La economía de Estados Unidos registró una contracción histórica en el segundo trimestre, por los efectos devastadores de la pandemia en el consumo y en las empresas, con magras expectativas en un momento en que el virus avanza sin control. El Departamento de Comercio informó que en el segundo trimestre la contracción fue de 32,9%, lo que marca el peor desempeño de la historia, desde que comenzaron los registros en 1947.
Estas cifras son más alentadoras, no obstante, que las previsiones de los analistas y que el FMI, que coincidían en anticipar que la contracción alcanzaría un 35%. El Departamento de Comercio indicó que “la caída del PIB refleja la respuesta a la covid-19, que implicó medidas de confinamiento entre marzo y abril, que fueron parcialmente compensadas por la reapertura de una parte de la actividad en algunas regiones del país en mayo y junio”.
Estas cifras publicadas muestran el crecimiento anualizado por lo que no son comparables con los indicadores que usan otras economías avanzadas, que comparan un trimestre con el mismo periodo del año anterior.
José Baum, empresario colombiano radicado en Ecuador desde 1998, ofrece detalles de cómo hacer negocios, pese a las adversidades. Asegura que actuar en equipo es fundamental para lograr grandes objetivos y competir de igual a igual en el mundo empresarial.
Usted llegó a Ecuador en 1998, un año complicado, en el que arrancó una crisis económica y social muy fuerte. ¿Qué tan difícil fue hacer negocios en el país en ese momento?
Era complicado, había mucha inestabilidad, aun así, las crisis traen oportunidades y las ganas de hacer las cosas, el empuje, el apoyo de mi esposa fueron fundamentales para salir adelante. La juventud nos permitió trabajar en varios proyectos que salieron bien, aunque no todos salen bien. Lo importante es intentar.
¿En qué sectores incursionó en sus primeros años en Ecuador? Tenía un centro de entretenimiento para niños. Además, tuve la oportunidad de montar agencias de DHL y de Western Union, lo que era una necesidad muy importante en ese momento porque la gente recibía dinero desde el exterior y fue una oportunidad para desarrollar ese tipo de negocios.
¿Qué tantas diferencias encuentra entre esos años y la actualidad a la hora de hacer negocios en el país? El mundo es otro, la realidad es otra, las comunicaciones son distintas. Tener la información en esos años era un activo, algo que se podía utilizar. Hoy la información está en manos de todo el mundo y las comunicaciones son mucho más eficientes, es otra realidad. Ecuador en 1998 era un país en sucres, ahora usa el dólar. Pero entonces y ahora siempre tenemos el objetivo de hacer empresa y generar trabajo. La mejor manera de apoyar al país es ayudar a la gente que quiere trabajar a progresar junto con uno.
¿Cuáles fueron las principales dificultades que usted fue encontrando en sus primeros años como empresario en Ecuador y cómo las enfrentó? Más que dificultades, son situaciones que se presentan y que hay que ir resolviendo. En ese momento estaba conociendo un mundo nuevo, no conocía bien cómo funcionaban los negocios en Ecuador, esa fue una primera barrera. Afortunadamente tuve el apoyo de mucha gente, que trabajó conmigo y me ayudó a superar esa barrera. Yo vine al Ecuador en 1998 por la situación en Colombia pensando en el bienestar de mi familia.
Una vez establecido en Ecuador se fue abriendo camino. ¿Qué sensaciones tenía al hacer empresa en el país? La situación de la humanidad nos va generando diferentes oportunidades dependiendo del momento. En el 2003 o 2004 tuve la oportunidad de trabajar y crear un café Internet muy exitoso, en la zona de La Mariscal, en Quito. En ese momento alquilar computadoras conectadas a Internet era una gran oportunidad, hoy ya no lo es, ese servicio ha desaparecido. Uno tiene que ser muy dinámico y aprovechar las oportunidades que se presentan.
