás y hablaremos de las grandes ideas, innovaciones, y adaptaciones que surgieron a partir de esta crisis. En su mayoría, y esto se ha confirmado con diversos análisis durante diferentes crisis, las empresas que solo buscan ahorrar y bajar costos, salen de las crisis con posiciones desfavorecidas.
Nos toca buscar un balance muy delicado, entre cuidar costos, no ahorcarnos en el camino y en definitiva buscar cuidar e incentivar innovaciones, adaptaciones y agilidad. No es el momento para jugar a la segura. Jugar a la segura y de manera conservadora puede ser muy riesgoso en estos momentos.
Un cambio en la forma de pago del impuesto a la renta es clave dentro del Régimen Impositivo para Microempresas, que consta en el proyecto de Ley de Crecimiento Económico que ya se trata en la Asamblea.
Se consideran microempresas a aquellas cuyas ventas anuales son menores o iguales a USD 100 000 y que tienen entre uno y nueve trabajadores. Según el Directorio de Empresas del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) de hace dos años, en Ecuador, hasta el 2017, el 90,78% de las compañías del país eran microempresas.
Actualmente, estas compañías pagan el impuesto a la renta con una tarifa del 22% sobre la utilidad. Dentro del proyecto de Ley se establece que el monto se cancelará sobre el 2% de los ingresos brutos del ejercicio económico.
“En ese caso no le importa al Fisco si la empresa tuvo o no pérdidas en el año. Simplemente evaluará el volumen de ventas de esta durante tal periodo. Es importante considerarlo”, indica el analista tributario, Francisco Jiménez.
El también jurista considera que debe existir una mejor redacción de la norma, para que los dueños de los negocios conozcan si se benefician o no. Por ahora, la propuesta establece que podrán acogerse las microempresas, incluidos los emprendedores que cumplan con dicha condición.
El nuevo régimen comprende los pagos al impuesto a la renta (IR), al valor agregado (IVA) y a los consumos especiales (ICE).
Para David López, jefe técnico de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ), este régimen simplificará trámites, reducirá tiempo para las empresas, etc.
Micros como Twins, que comercializa carnes a la parrilla, señalan que la Ley solo será beneficiosa si reduce el monto que se debe pagar por tributos. Los dueños del negocio destacan otros aspectos dentro del proyecto, entre los que se encuentra el hecho de que las microempresas ya no estarán obligadas a llevar contabilidad.
Una posición similar es la de Sonia Balseca, dueña del negocio de producción de ambientales y aromatizantes AromHouse. “Nosotros no estamos en la capacidad de pagar a un contador. Nos ha tocado hacerlo para mantenernos dentro de la Ley”, detalla.
El proyecto solicita, sin embargo, que las micros lleven un libro de ingresos y gastos para poder sustentar sus declaraciones. Además, establece que las microempresas dejarán de ser un agente de retención del IVA (excepto si se importan servicios); la declaración y pago de dicho tributo será semestral (hoy mensual).
Las inquietudes Francisco Jiménez considera beneficiosas estas propuestas que, en el momento, no existen. Sin embargo, considera que hay otros aspectos que deben ser analizados previa la aprobación de la normativa.
“¿Qué pasa cuando una de estas micros crece y pasa a ser una empresa en el régimen general? Tendrá que iniciar su vida contable y, ese momento, organizar todas sus operaciones desde el inicio. Esto puede generar problemas o costos posteriores para ese empresario”, detalla Jiménez.
Marisol Andrade, directora del Servicio de Rentas Internas (SRI), explica que como la norma establece que las micros deben llevar un libro de ingresos y gastos no será mayor el inconveniente cuando pasen al régimen general y deban tener contabilidad formal.
Algunos microempresarios, por otro lado, se preguntan si al haberse acogido al Régimen Impositivo Simplificado Ecuatoriano (RISE) es posible beneficiarse del nuevo esquema.
Sobre ello, Andrade explica que dentro del RISE están aquellas personas naturales con ingresos de hasta USD 70 000 al año; pagan una cuota fija mensual que reemplaza la declaración de IR e IVA.
A estos contribuyentes no les convendría. Carlos Licto, experto tributario, indica, además, que el nuevo esquema, a diferencia de lo que sucede con el RISE, se aplica para sociedades.
El analista detalla que entre los excluidos para acogerse al nuevo régimen están quienes se dedican a prestación de servicios profesionales, ocupación liberal, relación de dependencia, así como aquellos que perciben exclusivamente rentas de capital. También quedan fuera las que reciben ingresos por contratos de construcción, urbanización, lotización y otros. Exportadores y emprendedores destacan beneficios tributarios
Redacción Quito (I) redaccion@revistalideres.ec El sector exportador y el ecosistema emprendedor miran con buenos ojos, pero también con cierta inquietud el proyecto de Ley de Crecimiento Económico que se encuentra en la Asamblea.
Voceros de ambos segmentos coinciden en destacar los beneficios tributarios que plantea la normativa. Xavier Rosero, gerente Técnico de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), señala que la simplificación del régimen tributario para empresas con ingresos anuales de hasta USD 300 000 es positivo porque se reduce la carga operativa. “Con anterioridad ya habíamos dicho que las medianas y pequeñas empresas exportadoras no podían avanzar porque destinaban cerca de 200 horas al año al cumplimiento de temas tributarios”.
