Etiqueta: hogares

  • Más de 40 millones de hogares de América Latina y el Caribe no tienen acceso a Internet, según Cepal

    Redacción Líderes

    América Latina y el Caribe debe avanzar con urgencia en inclusión y transformación digital, sobre la base de la integración regional y la cooperación internacional, para enfrentar la crisis derivada de la pandemia del covid-19. Este fue un planteamiento de autoridades este lunes 23 de noviembre del 2020, en la ceremonia de inauguración de la VII Conferencia Ministerial sobre la Sociedad de la Información de América Latina y el Caribe, organizada por la Cepal y el Gobierno de Ecuador, reseña un comunicado del organismo regional.

    “Hoy ninguna sociedad puede alcanzar el desarrollo si está al margen de la tecnología digital, por eso debe estar al alcance de todos, sin exclusión de ningún tipo. Nadie puede quedarse atrás”, dijo el presidente de la República, Lenín Moreno, en un mensaje transmitido durante la ceremonia de apertura del evento, que se celebra hasta el jueves 26 de noviembre de forma virtual y del que Ecuador recibió la Presidencia por dos años.

    Durante su intervención, Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), señaló que “la actual coyuntura ha puesto de manifiesto la relevancia de las tecnologías digitales y cómo su uso ha sido esencial para el funcionamiento de la economía y la sociedad”. No obstante, aún tenemos a un tercio de la población de América Latina y el Caribe sin acceso a Internet, apuntó.

    Andrés Michelena, ministro de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información de Ecuador, alertó sobre “la posibilidad real y potencialmente trágica” de que esta crisis arruine una generación de latinoamericanos.

    “Esta cita continental nos plantea un enorme desafío: pasar del dicho al hecho. Sin recursos públicos y privados, y sin el apalancamiento financiero de los organismos multilaterales y regionales, el camino será duro y difícil”, indicó. Por eso, el Gobierno de Ecuador propone crear un fondo latinoamericano de despliegue rural de infraestructura de telecomunicaciones, con al menos el 1% del PIB de cada país cooperante, para reducir la brecha digital, explicó.

    En una presentación, titulada “Tecnologías digitales para un nuevo futuro”, realizada tras la ceremonia de inauguración, Alicia Bárcena reveló que en la región hay más de 40 millones de hogares no conectados y la mitad se ubican en los dos quintiles más pobres.

    Datos del Observatorio Regional de Banda Ancha de la Cepal indican que 77% de los hogares rurales no está conectado, al igual que 42% de los menores de 25 años y 54% de los mayores de 66 años.

    La Secretaria Ejecutiva de la Comisión indicó que el servicio de banda ancha móvil y fija para el primer y segundo quintil cuesta el 14% y 12% de su ingreso. Por otra parte, un tercio de los países de la región no alcanzan los requerimientos de velocidad de descarga necesarios para usar soluciones digitales.

    Bárcena planteó tres grandes retos para la región hoy: universalizar el acceso y la asequibilidad a las tecnologías digitales; avanzar en la digitalización para la sostenibilidad ambiental; y lograr una transformación digital productiva real.

    Durante el encuentro, se espera la aprobación de la Agenda Digital para América Latina y el Caribe eLAC 2022, dando continuidad a un proceso regional iniciado hace 15 años.

    Andrés Michelena, ministro de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información de Ecuador, alertó sobre “la posibilidad real y potencialmente trágica” de que esta crisis arruine una generación de latinoamericanos. Foto: Cortesía
    Andrés Michelena, ministro de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información de Ecuador, alertó sobre “la posibilidad real y potencialmente trágica” de que esta crisis arruine una generación de latinoamericanos. Foto: Cortesía
  • 780 000 hogares ecuatorianos realizan sus compras a través del comercio electrónico

    Carolina Enríquez, (I)

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    En Ecuador, 780 000 hogares realizan sus compras a través del comercio electrónico. Así se informó en el webinar de la consultora Kantar denominado Una visión del nuevo shopper para el crecimiento de América Latina, que se presentó este 5 de octubre del 2020.

    La empresa explicó que las compras en línea son todos aquellos procesos que se hacen a través de aplicaciones, sitios de Internet o WhatsApp.

    En América Latina, la gente prefiere comprar más a través de esta última herramienta, por su rapidez, practicidad y disponibilidad de servicio. 

    En el Webinar también se mencionó que las ‘apps’ de delivery han tenido un importante crecimiento, con 31% de penetración; se utilizan para compras para el hogar y adquirir comida para llevar.

    “Es importante resaltar cómo estos medios de acceso se convierten en la estrategia más cotizada por las empresas para el aumento de tráfico en tiempos de crisis, así como en la oportunidad para generar una comunicación alineada a las necesidades de los compradores actuales en esta nueva normalidad”, indicó la consultora.

    Con relación a Ecuador, la firma reveló que el peso de las compras en línea en el canasto de adquisición de productos de consumo masivo es del 4%.

