Etiqueta: origen

  • Esta iniciativa rescata un producto de origen inca

    Carolina Enriquez

    redaccion@revistalideres.ec

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    Es parecida al papanabo y tiene múltiples propiedades medicinales. Se trata de la maca, un tubérculo ancestral andino que la empresa Churata Super Foods decidió rescatar y comercializar.

    Churata es un negocio familiar, cuya dirección está a cargo de Katty y Yoly Vargas. La iniciativa arrancó hace tres años como un proyecto social. “Empezamos a trabajar con comunidades campesinas. Queríamos implementar algo nuevo para ellos, un cultivo alternativo a los que tienen, como los de papa, melloco y haba”.

    La maca crece sobre los 3 000 metros sobre el nivel del mar y se adapta, únicamente, a los páramos andinos. Se la considera como el cultivo perdido de los incas, ya que desde la colonización española su uso quedó relegado.

    Hoy se cultiva con fuerza en Perú y Bolivia. Con su proyecto, las hermanas Vargas tratan de rescatarla en Ecuador y que los consumidores la prueben en diferentes presentaciones.

    Churata Super Foods, que le debe su nombre a la voz quichua que significa regalo de los dioses, procesa y distribuye derivados de maca. En su planta, ubicada en la zona de La Victoria, en el sur de Quito, se produce polvo del tu­bérculo para diferentes usos.

    “Se puede mezclar en batidos, agua, jugos, preparaciones para postres, batidos, recetas de sal, entre otros. Es parte de los llamados superalimentos, pues es un multivitamínico; tiene calcio y hierro. Es un energizante natural, antiestrés, antidepresivo, controla el metabolismo”, dice Katty.

    Yoly y Kathy Vargas son las dueñas de este negocio. La iniciativa arrancó hace tres años como un proyecto social. Foto: Galo Paguay / LÍDERES
    Yoly y Kathy Vargas son las dueñas de este negocio. La iniciativa arrancó hace tres años como un proyecto social. Foto: Galo Paguay / LÍDERES

    El proceso para obtener este producto se inicia en las plantaciones de los páramos de Pichincha y Chimborazo. Cinco agricultores en la zona de los Ilinizas y tres en la Sierra Centro.

    Cada uno tiene, en promedio, 2 hectáreas de terreno. José Cajilema comenzó hace dos meses, como prueba, con el cultivo.

    “Estamos viendo cómo nos va. Si vemos que todo sale bien sembraremos más. Cultivamos en media hectárea. Nos encontramos en la comunidad de Totoras, en el cantón Alausí”, explica.

    El cultivo dura siete meses. Una vez que se cosecha, el tubérculo se seca al sol por dos meses y tras ese tiempo se envía a la planta.

    En ese sitio se lo convierte en polvo que se comercializa en el país desde hace año y medio en presentaciones de 250 gramos, como suplemento nutricional; tiene maca roja, negra y amarilla.

    Es un producto ideal para deportistas, debido a que genera energía. También sirve para quienes tienen otro tipo de dolencias que les restan vitalidad o como regulador hormonal para las personas con dicho problema.

    Una de las compradoras es Elena Cadena, quien adquiere el polvo de maca desde el año pasado. “Lo que más destaco son las propiedades que tiene. Yo tengo un problema de ovarios y me ha ayudado mucho. Lo compro cada mes, lo consumo en la mañana en batidos. Estoy satisfecha”.

    Churata Super Foods también produce hojuelas de maca. La gente puede adquirir la oferta de la empresa en diferentes centros de comercialización como TVentas, Ecuanatu, Punto Natural (farmacias Medicity); en este último está en Quito, Guayaquil, Cuenca, Manta, Ibarra y Riobamba.

    Las emprendedoras también comentan que se dan a conocer en ferias. Por ejemplo, este mes participarán en una por Navidad en el Centro de Exposiciones Quito.

    Para ellas, llegar a este punto ha sido todo un desafío porque cuando empezaron nadie creía en su propuesta. Se financiaron, en un inicio, con la venta de bienes propios para impulsar su negocio.

