Diana, Karina, David y Damián Aguilar Cadena crearon, en el 2018, Campo Real. Este emprendimiento familiar surgió para dar un valor agregado a la miel de abeja.
El negocio, domiciliado en la parroquia de San Roque, en Antonio Ante (Imbabura), empezó con la producción de turrones con este néctar y otros frutos deshidratados. Ahora busca incursionar en la línea de granos secos.
Diana Aguilar es ingeniera agroindustrial. Ella renunció a su trabajo en una firma de alimentos y se puso al frente de esta iniciativa, que se abre campo en supermercados, tiendas, cafeterías. La joven recuerda que todo empezó luego que su hermano David, como pasatiempo, instaló -tres años antes de iniciar el negocio-, un panal junto a la casa de la familia.
Él es ingeniero agrónomo y en sus tiempos libres y los fines de semana se interesó por la apicultura. En los inicios, la miel la vendían en envases de plástico y de cristal; en este último artículo, empezaron a incorporar una etiqueta con la marca de Honey Campo Real.
En el logotipo del producto se resalta una corona en alusión a la abeja reina. Este diseño fue creado por Damián, el menor de los cuatro hermanos, que estudia la carrera de diseño y publicidad.
Esta microempresa empezó con una inversión de USD 1 800, que se destinaron para la adquisición de utensilios y artefactos para el proceso de fabricación.
El funcionamiento responde a un trabajo en equipo. David abastece la materia prima, Diana y Karina se encargan de la producción; Damián, de la imagen del negocio y el manejo de redes sociales.
Las hermanas investigaron los ingredientes de la receta y cómo se elabora este manjar de origen mediterráneo.
En la cocina de la casa hicieron los primeros ensayos. Ahí lograron el punto exacto del caramelo para que tenga una consistencia blanda, que caracteriza a los turrones de Campo Real.
Ahora se oferta cuatro sabores: el clásico de almendras, almendra con cacao, almendra con piña y almendra con uvilla. Hay presentaciones de 35 gramos.
Hicieron varias degustaciones y comprobaron que el bocadillo empezó a tener buena aceptación.
Al igual que la miel de abeja, los primeros turrones empezaron a venderlos entre los vecinos. En estos dos años de operaciones han mejorado el proceso de elaboración artesanal. Al principio producían 18 unidades en cuatro horas y ahora 60, en una hora.
Los cuatro emprendedores se distribuyen las labores en los proceso de cocción de la miel, el pesado, moldeado y empacado.
Para incrementar el mercado para sus productos, los emprendedores participaron en una rueda de negocios en la que estuvieron cadenas de supermercados, hoteles, restaurantes, entre otros.
El año pasado ingresaron a una cadena de alimentos nacional y ahora buscan conquistar a otros establecimientos. Al mes producen entre 2 000 y 2 200 turrones.
Antes de la pandemia, los productos también los promocionaban en ferias que se realizaron en Ibarra, Quito y Guayaquil. En esta última ciudad participaron en la rueda de negocios de ProEcuador. En este año la mayoría de exposiciones han sido virtuales.
Campo Real espera incursionar en nuevas líneas de alimentos. Ahora busca mercado para la venta de maíz y fréjol, de 450 gramos, y quinua y lenteja, de 500.
Diana Aguilar señala que quieren aprovechar que San Roque es productora de maíz y fréjol, y tender lazos comerciales con los agricultores. “Lo que buscamos no es solo quedarnos en el nicho de la miel, sino ofrecer una gama de productos”. Por eso, añade, hay nuevos proyectos en los que planean incursionar.
1800 dólares fue la inversión inicial de este emprendimiento en Imbabura.
Diana Aguilar es ingeniera agroindustrial. Ella está al frente de esta iniciativa que se instaló en el cantón Antonio Ante, en Imbabura. Foto: José Luis Rosales / LÍDERES
Los acercamientos entre Ecuador y EE.UU. siguen. En la agenda próxima consta una reunión del Consejo de Comercio e Inversiones, para continuar en la búsqueda de un acuerdo comercial, y el Cuarto Diálogo Bilateral, en donde se espera tener más avances en los temas de migración, intercambio comercial, seguridad y cooperación.
