Etiqueta: ejecutivos

  • Movidas en Scotiabank: Siete altos ejecutivos dejan sus puestos

    Diario El Comercio de Perú

    Logo GDA

    A dos días de que el nuevo CEO de Scotiabank, Miguel Uccelli, asuma el cargo en reemplazo de Carlos González-Tabaoda el 1 de abril, siete altos ejecutivos del banco dejaron sus puestos.

    De acuerdo con un comunicado interno a los trabajadores del banco, entre los funcionarios que se alejan del Scotiabank figura José Luis Macedo, vicepresidente de Banca de Negocios, quien ocupaba el cargo desde junio del 2013.

    Macedo inició su carrera en el Scotiabank en mayo del 2006 como gerente de Planeamiento y Productos Tarjetas de Crédito y Débito. En abril del 2009 fue ascendido a gerente de Tarjetas de Crédito y luego, en setiembre del 2010, asumió la gerencia de Productos Retail, que veía todos los productos de banca personal, como tarjetas de crédito, depósitos a plazo y CTS.

    También dejó su cargo Juan Carlos de la Fuente, vicepresidente de Ventas Dirigidas, que ingresó en el 2003 al puesto de gerente de Productos de Consumo del Banco Sudamericano, que fue fusionado con el Banco Wiese en el 2006 para formar el Scotiabank. Tras la fusión, de la Fuente se convirtió en gerente comercial de Tarjetas desde el 2006 hasta el 2010, año en el que asumió el cargo que deja hoy.

    Asimismo, se retirarán de sus puestos Ricardo Pacheco, gerente principal de Marketing Wealth Management & Wholesale Banking -que hizo gran parte de su carrera en Profuturo e ingresó al banco recién en el 2014-; Roberto Escudero, gerente principal de Proyectos; Alberto Bustamante, gerente principal de Banca Premium; Javier Mogrovejo de las Casas, gerente principal de Planeamiento Estratégico y Miguel Arce, gerente de Desarrollo e Innovación de Nuevos Canales.

    De acuerdo con el comunicado interno, los cambios son parte de la nueva estrategia organizacional de Retail del Scotiabank.

    Scotiabank
    Foto tomada de El Comercio de Lima
  • Ejecutivos del gigante Google visitaron Cuba

    La Habana

    Varios ejecutivos de la empresa estadounidense Google, encabezados por el director adjunto, Scott Carpenter, estuvieron esta semana de visita en Cuba, según el blog oficialista «La pupila insomne».

    Se trata de la segunda visita a la isla de directivos de Google, especializada en productos y servicios relacionados con Internet, software, dispositivos electrónicos y otras tecnologías, tras la realizada el verano pasado por su presidente, Eric Schmidt, junto a otros representantes de esa multinacional.

    Los visitantes sostuvieron intercambios con un numeroso grupo de estudiantes y profesores de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI) de La Habana, según cuenta hoy el bloggero Iroel Sánchez, en un artículo titulado «Google en Cuba again: Nuevas ideas?».

    El autor señala que se enteró de la presencia de los ejecutivos de Google a la isla mientras impartía una conferencia en esa institución docente, dedicada a la formación de profesionales calificados en la rama de la informática.

    Explica que los representantes de Google también estuvieron en la Ciudad Universitaria José Antonio Echeverría (CUJAE), en instalaciones de los Joven Club de computación y electrónica estatales, y algunos detalles de su visita a la UCI.

    «En el intercambio de los ejecutivos de Google en la UCI salió a la luz el hecho de que el desbloqueo de productos para Cuba como Google Play, anunciado a fines del pasado año, hay aplicaciones allí aún no disponibles para la isla», señaló.

    Entre los servicios que siguen inaccesibles desde IPs cubanas también fueron citados Google Earth, Google Developers y Google Code, fundamentales para el desarrollo de software.

    La fuente cuenta que en esos intercambios se propuso a Google si estaría dispuesta, a través de Google Play, a vender videojuegos para móviles desarrollados en la UCI, cuestión que los ejecutivos de Google dijeron que «por el momento no es posible».

    Tampoco recibió respuesta otra propuesta de profesores de la UCI de colaboración en videojuegos para rehabilitación de funciones visuales y un simulador para entrenar médicos en el enfrentamiento al ébola que pudieran desarrollarse más con la herramienta Google Glass, según cuenta Sánchez.

