Etiqueta: maíz

  • El cultivo de maíz ha sido constante los últimos años

    Maria Angelina Castillo

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    Durante el 2017, en Ecuador se produjeron cerca de 1,2 millones de toneladas de maíz en las más de 200 000 hectáreas sembradas en el país, de acuerdo con estadísticas de la Corporación Tierra Fértil, en el cantón Ventanas, Los Ríos.

    La producción se ha mantenido en cifras constantes durante los últimos tres años, con repuntes en Loja, Los Ríos y Santa Elena.

    César Vizcarra, presidente de Tierra Fértil, cuenta que la producción en el 2017 fue buena a pesar de la enfermedad que azotó las plantaciones del cereal.

    La plaga más común fue el gusano cogollero, que cuando ataca plantas jóvenes puede generar un daño irreversible. Según Vizcarra, afectó unas 80 000 hectáreas.

    Ante la plaga, el Ministerio de Agricultura y Ganadería suscribió la resolución de Declaratoria de Emergencia 046-2017, que consistió en apoyar con un programa de fumigación y control de plagas y hongos de alto riesgo fitosanitario. El exceso de humedad incidió en Guayas y Los Ríos.

    Según el Ministerio, en el invierno del año pasado el rendimiento del cultivo de maíz duro seco (con 13% de humedad y 1% de impureza) fue de 5,51 toneladas por hectárea (t/ha). En promedio, fue inferior al mismo ciclo del 2016.

    El Oro fue la provincia que superó el promedio nacional con 7,63 t/ha, mientras que la de menor fue Guayas con 4,50 t/ha.

    Entre los factores que permitieron buenos resultados de producción estuvo el de los tipos de semilla. Las más comunes fueron Dekalb 7088 (17%), Trueno NB 7443 (16%) y Somma 105 (14%).

    Según  los productores, hay aún en stock unas 20 000 toneladas de la cosecha del año pasado. Foto: Mario Faustos / LÍDERES
    Según los productores, hay aún en stock unas 20 000 toneladas de la cosecha del año pasado. Foto: Mario Faustos / LÍDERES

    Los cantones de Manabí se caracterizaron por utilizar híbridos como Insignia-105. Mientras que en Ventanas, el 88% de los agricultores trabaja con semilla certificada, que es la que han empleado durante los últimos tres años, pues genera 1,35 t/ha, un rendimiento superior a la reciclada.

    Para Vizcarra, en la buena producción influye también el uso de insumos de calidad, como fertilizantes con potasio, nitrógeno, fósforo y zinc para las plantas. Asegura que no todos los agricultores tienen las posibilidades económicas para nutrir las plantaciones como es debido.
    Los costos de producción ascienden a USD 1 800 por ha. El precio de venta del quintal -cuenta Vizcarra- varía entre USD 16 y 17, a pesar de que el precio mínimo de sustentación es de USD 14,90.

    “Las condiciones de mercado dieron para un mejor precio. Eso lo aprovechó el productor”.
    Más del 90% de la producción nacional la compra el sector industrial, en particular avicultores, porcicultores y camaroneros.

    Pronaca consume 30%, un porcentaje similar la Asociación de Fabricantes de Balanceados de Ambato (Afaba) y el otro 30%, Aprobal. En su mayoría, estos compradores están en la Costa.

    En el sector muchos son pequeños productores. Ellos poseen no más de 10 hectáreas y constituyen cerca de 75% de los cerca de 150 000 productores en el país. Pocos cuentan con tecnificación.

    Vizcarra sostiene que hace falta maquinaria y sistemas de riego a través de pozos profundos y canalización: “Hay formas de hacerlo, pero no hay la decisión política”.

    Según el MAG, solo un 15% tuvo acceso a riego el año pasado.

    Pero la tecnificación no es el único problema de los maiceros. Henry Peña, presidente de la Corporación Nacional de Maiceros, señala que requieren apoyo en temas como el almacenamiento.

    De la cosecha del 2017, que finalizó el 30 de diciembre, existe en stock cerca de 20 000 toneladas.

    Los maiceros advierten que el invierno comenzará en marzo y el grano almacenado podría chocar con la nueva producción. A esto hay que sumar, dice Peña, que el año pasado se autorizó la importación de unas 100 000 toneladas de cereales. Esperan dialogar sobre esto con el MAG.