Para el vocero de los exportadores ese tiempo representa un costo muy alto y era un factor que podía generar la pérdida de clientes en el exterior. “Por eso es positivo que se facilite el proceso”.
Otro punto favorable, según Rosero, es la propuesta de la devolución de impuestos simplificada y unificada para los exportadores. El vocero de Fedexpor recuerda que el ‘draw back’ no tuvo tanto impacto por falta de recursos y la idea quedó trunca. Ahora, añade, con la devolución simplificada la aspiración es que se institucionalice esta modalidad “para no estar sujetos a la volatilidad de recursos. Esto permitirá que el exportador pueda planificar su trabajo con antelación”.
Entre los emprendedores también existe una sensación de satisfacción ante lo que propone la nueva ley. Andrés Zurita, director de la Alianza para el Emprendimiento y la Innovación (AEI) habla de beneficios directos. “Se tocan temas importantes como el buscar dar el mismo trato a las donaciones o a los aportes que reciben los emprendedores, que el trato que se da a otros gastos como publicidad”.
El representante de la AEI también considera importante que se simplifique el régimen tributario porque se brinda la facilidad para reportar los gastos que tienen los emprendedores. Según Zurita esto alienta a la formalización de los emprendimientos.
La reducción del impuesto a la salida de divisas (ISD) al 2,5% es otro punto que Zurita califica como favorable. “Ayuda bastante porque siempre hay que importar algo para que los emprendimientos avancen y crezcan”.
La norma también habla de la exención del impuesto a la renta (IR) a los intereses que reciban entidades financieras por préstamos otorgados a emprendedores. “Esto es una maravilla -dice Zurita- porque incentiva al banco para focalizar el crédito y eso es bueno. Lo que realmente necesitamos es que los bancos inviertan y crean en el emprendedor”.
En la Corporación de Estudios e Investigación de la Pequeña y Mediana Empresa también se analiza el documento. Esta entidad mira con buenos ojos la eliminación del anticipo del impuesto a al renta y resalta la eliminación de aranceles a la importación de equipamiento tecnológico, dado el bajo índice de desarrollo tecnológico e innovación del país.
Carlos Romero, vocero de la Corporación, cree que también es importante el apoyo al sector agrícola, por el alto potencial de este sector. “Allí destaca el crédito agrícola preferencial y la disminución de impuestos al sector bananero. Esto es muy importante ya que las pequeñas y medianas empresas tienen alta presencia en el sector agrícola”.
Preocupaciones En el análisis del proyecto de Ley de Crecimiento Económico también existen preocupaciones. Según Xavier Rosero, gerente Técnico de Fedexpor, en las microempresas existe inquietud por el impuesto progresivo que grava ingresos operativos. “Hemos encontrado que esto puede afectar a unas 1 600 empresas exportadoras, de un universo que oscila entre 2 500 y 3 000 empresas. Esa carga es por tres años y eso inquieta”.
Este experto explica que para las exportadoras es un costo que tendrán que asumirlo para no pasarlo al consumidor y no perder competitividad en los mercados a los que llegan. “Eso complica el volumen de ventas e impacta a grandes empresas y a las Pymes”.
Otra inquietud es la eliminación del crédito tributario para importar materia prima y bienes de capital. Según Rosero, eso sería una recarga que cae en la estructura de costos de las exportadoras.
La Cámara de Comercio de Quito (CCQ) efectuó presentó una lista de observaciones a la normativa que está en la Asamblea. Entre otros puntos el gremio señala que el impuesto planteado por tres años para empresas con ingresos por más de USD 1 millón afecta la competitividad por lo que sugiere excluir a empresas que no generen utilidades.
La CCQ cree que con la reducción de algunas deducciones del IR disminuyen incentivos para la inversión en proyectos productivos, así como programas para fomentar empleo e innovación. Impuesto a la renta Quedan exentos los intereses que reciban las instituciones del sistema financiero por los préstamos otorgados a los contribuyentes calificados como emprendedores, hasta por un monto equivalente al 3% de los ingresos gravados de dicha institución financiera, y de acuerdo con las definiciones y condiciones que para el efecto se determinen en el Reglamento’.
Deducciones Artículo 10.1.- Los recursos y/o donaciones destinados a proyectos, programas o becas, en los sectores deportivos, culturales, de investigación científica, o de desarrollo tecnológico, educativos y de formación profesional, calificados por el ente rector que corresponda; así como aquellos recursos y donaciones destinadas a emprendimientos calificados por el ente rector respectivo. La suma de estos gastos será deducible del impuesto a la renta hasta por un equivalente al 3% del ingreso gravado”.
Régimen impositivo para microempresas Régimen para micro empresas. Establézcase el régimen impositivo para micro empresas, incluidos emprendedores que cumplan con la condición de micro empresas; este régimen comprende a los impuestos a la renta, al valor agregado y a los consumos especiales.
Art. 97.17,- Contribuyentes sujetos al Régimen.- Se sujetarán a este régimen los contribuyentes considerados micro empresas, incluidos los emprendedores que cumplan con la condición de microempresas, según lo establecido en el Código Orgánico de la Producción, Comercio e Inversiones y el Reglamento correspondiente.
AromHouse es una micro que vende aromatizantes. Su dueña cree que el no tener que llevar contabilidad será positivo porque reducirá gastos. Foto: Patricio Terán / LÍDERES
Tener mayor liquidez y volverse más competitivos es lo que esperan los empresarios de pequeñas y medianas empresas del país (pymes) tras la reducción del porcentaje arancelario para 256 partidas, anunciada la semana pasada, a través de tres resoluciones del Comité de Comercio Exterior.