    Las compras en línea son todos aquellos procesos que se hacen a través de aplicaciones, sitios de Internet o WhatsApp. Foto: https://www.freepik.es/
    Las compras en línea son todos aquellos procesos que se hacen a través de aplicaciones, sitios de Internet o WhatsApp. Foto: https://www.freepik.es/
  • Servicios de construcción para hogares y empresas

    Priscilla Alvarado, (I)
    redaccion@revistalideres.ec

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    Hace cuatro años, un momento negativo en la vida de Martín Zambrano lo impulsó a crear Cetecnic, un negocio de servicios de construcción y mantenimiento para firmas y hogares.
    En el 2016, este empresario salió de un proyecto de construcción en Quito. Estuvo tres meses sin trabajo y, en ese tiempo, puso en marcha una idea que tenía en mente desde hace tiempo.

    “Trabajé por ocho años en la construcción y siempre escuchaba a otros hablar sobre la necesidad de tener a la mano una opción de negocio que se encargue de edificación y mantenimiento, pero de proyectos pequeños en obra civil”, relata el empresario.

    A mediados de ese año, Zambrano, quien ya no quería volver a trabajar bajo relación de dependencia, comenzó con las operaciones de Cetecnic. La inversión inicial fue de USD 2 000; el dinero se utilizó para la compra de una computadora, un escritorio y los insumos básicos para trabajar.

    Instaló una pequeña oficina para recibir a sus clientes en su domicilio, en el norte de Quito.
    “El primero de ellos me sirvió para despuntar. Poco a poco más personas e instituciones comenzaron a conocer sobre el negocio”.

    Según Zambrano, a las personas les incomoda la informalidad que existe para contratar un maestro especializado (albañil, pintor, electricista, etc.). Además, en su experiencia, cree que la gente que se dedica a tareas en general no ofrece un trabajo garantizado o cobra de acuerdo con el sector donde vive el potencial cliente.

    El personal de este negocio está capacitado para realizar su labor. Se trata de especialistas en diferentes áreas de la construcción.
    El personal de este negocio está capacitado para realizar su labor. Se trata de especialistas en diferentes áreas de la construcción.

    Consciente de esto, el emprendedor armó un equipo de trabajo con profesionales, previamente calificados, que han recibido capacitación. Ahora, Cetecnic opera con cuatro empleados fijos (jefe de obras, técnicos y arquitectos) y da empleo directo a 12 personas por cada proyecto.

    Durante los dos primeros años este negocio fue aumentado servicios poco a poco. De tener en su catálogo solo el mantenimiento en obra civil, se sumaron plomería, electricidad, carpintería, cerrajería y armado de muebles. Al mes, Cetecnic atiende unos 10 requerimientos de diferente índole en ocho provincias del país.

    El 2019, el negocio facturó USD 68 000 y este año, a pesar de la crisis derivada de la pandemia, espera duplicar esa cifra.

    Esta coyuntura, precisamente, permitió que Cetecnic amplíe sus servicios. Ahora ha incursionado en la bioseguridad; en las provincias en las que tiene alcance su trabajo ha colocado plásticos protectores en locales y oficinas, sobre todo en servicio al cliente.

    Además, ofrece bandejas de desinfección de acero inoxidable, fumigadores manuales y productos de sanitización para el hogar. Todo lo promociona a través de las redes sociales de la empresa.

    Pese a la emergencia sanitaria, esta compañía se ha mantenido dinámica. “La demanda crece porque la gente quiere gastar menos y es mejor tener inmuebles en buenas condiciones”, relata el director de proyectos y mentalizador de esta empresa quiteña.

    Zambrano, además, cuenta que Cetecnic no estuvo mucho tiempo paralizada tras la declaratoria de emergencia del 16 de marzo. La firma fue parte del Plan Piloto del sector de la construcción, que se reactivó el 26 de abril.

    Para los clientes ha sido importante que la empresa se mantenga en el mercado en estos meses.

    Cindy Calderón es coordinadora de adquisiciones de la Cooperativa Policía Nacional y ha requerido los servicios de la empresa para mantenimiento y reparación de infraestructura, por dos años. “Cetecnic ha sabido solventar las necesidades a nivel técnico y de logística sin ningún problema. Tenemos sedes de la cooperativa a escala nacional y siempre su trabajo ha sido óptimo”, señala.

    Los proveedores de la empresa, que son ocho en total, también resaltan la seriedad con la que trabaja la firma.

    Joffre Soto, jefe de Ventas de Renteco Ecuador, trabaja con Cetecnic desde el inicio. Destaca el compromiso y la responsabilidad en el cuidado de los artículos que adquiere esta empresa. “El factor diferenciador de su trabajo es lo meticuloso que es el dueño en el cuidado de las estructuras. Nosotros le rentamos andamios para sus oficios en Quito y Guayaquil. El equipo de Cetecnic es aplicado y todo está siempre en orden”.

    Una de las actividades que realizan los trabajadores de la empresa es el armado de muebles. La ofera de Cetecnic está disponible para hogares. Foto: Patricio Terán / LÍDERES
    Una de las actividades que realizan los trabajadores de la empresa es el armado de muebles. La ofera de Cetecnic está disponible para hogares. Foto: Patricio Terán / LÍDERES
  • Tres de cada 10 hogares pagaron con tarjeta en los primeros cinco meses del año

    Carolina Enríquez, (I)

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    Durante los primeros cinco meses del año, tres de cada 10 hogares en el Ecuador realizaron sus pagos con tarjetas bancarias. Así lo afirma un estudio de la consultora kantar.

    La información la presentó este 21 de julio del 2020, a través de un comunicado.