    Con los agricultores firmaron convenios a través de los cuales se determinó que Churata Super Foods les ofrecía asesoría técnica y ellos ponían la tierra para el cultivo del tubérculo andino. “Investigamos, hicimos estudios, nos capacitamos en Perú, estudiamos y ahora estamos en operación del proyecto”, dice Katty.

    Con el paso del tiempo en el negocio se ha invertido USD 30 000, que incluyen la planta procesadora, equipamiento, etc.

    La compañía tiene planes para el futuro entre los que está la producción y venta de píldoras de maca. También busca exportar.

    Hay la expectativa de ofrecer productos en los que se combine maca con otros superalimentos como chía, amaranto, etc.

    Una imagen de dos trabajadoras de la planta de Churata Super Foods, en el sector de La Victoria, en el sur de Quito. Todo el procedimiento es manual. Foto: Galo Paguay / LÍDERES
    Una imagen de dos trabajadoras de la planta de Churata Super Foods, en el sector de La Victoria, en el sur de Quito. Todo el procedimiento es manual. Foto: Galo Paguay / LÍDERES
  • El ‘fracking’ es origen de nuevas dudas

    LITTLE ROCK, EE.UU. IPS (I)

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    El indígena cherokee Earl Hatley es testigo de las consecuencias de la utilización de la fractura hidráulica, también conocida como “fracking”, en su tierra natal para la obtención de gas de esquisto.

    “El fracking es dañino para las fuentes de agua, la vida silvestre y el valor de las propiedades. Además, ha ocasionado sismos donde no se producían. Desde 2007 empezó a temblar más y más cerca de los pozos”, cuenta este activista, guardián del agua y fundador de la organización no gubernamental Acción Local Ambiental Requerida.

    Hatley tiene una propiedad en Payne, en el estado de Oklahoma, en el centro de EE.UU., que asegura que ya no puede visitar debido a las emisiones tóxicas de los pozos.

    “La industria del gas y el petróleo ventea el gas fugitivo y no monitorea las fugas, pues no hay regulaciones en Oklahoma que la obliguen a hacerlo. Tuvimos la oportunidad de evaluar algunos pozos y encontramos que todos estaban mal”, relató.

    En Oklahoma están activos casi 50 000 pozos de gas natural y de los cuales unos 4 000 se explotan mediante fractura hidráulica, al menos 200 en Payne.

    Con panoramas similares en otros estados, la preocupación es el denominador común del movimiento estadounidense antifracking con la llegada a la presidencia, el 20 de enero, del magnate republicano Donald Trump y su propuesta de impulsar la industria de los combustibles fósiles, pese a su impacto en el calentamiento del planeta.

    EE.UU. es el país que más intensamente explota el gas y el petróleo de esquisto o lutitas, también conocido por el vocablo inglés shale, lo que le ha permitido convertirse en el mayor productor mundial de hidrocarburos, al ocupar el primer lugar en la extracción de gas y el tercero de crudo.

    Trump “manda señales de cuál va a ser la percepción de apoyo al sector y que empeorará los impactos ya conocidos del fracking, como la contaminación del agua y la emisión de metano”, analiza el argentino Daniel Taillant, presidente del Centro de Derechos Humanos y Ambiente.

    En los depósitos de los hidrocarburos de esquito, su molécula está atrapada en rocas profundas, perforadas y quebradas por la inyección cuantiosa de una mezcla de agua, arena y aditivos químicos, que se consideran nocivos para la salud y el ambiente.

    De esa forma, el gas o el petróleo se liberan. Pero la tecnología genera masivos volúmenes de desechos líquidos que deben tratarse para su reciclaje y de emisiones de metano, más contaminante que el dióxido de carbono, el mayor responsable del calentamiento planetario.
    Diversidad de estudios confirman los daños al agua, al aire, al paisaje y el desencadenamiento de sismos.

    Para la industria del fracking, los buenos tiempos retornarían de la mano de Trump, que en mayo lanzó un plan para los primeros 100 días de gobierno, en caso de ganar las elecciones de noviembre, en que establecía un decidido impulso para el sector, pese a las denunciadas secuelas ambientales, sociales y económicas.

