Diario El Comercio de Perú
Marcela Mendoza Riofrío
Cuando en una casa hay Internet, no es solo porque los niños tienen que hacer la tarea. La mujer -mamá, ama de casa y trabajadora fuera del hogar en simultáneo- ha evolucionado como consumidora del Internet en el último año y se viene posicionando como parte del sector que más crece como usuaria de contenidos y del mismo comercio electrónico.
Ya lo habíamos anticipado en marzo, cuando ComScore informó que las mujeres habíamos pasado de representar al 48% del total de los internautas para convertirnos en el 49% a nivel regional, lo que significa que crecimos un 3%, casi un millón más de usuarios ganados que los varones, quienes solo crecieron un 2%. En Perú la proporción se mantiene e incluso muestra ritmos de crecimiento superiores al 40% a partir de los 40 años.
A poco de celebrarse el Día de la Madre, las cifras nos arrojan más pruebas de que las mamás de hoy son cibernéticas, viven a mil por hora y encuentran en el acceso a Internet una herramienta sustancial para su día a día, ya sea averiguar como se cura una alergia en menores de cuatro años hasta dónde conseguir esas ollas que quiere en oferta.
Según informó Intel, las mamás latinas con acceso a Internet pasan en promedio dos horas diarias conectadas, ya sea conversando en redes sociales, comprando o investigando. Deloitte/GI Latina precisa que incluso un 80% de ellas adquiere productos vía online.
«Después de mojarse las rodillas, las madres comenzaron a encontrar en la red, la posibilidad de unirse a personas que tenían las mismas inquietudes que ellas. Hoy, son quienes lideran el mercado de las opiniones y tienen papeles estelares en aplicaciones que comparan precios, otorgan descuentos, ofrecen clases de yoga, sesiones de entrenamiento físico o, simplemente, localizadores para no perder el contacto con sus hijos», refiere Rocío Posadas, gerente de consumo de Intel para Latinoamérica.
Añade que su participación online es muy activa, son asiduas a compartir información útil para sus pares antes o después de adquirir productos y entre ellas se tienen más fe que lo que pueda decir un anuncio publicitario. Ya sea con una tableta, un smartphone o un dispositivo 2 en 1, lo que quieren es estar conectadas para poder ser más productivas y ser más eficientes en la toma de decisiones en el hogar.