    Trabajadores agrícolas del cantón Mocache, ubicado en la provincia de Los Ríos, durante  las labores de fumigación de las siembras del cereal. La producción del 2017 fue bastante alta. Fotos: Mario Faustos / LÍDERES
    Trabajadores agrícolas del cantón Mocache, ubicado en la provincia de Los Ríos, durante las labores de fumigación de las siembras del cereal. La producción del 2017 fue bastante alta. Fotos: Mario Faustos / LÍDERES
  • Un emprendimiento en Quito promueve el consumo del maíz

    Redacción Quito  (F)
    Contenido intercultural

    Hace un año Daycy Vinueza abrió una cafetería para promover el consumo y valor cultural de la “planta sagrada andina”: el maíz.

    Pintada en una de las paredes, una enorme mazorca da la bienvenida a los clientes de este negocio llamado La Tilla Tor. Allí, las tortillas se elaboran de manera manual y en tiesto (vasija o plato de barro).

    El emprendimiento, ubicado en el sur de Quito, es un pretexto para difundir los saberes ancestrales. “Nuestros abuelos ya tenían esta sabiduría, lo que tenemos que hacer es despertar esa sabiduría”.

    A todos sus clientes, Vinueza les explica las bondades del maíz como alimento y como planta medicinal, la conexión con la tierra y sus elementos. “La planta de maíz es considerada por la cultura centroamericana como sagrada, al punto de considerar que el origen del hombre es del maíz mismo”.

    La idea surgió cuando inició la tecnología en Medicina Andina en el Instituto Tecnológico Superior Jatun Yachay Wasi, ubicado en Colta. Allí probó las tortillas de maíz cocidas en tiesto.

    Desarrollar la receta de las tortillas le tomó un mes. Hoy, con gran habilidad, Vinueza, quien confiesa que nunca fue amante a la cocina, toma una porción de masa, la pesa y luego elabora el producto. Cuando un comensal llega a la cafetería, las tortillas son cocidas en ese preciso momento.

    El emprendimiento empezó con apoyo financiero de su familia, que aportó con capital y mobiliario. Hasta la fecha esta mujer ha invertido unos USD 7 000 en maquinaria y mobiliario para la cafetería.

    Actualmente trabaja, gracias al apoyo de ConQuito, en un programa para mejorar la imagen del negocio como el diseño de logotipo. Desde que empezó, el negocio tiene un flujo de ingresos de unos USD 50 diarios. Atiende a unos 20 clientes cada día.

    Jhonatan Moreno es un consumidor frecuente de estos productos desde hace ocho meses. Aunque vive en el valle de Los Chillos, visita la cafetería una vez al mes.

    Este cliente destaca que los precios son convenientes y el producto es de calidad, pero sobre todo que rescata la tradicional elaboración de tortillas en tiesto. “Una costumbre de nuestros abuelos que se había casi perdido”.

    La Tilla Tor tiene una persona empleada, pero espera crecer. La meta es abrir una cafetería más grande donde puedan dictarse talleres sobre saberes ancestrales. En los planes también está realizar charlas sobre emprendimiento y jornadas de medicina ancestral destinadas a promover el conocimiento andino de plantas medicinales.

    “Queremos promover de dónde somos y motivar a querer lo que es nuestro”, dice Vinueza.
    El lema de la cafetería es “randi randi”, que significa “yo te doy y tú me das”. Adoptó este lema porque el objetivo no solo es generar ingresos sino dar un servicio a la comunidad.

    Entre los ingredientes para la preparación de estas tortillas está la harina de maíz, manteca de chancho, queso y huevos. Las tortillas tienen un costo de USD 0,75. En la oferta de La Tilla Tor también están humitas, jugos de fruta naturales, entre otros productos.

    Daycy Vinueza abrió hace un año La Tilla Tor, una cafetería, ubicada al sur de Quito, para promover el consumo del maíz. Foto: Paúl Rivas / LÍDERES
    Daycy Vinueza abrió hace un año La Tilla Tor, una cafetería, ubicada al sur de Quito, para promover el consumo del maíz. Foto: Paúl Rivas / LÍDERES
  • El precio del quintal de maíz será de USD 14,90 durante abril

    Pedro Maldonado

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    En USD 14,90 fue fijado el precio mínimo del quintal de 45,36 kilogramos de maíz, con 13% de humedad y 1% de impurezas, para abril de este año. Así lo dio a conocer este 1 de abril del 2016, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (Magap).