Esto es parte del paquete de medidas económicas que anunció el Gobierno hace dos semanas. Entre los productos que se benefician del ajuste arancelario están maquinarias agrícolas, fertilizantes, plaguicidas, herramientas, insumos, equipos de transporte, pinturas, líquidos, papel, productos para vehículos, filtros, etc.
Según el Ministerio de Finanzas, el principal efecto para estas importaciones es la reducción de costos. La caneca del herbicida gramoxone, por ejemplo, pasaría de USD 120 a 114 con la reducción; una herramienta de motor eléctrico de USD 2 700 a 2 295, los aspersores bajarían de USD 71 938 a 65 398; el ahorro podría ser de entre el 5% y el 15% en los valores de determinados productos.
Rodrigo Gómez de la Torre, presidente de la Cámara de Agricultura de la Primera Zona, destaca la medida, aunque asegura que es muy pronto para determinar un impacto monetario real. “Reducir costos es poder ser más competitivos para producir más”.
Los aranceles para productos agrícolas dentro de la resolución 23 estaban en el orden del 5,3% para maquinarias y el 9,6% para materias primas; ahora pasan a cero. Mientras que en el sector industrial el tributo para bienes de capital pasó del 7,57% al 5,68%, y en materias primas del 13,55% al 8,51%, según Finanzas.
El sector exportador, particularmente las áreas acuícola, de procesamiento de atún y agroindustrial, será uno de los que más se beneficiará con la reducción de aranceles. Xavier Rosero, gerente técnico de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), explicó que los diferentes productores podrán tecnificarse más gracias a la renovación de maquinaria; aquellos cuya oferta es no tradicional encontrarán un alivio al poder comprar insumos a precios internacionales.
Según Fedexpor, el 85% de las compañías exportadoras del país son mipymes. Estas empresas también están a la expectativa de que se logren ajustes impositivos, entre los que está la devolución automática de los impuestos al comercio exterior.
Este proceso no es nuevo, ya que se aplicó anteriormente a través del denominado ‘drawback’. Pero hubo quejas de los empresarios por las demoras en la devolución, así como en los trámites y requisitos para acceder al beneficio.
Ahora se espera que sea sencillo de aplicar, con la menor cantidad de discriminadores, que genere una idea clara de cuánto se va a poder recuperar, los plazos de entrega, bajo qué condiciones, etc. Es importante, explican los gremios, que se incluyan todos los detalles en el reglamento del Código de la Producción, para evitar que no haya fondos presupuestarios para la devolución del dinero y que exista periodicidad en su aplicación.
Fedexpor calcula que el sector exportador paga al año entre USD 250 millones y 300 millones en impuestos al comercio exterior. Entre estos, se encuentran aranceles, impuesto a la salida de divisas (ISD), Fondinfa, impuesto a los consumos especiales para importaciones, etc. “Con la devolución -dice Rosero- las pymes podrán destinar esos recursos a ampliación de plantas, inversiones nuevas, innovación, etc”.
Exportadores como Pablo Viteri, de la florícola Pacific Bouquet, consideran clave el no pago del anticipo del impuesto a la renta. “Ayuda mucho, ya que se pagará el tributo con base en el resultado del ejercicio económico”.
Todos los ajustes tributarios dependen de que se envíe el proyecto de Ley a la Asamblea. Otros que se incluyeron dentro del paquete de medidas son un impuesto a la renta único para el banano, la reducción del gravamen a los vehículos de menos de USD 32 000 para uso productivo, entre otros.
La pyme Pacific Bouquet, exportadora de rosas, destaca que se hayan reducido aranceles para maquinaria, materias primas e insumos. Espera que se dé un ajuste de tipo tributario. Foto: archivo / LÍDERES
Francisco de Narváez, presidente del Grupo de Narváez, dueño de Almacenes Tía, analiza el segmento del retail a propósito de la inauguración de su mega Centro de Distribución Nacional. El ejecutivo es optimista del crecimiento del consumo ecuatoriano.
Almacenes Tía inauguró el mega Centro de Distribución Nacional (CEDI) en el cantón Lomas de Sargentillo. ¿Cuál es la importancia?
Representa la confianza que tenemos en el Ecuador y la vocación de nuestra compañía de seguir creciendo. Vamos a tener 300 tiendas más con las mercancías adecuadas, en calidad y precios. El nuevo centro posibilita todo esto.
¿Cuánto aporta la logística en el negocio?
De aquí salen más de 200 camiones para los 211 tiendas en distintas localidades. Lo que se logra es una eficiencia con nuestros proveedores, que pueden entregar su mercancía en un solo lugar, y llevarla en pocas horas a todos los rincones del país. Eso implica una enorme economía de escala y en el mundo actual es clave la eficiencia de costos y quienes la sepan desarrollar mejor son los que van sobrevivir.
¿Qué planes de inversión tiene la empresa?
En el centro de distribución invertimos USD 47 millones. En los próximos tres años abriremos 100 almacenes más. Lo más importante es que por año vamos a incorporar 1 000 nuevos colaboradores y queremos que tengan un lugar para desarrollarse de forma personal y profesional. La tecnología ocupa un enorme y creciente lugar, pero nunca va a reemplazar a la calidez que nuestra empresa quiere ofrecer a sus clientes.