    Entre enero y mayo, “la adquisición de bienes de consumo masivo con tarjetas creció. El valor del gasto con las compras con tarjetas incrementó 37% en ese lapso, comparado con el mismo período del año pasado”.

    El gasto con tarjetas de crédito y de débito creció 42% y 17%, respectivamente, en lo que va del año. Además, hubo un aumento en la participación de tarjetas como medio de pago, que crecieron 2% en los primeros cinco meses del 2020 comparado con 2019. Para los pagos en efectivo, hubo una caída de 1% en participación en el mismo período.

    Durante lo que va del año, según la división de consumo masivo de Kantar, el 89% de las compras de productos de consumo masivo realizadas en Ecuador se pagó en efectivo y el 9% con tarjetas, siendo la de débito la más utilizada. El año pasado, la relación fue 90% y 7%, respectivamente.

    Una de las razones que ha impulsado estos resultados es la necesidad de las personas de no tener contacto con billetes o monedas para evitar contagios de covid-19.

    El uso de tarjetas en Ecuador para realizar pagos aumentó, de acuerdo a Kantar, en todos los niveles socio económicos; aunque en los estratos medio y alto fue mayor. “Definitivamente los contrastes en la forma de pago es un tema muy interesante. Mientras siete de cada 10 hogares de estrato alto paga con tarjeta, ocho de cada 10 hogares de estrato bajo pagan por medio del fiado”, comenta Miguel De La Torre, country manager de Kantar, para consumo masivo.

    Las principales afectaciones por un mal uso de los canales electrónicos son fraudes informáticos, clonación de tarjetas de crédito y débito,  etc.
    Las principales afectaciones por un mal uso de los canales electrónicos son fraudes informáticos, clonación de tarjetas de crédito y débito, etc.
  • Mayoría de hogares de clase media redujo sus ingresos

    Carolina Enriquez

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    Los hogares de clase media en Quito enfrentan una fuerte reducción de sus ingresos tras la pandemia. Incluso han tenido que priorizar sus gastos.

    A esa conclusión llegó el estudio Impacto económico por paralización covid-19 en hogares de Quito, de junio del 2020, elaborado por la Cámara de Comercio de Quito (CCQ) y la Universidad de Las Américas (UDLA). Allí se establece que el 77,2% de los hogares de clase media y media alta enfrentan una disminución de sus ingresos.

    Se trata de unidades familiares que reciben desde USD 850, en adelante, al mes, explica Iván López, docente de economía de la UDLA y una de las personas que elaboró el documento. Este muestra que en cada hogar existen en promedio 3,8 integrantes y que más de dos personas pueden llegar a obtener ingresos.

    Los más afectados han sido aquellos hogares cuyos ingresos llegan hasta USD 1 200 al mes, ya que el 71,4% registró pérdida de los mismos. Este segmento ha sido doblemente golpeado: la pérdida de empleo alcanza al 47,8%.

    “Los primeros que sufren un impacto durante las crisis son las personas que tienen menores ingresos, menor nivel de estudios y empleos más precarios”, comenta López.

    Fernanda P., quien reside en el sector de La Rumiñahui (norte de Quito) y es parte del segmento, por ejemplo, no tuvo ingresos entre marzo y mayo. Ella y su esposo tienen un negocio de metalmecánica pero todo quedó paralizado tras la cuarentena. La pareja y sus dos hijos han vivido de unos ahorros con los que contaban y luego tuvieron que pedir prestado.

    El impacto económico en la clase media de Quito.
    El impacto económico en la clase media de Quito.

    Pero la gente con más ingresos dentro de la clase media también está afectada.
    En el hogar de Xavier E., quien reside en el sector de Ponceano y trabaja en finanzas, los ingresos, en condiciones regulares, eran superiores a USD 2 100. Aportaban en la economía familiar él y su esposa; además, tienen un hijo. Tras la pandemia todo cambió.

    “Me bajaron en 40% el salario y perdimos un bono. Así de dura está la situación”, comenta. Ante eso reestructuró deudas bancarias, dejó de pagar el consumo de plataformas como Spotify y ahora cocinan en casa.

    El estudio, precisamente, muestra las prioridades de los quiteños de clase media durante y poscuarentena. En ambos casos, los gastos más importantes son alimentación, servicios básicos, educación, seguros de salud y asistencia médica e insumos médicos.

    Estas, precisamente, son las prioridades de Óscar M., padre soltero quien labora como coordinador digital y vive en el valle de Los Chillos. Perdió el 20% de sus ingresos, que alcanzaban USD 1 700. Ha buscado trabajos adicionales y dejó de usar sus tarjetas.

    En el hogar de Fernanda, las prioridades generales también son las suyas. Sus integrantes se han enfocado en ser ordenados para tener dinero para comida y evitan enfermarse.

    En estos momentos, ella está en algo aliviada porque su negocio ha vuelto a tener contratos. Lo propio pasa en el caso de Diego P., quien tiene un restaurante en la Jipijapa. “En marzo y abril no gané nada. Estamos vendiendo ahora a través de plataformas de entrega, ingresando a grupos colaborativos para emprendimientos, haciendo todo tipo de publicidad para reactivarnos. Lo primero es salir de las deudas”.

    Concluida la cuarentena, indica el estudio, en promedio, la gente considera importante pagar créditos y otras obligaciones, así como invertir en un negocio propio.