    El programa incluye la supresión de todas las barreras sobre las reservas energéticas, incluyendo el gas natural, petróleo y “carbón limpio”, valoradas por el documento en 50 billones (millones de millones) de dólares, en lo que denomina “revolución energética” destinada a producir una “vasta riqueza nueva”.

    Asimismo, el presidente electo prometió eliminar los obstáculos regulatorios existentes contra los fósiles y facilitar el avance de “proyectos de infraestructura energética vitales”, como oleoductos y gasoductos.

    Datos de la estatal Administración de Información de Energía indican que, de la producción diaria estadounidense de más de nueve millones de barriles equivalentes de gas y petróleo, 51 por ciento fueron extraídos en 2015 mediante la tecnología de la fractura hidráulica, pese al hundimiento de los precios internacionales ese año.

    Se considera que el costo de la extracción por fracking de un barril (de 169 litros) tiene un piso actual de USD 65, pero el sector ha mantenido la extracción, que ahora es alentada, además de las promesas de Trump, por la paulatina alza de los precios tras la decisión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo de reducir su producción colectiva desde enero.

    La fractura hidráulica también ha desatado respuestas locales. Los estados de Vermont y Nueva York ya vetaron el uso de la tecnología, en California seis condados (división administrativa de los estados) siguieron esa vía, aplicada también en Florida por 32 condados y 48 ciudades.

    Mientras, el estado de Maryland impuso en 2015 una moratoria de dos años y medio, pero el de Texas inhibió su prohibición, mientras que la Corte Suprema del de Colorado resolvió suspender en mayo último los vetos aplicados por dos ciudades.

    Parte de un campo de gas de la localidad de Damascus, en el estado de Arkansas. EE.UU. es el país donde más intensivamente se desarrolla la industria de los combustibles de esquisto. Fotos: IPS
    Parte de un campo de gas de la localidad de Damascus, en el estado de Arkansas. EE.UU. es el país donde más intensivamente se desarrolla la industria de los combustibles de esquisto. Fotos: IPS
  • La exportación de plátanos y yucas es el origen y la mayor estrategia de esta compañía

    Thalíe Ponce / Redacción Guayaquil

    Proveerse de la mejor materia prima, ayudando al productor a mejorar su calidad de vida es la filosofía de Platayuc. Esto se apoya con un buen trato al colaborador, dice el quiteño Vinicio Reyes.

    Él es el Gerente General de esta empresa dedicada a la producción de chifles de plátano dulce y salado; ‘chips’ de yuca; y yuca y plátano pelados. El 100% de esta producción se exporta a Estados Unidos.

    La firma nació en el 2007 cuando la estadounidense Plantain Products buscaba proveedores ecuatorianos para su marca Chifles. Con sus más de 20 años de experiencia en el sector agropecuario, Reyes decidió asumir el reto. Así, la planta se instaló en El Carmen (Manabí).

    Hoy, Platayuc tiene oficinas en Quito y dos plantas de producción. La primera, de 7 000 m², está ubicada donde inició la firma. La segunda, de 1 950 m², está en Guayaquil. Esta última empezó a operar en el 2011 y para ello Platayuc invirtió cerca de USD 250 000. El año pasado la firma facturó USD 1,2 millones.

    A escala nacional, en la empresa trabajan 41 personas; 32 en el área operativa y nueve en la administrativa. Las mujeres son el 90% de los colaboradores.

    En un principio, las ventas se realizaban únicamente a Plantain Products. El producto de exportación era el plátano barraganete. Sin embargo, la participación en ferias internacionales, junto a Pro Ecuador, atrajo nuevos clientes que impulsaron la diversificación del portafolio de productos de la empresa.

    Así, se incluyeron en su cartera ‘snacks’ de yuca y chifles de sal y dulce. Hoy las exportaciones se realizan al granel y bajo marca propia. Se envían semanalmente dos contenedores de 5 000 kilos.

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    Denise Cajuste es analista de Ferias y Misiones Comerciales de Pro Ecuador. Ella indica que para seleccionar a las firmas para participar en ferias internacionales se consideran la calidad de los productos, el cumplimiento de normas tributarias, entre otros factores relacionados.