    Pero señala que sí aceptaron la invitación de la UCI para que un técnico de Google dicte una conferencia en un evento de software libre de la Universidad el próximo año.

    Tras el anuncio del deshielo diplomático entre La Habana y Washington, anunciado el 17 de diciembre pasado, EE.UU. aplicó una serie de medidas para aliviar su embargo económico a la isla, entre las que se incluyen facilidades para el acceso a infraestructura informática que mejore el acceso a la red.

    En Cuba, el acceso a internet es restringido, no se permite la conexión desde los hogares salvo contadas excepciones y las tarifas en las salas de navegación públicas o en hoteles son muy elevadas para la mayor parte de los cubanos.

    Cuba, que culpa de su atraso tecnológico a esa política de embargo vigente desde 1962, ha manifestado disposición para recibir a compañías estadounidenses del sector para explorar oportunidades de negocio beneficiosas para ambas partes.

    En ese contexto, la concreción de negocios con empresas estadounidenses se facilitan para la isla después de que compañías como Netflix y Apple hayan abierto algunos de sus servicios a la isla, donde hasta ahora estaban vedados a causa del «bloqueo».

    Google
    Foto: Archivo EFE
  • Los ejecutivos alistan el balance semestral

    Thalíe Ponce / Redacción Guayaquil

    Culmina el primer semestre del año y, como es costumbre en muchas empresas, se entrega el informe de resultados económicos alcanzados en este período.

    La mitad del éxito en la entrega de estos reportes reside en la preparación y dominio del tema. La otra mitad está en la capacidad de los jefes para exponer oralmente. Es la opinión de Rosalinda Villalva, directora de Consultoría Gerencial.

    Aprender a expresarse oralmente se vuelve cada vez más importante, dice la experta. De estas exposiciones depende el entendimiento y motivación de los colaboradores de una empresa. “No basta con que el gerente conozca los resultados, debe manifestarlos de forma clara”.

    De esta manera, indica Villalva, se pueden corregir errores en el caso de que sean resultados negativos. En el caso de tener resultados positivos se invita a los bajos mandos a potenciar las fortalezas.

    Pero, ¿cuáles son los elementos que hacen exitosa una presentación oral? Para Efraín Luna, director de la carrera de Comunicación de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (UCSG), son aspectos tanto verbales como no verbales. Entre los aspectos verbales menciona mantener un buen tono de voz, una correcta dicción y dominar un vocabulario amplio. “El contenido se puede ver afectado por el mal uso del lenguaje y se generan escollos en la comunicación”. Entre los aspectos no verbales menciona ubicarse en una posición correcta, vestir de acuerdo con la ocasión y cuidar el movimiento de las manos. “El dominio escénico es clave para generar credibilidad”.

    Además ser conciso es fundamental, por razones de tiempo. Luna indica que los ejecutivos buscan minimizar los minutos invertidos en este tipo de actividades no cotidianas. Lo efectivo sería hacer una presentación concreta, brindando datos específicos y resultados claros.

    Carlos Medina es presidente de Servicap, una firma dedicada a brindar servicios de capacitación y asesoría empresarial en Guayaquil y Santa Elena. Medina comenta que todos estos elementos deben ser aplicados siguiendo un proceso.

    Para él, son cuatro los pasos que deben considerarse para realizar una exposición efectiva. Son la apertura, el mensaje, el uso de evidencia y el cierre.

    La apertura debe ser impactante para llamar la atención de los interlocutores. Este paso es fundamental, ya que debe transmitir claramente a los colaboradores la importancia del mensaje que se va a presentar posteriormente, dice Medina.

    El mensaje, que en este caso son los resultados financieros, debe transmitirse de forma directa y concisa, destacando los puntos de mayor relevancia. El gerente debe mostrar dominio total del tema.

    Luego, el jefe debe usar evidencias. Esto significa que debe respaldar la información que ha presentado. En el caso del informe, debe explicar los motivos por los cuáles la firma ha obtenido determinados resultados y compararlos con los objetivos que se plantearon al inicio del año.

    Finalmente, señala Medina, se realiza el cierre de la presentación. El cierre es tan importante como el mensaje. Se trata de concluir demostrando los impactos de los resultados, sean estos positivos o negativos. “Del énfasis que se dé en el cierre, dependerá la motivación de los empleados para el trabajo a realizar el resto del año”.

