Etiqueta: SALUDABLES

  • Productos saludables, con insumos 100% naturales

    Priscilla Alvarado. (I)
    Redacción Guayaquil

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    Energía en un ‘snack’ 100% natural es lo que ofrece Kandú a sus clientes. Así lo indican Alejandro y Santiago Muñoz, fundador y cofundador de la marca que produce barras de proteína bajo el mismo nombre.

    La idea surgió como un modo de innovación en un mercado que no había sido explotado en el país. El objetivo fue crear un producto que tenga dos puntos diferenciadores: buen sabor e ingredientes autóctonos. Entre los que figuran miel, cacao orgánico, frutos rojos y maní. Además, ofrecer un bocadillo con calidad de exportación para el mercado local.

    Alejandro es ingeniero mecánico y cuenta que, en primera instancia, se pensó en la importación de barras. Sin embargo, esta idea se frenó al observar que el trámite para traer productos alimenticios del exterior es engorroso.

    Con esta premisa, a inicios del 2018, en un pequeño cuarto de una fábrica en Guayas, empezaron a hacer pruebas de laboratorio junto a un ingeniero en alimentos hasta conseguir la textura y el gusto ideal. Los primeros meses fueron de prueba y error.

    En ese entonces, explican los emprendedores, en las perchas de los supermercados del país existían muchas variedades de barras de proteína, pero todas tenían ingredientes poco conocidos.

    “Quisimos que quienes consuman nuestro producto puedan leer la información nutricional y entenderla. Además, buscamos romper el paradigma que las barras solo las consumen los deportistas”, dice Alejandro, de 28 años.

    El negocio se levantó con una inversión inicial de USD 50 000, para la compra de cuatro máquinas de elaborado y empaquetado. Parte del capital también se destinó al desarrollo de la marca y a la imagen que mantienen hasta hoy.

    Los colores negro, naranja, morado y rojo priman en los empaques. Las imágenes de los ingredientes principales se imprimen en la parte frontal de las barras.
    Detrás del nombre de la marca también hay un significado fuerte. ‘Kandú’ proviene ‘Can do’, en inglés, que significa tú puedes.

    Santiago es ingeniero en administración de empresas. El joven de 25 años menciona que tener ese nombre es un buen impulso para que, quien consuma el producto, se sienta motivado.

    Santiago y Alejandro Muñoz, de 25 y 28 años, crearon la marca Kandú en el 2018. Las barras de proteína llegan a más de 50 puntos en el país.
    Santiago y Alejandro Muñoz, de 25 y 28 años, crearon la marca Kandú en el 2018. Las barras de proteína llegan a más de 50 puntos en el país.

    El lanzamiento de su primer producto fue en septiembre del 2018. La barra de proteína hecha con maní fue colocada en pequeñas tiendas de Guayaquil y Samborondón. En mayo del 2019 se amplió el catálogo del negocio con la barra con chocolate y, meses después, en febrero del 2020, se incluyó la barra de frutos rojos.

    En la fase de producción receptan la materia prima de 10 proveedores. La miel es de una hacienda en Cerecita, en la provincia del Guayas; el maní, de unos productores de Manabí, y el chocho lo adquieren en Quito.

    Lucía Rosales, de la Hacienda El Castillo, les provee de chocolate desde hace un año y medio. Para Rosales, la experiencia de trabajar con Kandú es muy buena. “Existe una comunicación directa y fluida con el propietario (Alejandro) y, al ser jóvenes, él y su hermano son muy abiertos a recibir recomendaciones sobre calidad y variedad de productos”.

    Actualmente producen 7 000 barras al mes, que se distribuyen en 50 puntos a escala nacional. Desde cadenas de supermercado hasta gasolineras tienen en sus perchas los productos Kandú.

    José Velasco consume los bocadillos desde que se creó la firma en el 2018 y afirma que el ‘snack’ tiene la porción ideal para cualquier ocasión. “Me gusta lo que transmite la marca, esa motivación de que puedes hacer lo que quieras”.

    Además, dice Velasco, al ser una empresa joven constantemente están desarrollando productos sin desviarse de su principal objetivo: ofrecer algo saludable.

    Para impulsar sus ventas, los jóvenes se apalancan en redes sociales. A través de Instagram ganan clientes en diferentes partes del país. Según Alejandro y Santiago, las barras son un mercado a explotar en Ecuador. “Debemos aprender a caminar antes de empezar a correr”, aseguran.

    Por lo que, a decisión de ambos, su idea inicial es posicionarse localmente ya que consideran al ecuatoriano como el principal “catador” de estas golosinas. Más adelante, si proyectan internacionalizar sus barras de proteína.

    En el área operativa se cuida que cada empaque tenga el gramaje correcto. Los empleados usan trajes especiales para mantener el ambiente limpio. Fotos: Cortesía de Kandú
    En el área operativa se cuida que cada empaque tenga el gramaje correcto. Los empleados usan trajes especiales para mantener el ambiente limpio. Fotos: Cortesía de Kandú
  • La venta de productos saludables está en auge

    Redacción Santo Domingo (I)

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    La comida saludable, a domicilio y en locales, ha ganado seguidores durante la pandemia por el covid -19. En Santo Domingo de los Tsáchilas, las tiendas y restaurantes de comida orgánica o vegana han aumentado sus ventas hasta en un 50%.

