Etiqueta: administracion

  • Hacia la innovación estratégica

    José Antonio Torres

    Hace apenas 12 años, Apple era un jugador marginal en el mundo de las computadoras; Google estaba definiendo su modelo de negocios; Facebook no existía y su fundador estaba aún en secundaria. Vivimos en un mundo de cambios rápidos, donde la capacidad de innovar de una organización se ha convertido en una habilidad estratégica clave, para la supervivencia y el éxito.

    La pregunta que se hacen las organizaciones hoy en día es ¿cómo ser más innovadores de manera estratégica? Para responder esta inquietud se necesita entender cómo funciona el proceso de innovación personal y cómo crear culturas que incentiven la innovación.

    El proceso personal está explicado con genialidad por el profesor Otto Scharmer de Sloan School of Management de MIT, en el modelo U. Scharmer y define cuatro niveles de escucha. El primero, lo llama descarga. En este nivel, las personas “descargan” memorias del pasado. Descargan juicios, creencias, certezas y el enfoque está en intentar que el mundo se ajuste a sus creencias. Piensan que no necesitan aprender y que tienen todas las respuestas. El segundo nivel, lo define como escucha factual. Es un nivel donde hay una apertura mental hacia ideas, donde evaluamos diferencias y buscamos razones.

    El tercer nivel es conocido como escucha empática, donde el énfasis esta en entender el punto de vista del otro, en ponernos en los zapatos de otro ser humano y ver el mundo desde ahí. Finalmente, el cuarto nivel, se llama de escucha generativa. Este nivel ocurre al dejar a un lado nuestra propia agenda y permitirnos a nosotros mismos ser sorprendidos por la experiencia de escucha y descubrimiento.

    La innovación empieza a ocurrir desde el tercer nivel. En el primer nivel simplemente se repiten los patrones y hábitos del pasado. El segundo nivel es un proceso puramente intelectual, muchas veces aislado de la realidad. En el tercer nivel somos capaces de entender la realidad desde otro punto de vista y ampliar nuestro marco de referencia, y en el cuarto nivel, nos conectamos con la fuente de inspiración.

    Este es un cambio de paradigma fundamental cuando hablamos de innovación. No es cuestión de lógica, es cuestión de inspiración. Inspiración que llega cuando creamos el espacio de silencio interior, para que pueda suceder. La innovación en este modelo además parte de la conexión profunda con el propósito personal. Las personas no innovan por el puro hecho de innovar. Innovan en lo que les importa, en lo que están tratando de crear para sí mismos, su organización y su sociedad.

    El mapa de Scharmer es una genialidad porque permite entender un territorio desconocido hasta ahora por las organizaciones tradicionales. La innovación no es el resultado de un camino lógico sino de un espacio creativo personal. Este mapa es un reto para las organizaciones que sistemáticamente han trabajado en ser lógicas y racionales, desestimando emociones, intuiciones e inspiraciones.

    Por otro lado, el autor Steven Johnson, al estudiar la historia de la innovación encuentra que existen patrones recurrentes en espacios de alta creatividad e innovación. Entre los más importantes, destaca que las grandes ideas se crean cuando se chocan con otras ideas que las complementan y las convierten en ideas más completas.

    Johnson resalta entre los espacios históricos de innovación las casas de café en el ‘Siglo de las Luces’ y los círculos literarios en el Modernismo, lugares donde las personas se encontraban para compartir ideas y generaban espacios donde ocurrían innovaciones sociales a tasas mayores que en otros momentos de la historia.

    En resumen, la innovación empresarial es un proceso personal y organizacional a la vez. Este requiere que las personas se abran a ver el mundo de diferentes maneras y que creen espacios para ser inspirados, alineándose desde su propósito personal. La innovación ocurre en sistemas que fomenten la conversación sobre ideas y posibilidades para que se puedan conectar, complementar y aterrizar en proyectos y acciones concretas. Tradicionalmente, innovadores en sistemas rígidos, se han convertido en emprendedores por fuera de la organización. Espacios de conversación con personas cerradas, no son espacios fértiles con capacidad de producción de cambios y mejoras.

    La combinación de personas abiertas, con estructuras que permitan el diálogo y la inspiración, da como resultado culturas que generan innovación y responden a los retos actuales.

    La próxima semana, una de las empresas más innovadoras de todos los tiempos, Disney Institute, presentará en Quito sus mejores prácticas organizacionales para mantenerse a través de los años en la punta de la ola de la innovación.

    Se trata de un evento que no se pueden perder las organizaciones interesadas en la innovación estratégica.

  • Los 7 pecados que cometió el BEV en cinco décadas de vida

    Santiago Ayala Sarmiento y Xavier Montero

    Después de 52 años de existencia, el cierre del Banco Ecuatoriano de la Vivienda (BEV) servirá sin duda como un caso de estudio para quienes manejen la administración pública en los próximos años. Tras casi dos décadas de esplendor, su brillo fue opacándose paulatinamente. Hoy no es ni la sombra de lo que fue: una entidad vigorosa, timón del desarrollo habitacional y con más de 30 oficinas a lo largo del país.