Hoy se habla mucho de liderazgo, de innovación. ¿Cómo era el empresario de sus primeros años en Ecuador? Para ser empresario se necesita tres condiciones o características muy importantes. La primera es ser visionario, tratar de ver el futuro para establecer negocios que perduren en el tiempo. En segundo lugar está el trabajo, siempre digo que los empresarios somos como cajeros automáticos que trabajan los siete días de la semana, las 24 horas del día. Y la tercera condición es el riesgo que puede tener todo negocio.
El riesgo es quizás una de las condiciones más complicadas de enfrentar en todo negocio… Es una toma de decisión, de saber hasta dónde uno está dispuesto a arriesgar y en función de lo arriesgado se puede cosechar.
¿Hasta dónde ha estado dispuesto a arriesgar? Uno siempre debe tener claras sus obligaciones. Como padre de familia, hay obligaciones y responsabilidades. Siempre hay que compartir las decisiones con la familia, tratar de sacar lo máximo, siendo cuidadoso en el manejo de los gastos de un negocio. Nadie garantiza el éxito y siempre hay el riesgo de perder lo que se arriesga.
¿Qué les aconseja a los jóvenes empresarios que tienen temor, pero también cuentan con ideas con potencial? La persistencia es muy importante, no se debe dar el brazo a torcer tan fácilmente. Hay que ser persistente y trabajar mucho. También es importante encontrar personas que le puedan aconsejar y orientar a uno para seguir en el camino correcto.
¿Usted tuvo esos consejeros en sus actividades? Al estar en varios sectores siempre busqué personas con conocimientos de cada área, buscamos soporte y apoyo para hacerlo de la mejor manera posible.
Con su experiencia y tomando en cuenta la actual situación del Ecuador ¿cómo califica el ambiente para los negocios? Es un momento complicado, estamos obligados a aprender a vivir en un nuevo mundo, en una nueva normalidad. Tenemos que ser más tecnológicos y hay que ser persistentes. Insisto en que las crisis siempre traen oportunidades y hay que estar atentos para tratar de ver esas posibilidades para salir adelante en este momento. Hay que ver el panorama con optimismo, el país va a salir adelante y quienes podemos aportar con el trabajo lo vamos a hacer.
¿Qué oportunidades ve usted en este momento? Todo lo que es ‘delivery’ ha tenido un gran impulso. Igual los productos de aseo, las comunicaciones, la sistematización de empresas también ha crecido. Hay que explorar esos y otros campos. Las predicciones económicas son negativas ¿Qué perspectivas mira usted? Va a ser un año difícil, con decrecimiento económico, luego va a venir una recuperación. Es muy difícil en esta situación hacer una predicción. Ni en la peor pesadilla se podía imaginar algo así. Hay que estar atento y vivir el día a día. Es difícil hacer una predicción a largo plazo, solo hay que trabajar y trabajar. Hay que apoyarse el uno en el otro para sacar adelante a las empresas y al país.
¿Cómo describe usted a la clase empresarial del país? En Ecuador la gente es muy buena y eso hay que resaltar en este momento. El empresario ecuatoriano es bondadoso, los colaboradores son de lujo y ese es el mayor activo de las empresas. Esto no es un tema de empresario contra trabajador, somos todos del mismo equipo. Ahora hay que dejar las diferencias y buscar la unidad, eso nos va a sacar adelante.
HOJA DE VIDA Formación. Es Ingeniero Industrial con estudios en su natal Colombia. Vive en Ecuador desde 1998. Su esposa e hijos son ecuatorianos.
Trayectoria. Tiene negocios en actividades como los bienes raíces, en la industria plástica, así como en el consumo masivo.
En el fútbol. Es dirigente deportivo vinculado con el Independiente del Valle, club al que considera un ejemplo de trabajo en equipo y modelo empresarial.
Su visión. Cree que Ecuador tiene mucho potencial y que la clase empresarial tiene mucho que aportar en la actual situación que atraviesa el país.