Las expectativas de alcanzar un acuerdo son positivas, en la medida en que las relaciones bilaterales atraviesan un buen momento. No obstante, la velocidad con la que se pueda concretar el convenio dependerá en parte de los resultados de las elecciones en el país norteamericano, del 3 de noviembre, y que pueden incidir en la reactivación de la primera economía mundial.
Pero ese objetivo también dependerá de la velocidad o el interés que el próximo gobierno ecuatoriano quiera imprimir en la agenda. El presidente Lenín Moreno ya anticipó en un encuentro con inversionistas, que un eventual acuerdo no se concretaría durante su mandato, aunque espera que todo quede listo para que en la próxima administración se afiance este convenio, con el principal socio comercial que mantiene el país.
El 51,16% de las empresas grandes y medianas del Ecuador se dedican al comercio y el 13,8% a la manufactura.
Dicha información es parte de la Encuesta Estructural Empresarial 2016, elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC). El informe se hizo público esta semana.
En el análisis se investigó a 4003 empresas de 17 sectores entre los que están manufactura, suministro de electricidad, comercio, actividades financieras, etc.
El documento también informa que en el 2016 dichas compañías desembolsaron por remuneraciones USD 16 400 millones. El 26,8% fueron pagos hechos por industrias manufactureras y el 24,9% por comercios al por mayor y menor.
Las grandes y medianas empresas dan empleo a 1 000 213 personas, la mayoría de ellas hombres. La mayor cantidad de trabajadores están en los sectores de servicios, así como de comercio.
Los principales productos que elaboran las empresas son azúcar, harina de trigo, arroz semielaborado pulido, leche pasteurizada, pan, carne de pollo y gallina procesadas, etc. En el caso de las bebidas no alcohólicas lo que más se fabrica son colas, mientras que en el caso de las alcohólicas está la cerveza.
El comercio es la principal actividad que se realiza en Ecuador, según una investigación de. Foto: Archivo / EL COMERCIO
El camarón se consolida como el principal producto de exportación no petrolero. En el acumulado de enero-octubre del 2017 el crustáceo superó al banano en el liderazgo de las ventas al exterior.
Según la Cámara Nacional de Acuacultura (CNA), las exportaciones en los diez primeros meses del año fueron USD 2 536 millones, frente a 2 470 millones de la fruta (ver infografía). Las ventas de camarón en octubre fueron de USD 269 millones, equivalente a 88 millones de libras de camarón.
Así se convirtió en el sexto mes consecutivo del 2017 con mayores ventas. Julio tuvo un récord histórico, con USD 291,8 millones.
Es una tendencia similar a la que se registró en el 2016. El crecimiento del crustáceo fue superior al banano en siete meses consecutivos (mayo-noviembre).
En el acumulado del año pasado el banano se mantuvo por encima.
José Antonio Camposano, presidente de la CNA, sostiene que esa será la misma tendencia al terminar el 2017. El banano seguirá siendo el rey de las exportaciones no pretroleras del Ecuador.
Señala que normalmente en los dos últimos meses la demanda de camarón es menor, pues Asia ya hizo sus compras para las festividades del inicio del año chino y Europa también para la época de Navidad y Año Nuevo. “Pero sigue siendo una excelente noticia para el país que dos sectores de exportación generen más de USD 5 000 millones”, añade.
Las proyecciones de crecimiento del sector camaronero son alentadoras. Según el Banco Central, el área de acuicultura y pesca del crustáceo crecerá un 10% al final del 2017 y un 7% el 2018.
Las exportaciones crecieron cinco veces en 11 años, frente a 2,3 veces del banano en igual periodo.
El potencial del sector se sostiene en el impulso a las inversiones y la tecnificación desde la maduración, laboratorios, fábricas de alimentos, fincas, empacadoras, procesadoras y exportadoras.
