Etiqueta: responsabilidadsocial

  • La publicidad con causa promueve la reflexión

    Redacción Guayaquil y agencias

    Hoy en día la difusión de causas sociales, medioambientales o de cualquier otra índole viene acompañada de estrategias publicitarias, que parecen ser efectivas en cuanto a la manera de llegar al público y concienciar.

    La tendencia de la publicidad ‘con causa social’ o de ‘responsabilidad social’ responde a un cambio en la forma de ver la publicidad por parte de quienes la realizan. Una campaña o estrategia de publicidad social deriva, principalmente, de una causa que afecta a una parte de la sociedad y se convierte además en el reflejo de esta o retrata vivencias.

    También las firmas comerciales apuntan y reflejan lo social en sus productos.

    Humberto Polar, vicepresidente Regional de la Agencia Mayo, comenta que actualmente las marcas tratan de dar un mensaje menos pegado a lo comercial. Señala, como ejemplo, la campaña mundial de la marca de cuidado personal Dove. En el 2004, esa firma presentó la campaña Por la Belleza Real. Cada año, y con base en un estudio, presentó diferentes enfoques de campaña con el objetivo luchar contra los estereotipos de belleza e invitar a debatir sobre ello.

    «Las marcas están en la búsqueda de nuevos ideales que propugnen valores sobre la vida (…), ya no buscan que solo la gente compre sus productos sino que quiera a la marca y los siga», señala.

    En Ecuador existen piezas publicitarias que pueden ser definidas como sociales. Una de ellas es la campaña que inició el Ministerio Coordinador de Patrimonio para dejar un legado del idioma Záparo. La campaña consistió en que la canción Yo nací aquí, del intérprete ecuatoriano Juan Fernando Velasco sea traducida y cantada en se idioma.

    En países como España, el tema toma más fuerza. El certamen Publifestival premia hace siete años a las mejores piezas de publicidad con causas. El concurso internacional de marketing recibe cada edición más de 500 participantes.

    Para Polar, la publicidad debió siempre retratar al ciudadano común. «Siempre ha existido esta idea de lo aspiracional, de los estereotipos, de solo tener gente linda en los avisos», critica.

    El español Antón Álvarez, en su libro ‘Publicidad Social: Enfoques y Métodos de Análisis’, explica que este tipo de publicidad suele operar con una gran lentitud. «Se tarda más tiempo en apreciar sus influencias; pero también cuando cesa la emisión (…) el cambio inducido y las consecuencias observables son más persistentes en el tiempo».

    Publicidad con causa en el mundo.

    Cannes Lions. Desde el 2002 se celebra una exposición que reúne campañas sobre cuatro temas: planeta, solidaridad, violencia y educación.

    En la región. En Argentina, el Festival Equidar premia desde el 2010 estas campañas.

  • Con responsabilidad social y corporativa

    Andreína Laines Redacción Guayaquil / LÍDERES

    Universidad Casa Grande

    El arte, la comunicación, la política, la administración y la ecología se conjugan en la Universidad Casa Grande de Guayaquil (UCG). La institución nació en 1999 e inicialmente era una escuela de Comunicación. Hoy tiene tres facultades en las que se ofertan doce carreras.

    Estas son las facultades de Ecología Humana, Educación y Desarrollo, la de Comunicación Mónica Herrera y la de Administración y Ciencias Políticas.

    Modesto Correa, decano de la Facultad de Administración, explica que la misión de la Universidad es formar profesionales con responsabilidad social y corporativa. Esa aseveración se pone de manifiesto desde que el estudiante ingresa a la Casa Grande.

    «Aquí el alumno desarrolla proyectos que benefician a los involucrados en el tema», comenta Correa. En los ocho semestres, que en promedio dura una carrera, el alumno desarrolla ocho casos prácticos que tienen como objetivo que estos aprendan haciendo, como señala el lema de la institución.

    La lógica de los proyectos es que contribuyan al emprendimiento, la comunicación y que tengan una visión social.

    El Campus de la UCG es acogedor, los árboles, flores y piezas de arte elaboradas por los estudiantes conforman la singular decoración de la U. que alberga a unos 1 300 estudiantes.

    Esta universidad es un referente en el campo de la Comunicación y Publicidad. Los reconocimientos obtenidos en festivales de publicidad y concursos nacionales e internacionales lo avalan. Por ejemplo, los proyectos de sus estudiantes han llegado hasta el Festival Young Cannes Lions, Festival Caribe, concursos de multinacionales entre otros.

    A eso se suma una parte vital de la universidad: la investigación.

    Para ello, desde el 2002 se creó un departamento especializado que durante este año coordina unas 15 investigaciones de las diferentes líneas de estudio de la universidad. Claudia Patricia Uribe, directora del departamento de investigación, explica que estos estudios duran unos doce meses. Los estudiantes contribuyen a estas investigaciones y a su vez desarrollan sus proyectos de titulación.

    En este periodo unos 30 profesionales realizan estas investigaciones, que al final se publican en diferentes medios como libros o revistas indexadas (revistas especializadas).