El empresario José Baum ofrece detalles de cómo hacer negocios, pese a las adversidades. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
Su afición por la lectura empezó cuando tenía 24 años y al principio fue por necesidad, cuenta el empresario y constructor cuencano, Javier Ordóñez, de 40 años. En ese entonces, estudiaba la maestría en Gerencia de Proyectos en la Universidad de Maryland, en Estados Unidos.
Aunque destaca la calidad de la educación que recibió en el colegio y en la universidad en la capital azuaya, señala que en esa época ni la investigación ni la lectura eran impulsadas y los estudiantes se conformaban con recibir las clases magistrales y no cuestionar a sus profesores.
En la Universidad de Maryland, en cambio, lo primero que aprendió fue que tenía que leer una importante cantidad de material para asistir a clases. “Entendí que la mejor manera de aprender era a través de este hábito. En esa universidad se requería de un aprendizaje propio para que las clases no sean solo de recepción de información sino más bien de discusión”, dice Ordóñez.
Desde entonces, considera que la lectura representa un constante aprendizaje. Para él, fue un privilegio estudiar en la Universidad de Maryland por la cantidad de libros, información y artículos científicos a los que accedía sin inconvenientes. También, aprovechaba el mercado de libros usados para adquirir los textos.
El hábito por la lectura se afianzó cuando siguió un doctorado en Análisis de Riesgos en la misma universidad. Fueron años de mucha investigación y para ello fue necesario leer con la intención de tener una visión macro del estado de la ciencia en distintas áreas y escoger su tema de investigación.
Leyó para aprender sobre finanzas, procesos cognitivos… porque son la base de los modelos matemáticos que pretendía emplearlos en su trabajo doctoral.
Allí, tuvo otra experiencia que le marcó y le dio una lección sobre el valor e importancia de la lectura. “Estaba totalmente centrado en mi tema de investigación, que era Análisis de riesgos en infraestructura hidráulica. Llegué a un punto de no poder avanzar más”.
Preocupado, Ordóñez consultó a su tutor de tesis, quien le dijo que él tampoco sabía qué solución podía adoptar. Sin embargo, le dio un consejo y este consistía en leer un libro durante una semana y que no asista a la universidad.
Su tutor le sugirió el ‘Código Da Vinci’ de Dan Brown y le pidió que luego conversarían. Al principio Ordóñez pensó que sería una pérdida de tiempo, pero hizo caso. Hoy recuerda que le gustó el estilo del autor para escribir y porque tiene aspectos relacionados con las matemáticas y toma de decisiones bajo incertidumbre.
Pero lo más importante que Ordóñez aprendió es que la lectura también permite desconectarse del trajín diario y abrir la mente. “Sirve para descansar mentalmente y tranquilizarse”.
Ha leído literatura latinoamericana como ‘Las venas abiertas de América Latina’ o los clásicos de Gabriel García Márquez. Le gustan los textos en digital porque puede encontrar cualquiera sin mayores inconvenientes. De preferencia lee en las noches y cuando viaja en un avión.
Javier Ordóñez con parte de sus libros en su oficina, en Cuenca. Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES
Dos empacadoras de camarón pomada que operan desde el cantón Rioverde (norte de la provincia de Esmeraldas), exportan el 90% de la producción camaronera de la zona hacia Colombia y EE.UU. Su ubicación es estratégica, al estar a pocos metros de las caletas pesqueras donde más del 60% de la población se dedica a la pesca artesanal.
Las empresas Brimon SA, y Fronzenpac SA, llevan más de un año trabajando con unos 500 pescadores artesanales dedicados a la captura de camarón pomada, que es comercializada directamente a las empresas exportadoras.
Los pescadores venden a las exportadoras hasta en USD 0,80 la libra de camarón, o lo hacen en las seis bodegas que hay en la zona. En las poblaciones de Palestina, Rioverde y Rocafuerte, se generan al día un promedio de 3 000 libras de camarón, pero pueden llegar hasta 10 000 libras diariamente durante la temporada invernal.