Camposano dice que toda la cadena productiva está en franco crecimiento hacia la tecnificación y en permanente proceso de inversión. Pero, además, el sector está motivado por el aumento de la demanda de la región asiática.
Actualmente, el 60% de las ventas tiene como destino países del Asia. Le siguen aquellas a la Unión Europea, EE.UU. y el resto a otras regiones, según el titular del gremio. El camarón ecuatoriano se consume en más de 50 países.
Además, el sector comenzó diciembre con una buena noticia.
China redujo el arancel para las importaciones de camarón ecuatoriano de 5 al 2%, lo que abre las posibilidades de vender más a ese país, aunque el sector aún no tiene cálculos del crecimiento. Ahora los chinos son el segundo comprador (USD 150 millones) entre los países asiáticos, después de Vietnam y por encima de Corea del Sur y Japón, según la CNA.
Otro destino para crecer es Brasil. El sector espera que a finales de año se pueda exportar el primer contenedor a ese país una vez que se abran definitivamente las importaciones, luego de 18 años de suspensión. Los productores brasileños lograron que las autoridades impusieran barreras fitosanitarias porque el camarón ecuatoriano supuestamente tenía enfermedades, pero eso ha sido desvirtuado. Se espera que en el primer año las ventas sean de USD 80 millones; además es un país con una creciente demanda que será aprovechada.
Para Carlos Miranda, gerente de la empresa de alimentos Skretting, el sector está comenzando a cosechar el trabajo de diez años.
Eso tiene que ver con el mejoramiento en todas las áreas de producción, procesamiento, inversión y reinversión. Señala que las inversiones están en los procesos genéticos, en las nuevas plantas de alimentos, en la tecnificación de camaroneras y en las plantas de empaques, por ejemplo. “No es coincidencia ni buena suerte, sino que es una industria pujante que ha reinvertido buena parte de sus utilidades para seguir creciendo”.
La tecnificación e inversiones son claves
Redacción Guayaquil (I)
La tecnificación y las inversiones son los pilares claves para el crecimiento del sector camaronero a escala nacional.
En el período enero-septiembre del 2011, la exportación alcanzó los 288,2 millones de libras, mientras en el mismo período del 2017 se vendieron 687,2 millones.
Al final del año el sector espera que las ventas lleguen a 900 millones de libras. Para atender esos altos niveles de producción, las plantas de procesamiento y empaque aumentaron su capacidad instalada, son más modernas y con más tecnología.
Carlos Miranda, gerente de Skretting y directivo de la CNA, explica que hay plantas de empaque que tecnificaron la congelación, tienen clasificadoras y galpones más grandes para atender la demanda de la industria.
Las grandes fincas aceleraron sus inversiones en procesos de tecnificación en aireación para piscinas, alimentación y cosecha automática. Skretting es una empresa de Nutreco, que tiene líneas de nutrición desde los reproductores pasando por las larvas hasta las etapas iniciales y el engorde.
Miranda dice que tienen nutrición para todo el ciclo de vida del camarón. Posee tres plantas en Ecuador para producir alimentos para camarón, ganado, pollos, cerdo, pero tiene en marcha una inversión de USD 65 millones en una nueva planta (El Morro-Playas) para producir solo alimento para el crustáceo. Tendrá una capacidad para 460 000 toneladas anuales y la primera fase estará lista en junio del 2018.
Hace pocos días se lanzó la primera etapa del Programa de Electrificación para el sector, impulsado por los ministerios de Acuacultura y de Electricidad y GPS Group, una firma de asesoría y gestión estratégica especializada en sectores agroindustriales.
La iniciativa busca el cambio de matriz productiva de diésel a energía eléctrica. Incluye la instalación de redes aéreas de distribución eléctrica, celdas de protección, transformadores y motores eléctricos, entre otros.