    Eso es alentador ya que muestra el interés por emprender, indican Sebastián Chiriboga y Luis Naranjo, técnicos de la CCQ que colaboraron en la elaboración del informe. Ambos explican, además, que las prioridades poscuarentena revelan también quienes serán los sectores más afectados. La diversión, el ocio, la inversión en bienes muebles e inmuebles, así como el turismo son las áreas menos prioritarias.

    María Fernanda Garcés: ‘90 000 empleos perdidos en Quito’

    María Fernanda Garcés, secretaria de Desarrollo Productivo del Municipio. Foto: cortesía
    María Fernanda Garcés, secretaria de Desarrollo Productivo del Municipio. Foto: cortesía

    Redacción Quito (I)
    María Fernanda Garcés, secretaria de Desarrollo Productivo del Municipio, analiza la economía. 

    ¿Qué acciones está llevando a cabo la Secretaría de Desarrollo Productivo y Competitividad del Municipio de Quito para reactivar la economía de la ciudad?
    Tenemos varias cosas. Primero debo decir que tenemos retos muy fuertes respecto a lo que significa la pandemia este momento en la ciudad. También hay que decir que ya veníamos desde antes con una situación bastante complicada en lo económico y en lo social.

    ¿A qué se refiere?
    El año pasado, Quito era una de las ciudades con mayor nivel de desempleo. Lo que ha ocurrido en 2020, la paralización que se tuvo que desarrollar en función de la emergencia, ha agravado la situación. Creo que ese es un punto de partida sobre el que debemos de tener conciencia. La situación de desempleo en la ciudad y la situación en la reducción en ventas son algunos de los retos que enfrentamos. La iliquidez del sector empresarial en la urbe es muy compleja.

    ¿Qué cifras tiene?
    En cuanto al desempleo, de acuerdo con la estimación que hemos hecho en el primer semestre, más o menos se han perdido 90 000 puestos de trabajo. A partir de la apertura de las actividades, el pasado 3 de junio, hemos determinado que lo que estamos enfrentando es un ‘shock’ de oferta y demanda.

    ¿Qué implica eso?
    Veníamos de un proceso de paralización, en el que no había producción de bienes y servicios. Una vez que se abrieron las actividades, hemos visto que los negocios funcionan, pero que no hay gente que acude a los mismos. Esto ha generado una reducción en ventas muy importante. Estamos hablando que entre enero y abril de este año, con respecto al mismo período del anterior, hemos perdido USD 4 600 millones en ventas.

    ¿Qué se puede hacer ante esta situación?
    Esta situación es un reto en el que tenemos que vincularnos de manera colaborativa, tanto el sector público como el privado. Nosotros como Municipio tenemos pocas herramientas en cuanto a los temas tributarios y laborales, porque no los manejamos como gobierno local. De eso se encarga el Gobierno central. En este momento esperamos que la Ley Humanitaria entre en vigencia. Eso nos va a permitir dar holgura a la actividad económica de la ciudad, en términos de impuestos y de trabajo. Nosotros tenemos algunas opciones en el proceso de reactivación.

    ¿Cuáles?
    Por un lado está trabajar con el desarrollo local territorial. Tenemos un plan de trabajo con los pequeños y micronegocios de la ciudad, que son alrededor del 80% de la estructura empresarial de la capital. El programa se llama Activa tu negocio y tiene que ver, en una primera parte, con medidas de bioseguridad. La idea es que los negocios vuelvan a recuperar la confianza del comprador, que la gente sepa que tienen todas las seguridades y que se puede aprender a convivir con el virus.

    ¿Qué se logra con la confianza del comprador?
    Nos interesa desarrollar un modelo en el que alguna manera impulsemos al ciudadano a tener nuevamente confianza. En el momento que usted tiene la posibilidad de ver que un negocio ha sido calificado como seguro, va a volver. Hoy por hoy, las preferencias del consumidor de elegir se han modificado. La gente prefiere salir solo si es necesario o entrar a un lugar solo si le provee de la seguridad que se busca. Nosotros estamos trabajando con el sector privado en un distintivo de la ciudad, Quito Seguro, promoviendo negocios seguros.

    ¿Se aplicará esto en los negocios de los diferentes barrios?
    La primera línea de política, como le decía, es trabajar en lo que hemos denominado desarrollo productivo local. Esto es en los barrios, en lo que se denomina economía de proximidad.

    ¿Qué otros proyectos tienen?
    Estamos también consolidando todo lo que implica financiamiento. He tenido una reunión con directivos del Banco del Pacífico para activar la línea que el Gobierno está ofreciendo: Reactívate. Queremos utilizarla para los negocios de la ciudad. Necesitamos informar a la ciudadanía cómo pueden acceder, de qué manera, etc. También queremos comprometerle a la entidad de que se prioricen negocios de la urbe, tomando en cuenta que es aquella con más número de habitantes y con el mayor número de personas potencialmente en desempleo. Es importante insistir en que hay problemas de liquidez en las empresas.

    ¿Qué acciones planean tomar ante eso?
    El Municipio tiene la posibilidad de facilidades de pago de los impuestos municipales. Estamos difundiendo esta información para que las empresas las soliciten y puedan tener hasta dos años del beneficio. Estamos apoyando la incorporación de tecnología en los modelos de negocio. Por ejemplo, se busca implementar sistemas de pago electrónico en los comercios de la ciudad.