Ambas empresas exportan el producto fresco, congelada y precocinado a EE.UU. y Colombia. La actividad genera más de 300 plazas de empleo directamente en temporada alta: hombres y mujeres se dedican al descabezado y pelado manualmente.
Lorena Campos es parte de los artesanos. A ella, como al resto de sus compañeras, les pagan USD 0,30 por libra de camarón pelado. Diariamente hace hasta USD 15. El jefe de Planta de Fronzenpac,David Alvarado, dice que solo esa empacadora envió 75 000 libras de camarón precocinado a Colombia, entre octubre y noviembre; y, 98 400 libras de camarón fresco a EE.UU., en los últimos dos meses.
Los envíos se hacen cada 20 días, vía terrestre a Colombia (Cali) y marítima a EE.UU., utilizando los puertos de Manta y Guayaquil. El proceso consiste en recibir el producto, se quita la cáscara, luego se hidrata en tinas y se clasifica. Se exporta pomada fresca clase A, y precocinado (sumergido a vapor por 15 segundos), empaquetados en fundas y cartones.
Estas firmas también exportan camarón de piscina cuando baja la producción de pomada, y compran en poblaciones como Montalvo, Vainillas, Lagarto y La Tola. Rioverde es una zona donde se ha impulsado la producción con camarón de piscinas, desde 1980 hasta el 2001, donde hubo camaroneras y laboratorios de larvas antes de llegar la mancha blanca.
Los empresarios de la zona aspiran llegar el mercado europeo, como lo hacen otras seis empacadoras que operan en Esmeraldas. Según la Cámara Nacional de Acuacultura (CNA), Europa representa el 40% del destino de las exportaciones de camarón, el 30% lo importa Estado Unidos y el otro 30% es adquirido por Japón, Francia, España, Italia y Bélgica.
El presidente de la Unión de Cooperativas Pesquera de Esmeraldas, Ovidio Quiñónez, explica que Europa compra más de USD 200 millones de camarón a Ecuador, pero es necesario impulsar el acuerdo comercial. Rioverde se ha convertido en el eje pesquero de la zona norte por la producción de camarón y otras especies. Por eso, hace poco se creó una tercera empresa Exmae S.A. (Exportaora de Mariscos Ecuador).
En Rioverde, más de 300 personas se emplean para el descabezado, pelado y procesamiento del camarón para ser exportado a EE.UU. y Colombia. Foto: Marcel Bonilla / LÍDERES.
Estados Unidos es el primer socio comercial de Colombia en el sector textil-confección con un volumen de exportaciones a ese país de 243 millones de dólares el año pasado, informaron hoy los organizadores de la feria Colombiamoda, que comenzó hoy y termina el jueves en Medellín.
La balanza comercial con el país norteamericano resultó ser positiva para Colombia ya que las importaciones fueron de 213 millones de dólares, lo que refleja un saldo positivo de 29 millones de dólares, un 19 % más que en 2013. «El Tratado de Libre Comercio (TLC) ha facilitado la relación comercial y ha fomentado la asistencia de compradores a las ferias», señalaron en un comunicado los organizadores de Colombiamoda, la feria más importante del país y una de las más importantes de Latinoamérica.
Después de Estados Unidos, las exportaciones colombianas en el sector textil-confección se concentraron en Ecuador, México, Venezuela y Perú, siendo este último uno de los principales compradores de vestidos de baño, ropa interior femenina y cueros. La industria textil-confección colombiana «representa el 1,6 % de las exportaciones totales, el 9,5 % de las manufactureras y el 5,6 % de las no tradicionales» por valor de 895 millones de dólares, mientras que las importaciones en el sector correspondieron a 2.502 millones dólares, agregó el documento.
Las importaciones colombianas en esta industria proceden mayoritariamente de China, Estados Unidos, India, México y Perú. En el caso de España, las exportaciones colombianas del sector en 2014 fueron de 8 millones dólares, mientras que las importaciones procedentes de ese país ascendieron a 33 millones de dólares, un 7 % más que el año anterior.