Como parte del proyecto se presentó a la empresa Aquamar, el primer caso exitoso de uso de energía eléctrica. Enrico Delfini, de Aqua 2.0, explica que esa finca se electrificó en el 2006 y obtuvo indicadores de eficiencia. Tuvo un incremento del 76% de producción por el uso de aireación y redujo el 20% de tiempos de engorde y mejora de casi 30% del índice de conservación de alimento, entre otros avances.
El Ministerio de Acuacultura estima una inversión de USD 200 millones para electrificar 213 000 hectáreas. En tanto, al camaronero le costaría USD 5 000 de inversión por hectárea. La dependencia de los asiáticos
El mercado asiático compró más de USD 1 150 millones de camarón entre enero-septiembre del 2017. Captó un 57% de todas las exportaciones ecuatorianas, un porcentaje mayor en relación al mismo periodo del 2016, que alcanzó los USD 856,9 millones, según las cifras de la CNA.
La tendencia de consumo de los asiáticos es el camarón con cabeza. Al cocinarlo adquiere un sabor más marino y tienen la cultura de ‘chupar’ la cabeza.
El producto ecuatoriano se exporta 89% como camarón entero con cabeza, 6% en cola y 5% con valor agregado.
India y Ecuador siguen como los principales exportadores de camarón a escala mundial. Y si bien Vietnam aparece como el tercer vendedor, también es el principal comprador del crustáceo ecuatoriano.
El sector señala que es una puerta de entrada a China. El vietnamita es un mercado muy informal donde se empaca el producto sin marcas ni registro de origen y luego se reexporta. Rodrigo Laniado, gerente de la exportadora Songa, señaló que la “excesiva dependencia” de Vietnam es una debilidad para las exportaciones de camarón ecuatoriano. Por eso, una tarea pendiente es la diversificación de los mercados, dijo durante el Congreso Mundial Aqua Expo 2017, en septiembre pasado.
Para Ecuador, los aumentos en la demanda de exportaciones provinieron principalmente de los mercados asiáticos en el primer semestre del 2017, según la FAO.
Entre enero-septiembre de este año los seis principales destinos del país fueron Vietnam (41%) EE.UU. (19%), España (10%), Francia (9%) Italia (6%) y China (3%), de acuerdo a la CNA.
Una ley que incluye al sector
El proyecto de nueva ley de Pesca y Acuacultura tiene el respaldo del sector camaronero, luego del trabajo que ha venido realizando con el ministerio del ramo.
La propuesta reemplazaría a la Ley de Pesca, vigente desde 1974. Por primera vez considera a la actividad acuícola. En estos años se había regulado al sector a través de reglamentos, lo que también generaba una inseguridad jurídica, según José Antonio Camposano, presidente de la Cámara Nacional de Acuacultura.
Recuerda que en el anterior Gobierno se pretendió reducir los años de concesión de las tierras de playas y bahías de 10 a cinco años, pero eso no se aprobó y el plazo para las concesiones es de 10 años, actualmente.
Además, introduce la figura de la ‘hipoteca acuícola’ que permitirá a los camaroneros hipotecar esas tierras concesionadas para ser sujetos de créditos que impulsen el sector.
Camposano señala que han trabajado en tres ejes durante estos meses para introducir aportes en el proyecto. Esto es reconocer el papel regulador del Ministerio de Acuacultura; que no cargue de tramitología innecesaria al sector; y, que sea de fomento a la actividad acuícola: camarón, tilapia y trucha y que se exploren otras especies que se puedan desarrollar en la maricultura.
Según Camposano, este es el único proyecto que tiene el respaldo del gremio y será entregado junto a la ministra de Acuacultura, Ana Katuska Drouet, al presidente Lenín Moreno.
El sector camaronero tiene buenas perspectivas de seguir creciendo en el 2018. Sus directivos señalan que la tecnificación en toda la cadena de producción es una de las fortalezas. Foto: Archivo / LÍDERES
Países sudamericanos y regiones españolas ponen el acento latino a la vigésimo octava edición de la Feria Internacional de Turismo de Lisboa (BTL), la principal cita del sector en el país.
