Etiqueta: energía solar

  • Esta iniciativa crece usando la energía solar

    Mayra Pacheco

    (I) 
    redaccion@revistalideres.ec

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    Las alertas que han emitido organismos internacionales sobre el calentamiento global impulsaron a Juan José Del Valle a trabajar en la generación de energía limpia. Su fin es aportar en la mitigación de este fenómeno.

    Para lograr este propósito, Del Valle constituyó a inicios de este año la empresa J3M Global, en Quito. Inicialmente invirtió alrededor de USD 110 000.

    Su experiencia en este ámbito, desde el 2007, le permite ofrecer el servicio de asesoramiento, venta, instalación y mantenimiento de paneles fotovoltaicos (solares).

    Estas estructuras, que son parecidas a unas planchas de color azul oscuro con unas ranuras en la superficie, aprovechan la irradiación solar para generar energía eléctrica para el consumo de viviendas o industrias.

    Para explicar las bondades de este sistema de generación, Del Valle, gerente general de J3M Global, trabaja de manera directa con los interesados y les asesora, debido a que este tipo de tecnología aún no es tan conocida en el país. “Ecuador tiene un recurso solar fabuloso, son 12 horas de sol disponibles al día”.

    Para sacar ventaja de estas condiciones, J3M Global sugiere optar por este tipo de infraestructuras cuando el consumo de la planilla de luz supera los USD 30 mensuales, porque al contar con los paneles solares se reducirá el costo de la factura de este servicio.

    Sin embargo, para contar con este sistema se debe hacer una inversión importante. El monto dependerá de las necesidades de cada cliente. Hay instalaciones, por ejemplo, que cuestan a partir de USD 4 000 con todos los equipos incluidos. Pero resultan rentables, porque se recupera lo invertido en el mediano plazo.

    Los insumos que se emplean para estas instalaciones son importados en un 60% y el 40% proviene de la industria local.

    Los paneles y otras piezas se traen desde China, Estados Unidos, España, Austria. Pero además se utiliza una estructura especial para colocar estos equipos; esta se adquiere en empresas locales.

    Francisco Beckmann, gerente de Soltec, comenta que desde hace seis meses elaboran estructuras de aluminio y acero inoxidable para colocar sobre estos los paneles que trae J3M Global. También hacen las instalaciones. “Hemos hecho ya tres proyectos”.

    La colocación de estos equipos puede tomar días o semanas, según la magnitud del proyecto. Su vida útil alcanza los 35 años.

    Actualmente, esta firma tiene 25 clientes, entre viviendas, instituciones educativas, industrias y otras. Estos tenían una facturación mensual de energía que supera los USD 100.

    Al instalar estos equipos, los usuarios han evidenciado un ahorro de hasta el 80% en la planilla del servicio de luz.

    Javier Cárdenas da fe de este beneficio. Tras la instalación de paneles solares en su casa en Puembo, ahora compra un 20% o 30% de la empresa eléctrica, el resto lo cubre con energía fotovoltaica.

    Para colocar esta infraestructura se requiere de espacios abiertos, en donde no se produzca sombra. Entre las opciones están la terraza o una parte del patio.

    La instalación se puede hacer en edificaciones que ya están construidas o en proyectos nuevos. Para esto J3M Global cuenta con un equipo de 53 personas.

    La meta de facturación para este año asciende a USD 300 000.

    La normativa

    La Agencia de Regulación y Control de Electricidad aprobó en octubre pasado una norma para viabilizar la micro generación con radiación solar.

    Esta permite que los clientes que tengan un alto consumo de energía eléctrica instalen micro centrales de generación solar de hasta 500 kilovatios (kW).

    Los interesados en colocar este tipo de paneles deben realizar un estudio para determinar la demanda del servicio y en función de eso construir una micro central de generación fotovoltaica (solar).

    Juan José Del Valle muestra los paneles solares que se colocan en espacios abiertos, sin sombra. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
    Juan José Del Valle muestra los paneles solares que se colocan en espacios abiertos, sin sombra. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
  • En la Amazonía hay nuevos expertos en energía solar

    Redacción Quito

    (F)
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    Desde de septiembre, las comunidades achuar cuentan con ocho nuevos técnicos solares, personas que aprendieron sobre electricidad, sistemas fotovoltaicos, seguridad eléctrica, lectura e interpretación de datos de generación y almacenamiento de energía.

    La capacitación integral se realizó gracias a un convenio de cooperación entre el proyecto Kara Solar y Alianza Ceibo, una organización que agrupa a cuatro nacionalidades: Siekopai, Siona, Cofán y Waorani y que tiene experiencia formando a técnicos indígenas que han instalado más de 100 sistemas solares, en el norte de la Amazonía ecuatoriana.

    Oliver Utne, coordinador de Kara Solar, cuenta que esta capacitación es el inicio de un proceso de preparación de técnicos achuar. “Las personas capacitadas van a seguir acompañando a los compañeros de Alianza Ceibo, en viajes de revisión y mantenimiento de los sistemas solares. La idea es que adquieran experiencia y conocimientos sobre sistemas solares”.