En esta edición de Colombiamoda, que cuenta con la presencia de 479 compradores extranjeros, España estará representada por El Corte Inglés y el Grupo Inditex, que aglutina reconocidas marcas de ropa como Zara, Pull and Bear, Bershka y Stradivarius, entre otras.
Estados Unidos fue el principal destino de las exportaciones de los países de la Comunidad Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú) en 2014, con una participación del 26% del total de las ventas de los productos de la región al mundo, informó este viernes (5 de junio) el organismo en un comunicado.
De acuerdo al documento «El Comercio Exterior de bienes entre la Comunidad Andina y Estados Unidos 2005-2014», durante el año pasado los países de la CAN le vendieron a Estados Unidos productos por un total de USD 32 870 millones.
El principal exportador andino a los Estados Unidos fue Colombia, con ventas por USD 14 023 millones, un monto que representó el 43% del total de las exportaciones andinas a ese país, seguido por Ecuador, con un 34%; Perú, con un 17%; y Bolivia, con el 6%.
El documento precisó que los principales productos de exportación de la CAN al mercado estadounidense fueron aceites crudos de petróleo o de mineral bituminoso, formas en bruto de oro para uso no monetario, café sin tostar y sin descafeinar, fuel oils y plátanos tipo ‘cavendish valery’ frescos.
Entre los principales destinos de las exportaciones de la Comunidad Andina durante el año pasado también estuvo la Unión Europea, con USD 18 614 millones en ventas; China, con USD 13 229 millones; y el Mercado Común del Sur (Mercosur), con USD 10 156 millones.
El documento estadístico, elaborado por la Secretaría General de la CAN, detalló además que el año pasado las importaciones de la Comunidad Andina se originaron principalmente en Estados Unidos, con un 25% de participación; seguido por China, con 18 %; la Unión Europea, con 14 %; y el Mercosur, con 8 %.
Las exportaciones de Ecuador a Estados Unidos representan el 34%. Foto referencial: Pixabay
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció el 9 de abril del 2015 que su país aportará una financiación inicial de USD 20 millones para promover inversiones públicas y privadas en proyectos de energía renovable en el Caribe.
Los países de esta región necesitan acceder a energía ‘más limpia’ y a precios ‘asequibles’, explicó Obama al inicio de su reunión en la capital de Jamaica con líderes de las naciones que integran la Comunidad del Caribe (Caricom).
La escasa diversidad y los altos costos de la energía son «uno de los mayores obstáculos para el desarrollo del Caribe«, subrayó Obama. «Los países del Caribe son particularmente vulnerables a los efectos del cambio climático y tenemos que actuar ahora», agregó.
Además de esa financiación de USD 20 millones, la Administración de EE.UU. detalló que la Corporación de Inversiones Privadas en el Extranjero (OPIC) se ha comprometido a financiar el ‘mayor parque eólico’ del sector privado en Jamaica y hay ‘conversaciones’ en marcha para dar fondos también a una granja solar.
Asimismo, el Departamento de Energía de EE.UU. y el Ministerio de Ciencia y Energía de Jamaica firmaron hoy una declaración de intenciones para avanzar en infraestructura, almacenamiento y diversificación de combustibles, entre otros aspectos.
El Departamento de Energía de EE.UU. apoyará también proyectos regionales para mejorar la eficiencia en la industria del turismo, la mayor consumidora de energía en el Caribe. Uno de los objetivos fundamentales de la visita de Obama a Jamaica es profundizar la cooperación energética con el Caribe, una región muy dependiente de la iniciativa venezolana de petróleo subsidiado, conocida como Petrocaribe.