Actualmente se debate un paquete de reformas laborales ¿qué hace falta para dinamizar la contratación en empresas como Tía?
Es justo y necesario que el Gobierno y los sindicatos defiendan los intereses de los trabajadores y nosotros también velamos por su bienestar. Lo que sí subrayamos es que no es lo mismo ofrecer empleo en Quito o en Guayaquil; nos resulta tan importante hacerlo en ciudades más pequeñas donde el acceso a los trabajos formales y la capacitación en consecuencia es más dificultosa.
¿Qué sensación tiene Tía sobre la economía ecuatoriana? ¿Hay optimismo?
Mis abuelos llegaron a Ecuador hace 60 años y decidieron abrir el primer local en Luque y Chimborazo (en el centro de Guayaquil). Desde entonces nos abraza un gran optimismo por Ecuador. Han pasado distintos momentos, mejores y no tan buenos. Pero nuestra visión es siempre de futuro y las dificultades se las van a superar. Vemos con optimismo la gestión del presidente Lenín Moreno; está haciendo un enorme esfuerzo por ajustar las cuentas fiscales, que haya un entendimiento con el FMI, etc.
¿Cómo está actualmente el consumidor ecuatoriano?
En el país hay 4,5 millones de hogares que albergan a 17 millones de ecuatorianos. Tienen necesidades, expectativas e ilusiones y los bolsillos son estrechos. Los entendemos y los acompañamos acomodando precios y calidad. Entendemos que la parte más difícil está pasando, estamos en recuperación sostenible en el tiempo.
¿En los años de contracción bajaron los precios?
No hay estancamiento. Hubo un proceso que ralentizó la economía y lo vemos en el día a día y es distinto entre la Sierra y la Costa, influye el clima, festividades, clases, geografía con dinámica distinta, pero nunca hemos llegado a creer que estamos en situación crítica. Estamos en una situación que comprendemos difícil para los consumidores y nos gusta estar al lado de nuestros consumidores y cuando el bolsillo aprieta es cuando más nos necesitan.
¿Esto va de la mano de la fidelización?
En nuestros almacenes más de 300 000 personas por día resuelven sus necesidades, están llenas de expectativas y la billetera no alcanza para todo. Y si nos vuelven a elegir es porque hicimos las cosas bien; hay otros que lo están ofreciendo también y buscamos una sana competencia.
¿Cuáles son las perspectivas para el 2019?
Vemos que va a haber un relativo crecimiento, lo estamos viendo en nuestras cifras pero no es parejo. El comestible más básico está sufriendo menos que los productos suntuarios. No creemos que sea una situación grave ni permanente y se la superará.
¿Las tendencias actuales del consumo por dónde van?
El mundo se ha achicado y durante años se ha dicho que el cliente es el rey y ahora más que nunca es una realidad. El consumidor ecuatoriano, como el norteamericano o español, a través de los nuevos medios de comunicación está altamente informado. Esto es una carrera de eficiencia y reducir costos. Este centro de distribución es una expresión concreta que vamos atrás de una estrategia de costos más bajos y puede tener precios de ventas más bajos.
A escala global el retail enfrenta desafíos con el uso de nuevas tecnologías. ¿Qué está ocurriendo con Tía y con el segmento en Ecuador?
Hemos desarrollado nuestros canales de ‘e-commerce’ y hay un sostenido crecimiento. Creemos que va a haber una convergencia. No es verdad que los almacenes van a desaparecer o que solo se va a vender en línea. En esa conjunción trabajamos y la estrategia es tener ambos canales o lo que se llama la omnicanalidad, la posibilidad de llegar a un consumidor por distintas formas. Por ejemplo, se compromete que se le va a mandar las compras en 6 horas y tiene que estar antes y no en 8 horas. El nivel de satisfacción y exigencia de los consumidores es altísimo.
¿Qué porcentaje es en línea?
Estamos en 5% al 6%. En el mundo es 20%. Probablemente en Ecuador vamos a ir creciendo. El cliente para comprar un carro va a ‘googlear’ distintas ofertas y eso está produciendo un enorme cambio, con lo que pasaba hace 20 años. Es un mundo de supervivencia y se compite con las mejores herramientas o se desaparece; ya no hay intermedios, no hay más o menos. El único camino que existe es invertir en las mejores personas y en los mejores sistemas para tener los mejores costos y productos de calidad a mejores precios.
Un estudio decía que Colombia era la niña bonita del retail, ¿qué es Ecuador?
La próxima niña bonita. Podemos citar ejemplos de otras cadenas, Supermaxi o Mi Comisariato, que puestos en cualquier geografía son muy competitivos. El nivel de supermercadismo y distribución de comestibles en Ecuador tiene un nivel de clase mundial.
¿Hay una estrategia frente a estas cadenas?
Tenemos un formato que todavía tiene mucho por desarrollarse en términos de población y ciudades, estamos en 22 de las 24 provincias. El actual formato es de negocios entre 600 y 1 000 m2. Preferimos quedarnos en lo que mejor hacemos que es el formato de Almacenes Tía. Proximidad, cercanía, nosotros queremos estar casi en cada esquina. Si está a 5 o 6 cuadras absorbe un barrio distinto, complementa y no hay sobreposición. Nuestra estrategia claramente es mejor precio, mejor calidad y cercanía.