    Otro de los fines de este trabajo de cooperación es que los nuevos técnicos creen las condiciones necesarias para la sostenibilidad de los proyectos que Kara Solar está desarrollando en el territorio achuar. La idea -dice Utne- es que los achuar se queden totalmente a cargo del mantenimiento, los arreglos técnicos y el diseño de las futuras instalaciones.

    Una de estas últimas es el Centro Solar Comunitario, que se está construyendo en territorio achuar: un espacio que va a permitir la recarga, desde tierra, de los dos botes solares que ya navegan por los ríos de la Amazonía.

    La primera embarcación, con capacidad para 20 personas, empezó a funcionar en junio del 2017. La segunda barca tiene capacidad para 14 personas y, al igual que la primera, recorre tres rutas que sirven a nueve comunidades a lo largo de 67 kilómetros de los ríos Pastaza y Capahuari.

    Los botes funcionan con 32 paneles solares colocados en el techo. Estos captan la luz del día y la transforman en electricidad, que es almacenada en las baterías. Estas están conectadas a dos motores eléctricos, que son controlados por el conductor en el volante. Una de las particularidades de estas barcas es que combinan la sabiduría ancestral con los avances tecnológicos, algo que se puede apreciar en el diseño, donde se utilizó el modelo de la tradicional canoa amazónica.

    Josué Enríquez, coordinador técnico de Kara Solar, explica que las capacitaciones están pensadas para, en un mediano plazo, dar autonomía a las comunidades achuar para que ellas manejen la energía solar. Estas capacitaciones tendrán cuatro fases. La última terminará en febrero del 2020.

    La segunda comenzará a mediados de octubre. En esta fase, los técnicos achuar van a acompañar a los técnicos de las comunidades de Alianza Ceibo a monitorear los 120 sistemas de paneles solares que se han implementado en casas del norte de la Amazonía.

    La fase tres estará enfocada en la movilidad fluvial eléctrica. Por primera vez los integrantes de las comunidades achuar van a instalar los equipos de una barca eléctrica, algo que para Enríquez será un hito para la región.

    El proyecto cuenta con dos barcas solares que navegan por los ríos de la Amazonía. Se evitan emisiones de combustibles fósiles en la zona. Foto: cortesía Kara Sola
    El proyecto cuenta con dos barcas solares que navegan por los ríos de la Amazonía. Se evitan emisiones de combustibles fósiles en la zona. Foto: cortesía Kara Sola
  • La energía solar impulsa sus productos

    Giovanni Astudillo (I) Editor redaccion@revistalideres.ec

    La empresa lojana Ingeniería Verde se especializa en soluciones tecnológicas vinculadas con la energía renovable. Sus más recientes proyectos son la iluminación de dos urbanizaciones privadas de Montecristi y Puerto Cayo, en Manabí. Allí se instalaron 60 luminarias que se alimentan de energía solar y faltan otras 40.

    “Pese al terremoto (pasado 16 de abril), estas luminarias siguieron funcionando, porque no están conectadas a la red eléctrica… Allí, nos damos cuenta sobre la importancia de esta tecnología”, señala el socio de la empresa, David Aguirre. Cada una cuesta entre USD 1 000 y 2 500, dependiendo de la altura y el área iluminada.

    Ingeniería Verde fue creada en el 2010 por los emprendedores Cristian León, Ángel Ordóñez y David Aguirre, quienes fueron compañeros en la carrera de Ingeniería de Electrónica en la Universidad Técnica Particular de Loja. El otro socio es el ingeniero comercial, Leonel Vázquez, quien es una suerte de mentor y tiene experiencia con otras empresas.

    Vázquez asesoró en cómo reinvertir los ingresos, porque al inicio no se deben buscar ganancias sino una consolidación del proyecto. Desde entonces realizaron aportaciones mensuales, que se mantienen hasta la actualidad. Su objetivo es tener recursos para tecnología, publicidad o cualquier emergencia. Al inicio fueron USD 25 al mes y, en la actualidad, son 75.

    El objetivo de crear la empresa, dice Aguirre, fue mejorar la calidad de vida de las personas y contribuir al buen uso de la tecnología y el ambiente. “Estábamos conscientes que los primeros 24 meses no existirían ganancias y si habían debían ser reinvertidas para tener unas buenas bases”.

    En el 2011, esta empresa se vinculó al Centro de Emprendimiento Prendho de la Universidad Técnica Particular de Loja y recibió el apoyo de infraestructura, equipamiento e Internet, cuenta Aguirre. Además, fueron asesorados en los ámbitos técnico y administrativo, modelo de negocios, acercamiento con instituciones públicas y entidades financieras. “Prendho fue fundamental para surgir y ser una empresa”.

    Ingeniería Verde salió de las instalaciones de Prendho hace más de un mes y ahora tiene una oficina en la capital lojana. A más de las luminarias oferta paradas de buses, mobiliario urbano y sistemas de energía renovable para viviendas, hoteles y hosterías.