    Hoja de vida
    Formación.  Licenciada en Derecho por la Universidad Central. Doctora en derecho por la Universidad Internacional del Ecuador. Tiene un diplomado en Gobernanza y Liderazgo Político en IDE Ecuador. Diplomado en Dirección de instituciones microfinancieras en el INCAE.
    Experiencia.  Secretaria de Desarrollo Productivo y Competitividad del Municipio de Quito. Ha tenido cargos en el sector público y privado. Consultoría en el Banco Interamericano de Desarrollo. Fue subsecretaria de Planificación en el exministerio Coordinador de la Producción.

    La falta de trabajo impulsa la creación de negocios

    Luego de la cuarentena, entre los quiteños de clase media existe la voluntad de abrir negocios. Eso se aprecia en el estudio Impacto económico por paralización covid-19 en hogares de Quito.

    El 20,3% de los encuestados considera que es muy importante invertir en un negocio. Sin embargo, las necesidades básicas están por sobre todas las cosas.

    “Es un dato clave de cómo se va a desenvolver el emprendimiento. Si bien en este momento hay una necesidad de generar recursos por uno mismo, hay que tomar en cuenta que las personas pueden elegir. No todas van a inclinarse a ese camino porque ven muchísima inestabilidad. Si en Ecuador antes ya era difícil emprender, ahora es más complicado”, explica Sebastián Chiriboga, técnico de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ) quien participó en la elaboración del estudio.

    Prioridades de gasto
    Prioridades de gasto

    Una de las razones para que las personas no quieran arriesgarse a emprender, al menos no en algo que tenga que ver con espacios físicos o alta interacción con personas, es que de pronto exista un rebrote de covid-19 y toda la ciudad deba volver a cuarentena.

    Pero, precisamente la crisis económica y sus impactos ha impulsado a buscar ingresos y hay gente que “le ha tocado” emprender o impulsar sus comercios.

    Évelyn Segura, por ejemplo, previo a la emergencia del covid-19 tenía una pastelería que ofrecía productos solo a negocios. Tras la emergencia replanteó su idea y desarrolló PaneFresko, para la venta directa de productos de panadería y pastelería.

    Para esto último invirtió USD 500 y ha logrado obtener ventas porque ofrece un producto de consumo básico. De hecho, el gasto prioritario es el de alimentos.

    Érika Guerrero y su esposo, ambos desempleados, también reactivaron un negocio ya existente, al que no le habían dado el empuje suficiente. Se trata de Yura Deco, un negocio de muebles pequeños para el hogar.

    “Hemos logrado repotenciarlo las últimas tres semanas. Antes no había ningún insumo o no había sitios donde comprar. Ha tenido éxito porque hemos ofrecido productos acorde a las necesidades actuales. Por ejemplo, mesas para que pueda comer la gente que se enferma”, explica Guerrero.

    Otras personas que se arriesgaron fueron las hermanas Andrea y María José Garzón. Luego que la primera perdió el empleo, la segunda, que es psicóloga, la impulsó para que desarrollaran juntas un emprendimiento de consultas psicológicas en línea (Exprésate – centro terapéutico).

    Víctor Hugo Albán, directivo del Colegio de Economistas de Pichincha, explica que el desempleo es alto y que eso impulsa a que la gente busque formas para obtener ingresos. Para él, las cifras sobre pérdidas de empleo oficiales son conservadoras, si se toma en cuenta, además de las personas que laboraban bajo relación de dependencia, a independientes o los que tenían negocios que cerraron.

    Las prioridades de este segmento de la población de la capital son alimentación, servicios básicos, educación, seguros de salud y asistencia médica e insumos médicos. Así lo asegura un estudio elaborado por la Cámara de Comercio de Quito y la Universidad
    Las prioridades de este segmento de la población de la capital son alimentación, servicios básicos, educación, seguros de salud y asistencia médica e insumos médicos. Así lo asegura un estudio elaborado por la Cámara de Comercio de Quito y la Universidad de Las Américas. Foto: Ingimage
  • Los robots se convertirán pronto en una presencia cotidiana, dice experto

    Agencia EFE

    Los robots han comenzado a salir de las fábricas para adentrarse pronto en hogares, hoteles, restaurantes y otros espacios de la vida cotidiana, según Rich Mahoney, director de robótica de SRI International, uno de los centros de investigación más conocidos de Silicon Valley.

    «La última tendencia es que los robots están saliendo de las fábricas y estamos empezando a verlos en casas, empresas, hoteles», manifestó Mahoney en entrevista con Efe en la sede de SRI en la localidad californiana de Menlo Park (EE.UU.).

    El desafío, en la actualidad, según explicó Mahoney, es trabajar en los brazos de los robots, ya que ahora mismo la mayoría de brazos robóticos están en las fábricas de producción.
    El ingeniero de SRI pronostica que, una vez que eso ocurra, en el plazo de unos cinco años, será común ver robots sirviendo comida o bebida, así como humanoides que limpian la casa, vacían grandes contenedores de basura o juegan con su propietario al tenis.

    «No estamos muy lejos de ello», afirmó el experto, quien añadió que en su laboratorio tienen el lema de «buen robot», o lo que es lo mismo, una visión positiva del avance de los humanoides.
    «La gente está preocupada con la posibilidad de que los robots se hagan con el control del mundo o acaben con los puestos de trabajo pero creo que serán muchos los casos en los que los robots lleguen y hagan cosas buenas», estimó el experto, que dirige un equipo de 60 personas.