    Karina Flores y Danilo Guadalupe son los propietarios de Mi Tiendita Saludable. Se trata de un negocio ubicado en la cooperativa 17 de Diciembre y que vende productos orgánicos, libres de químicos que afecten al ambiente o a la salud de las personas.

    Antes de la pandemia – en enero de este año- la pareja de esposos había invertido USD 15 000 en productos como sal marina, aceites esenciales, harinas, artículos para el cuidado personal, entre otros. También en la ampliación y decoración del local.

    Pero apenas se declaró la emergencia sanitaria (en marzo), cerraron sus puertas por un mes. Durante ese periodo, los más de 60 clientes fijos les escribían a diario porque necesitaban abastecerse de productos saludables.

    Así que Karina Flores empezó una campaña en las redes sociales, especialmente en Instagram, para entregar pedidos a domicilio.

    A diario subía unas seis o siete historias, en las que contaba los beneficios de los productos, datos curiosos y recetas saludables.

    De inmediato, la clientela se reactivó. “Ellos suben historias y nos etiquetan. Eso también nos ha servido mucho; es como una publicidad boca a boca, pero de forma virtual”, dice Flores.

    Carlos Saltos es uno de sus clientes. Durante la pandemia tuvo problemas gástricos, así que decidió cambiar su alimentación. “En Mi Tiendita encontré productos saludables, pero ricos como la leche de Kéfir con probióticos”.

    Los dueños también hicieron promociones. Por compras mayores a USD 25, el envío era gratuito.

    Flores afirma que su clientela se duplicó durante la cuarentena. Ahora, a diario venden entre USD 200 y 400. Antes del covid-19 había días que vendían hasta USD 600 porque los clientes compraban más productos.

    Ella recuerda que la pandemia los regresó a sus inicios, en 2017, cuando vendían desde casa y tenían tres perchas con productos en los que invirtieron USD 800.

    La idea del negocio nació tras un cambio en el estilo de vida de la familia. Ellos buscaban alimentos saludables como aceite de coco, harina de quinua y otros, pero en la provincia no había distribuidores para este tipo de productos.

    Así que la pareja debía viajar a Guayaquil o Quito para adquirir artículos libres de químicos, sin glúten o azúcar añadida.

    Sus familiares empezaron a hacerles pedidos y de a poco se convirtieron en sus primeros clientes.

    Una historia similar comparte Julia Rendón. Ella ofrece comida saludable como ensaladas, tortas de zanahoria y otros.

    Rendón es nutricionista, pero a causa de la pandemia tuvo que trabajar desde casa. En su tiempo libre hacía tortas saludables de banano o zanahoria para su familia y las subía a Facebook. Sus pacientes empezaron a decirle que les vendiera una porción.

    Desde abril hasta junio ha comercializado alrededor de 40 tortas y 50 ensaladas. Desde la próxima semana también hará planes alimenticios (desayunos, almuerzos y meriendas), que entregará a domicilio a sus pacientes.

    Según el Municipio local, entre abril y junio se han creado 30 negocios de alimentos.

    USD 15 800 es la inversión total de Mi Tiendita Saludable, que vende productos orgánicos.

    Karina Flores y Danilo Guadalupe son los propietarios de  Mi Tiendita Saludable, que comercializa productos orgánicos 100% ecuatorianos. Fotos: cortesía Mi TIendita Saludable y Juan Carlos Pérez para LÍDERES
    Karina Flores y Danilo Guadalupe son los propietarios de Mi Tiendita Saludable, que comercializa productos orgánicos 100% ecuatorianos. Fotos: cortesía Mi TIendita Saludable y Juan Carlos Pérez para LÍDERES
  • Los alimentos saludables son el eje de este grupo

    Redacción Quito

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    El trabajo en conjunto y el apoyo entre emprendedores son algunas de las premisas con las cuales labora Corporación Profitness.

    Esta iniciativa surgió en marzo del 2016 como una forma de promover hábitos de alimentación saludable e impulsar la comercialización de productos que se enfoquen en este propósito y sean de productores ecuatorianos.

    Con el apoyo familiar, Juan José Durán, actual gerente de la iniciativa, invirtió unos USD 15000, para hacer realidad esta idea.

    Corporación Profitness actualmente agrupa a tres emprendimientos: Cereales Andinos, con sus snacks de quinua; Quini, bebida gaseosa de jengibre; y Kinacu, gomitas de quinua y amaranto.

    Según Durán, los productos miembros se caracterizan por estar hechos con ingredientes innovadores y poseer altas propiedades nutricionales.

    Una de las estrategias para la comercialización de los productos es ofrecer “paquetes saludables” a los clientes. Estos combos contienen productos de los tres negocios, a precios más bajos.