    “Son soluciones que crean armonía entre la tecnología, naturaleza y el ser humano”. Antes, también realizaban proyectos de domótica, pero este negocio se frenó por la competencia.
    Según Aguirre, todos sus productos generan energía limpia, que se utiliza inteligentemente. Es el caso de las paradas de buses, que tienen paneles solares que alimentan a la iluminación LED, que se prenden automáticamente en las noches, y a los conectores para cargar teléfonos móviles, computadoras, etcétera.

    Estas paradas también cuentan con una pantalla que indica las rutas de los buses y se pueden agregar el servicio de Internet, wifi y publicidad, “para que los gobiernos seccionales puedan recibir beneficios económicos”.En Loja, concretamente en la calle Mercadillo y avenida Universitaria, se instaló una parada prototipo que está a prueba de funcionamiento.

    Desde su creación, Ingeniería Verde ha instalado más de 80 proyectos o soluciones en Loja, Azuay, Manabí y Pichincha. Según Aguirre, la mayoría de sus clientes es extranjero porque valora esa tecnología y la considera una inversión. También, han tenido proyectos con los municipios de Quito y Loja.

    Robin Ruiz instaló hace un año un sistema en su vivienda en la parroquia lojana de Malacatos. “Mi casa está en una montaña y fue más fácil y económico, que llevar un red eléctrica convencional”. Invirtió USD 8 000 en el sistema y le sirve para conectar electrodomésticos, computadora e iluminar siete focos.

    Esta firma prevé facturar entre USD 20 000 y 30 000 al mes en el 2016, para seguir creciendo con respecto a años anteriores. En el 2014, por ejemplo, la facturación alcanzó los USD 150 000. Aguirre quiere ampliar su trabajo en Manabí, Quito, Ibarra y Riobamba.

    Ingeniería Verde

    Esta firma lojana oferta luminarias, sistemas para viviendas, paradas de buses…

    Oferta y demanda

    Los clientes. Los extranjeros, dice el empresario David Aguirre, buscan soluciones de energía renovable porque son independientes de las redes públicas y para colaborar con el ambiente.

    La opción. Ingeniería Verde ofrece paneles solares para viviendas, urbanizaciones, hosterías… El kit económico cuesta USD 499 y tiene paneles, baterías y otros equipos para alimentar a cuatro focos, dispositivos electrónicos como tablets y celulares.

    Otras ofertas. La opción más costosa asciende a USD 50 000 y sirve para dotar de energía a bombas de agua, grandes refrigeradores, hornos, aire acondicionado… También, hay sistemas de calentamiento de agua.

    Los emprendedores Ángel Ordóñez, Cristian León y  David Aguirre durante la Feria Internacional de Loja, que se realizó en septiembre del 2015. Foto: Cortesía de Ingeniería Verde
    Los emprendedores Ángel Ordóñez, Cristian León y David Aguirre durante la Feria Internacional de Loja, que se realizó en septiembre del 2015. Foto: Cortesía de Ingeniería Verde
  • Fuentes alternativas, una respuesta energética para Bolivia

    Agencia EFE

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    La Paz

    La empresa alemana Deea Solutions GmbH ganó la adjudicación para el diseño de una planta de energía solar que se instalará en la región boliviana de Oruro (oeste), informó este 12 de febrero el ministro de Hidrocarburos y Energía, Luis Alberto Sánchez.

    La firma hará el estudio en un periodo de seis meses, entre marzo y agosto de este año, con una inversión de USD 250.000, explicó Sánchez, según un comunicado de su oficina.

    «El estudio determinará la ubicación exacta de la planta solar. Se estima que se instalen los paneles solares en una superficie de 35 a 40 hectáreas y el costo para la construcción es de USD 45 millones, aproximadamente», señaló el ministro.

    Añadió que la planta tendrá una capacidad de generación de 20 megavatios que irán al Sistema Interconectado Nacional (SIN). La de Oruro será la segunda generadora de energía solar que tendrá Bolivia, pues desde septiembre pasado opera en la región norteña de Pando, en la frontera con Brasil y Perú, una planta instalada por la empresa española Isotron, del grupo Isastur.

    Sánchez resaltó que aquella planta genera cinco megavatios y por ahora «ha dado buenos resultados». El Ministerio de Hidrocarburos y Energía destacó que el impacto de las plantas solares en el medio ambiente es «mínimo», puesto que estas industrias no emiten ninguna sustancia tóxica, ni gases contaminantes del aire, agua o suelo.

    «La operación de un sistema fotovoltaico es barata y el sistema requiere de un bajo mantenimiento en comparación a otras plantas», agregó la institución. Bolivia está empeñada en cambiar su matriz energética, que en la actualidad se sustenta en la generación termoeléctrica en un 65 %.

    Las autoridades han señalado varias veces que el objetivo es que para el bicentenario de la fundación del país, el 70 % de la generación de energía sea hidroeléctrica o provenga de otras fuentes alternativas como la eólica y la solar, y que el 30 % restante sea termoeléctrica.

    paneles solares
    Bolivia busca mejorar su producción energética apostando por las fuentes alternativas, como la energía solar. Foto referencial: Archivo/EL COMERCIO