Sebastián Angulo / Redacción Quito
Hacer deporte con sus ex compañeros de colegio fue el pretexto para iniciar su emprendimiento. Cada año, Ernesto Hidalgo, hoy de 27 años de edad, se reúne con sus amigos del colegio jesuita Francisco Javier de Guayaquil para recordar viejos tiempos y jugar tenis y fútbol.
A inicios del 2011, para darle un ingrediente adicional a los encuentros, Hidalgo quería hacer apuestas. Buscó un sitio en Internet, pero no encontró un portal especializado que permita apuestas de todo tipo. Allí Hidalgo vio una oportunidad de negocio. ¿Quién ganará las próximas elecciones en Ecuador? ¿Quiénes serán los ganadores de la edición de este año de los premios Oscar? O los planteamientos que el usuario desee, puedan dar pie a una apuesta en línea, pensaba Hidalgo.
Para concretar su iniciativa necesitaba aliados. Por ello, a mediados del 2011 publicó anuncios en Internet para programadores y personas expertas en negocios web. Recibió respuesta de Andrés Granda, Luis Bajaña y Marcos Silva, fundadores de Club 40, una aplicación que permite jugar en línea el tradicional juego de naipes 40. Su aplicación es popular en Facebook ( hasta la semana pasada sumaba 34 352 likes).
Luis Bajaña señala que cuando conversaron con Hidalgo se interesaron inmediatamente en su propuesta y se convirtieron en sus socios. “Nosotros también somos emprendedores, nos gustaron sus ideas y entusiasmo, por eso nos asociamos”. Así nació Betmul, un sitio de apuestas en línea.
Los cuatro pulieron la idea, realizaron estudios de mercado y aprendieron sobre el panorama regulatorio, societario y transaccional de apuestas en línea, para que el negocio fuera viable y seguro.
Debido al Decreto Ejecutivo 873, que entró en vigencia el 17 de marzo del año pasado, que prohíbe establecimientos dedicados a los juegos de azar, como los casinos, casas de apuestas, salas de juegos, entre otros, los socios decidieron que la sede de Betmul sea en Costa Rica.
Con estas ideas, el equipo desarrolló un plan de negocios y estructuró la empresa. Así, a mediados del año pasado llegó a la red Betmul.com, una página web en la que se puede apostar sobre cualquier tema.
Las apuestas no son solo económicas; también se pueden apostar cualquier bien tangible. Además cuenta con la opción de crear apuestas públicas para todos los usuarios de la página o para grupos específicos. Hasta la fecha, Betmul ha alojado unas 1 200 apuestas y desde hace dos meses, permite apuestas con dinero real. Los jugadores están en México, Argentina, Chile, Uruguay, Portugal, Italia…
Pero esta historia se remonta hace 12 años atrás. Cuando el artífice de Betmul, Ernesto Hidalgo, mostraba aptitudes para la arquitectura debido a la influencia de la constructora de su padre, Hidalgo Cía. Limitada.
Su hermano, Xavier Hidalgo, comenta que Ernesto tenía “espíritu de emprendedor y de ser hombre de negocios. Parecía que su futuro era la arquitectura porque construyó una ciudad de cartón en su habitación cuando era niño; pero también siempre demostró aptitudes para ser un hombre de empresas”.
A los 15 años de edad, Hidalgo empezó su primer negocio que estaba relacionado con Internet; se dedicó a la creación y venta de dominios de páginas web. En esa época, cobraba por la suscripción anual USD 35. Uno de sus clientes fue el Banco Territorial. Este proyecto duró hasta que se graduó de la secundaria, en el 2003.
Su inclinación por el emprendimiento le llevó a estudiar Negocios y Administración en la Universidad de Carolina del Norte, en Chapel Hill, EE.UU. En el 2007, luego de graduarse viajó en autobús por toda Latinoamérica junto a un ex compañero universitario. Su hermano Xavier comenta que regresó con una nueva mentalidad y decidido a desarrollar sus propios emprendimientos.
Luego de la aventura, este aficionado a textos de marketing e Internet se incorporó a la Sociedad Financiera Interamericana como analista financiero.
Tres años después, dejó a un lado las actividades laborales y viajó nuevamente a EE.UU. a cursar el Programa de Competitividad Global y Liderazgo, en la Universidad de Georgetown.
Cuando regresó al país llegó el tiempo de trabajar en la empresa familiar. A finales del 2010 se incorporó a Hidalgo Cía. Ltda., en donde le asignaron ser jefe Financiero de Cerropark (Aquaplay), un parque acuático ubicado en el kilómetro 12 de la vía a la Costa; este es un proyecto de la constructora.
Sin embargo, su deseo de emprender pesó más. Cuando surgió la idea de Betmul decidió dejarlo todo. Al enterarse que en el mercado de apuestas en línea se mueve USD 35 000 millones al año, a escala mundial, pensó que existen “grandes oportunidades en esta modalidad”; incluso vendió su automóvil para tener capital y emprender.
Para encontrar inversionistas, este lector de libros de marketing e internet decidió presentar a Betmul a un concurso que realiza la aceleradora de negocios española Business Buster. Entre los 400 concursantes, la idea del ecuatoriano resultó ganadora. Por ello, Hidalgo actualmente está radicado en Valencia, España, para trabajar en la consolidación de la marca con el objetivo de captar un mayor número de usuarios.
A Ralph Suástegui, su compañero en el diplomado de Gobernabilidad, que realizó en el 2011, no le sorprende que Betmul haya ganado reconocimiento en el mercado internacional. “Ernesto es un emprendedor nato, siempre aportaba con ideas interesantes cuando estábamos en clase”.
Experiencia en el mundo empresarial
- En el 2008. Analista Financiero en la Sociedad Financiera Interamericana. Dos años después fue director del programa Scholasticus, emprendimiento que buscaba entregar oportunidades de pasantías y voluntariado para extranjeros en Guayaquil.
- En el 2010. Fue director Financiero de Cerropark (Aquaplay), proyecto de la Constructora Hidalgo Cía. Ltda.
SU PASO POR LA ACADEMIA
- 2009. Se graduó como Bachelor en Negocios y Administración, en la Universidad de Carolina del Norte, en Chapel Hill.
- 2011. Obtuvo el diplomado en Gobernabilidad y Liderazgo, en IDE Business School, en Guayaquil .