    Hace seis meses, Quini entró a la Corporación. Su gerente, Paúl Guzmán, señala que este espacio es uno de los factores que le ha permitido impulsar su negocio. Para fin de año, Quini espera un crecimiento del 60% en relación con el 2016.

    De igual forma, Paúl Reyes, gerente general de Kinacu, emprendimiento asociado desde hace aproximadamente cuatro meses, señala que la Corporación permite un mejor posicionamiento estratégico de las marcas.

    Reyes destaca el apoyo mutuo. Por ejemplo, los negocios se impulsan unos a otros, a través de redes sociales o en ferias.

    Así, al cliente que le gusta las gomitas de Kinacu tiene además la oportunidad de conocer las bebidas de Quini.

    Para la empresa Cereales Andinos, con once años de trayectoria, la Corporación ha sido una ventana comercial para llegar a más consumidores.

    Uno de los factores importantes para Diego Chacón, gerente comercial de la empresa, es la promoción de hábitos de vida saludables, que la Corporación hace a través de campañas informativas.

    Los representantes de las marcas coinciden en que, hoy en día, las personas buscan alimentarse mejor, pero sin sacrificar el sabor de los productos.

    Por eso el grupo no se ha encasillado en un solo tipo de clientes. Durán explica que van desde clientes al por menor hasta grandes ventas en tiendas como Impulso Fitness Club y MPS Proteínas y Suplementos.

    Entre los objetivos a corto plazo, el negocio quiere ofrecer su variedad de productos a grandes cadenas de supermercados.

    Desde su surgimiento hasta la actualidad, Corporación Profitness ha servido como un espacio de impulso para los socios.

    Sin embargo, para el 2018, el propósito es empezar la producción de insumos propios, dice Durán.

    Uno de los objetivos del siguiente año es también incorporar aproximadamente a cuatro emprendedores más.

    “Estamos trabajando en productos saludables y buscamos más socios, sin generar rivalidad con los productos de nuestros asociados”, afirma Durán.

    Aunque este emprendimiento todavía se encuentra en fase de consolidación, Durán augura cifras positivas para este año. La facturación estimada para el 2018 es de USD 48 000..

    Juan José Durán, Diego Chacón y Paúl Guzmán son los representantes de las firmas de Corporación Profitness. Foto: Patricio Terán / LÍDERES
    Juan José Durán, Diego Chacón y Paúl Guzmán son los representantes de las firmas de Corporación Profitness. Foto: Patricio Terán / LÍDERES
  • Granos andinos saludables y fáciles de preparar

    Redacción Quito

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    La adversidad los llevó a iniciar un emprendimiento familiar que, hoy en día, conquista los paladares ecuatorianos y del mundo. María Fernanda Illánez es una emprendedora que desde hace cinco años incursionó artesanalmente en la preparación de productos alimenticios saludables y constituyó la empresa Gourmet Andino. “Vendía en ferias y tiendas orgánicas”, cuenta Illánez.

    Junto con su esposo, José Luis Quintero, ideó este negocio ya que, por una serie de alergias que atravesó su hija María Emilia, la familia debió cambiar sus hábitos alimenticios y empezar a consumir productos naturales.

    La oferta, hace tres años, era limitada, por lo cual vieron una oportunidad para crear, de manera masiva, productos sanos con base en diferentes granos andinos, sin conservantes ni aditivos y con azúcares menos procesados.

    Con una inversión aproximada de USD 100 000, en el 2016, los esposos montaron una fábrica, sacaron registros sanitarios y renovaron su imagen para lanzarse oficialmente al mercado.

    Los emprendedores levantaron la planta en la zona de Perucho, al nororiente de Quito, donde también cultivan quinua orgánica.

    Cuando la demanda sobrepasa la producción de materia prima recurren a proveedores, sobre todo aquellos que trabajan en comunidades campesinas.

    Camari es una de las organizaciones que les provee de panela orgánica y también vende los productos. “La mezcla de pastel es el producto estrella”, señala Ximena Freire, responsable de ventas.

    La producción mensual es de entre dos y cinco toneladas.

    En sus inicios, la empresa se dio a conocer en el mercado con unas mezclas de quinua y avena orgánicas para preparar pancakes y pasteles, que hasta ahora las comercializan bajo la marca Cusi.

    También optaron por ofrecer mezclas de platos salados como ‘quinoto’ (risoto de quinua).
    Illánez destaca la practicidad que da Cusi para preparar comida rápida y saludable, sin invertir grandes cantidades de dinero.

    Los empaques son de aproximadamente 300 gramos y cuestan entre USD 3 y 6.
    Para el próximo año, la oferta se ampliará con trigo serraceno y semillas de cáñamo.
    Actualmente, los productos de Cusi se encuentran a la venta en grandes cadenas de supermercados y tiendas orgánicas.

    Desde que Superfoods Ecuador abrió sus puertas a finales del 2015, ha comercializado la variada oferta de la empresa Gourmet Andino.