    Los 200 funcionarios ahora esperan el proceso de liquidación voluntaria de la entidad que, según el superintendente de Bancos, Pedro Solines, empezará dentro de seis meses, una vez que el total de su cartera de créditos para vivienda sea asumido por el Banco del Estado (BEDE).

    Esto empezó a gestarse con la adquisición de 23 proyectos de vivienda popular a finales del mes pasado. Quedan aún 109 proyectos que tienen distinta calificación de riesgo. Según la gerenta del BEDE, María Soledad Barrera, los proyectos tienen distintas calificaciones de riesgo. «Hay de todo, desde unos de baja calificación hasta otros de mediana y alta. Esto, sin embargo, no afectará las cuentas del BEDE, porque el BEV es un banco pequeño y nosotros un grande».

    La extinción del BEV, a decir de Barrera, se enmarca dentro de un programa integral de reordenamiento del desarrollo urbanístico. Y como el BEDE centra su trabajo en ello, entonces caerá adecuadamente esta nueva actividad.

    Sin embargo, la decisión del Régimen de cerrar el BEV ya viene trabajándose desde hace un año y se debió a un reflejo poco positivo de sus principales indicadores de gestión, en especial en lo que se refiere a los proyectos de vivienda en proceso. Entre los informes internos que se manejan dentro del área económica del Gobierno se señala que el banco generó proyectos con bajas calificaciones (C y D), así como inadecuados procesos de precalifiación, monitoreo y análisis.

    Según especialistas del sector vivienda, a lo largo de la vida del BEV se puede determinar que se cometieron siete pecados (ver página 13) que terminaron por sepultar a un ente que era un referente.

    El principal de la Cámara de la Construcción de Guayaquil, José Centeno, señala que una de las falencias en las operaciones del BEV fue intentar acaparar todo el mercado. El banco apuntaba a todas las facetas del sector y tal vez eso afectó su modernización e innovación como institución. «El BEV compraba los terrenos, construía sus propios materiales, hacía sus propios proyectos, se encargaba de venderlos, de financiarlos y de cobrarlos. Eso le restó competitividad frente a firmas privadas».

    En lo positivo, Gustavo García Caputi, presidente del Instituto Ecuatoriano de la Construcción (IEC), señala que «el BEV atendió la demanda de las pujantes clases media y alta de la década de los setenta. De esta forma, tanto los costos de entrada para una vivienda como los requisitos al solicitante estaban pensados en gente con ingresos fijos».

    En sus años de gloria, la entidad edificaba y asignaba hasta 6 000 viviendas anuales. Algo que disminuyó drásticamente cada año, luego de los errores que a continuación se detallan y que mermaron la capacidad de la entidad para atender a los sectores más vulnerables. Esa tarea ahora está en otras manos…

  • Centuria enseña a la Pymes a equilibrar su liquidez

    Redacción Quito

    Mantener el balance de una pequeña empresa con saldo positivo no es el principal problema de las pequeñas y medianas empresas. Su verdadero dolor de cabeza es contar con la liquidez suficiente a fin de mes para pagar los salarios de los empleados, las obligaciones tributarias y más rubros.

    Centuria, una empresa de consultoría enfocada en las pymes, desarrolló una metodología que les permite a las pequeñas empresas mejorar su liquidez.

    «El contador le dice a la empresa que tiene utilidad, pero solo en el papel porque al mirar la cuenta bancaria observábamos que estaba sobregirada, con serios problemas de liquidez, atrasos al IESS o a los proveedores», comenta Wilson Mariño, gerente de la firma.

    Mariño empezó hace cinco años un estudio en más de 200 empresas y, a partir de allí, desarrolló la teoría que después se plasmó en el libro «Modelo de Gestión de Liquidez Centuria», que se publicó en mayo del año pasado.

    El estudio, que tuvo el apoyo de Verónica Ayala y Carina Dávila, evidenció una necesidad de mercado que se convirtió en un emprendimiento: Centuria. La firma empezó con tres clientes y una facturación de USD 1 500 al mes en el 2010. Hoy tiene de 280 clientes y factura USD 40 000 al mes.

    La asesoría empieza con un diagnóstico de la liquidez de la empresa. Una vez que se detectan los problemas, se generan técnicas y metodologías para que el cliente pague a tiempo sus cuentas; por ejemplo, para manejar el inventario, el pago de créditos, de proveedores, etc.

    Santiago Dávalos, gerente financiero de Arista, que fabrica vidrio templado y que contrata los servicios de Centuria desde hace tres años, dice que la metodología es útil. La firma no tenía problemas de liquidez, pero quería asegurarse cumplir a tiempo con el pago de un préstamo que realizó para nueva maquinaria. «Nos han ayudado y no tenemos problemas».

    El Tecnológico de Monterrey comentó positivamente el estudio. Verónica Baldeón, representante de esta entidad en Ecuador, dijo que la metodología es un aporte importante y riguroso para el segmento de las pymes.