    Los cambios de la Ley Orgánica de Educación Superior, ha obligado, entre otras cosas a que la universidad apueste más por el desarrollo de investigaciones. Además de la formación de su planta de profesionales en maestrías. Al menos el 70% del personal ya tiene un título de cuarto nivel. El 30% restante está en proceso de obtenerla.

    Los convenios con instituciones públicas y privadas son también una herramienta para aprender. Por ejemplo, con la Corpei anualmente viajan unos 8 estudiantes de la Facultad de Administración a ferias internacionales. El objetivo es que estos alumnos puedan conocer los procesos de negociación y exportación.

    Casa Grande forma profesionales generadores de cambios a través desde las aulas, siempre enfocado a lo social.

    Junto a la comunidad Vinculación social. La planeación estratégica institucional 2011-2016, adopta el enfoque de responsabilidad social universitaria. Mediante la docencia y la formación, la investigación, la gestión y la vinculación con la sociedad.

    Los programas. Tienen varios enfoques: formación profesional, arte y cine, educación comercial, ciencias sociales y servicio social.

    El presupuesto. Un 2,62% del presupuesto del 2012 fue destinado a ello.

    Los resultados. 710 estudiantes y 210 profesores fueron parte del Programa de Responsabilidad Social y Universitaria en el último año.

    La Autoridad

    Marcia Gilbert Rectora de la Universidad Casa Grande

    La gestión académica, los programas de responsabilidad social y vinculación con la comunidad, eventos académicos y culturales… son los principales aportes de la Universidad Casa Grande. Estos aspectos se complementan con las simulaciones pedagógicas, innovaciones, investigaciones y publicaciones, así como el uso de nuevas tecnologías y otras actividades de docentes y alumnos.

    Una universidad tiene que saber enseñar. Todo comienza por la pedagogía y termina por ese mismo factor. Si vamos a formar emprendedores o trabajar con la comunidad hay que transmitir valores y conocimientos a los estudiantes.

    Casa Grande produce investigaciones y trabaja para la comunidad. Podríamos decir que nuestra institución es la más creativa y fuerte en crear pedagogía.

    En la formación de profesionales nos hemos esforzado en posicionar tres sellos institucionales. Primero, la innovación y creatividad, pues para emprender o realizar algún proyecto hay que ser distinto, de manera que se contribuya con nuevas ideas, porque el mundo es distinto y cambiante.

    El segundo sello es desarrollar una mentalidad multicultural y bilingüe que permita a nuestros profesionales aceptar las diferencias. Queremos alcanzar un 50% de asignaturas en inglés en todas las mallas curriculares de nuestras facultades. Es importante el contacto con el exterior. Anualmente un gran número de estudiantes viaja al extranjero a convenciones, ferias, negociaciones e intercambios.

    El tercero es la responsabilidad social. Los alumnos salen con estos distintivos que aplican en su vida profesional. Esa es la esencia de la Casa Grande.

    La pedagogía innovadora es parte de esa esencia. Tenemos una serie de premios y reconocimientos a alumnos y exalumnos como el Young Lions de Argentina y el premio WISE de la Fundación Qatar que reconoce los mejores proyectos de innovación en educación a nivel mundial. Todas las agencias triunfadoras del Cóndor de Oro tuvieron en sus equipos ganadores a alumnos, exalumnos y/o docentes de la Universidad…

    Nos basamos en la búsqueda constante de mejora en el proceso de enseñanza-aprendizaje. La formación de profesionales íntegros, éticos, solidarios y capaces de hacer frente a las problemáticas de la época es la misión de la UCG.

    ‘La base de la UCG tiene tres sellos institucionales: la innovación y creatividad; una mentalidad multicultural; y Responsabilidad Social

  • Las empresas buscan motivar al ahorro

    Carolina Enríquez Redacción Quito / LÍDERES

    Fomentar el ahorro y desarrollar programas de control del uso del dinero y de las inversiones de los trabajadores es considerado como parte de la responsabilidad social de las empresas.

    Sin embargo, en el país, son muy pocas las compañías que ponen en marcha estos procesos. Según Human Plus, empresa de recursos humanos, entre el 12% y el 15% de las firmas trabajan en estos planes.

    «No se realiza esto, porque los trabajadores, usualmente, prefieren usar el total de su dinero y no ven al ahorro como necesidad. En otros casos, son los sindicatos quienes se encargan de desarrollar fondos», manifiesta Eddy Troya, titular de la compañía.

    Esto último lo comparte Edwin Bedoya, representante de los trabajadores ante el Consejo Nacional de Salarios (Conades). Él explica que en los organismos de ahorro que poseen los sindicatos es posible depositar desde USD 5; es decir, un valor accesible para el empleado.

    Otra forma de ahorro, asegura, es el que se genera a través del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). Sin embargo, un ahorro mayor, fomentado por las empresas, no sería viable porque «los sueldos en el país son bastante bajos».