Hoja de vida
Trayectoria. Empresario argentino. Su familia materna, los Steüer, de origen checo emigró de Europa a Sudamérica en 1939. Primero abrieron las tiendas en Colombia (1940), en Ecuador fue en 1960. En esas empresas se formó profesionalmente. Cargos. En 1985 asumió la dirección del grupo. Modernizó y expandió las compañías. En 1994 se retiró como CEO del grupo y permaneció en su directorio. Actualmente es presidente del Grupo De Narváez. Es socio del grupo L. Catterton, LVMH y Grupo Arnault. Política. Ha sido diputado en Argentina y excandidato a Gobernador de Buenos Aires.
Francisco de Narváez, presidente del Grupo de Narváez, dueño de Almacenes Tía. Foto: Mario Faustos / LÍDERES
La Comunidad Andina impulsa la reducción de costos por roaming internacional y la protección del usuario en materia de comunicaciones. Para ello ya cuenta con dos propuestas normativas.
La información la dio a conocer Héctor Quintero, secretario del órgano regional. “El sector de telecomunicaciones en la CAN ha experimentado grandes avances, especialmente en el ámbito de los servicios satelitales y comunicaciones, beneficiando directamente al ciudadano andino, afirmó. Como parte de la Agenda Digital Andina, la Secretaría General de la CAN apoya a los países miembros, Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú, para el aprovechamiento y uso de la capacidad del satélite andino SES-10, el cual desde el 2017 permite a los países contar con servicios satelitales sin costo, para actividades orientadas a proyectos de conectividad social y otros usos.
“Hoy en día las telecomunicaciones han evolucionado de manera acelerada y constante de tal forma que se hace impensable la vida cotidiana sin en el uso de las TIC en el campo laboral, académico y personal. Sin embargo, este aceleramiento y tecnificación no incluye a todos los ciudadanos, por las dificultades existentes en su acceso. Este es el reto que enfrentamos el día de hoy: contar con pleno acceso de nuestros ciudadanos andinos a las herramientas que aportan las telecomunicaciones y en particular a la digitalización”, señaló Quintero.
El grupo andino busca que se reduzca la tarifa que se cobra por roaming internacional. Foto: Pixabay
A las exportaciones ecuatorianas les toca viajar largas distancias para llegar a su destino, lo que sube los costos para los empresarios que las envían.
Un estudio de Aduana muestra que las ventas nacionales no petroleras recorrieron el año pasado 9 857 kilómetros (km), en promedio, para llegar a 156 países.
Sin embargo, las exportaciones de Colombia viajaron 9 541 km, en promedio, para llegar a 183 mercados y las de Perú 10 101 km, en promedio, a 168 naciones.
La Aduana indica en su informe que, con mayores costos para el exportador, el producto de venta se vuelve más caro y menos competitivo. Los países vecinos, con mayores ventajas, por su ubicación geográfica o capacidad para vender en zonas más cercanas logran mejores resultados.
Daniel Legarda, presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), explica que la localización del país obliga a gastar más en los traslados a través de embarcaciones. “Los barcos deben atravesar el Canal del Panamá y deben pagar peaje. No pasa lo mismo con los países que tienen salida directa al Atlántico”.
Para Perú los problemas son similares a los que tiene Ecuador.
El informe de Aduana también revela que los cinco principales destinos de exportación de Ecuador están lejos. El año pasado, el 51,39% de las ventas fueron a EE.UU., Vietnam, Alemania y otros, que se encuentran a unos 8 662 kilómetros, en promedio.
Colombia, en cambio, tiene más cerca a sus cinco destinos clave: EE.UU., UE, Panamá, Ecuador y China. El transporte de sus mercaderías a estos países fue de 2 153 kilómetros, en promedio. En el caso peruano sus productos se desplazaron 11 136 km.
Según Pro Ecuador, de los 22 principales destinos de las exportaciones no petroleras ecuatorianas, ocho corresponden a países de América. El resto se encuentra en Europa y Asia. En cambio, según el Ministerio de Comercio e Industrias de Colombia, de los 22 principales destinos de sus ventas, 15 están en América.
En el caso de Perú, de acuerdo con El Comercio de Lima, de sus tres principales compradores solo uno, EE.UU., está en América; el resto en China y Suiza.
No hay un costo fijo del transporte y logística para las exportaciones ecuatorianas porque depende del país al que llega la carga, el volumen, la cantidad de contenedores, si la mercadería debe ir refrigerada, si va al granel, etc. Sin embargo, el valor promedio por contenedor exportado es de USD 1 800, que incluye el equipo más el traslado.
Legarda explica, sin embargo, que el transporte marítimo es el más barato de todos. A este le siguen el aéreo y el terrestre. Añade que para abaratar los costos es necesario incrementar el volumen de carga que se exporta, pero también que se importa. “Si los barcos vienen vacíos porque hay restricciones, ese costo de aire que se trae se lo va a trasladar al exportador”.
Javier Díaz, presidente de la Asociación de Industrias Textiles de Ecuador, (AITE) cree que la distancia de los destinos no es necesariamente un factor que impacte en los costos. “Hay fletes de Chile a EE.UU. más baratos que de Ecuador a ese país. ¿Las razones? Por volumen, frecuencia, negociación con las navieras y agencias de carga para tener mejores precios, entre otros”.
Otro de los problemas que han detectado los empresarios es la falta de competitividad interna. Al sector privado le impacta los costos por el cumplimiento de normativas laborales, pago de tributos, precios de insumos y más.