    Mariño dice que a futuro la meta es difundir en el ámbito local e internacional la metodología.

    40 000 dólares es la facturación mensual actual de la consultora Centuria.

  • Jhenny Andrade. Experta en detectar riesgos

    Andreína Laines, Redacción Guayaquil / LÍDERES

    Su oficina está decorada con cuadros que muestran las menciones, reconocimientos y logros que ha obtenido. La puerta del lugar está siempre abierta; esta costumbre busca que el contacto con sus colaboradores sea directo.

    Jhenny Andrade es experta en descubrir fraudes como el lavado de activos, detectar los riegos internos de las empresas, investigar asuntos corporativos… El gusto por la seguridad la llevó a especializarse como Certified Protection Professional (CPP) otorgada por la Advancing Security Worldwide Internacional (ASIS) de EE.UU. y especializarse en anti lavado de activos, en lo que tiene una certificación conferida por la Association of Certified Anti-Money Laundering Specialists (Acams) de EE.UU.

    En el 2002 fundó, en Guayaquil, la empresa Asesoría en Riegos y Auditoría en Seguridad (Arasco). Hasta la fecha ha capacitado a más de 500 oficiales de cumplimiento que deben reportar operaciones inusuales e injustificadas previstos en la Ley de Prevención de Lavado de Activos del Ecuador. Una de ellas es Mirian Rodríguez, asesora de cumplimiento del Banco del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social, ella se formó con Andrade en el 2010. «Es muy profesional, cuando tengo una duda la llamo para consultarte», cuenta.

    Andrade ha dictado charlas a más de 400 empleados del Biess en diferentes temas de seguridad financiera desde hace tres años.

    Para constituir Arasco, Andrade invirtió USD 4 000 que recibió de la liquidación del banco en el que laboraba. Hoy la empresa factura más de USD 600 000 al año y tiene alrededor de 12 colaboradores.

    Uno de ellos es Carlos Mejía, jefe de Recursos Humanos del grupo, quien la define como una persona accesible y de la que siempre se puede aprender algo nuevo. «De ella aprendí cómo escoger a un colaborador, evaluarlo y potencializar las capacidades de este», cuenta el joven de 23 años.

    Andrade sostiene que la juventud no limita la capacidad para un cargo. Cuando tenía 17 años, debido a la muerte de su padre, empezó a trabajar en la Cooperativa de Ahorro San Francisco de Asís en Latacunga, en donde, tres años después, fue nombrada gerente de sucursal. Allí empezó su experiencia en entidades financieras; luego laboró, hasta el 2000, en los bancos de Los Andes, Previsora y Amazonas.

    Detectar rasgos de la personalidad mediante la poligrafía y la psicofisiología para la selección de personal para alta seguridad y cargos gerenciales, además de resolver conflictos internos, son ciencias que Andrade domina.

    Por ejemplo, recuerda que una vez el Director del área financiera de una empresa le pidió que entrevistara a sus colaboradores porque un celular se había extraviado por tercera vez. Para ello seleccionó a cuatro personas. Luego del estudio descubrió, entre otras cosas, que la asistente del Director recibió una coima para eliminar deudas de los clientes; que el Jefe de compras recibía comisiones para escoger a los proveedores; que el Jefe de operaciones consumía marihuana diariamente y que la señora que servia el té tomó el celular para comprar medicinas para su hija. Andrade emitió un informe con el cual el Director financiero se quedó sorprendido y decepcionado.

    Andrade recuerda que descubría hechos que la hacían llorar por la noche. «La carga emocional que tenía por las confesiones de los delitos siempre involucraban problemas personales; luego superé esa etapa y entendí que era parte de mi trabajo», cuenta.

    El pasado fin de semana, Andrade viajó a Montevideo (Uruguay) a dictar una charla sobre Delitos Financieros en la Segunda Conferencia de Hemisferio Sur organizada por la Acams. Entre las aficiones de Andrade destaca la lectura. Su libro favorito es ‘Ilícito’ de Moisés Nahím y los que cuentan los casos de la Central Intelligence Agency (CIA). Su oficina está llena de libros con portadas de temas de investigación y seguridad.

    Jhenny Andrade comparte la pasión por la seguridad con su esposo Miguel Guzmán, quien es propietario de otras empresas de seguridad. Ambos tienen la certificación de la CPP. Una de sus tres hijas, Michelle de 21 años, es experta en poligrafía por la International Polygraph Training, al igual que ella.

    La innovación es esencial para el éxito, dice Andrade. Ella está en constante actualización, por eso desarrolló un software propio: AML System, una plataforma pata evitar el lavado de dinero.

    experta en detectar riesgos

    2012. ANÁLISIS DE RIESGO.

    Durante una conferencia realizada por la Superintendecia de Compañías. Andrade también ha ofrecido conferencias internacionales en República Dominica, Venezuela, Colombia, Uruguay y México.

    Hoja de vida Certificación. La Certified Protection Professional (CPP) otorgada por ASIS (EE. UU.) Especialidades.  En el 2008 se certificó como Experta en Poligrafía en Estados Unidos y México. Luego se especializó en psicografología y después en psicofisiología del rostro.