    Mencionó el caso de la medicina, con la existencia de robots que están ayudando ya a los cirujanos a hacer un trabajo más preciso.

    «Si uno piensa en cómo era el mundo hace cien años se da cuenta de que era muy distinto. Casi no había automóviles, ni computadoras y la actividad era fundamentalmente agrícola. El cambio ha sido enorme», insistió.

    «Lo que intento comunicar a la gente es, bueno, si aceptaron eso, piensen lo que es posible en los próximos 100 años», dijo Hogan, quien subrayó que la tecnología tiene la capacidad, en el próximo siglo, de mejorar el acceso a los alimentos o la salud.

    SRI ultima en estos momentos «Proxy», un humanoide que podrá utilizarse en tareas de rescate en casos de catástrofes, así como en la agricultura y la minería, y que el laboratorio de Menlo Park espera sacar al mercado este mismo año.

    «Es un humanoide que camina y ha sido diseñado para ser excepcionalmente eficiente», destacó Mahoney, quien indicó que el robot utiliza alrededor de la mitad de su batería durante una caminata de tres horas y media, frente a la hora que solía ser habitual con el mismo gasto de batería.

    Proxy podrá recolectar frutas y hortalizas, así como realizar podas y muchas de las otras tareas habituales en la agricultura.

    «O sea que se podrá utilizar esta tecnología para la automatización de cosechas y podas, y otras cosas que son imposibles ahora mismo», afirmó el ingeniero de SRI.
    El humanoide también podrá eliminar escombros y realizar búsquedas de restos humanos tras una catástrofe.

    «Imagínate un robot que puede entrar en un edificio en llamas y salvar vidas o, en el caso de un desastre como Fukushima, entrar en la planta nuclear y cerrar válvulas», indicó Mahoney.
    El debate sobre las ventajas y desventajas del avance de la robótica se intensificó en los últimos días después de que un robot agarrase a un empleado en una planta de Volkswagen en Alemania y lo arrojase contra una placa de metal, lo que provocó su muerte.

    La fabricante automovilística señaló que el incidente al parecer se produjo a raíz de un error humano.

    SRI, un laboratorio creado en 1946 y situado en el corazón de Silicon Valley, emplea a unas
    2 100 personas
    en sus instalaciones en California, otros lugares de Estados Unidos, Japón y Groenlandia.

    La organización estuvo asociada a la Universidad de Stanford en sus orígenes y se independizó en 1970.

    En sus instalaciones se desarrolló el primer ratón de ordenador, las primeras versiones de la interfaz de los ordenadores, fármacos para la malaria y el linfoma y el primer sistema telerrobótico para operaciones quirúrgicas, así como el estándar de alta definición de la televisión estadounidense y el plan de tecnología del Departamento de Educación de EE.UU.

    Pepper
    El robot Pepper puede hacer fotos, felicitar a los miembros de la familia en su cumpleaños o tratar de animarlos cuando detecta que alguno está triste. Foto: AFP
  • En 21 768 hogares del país se evaluó el uso de las TIC

    redacción quito

    Jaime Guerrero Ruiz, ministro de Telecomunicaciones y Byron Villacís, director del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) presentaron la semana anterior, los avances en el uso de las tecnologías de la información y comunicación (TIC), durante el 2011, en los hogares ecuatorianos.

    Los datos obtenidos se establecieron bajo una encuesta realizada en diciembre del año anterior, a 21 768 hogares de 579 centros poblados, urbanos y rurales.

    El objetivo de esta investigación, según explicó Guerrero, fue conocer los avances en cuanto a los servicios de telecomunicaciones y el uso de las TIC en el país. Con base en esta información se espera mejorar las políticas públicas en esta área.

    El equipamiento tecnológico, en lo que se refiere al período comprendido entre el 2008 al 2011, dentro de los hogares se estableció de la siguiente manera: 24% de hogares posee computadoras de escritorio y un 9,8% portátiles. Además, el 78,8% de familias dispone de telefonía móvil.

    El estudio también reveló que el 31,4 % de los ecuatorianos encuestados ha usado Internet. De ese valor, quienes más utilizan son las personas de 16 a 24 años. Las razones por las que adquieren este servicio, en su mayoría, es para comunicarse, seguido de la necesidad de obtener información, educación y para fines laborales.

    En cuanto a la tenencia de celular, un 49,1% corresponde a los hombres y 44,3% a las mujeres. El grupo por edad con celular activado es de entre 25 y 34 años de edad, con el 71,5%; seguido por el de 35 a 44 años , con el 69,1%.

    En lo que se refiere al uso de teléfonos inteligentes ‘smartphone’, el 8,4% de las personas que tienen un celular poseen teléfonos inteligentes. 69,9% lo utilizan para acceder a redes sociales; 69,8 para Internet; 65,9%, para correo electrónico; 62,1%, con interés en entretenimiento y el menor rango, con 42,8% para GPS.

    La provincia con mayor número de personas que poseen teléfono inteligente es Guayas, con un 14, 3 %; seguida de El Oro, con un 11,2%.