Díaz asegura que también hay que analizar los precios del transporte interno de mercancías, que también encarece la logística.
Camilo Jarrín, presidente de la Cámara de Transporte Pesado de Pichincha, indica que un flete entre Guayaquil y Quito cuesta USD 650 y demora en llegar tres días. Sin embargo, es poca carga la que están llevando desde que inició la etapa recesiva del país.
El reto es ser cada vez más competitivo
Los países de la región no son los principales socios comerciales de Ecuador, pero pueden convertirse en potenciales mercados. Lograrlo implica el establecimiento de estrategias que van desde mejorar la productividad hasta la fijación de acuerdos comerciales.
Iván Ontaneda, presidente del directorio de Fedexpor, asegura que la competitividad nace en el sector primario, es decir, en el sector productor. “Actualmente existe mucha disparidad en los niveles de producción. Ecuador ha implementado mucha tecnología que no se está aplicando en su totalidad y necesita ser transferida a los pequeños productores”.
Según el Instituto de Promoción de Exportaciones e Inversiones (Por Ecuador), la clave para mejorar las exportaciones es quelos productos y servicios que se ofrezcan tengan un alto “enfoque diferenciador y tengan potencialidad de acuerdo con las necesidades de los consumidores de cada país de la región”.
Para lograr esto, Pro Ecuador propone la búsqueda de acuerdos comerciales. Además, que los productos que se deberían potenciar sean industrializados con mayor valor agregado.
Algunos países de la región donde hay mayor potencial para exportar más son Perú, Colombia y Bolivia. En estos países se registró un aumento de las exportaciones en el 2016. Hacia Perú los envíos aumentaron en un 3,5%, hacia Colombia 3,4% y con Bolivia hubo un crecimiento anual promedio de 9,8% en los últimos cinco años. Las exportaciones a ese último país se diversifican con productos como: espuma de carnaval, colchones , cuadernos, entre otros.
En Perú y Colombia están despuntando productos como cocinas a gas, tableros de madera, semielaborados de cacao, aceite de palma, entre otros.
Según datos del Banco Central del Ecuador (BCE), entre enero y mayo de este año, el principal socio comercial del continente sigue siendo Estados Unidos, que abarca el 56% de las exportaciones ecuatorianas. El segundo país al cual se destina el 11,60% de los productos nacionales es Chile y el tercer lugar lo ocupa Perú con el 10, 60%, según el BCE.
Richard Salazar, representante de la Asociación de Exportadores de Banano, explica que los envíos de esta fruta al Cono Sur, representan entre un 7% y un 8% anual del total de envíos. En esa región los principales compradores son Chile, Argentina y Uruguay.
Salazar considera que Brasil es otro mercado potencial, pero que actualmente los envíos están restringidos por barreras fitosanitarias “exageradas”. Este tema es analizado junto con el Ministerio de Comercio exterior y prevén presentar un reclamo formal ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Según Ontaneda, es necesario un trabajo conjunto público-privado que permita conocer de cerca las barreras que enfrentan los sectores exportadores. Además, se deben resolver, dice, los “cuellos de botella críticos” que existen en las oficinas comerciales y proveer de equipos más técnicos en el exterior.
En cuanto a los costos logísticos estos dependen de la política interna de las terminales. En el caso del banano, los exportadores enfrentan un debate con la concesionaria Yilpor Ecu por el aumento de tarifas en Puerto Bolívar. Medidas como estas afectan la competitividad del banano ecuatoriano en el exterior, dice Salazar, por ello se deben tomar políticas que no afecten a los exportadores.
Datos Países. Las exportaciones a Perú en el 2016 crecieron 3,5%. Las exportaciones a Colombia aumentaron 3,4%, mientras que, los envíos a Bolivia crecieron 9,8%, en promedio anual, en los últimos cinco años. Productos. Los nuevos productos que se están enviando a Bolivia son espuma de carnaval, colchones y cuadernos. En el caso de Perú y Colombia se envían cocinas a gas, tableros de madera, aceite de palma, entre otros. Negocios. Para el segundo semestre de este año, Pro Ecuador realizará ruedas de negocios para los sectores del café cacao y servicios. También una rueda multisectorial en EE.UU. Se prevé generar exportaciones por más de USD 16,5 millones.
El libre flujo de transporte dentro de la CAN no se aplica totalmente
El transporte de la mercadería, principalmente por tierra, es el mayor problema que enfrentan los exportadores que envían sus productos a los países de la Comunidad Andina.
La situación es tan compleja que durante el Gobierno anterior Ecuador amenazó con dejar el bloque debido a que no se logra un libre flujo del transporte intrarregional. Además hubo quejas debido a las paralizaciones en ciudades fronterizas de Colombia.
Tras reuniones entre los presidentes de los países miembros (Ecuador, Colombia, Perú y Bolivia) se definió que se impulse el libre tráfico. Sin embargo, los exportadores siguen teniendo problemas para los envíos.
Daniel Legarda, presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), explica que la carga ecuatoriana tiene que hacer transbordos en frontera. Es decir, pasar el producto a otros camiones de Colombia o Perú.
“Eso incrementa los costos. Hemos exigido que se respeten las normas de la CAN en materia de transporte. El comercio fluye, pese a todo, sin embargo podría llegar a ser mucho más eficiente”.