    Conferencias.

    Ha dictado charlas en Venezuela, Uruguay, Colombia…

    2012. EN LA INAUGURACIÓN DEL 4TO ENCUENTRO LATINOAMERICANO  de Profesionales de Seguridad, Prevención de Pérdidas y Lavado de Activos. En la gráfica constan representantes de varios países.

    «Para el éxito Se necesita pasión,  enfoque, trabajar incansablemente, ser perservenate, innovar y Afán de servir»

  • Javier Urey: ‘Consolidar voluntades es el reto de la empresa familiar’

    Xavier Montero, Redacción Guayaquil / LÍDERES

    El empresario Javier Urey, autor del libro ‘Padres trabajadores, hijos ricos, nietos pobres ¿mito o realidad?’, fue conferencista del ExpoManagement organizado por IDE Business School el mes pasado. Urey, quien es el principal de la firma boliviana Mainter SRL y también es miembro del Directorio del Diario El Deber, habla sobre el papel de las empresas familiares en la región y el protagonismo que podrían llegar a ocupar en las economías interconectadas.

    ¿Los padres trabajadores no son el pilar de una sólida estructura generadora de riqueza para las siguientes generaciones?
    Hay que definir ese concepto de riqueza porque no se trata únicamente de un tema patrimonial. Uno puede heredar bonos y bienes a sus hijos pero si no hay una cultura, una educación en valores, difícilmente ellos o los nietos podrán mantener lo creado. La cultura de la empresa refleja la cultura de la familia, el cómo tú actúas en una mesa del comedor, si conversas con tu esposo, tu esposa o con tus hijos va a reflejarse el día de mañana en la mesa de un directorio empresarial. El cómo le enseñas a tus hijos a tratar al personal doméstico, al chofer, a la niñera, al jardinero… será un parámetro de cómo ellos manejarán los RR.HH. en un futuro. La complejidad de las empresas familiares va por allí, por cómo se inculca a los hijos una estructura de valores que los forme para que sean las personas idóneas para hacerse cargo de los negocios.

    Entonces, ¿el no cultivar aquellos aspectos podría significar que las empresas no trasciendan entre generaciones?
    Sí. El otro concepto que plantea mi libro es, aunque no conozco a profundidad al tejido empresarial ecuatoriano, cuestionar a la sociedad sobre si las empresas exitosas en la década de 1970 y 1980 en el Ecuador hoy siguen operando. Si la respuesta es negativa hay que identificar el porqué. Allí uno se encuentra con una dura realidad: algunas firmas dejaron de existir por nepotismo, falta de comunicación, de claridad al establecer una sucesión generacional, falta de compromiso… En las empresas familiares no existen recetas de cocina sino realidades distintas y soluciones diferentes para cada caso.

    ¿En qué se asemejan las empresas familiares bolivianas a las ecuatorianas? En ambos casos se desarrollan en economías extractivistas.

    Existen algunos casos que se podrían asemejar en empresas dedicadas a la industria agrícola. Bolivia, y especialmente mi región Santa Cruz, es un gran exportador de soya y derivados. Pero en ese contexto agroindustrial hay algo comparable en ambos casos: hay generaciones de empresarios que, probablemente, pasaron por aulas académicas y tienen una visión diferente de hacer negocios. Ellos se han preocupado por formar a sus sucesores, por invertir en la educación de sus hijos e inculcarles una estructura de valores. Cuando se indaga sobre casos de las empresas familiares en el mundo es muy incipiente el material de ejemplos de nuestros países. He visto con mucha satisfacción que el IDE Business School está manejando estadísticas duras, y cuando leí que el 51% del PIB ecuatoriano tiene su origen en empresas familiares me di cuenta que es un tema a tratar con mucha responsabilidad. Existe una fuerte responsabilidad del empresario con su familia, con sus trabajadores, con el país y con la región. Ese deber es lograr que su empresa sea sostenible en el tiempo, que siga creciendo y que no termine por la ineficiencia de quienes llegaron a guiar las riendas sin conocimiento.

    ¿Por qué el mito sugiere que los nietos de los padres trabajadores terminarían en pobreza?
    Porque hay una estadística en la que se demuestra que normalmente los hijos no pueden sostener lo que los padres crean y lo que heredan terminan dilapidándolo y por eso la siguiente generación no la hereda. Tuve una experiencia hace un par de años con un empresario argentino muy exitoso. Él consiguió consolidar siete empresas en el rubro de la construcción y el transporte, y hoy está jubilado. Cuando le consulté sobre sus negocios me quedé impresionado con su primera respuesta: a mis empresas las hice ladrillo, vendí todo porque a ninguno de mis hijos les interesó nada, me cansé y con el dinero que obtuve compré casas y vivo de arriendos. ¿Acaso no es ese un duro pero real ejemplo?