    La entidad activó el precio mínimo de sustentación, tal como se establece en el procedimiento previsto en el Reglamento de Comercialización, aprobado por el Consejo Consultivo de Maíz.

    La medida se tomó ante la tendencia a la baja que se aprecia en el precio en el mercado internacional, y con el propósito de precautelar los intereses de los pequeños productores de maíz amarillo duro, dijo el Magap en un comunicado

    En Ecuador, las provincias de mayor producción de maíz son Manabí, Los Ríos, Guayas y Loja.

    En Ecuador, las provincias de mayor producción de maíz son Manabí, Los Ríos, Guayas y Loja. Foto: Cortesía
    En Ecuador, las provincias de mayor producción de maíz son Manabí, Los Ríos, Guayas y Loja. Foto: Cortesía
  • Una investigación de 12 años germinó semilla para el agro

    Bolívar Velasco (I)
    redaccion@revistalideres.ec

    Los resultados del trabajo científico para obtener una semilla híbrida triple de maíz, desarrollada en la Universidad Técnica Estatal de Quevedo (UTEQ), superaron las expectativas.

    Luego de 12 años de estudios y ensayos, estudiantes y docentes sacaron al mercado maicero una ‘pepa’ de alto rendimiento y resistente a todo tipo de plagas.

    Esta variedad se deriva de un proceso de selección de los mejores germoplasmas del Litoral ecuatoriano, que sirvieron como ‘madre y padre’ para el experimento.

    En una primera fase se hicieron mejoramientos genéticos que derivaron en híbridos simples.
    De este grupo se obtuvieron los de mejores condiciones (hijos), los cuales fueron cruzados con un tercero que finalmente arrojaron los resultados deseados.

    Gabriel Liu-Ba Delfini, responsable del proyecto, señala que el híbrido triple es 100% nacional y económico para el agricultor. Él plantea diferencias frente a las semillas comerciales.

    Por ejemplo, el paquete de la UTEQ requiere de una inversión de USD 600 con un alcance de 18 toneladas de producción a los 108 días, lapso en el que se consigue una humedad del 18 al 21%.

    En cambio, los kits corrientes demandan una inversión de USD 800 y 1 000, con un tiempo de cosecha de 120 días, 20 toneladas de producción y humedad al 35%.

    Las primeras pruebas de este proyecto universitario se proyectaron para la cosecha de este año, que coincidió con un impacto para el sector maicero de la provincia de Los Ríos.

    César Herrera, dirigente de la Federación Nacional de Maiceros, señala que el invierno de este año, de siete meses, causó problemas a los sembríos y no arrojó los resultados esperados.

    Debido a eso, considera que hubo un empate con la producción del año pasado, que fue de 650 000 toneladas. Eso representó el 65% de la producción a escala nacional (1 400 000 toneladas).

    Bajo esas condiciones, Herrera sostiene que no se esperan excedentes de maíz para este año y plantea que se busquen alternativas para superar la adversidad.

    El docente Gabriel Liu-Ba Delfini explica que el problema radica en que los híbridos de semillas que circulan en el país, muy poco se están adaptando a las constantes variaciones del clima.
    “Una variedad puede funcionar muy bien en Vinces, pero no en Balzar, donde quizás el invierno fue diferente. Esta dinámica explica cómo surgieron la gran cantidad de semillas que actualmente se tiene en el Ecuador”.

    En el 2012, la Asociación de Proveedores de Semillas reportó que en el país se distribuyen 27 semillas híbridas de alto rendimiento para el segmento comercial.

    Un año después, el Ministerio de Agricultura, Acuacultura, Ganadería y Pesca (Magap) firmó convenios con seis empresas privadas, para poner en marcha el Plan de Semillas de alto rendimiento de Maíz y Arroz. El plan diversificó el tipo de semillas para estos sectores que hasta los años 80 acudían a las recicladas.

    A la par, el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (Iniap) presentó las semillas H-551, H-601, H-553 y H-602 que entonces rindieron 100 quintales por hectárea.

    Pero los investigadores de la UTEQ dicen que la semilla que produjeron muestra eficiencia en climas extremos y se acopla a diversas zonas del país.

    En las pruebas realizadas, obtuvieron resultados alentadores en terrenos de las provincias de Los Ríos, Guayas y Santo Domingo de los Tsáchilas.

    El maíz tuvo una cosecha más temprana y produjo una mazorca con pepas cristalinas y duras. El proceso es seguido de cerca por los técnicos del Iniap.