De hecho, el vicepresidente de EE.UU., Joseph Biden, encabezó en Washington el pasado enero la primera Cumbre de Seguridad Energética en el Caribe. Obama destacó hoy también que su propósito es apoyar el crecimiento económico del Caribe y una mayor integración regional. Hay que «garantizar que nuestros Gobiernos son abiertos y transparentes, y defender los derechos humanos para todos los ciudadanos«, abogó el presidente ante los líderes de Caricom.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció que su país aportará una financiación inicial de USD 20 millones. Foto: Andrew Harrer/ EFE.
Jacksonville, al norte del estado de Florida, es la ciudad que más y mejores oportunidades ofrece actualmente a los latinos. El dato se desprende de un estudio publicado en la revista Forbes y difundido en Bbc.co.uk.
Según el análisis, las urbes que ofrecen el entorno ideal para que los hispanos prosperen y hagan realidad el ‘sueño americano’ son de tamaño medio y se encuentran en el sureste del país.
Si bien ciudades como Los Ángeles, Miami o Nueva York han sido las que tradicionalmente acogen a una gran población de origen hispano, su presencia numerosa no es sinónimo de que los ciudadanos pertenecientes a la principal minoría de Estados Unidos hayan encontrado más oportunidades.
Forbes analizó la situación de los latinos en las 52 áreas metropolitanas principales de EE.UU. Tomó en cuenta el porcentaje de viviendas en propiedad, nivel de emprendimiento y promedio de ingresos económicos. Factores que se entienden como indicadores del éxito de la clase media.
A través de esos datos se concluyó que en Jacksonville el porcentaje de casas en propiedad entre los hispanos se sitúa en el 55% y los ingresos medios por hogar rodean los USD 50,000. Además, un 17% está autoempleado.
En el ranking continúan Riverside-San Bernardino (California), Baltimore (Maryland), Houston (Texas) y Washington DC.
Virginia Beach-Norfolk (Virginia), Dallas-Fort Worth (Texas), San Antonio (Texas), Austin (Texas) y St. Louis (Missouri) completan la lista.
De acuerdo a la publicación, la economía de estados como Texas sorteó de manera más eficaz la crisis económica. Es por ello que se generaron más empleos que demandan trabajadores del perfil que ofrecen los hispanos.
De hecho, el sureste de EE.UU. ha atraído desde 2010 cerca de 5 millones de ciudadanos extranjeros, más que cualquier otra región del país.
En la publicación se dice que «al mismo tiempo, hay más empleos en sectores como la construcción o la manufactura, en los que hay una mayor demanda de trabajadores latinos».
Además, se indica que la comunidad hispana ayuda a revitalizar muchas ciudades estadounidenses. Representa una nueva fuerza laboral y nuevos consumidores, así como muchos emprendedores que abren negocios como restaurantes, tiendas o empresas de servicios.
«La clase media hispana es la razón por la que muchas ciudades no han entrado en el declive demográfico que se ve en partes de Europa o Asia, al tiempo que dinamiza la economía», concluye.
En Jacksonville el porcentaje de casas en propiedad entre los hispanos se sitúa en el 55% y los ingresos medios por hogar rodean los USD 50,000. Foto: Cortesía Visitjacksonville.com
Los empresarios de Florida, aunque cautos, se frotan las manos ante la apertura de Estados Unidos hacia Cuba, ya que al estar a sólo 150 km de la isla esperan réditos de la nueva relación entre los países hasta hace poco enemigos.
No obstante, saben que enfrentan obstáculos, incluido el embargo económico que sigue impidiendo casi todo comercio. Y aún no tienen claro cuánta voluntad tiene Cuba de abrirse a los negocios estadounidenses.
«Con las mejores relaciones con Cuba, debería haber un aumento en el comercio tanto de Florida hacia Cuba, como de Cuba a Estados Unidos», dijo a la AFP Jay Brickman, vicepresidente de la empresa Crowley Maritime Corp. «Florida se beneficiará al tener más comercio, por la necesidad de más almacenes, de más camiones, así que tendrá un efecto multiplicador para la economía» del estado, señaló Brickman.