    ¿Las empresas familiares deberían empezar por introducir a personas ajenas a la familia en mandos medios o a los altos mandos?
    Lo primero es tomar conciencia de que la problemática en las empresas familiares es una realidad y que es necesario discutir esos temas. Me satisface ver espacios de discusión donde no hay conflictos de intereses y que forjan, en definitiva, el lugar ideal para establecer un ‘protocolo familiar’. Hoy el norte de toda empresa de este tipo es consolidar aquel acuerdo de voluntades que, en lo formal, en un documento donde se establecen las reglas del juego en materia de políticas salariales, de contratación y sucesión de personal, en inversiones y distribución de utilidades… Es llevar toda la complejidad de lo empresarial al plano familiar para establecer límites tanto para la empresa como para la familia.

    ¿Se refiere a profesionalizar las empresas?
    Se habla mucho de que profesionalizar las empresas familiares es contratar a terceros, pero eso es un mito. En las empresas familiares tú tomas decisiones con el corazón. El corazón, el sentimentalismo, te dice: quiero que mis hijos manejen el negocio que fundé. De allí que los padres se esfuerzan en educar a sus hijos para la sucesión aunque eso no garantice nada. Entonces entra el plano de la comunicación en la que se visualiza el ingreso de otras personas que permitan que el negocio funcione.

    ¿Los sucesores empresariales nacen o se hacen mediante la educación?
    Si tú obligas a los hijos a perpetuar la empresa familiar, cuando los fundadores mueren y ese hijo no tiene la pasión para el negocio, lo primero que harán es venderla. La alternativa es buscar mecanismos como directorios mixtos o consejos familiares.

    ‘CONSOLIDAR VOLUNTADES ES EL RETO DE LA EMPRESA FAMILIAR’

    FORMADO EN DOS PAÍSES: En Chile. Es ingeniero comercial por la Universidad Gabriela Mistral de Santiago de Chile. Su MBA lo obtuvo en la Universidad Privada de Santa Cruz (Bolivia).

    Los gremios. Pertenece a la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco) y es tenista destacado.

    «LA MANERA EN LA QUE UNO ACTÚA EN EL HOGAR, SI CONVERSAS CON TU ESPOSO O CON TUS HIJOS SE VA A REFLEJAR EL DÍA DE MAÑANA EN LA MESA DE UN DIRECTORIO».

    «FIRMAS FAMILIARES DEJARON DE EXISTIR POR NEPOTISMO, FALTA DE COMUNICACIÓN, DE CLARIDAD EN LA SUCESIÓN GENERACIONAL».

    «EL NORTE DE TODA EMPRESA FAMILIAR ES CONSOLIDAR UN PROTOCOLO, UN DOCUMENTO DONDE SE ESTABLECEN LAS REGLAS DEL JUEGO».

  • El plan de negocios es el eje transversal

    Redacción Quito

    El edificio principal de la Universidad de las Américas (UDLA) llama la atención por su arquitectura. Al mirarlo desde la avenida Granados, en el norte de Quito, da la impresión de ser un cubo gigante y con espacios reducidos; pero al ingresar a sus oficinas y aulas, el visitante se encuentra con un intenso movimiento de estudiantes que caminan por pasillos amplios, escaleras eléctricas, patios bastante iluminados y áreas verdes que solo se aprecian cuando se las recorre.

    En ese espacio se concentran en la actualidad, en jornadas diurnas y nocturnas, cerca de 12 000 alumnos. De esa cifra, 2 000 corresponden a la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas. En esta facultad el programa de estudios apunta por igual a la formación de empresarios como de emprendedores, según sus autoridades.

    Vicente Albornoz, decano de la Facultad, explica que todos los estudiantes reciben desde el inicio de su carrera una base en temas administrativos y económicos. «De esa manera todos reciben nociones básicas sobre cómo funciona el mundo de los negocios, de cómo se constituyen empresas. Así aprenden el funcionamiento de las compañías, entienden sus lógicas y empiezan a pensar en ideas de negocios«.

    Conforme avanzan en la formación, los alumnos se especializan en por lo menos cinco ramas. Por eso la facultad tiene cinco carreras pensadas en el mundo empresarial: administración, negocios internacionales, finanzas, marketing y negocios deportivos. A estas se suma la carrera de economía.

    «Buscamos equilibrio entre lo general y lo especializado -agrega Albornoz-, para esto partimos con materias como administración, estrategia, marketing, finanzas…Luego vienen las especializaciones». Eso sí, en cada carrera el estudiante va desarrollando un plan de negocios que se convierte en la tesis de graduación. Este plan empieza desde cero y se va alimentando durante el tiempo que dura la carrera.

    Otra manera de conectar a los estudiantes con el mundo empresarial es con el concurso James McGuire. Este es un certamen internacional que fomenta el emprendimiento en el que la UDLA viene participando en los últimos años.

    El programa denominado ‘Megamercados‘ es otra alternativa para que el alumno de la UDLA mire de cerca los negocios. Se trata de una jornada de dos o tres días en los que la universidad invita a empresas y autoridades de un país que sea un socio comercial relevante para Ecuador. En años pasados han llegado representantes de Brasil, China, EE.UU., entre otros. Para el 2014 el país ‘invitado’ será Alemania.