    Las redes sociales ocupan un lugar prioritario a la hora de utilizar los teléfonos inteligentes. En Guayas, por ejemplo, el 76,3%, accede con estos dispositivos; le sigue Pichincha, con un 75,5%.

    Esta es la cuarta encuesta que se realiza en el país para medir las TIC.

  • Con piedras, caña y cactus decora hogares y oficinas

    Redacción Quito

    Jorge Witt talla madera desde hace 40 años. En sus arreglos utiliza caña guadúa y piedra pómez. En promedio factura USD 500 al mes.

    En el taller de Jorge Witt se siente un ambiente de serenidad y tranquilidad. La pasividad del local contrasta con el bullicio que comúnmente se vive en el sector de La Floresta, centro norte de Quito, donde está su emprendimiento.

    Witt toma un cincel entre sus manos y empieza a tallar una pedazo de piedra pómez, mientras cuenta que este arte lo aprendió de su padre, cuando era niño, hace unos 40 años. Desde el 2005, puso a funcionar su taller con el objetivo de desarrollar y rentabilizar este oficio.

    El material pétreo con el que trabaja lo compra cada seis meses en canteras cercanas a Latacunga (Cotopaxi). Con precisión milimétrica traza las guías donde el taladro formará un cuenco, para albergar árboles enanos de ciprés o palmeras. Con violetas, rosales, cactus y plantas de ají, también diseña jardines miniatura. Elabora -bajo pedido- hasta 15 macetas al mes, que valen hasta USD 80 cada una.

    Alicia Granda gastó USD 25 en diciembre. “Me gustó mucho el trabajo de Witt. Lo compré para decorar el comedor”.

    Witt señala que hasta el momento no ha invertido en publicidad. Su estrategia -según explica- es crear arreglos estéticos. “Así se exhiben con gusto y hay quienes preguntan donde se pueden comprar”.

    El taller alcanza una facturación al mes de USD 500 en promedio. El emprendedor construyó su propio local, donde ha invertido USD 25 000 en maquinaria.

    Su participación en la Feria de las Cosas Lindas, en diciembre, fue la primera exhibición de sus productos. “Un día antes de que iniciara me confirmaron la oportunidad pues estaba en lista de espera. Vendí unos USD 2 400 en siete días”. Otro de los elementos que caracterizan el trabajo de Witt es la caña guadúa que se cosecha a los cinco años de sembrado.

    La caña guadúa crece en zonas de clima subtropical, como Santo Domingo de los Tsáchilas y el noroccidente de Pichincha.

    Witt también la siembra en el patio de su casa, junto con plantas ornamentales para sus decoraciones. Cuenta que esta planta podría ser una opción frente a la deforestación de bosques, debido a su resistencia y nobleza al tallado.

    “A los siete meses la caña ya tiene el grosor y altura que mantendrá en toda su vida. La tala se debe realizar de acuerdo al calendario lunar”, señala Witt, y explica que las técnicas ancestrales para talar árboles determinan que el corte se debe realizar en los cuatro días de luna nueva.

    Ma. Paulina Naranjo recibió un arreglo de Witt para decorar su oficina. “He leído sobre las propiedades del cactus para atraer la radiación del sol. Creo que podría ayudarme a controlar la radiación de los aparatos eléctricos de mi escritorio”.

  • La vida de hogar ahora es ‘touch’

    Leonardo Gómez Redacción Quito / LÍDERES

    Para apagar las luces de su habitación, activar las alarmas o apagar las hornillas de la cocina, Esteban Caiza no necesita estar en su casa. Puede hacerlo a control remoto, desde su teléfono celular, tablet o smartphone.

    Lo que Caiza realiza, con la ayuda de la tecnología, se conoce como la automatización de hogares, o domótica. Este sistema permite a los habitantes de una casa controlar digitalmente el sistema de riego de sus jardines, el aire acondicionado, los sistemas de audio y video, las seguridades en las puertas…

    La vivienda de Caiza cuenta con un sistema centralizado de gas. Si ocurriera una fuga, el sistema envía un mensaje de alerta a un teléfono celular. «Lo mismo sucedería en caso de incendio o si ladrones intentan forzar las puertas».

    En Ecuador, el uso de la domótica no es muy común en hogares, asegura Marcelo Escobar, master en Domótica y representante de ISDE en Ecuador, una empresa española que diseña y fabrica equipos electrónicos de control para viviendas, edificios y alumbrado público.

    Una de las principales causas, explica, es el desconocimiento. «Se piensa que son equipos muy costosos cuando en realidad un sistema para el control de luces y persianas cuesta USD 800».

    Se puede también instalar controladores de consumo de agua, de energía o de teléfono. En el caso de la iluminación, existen sensores para encender las luces de determinadas habitaciones. «Ese tipo de tecnología, más el control de accesos y control remoto desde el celular, puede costar USD 1 500», explica Escobar.

    Eduardo Arroyo invirtió cerca de USD 40 000 para digitalizar su vivienda. «Los botones de encendido, interruptores, cerraduras… todo se maneja desde pequeñas pantallas táctiles instaladas en cada habitación. Cada una cuesta como USD 600. También puedo manejar todo desde un control maestro en el pasillo».

    Si falla el suministro de electricidad, este tipo de sistemas puede funcionar con una batería propia por un período de 8 a 12 horas adicionales, pero varía dependiendo del producto.