Más de un millar de expositores y 35 destinos internacionales marcan presencia en esta feria, inaugurada ayer por las principales autoridades portuguesas y que se celebra hasta el domingo, con Brasil como invitado especial de este año.
Brasil desempeña un papel preponderante en esta edición, a la que acude con un «stand» propio en el que destaca la promoción de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, que se celebran este verano, y un contador electrónico que informa de los días que restan. A la BTL también acudieron varios estados brasileños, como Bahía -con una mujer disfrazada con la vestimenta típica como atractivo-, Río Grande do Norte o Amazonas.
Otro país sudamericano que se promueve estos días en la capital lusa es Panamá, que cita como sus principales atractivos desde el Canal hasta el Biomuseo diseñado por Frank Gehry. También Cuba pretende atraer a los visitantes portugueses con un expositor propio en el que se resalta la riqueza de sus playas, como Varadero y Cayo Coco, mientras suena «Guantanamera» de fondo y con un mostrador de puros habanos que recuerda que el país es «la tierra del mejor tabaco del mundo».
Los habanos y las costas paradisíacas son igualmente los recursos utilizados por República Dominicana en esta BTL, en la que además programaron espectáculos de danza. La Casa América Latina de Lisboa acudió a esta edición con un «stand» individual y logró protagonismo con la organización de un concurso de fotografía entre turistas que visitaran el continente como «mochileros».
La presencia española se limita este año a las regiones de Andalucía y Extremadura, fronterizas con Portugal y para las que los visitantes lusos representan un porcentaje relevante del total de turistas extranjeros que reciben.
La comunidad andaluza promocionó en un expositor propio a todas sus provincias, así como Sierra Nevada, destino privilegiado para los portugueses cuando quieren disfrutar del esquí y la nieve.
Extremadura, por su parte, decoró su «stand» con cerdos de cartón, en referencia a la calidad de su jamón serrano, además de ofrecer rutas para conocer este producto y otros secretos de su rica gastronomía.
También está presente -aunque en un espacio de menor superficie- la ciudad de Ciudad Rodrigo, perteneciente a Castilla y León, y que es también limítrofe con Portugal.
Vigésimo octava edición de la Feria Internacional de Turismo de Lisboa (BTL). Foto: EFE
La principal cervecera local de Jamaica, Red Stripe, comenzó a utilizar el almidón de la yuca localmente producida como materia prima para elaborar sus productos, en aras de reducir su dependencia de la importación de ingredientes.
Así lo confirmó hoy 22 de junio del 2015 la Comunidad del Caribe (Caricom) en un comunicado, en el que detalla que el primer lote de cerveza de esta popular marca con yuca local salió al mercado la semana pasada.
Para celebrarlo se organizó un acto en el que estuvieron presentes los ministros de Industria, Inversiones y Comercio, Anthony Hylton, y de Agricultura, Labor y Seguridad Social, Derrick Kellier.
La empresa realizó el cambio de la cebada a la yuca en una fábrica que entró en funcionamiento en enero pasado, localizada en Spanish Town, al oeste de Kingston, con una inversión aproximada de dos millones de dólares estadounidenses.
En enero de 2014, Red Stripe firmó un acuerdo con el Ministerio de Agricultura de Jamaica para sembrar y cultivar unas 2 400 hectáreas de terreno por un período de cinco años.
En octubre, la principal cervecera de la isla anunció que invertiría USD 10 millones en los próximos cinco años en plantar y cosechar yuca para la elaboración de sus cervezas e «impulsar así la producción local y asegurar la estabilidad de la economía jamaiquina»
La cerveza Red Stripe cambió la materia prima de la cebada por almidón de yuca. Foto: redstripebeer.com
Estados Unidos fue el principal destino de las exportaciones de los países de la Comunidad Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú) en 2014, con una participación del 26% del total de las ventas de los productos de la región al mundo, informó este viernes (5 de junio) el organismo en un comunicado.
De acuerdo al documento «El Comercio Exterior de bienes entre la Comunidad Andina y Estados Unidos 2005-2014», durante el año pasado los países de la CAN le vendieron a Estados Unidos productos por un total de USD 32 870 millones.