    El vicerrector académico, Gonzalo Mendieta, mira más allá de la formación en carreras administrativas. Para él, el emprendimiento surge cuando el estudiante tiene actitud, cuando sabe conectarse con el mundo real y cuando aprende a trabajar con personas distintas a él.

    Mendieta agrega que en el mundo actual no necesariamente surgen emprendedores de las aulas de administración. «Ahora se encuentran más emprendedores en carreras técnicas, vinculadas a las tecnologías de la información. Donde se crea un valor que no existe».

    Más opciones

    El juego de empresas. Es parte de la formación de los alumnos de administración. Allí el estudiante conoce de cerca los detalles sobre el funcionamiento de las empresas en el mundo real. El plan de negocios es fundamental en este programa.

    Las pasantías.  Los estudiantes hacen pasantías en empresas medianas y grandes. Es una oportunidad para adquirir nuevos conocimientos.

    El empleo.  La Universidad de las Américas también cuenta con una Bolsa de Empleo. Bajo este esquema, cada vez más alumnos obtienen puestos en el sector privado. Todo este bagaje de experiencia se plasma en la tesis del estudiante.

  • Las cifras de IBM lo llevan a la nube

    Sebastián Angulo, Redacción Quito / LÍDERES

    Para Patricio Espinosa, el fin del Mundial Brasil 2014 fue más penoso que para los demás hinchas. Luego de presenciar la final Alemania vs. Argentina en el mítico Maracaná, el quiteño emprendió su viaje de retorno a Ecuador.

    El periplo Río de Janeiro-Panamá-Guayaquil significaba el cierre de una carrera brillante en Brasil. Luego de tres años de estancia en ese país, Espinosa experimentaba eso que los brasileños llaman ‘saudade’, esa mezcla de nostalgia, melancolía, pero con la satisfacción de haber vivido algo irrepetible.

    Este profesional de las finanzas, graduado de la Universidad de Troy, en Alabama (EE.UU.), desempeñó el cargo de Director Financiero para la multinacional de la informática IBM, en el país sudamericano hasta el año pasado.

    Luego de ello fue designado como ejecutivo de Cloud Computing para Latinoamérica. Espinosa mantiene el mismo cargo, solo que ahora su base de operaciones será su natal Quito.

    La principal motivación para su retorno, confiesa Espinosa, son sus hijos: Isabella de 14 años y Mateo de 12. «Quiero que vivan en Ecuador, que aprendan a ser ecuatorianos».

    En este 2014 cumplió 20 años en IBM. Luego de concluir sus estudios universitarios en EE.UU. regresó a Ecuador, en 1994, para tomarse ‘un año sabático’. Sin embargo, apenas llegó le ofrecieron vincularse a la compañía como analista financiero. Tenía apenas 22 años de edad.

    José Ávila es su amigo de toda la vida. Juntos asistieron al Colegio Americano, eran vecinos de barrio y tomaban el bus juntos. Ávila asegura que «lo admira por su tenacidad y la manera visionaria que tiene para ejercer su profesión».

    Una de las aventuras que vivieron tuvo como escenario Bahía de Caráquez. Cuando tenían 22 años se enteraron de que en el puerto había unos barcos grandes que estaban sin uso.

    En ello vieron una oportunidad de negocio y solicitaron permiso para alquilar el barco y montaron una «chiva marina». Vendieron más de 150 entradas para acceder a la fiesta. «Fue todo un éxito y nos hicimos una platita para financiarnos el resto de nuestras vacaciones».

    A la par de las vivencias propias de la juventud, Espinosa también tuvo que afrontar grandes retos profesionales. Cuando tenía 24 años fue designado Gerente de Desembolsos para la Región Andina de IBM, por lo que tuvo que radicarse en Venezuela.

    Gracias a su desempeño año a año fue escalando. Luego pasó a Gerente de Operaciones Financieras en Ecuador. Posteriormente fue Gerente de Control de Negocios de la región andina y controlador de servicios.

    Uno de los saltos más importantes en su carrera ocurrió a inicios de la década pasada, cuando fue designado a la coordinación de gastos, servicios e ingresos globales de la firma, en Nueva York.

    Pero no todo fue fácil en ese país. El cambio de cultura, el empezar desde abajo en la organización y educar a sus hijos junto a su esposa, Verónica Robayo, fueron los retos más grandes que en algún momento pudieron haber truncado sus metas.

    Stan Sutula, quien actualmente es vicepresidente y tesorero de la compañía, fue su mentor desde que llegó a EE.UU. «Cuando conoces a Patricio inmediatamente te das cuenta de lo agradable que es, siempre sonríe y es muy fácil hablar con él. Tiene la capacidad de entablar una conversación con todo el mundo ya que tiene numerosos intereses personales y fuerte visión para los negocios», cuenta Sutula, vía correo electrónico.

