La Universidad Regional Amazónica Ikiam recibirá financiamiento de 1 millón de euros por parte de la UE, para el proyecto: ‘Nature-based living-lab for interdisciplinary practical and research semester on sustainable development and environmental protection in the Amazon Rainforest (NB-LAB)’.
Este proyecto que ha ganado un Erasmus + en la categoría ‘Cooperación para la innovación y el intercambio de buenas prácticas – Capacitación en el campo de la Educación Superior’ ante la Comisión Europea, se enfoca en el trabajo en la naturaleza para realizar investigaciones y prácticas interdisciplinarias, sobre el desarrollo sostenible y la protección ambiental en la Amazonía.
Como parte del proyecto, Ikiam impulsará el desarrollo y fomento de varias líneas de investigación que se realizan actualmente en la Institución, así como el fortalecimiento de capacidades académicas y el monitoreo de la Reserva Biológica Colonso Chalupas, a través de sensores y dispositivos electrónicos.
La iniciativa ha sido generada en el consorcio NB-LAB dirigido por Hochscule Wismar: University of Applied Sciences, Technology, Business and Design – HSW y desde Ikiam se encuentra liderado por el docente investigador PhD. Miguel Herrera.
La propuesta conjunta se encuentra entre las mejores 134 de las 1 005 presentadas en total. El proyecto ha sido señalado por los evaluadores de la Comisión Europea, como “muy innovador y de alto impacto para varios grupos de interés (especialmente comunidades remotas y locales) en el contexto social, económico y ambiental”, informó Ikiam.
El equipo liderado por el docente investigador de Ikiam PhD. Miguel Herrera (izq.), Andrea Salgado y Miguel Quishpe. Foto: Foto cortesía de Ikiam
El sueño de Ikiames hacer de Napo una provincia súper productiva, que exporte y que sus habitantes puedan tener una mejor vivienda, con servicios, y que eduquen a sus hijos.
Sueño. Es una manera de decirlo, porque la Universidad Regional Amazónica Ikiam creó tres carreras para que sea una realidad. Esas áreas se relacionan con la vocación económica de la provincia: la agriculturay el turismo.
Amr Radwan, director de la carrera de Biocomercio y coordinador del área Socioambiental de Ikiam, cuenta cómo es esa apuesta de la universidad por conectarse con la realidad de la zona. A inicios de este mes empezaron a funcionar Agroecología, Biocomercio y Arquitectura Sustentable y se inscribieron 170 alumnos.
Las tres son un complemento de cada una, explica el profesor especialista egipcio, PHD en economía agraria, con experiencia en investigación, marketing alimentario y economía aplicada.
Los estudiantes de Agroecología se dedicarán al fomento productivo de las chacras para transformar la agricultura convencional. Los de Biocomercio se enfocarán en la agregación de valor, es decir, productos elaborados y la comercialización. Y los de Arquitectura Sostenible contribuirán en el mejoramiento de las condiciones de vida.
“Si mejoramos las chacras la gente va a tener dinero y va a invertir en vivienda, en educación, salud… esta es la idea de las tres nuevas carreras”, dice Rawdan.
El primer día de clases, los alumnos fueron al campo para conocer iniciativas, como la de cacao. En la práctica se trabaja en la guayusa, considerado un rubro estratégico para Ikiam y Napo.
Por ejemplo, se apoya a la comunidad Atacapi, que produce guayusa. Ella ganó un concurso de USD 50 000 de la Senescyt y la universidad consiguió apoyo de la cooperación española para fortalecer el modelo de negocios, las buenas prácticas agrícolas y dar acompañamiento. Atacapi montará una planta de procesamiento de productos elaborados.
Adicionalmente, se iniciaron los trámites para un permiso de exportación de guayusa al mercado de la Unión Europea. En Europa no se conoce a este producto, que es nuevo, saludable, antioxidante y energizante, explica Rawdan. Ese permiso es genérico, por lo que podrá ser usado por cualquier asociación o campesino.