El principal exportador andino a los Estados Unidos fue Colombia, con ventas por USD 14 023 millones, un monto que representó el 43% del total de las exportaciones andinas a ese país, seguido por Ecuador, con un 34%; Perú, con un 17%; y Bolivia, con el 6%.
El documento precisó que los principales productos de exportación de la CAN al mercado estadounidense fueron aceites crudos de petróleo o de mineral bituminoso, formas en bruto de oro para uso no monetario, café sin tostar y sin descafeinar, fuel oils y plátanos tipo ‘cavendish valery’ frescos.
Entre los principales destinos de las exportaciones de la Comunidad Andina durante el año pasado también estuvo la Unión Europea, con USD 18 614 millones en ventas; China, con USD 13 229 millones; y el Mercado Común del Sur (Mercosur), con USD 10 156 millones.
El documento estadístico, elaborado por la Secretaría General de la CAN, detalló además que el año pasado las importaciones de la Comunidad Andina se originaron principalmente en Estados Unidos, con un 25% de participación; seguido por China, con 18 %; la Unión Europea, con 14 %; y el Mercosur, con 8 %.
Las exportaciones de Ecuador a Estados Unidos representan el 34%. Foto referencial: Pixabay
En el 2011, Difare desarrolló proyectos atados a la Web como la incursión de la cadena Pharmacy’s en las redes sociales. Esto permitió un acercamiento con los clientes, dice Sylvia Banda, gerenta de Asuntos Corporativos.
Por otra parte, la firma desarrolló la campaña social Me gusta ayudar, en Facebook, con la cual obtuvo un Effie de Plata, en la categoría Social sin fines de lucro. Este premio es entregado por Effie Awards Chile, una instancia profesional que evalúa la efectividad de las comunicaciones de marketing y las estrategias que logran resultados.
La firma invirtió más de USD 7 millones en la compra y adecuaciones de nuevas oficinas corporativas. Además, al finalizar el año, el Grupo Difare facturó cerca de USD 330 millones. Ecuafarmacia 175 millones y Dromayor cerca de USD 30 millones.
En este año, el principal objetivo de la firma será mejorar los resultados en los indicadores de gestión en cuanto a productividad y mejoramiento de la cadena de valor. Difare tiene más de 3 000 clientes directos entre farmacias, distribuidores y mayoristas a escala nacional.
La empresa tiene cobertura de cerca de 1 000 puntos en el país. Cruz Azul tiene 700 farmacias, en 129 poblaciones.
Por otro lado, las 240 Farmacias Comunitarias se concentran en las zonas marginales de las ciudades y en los recintos más pequeños de las zonas rurales. Finalmente, Pharmacy’s cuenta con 56 locales a escala nacional.
Es importante, según Banda, que todos sus clientes puedan acceder a servicios en los centros de Dermocosmética y Maquillaje, Puntos de salud, Pharmaexpress, Zona D y Receta completa.
Adicionalmente, la fundación Fedifare del grupo Difare prevé incrementar su relación con la comunidad y uno de los mecanismos es la capacitación al sector farmacéutico. Unas 7 500 personas vinculadas al negocio se han beneficiado.
La Fabril cerró el 2011 con una facturación de USD 416 millones y un crecimiento del 20% en la ventas en comparación con el año precedente. De esa cifra, USD 110 millones correspondieron a exportaciones. Su principal destino fue Colombia con el 30%.
Sobre las estrategias realizadas el año pasado, Mario Vernaza, gerente de Inteligencia de Negocios de La Fabril, comenta que se concentraron en el crecimiento del abastecimiento del aceite crudo de palma. Con una inversión de alrededor de USD 8 millones se ubicaron dos extractoras y centros de acopio en las zonas de Quinindé y La Concordia, para obtener alrededor de 300 000 toneladas del producto. Esto permitió un 55% de autosuficiencia en el requerimiento de aceite.