    Ante este organismo, la UTEQ busca obtener el certificado de adaptación y eficiencia de la semilla híbrida triple de maíz.

    El rector de la entidad, Eduardo Díaz, comenta que la idea en el largo plazo es que sea un insumo que se incluya en el kit, que proporciona el Magap a los agricultores.

    Para esto están en la capacidad de producir alrededor de medio quintal de semillas.

    Díaz sostiene que una vez que se cuente con la certificación se adecuarán los terrenos para producir la cantidad de semillas que se necesiten para el proyecto. Los estudiantes tendrán la oportunidad de colaborar.

    Evolución

    Fundamento. El proyecto de semilla del maíz es parte de los 40 trabajos investigativos de la UTEQ, que se financian con los fondos concursables.

    Seguimiento. Bajo el paraguas de este trabajo científico se han desarrollado 15 tesis de pregrado. Estas propuestas abonaron para la investigación.

    Beneficios. Las primeras pruebas se aplicaron en predios de agricultores que tuvieron deficiencias en cosechas pasadas.

    Semillas
    En la primera cosecha con la semilla elaborada en la Universidad de Quevedo se obtuvieron 18 toneladas por hectárea. Foto: Juan Carlos Pérez / LÍDERES
  • El balanceado depende del precio del maíz

    Washington Paspuel  (I) redaccion@revistalideres.ec

    Al año se producen 2,3 millones de toneladas del alimento. El maíz ocupa el 50% del componente del producto.

    La producción nacional de balanceado está anclada a los vaivenes del precio del maíz, el principal insumo en la composición del alimento animal.

    El maíz representa hasta el 50% de la producción de un quintal de balanceado, por ello la industria que elabora el alimento espera que el precio oficial del grano, ubicado a la fecha en USD 15,9 el quintal, no sufra cambios al alza que pudieran restar competitividad con los países vecinos.

    El maíz cosechado en el país y destinado para la industria del balanceado lo absorben principalmente tres grupos, la Asociación de Fabricantes de Alimentos Balanceados para Animales (Afaba), con el 34%; la firma Pronaca, con el 30%, y la Asociación de Productores de Alimentos Balanceados (Aprobal), con el 28%.

    El director ejecutivo de Aprobal, Jorge Josse, precisa que actualmente, debido a un menor precio del maíz en Colombia y Perú, desde estos países ingresan por las respectivas fronteras cerdos y aves cuya carne compite con ventajas con la producción local. El dirigente explica que al precio oficial del maíz hay que sumarle alrededor de 60 centavos por transporte, y otro porcentaje que resulta de promediar el costo durante los meses que no hay cosecha.

    Pese a los controles, durante estos meses sin cosecha, el saco de maíz llega a los USD 20. “Así, en la práctica, el promedio anual del precio del maíz en Ecuador está entre 17 y 18 dólares el quintal, cuando en Colombia y Perú está entre 11 y 12”.

    Aunque la brecha entre la producción de maíz y la importación se ha reducido progresivamente, el país todavía compra un porcentaje del grano en el exterior. Según el Ministerio de Agricultura y Ganadería (Magap), en el 2014 se importaron 33 000 toneladas.

    El año pasado se produjeron 1,2 millones de toneladas de maíz. El pasado 10 de abril, durante una rueda de negocios en Guayaquil, la subsecretaria de Comercialización del Magap, Carol Chehab, auguró que el país podría alcanzar la autosuficiencia de maíz este 2015. Entre los 26 industriales que participaron en esa cita estuvo Pronaca. Su director de Relaciones Institucionales, Andrés Pérez, consideró allí que la industria todavía tiene un déficit de entre 100 000 y 150 000 toneladas de maíz.

    Según Aprobal, gremio que agrupa a 11 fábricas, el compromiso alcanzado hace cuatro años entre el Magap y el sector de la cadena del maíz para reducir progresivamente el precio del grano a la par del incremento del rendimiento de las cosechas no se ha cumplido.

    El precio del grano se mantiene igual desde el 2014. Pero Josse, director de Aprobal, considera que el precio oficial debería ubicarse en el rango de los USD 12, porque el rendimiento ha subido debido en gran medida al uso de semillas mejoradas. “Si el precio sigue alto se encarece el valor de la proteína animal”.

    El precio del quintal de balanceado de 40 kilos ronda entre los USD 24 y 25, dependiendo del fabricante y las características del producto. “Es un mercado muy competitivo, porque hay una gran competencia por la venta del alimento”, agrega el representante de Aprobal.

