Etiqueta: exportadora

  • Desde el cacao hasta las barras

    Patricia González

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    Perla Organic, sin planificarlo, nació en la hacienda Agua y Tierra, en Manabí, hace cerca de ocho años. En esa época el papá de Carol Marcial comenzó con la producción de cacao fino de aroma en la plantación familiar.

    Por mucho tiempo, Fabián Marcial vendió la materia prima de la tierra a intermedios. El negocio, para su hija, era desventajoso y poco rentable. Ella, como estudiante de finanzas y administración de empresas en la Universidad San Francisco de Quito (USFQ), enfocó su trabajo de grado en el desarrollo de un proyecto de emprendimiento sobre la producción de chocolate. Esa fue la génesis de la exportadora Perla Organic.

    La joven, hoy de 28 años, egresó en 2015 de la Universidad. A sus dos carreras se sumaron un minor en publicidad y un curso de chocolatería, que le permitió comprender mejor todo el proceso que conlleva la elaboración de este dulce producto.

    En 2016, sin perder tiempo, cumplió con todos los pasos para convertir su proyecto de emprendimiento en una realidad. Con una inversión de USD 500 000 –producto de un préstamo familiar– instaló la fábrica de chocolates en el norte de Quito, desarrolló la marca y, en Manabí, se impulsó a la plantación cacaotera de 20 hectáreas dentro de Agua y Tierra.

    Los productos de la marca de chocolate cuentan con certificaciones orgánicas de EE.UU., la Unión Europea y la Unión Ortodoxa. Foto: Julio Estrella / LÍDERES
    Los productos de la marca de chocolate cuentan con certificaciones orgánicas de EE.UU., la Unión Europea y la Unión Ortodoxa. Foto: Julio Estrella / LÍDERES

    Con el norte en la exportación, durante ese año Carol gestionó las certificaciones necesarias que avalaran su producto como orgánico en EE.UU., Europa y ante la Unión Ortodoxa; así como la certificación de BPM (Buenas Prácticas de Manufactura).

    Perla Organic salió oficialmente al mercado en enero del 2017. Y en 16 meses el crecimiento ha sido vertiginoso. El pasado año cerró con una facturación de más de USD 200 000, de los cuales el 40% corresponden a las ventas en mercados internacionales.

    La marca cuenta con un portafolio de 40 variedades de chocolate. Las barras son su producto emblemático. En esta categoría ofrece aquellas gourmet, que tienen sabores como licor de canela, ají y mango o jengibre y piña; las barras plain, en las que varía el porcentaje de cacao; y las raw, en las que la temperatura se mantuvo en 45 grados centígrados durante todo el proceso de producción, conservando mejor las propiedades del grano.

    También están las barras para chocolate de taza, con sabores de café y uvilla. En otras variedades del producto, la marca ofrece frutas deshidratadas cubiertas de chocolate, nibs de cacao en trozos, pasta de cacao y la línea de repostería en la que vende coberturas de chocolate a granel.

    La empresa trabaja con 15 proveedores, principalmente para los ingredientes adicionales de cada producto, el empaque y la presentación. La firma Espin Graf trabaja desde el inicio con Perla Organic en el diseño de los empaques de la marca, tanto de las barras como de los otros productos . Un elemento diferenciador en la envoltura de los chocolates es que incluye un nib de cacao, con el fin de que los clientes conozcan el origen.

    Perla Organic cuenta con un portafolio de 50 clientes. En Ecuador se puede encontrar en locales de las cadenas Fybeca y El Español. También en la tienda de delicatessen El Griego, localizada en el centro comercial Quicentro Shopping en Quito y en locales productos turísticos.

    Carol Marcial, gerente de la empresa Perla Organic que produce y exporta chocolate. Foto. Julio Estrella / LÍDERES
    Carol Marcial, gerente de la empresa Perla Organic que produce y exporta chocolate. Foto. Julio Estrella / LÍDERES

    Entre sus clientes locales está Galería La Cuchara, en el Centro Histórico. Ibeth Arias, gerente del lugar, destaca la calidad del producto en cuanto a su aroma y sabor, así como también el manejo de relaciones comerciales de la marca. “Es un producto exclusivo que sale de lo convencional”, añade. La galería adquiere cerca de 300 unidades de chocolate al mes.

    La agencia Metropolitan Touringe es otro de sus cliente. Alessandra Baautista, ejecutiva de promoción y publicidad, resalta los sabores originales de sus barras de chocolate, que no se hallan en el mercado. Esta empresa entrega el producto como regalo a clientes en el exterior.

    En el mercado internacional, la marca se comercializa en EE.UU., China, Francia, Ucrania, Suiza, España y Holanda. Además en 2017 participó en siete ferias en el exterior. Marcial considera que lo más difícil hasta ahora ha sido precisamente entrar al mercado y que haya recompra del cliente, por la alta competencia.

    Sin embargo, destaca que una fortaleza de la marca y que le distingue de otros productos del mercado es que cuenta con toda la cadena de producción, con lo que da garantía al cliente de la trazabilidad del producto.

    La firma Perla Organic tiene su fábrica de producción en el norte de Quito. Allí laboran seis trabajadores. Al mes produce ocho toneladas. Foto: Julio Estrella / LÍDERES
    La firma Perla Organic tiene su fábrica de producción en el norte de Quito. Allí laboran seis trabajadores. Al mes produce ocho toneladas. Foto: Julio Estrella / LÍDERES
  • La exportadora que emite acciones

    Pedro Maldonado

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    La exportación de langostinos y mariscos y la incursión en el mercado de valores marcan la trayectoria de Natluk. Esta empresa familiar nació en el 2010, con la idea de producir carnada para venderla a los botes atuneros. Pero la idea inicial fue evolucionando.