  • Los ejecutivos tienen mayores retos en la dirección empresarial

    ¿Cuáles son los retos de liderazgo mundial en el siglo XXI? Roberto Salem, docente de la Universidad San Francisco de Quito, dice que los principales retos de las nuevas cabezas de las empresas son: la globalización, el avance tecnológico, la innovación, crecimiento de la población, administración de recursos humanos y la protección del medio ambiente.

    Eso no es todo. Salem apunta a que estos líderes deben tener una mente global; además, creatividad, flexibilidad, habilidades de comunicación, capacidad para crear y liderar el cambio, capacidad de trabajo en equipo, motivación para aprender, carisma, respeto por los demás y sensibilidad.

    Solo así lograrán que los equipos de trabajo se comprometan con las labores y sintonicen adecuadamente lo que como líder quiere transmitirles.

    Roberto Estrada, socio de Deloitte, comenta que a las cualidades que explica Salem se deben juntar a una filosofía de ‘hacer-hacer’. Es decir, “un directivo se convierte en un director de orquesta, que está tratando de lograr que su equipo confíe en su sinfonía. Así, el ejecutivo está dirigiendo las partes o los movimientos estratégicos, para que los otros (colaboradores de la empresa) sean los que desarrollen o producen”.

    Estrada añade que un gerente general debe estar pendiente de la estrategia, debe ‘visionar’ lo que se viene y cuáles pueden ser los aspectos que en el futuro impacten, o que de alguna manera afecten al negocio. Así, estará preparado para cualquier situación adversa.

    Augusto Garzón, presidente ejecutivo de Governance S.A., explica que ahora la misión estratégica de un líder de compañía es compartida. Para él, antes, el objeto de la empresa era el lucro y nada más. Por esa razón, en esa visión no se incluía a los actores del mismo proceso productivo: los empleados, los proveedores, los clientes, la comunidad y el Estado o el mismo Gobierno.

    “Lo que sucede ahora es que estos actores han golpeado las puertas de las empresas y han dicho: estamos presentes, somos parte de los procesos así que inclúyenos. Por eso, en ese tema la gestión de los clientes pasa por ser más amplia, competitiva y utiliza estrategias de transparencia y gestión”.

    Garzón también habla de cómo ejercer el liderazgo en empresas familiares. Para él, el mayor cambio ha sido implementar las normas de gobierno corporativo y directorios al interior de la empresa familiar”.

    La firma PWC Asesores, en la edición de su revista de junio, se refiere a este punto de vista. Menciona que existen empresas que aplican gobierno corporativo o incorporan directivos y administradores externos, en el caso de ser necesario, para que supervisen el rendimiento de familiares que trabajarán para la empresa de la misma manera que lo hacen con el desempeño de directivos externos.

    En la misma publicación, PWC cuenta que de 1 600 propietarios y directivos de empresas familiares de 35 países, el 31% continúa en manos de los empresarios que las fundaron. Además, señala que solo el 36% ha sobrevivido el paso a la segunda generación.

    La encuesta también revela que el 27% de las empresas -que aumentaron en un 36% en los mercados emergentes- esperan que cambien de propietarios en los próximos cinco años.

    Si bien las firmas más grandes están más preparadas para la transición que las pequeñas, el 68% de los directivos prevé que los miembros de la familia asumirán uno o varios puestos dentro de la alta dirección del negocio, aunque el 11% – 34% en Norteamérica- tiene previsto eludir por completo a sus familias.

  • Un equipo de ‘coachs’ para los ejecutivos

    Andreína Laines. Redacción Guayaquil

    La búsqueda de empleo puede ser una tarea difícil para muchos, y más si se quiere conseguir el primer empleo. Tomando en cuenta esta situación sumada a la experiencia de muchas personas, Lorena Alvear decidió ofrecer en su empresa Alvear and Partners un curso dirigido, principalmente a bachilleres y universitarios, desde hace tres meses.

    Alvear es consultora de Recursos Humanos y Psicóloga Clínica, con 17 años de experiencia en ese campo.

    Ella fundó su empresa de consultoría en el 2007, en Quito. Actualmente tiene su centro de operaciones en Guayaquil, en una oficina en el norte y presta sus servicios a multinacionales, industrias…

    Desde diciembre pasado, incluye en su portafolio de servicios cursos para personas que se inician en el mundo laboral. Hasta el momento, se han capacitado unas 20 en esas conferencias.