    Jacinto Alvear, gerente de Planta de la firma Molinos Champion, fabricante de balanceado y productor de carne porcina, reitera que el mercado en este sector es muy competitivo, de allí que alteraciones en el precio del maíz afectan a la industria. “Desde el punto de vista del costo, dejar de importar genera una dificultad para la industria, porque el país puede perder competitividad. La tarea del Gobierno es de hacer de árbitro entre el productor maicero y el comprador del grano, y la industria del balanceado”.

    Molinos Champion, cuya planta se ubica en el norte de Guayaquil tiene 53 años en el mercado, cuenta con compañías subsidiarias que producen carne de cerdo. Actualmente, la firma elabora 120 toneladas métricas de balanceado al año, para alimento de cerdos, aves, ganado, camarón, y mascotas. Marcelo Sola, subgerente de Operaciones de esta empresa, considera que para mantenerse en el mercado de la industria se debe procurar una constante mejora en tecnología y procesos productivos.

    En la planta de la empresa Molinos Champion, ubicada en el norte de Guayaquil, se produce balanceado para aves, ganado, cerdos y para alimento de camarón. Foto: Gabriel Proaño/ LÍDERES
    En la planta de la empresa Molinos Champion, ubicada en el norte de Guayaquil, se produce balanceado para aves, ganado, cerdos y para alimento de camarón. Foto: Gabriel Proaño/ LÍDERES
  • En sus snacks se degusta el sabor de la botana mexicana

    Redacción Quito

    Un ‘pedacito’ de México en Ecuador. Así se podrían calificar a las botanas de maíz que fabrica Cobolyba. Hace cuatro años Javier Lasso, gerente general de este negocio, junto a sus padres, su esposa, dos hermanos y dos cuñadas, se unieron para elaborar snacks en base a una receta mexicana.

    Mi cuñada, que es de ese país, nos dio la idea. Primero, ella preparaba las botanas en casa y las servía en reuniones, etc. La gente le decía que por qué no las vendía. Hicimos un estudio de mercado y vimos que había aceptación. Unimos capitales y comenzamos a trabajar”.

    La inversión inicial de los socios fue de USD 40 000. Compraron maquinaria básica: una amasadora y una tortilladora. Lasso, a través de sus conocimientos en ingeniería mecánica, fabricó una freidora. Todo se colocó en su planta en la zona de Tumbaco, al noreste de Quito.

    Allí se fabrican las hojuelas en base a maíz blanco (mote), y se le añade sal, si es que el producto es natural, o saborizante de limón, para esta variedad. Finalmente se empaca en fundas pequeñas (estas las compran a Oyempaques) y se distribuye en una furgoneta de la empresa.

    El producto se comenzó a vender a familiares y conocidos, y luego en puntos de venta como gasolineras. Poco a poco se fue extendiendo a colegios, escuelas, restaurantes, cafeterías, panaderías (Arenas), farmacias (Fybeca) y universidades.

    “Hicieron un excelente proceso de marketing, y decidimos comprarle producto a Cobolyba. A la semana adquirimos unas 200 unidades -de fundas- de botanas y cinco kilos de nachos, que es otro de los productos que ellos venden”, indicó Danilo Freire, gerente propietario del bar de la Universidad Católica de Quito.

    La empresa también elabora y comercializa tortillas para la preparación de tacos. Estas, junto a los nachos, las venden bajo pedido. Para este año aspiran a lanzar un nuevo producto, que por el momento prefieren mantenerlo en reserva.

    Lasso declara que el crecimiento de la empresa ha sido importante. “Empezamos produciendo 5 kg diarios. Ahora hacemos 60 kg (día), y al finalizar el 2013 esperamos procesar 160 kg al día. Nuestras ventas, al inicio, eran de USD 800 al mes, y ahora son de 6 000”.

    Lo propio sucede con la facturación del 2012, que fue de USD 42 000, mientras que en el 2011 fue de USD 21 000. Para este año su proyección es llegar a ventas por USD 90 000.

    “Me gustan mucho las botanas, porque son suaves y tienen un rico sabor”, indicó Carmen Paredes, quien comenta que ha adquirido los snacks en diferentes puntos de venta.

    Precio y producto

    Las botanas.  En su empaque pequeño tienen un precio de venta al público de USD 0,35. La presentación de 250 gramos cuesta USD 2,50.

    La producción.  La materia prima se importa desde Colombia.