    Gizella Greene, gerenta general del negocio, señala que Cusi es uno de los productos más aceptados por sus clientes.

    Además, en el restaurante de la tienda, Greene utiliza las mezclas para la línea de pastelería y para preparar ensaladas. El almacén recomienda a sus compradores estos productos por su valor nutricional y sus variedades.

    Las mezclas Cusi también se comercializan en tiendas de EE.UU. y Europa. En el 2018 participarán en ferias comerciales en países como Alemania.

    Para finales de este año la empresa de alimentos espera una facturación de USD 110 000.
    Como una estrategia para promocionar sus productos, Quintero e Illánez trabajan conjuntamente con ‘influencers’, principalmente los que se dedican a temas de cocina y salud.
    Gracias a este tipo de publicidad hoy tienen más de 8 000 seguidores en Facebook e Instagram.

    Con una inversión aproximada de USD 100 000, en el 2016, los esposos montaron una fábrica, sacaron registros sanitarios y renovaron su imagen
    Con una inversión aproximada de USD 100 000, en el 2016, los esposos montaron una fábrica, sacaron registros sanitarios y renovaron su imagen
  • Los jugos saludables son la especialidad de esta pareja

    María Victoria Espinosa

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    Drink Me nació hace cuatro años, cuando la familia Guadalupe Flores decidió cambiar sus hábitos alimenticios.

    Karina Flores recuerda que cuando se embarazó de su primer hijo sintió la necesidad de nutrirse adecuadamente, pero no toleraba las verduras. Así que tomaba jugos con alimentos como la sábila, naranja o alfalfa, que vendían en la calle. Pero se intoxicó.

    Por eso, su esposo Danilo Guadalupe empezó a prepararle jugos con frutas y verduras. Luego, buscaron la ayuda de una nutricionista para que les recomendara verduras que tuvieran ácido fólico, que es una vitamina fundamental para el desarrollo de los bebés.

    Flores continuó con los jugos, luego del embarazo y notó cambios en su digestión y también el sistema inmune se fortaleció.

    En el 2016 decidieron ofrecer las bebidas a sus amigos y familiares. También las introdujeron en una cafetería que abrieron llamada Drink Me, como los jugos. “Era importante tener un negocio para compartir tiempo en familia”.

    La pareja empezó a investigar sobre las propiedades de los alimentos y sobre cómo mejorar el sabor y la duración de los productos naturales sin utilizar conservantes ni preservantes.

    Los emprendedores descubrieron que en EE.UU. vendían una máquina llamada cold press (presión en frío), que permite obtener el zumo del producto sin que pierda sus nutrientes y de esa forma también se conserva el sabor y el olor de la fruta o verdura.

    Flores señaló que se valieron de sus familiares, que viajaban a EE.UU., para adquirir las máquinas y utensilios en los que han invertido alrededor de USD 5 000.

    La cafetería dejó de operar. Ahora, los jugos se preparan en la vivienda de la pareja y se entregan a domicilio cada mañana en casas, gimnasios e instituciones.

    La jornada de trabajo se inicia antes de las 06:00 porque los jugos se preparan y envasan al instante, según las necesidades del cliente.

    Ellos hacen entregas diarias ya sea de un jugo o también paquetes para su clientela.
    Uno de sus productos es el de desintoxicación para un día, que incluye seis jugos de distintos sabores, dos bebidas pequeñas (shot) con el sabor concentrado del jengibre, limón y manzana, que sirven para alcalinizar y energizar el cuerpo, y un sobre de té. Los paquetes se pueden consumir por tres y cinco días más.

    Guadalupe señaló que a diario se preparan 85 bebidas con nutrientes que ayudan al cuerpo a recuperar energía, desintoxicarse, alimentarse e hidratarse. “Nuestros clientes, por lo general, son personas jóvenes, que buscan mejorar el sistema digestivo, adelgazar o impulsar su salud”.

    Flores señaló que para darle una orientación al cliente sobre cómo llevar un estilo de vida sano, está cursando una especialización en alimentación saludable.

    Sin embargo, ella afirmó que recomienda a los consumidores consultar antes al médico sobre el tipo de jugo que deben tomar. “Les decimos que no somos médicos y que si tienen enfermedades como la hipertensión o la diabetes es importante que lo hablen primero con el doctor”.

    Luego de la desintoxicación, la pareja crea un plan de alimentación saludable para el cliente.
    La presentadora de televisión Evelyn Celi los consume a diario. Ella señala que conoció el producto a través de las redes sociales y que le han ayudado como un complemento nutricional.

    Flores explica que también se comercializan productos como la leche de almendras normal o saborizada con chocolate orgánico, que pueden consumir los niños y adultos con ciertas intolerancias.