Para este año, La Fabril tiene una proyección de 60% de autosuficiencia ligado a una estrategia de negocios inclusivos, implementada desde el 2011, donde ofrecen pago inmediato, financiamiento de fertilizante, insumos agrícolas y maquinarias, asesoría técnica, la implementación de dispensarios médicos… a los palmicultores. Esto permitió mejorar la relación con los 2 000 agricultores.
También prevé invertir este año, unos USD 20 millones en la ampliación de la planta para la hidrogenación, interestificación y fraccionamiento de palmiste (grasa vegetal). De esta cifra, 10 millones irán a la adquisición de equipos importados desde Bélgica y lo restante para obras de infraestructura. La meta es producir 20 000 toneladas anuales de palmiste.
Un desarrollo que está relacionado al crecimiento de La Fabril en el exterior, para atender los pedidos de grasas. A esos mercados se ofrecerán “productos con valor agregado, hechos a la medida y necesidades de los clientes”.
Asimismo, la empresa va a mantener su participación en el mercado de valores con una emisión de papel comercial por USD 20 millones y una emisión de obligaciones por el mismo valor.
Los hay con corazones gigantes, con pijamas o con la camiseta de su equipo de fútbol favorito. Peluches Heart, ubicada en Ambato, es una empresa artesanal que diseña y elabora estos productos desde 1986.
Con tamaños que pueden ir hasta los dos metros, los peluches están destinados para todas las edades, aunque en Navidad tienen una línea especial para niños.
Todo comenzó como un pasatiempo, dice William Ortega, propietario de la firma, pero luego decidió crear sus propios modelos, que incluso exportan a Colombia. Actualmente, producen parte de su materia prima, por ejemplo, el plumón o fibra de poliéster. La empresa tiene 16 trabajadores directos y 30 indirectos que elaboran los vestidos o realizan estampados de algunos muñecos.
Como esta empresa, la mayoría de pequeños y medianos productores locales de juguetes se enfocan en un trabajo a mano, de tipo artesanal, aunque los últimos años algunos han introducido tecnología a sus procesos. Fibra de poliéster y plástico son algunas de las materias primas que se producen en el país. Pero felpa, varios pigmentos, pelo, ojos y otros accesorios aún deben importarse de mercados como China, Colombia y otros.
Otra característica es que en algunas empresas, la principal línea del negocio no son los juguetes, segmento en el que se enfocan solo los últimos meses del año. La Empresa Artesanal Rommel Guevara es una de ellas. El principal segmento de la firma, que nació en 1982, son los juegos didácticos como bloques tipo lego, hula-hula, mullos, ábacos, etc.
Cada octubre su producción se enfoca en elaborar muñecas (8 000 al año) que hablan, lloran y cantan. A estas se suman juguetes chillones para bebé, caritas, manos y pies plásticos para muñecas artesanales y títeres. La empresa quiteña tiene ingresos anuales de USD 300 000 y genera 21 empleos directos.
La maquinaria es manual. “Las muñecas se pintan a mano, hay cinco personas dedicadas a esto, hacemos un trabajo artesanal… Algunas máquinas, como las sopladoras, son de mi creación”, dice Rommel Guevara, propietario de la firma.
Papalote es una pequeña firma que también se apoya en el trabajo artesanal. Produce una línea de juguetes como títeres, muñecas y caballitos, que son los que más se venden en Navidad. “No son materiales usados, sino reciclados que sobran de procesos productivos. Estos tienen un plus: son amigables con el ambiente”, dice Andrés Rodríguez, dueño de la firma. Él cree que cada vez hay más clientes que valoran lo nacional.
Otro elemento que ha impulsado el sector local son las compras públicas. “Hubo importación de productos chinos para guarderías estatales en el 2011. Este año se compró a artesanos locales”, dice Benjamín Chávez, consultor en desarrollo productivo de Pymes. Guevara lo confirma. Señala que este año las ventas a guarderías estatales mejoraron las ventas.
Esta temporada los productores locales duplican sus ventas, que se colocan en dulcerías, almacenes de plásticos y ferias.