Su empresa envía semanalmente a la isla desde Port Everglades, Florida (sureste de EEUU), productos agrícolas y pollo, que junto a las medicinas son de los pocos permitidos bajo el embargo vigente desde 1962.
Muchas interrogantes Las restricciones hacen que las exportaciones estadounidenses a la isla sean mínimas. El año pasado se ubicaron por debajo de USD 300 millones, según la firma WorldCity en Miami, que estudia el comercio mundial. Ahora, nuevas regulaciones del gobierno de Barack Obama dentro del histórico acercamiento a Cuba iniciado en diciembre, facilitan el comercio, sobre todo venta de materiales de construcción, agricultura y telecomunicaciones, así como los viajes de estadounidenses a la isla.
Brickman advierte que quedan puntos por dilucidar: las disposiciones establecen que los estadounidenses deben vender a privados, y casi todas las industrias en Cuba son estatales. Y La Habana tendrá la última palabra en definitiva sobre lo que quiere comprar. «La palabra clave es ‘flexibilización‘.
Es importante entender que el embargo aún existe. (…) En el corto plazo no veremos mucho impacto. Pero poco a poco, a medida que la gente entienda cómo trabajar con las nuevas reglas, veremos un incremento», dice. La carencias en Cuba, junto a la cercanía geográfica y los vínculos culturales (en el estado vive gran parte de los dos millones de cubanos en Estados Unidos) ofrecen una oportunidad única a Florida, estiman analistas.
«Florida puede beneficiarse de muchos sectores diferentes de la economía de los que hay necesidad en Cuba», dijo Milton Vescovacci, experto en Cuba del bufete GrayRobinson en Miami. Con las nuevas regulaciones, Cuba ya no debe cancelar los envíos por adelantado, sino al momento de la entrega, lo que en la práctica significa «un financiamiento de corto plazo», saludó el abogado.
Más conexión aérea Uno de los sectores que se beneficiará a corto plazo es el de las compañías que ofrecen vuelos chárter a Cuba, la mayor parte de ellas con sede en Florida. «El año pasado 100 000 norteamericanos viajaron legalmente a Cuba. Una proyección pudiera ser, basada en nuestras experiencias, que ese número aumente a entre 130.000 y 150.000″, dice Armando García, presidente de Marazul Charters, que realiza entre 12 y 20 vuelos semanales a Cuba.
Mientras las líneas aéreas regulares deben esperar por más permisos, otras empresas no pierden el tiempo. Jon Fay, dueño de una pequeña firma con tres aviones en Naples, ya tramita la licencia para viajar a Cuba. «¿De qué estamos hablando? Es la isla más grande del Caribe, con 11 millones de personas. Playas hermosas, buen clima», resume Fay.
Pero no todos están dispuestos a hacer negocios con la isla comunista. En Florida, donde residen desde las primeras generaciones de exiliados, fuertemente anticastristas, hasta los llegados más recientemente, más abiertos a mantener un contacto cercano con la isla, el tema de Cuba sigue generando divisiones.
«Como cubana exiliada que vine a este país muy jovencita creyendo que iba a estar 30 días y llevo más de 50 años, sería una aberración tratar de ir a hacer negocios en Cuba mientras las condiciones de ese país no cambien», dijo Remedios Díaz Oliver, presidenta de All American Containers, una empresa con negocios con medio centenar de países. fn-du/emm
La nueva relación con Estados Unidos trae a la economía cubana un horizonte de posibilidades. Foto: Ernesto Mastrascusa/EFE.
La visita esta semana de la ministra india de Exteriores, Sushma Swaraj, a China apenas cuatro días después de la exitosa estancia en Nueva Delhi del presidente estadounidense, Barack Obama, deja entrever una India que pretende bailar con las potencias mundiales al ritmo de su propio son.
Durante la visita de Swaraj, los dos países más poblados del orbe se comprometieron a llegar cuanto antes a un acuerdo sobre el eterno conflicto de su frontera, además de organizar el viaje a Pekín que el primer ministro indio, Narendra Modi, tiene previsto realizar en los próximos meses.