    Danilo Guadalupe y Karina Flores son los encargados de hacer más de siete tipos  jugos, que combinan  frutas con verduras y que ayudan desintoxicar y fortalecer el sistema inmune. Foto: Juan Carlos Pérez para LÍDERES
    Danilo Guadalupe y Karina Flores son los encargados de hacer más de siete tipos jugos, que combinan frutas con verduras y que ayudan desintoxicar y fortalecer el sistema inmune. Foto: Juan Carlos Pérez para LÍDERES
  • Los jugos saludables son la especialidad de esta pareja

    María Victoria Espinosa

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    Drink Me nació hace cuatro años, cuando la familia Guadalupe Flores decidió cambiar sus hábitos alimenticios.

    Karina Flores recuerda que cuando se embarazó de su primer hijo sintió la necesidad de nutrirse adecuadamente, pero no toleraba las verduras. Así que tomaba jugos con alimentos como la sábila, naranja o alfalfa, que vendían en la calle. Pero se intoxicó.

    Por eso, su esposo Danilo Guadalupe empezó a prepararle jugos con frutas y verduras. Luego, buscaron la ayuda de una nutricionista para que les recomendara verduras que tuvieran ácido fólico, que es una vitamina fundamental para el desarrollo de los bebés.

    Flores continuó con los jugos, luego del embarazo y notó cambios en su digestión y también el sistema inmune se fortaleció.

    En el 2016 decidieron ofrecer las bebidas a sus amigos y familiares. También las introdujeron en una cafetería que abrieron llamada Drink Me, como los jugos. “Era importante tener un negocio para compartir tiempo en familia”.

    La pareja empezó a investigar sobre las propiedades de los alimentos y sobre cómo mejorar el sabor y la duración de los productos naturales sin utilizar conservantes ni preservantes.

    Los emprendedores descubrieron que en EE.UU. vendían una máquina llamada cold press (presión en frío), que permite obtener el zumo del producto sin que pierda sus nutrientes y de esa forma también se conserva el sabor y el olor de la fruta o verdura.

    Flores señaló que se valieron de sus familiares, que viajaban a EE.UU., para adquirir las máquinas y utensilios en los que han invertido alrededor de USD 5 000.

    La cafetería dejó de operar. Ahora, los jugos se preparan en la vivienda de la pareja y se entregan a domicilio cada mañana en casas, gimnasios e instituciones.

    La jornada de trabajo se inicia antes de las 06:00 porque los jugos se preparan y envasan al instante, según las necesidades del cliente.

    Ellos hacen entregas diarias ya sea de un jugo o también paquetes para su clientela.
    Uno de sus productos es el de desintoxicación para un día, que incluye seis jugos de distintos sabores, dos bebidas pequeñas (shot) con el sabor concentrado del jengibre, limón y manzana, que sirven para alcalinizar y energizar el cuerpo, y un sobre de té. Los paquetes se pueden consumir por tres y cinco días más.

    Guadalupe señaló que a diario se preparan 85 bebidas con nutrientes que ayudan al cuerpo a recuperar energía, desintoxicarse, alimentarse e hidratarse. “Nuestros clientes, por lo general, son personas jóvenes, que buscan mejorar el sistema digestivo, adelgazar o impulsar su salud”.

    Flores señaló que para darle una orientación al cliente sobre cómo llevar un estilo de vida sano, está cursando una especialización en alimentación saludable.

    Sin embargo, ella afirmó que recomienda a los consumidores consultar antes al médico sobre el tipo de jugo que deben tomar. “Les decimos que no somos médicos y que si tienen enfermedades como la hipertensión o la diabetes es importante que lo hablen primero con el doctor”.

    Luego de la desintoxicación, la pareja crea un plan de alimentación saludable para el cliente.
    La presentadora de televisión Evelyn Celi los consume a diario. Ella señala que conoció el producto a través de las redes sociales y que le han ayudado como un complemento nutricional.

    Flores explica que también se comercializan productos como la leche de almendras normal o saborizada con chocolate orgánico, que pueden consumir los niños y adultos con ciertas intolerancias.

    Danilo Guadalupe y Karina Flores son los encargados de hacer más de siete tipos  jugos, que combinan  frutas con verduras y que ayudan desintoxicar y fortalecer el sistema inmune. Foto: Juan Carlos Pérez para LÍDERES
    Danilo Guadalupe y Karina Flores son los encargados de hacer más de siete tipos jugos, que combinan frutas con verduras y que ayudan desintoxicar y fortalecer el sistema inmune. Foto: Juan Carlos Pérez para LÍDERES
  • Una idea de menús saludables para enfermos y niños

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    María Victoria Espinosa (I) redaccion@revistalideres.ec

    La empresa de alimentos LNT food service nació como una cafetería en Santo Domingo de los Tsáchilas, hace ocho años.

    Sara Segura recuerda que ella estudiaba una ingeniería en alimentos y la cafetería llamada Frutare le permitía aplicar los conocimientos, que adquiría en clases. “Teníamos buena acogida porque nos ubicamos cerca de hospitales y empresas públicas y privadas”.

    Al poco tiempo ampliaron el menú para ofertar desayunos y almuerzos. También, preparaban refrigerios para empresas. Así nació la idea de ofrecer un servicio de catering para instituciones, empresas y eventos sociales.