    Los talleres son denominados ‘coach de carrera’ y brindan capacitación y asesoran en temas relacionados con la búsqueda laboral. El objetivo es colaborar al desarrollo del futuro profesional.

    «Lo que buscamos es autogestionar la carrera, desde cómo presentar una hoja de vida atractiva hasta cómo manejar una entrevista de trabajo», cuenta la especialista. Estos talleres pueden ser abiertos (en grupo) o personalizados.

    Pero no solo el ‘principiante’ necesita asesoramiento. Alvear comenta que, mensualmente, trabaja de manera personal con dos o tres ejecutivos de alto nivel (en promedio), que definen cómo desarrollar fortalezas para presentar proyectos a jefes de más alto nivel; o también, en mejorar las expectativas sobre ellos mismos y su entorno de trabajo.

    Junto a esta ejecutiva colaboran otros cinco consultores de planta, y de acuerdo con los requerimientos suele incluir profesionales ‘free lance’.

    Para iniciar con los cursos de ‘Coach de Carrera’, Alvear and Partners invirtió unos USD 3 000, y en dos cursos ofrecidos facturó alrededor de USD 3 000.

    Otro de sus servicios es el montaje de planta, en el que selecciona el personal operativo para las diferentes área de una industria. Así también la selección de personal administrativo y, principalmente, los mandos medios y altos, y que, finalmente son quienes toman las decisiones.

    Pedro Suárez, jefe de Recursos Humanos de Protisa, una multinacional chilena con bases en el país, ha contratado los servicios de Alvear and Partners.

    La relación laboral surgió hace unos cuatro años, después de que esta consultora realizara el montaje de planta.

    Suárez destaca el servicio personalizado y la dedicación al momento de analizar los perfiles de los futuros mandos medios de la compañía y la selección y evaluación de personal. «Los consultores en general prestan un buen servicio», indica Mensualmente esta firma consultora realiza entre 8 y 10 procesos de selección de jefaturas, estos pueden ser también de cambio de áreas de jefes. Y al menos la contratan para realizar la selección de hasta 15 asistentes de forma mensual. Esta selección -comenta Alvear- es igual de importante que una de mando medio. «Se miden aspectos como la confidencialidad, pues un asistente es el apoyo del jefe», agrega, la ejecutiva de esta empresa consultora.8 a 10 procesos de selección profesional al mes, en promedio, realiza esta firma consultora.

  • El golf, un juego ideal para los negocios

    Xavier Montero. Redacción Guayaquil / LÍDERES

    Una de las creencias empresariales más arraigadas es que los mejores negocios se cierran en los campos de las canchas de golf y en los pasillos de los hoteles. Ambos escenarios, alejados de oficinas herméticas o salas de reuniones, son los ideales para tomar decisiones, indican los consultados.

    Durante el torneo de golf Futurio- Amcham 2013, desarrollado a finales del mes pasado en La Costa Country Club (ubicado a unos 30 km al oeste de Guayaquil), LÍDERES habló al respecto con varios participantes. Una mañana soleada de sábado reunió al menos a un centenar de altos ejecutivos de firmas como AJE, Deloitte Ecuador, Corporación Favorita, Club Buzzom…

    Para Pablo Chambers, principal de la firma de investigación de mercados Futurio, la relación entre los negocios y el golf se basa en la ética del ejecutante. Él considera que un buen golfista no hace trampa para alcanzar altos puntajes. No importa si la pelota cae en las trampas de arena o si están a centímetros del hoyo, los contrincantes confían en que, mutuamente, no recurrirán a trucos para mejorar sus ángulos de tiro.

    Existe una dinámica similar -opina Chambers- en el momento de negociar un contrato. Los ejecutivos conocen las reglas del ‘juego’ en las que se desenvolverán y esperan que los acuerdos tomados entre ambas partes sean equitativos en cuanto a los beneficios alcanzados. Las trampas o cláusulas que van en detrimento de lo pactado se comparan con aquellos «empujoncitos extra» que los golfistas dan a la pelota de goma, para adelantarse entre hoyo y hoyo.

