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  • Paletas que llegan a 20 ciudades del Ecuador

    Modesto Moreta

    (I) 
    redaccion@revista lideres.com

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    La perfecta mezcla de los sabores y rellenos de frutas, micheladas y los ‘poptails’ (combinación de un coctel y un polo de hielo) permitieron que Rey Paletas Cía. Ltda., tenga demanda y gane mercado a escala nacional.

    La firma ambateña abrirá a finales de diciembre del 2019 un nuevo local en Ambato y, de esa forma, tendrá presencia en 20 ciudades a través de distribuidores y dos franquicias de la marca a escala nacional. Además, cuenta con 12 puntos de ventas en gasolineras, minimercados y supermercados. La meta será tener hasta el próximo año alrededor de 100 locales en distintas ciudades.

    En este año, las ventas llegan a los USD 20 000 mensuales. Además, cuenta con 10 trabajadores en la planta y 44 en los locales de la franquicia. Los principales mercados de la firma son Esmeraldas, Ambato, Arenillas y Cuenca.

    Estos locales se caracterizan por ser espacios acogedores donde se comercializan las 32 variedades de helados de crema con fruta que producen. Además, las micheladas y los ‘poptails’ que produce Rey Paletas.

    La historia de la empresa inició en el 2009, cuando Danny García, gerente y fundador, renunció a la fábrica de confites donde trabajaba, en Quito. Pensó que era tiempo de tener su emprendimiento de chocolates.

    Pero el jefe de mantenimiento de la fábrica de caramelos le sugirió que asumiera el manejo de la microempresa de helados de su padrino en Alóag. Tras varias reuniones, García aceptó y puso en marcha el negocio.

    Recuerda que alquiló el local y las máquinas a Juan Guañuna, el propietario de la heladería, en USD 800 mensuales. Él le enseño la fabricación de los helados de crema y de agua. Así fundó Helador (Helados Ecuador).

    En la fábrica de los helados Rey Paletas se trabaja en doble jornada para producir 2 000 paletas diarias y enviarlas a las franquicias.
    En la fábrica de los helados Rey Paletas se trabaja en doble jornada para producir 2 000 paletas diarias y enviarlas a las franquicias.

    Renunció a los dos meses. Viajó a Manta, en Manabí, para elaborar helados artesanales, pero la baja calidad de la leche y la falta de crema hicieron que dejara el negocio.

    Una llamada de su novia y actual esposa Narcisa Valverde permitió que llegara a Ambato. Al arribar y conocer la ciudad concluyó que era pujante y con una ubicación estratégica con el abastecimiento de productos, especialmente de frutas.

    Vendió la idea de la fabricación de helados a su pareja, pero surgió otra de colocar una cafetería. Al final decidieron crear una fábrica de helados. Con una inversión de USD 6 800, que consiguieron con fondos propios y un crédito en una entidad financiera, importaron una máquina productora de paletas desde Brasil en el 2009.

    Realizaron las pruebas y decidieron arrendar un local en las calles García Moreno y Tomás Sevilla. Comenzaron con los helados de leche y de agua. Al día fabricaban 200 helados que los vendía en 0,25 centavos cada uno.

    Con el negocio en crecimiento, decidió llevar el emprendimiento a Quito, por abaratar costos en la materia prima. Desde allá enviaba a Ambato para la comercialización e ideó producir helados gemelos a 0,10 centavos. A los tres meses regresó nuevamente a la capital de Tungurahua. Con los moldes comenzó producir los helados de hielo con el nombre Rey de las Paletas. Las llamadas no pararon para comprar y la demanda subió a 1 000 helados diarios.

    El negocio de García dio un giro cuando conoció a Sebastián Ortiz y a Andrés Guamán, en el 2016, mientras vendía los helados a un cliente de Riobamba. Ellos conversaron sobre los costos de producción que no cubrían los gastos. Propusieron una consultoría para sacar los costos, mejorar el tema de los procesos y enfocarse a los productos rentables. Ahí surgió la idea de producir los helados con rellenos abriendo locales para vender este producto. Así iniciaron a combinar sabores con frutas.

    Las ventas se extendieron a Manta, Portoviejo y Jipijapa; luego a Latacunga, Ambato y otras urbes. A finales del 2018 cambió el nombre a Rey Paletas.