    Esa idea se cristalizó en el 2012, luego de que Segura había dejado su negocio para trabajar en el sector público. “Tuve a mis dos hijos y sentí la necesidad de regresar a mi negocio propio”.

    Segura invirtió USD 5 000 en utensilios de cocina para preparar alimentos para 25 Centros Infantiles del Buen Vivir (CIBV).

    Ella asegura que al principio el negocio era fácil porque cada guardería contaba con una cocina y por eso solo debían equiparla y contratar empleados.

    Pero al siguiente año, el Ministerio de Inclusión Económica y Social decidió retirar las cocinas de los centros infantiles para evitar accidentes con los niños. “Fue un reto porque debimos instalar siete cocinas en diferentes puntos de la ciudad y transportarlas”.

    LNT food service contrató a 32 empleados entre chef, ayudantes de cocina, conductores… “Todo debía estar impecable porque era alimentación para niños”.

    Por ese motivo decidieron invertir alrededor de USD 25 000 en una planta de alimentos y equipamiento para transportar la comida y que no se contamine en el camino hacia las guarderías. Estos contratos duraron hasta el 2014. Ese año también brindaron el servicio de catering al Centro Gerontológico de Santo Domingo.

    Segura señala que la alimentación debía regirse a la dieta de los adultos mayores. “Las dietas para los niños y personas de la tercera edad deben ser bajas en sal, azúcar, grasa. Tienen que ser saludables, pero deliciosas”.

    Martha Riofrío fue madre de familia de la guardería Gotitas de Esperanza. Ella señala que su hijo tenía problemas de nutrición. En un año su hijo, de 2 años, recuperó peso y talla. “Le daban frutas de refrigerio, leche y proteínas. Desde ahí, ya no tuve problemas de alimentación con mi hijo”.

    Juan Pablo Zambrano, coordinador del proyecto de guarderías en la parroquia San Jacinto del Búa, coincide con Riofrío en que la alimentación se prepara de acuerdo a los requerimientos de los nutricionistas del Ministerio de Salud. “El menú se cumple con las porciones adecuadas para los niños de acuerdo a la edad”.

    Esa experiencia en alimentación para infantes, les ayudó a ganar un contrato con la unidad educativa emblemática Minunya.

    Este año brindan el servicio al Hospital Santo Domingo. Para cumplir con este contrato debieron contratar a 16 empleados e invertir USD 20 000 en un vehículo y utensilios especializados de cocina. El personal trabaja en tres turnos debido a que se deben preparar menús diferentes para niños, diabéticos, hipertensos, dietas blandas, entre otros.

    INSIGNIA

    ‘Aprendí sobre la correcta alimentación’

    Margoth Puja/ Auxiliar de cocina

    La capacitación constante sobre el manejo de la alimentación al personal es uno de los motivos por los cuales me he mantenido en este trabajo durante casi cinco años.

    He aprendido sobre nutrición, especialmente en lo que tiene que ver con la alimentación para niños. Es decir, las porciones y el tipo de productos que se deben utilizar para que una comida sea sana, pero deliciosa.

    Además, en este tiempo he aprendido a manejar las normas de asepsia en lugares donde se preparan alimentos.

    Desde julio de este año estoy a cargo de preparar la alimentación que consumen los doctores. Son recetas recomendadas por los nutricionistas del hospital.

    Otra de las ventajas que tiene este trabajo es que hay un buen ambiente laboral. Todos los trabajadores somos solidarios y nos sentimos respetados. Eso nos ayuda a que cada día queramos hacer mejor nuestra labor.

    Sara Segura es la propietaria de la empresa de alimentos LNT food service, que funciona en Santo Domingo y cuenta con 16 empleados que se encargan de la preparación de alimentos. Fotos: Juan Carlos Pérez para LÍDERES
    Sara Segura es la propietaria de la empresa de alimentos LNT food service, que funciona en Santo Domingo y cuenta con 16 empleados que se encargan de la preparación de alimentos. Fotos: Juan Carlos Pérez para LÍDERES
  • Con terapias saludables crece su emprendimiento

    María Victoria Espinosa  (I) redaccion@revistalideres.ec

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    En Ecospa se especializan en tratar el estrés y la obesidad. Para su gerenta Jacqueline Armas el plus de su negocio ha sido priorizar la salud antes que la belleza. Ella y su hija Gabriela Sánchez estudiaron en Italia fisioterapia geriátrica y estética corporal. Armas trabajó en un hotel que hacía turismo para la salud.

    Al retornar a Santo Domingo de los Tsáchilas, en 1998, ella decidió instalar un spa junto a sus hijas Gabriela y Nathaly Sánchez. Fue el primer negocio de esta área que se instaló en el cantón. Por eso, dicen, debieron ‘culturizar’ a las personas sobre la importancia de la nutrición, relajación y la vida saludable. “Vemos el cuerpo como un templo. Pero las personas de aquella época no estaban acostumbradas a estos negocios”.