    «Un buen golfista tiene la capacidad de golpear la pelota con su mente en total tranquilidad. Un buen empresario tiene la habilidad de firmar un contrato con ‘cabeza fría’. «En ambos casos, tanto el golfista como el ejecutivo tienen los pies bien plantados sobre la tierra», indica Diego Aguirre, principal de la firma camaronera Camanisa y jugador de golf desde hace dos décadas. Además, añade que un partido, que tiene una duración promedio de dos a tres horas, otorga a los negociadores el tiempo necesario para resolver sus inquietudes.

    María Antonieta Reyes, presidenta de la Cámara Ecuatoriano-Americana de Comercio (Amcham, en inglés); indica que cada vez es más común encontrar a ejecutivos de alto rango recorriendo los campos de golf locales. En países como EE.UU., comenta Reyes, es común aquella combinación de deporte y grandes contratos, de allí que el conocimiento del cuántos palos se usan para este deporte o cuáles son las consideraciones de un tiro, podrían ser un plus para quienes buscan asegurar un negocio con empresarios internacionales. «Es un sitio para encontrar a los reales tomadores de decisiones de las empresas».

    Hugo Benavides, directivo de la firma de taxis aéreos Endecots, señala que la cancha de golf es un escenario óptimo para los negocios -entre otras cosas- porque están alejados del incesante ruido de la ciudad. Él ha cerrado contratos importantes entre lagunas artificiales y prados cuidadosamente podados de este y de otros clubes de Guayaquil y Samborondón, desde hace dos años.

    Según los organizadores del Torneo Futurio-Amcham, el 45% de los empresarios que asistieron logró entablar algún tipo de negociación, dar a conocer sus servicios e intercambiar experiencias de negocios. Los equipos participantes constaban de cuatro golfistas, dos de ellos debían ser amateurs. Además, se entregaba una automóvil a quien lograse hoyo en uno en el último hoyo.

    El golf
    El campo. Los de 18 hoyos son los profesionales. Los de nueve hoyos se llaman turísticos o para ejecutivos.Términos. El césped (green) está previsto de búnkers (trampas de arena). El swing es el golpe a la bola.La conducta.  Está mal visto lanzar los palos al aire cuando no se hace un buen golpe, así como también hacer ruido.

  • Ejecutivos autoritarios son parte del pasado

    Portafolio de Colombia. Grupo de Diarios América (GDA)

    En las últimas décadas, temas como la inteligencia emocional, la globalización, el clima laboral, la productividad, la calidad de vida, la convivencia y la generación han hecho que el estilo de liderazgo en las empresas esté cambiando.

    Los altos ejecutivos autoritarios, encerrados en su oficina, tomando decisiones sin consultar cada vez son más parte del pasado y eso lo refleja un reciente estudio adelantado por la consultora internacional en talento humano Korn Ferry.

    Esta firma analizó las evaluaciones de 360°, que 743 altos ejecutivos de todo el mundo han realizado con la compañía, lo cual arrojó que el 70% corresponde a cuatro estilos de líderes más comunes: el experto, el participativo, el carismático y el orientado a la gente.

    «Los ingredientes claves para el liderazgo eficaz de una organización ya han sido analizados y se llaman la inteligencia y sentido común para establecer la estrategia; el coraje, el impulso y las habilidades para ejecutarla con eficacia, y la visión, influencia y habilidades interpersonales para ver venir los problemas.

    Es raro hallar todas estas cualidades en una sola persona, pero, afortunadamente, la investigación ha encontrado que ser fuerte en un puñado de cosas, si son las cosas correctas, es suficiente. Los líderes exitosos suelen tener desde cuatro hasta siete fortalezas imponentes, pero no deficiencias evidentes», comenta el estudio de la consultora.

    El análisis también muestra, sin que implique que un tipo de líder es más eficiente que otro, que los expertos y carismáticos suelen tener más presencia en los altos niveles gerenciales (32 y 12% respectivamente), mientras que los orientados a las personas se mueven frecuentemente en los niveles de baja dirección.

    Lo cierto en todo esto es que las organizaciones buscan cada vez más líderes integrales, que combinen lo técnico con las relaciones interpersonales.

    «Industrias que tradicionalmente eran muy técnicas y lideradas por los expertos se están moviendo hacia el líder participativo, personas más sensibles en el manejo de la gente, mejores motivadores, que se preocupan más por integrar a las personas», comenta Rafael Ortega, Leadership and Talent Consulting, para la Región Andina de Korn Ferry.