    Lo que sí destaca es que hay firmas que tienen una mejor organización y no solo fomentan el ahorro sino también la educación financiera y el crédito.

    Una de ellas es Telefónica Movistar de Ecuador. Los 1 300 colaboradores cuentan con un programa de asistencia, que brinda asesoría profesional en temas financieros-contables, legales, entre otros. Para utilizar este servicio, el empleado se contacta a través de una línea gratuita o envía su consulta por correo electrónico.

    Mientras que con relación al ahorro la empresa lanzó en el 2010 un plan global de compra de acciones, dirigido exclusivamente para empleados de las empresas del grupo, permitiendo así que todos inviertan en la compañía.

    Por otro lado, en Ecuador los colaboradores pueden acceder a un fondo de cesantía que facilita el ahorro para sus socios, a través de un aporte mensual que es directamente descontado de su rol de pagos. Alrededor del 90% está suscrito.

    Otras firmas como La Favorita explican que sí ha incentivado a sus colaboradores en el ahorro. La empresa dio charlas a todos los colaboradores a nivel nacional (8 000 empleados), sobre manejo del presupuesto familiar: definir el presupuesto mensual con base en sus ingresos, endeudamiento, no a los chulqueros, correcta inversión, consecuencias de un mal manejo de los fondos…

    Adicionalmente, La Favorita cuenta internamente con planes como «fácil ser accionista», con el objetivo de que los colaboradores puedan invertir correctamente sus utilidades. De igual forma a nivel de ejecutivos mantienen desde mucho tiempo un fondo de ahorro.

    Wilson Araque, director del área de gestión de la Universidad Andina, considera que las empresas que desarrollan estas prácticas ganan tranquilidad y estabilidad en los trabajadores.

    «Saben que cuentan con un fondo, que sirve como colchón, en caso de cualquier necesidad. Y no pierden la concentración, pensando en que tienen que pagar a sus acreedores, lo que impactaría en la productividad».

    El entorno nacional

    Un análisis. El presidente del Colegio de Economistas de Pichincha, Víctor Hugo Albán, reveló el año pasado que apenas el 20% de los ecuatorianos tenía la costumbre de ahorrar.

    En el país. La Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos revela que el 58,8% de los hogares tiene capacidad de ahorro y posee más ingresos que gastos (el 41,1% tiene más egresos de lo que gana). Sin embargo, no precisa cuántas personas logran ahorrar en el país.

    El ingreso. El 83,5% del Ingreso Monetario de los Hogares tiene como fuente el trabajo (asalariado o independiente). El segundo rubro en importancia son las transferencias, con un 12,5%.

    Los datos. La encuesta de Ingresos la presentó el INEC el año pasado.

  • ¿Sabe usted cómo gastar su dinero?

    Arturo Castillo, Motivador y prof. de técnicas psicorrelajantes

    El Especialista

    Nada hay más soberano que la decisión de cómo gastar el dinero producto del trabajo. O por lo menos eso es lo que creemos. En la práctica, la generalidad de los individuos se deja persuadir por la publicidad, que ‘sugiere’ en qué y cómo ‘invertir’ el dinero.

    La clase media es la que más vive este espejismo. Sus esfuerzos están orientados hacia la adquisición de lo innecesario, impráctico y suntuario. Se convierte en una verdadera necesidad aquello que la persuasión publicitaria dictamina como tal. La estrategia sigue siendo la misma, aunque los medios se hayan refinado: inventar una necesidad, provocar ‘salivación’, antojo, y luego una urgencia irrefrenable de apropiarse del objeto, a toda costa.

    Desde ese momento, el supuesto control y soberanía,se convierten en dispendio, en compulsión consumista. En este punto, el riesgo de la quiebra es un asunto real.

    La previsión es clave para una economía racional y objetiva. Significa estar preparados para los inevitables tiempos de las vacas flacas. El ritmo de la economía moderna, caracterizado por el incesante lanzamiento de nuevos objetos al mercado, impide que los individuos generen ahorro. Hacen bien, entonces, algunas empresas al incentivar a sus trabajadores para que ahorren, mediante cajas solidarias, planes inteligentes y bien estudiados de ahorro e inversión.

    Evidentemente, esto cae en el ámbito de la responsabilidad social. Las compañías debieran organizar charlas periódicas sobre economía doméstica, para reflexionar sobre métodos de generación de ahorro, de optimización de gastos.

    Claro, han quedado en el pasado prácticas como el trueque, el intercambio de servicios, el ‘no dinero’, y se ha impuesto una de las máximas de la economía capitalista: el individualismo.

    Las empresas deberían encender una alarma cuando detectan que sus trabajadores gestionan préstamos permanentemente, con la queja de que nunca les alcanza el sueldo. Ello puede ser auténtico, pero puede ser un signo de que sus finanzas están fuera de control. ¿Deben las empresas intervenir en esos casos? La línea que separa el interés genuino y el intervencionismo es tenue. Aun así, hacer el bien es siempre la mejor opción.