Cuatro días antes de que la titular de Exteriores partiese hacia China, Obama dejaba Delhi tras una visita en la que las dos mayores democracias del mundo alcanzaron avances más simbólicos que sustanciales en energía o defensa, pero que abrió la puerta al refuerzo de unas relaciones enfriadas en últimos años.
La India optó así por estrechar simultáneamente sus relaciones con las grandes potencias, adoptando una posición ‘pragmática’ frente a la actitud ‘dudosa’ que hasta ahora le había impedido ‘cruzar la línea’ explicó a Efe el catedrático de estudios chinos B.R. Deepak, de la Universidad Jawaharlal Nehru (JNU).
«Modi está buscando una India más fuerte económica y militarmente», sentenció Deepak para explicar la apuesta por la internacionalización del dirigente, quien no va, en su opinión, a comprometer la ‘autonomía‘ de su país en el proceso ni tampoco a «dormirlo en los brazos de Estados Unidos».
Durante la visita de Obama, la India y Estados Unidos emitieron por primera vez una declaración conjunta sobre su visión estratégica de la región de Asia y el Pacífico, en la que recalcaron la importancia de asegurar la libertad de navegación y vuelo «especialmente en el mar del Sur de China«, disputado por varios países del sureste asiático.
China salió al paso de esta apreciación para reivindicar que el conflicto marítimo ha de ser resuelto por las partes implicadas, una reacción que sorprendió a Obama, afirmando que no creía que China debiera «sentirse amenazada» por la buena relación de la India con Estados Unidos.
«Antes la India era reacia a actuar como un proveedor de seguridad (para Asia-Pacífico), ahora está lista para salir, aunque no se ha comprometido muy formalmente», advirtió a Efe el investigador del centro Brookings W.P.S.
Sidhu sobre la necesidad de equilibrar la agresividad china en la zona. Sin embargo, esto no significa que la India se vaya a convertir en el pivote que busca Estados Unidos para ‘rodear’ a China, pues «no se puede permitir tener problemas» con Pekín y «cualquier movimiento negativo» puede hacer saltar el conflicto en su frontera, tal y como explicó a Efe el catedrático de política internacional en la JNU Happymon Jacob.
Decidida a reavivar su economía, Nueva Delhi también ha de tener en cuenta los 20 000 millones en inversiones prometidos por Xi Jinping para los próximos cinco años, un monto muy superior a los ofrecidos por Washington y Tokio, la otra gran alianza en la que Modi ha estado trabajando en sus ocho meses en el poder.
Mientras la India se mantiene cautelosa ante un complejo escenario geopolítico, ni China ni Estados Unidos parecen haber avanzado mucho en sus pretensiones con el nuevo Gobierno de Delhi.
China y la India acordaron en Pekín intentar llegar a un acuerdo para resolver el conflicto fronterizo que mantienen desde hace décadas en el plazo de un mes, a tiempo para el encuentro entre sus máximos dirigentes, una meta que el catedrático Deepak ve «poco realista» por tratarse de un contencioso «muy complejo y delicado». Tampoco los avances en detalles «técnicos y administrativos» en el pacto de energía nuclear civil puestos sobre la mesa en la visita de Obama cambiarán «el resultado principal», según advirtió Sidhu, ya que la decisión final continúa en manos de las empresas interesadas en entrar al mercado indio de la energía nuclear.
«Hasta ahora, pensábamos en la India y Estados Unidos de una manera bilateral, pero ha habido una evolución y están hablando también sobre otros países«, sentenció el investigador de Brookings.
La ministra india de Exteriores, Sushma Swaraj, ofreció una rueda de prensa tras su reunión con el ministro chino de Exteriores, Wang Yi, y su homólogo ruso, Sergei Lavrov, en la casa de huéspedes del estado de Diaoyutai en Pekín (China) el pasado 2 de enero de 2015. Foto: Wu Hong Pool/ EFE.