    El directivo señala que los ejecutivos de finanzas representan apenas el 2% del total de colaboradores de toda la compañía, por lo que haber llegado a esas instancias «es un logro».

    Así, en nueve años en EE.UU. pasó por cargos como AMS contralor para las Américas, gerente de consolidación ATS para las Américas, asistente ejecutivo contralor, hasta director de finanzas, consolidación GTS de las Américas.

    Jimmy Briceño comenta que Espinosa fue su jefe en la compañía. Él recuerda que se conocieron en la primera entrevista que tuvo en IBM, mientras estaba todavía en la universidad terminando las últimas clases.

    «La entrevista fue más una conversación amistosa. Él estaba más interesado en entender mis motivaciones y por qué quería trabajar en IBM», dice Briceño.

    La otra faceta del ejecutivo está vinculada al deporte. Este amante del fútbol e hincha «no novelero» de Liga de Quito, se dedicaba a la natación desde la secundaria.

    Luego de dejar abandonada la actividad física durante su carrera profesional, en el 2011 retomó la práctica deportiva, luego de una media maratón en Brasil. En el 2012 corrió en la Maratón de Chicago y el año pasado realizó un medio Ironman en Miami.

    Claudio Martínez, su amigo y excompañero de trabajo en Brasil, cuenta que han entrenado juntos para participar en competencias atléticas. «Con él aprendí que ser un líder financiero no te impide ser una persona abierta y simpática».

    Hoja de vida

    2012. UN RECONOCIMIENTO Trabajó paralelamente con la Asociación de Financieros de Sao Paulo. En esta organización realizaba acciones de labor social, por lo que fue reconocido debido a sus actividades solidarias.

    2013. CON SU FAMILIA Disfrutando de las vacaciones en Brasil con la familia. Para Espinosa, sus hijos y esposa han sido claves en la consecución de sus metas. Para el ejecutivo, «el equilibrio en la vida es el secreto para ser realmente exitoso como ejecutivo».

    SUS FECHAS CLAVES

    1994. Se graduó como Bachelor in Science, Finance, con el máximo reconocimiento de su promoción (Graduated cum laude).

    2010. Se incorporó como Director Financiero de IBM en Brasil.

    2006. Obtuvo el Máster en Negocios y Administración (MBA) en la Universidad de Columbia, en Estados Unidos.

    «Estoy seguro DE que La actitud es más importante que la aptitud; si tienes la actitud correcta ya ganaste la mitad de la pelea».

  • La calidad en carne y hueso

    Pedro Maldonado Ordóñez, Redacción Quito / LÍDERES

    La química fue una de sus materias preferidas en el Colegio Sebastián de Benalcázar. Por eso, César Díaz Guevara estudió Ingeniería Química en la Escuela Politécnica Nacional (EPN).

    En esa misma institución cursó Ingeniería Industrial. Eran los últimos años de la década de 1980 y este quiteño, que hoy tiene 53 años, empezaba su carrera profesional. Luego de terminar sus estudios en la EPN se enroló en la Corporación Financiera Nacional (CFN), como analista de proyectos.

    Guevara permaneció tres años en la entidad estatal. Para inicios de los años 90, sus planes profesionales iban tomando un giro que lo llevaría lejos.

    Por su actividad en la Corporación Financiera Nacional se contactó con la oficina en Ecuador de la Organización de las Naciones Unidas. Ese fue el primer paso en su trayectoria como consultor vinculado con el mundo de la calidad.

    Hoy, Díaz Guevara es representante de ASQ, una comunidad global de expertos en temas de calidad, cuyas oficinas están en Milwaukee, EE.UU.; también es un emprendedor que constituyó la Corporación 3D en 1992. Hasta la fecha, alrededor de 200 empresas, de distintas áreas, han contado con sus servicios profesionales como consultor.

    A esto se suma su cargo como consultor internacional de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (Onudi), entre 1990 y 1995. Su hoja de vida, publicada en LinkedIn, es extensa. Leer la lista de cargos, así como las recomendaciones de otros profesionales toma algunos minutos.

    Eduardo Crespo, CEO de Hispanic Market Solution, con sede en Boston, comenta -en esta red social dedicada a profesionales- que Díaz es un consultor ejemplar, apasionado por enfrentar desafíos y encontrar soluciones para las empresas a las que asesora. «Su perspicacia para los negocios hace de él una garantía invaluable de crecimiento y fiabilidad», añade Crespo.

    Díaz también está conectado de cerca con el Instituto Latinoamericano de la Calidad (Inlac), un organismo que es un enlace con las normas de calidad ISO. Élder Guerra Villagrán, presidente del Instituto Latinoamericano de la Calidad en Guatemala, comenta que como profesor de cursos de estrategia en programas de MBA en su país, «los consejos de César sobre innovación y estrategia han sido muy útiles y los he incorporado de inmediato a mis cursos».