    El participativo suele ser más balanceado en sus habilidades técnicas, capacidad de pensamiento y manejo de la gente. Las personas en este grupo combinan la inteligencia con las habilidades individuales. Además, guiados por la ética más que por el deseo de obtener resultados, los ‘socios con principios’ son más dados a juzgar el mérito de una idea sobre la base de los principios organizacionales, valores personales y justicia.

    También ellos prueban que son socios creíbles y confiables, que tienen sus propias ideas, pero están en capacidad de detenerse y mirar las de otros.

    Los participativos también entregan resultados consistentes, pero probablemente no serán los que lideren a la gente, detrás de una idea muy innovadora y trascendental. Sus debilidades, sin embargo, reducen la fuerza de algunas de sus fortalezas. Ellos son inteligentes, pero no estratégicos; expertos en profundidad, pero no innovadores.

    Líderes participativos
    Otras características.  Su conocimiento y habilidad los lleva a ser calmados y colaboradores, más que genios explosivos o rompedores de esquemas. Son fuertes en ética e integridad, pero no siempre se puede contar con ellos para actuar en situaciones difíciles.Los puntos fuertes para desarrollar.  Sabe escuchar, es paciente, cuenta con habilidades técnicas, tiene fuerza intelectual, tiene ética y valores.Las debilidades.  Los participativos debieran potenciar en gestión de la innovación, habilidades de dirección, manejo de conflictos, motivar a los demás y capacidad de visión y gestión.

  • Los ejecutivos sortean hasta el huso horario

    Pedro Maldonado O. Redacción Quito / LÍDERES

    En el mundo de los negocios el cumplimiento de horarios es crucial. Hoy, con la expansión de las multinacionales y una conectividad en permanente crecimiento, los horarios entre países, regiones y continentes van desapareciendo, lo que representa una nueva exigencia para ejecutivos y empresarios.

    Es frecuente escuchar que una reunión de trabajo se cumple a las 12:00 de Ecuador y 14:00 de Brasil. O que ejecutivos asentados en EE.UU. tienen que estar pendientes de la hora en países de Europa o de Asia para sus negocios.

    El ecuatoriano Andrés Garzón, socio de la compañía tecnológica Jobsity (con sede en Nueva York), cuenta que su empresa tiene clientes en EE.UU., Rumania, Ucrania y Filipinas. «Con los dos países europeos tenemos una reunión todos los días de 09:00 a 11:00, hora de Nueva York; y 16:00 a 18:00, de Rumania y Ucrania. Definimos las metas, las tareas y objetivos del día siguiente».

    Garzón señala que en estos casos se necesita una apertura de parte de la empresa para tener flexibilidad y, por ejemplo, empezar más tarde la jornada.

    En el caso de sus trabajos con clientes en Filipinas, Garzón explica que se han utilizado horarios extendidos para hacer reuniones. «Se negocia un horario que no afecte tanto a la vida cotidiana de ellos como a la nuestra y así es más fácil. Con Filipinas existen 12 horas de diferencia y por eso hemos hecho las reuniones a las 09:00, que para ellos es 21:00».

    Un consejo de Garzón es contar con un sistema informático de project management (administración de proyectos) bien definido y un protocolo funcional. «Entonces, no es necesario despertarse a las 03:00 para ver lo que está pasando. Todo se registra en el software y eso define el trabajo que se hizo y lo que falta».

    Otra experiencia la tiene Geovanny Romero, quien ha colaborado en ‘distintos horarios’ con Continental Tire, el Tecnológico de Monterrey en México y PDMA, una organización que promueve la innovación. Él cuenta que en el país azteca se enviaba un e-mail a personas en Europa o Asia consultando un día y hora posibles para una reunión. «En Continental Tire, cuando se hablaba con la oficina matriz, en Alemania, se revisaban modelos nuevos o resultados a las 08:00 de Ecuador y 16:00 de Alemania».

    Romero señala que la clave pasa por que cada empresa cuente con un sistema de comunicación que facilite las reuniones de negocios sin importar horas.