    Ecospa se instaló a las afueras de la ciudad, pero con el crecimiento acelerado de la urbe al poco tiempo el sector empezó a poblarse con mecánicas y negocios ruidosos. Eso molestaba a los clientes, así que en el 2004 decidieron instalarse en un nuevo lugar, ubicado en el kilómetro 5 de la vía Alóag – Santo Domingo.

    Armas recuerda que el terreno era una montaña de una hectárea. “Tuve miedo de que mi negocio no funcionara, pero me arriesgué”. El costo del predio fue de USD 120 000. En la construcción del spa se invirtieron USD 80 000.

    Desde entonces, ellas empezaron a promocionar un spa especializado en salud integral; es decir, buscar un balance entre la mente, el cuerpo y el espíritu. “El ambiente alejado de la ciudad y rodeado de naturaleza permite una mayor concentración y relajación de los pacientes”, señala la administradora Nathaly Sánchez.

    Los primeros años su publicidad estaba dirigida a las mujeres, que buscaban un peso ideal. Pero luego incluyeron servicios para que las personas se relajen. “La dinámica en los trabajos empezó a cambiar. Las personas comenzaron a sufrir de estrés y eso les derivó a otras enfermedades”.

    Entonces, ofrecieron masajes descontracturantes con piedras calientes y aceite de hierbas y especias medicinales como el romero, eucalipto, manzanilla y canela.

    Pero al poco tiempo empezaron a abrirse nuevos spa y centros de belleza en la ciudad. Armas recuerda que pensó que el negocio no funcionaría. Pero decidió incorporar nuevos servicios como el turco, hidromasaje y una piscina para hacer hidroterapias, que consisten en una relajación profunda, a través de baños de cajón, bañera de burbujas, tinas de fango.

    Además, aumentaron los masajes con especias y chocolate y los lavados colónicos. “Nuestros servicios ya no solo buscaron saciar las necesidades de las mujeres sino de la familia”.

    Raúl Londoño es uno de los clientes de Ecospa. Él se realiza tratamientos antiestrés. “Tenía una postura inadecuada que hacía que tuviera dolores en la espalda. Las terapias aliviaron el dolor”.

    Según Armas en el 2015, la cartera de clientes masculinos aumentó. De las 10 personas que se atienden a diario, tres son hombres.

    De esa forma, Ecospa logró mantener su cartera de clientes, que anualmente es de 5 000 personas de Santo Domingo, Quito, Guayaquil, El Carmen, La Concordia, Quinindé y turistas de Estados Unidos, España e Italia.

    Pero los desafíos continúan, porque para Armas, los negocios que no innovan tienen pocas probabilidades de surgir.

    Este año instaló en el spa un restaurante saludable, para ayudar con una dieta alimenticia a sus clientes que realizan terapias para bajar de peso. Los platos son bajos en grasa y calorías. Además se elaboran con productos orgánicos seleccionados. También construyeron un salón de eventos cerca de la piscina.

    Para el 2016 tiene previsto instalar una hostería para la salud en Santo Domingo. Este año iniciaron con la construcción de algunas habitaciones. La infraestructura se levantará de a poco. Tienen previsto invertir alrededor de USD 50 000.

    Los hombres tienen un espacio en Ecospa para realizarse terapias. Foto: LIDERES
    Los hombres tienen un espacio en Ecospa para realizarse terapias. Foto: LIDERES
  • Opiniones divididas a pesar de los indicadores saludables

    Redacción Guayaquil

    El sistema bancario ecuatoriano y sus indicadores financieros están considerados como ‘saludables’ y dentro de los patrones adecuados, según la información obtenida en entidades del sistema y reguladoras. Sin embargo, los analistas financieros tienen opiniones divididas.

    Un sector cree que las regulaciones ocurren en un momento inoportuno cuando se muestra una evidente desaceleración de la economía. Otro sector, opina que en los últimos años se ha fortalecido el patrimonio de la banca. En el largo plazo, las medidas podrían provocar una reducción del número de Instituciones Financieras (IFIS) y el afloramiento de otras más grandes y más sólidas.

    Bajo el panorama actual, las cifras muestran un aumento del volumen de crédito del sistema financiero privado. Según cifras del Banco Central del Ecuador, el crédito de las IFIS fue de USD 1 493 hasta julio del 2011 pero aumentó a USD 1 805, en el mismo período de este año.

    Para el analista financiero Alberto Acosta Burneo, el Gobierno fortalece a la banca pública y frente a la privada aplica una política de mayores controles. “Estas políticas reducen el ámbito de acción de la banca privada frente a la estatal como es el caso del financiamiento hipotecario”.

    Acosta dice con respecto al aumento del Fondo de Liquidez, es desde todo punto de vista positivo. Sin embargo, argumenta que no es el momento adecuado. “La economía está perdiendo impulso, en comparación con el año pasado que fue fuerte. Esta medida retira liquidez de la banca”, cita Acosta.