    En el caso de las puertas, Marcelo Moscoso, gerente de Life Style Studio, distribuidor de productos de automatización en Cumbayá, explica que para evitar que lo cerrojos electrónicos queden abiertos por la falta de electricidad siempre es necesario mantener el sistema manual junto al digital. «Una alternativa es tener un generador eléctrico para casos de emergencia», explica.

    En cuanto a los edificios que utilizan la domótica, se logra un ahorro de energía de hasta el 30% y 40%. Su utilización es más común sobre todo en edificios ecológicos, aeropuertos y entidades de educación superior.

    La Escuela Politécnica del Ejército (ESPE), al oriente de Quito, cuenta con un edificio construido con un sistema electrónico que le permite controlar sus accesos, iluminación, alarmas y cámaras de vigilancia. El Departamento de Eléctrica y Electrónica de este establecimiento de educación superior indica que las alarmas contra incendio de este edificio desbloquea, en caso de presentarse algún incidente, todas las cerraduras y enciende todas las lucen de los pasillos, marcando una ruta de escape.

    Los equipos

    El origen. Los productos se importan desde España, China y EE.UU.

    Los costos. En viviendas, la inversión promedio puede ir desde los USD 800 en adelante, mientras que en edificios la inversión puede variar según el diseño del inmueble y alcanzar cifras equivalentes al 2% de su costo de construcción.

  • El ritmo en el gasto enciende alertas

    Redacción Quito, Guayaquil y Cuenca

    Casi la mitad de los hogares del país tiene más egresos que ingresos. Así lo sostiene la Encuesta nacional de ingresos y gastos en hogares urbanos y rurales, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

    39 617 hogares fueron encuestados. De estos, el 41,1% se halla en esta situación financiera, lo que ha generado preocupación en diferentes sectores.

    «Esto inició hace 13 años, al implantarse la dolarización. Se ha venido agudizando conforme el paso del tiempo. Hay un alto gasto familiar y un elevado endeudamiento», indicó Víctor Hugo Albán, presidente del Colegio de Economistas de Pichincha.

    Datos de la Superintendencia de Bancos y Seguros revelan que a finales del 2012 el total de la cartera de crédito del sistema financiero fue de USD 15 774 millones. Mientras que en el 2004, fecha en que el INEC hizo la anterior encuesta nacional de ingresos y gastos, el crédito otorgado fue de USD 4 260 millones.

    Las cifras no han sido lo único que ha despertado la alarma del Colegio de Economistas. Durante los últimos dos años este gremio viene recibiendo a gente que busca ayuda para reestructurar deudas que mantienen con entidades financieras y tarjetas de crédito (10 000 casos).

    Esto impulsó al gremio a realizar una encuesta similar a la del INEC, con una muestra de 300 000 personas, divididas en cinco segmentos poblacionales. La conclusión a la que llegó fue que un total de 240 000 están endeudas, particularmente las que ganan hasta USD 300.

    Esto es peligroso para el país porque rompe el círculo económico, asegura Albán. «El ciudadano no paga, el banco tiene menos utilidades y menos capacidad de crédito. El sector productivo tendrá pocas posibilidades para desarrollarse y generar ingresos con los que pague a los ciudadanos, que son los consumidores. Esto genera inestabilidad en el sector financiero».

    Albán dice que la gente mantiene deudas principalmente con tarjetas de crédito. El uso de dinero plástico crece. Hace diez años, unas 750 000 personas tenían una. Ahora existen 2,5 millones de tarjetahabientes.

    Esta tendencia ha crecido de mano del consumo. En el país, según el INEC, el gasto promedio mensual es de USD 809,6. «Hay dos tipos de personas que están en esta situación. Unos son los que ganan muy poco, no les alcanzan sus ingresos para el mes y deben gastar más de lo que ganan, generando deudas. Los otros son quienes sin importar lo que ganen tienen más egresos», señala Wilson Araque, director del área de Gestión de la Universidad Andina.

    Él, además, explica que el panorama del país no es tan malo, pues el 58,8% de las personas tienen más ingresos que egresos. El 83,5% llega por ingresos de trabajo, seguido de otras transferencias.

    Esta gente es quien tiene capacidad de ahorro, según el INEC. Sin embargo, la entidad no explica sí efectivamente están ahorrando. El dato más cercano es el de la Superintendencia, que dice que los depósitos se han cuadruplicado en la última década. Hasta mediados de abril pasado llegaban a USD 22 136 millones.

    Araque explica que la gente que sí ahorra ha tomado conciencia de que debe destinar una parte de su sueldo para una meta en particular.

    «Destinar alrededor del 10% al 20% de los excedentes para un fondo de ahorros es una buena práctica. La gente que puede hacer eso tiene un presupuesto que le permite cubrir holgadamente las necesidades básicas. En el país, por lo que se ve, seis de cada 10 personas puede hacerlo, y es un porcentaje muy significativo. Eso nos dice que Ecuador ha mejorado su nivel de ingresos», dije Araque.

    El analista indica que al existir esta capacidad, urge que el Estado y las empresas privadas, sobre todo las vinculadas al sistema financiero, eduquen al ciudadano para el ahorro: cuentas en bancos, espacios de inversión que les generen rentabilidad con el mínimo riesgo posibles, entre otros son los mecanismos que recomienda para fomentar el ahorro.