    Los viajes que incluyen cambios de hora tampoco son obstáculo. Alejandro Palacios, alto ejecutivo de DHL Global Forwarding tiene su base de operaciones en Miami y el año pasado, por trabajo, viajó 193 000 kilómetros. Cuenta que para quienes están en el continente americano es más fácil porque se puede empezar el día temprano y cubrir varias llamadas internacionales antes de llegar a la oficina. «El idioma de los negocios es el inglés y la gente quiere ver información y poder tomar decisiones».

    Palacios cuenta que un riesgo de la distancia es perder el rumbo. Por eso, añade, hay que asegurarse de definir planes estratégicos muy detallados cada cinco años. «Y estar cerca del negocio en los países y con nuestros clientes».

    Las herramientas

    Para fijar citas. Herramientas como Google calendar permiten hacer una cita que se configura en el horario de la contraparte, según su hora.

    El project management.  Para manejar proyectos existen aplicaciones como Jira, Basecamp, Trello, Youtrack entre otras, unas pagadas y otras, gratuitas.

    Los viajes.  Cuando se viaja a países con diferentes horarios lo mejor SEnS es tratar de adaptarse inmediatamente a las horas del país al que uno llega. No duerma hasta que llegue la noche.

    Planes. El departamento de salud ocupacional de una empresa tiene que elaborar planes para ejecutivos que viajan.

    Lea también:

    El especialista: Ejecutivos que se desvelan por su empresa

  • En las crisis se buscan ejecutivos ‘maduros’

    María Paz infante. El Mercurio de Chile / Grupo de Diarios América (GDA)

    Experiencia y potencial. Esas son las dos características que hacen que las gerencias generales y de área serán lideradas por personas de mediana edad. Entre los 45 y 55 años de edad se han concentrado las búsquedas para este tipo de cargos y en períodos de desaceleración, como ahora, esta tendencia se acentúa más.

    Estos profesionales tienen la experiencia necesaria para llevar el negocio, pero también cuentan con la potencia y vitalidad que requieren para el liderazgo que demanda su cargo.

    En este sentido, «gente de 45 y 55 años son los que más aportan», según Alfonso Mujica, gerente para Latinoamérica de Spencer Stuart, y dice que es la edad precisa preferida para las búsquedas de altos ejecutivos. Eso, porque aquellos que tienen menos de 45 años tienen mucho potencial aunque poca experiencia, y los más de 55 años poseen mucha carrera laboral, pero carecen de potencial.

    Alejandra Aranda, socia de la firma Humanistas, concuerda con Mujica y señala que la «experiencia tiene mucho valor hace un buen rato en cargos altos».

    En época de crisis o de menor crecimiento, este perfil etario es el más buscado por las empresas, porque la experiencia ayuda a racionalizar y a eficientizar los procesos y costos.

    María Soledad Mosquera, sénior asosociate de Insigni, indica que en tiempos de desaceleración se necesitan personas proactivas, innovadoras, comprometidas, que tengan gran tolerancia a la frustración y sean, por sobre todo, flexibles.

    Estas características, por si es que resulta necesario que asuman responsabilidades adicionales a sus funciones, lo hagan con agrado y disposición.

    «Los ejecutivos de más edad tienen la experiencia y la capacidad de administrar de mejor manera los conflictos habituales que se presentan ante cualquier reducción de costos», afirman desde la organización Pleasant Work Chile. Y recalcan que este segmento de ejecutivos, a diferencia de los jóvenes, «no son tan inestables ni buscan la comodidad de los ambientes sin conflictos, puesto que tienen las habilidades y la experiencia para manejarse mejor políticamente».

    Danilo Rojic, socio de la firma People & Partners, explica que en «tiempos de crisis tienden a contratar a ejecutivos mayores, porque tienen más ‘seniority’, más experiencia, más guerra en el cuerpo, son personas que han vivido más procesos de reestructuración».

    Y agrega que se opta menos por los jóvenes para cargos altos, porque tienen un perfil más orientado a la acción. Rojic argumenta que actualmente las empresas no están activas ya que se hallan concentradas en eficientar más los procesos y no tanto de crecer y desarrollarse.

    Según cifras que maneja People & Partners, el promedio de edad de ejecutivos que están en programas de outplacement es de 47 años, lo que reafirma que en cargos ejecutivos, la oferta que existe va en esa dirección. Además, el expertise en el liderazgo de este grupo de gerentes los hace ser más eficientes a la hora de llevar a sus equipos.