Ikiam se alió con la Prefectura para generar una estrategia de comercialización y fortalecimiento de los emprendimientos, bajo Napu Marka, el sello de la provincia. Son 102 productos de 32 iniciativas, asociativas y privadas.
La Universidad Regional Amazónica funciona desde hace cuatro años en Tena, en la vía a la parroquia de Muyuna. Foto: Glenda Giacometti / Líderes
Ikiam, la universidad amazónica, busca aportar en el desarrollo de ciudades sostenibles. Para ello abrirá en el nuevo periodo académico tres nuevas carreras vinculadas con el cuidado del medio ambiente.
Se trata de biocomercio, agroecología y arquitectura sostenible. “Son carreras pertinentes e innovadoras, que están ligadas a los objetivos de desarrollo sostenible de la Organización de las Naciones Unidas”, dice Ikiam.
El PHD Amr Radwam, coordinador académico de biocomercio en la entidad, señala que con esta carrera los profesionales podrán generar ganancias de forma sostenible en todos los contextos tanto social, económico y ambiental.
Según el Ministerio de Ambiente, el biocomercio es el conjunto de actividades de recolección, producción, procesamiento, comercialización de bienes y servicios derivados de la biodiversidad (especies y ecosistemas), bajo criterios de sostenibilidad ambiental, social y económica.
“La carrera permite ofrecer todas las herramientas profesionales a los estudiantes, fortaleciendo sus conocimientos en marketing, gestión sostenible y ecoturismo, tres ejes importantes para crear un emprendimiento productivo, rentable, sostenible y responsable con el ecosistema”, menciona Radwam, catedrático egipcio.
Para quienes apuntan a la parte agrícola, por otro lado, está la carrera de agroecología. Esta, según Ikiam, busca soluciones viables para generar nuevas técnicas de producir con mayor rentabilidad, causando menor impacto a la tierra; busca transformar los procesos agrícolas tradicionales.
“Vamos a crear juntos la agricultura del futuro”, manifiesta Wilfredo Franco, coordinador académico en Ikiam. El PHD explicó que los postulantes pueden ser de sectores urbanos, rurales e incluso agricultores tradicionales que deseen saber como maximizar los beneficios de la tierra de manera sostenible.
El objetivo 11 del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) son las ciudades sostenibles. El organismo explica que mejorar la seguridad y la sostenibilidad de las ciudades implica garantizar el acceso a viviendas asequibles y el mejoramiento de los asentamientos pobres. También incluye realizar inversiones en transporte público, crear áreas verdes para los ciudadanos y mejorar la planificación y gestión urbana de manera que sea participativa e inclusiva.
Como una vía para lograr esto Ikiam creó la carrera de arquitectura sostenible. La idea es desarrollar proyectos que eviten un impacto al medio ambiente.
Para estudiantes secundarios como Esteban Méndez formarse en esta área le parece interesante porque siempre ha tenido el sueño de construir casas con materiales que respeten el ambiente. “Me llamó mucho la atención que exista esta posibilidad. Es bueno poder formarse en carreras nuevas y que permitan que los jóvenes aportemos para mejorar el mundo donde vivimos”.
Una vista panorámica de la Universidad Ikiam, en Napo, cuyo nombre significa selva. La ecología es un punto clave en su parte académica. El centro se inauguró en octubre del 2014. Fotos: cortesía Ikiam
Enviado a Tena (Napo) redaccion@revistalideres.ec (I)
Las actividades en las instalaciones de Ikiam se cumplen bajo dos climas. En las aulas y en las salas de reuniones, los sistemas de aire acondicionado garantizan frescura y confort.
Las aulas lucen bien iluminadas y equipadas con proyectores, pizarrones y conexión a Internet. Allí la temperatura es bastante agradable y adecuada para las jornadas de estudio. Cerca de 280 estudiantes cursan sus estudios superiores en la institución.