Empresas como Rinnova, que se encarga de la producción y exportación de sustitutos del mármol, granito y otros materiales, explican que es difícil competir y llegar al cliente en Colombia, por ejemplo, debido al tema logístico.
“Es curioso. Estamos al lado pero al pasar se enfrenta dificultades en aduanas, huelgas en las ciudades fronterizas de ese país, etc. Una vez enviamos un contenedor y justo hubo un paro de transportistas y no llegó a tiempo al cliente. Vimos que es más fácil enviar a países como Chile”, indicó Bernardo Sevilla, de Rinnova.
Otro sector que enfrenta lo mismo es el textil, que envía un volumen importante a la región.
Los puertos del país cumplen con el embarque y traslado de la mercadería. De los 22 principales destinos de las exportaciones no petroleras, ocho corresponden a países americanos. Foto: Archivo / LÍDERES
El grupo sueco Volvo, segundo mayor fabricante mundial de camiones, anunció este viernes, 5 de febrero del 2016, haber multiplicado por siete en 2015 su beneficio neto, gracias sobre todo a las reducciones de costes.
Tras cosechar un beneficio neto de 15.060 millones de coronas suecas (USD 1 785 millones) , el grupo elevó en 10.000 unidades su previsión de ventas de camiones en 2016, a un total de 1,73 millones.
Volvo sale de tres años de reestructuración que, según dijo, han reducido en 10.000 millones de coronas (USD 1 183 millones ) sus costes estructurales anuales.
Esta reestructuración se ha traducido en la supresión de 5.000 puestos de trabajo en 2015, con lo que la plantilla global queda en 99.500 empleados.
El volumen de negocio del año 2015, ayudado por la debilidad de la corona sueca, aumentó un 9%, hasta sumar 312.500 millones de coronas.
“La demanda ha mejorado en Europa, pero ha bajado respecto a los altos niveles de América del Norte. Brasil se ha debilitado un poco más” , estimó en un comunicado el director general, Martin Lundstedt.
“En el primer trimestre ajustaremos la producción al nuevo nivel de demanda en América del Norte y Brasil, que es más bajo” , añadió.
En 2014, el beneficio neto de Volvo fue de 2.100 millones de coronas, USD 248,85 millones.
El mayor fabricante mundial de camiones, Volvo, anunció haber multiplicado por siete en 2015 su beneficio neto, gracias sobre todo a las reducciones de costes. Foto: AP
El uso de conceptos y experiencias de la neurociencia es una herramienta que sirve como un «optimizador» para las campañas publicitarias con resultados de reducción de costos y tiempo de producción, explicó este lunes (4 de mayo) el especialista español Manuel García.
«Nuestros cerebros comandan nuestro comportamiento, luego, la ciencia del cerebro ayuda a explicar todos los comportamientos humanos», comentó a Efe García, director de Neurociencia de Nielsen, en Estados Unidos.
Técnicas de neurociencia conocidas hace más de cien años están siendo desarrolladas en Brasil para su uso en el mercado de consumo y varias empresas del gigante suramericano las emplean para conocer el comportamiento del consumidor y su relación con marcas y productos.
Según el experto, las decisiones de compra son mediadas por el órgano central y son altamente influenciadas por «asociaciones implícitas que el consumidor tiene con productos y marcas».
De igual manera, «incorporar métricas de la neurociencia de consumo hace que sea posible explorar los anuncios para que sean más atrayentes y memorables», añadió García.
Para medir las reacciones de los consumidores, García dijo que en la actualidad se aplican exámenes de electroencefalografía (EEG), que son estudios del registro gráfico de las corrientes eléctricas desarrolladas en el encéfalo, así como el ‘eye-tracking‘, un método de acompañamiento de lectura basado en el movimiento de los ojos.
«Con esos exámenes, podemos identificar lo que funciona o no en la creación y, por eso, es común en las agencias ese tipo de herramienta que transforma una buena creación en una mejor aún», señaló el español.
El laboratorio de la estadounidense Nielsen contribuyó para la estrategia de una campaña publicitaria de la ONG brasileña AACD (Asociación de Asistencia a Niños con Deficiencia), que presentaba al público un material de vídeo de un minuto y treinta, reducido a 45 segundos después de la análisis cerebral.
«Los cambios en la campaña permitieron hacerla más eficaz, así como posibilitó la reducción del tiempo de duración, lo que trajo obviamente una economía financiera para el instituto», completó García, quien participó la semana pasada en Sao Paulo de varios encuentros con especialistas brasileños de neurociencia.
Para medir las reacciones de los consumidores, el experto señaló que en la actualidad se aplican exámenes de electroencefalografía. Foto referencial: Pixabay
El consejero del Organismo Regulador de las Telecomunicaciones en España, Ángel García, algo parecido a la Superintendencia de Telecomunicaciones, realiza un análisis de la situación tecnológica en Ecuador y en América Latina respecto de Europa. Según él, la región está en proceso de reducir la brecha digital y con ello, abaratar los costos de los servicios de telecomunicaciones.
¿Cómo se mira el mercado de telecomunicaciones y nuevas tecnologías en América Latina respecto de lo que ocurre en Europa?