    Karen Alderete abrió su local de Rey Paletas en agosto de este año en El Carmen, en Manabí. Cuenta que la calidad de sus productos y la innovación en la combinación de sabores de frutas y también de cocteles de una forma creativa está pegando en los niños, jóvenes y adultos, los principales compradores de las paletas.

    Las ventas se incrementaron en un 15% al mes. “Existe una buena aceptación de las paletas de los clientes en nuestro cantón, y los locales en donde se invirtieron USD 10 000 son acogedores y familiares, por el crecimiento de las ventas mensuales”, comenta Alderete.

    EL GERENTE

    Danny Proaño

    Nuestra empresa está en constante crecimiento, eso se debe nuestros productos de calidad. Utilizamos ingredientes que producen nuestros agricultores. Es más, reinvertimos nuestras utilidades en la compra de nueva maquinaria e innovamos con nuevos sabores. También suma la capacitación constante de la mano de obra y el apoyo de los técnicos en alimentos, fabricación y la variedad de sabores nos hace diferente.

    LAS CIFRAS

    40 empleados trabajan en la actualidad en Rey Paletas. En el 2009, cuando comenzó el negocio, solo tenían dos trabajadores.

    2 000 helados de crema con sabores se venden cada mes en las ciudades de Ambato, Quito, Esmeraldas y otras urbe.

    20 locales tiene la marca. El primer local se abrió en diciembre del 2017 en Ambato, luego en Riobamba, Quito, Salcedo, Cuenca, Arenillas, El Carmen, San Vicente, Baños, Puyo, Santa Isabel… Hoy ya franquicia.

    La firma ambateña fue creada en el 2009. En la actualidad produce más de 32 variedades de sabores, micheladas y ‘poptails’. Fotos: Glenda Giacometti / LÍDERES
    La firma ambateña fue creada en el 2009. En la actualidad produce más de 32 variedades de sabores, micheladas y ‘poptails’. Fotos: Glenda Giacometti / LÍDERES
  • Las paletas hechas con coco y chontaduro

    Marcel Bonilla

    Los helados de chontaduro son uno de los más apetecidos en Andarele, la primera paletería artesanal que funciona en el balneario de Las Palmas, en Esmeraldas.

    El chontaduro es una de las frutas que caracteriza a las poblaciones afros del norte de Esmeraldas. Los habitantes de esas comunidades están dedicados al cultivo de la fruta en sus fincas. La cosecha va a la venta y alimentación.

    Cristina Alcívar, propietaria de la paletería artesanal Andarele, acumuló algunos conceptos de la cultura afroesmeraldeña para dar marca a su producto y empezó por el nombre Andarele, una de las danzas tradicionales de Esmeraldas que denota alegría, jolgorio.

    Las paletas también se elaboran con frutas de la zona, a más de chontaduro. Las hay de coco con relleno de manjar, otra de leche de coco y jengibre (llamada cocojengibre), cacao, así como una paleta que combina yogur con maracuyá y mora.

    La iniciativa lleva en el mercado tres años y empezó con la venta de helados de cono. Luego Alcívar decidió ingresar al mundo de la paletería con frutas en su interior, con una etiqueta que promocione a Esmeraldas y sus tradiciones.

    El negocio se financió con un capital inicial de USD 5 000. El dinero se obtuvo de la liquidación que Alcívar recibió al renunciar a su trabajo. Ese capital sirvió para comprar la primera máquina de helado y la mueblería del local.

    José Luis Plaza es parte del negocio familiar. Él explica que luego de trabajar 15 años en Quito regresaron a Esmeraldas para emprender su negocio.

    En la actualidad la inversión supera los USD 20 000, con un crédito de la banca privada. La familia está tramitando un nuevo crédito de USD 20 000, para ampliar su local y establecer nuevos puntos de ventas en la ciudad.

    La heladería produce 2 000 unidades al mes. La venta de las paletas le genera una facturación que oscila entre USD 4 500 y 5 000 al mes, con lo que financian su continuidad. El costo por unidad va desde USD 1, 50 hasta USD 180.

    Este emprendimiento se apoya en entidades públicas para crecer. A través del programa creciendo con mi negocio de la Prefectura de Esmeraldas se ha empezado a trabajar en nuevas metodologías, que va desde aperturas de nuevos mercados y la obtención del registro sanitario.