    Cajuste señala que la institución auspició la participación de Platayuc en las ferias APAS de Brasil y Agrotech de Chile, en el 2011. Adicionalmente, Pro Ecuador envió muestras de la firma al Festival Gastronómico de Ecuador en México (2011) y a la Import Goods Fair en Corea del Sur (2012). “Las muestras de los productos tuvieron una excelente acogida”.

    Reyes afirma que esta aceptación en el mercado extranjero se debe a los altos estándares de calidad manejados por la empresa. Las normas internas de aseo y seguridad son muy estrictas. Además, la producción se controla desde el inicio.

    Sobre esto, Reyes indica que Platayuc tiene un convenio con la Escuela Politécnica del Litoral (Espol). Con expertos de la institución educativa, se realizan pruebas a las plantas de plátano.

    Estas plantas se controlan en invernaderos para garantizar su calidad. Luego, se las provee a los productores, para lo cual la empresa ha firmado convenio con 15 asociaciones de productores del sector.

    Por este y otros procesos, la firma cuenta con certificaciones internacionales. Dos de las más destacadas son la Business Alliance for Secure Commerce (BASC) y la Organic BCS Öko-Garantie.

    Bajo el respaldo de estas certificaciones, Platayuc iniciará en septiembre exportaciones al mercado europeo. Los destinos principales son Bélgica, Francia, España y Alemania. Además, está en negociaciones para exportar en el futuro a Chile.

    Juan Carlos Merino es asesor industrial de La Fabril, firma que vende aceite a Platayuc. Merino afirma que la relación comercial inició en el 2007 y que la empresa se destaca por su seriedad y compromiso social. “Tienen una gran visión”, añade.

    Otro proveedor de Platayuc es la fabricadora de plásticos Fupel, que vende a la firma los empaques para los productos. José Cueva, representante de ventas de Fupel, señala que la compañía ha sido muy profesional y puntual en los pagos.

    Los productos

    • Los snacks. Producen chifles de dulce, elaborados con plátano dominico; y de sal, elaborados con barraganete. También producen ‘chips’ de yuca.
    • Los productos pelados. La yuca y el plátano se venden pelados al mercado de EE.UU. Se saca la cáscara para que el producto esté listo para utilizar.

  • El curioso origen de las empresas

    El Mercurio, (GDA)

    Mientras Samsung fue fundada como una compañía que vendía pescado, otras como Nokia y Peugeot también nacieron en un rubro muy distinto al que las vio triunfar.

    Nintendo vendía naipes. Está claro que el foco de Nintendo siempre fue el negocio de la entretención. La firma fue fundada en Kioto, en 1889, por Fusajiro Yamauchi, y por más de medio siglo se dedicó solo a la producción y distribución de un juego de cartas llamado hanafuda. Estos naipes se hicieron muy populares, hasta el punto de que Nintendo se convirtió en el principal fabricante del país y en la marca más utilizada en los salones de apuestas de los yakuza. En 1974 la empresa tuvo sus primeros coqueteos con el mercado del videojuego.

    Los neumáticos de Nokia. Su historia se remonta a 1865, cuando Fredrik Idestam y su mujer abrieron una fábrica de pulpa de madera para la fabricación de papel en Finlandia. Años después se unió a una empresa vecina y comenzó a fabricar botas de goma y neumáticos. En 1922, el grupo adquirió una compañía de cables de Helsinki y así comenzó su expansión en las telecomunicaciones.

    Opel nació en el negocio de las máquinas de coser. Hoy, su lema es ‘Wir leben Autos‘ (Vivimos los automóviles), nada más distinto que su rubro original.

    Lee Byung Chul fundó Samsung en 1938 en Daegu (Corea), para exportar pescado seco, vegetales y frutas. Tras una década, Samsung -que significa ‘tres estrellas’ en coreano- tenía sus propios molinos de harina. En 1969 se sumó a Sanyo Electronics y comenzó el camino hacia convertirse en un gigante de la electrónica.