América Latina vive un momento dulce de fuertes crecimientos económicos, que posibilita el despliegue de infraestructura en telecomunicaciones. Además, tiene la posibilidad de conocer los errores que se han cometido en otros países y con ello aplicar otras políticas. Algo en lo que somos muy críticos en el entorno europeo y que se incurre en otros países es en la generación de la brecha digital. Es decir, no se utilizan las nuevas tecnologías como herramientas y elementos de mayor inserción y cohesión social, y esto puede incurrir en un incremento de las diferencias sociales y geográficas.
¿Esos usos tienen que ver con la convergencia tecnológica y cómo se la define?
La convergencia tecnológica se da en sectores que estaban separados: televisión, telecomunicaciones, telefonía fija… La Internet los une. La convergencia va más allá de tener un dispositivo (‘smartphone’), a través del cual se pueda acceder a todos los servicios para los cuales antes se necesitaban muchos aparatos. La convergencia permite el acceso de la sociedad de la información que antes no teníamos. Y con dispositivos como la televisión, ahora es posible que llegue la información y el conocimiento a la población.
¿Cómo se mira a Ecuador en este proceso de convergencia tecnológica?
Ecuador está viviendo y bebiendo de la experiencia que a escala global experimentamos. La suerte de encontrarse en una fase menos desarrollada que otros países, le permite subirse en un tren que está en marcha y, por lo tanto, no experimentar fases previas de errores que hemos cometido con anterioridad y se pueden solventar antes de cometerlos.
¿Hay convergencia en Ecuador?
El proceso convergente es inevitable a escala mundial. Ecuador no puede dar servicios que no estén dentro de esta perspectiva. El despliegue de la infraestructura para prestar estos servicios en Ecuador deben ser pensados en la convergencia porque, incluso, por una cuestión de política industrial, los equipos para estas redes ya son pensados para la convergencia. Aquí, lo deseable es que estas inversiones sean eficientes y no redundantes, que se busque la eficiencia y junto a operadores públicos y privados ofrecer servicios a los ciudadanos, para que accedan a los mejores servicios y al más bajo precio posible.
Desde esa perspectiva, ¿cómo están los precios de acceso a las nuevas tecnologías en América Latina, en comparación con otras regiones?
En América Latina el precio de acceso a la banda ancha y a datos a Internet es relativamente más caro en relación con los países de la Unión Europea.
¿A qué se refiere con lo de “más caro”?
Puede ser una proporción en algunos casos de 10 a uno. En España hay una lucha feroz, desde el punto de vista comercial, entre operadoras. No solo en los precios sino en la forma de comercialización de los servicios. Este año, derivado de la situación económica financiera se han potenciado, desde la perspectiva convergente, procesos de comercialización empaquetada de servicios. Hemos pasado de pagar 40 euros (USD 50) al mes por 16 megabytes, a servicios convergentes empaquetados -telefonía fija, telefonía móvil, acceso a banda ancha fija y móvil con fibra óptica de 100 megabytes-, por 59 euros (USD 70). Hay un escenario cambiante: el costo ya no es el megabyte, ahora es la infraestructura. La perspectiva es que en poco tiempo, con un incremento de los usuarios, los precios de estos servicios bajen aún más.
En Ecuador los usuarios de la telefonía móvil alcanzan 16,6 millones y los precios no bajan…
Ahí está el trabajo de las autoridades reguladoras sectoriales, siempre y cuando se garantice el incremento de la competencia entre los operadores. Es decir, que no se den acciones que se pudieran denominar anticompetitivas o lesivas de la competencia de prácticas concertadas y que la competencia termine causando, no solo un incremento de servicios, sino la bajada de los precios. Una vez diseñada y puesta la infraestructura, el costo del megabyte baja.
Pero esa infraestructura requiere inversión. ¿Cómo la recuperarían con costos bajos?
Es cierto que la infraestructura en telecomunicaciones incurre en costos muy importantes, pero también el uso (de esas redes) es muy intensivo por la sociedad, que a su vez también genera recursos intensivos (para las operadoras), que repercute en mayores eficiencias (calidad del servicio) y en bajadas del costo por usuario. Por lo tanto, vale redundar que en un corto tiempo bajarán los precios. En España, como ya se dijo, los precios bajaron después de 13 años en los que no pasó nada. Además, por políticas de competencia, una vez que se dispone de la infraestructura, el volumen de usuarios (que accede a la Red) permite que los precios bajen.
¿Qué precios se han reducido bajo esta lógica?
Un ejemplo de ello es la reducción de precios en el roaming internacional. En España se ha favorecido un roaming cada vez más bajo en conjunto con los países de la Unión Europea. De aquí al 2015, los costos entre las distintas operadoras se equipararán a los costos de un mismo país. Con ello se llegará a un escenario en el que el roaming será el mismo. Esta experiencia es trasladable a otras comunidades, como en la Comunidad Andina, que está en proceso.
¿Desde cuándo se trabaja en la reducción del roaming y qué dicen las operadoras al respecto?
Esto se conversa desde fines del año pasado. Las operadoras móviles están participando y quieren opinar porque el servicio es de ellas. Se barajan varias opciones, entre ellas tener una tarifa única, hacer reducciones graduales. Hay varias alternativas que se analizan y que van a ser acordadas con las compañías celulares para no causar un impacto.
Su experiencia está dada en el sector de las telecomunicaciones
En Ecuador. Llegó la país la semana anterior y participó del Seminario Internacional de Telecomunicaciones en convergencias en redes, medios y servicios.
Sus funciones. La entidad en la que trabaja es responsable de monitorear la situación en el sector de telecomunicaciones en España.