    Por ahora se trabaja en los parámetros que exigen las normativas del nuevo mercado, para incursionar en otros mercados. Por eso se impulsa una propuesta para llegar a clientes locales, tiendas de barrio, escuelas, colegios y centro comercial de la ciudad.

    La preparación de los emprendedores se lo hace con el apoyo de la Prefectura de Esmeraldas que mantiene un convenio con PNUD, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, destinado a potenciar las iniciativas con 16 técnicos que enseñan en esa modalidad.

    La Prefectura financia las capacitaciones a los emprendedores para fortalecer las iniciativas de negocios, con asesoramiento técnico y aperturas de nuevos mercados.

    También se apoya en la compra de equipos técnicos luego de hacer un diagnóstico. Por eso Andarele busca que se financie la compra de una nueva máquina que supera los USD 8 000, explica Cristian Hernández, técnico de la Prefectura de Esmeraldas.

    La economista Roxana Benítez de la Escuela de Pymes de la Universidad Católica de Esmeraldas, cree los nuevos emprendedores buscan relacionar sus actividades con la cultura, eso implica imágenes y nombres, para posicionar el nombre de la provincia.

    Uno esos fue Plaza Marimba, en Las Palmas, un local donde se crearon 12 pequeños espacios para la venta de comidas rápidas, convirtiéndose en uno de los más visitados en Esmeraldas.

    “Ahora no solo se elaboran helados con chontaduro, también se hacen con jalea de pepepán y zapote negro, frutas que se cultivan en poblaciones afros del cantón San Lorenzo”, explica la investigadora de la Universidad Católica de Esmeraldas.

    Cristina Alcívar, propietaria de la paletería artesanal Andarele, enseña los productos que oferta en Las Palmas. Foto: Marcel Bonilla/ LÍDERES
    Cristina Alcívar, propietaria de la paletería artesanal Andarele, enseña los productos que oferta en Las Palmas. Foto: Marcel Bonilla/ LÍDERES
  • Con las paletas artesanales se abre mercado

    Redacción Quito

    Innovación en la combinación de sabores frutales fue la motivación para abrir La Paletería by Alex. El establecimiento ofrece paletas (helados) elaborados de manera artesanal.

    Los colores que nacen de la fusión de sabores entre naranja y fresa, o las paletas en forma de corazones, caras felices o de patas de animales del producto -porque también se elaboran paletas para el consumo de mascotas– son algunos de los valores agregados que tiene el emprendimiento indica Alexandra Bedoya, propietaria del establecimiento.

    La quiteña de 25 años y máster en Comunicación Organizacional graduada en la EAE Business School en España, cuenta que la iniciativa de ponerse este negocio surgió durante un viaje de vacaciones a Bogotá (Colombia) hace dos años, donde las paleterías están en boga.

    La idea de este negocio cada vez se hacía más fuerte y por eso, en septiembre del 2015, Bedoya viajó a México para aprender el arte de la paletería, la fusión de sabores, y buenas prácticas de manufactura. Posterior a este viaje se dirigió a Italia para cotizar las máquinas para instalar en el emprendimiento.

    Desde enero del 2016, el proyecto pasó por un estudio de mercado para determinar si los consumidores conocían lo que eran las paletas, los sabores que más gustaban entre otros aspectos. Con los resultados, Bedoya inauguró el primer local de La Paletería by Alex en mayo anterior.

    El establecimiento está ubicado en el norte de Quito, y además de haber decorado el sitio para que los clientes disfruten de su producto en el lugar, el local también es ‘pet friendly’. Es decir, que las mascotas pueden probar una paleta de banano o sandía con sus dueños. La receta de este producto fue supervisada por un veterinario, detalla Bedoya.

    Además de la combinación de frutas, crema o yogur 100% natural, la quiteña explica que su emprendimiento tiene otros valores agregados como la personalización de las paletas, que incluso la pueden tomar personas diabéticas o hipertensas porque son libres de gluten y azúcar.