    Los hermanos Verónica y Álex Dahik, fundadores de la firma, revisaron el panorama y pensaron que la alternativa más acertada era arrancar con la exportación de langostino, recurso que aportaba la Costa ecuatoriana, en Guayas, y que consideraron podía ser más rentable.

    “Eso nos permitiría trabajar con la comunidad y empezar a desarrollar relaciones, porque tienes las cooperativas pesqueras, la gente del lugar a quien dar un trabajo estable y crear una cadena comercial sostenible”, señala la gerente, Verónica Dahik.

    Arrancaron desde cero: buscaron crédito, revisaron las capacidades, los equipos. Poco a poco elaboraron un portafolio: hoy la empresa realiza ventas al exterior de ciertas especies de langostino y camarón, que incluyen el jumbo, tanto artesanal como industrial, y la variedad pomada.

    En un principio, Natluk exportaba un contenedor al mes y trabajaba con dos clientes. En la actualidad vende el producto a 12 clientes en el exterior y maneja cinco marcas.“Decidimos ver los factores claros del éxito: tener el capital, atender bien a los clientes, enseñarle a nuestra gente a trabajar adecuadamente porque al ser un producto de valor agregado se compite a través de la calidad”.

    Marcos González es uno de los proveedores de la compañía. Él trabaja y vive en Playas desde hace cuatro años, el mismo tiempo que tiene trabajando con los hermanos Dahik. Semanalmente les entrega una carga de 2 000 libras de camarón, a precios que oscilan entre USD 4,70 y USD 11,80 dependiendo de la especie, de la más pequeña a la más grande. “La experiencia con Natluk ha sido buena, nos ayudan y nos dan facilidades”.

    Con el tiempo, el langostino se convirtió en el producto estrella de la compañía. En el 2017 representó 70% de las ventas, con 550 toneladas exportadas en 60 contenedores.
    En el caso del camarón pomada las ventas alcanzaron los 30 contenedores y la proyección es subir la cifra a 70 para este año. “Para mantener nuestra línea de valor agregado tenemos preparados programas de empaques para ‘retails’ y cocidos”, agrega.

    Para consolidar su crecimiento, la empresas ingresó al mercado de valores en noviembre del año pasado. Natluk ha desarrollado un “paso diferente”, dice Dahik que con el objetivo de garantizar la sostenibilidad para las próximas generaciones. La compañía puso a la venta el 40% de su capital accionario; la familia se queda con el 60% restante.

    La oferta de 800 000 acciones fue autorizada por la Superintendencia de Compañías, Valores y Seguros, mediante una resolución del 29 de noviembre del 2017. La emisión tiene una calificación de AA por parte de la Calificadora Su­mmaRatings SA y la casa de valores que maneja el portafolio es Casa Real.

    Trabajadores de Natluk descargan el camarón que les entregan  los proveedores. La planta se encuentra ubicada en Guayas. Foto: Enrique Pesantes / LÍDERES
    Trabajadores de Natluk descargan el camarón que les entregan los proveedores. La planta se encuentra ubicada en Guayas. Foto: Enrique Pesantes / LÍDERES

    El precio de la acción es de USD 6,60 y el paquete mínimo es de 100 acciones. La rentabilidad es de 8,5% anual, según un comunicado. Dahik dice que ya se cuentan cinco accionistas. “La idea nace como una forma estratégica de unirnos con nuestros proveedores; incluso tenemos planes de financiamiento para los trabajadores para que adquieran las acciones. De esta manera, generas un sentido de pertenencia”.

    La empresaria agrega que la intención es que compren acciones ciertos clientes estratégicos internacionales que garanticen parte de la producción. “Hemos buscado maneras de diferenciarnos”.

    Dahik proyecta el crecimiento de la empresa en 60% para este 2018, luego de que el año pasado la empresa facturara USD 9,4 millones. “En langostino no creemos que crezca, se va a mantener. El incremento va a ser en pomada”, asegura la gerente de esta joven compañía exportadora.

    En camarón la empresa proyecta un crecimiento de 40% para el 2019. Para ello, Natluk invertirá en infraestructura y en la contratación de más personal. Actualmente cuenta con 96 trabajadores, de los cuales 85% son mujeres. Espera contratar unas 15 personas más para la ampliación de la planta de acuicultura. La calidad y el servicio -dice- es parte de la estrategia para seguir compitiendo en el mundo.

    Las cifras

    550 toneladas de langostino exportó en 2017.
    70  contenedores  de camarón pomada estima comercializar en el extranjero en el 2018.
    60% de crecimiento proyecta la empresa para este año.
    6,60  dólares cuesta cada acción colocada. El paquete mínimo de acciones, asegura la gerencia, es de 100.
    2 000 libras de camarón recibe Natluk cada semana, de uno de susproveedores en Playas.

    La gerente

    Verónica Dahik
    Como parte de los proyectos de responsabilidad social con lo pescadores artesanales y las cooperativas pesqueras, la firma busca la certificación de FairTrade (Comercio Justo). Les retribuimos a las comunidades lo que ellos nos entregan en mejora de infraestructura, útiles escolares. Hoy en día la empresa cuenta con certificaciones como HACCP / APPCC y BRC Global Standard for Food Safety, y la licencia Ecuador ama la vida.

    Verónica Dahik lidera, junto con su hermano Álex, la compañía familiar que se abrió a la Bolsa de Valores. Exporta a tres continentes. Foto: Enrique Pesantes / LÍDERES
    Verónica Dahik lidera, junto con su hermano Álex, la compañía familiar que se abrió a la Bolsa de Valores. Exporta a tres continentes. Foto: Enrique Pesantes / LÍDERES