    Carolina Hormann, career coach de la organización Lee Hecht Harrison, indica que en momentos restrictivos o de desaceleración como los actuales, se necesitan ejecutivos que combinen bien la autoridad con el liderazgo. También, que sepan marcar el rumbo, tengan firmeza y puedan movilizar a la gente, logrando sacar lo mejor de cada persona.

    Pero no todos los sectores demandan el mismo perfil de experiencia. Minería y también el sector industrial requieren de ejecutivos que muchas veces son incluso mayores de 55 años, producto de que es un rubro donde la experiencia es ‘crucial’. Alejandra Aranda asegura que «la experiencia vale oro, particularmente en el sector industrial» y comenta que, «de hecho, en minería hay muchos gerentes generales de 60 años».

    Ricardo León, gerente de Downing Teal, firma especializada en minería, señala que en la industria pesada, una persona a los 50 es joven aún y que no es para nada inusual que en las empresas del rubro contraten a personas de 60 años.

    Si bien los cargos de gerentes generales y de primera línea han estado cargados hacia personas mayores, en los puestos medios son los más jóvenes quienes están llevando la delantera.

    Karina Pérez, de Robert Half Chile, dice que en el caso de jefaturas o subgerencias, las empresas que han contratado un cargo nuevo o hacer un recambio han optado por un perfil más júnior para abaratar el costo. «En vez de buscar entre 40 y 50, buscan entre 32 y 40», dice.

    Perspectivas 2015

    En Chile. Los empresarios chilenos esperan que el desempeño de sus negocios no tenga mayores cambios, ni positivos o negativos el próximo año. Por ellos, los planes de inversión serían por montos bajos y mayormente enfocados a la reposición de capital, según reveló el Informe de Percepción de Negocios elaborado por el Banco Central.

    El mercado. En el mercado laboral, los empresarios entrevistados siguen dando cuenta, en gran parte de las regiones, de una menor dificultad para contratar. Asimismo, señalan que no se han producido ajustes de personal significativos en el tercer trimestre, como sí los hubo en el trimestre previo.

    El especialista

    Arturo Castillo. Motivador y prof. de técnicas psicorrelajantes

    Recurrentemente, se especula acerca de la edad ideal para el ejercicio del liderazgo y la asunción de ciertas responsabilidades empresariales. Se habla del ímpetu y determinación de la juventud, de la objetividad y tacto de la madurez. Sin embargo, ninguna organización privilegiaría en su plantilla de colaboradores exclusivamente a gente joven o a gente ‘entrada en años’. Lo coherente es conformar un equipo mixto, con mayor tendencia hacia trabajadores jóvenes, de modo que se asegure el futuro de la compañía.

    Obviamente, el desarrollo de las empresas no es lineal; siempre habrá transiciones, etapas de expansión y contracción, tiempos de bonanza y tiempos de incertidumbre. Y cada una de esas coyunturas necesita ser asumida con estrategias específicas. Por ejemplo, quizás lo indicado sea poner al frente de los momentos críticos a profesionales maduros, que han librado algunas batallas, que no tienen temor de enfrentar eventuales fracasos, que son capaces de manejar las frustraciones sin darse a la fuga, sin anteponer pretextos.

    De todas formas, en medio de la prudencia y acciones calculadas, la intrepidez de los jóvenes ejecutivos constituirá la combinación perfecta. Cabeza y corazón, prudencia y osadía, planificación y espontaneidad, son dualidades complementarias que toda empresa debe administrar.

    A propósito de la madurez profesional, habría que preguntarse si esta tiene, por fuerza, relación directa con la edad cronológica de los sujetos. En realidad, se trata de algo relativo, pues son, en última instancia, las experiencias vividas, de la más variada índole, las que modulan el carácter y permiten construirse un concepto de sí mismo y del mundo.

    En tal sentido, llegar a cierta edad no implica haber completado procesos vitales, anímicos y psicológicos, propios del desarrollo humano. Si el individuo no ha tomado decisiones coherente, si no ha elegido conscientemente el tipo de experiencias que quería vivir, muy probablemente carecerá de un eje personal y su carácter será inestable.

    De todas formas, la convicción generalizada es que la madurez profesional solo se consolida con el curso de los años; de ahí que algunas empresas opten por contratar a sujetos que han superado sus cincuentas para que tomen el timón de la organización en tiempos borrascosos.