    A la fecha, La Paletería by Alex ofrece 45 sabores y estos se elaboran en la planta de producción ubicada en el local del norte de Quito. Para la fabricación de un molde que contiene cuatro paletas se demora cuatro horas en refrigerarse. Y se lo realiza bajo la supervisión de personas expertas en la cocina. Al momento de ofrecerlas al público, el producto puede estar en vitrina solo 24 horas: “lo que da la garantía de que las paletas son frescas”, detalla Bedoya.
    En ingredientes, La Paletería By Alex tiene algunos proveedores en el Mercado Mayorista y con plantas lecheras industrializadas. Solo el chocolate es importado con distribuidores.

    Wilson Matabay es vendedor de una empresa láctea privada. Él le provee al emprendimiento de dos quintales de leche en polvo con cero grasa desde hace tres meses; explica que lo bueno del producto con este ingrediente es que contiene proteína.

    En julio de este año, La Paletería by Alex abrió un local en Cumbayá. Y al ver la aceptación de los quiteños, Bedoya planifica tres estrategias como la creación de nuevos sabores, la posibilidad de abrir locales en el sur de Quito y Guayaquil y darle fuerza al negocio en las redes sociales.

    Foto: Paúl Rivas / LÍDERES Alexandra Bedoya es la propietaria de La Paletería by Alex. El local oferta paletas artesanales de frutas.
    Foto: Paúl Rivas / LÍDERES
    Alexandra Bedoya es la propietaria de La Paletería by Alex. El local oferta paletas artesanales de frutas.
  • Flores y paletas dan forma a los dulces de Rochy Pops

    Redacción Guayaquil

    Cuando buscaba un obsequio original para el cumpleaños de su esposo, en agosto del año pasado, la guayaquileña Rosa Morales, ideó un negocio. “No quería regalarle una torta tradicional y aburrida”, dice. Así, se le ocurrió darle una forma redonda a la masa y sujetarla por una vara plástica, a manera de paleta.

    La idea la había visto meses atrás en un programa de televisión pero ella le dio un toque personal, con su propia receta. Hizo un arreglo con varias unidades y se lo envió a la oficina de su esposo. Inmediatamente comenzaron los pedidos.

    Morales no desaprovechó la oportunidad de emprender y aceptó los pedidos de las tortas, a las que dio el nombre de ‘cake pops’. Para esto, realizó una inversión de unos USD 500, que destinó a la compra de ingredientes e implementos de cocina. También creó la marca Rochy Pops, combinando el nombre de los productos con su apodo.

    Los dulces los hacía de tres sabores: chocolate, fresa y vainilla. Sin embargo, Morales quería diversificar su oferta. Fue así, que desarrolló otras recetas, combinando ingredientes. Hoy, oferta 25 sabores distintos, entre ellos chocolate con menta, oreo, piña colada, napolitano, almendras, chocolate con canela…

    Otra idea innovadora fue la de dar forma de flores a los postres. Lo hizo en febrero del año pasado, pensando en algo que pudieran obsequiar sus clientes a sus parejas en la época de San Valentín. A estos últimos los llamó‘rosas pops’.

    La acogida de estos dulces fue excelente. Sin embargo, la masa de la cobertura era muy dulce, dice la emprendedora. Por ello estuvo realizando pruebas con distintos ingredientes, hasta que en agosto de este año, creó una mezcla de leche condensada con leche en polvo, que utiliza para dar forma a las flores.

    Los cake pops y rosa pops son divertidos y además el sabor es excelente, opina Gloria Charcopa, una clienta de Rochy Pops. Ella señala que estos productos son una muy buena opción para obsequiar ya que son innovadores. “Además, ofrece una diversidad de sabores para todos los gustos”, agrega.

    Alexis Aspiazu es otra clienta de esta microempresa. Ella es propietaria de un negocio de venta por catálogo y ha comprado los cake pops para obsequiarlos en reuniones laborales. “Lo bueno es que son dulces que no solo le gustan a los niños. Por ejemplo, los que tienen mezclas con licor le gustan mucho a los adultos”.

    Aspiazu añade que son postres frescos y el acabado es excelente. “Son agradables desde su presentación”.

    Sobre la oferta

    • Los precios. Las rosas pops tienen un valor de USD 2,50, mientras que los cake pops los vende en 1,50. Los pops en forma de personajes tienen el precio de USD 2.
    • Otros productos. Rochy Pops oferta otros dulces como tortas tradicionales y decoradas; alfajores y brownies. También elabora bocaditos de sal y comercializa bocaditos congelados.