La sensación térmica cambia en los pasillos, los patios, el comedor y otros espacios ubicados a la intemperie. Allí, el calor y la humedad son una suerte de compañeros invisibles de profesores y estudiantes de la Universidad Regional Amazónica, ubicada a unos 20 minutos del centro de Tena, capital de Napo.
El clima, sin embargo, no ha impedido que profesores y estudiantes generen un vínculo con la comunidad. Este centro de educación superior estatal, que funciona hace un año y medio, ya cuenta con algunas actividades en las que participan niños, jóvenes y adultos del Tena y sus alrededores.
Las tareas en las que se ha enfocado Ikiam van desde el fomento de la lectura entre escolares, apoyo a estudiantes que se alistan para el examen nacional de educación superior (ENES), talleres para profesores de la zona, hasta asesoría a pequeños productores de cacao de Napo.
Gabriela Castañeda, coordinadora de Servicios a la Comunidad, cuenta que para fomentar la lectura se trabajó con la Escuela Domingo Tanguila Canelos, de la comunidad de Atacapi. Explica que se trabajó en un proyecto integrado de saberes en el que los estudiantes de Ikiam escogieron cuentos, trabajaron con la bibliotecaria y asistieron a las escuelas, pero también invitaron a que los niños visiten las instalaciones y hablen con otros estudiantes.
Esta actividad, dice, se cumplió durante el semestre pasado, entre mayo y septiembre del 2015. “Fue una primera iniciativa de la universidad que queremos que crezca con mayor apoyo”.
Al trabajo en temas de lectura se suma el proyecto Ikiam visita tu comunidad, en la que se trabajó con la Escuela César Augusto Rueda, ubicada en la comunidad Alto Tena. En ambos proyectos se contó con la participación de unos 150 niños de las dos escuelas.
Los escolares conocieron las instalaciones de la universidad. Foto: Cortesía.
Este centro de educación superior también apoya a estudiantes de secundaria y bachilleres que se preparan para rendir el ENES. Castañeda explica que en colaboración con el Sistema Nacional de Nivelación y Admisión (SNAN) se capacitó a jóvenes inscritos para rendir la evaluación. Se inscribieron 60 pero solo llegaron 15. “Hicimos talleres semanales con asistencia de profesores y técnicos docentes. Fueron dos clases semanales entre julio y agosto del año anterior”.
Todo lo anterior ha girado en fortalecer capacidades de los jóvenes pasa asegurar su ingreso a centros de educación superior.
Bajo la misma línea de potenciar la educación, Ikiam desarrolló un taller de formador a formador. Para esto, técnicos de la institución organizaron el taller al que asistieron 82 profesores de Tena. El objetivo fue fortalecer la metodología que usan los maestros de la ciudad en la enseñanza a menores.
El apoyo al emprendimiento también está en la agenda. Por eso, el semestre anterior se realizó un taller con productores de cacao de la comunidad Tsatsayaku, cerca del Puyo, para mejorar temas como la comercialización de sus productos, con apoyo de académicos de Alemania vinculados con la universidad amazónica.
Según Castañeda se trató de una especie de asesoría en temas de marketing y ventas. “Ellos producían pasta de cacao, pero querían incursionar en productos más elaborados. El proceso fue interesante, porque vieron y reconocieron sus errores y quisieron mejorar”.
A lo anterior se suman las charlas que organiza Ikiam para difundir los estudios de sus investigadores. Para esto se organizan todos los martes encuentros con la comunidad en las instalaciones rodeadas de vegetación.
Castañeda es optimista sobre lo realizado con los habitantes del sector. “Llevamos año y medio de trabajo en el Tena, somos una universidad joven. Hemos aprendido en este tiempo y vamos creando cada día mayores vínculos con la comunidad”.
Niños de la Escuela Domingo Tanguila Canelos participaron en jornadas de capacitación de lectura, en la sede de Ikiam. Foto: Cortesía Ikiam