    Para hacerse conocer en el extranjero, este quiteño que también es catedrático en la Escuela Politécnica del Ejército, aplica desde hace más de 15 años una estrategia. «Desde la primera conferencia sobre calidad a la que asistí, mi plan fue acercarme a los expositores de más edad. Ellos, con su experiencia, son eminencias. Me presentaba y les ayudaba en lo que necesitaban. Colaborando con los demás, me fui conectando con profesionales y estos me contactaban con otros».

    César Larrea conoce a Díaz Guevara desde la secundaria. Lo describe como una persona intachable, un amigo excelente. «En las clases fue un alumno tranquilo y ahora es una voz autorizada en temas de calidad. Además, comparte sus conocimientos con toda la gente. Tiene claro que para ser mejor hay que compartir y mejorar de forma continua. Además, es un gran motivador».

    Esto se confirma luego de conversar en persona con esta suerte de guía empresarial. «La humildad es la base del conocimiento» o «aprender, trabajar en red y divertirse son claves para toda organización», son frases que Díaz Guevara las repite con convicción.

    Uno de sus actuales clientes es Insercruz, una empresa del sector industrial que está en proceso de obtener el sello de calidad ISO 9000. Su gerente, Luis Cruz, lo califica como el número uno en temas de calidad en el Ecuador.

    Casado y con tres hijas, Díaz Guevara dedica su tiempo libre al ciclismo de montaña. Además, es un profesional muy activo en redes sociales, espacios en los que comparte su experiencia y sus exposiciones en México, EE.UU., Perú y otros países. En su oficina, ubicada en el norte de Quito, los libros sobre ‘management’ ocupan una buena parte de las repisas. Una de sus colaboradoras es Evelin Icaza. Ella lo califica como un gran profesional, con una calidad humana única. «Siempre está actualizándose».

    DATOS:

    2013.  En un congreso de calidad en Lima, Perú: César Díaz junto a Rafael Reyes, un ingeniero biofisico discapacitado y brillante. Los acompañan Antonio Hernández y Verónica Perea, en un congreso de ASQ, en Lima

    La calidad es la ruta que sigue

    Especialidades.  Implementación de Sistemas de Gestión ISO 9000; preparación y promoción de proyectos de inversión; Desarrollo Organizacional…

    Consultorías.  Para la Onudi, Aladi, CBI Holanda, Corpei, etc.

    En la Academia. Dicta clases en la maestría de Planificación estratégica de la Espe.

    «Para mi la calidad está mucho más allá de una empresa.  La calidad tiene que ver con la gente que hace feliz a otras personas».

  • El ecuatoriano destaca como alumno del Incae

    Redacción Guayaquil (I)

    El 11 de noviembre, el Instituto Latinoamericano de Administración de Empresas, Incae Business School, cumplirá medio siglo de presencia en Ecuador. Considerada entre las principales escuelas de negocios de Latinoamérica, según publicaciones especializadas, el Instituto mantiene una considerable cuota de ecuatorianos en sus programas de estudios de cuarto nivel.

    Actualmente, 52 ecuatorianos cursan estudios en la entidad, quienes representan el 10% de su alumnado.

    Además de Ecuador y de sus sedes principales en Nicaragua y Costa Rica, la escuela de negocios tiene presencia en El Salvador, EE.UU., Panamá y Perú.

    Arturo Condo, su rector, resalta el aporte de los alumnos ecuatorianos desde los inicios del instituto. «Desde que Ecuador pasó a ser miembro en 1981, el número de ecuatorianos ha sido siempre importante». Condo, quien también es ecuatoriano, agrega que la institución desarrolla una serie de programas ejecutivos en Ecuador, orientados al apoyo de la gestión de empresas y las organizaciones del sector público. «Los graduados en Ecuador son miembros muy activos de la comunidad ‘incaísta’ en América Latina y han organizado varios encuentros internacionales que han atraído graduados de otros países de la región».

    En mayo pasado, el Banco del Pacífico concretó un acuerdo con este instituto centroamericano, para facilitar el acceso de más estudiantes ecuatorianos a sus programas de estudios de cuarto nivel o MBA, a través de la entrega de créditos educativos más flexibles.

    El instituto de altos estudios se halla en un proceso de revisión de sus programas de maestría. Uno de ellos, el Global Executive MBA, fue revisado en el 2009, y será impulsado en el 2015 para aprovechar las tecnologías virtuales de aprendizaje. Además, su programa de MBA que se imparte en el campus de Nicaragua fue revisado en marzo pasado con una estructura que busca la optimización del proceso de aprendizaje y el desarrollo de habilidades. «Incluye temas de relevancia particular para América Latina, como la necesidad de una responsabilidad empresarial comprometida con el desarrollo social de la región», explica su Rector.

    El Instituto también ofrece, desde hace 7 años, programas para líderes de gobierno, como el de Alta Dirección Pública, y otros dirigidos a profesionales de otras ramas.

    En Ecuador

    Desde 1974. Ese año se impartió el primer Programa de Alta Gerencia Andina, en la ciudad de Ibarra, Imbabura.

    Miembro activo. En 1984 Ecuador se convirtió en país integrante del Incae. Seis años después se estableció el Programa de Estudios y Entrenamiento Económico.