    Para Mario Burbano, representante de Mutualista Pichincha, los indicadores de la banca son positivos y la solvencia patrimonial es más alta que nunca. “El portafolio ha crecido sin deterioro de su calidad”.

    Burbano cree que todavía no se ha tenido mayor éxito en lograr una profundización financiera en la sociedad ecuatoriana y esta es una tarea pendiente.

    En el largo plazo, el representante de la mutualista dice que el proceso de profundizar el control del riesgo operativo por parte de las autoridades va a continuar.

    Carlos Morlás es decano de la Facultad de Economía de la Universidad Ecotec, en Guayaquil. Sobre el conjunto de reformas al sistema financiero comenta que el Gobierno busca algunos fines. Cita el caso del Fondo de Liquidez, mediante el cual se busca fortalecer la dolarización, aumentar el circulante e inyectar más dólares en la economía. Los fondos servirían para financiar proyectos en el Ecuador.

    Morlás considera que es verdad que hay una cierta desaceleración de la economía, pero eso tiene más que ver con la incertidumbre que existe en el sector privado.

  • Diafoot ayuda a dar pasos firmes y saludables

    Redacción Quito

    Lo que se inició como un proyecto de tesis de grado en el 2006, se convirtió tres años después en un negocio que genera ingresos y soluciona los problemas que los zapatos tradicionales generan a las personas con diabetes, empeine alto, espolón…

    Diego Arias es el dueño y fundador de Diafoot, una empresa que fabrica calzado ortopédico adaptado para personas con diabetes y afecciones de los pies. Lo que distingue a este negocio es que cuenta con un escáner con el que se toma la huella del pie a sus clientes. Así se elaboran las plantillas para los zapatos.

    Durante su infancia, Arias vio de cerca cómo su abuelo, enfermo de diabetes, tenía problemas para caminar con el calzado tradicional. Las costuras internas de los zapatos le raspaban la piel, las delgadas plantillas y lo duro del calzado le causaban hinchazón en los pies cuando caminaba durante mucho tiempo.

    “Uno no se imagina lo incómodo y doloroso que puede ser para un diabético caminar con estos zapatos o lo difícil que es encontrar un calzado adecuado. Las complicaciones tardías de un pie diabético pueden ser fatales si no se toman precauciones, puede incluso causar la amputación del miembro”, cuenta Arias.

    Por eso, en el 2009, con una inversión inicial de USD 8 000, decidió desarrollar su propia línea de calzado adaptado para personas con diabetes. La mitad de ese dinero lo invirtió en la producción de zapatos y la otra mitad en la adecuación de un local en el norte de Quito.

    “Los zapatos para pie diabético cuentan con una horma extraancha, para que no apriete a quien los utilice, no tiene costuras en el interior y tienen una suela biomecánica que distribuye el peso”. explica Arias. Su producto tuvo buena acogida el primer año, por lo que en el 2010 amplió su línea de producción y comenzó a elaborar zapatos para personas con juanetes, con punta extra ancha; zapatos con empeine alto, con medida reajustable de acuerdo al nivel del empeine; para pie plano, espolón calcáneo, artritis, entre otras afecciones. También ofrece plantillas ortopédicas personalizadas según el tipo de pie del cliente.

    Cada par de zapatos puede costar hasta USD 99, dependiendo del producto, y las platillas -que pueden ser solicitadas por separado- cuestan USD 45. Adicionalmente, cuentan con la línea Calzado siete días, diseñado para personas que caminan mucho a diario o pasan mucho tiempo de pie.

    La venta de estos productos le genera a Diafoot ingresos entre los USD 70 000 y 75 000 al año. Desde hace un año también oferta calcetines para el tratamiento y prevención de várices y diabetes, que se producen en Ambato. En los talleres se fabrican entre 500 y 600 pares al año, de esa cifra se vende un promedio del 80%.

    Gustavo Egas, de 66 años, sufre de diabetes y desde hace tres años utiliza los productos de Diafoot. Él cuenta que tiene cuatro pares de zapatos fabricados por la empresa de Arias, y que su esposa, Matilde Álvares, también tiene un par.

    “Los zapatos son sumamente cómodos, desde hace tres años no tengo problemas de hinchazón. Las plantillas son de algodón y no producen sudor, eso evita escoriaciones en el pie”, dice.

    Otro indicador del crecimiento de este negocio es el número de empleados. Cuando comenzó la empresa, en el 2009, Arias trabajaba solo y enviaba a maquila; ahora, en el 2013 brinda empleo a siete personas en el área comercial; en los talleres en Ambato trabajan 15 personas.

    Alison Robalino, clienta de este negocio, cuenta que pasa largas horas de pie por su trabajo. Ella trabaja en atención al cliente en un hospital de Quito y asegura que comenzó a utilizar el calzado de Diafoot por que al final del día, de tanto caminar, los pies le dolían.

    “Comencé a buscar una alternativa cuando el dolor se volvió insoportable, sobre todo en las mañanas, que me despertaba y ya tenía los pies amortiguados. Con estos zapatos ya no tengo esos problemas”, dice.