La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) echó atrás sus estimaciones de una ligera recuperación económica regional para este año al rebajar de 2,2% a 1% su proyección de crecimiento anual.
«La Cepal ha revisado a la baja la proyección del crecimiento económico de la región para 2015, estimando en 1% el aumento del producto interno bruto (PIB) regional», dijo este 7 de abril el organismo de las Naciones Unidas en un comunicado de prensa.
En diciembre, la Cepal había estimado para el promedio de las economías regionales una expansión de 2,2% en 2015, tras registrar en 2014 un débil crecimiento de 1,1%, el más bajo en cinco años, por una caída en las inversiones y el bajo desempeño de las principales economías regionales. «Esta revisión refleja un entorno global caracterizado por una dinámica económica menor a la esperada a fines de 2014», explica el organismo con sede en Santiago.
Con excepción de Estados Unidos, agrega, «las proyecciones de crecimiento han sido revisadas a la baja en los países industrializados, y las economías emergentes se siguen desacelerando». Al menor crecimiento de la economía mundial «se suma una mayor volatilidad financiera internacional producto de una política monetaria muy expansiva en Europa y Japón, al tiempo que se anticipa un alza en las tasas de interés en Estados Unidos». Eso sumado «al fin del llamado ‘superciclo’ del precio de los bienes primarios afecta negativamente a varios países de la región».
La subregión más afectada sería América del Sur, con una expansión proyectada cercana a cero, arrastrada por una caída en el valor de las materias primas, el motor de sus economías.
En Centroamérica y México la expansión alcanzaría a 3,2%, beneficiados por la recuperación de la economía estadounidense y la caída en el precio del crudo, mientras que en el Caribe el PIB llegaría al 1,9%.
Los países que liderarán la expansión regional durante 2015 serán Panamá, con un alza en el PIB de 6%, Antigua y Barbuda (5,4%) y Bolivia,Nicaragua y República Dominicana (5%).
Brasil, la economía más importante de la región, registrará una contracción de 0,9%, según la proyección de la Cepal. Argentina, por su parte, registraría una nula expansión de su PIB (0%), mientras que Perú y Paraguay se expandirían 4,2%, Colombia 3,6% y Chile y Uruguay 3%.
La economía venezolana anotaría en 2015 por su parte la caída más pronunciada de la región, con una contracción prevista de 3,5%.
La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), recomendó a Venezuela diversificar su matriz productiva. Foto referencial: EFE
Los 100 mil millones de aparatos que se estima que estarán conectados a internet en 2020 generarán «retos de enormes proporciones» a los proveedores mundiales del servicio, especialmente en América Latina, según cálculos del grupo francés de telecomunicaciones Alcatel Lucent y sus Laboratorios Bell.
«Son retos enormes que requieren las mejores soluciones«, explicó hoy en una entrevista con Efe Javier Eduardo Rey, vicepresidente de ventas para Latinoamérica de la consultora, quien consideró que las necesidades de las empresas en comunicación «crecen y el mercado no ha sido lo suficientemente ágil e innovador» para satisfacerlas.
Un escenario, que según las cifras de la multinacional, exigirá una demanda de video diez veces más rápida que la actual, así como servidores «robustos» que deberán albergar millones de datos de unos 7 000 millones usuarios en diferentes soportes, como teléfonos móviles y computadoras, principalmente, y el Internet de las Cosas.
Para lograr esas cifras de crecimiento, que superan con creces la cifra de la actual población mundial, los operadores deberán garantizar «estrategias confiables» que posibiliten superar los eventuales contratiempos, de acuerdo con la compañía.
Obstáculos que se alojan, según la multinacional, en los sistemas de telecomunicaciones de las empresas, que ocurrirán tras «la exigencia de los usuarios de una mayor conectividad y un acceso sencillo a su información sin importar su ubicación geográfica».
«Hay soluciones en el mercado, pero son soluciones creadas para ciertas necesidades que, cuando tienen que escalar y dar mayores soportes, se quedan cortas», añadió el representante del grupo francés, que brinda soluciones de conectividad a cientos de empresas en el mundo y se expande en América Latina.
Precisamente allí el impacto de las previsiones de crecimiento de conexión a internet se sentirán «con fuerza», debido a que, según el experto, el mercado latinoamericano ha sido «el que más ha crecido en términos de nuevos usuarios conectados en todo el mundo».
«Es la región que más crece en uso de redes sociales y de las que más están demandando soluciones, como las de vídeo que exigen aún más a las redes», explicó Rey, quien no descartó que del total de equipos conectados «un gran porcentaje estarán en Latinoamérica».
En esa línea, la consultora francesa fue enfática en asegurar que esas particularidades representan un desafío mayor para la región y recomendó «asegurar que las redes, la tecnología y las soluciones de comunicaciones sean lo suficientemente robustas, escalables y dinámicas para enfrentar» el crecimiento de las conexiones.
«Las empresas latinoamericanas no están preparadas y lo peor es que muchas creen estar preparadas y no lo están», sentenció Rey.
Uno de esos temas deficientes es precisamente los fallos en la seguridad de los datos de los usuarios latinoamericanos en internet, una posibilidad de la que «no están exentos» y que requiere «una mejor arquitectura de red para garantizar acceso a la información».
«Nuestra principal recomendación pasa por no subestimar el impacto, cada vez mayor, de la necesidad de sus empleados y clientes de tener acceso a la información y contenidos de forma remota con la misma calidad de servicio y experiencia que si estuvieran sentados en su oficina», añadió Rey.
Alcatel Lucent se refirió además al rol de los Gobiernos en la región y calificó su contribución como «fundamental», pues aumentar la conectividad y establecer el concepto de «ciudades inteligentes» «no solo requiere el soporte e impulso» estatal sino «incentivos fiscales y regulatorios» para que sea viable a largo plazo.
«Redes dinámicas, flexibles y escalables que faciliten las conexiones casi infinitas para los usuarios, y redes que estén virtualizadas para que sean fáciles de gestionar y administrar por parte de los operadores son la respuesta a los desafíos actuales», concluyó Rey.
Alcatel-Lucent, con sede en París, es una corporación nacida como resultado de la fusión de la francesa Alcatel y la estadounidense Lucent Technologies, que provee hardware, software y servicios para proveedores de servicios de telecomunicaciones y empresas.
Un parte que podría calificarse como inquietante fue el que recibieron el pasado 28 de marzo en Corea del Sur los ministros de Hacienda de América Latina y el Caribe que asistieron a la Asamblea anual del Banco Interamericano de Desarrollo. El mensaje está contenido en un documento técnico, elaborado por los economistas de la institución multilateral, que lleva el título de ‘El laberinto’.
Según la Real Academia, la palabra de origen griego describe un “’lugar formado artificiosamente por calles y encrucijadas, para confundir a quien se adentre en él, de modo que no pueda acertar con la salida”’. Tal parece que ese es el caso de las economías de la región, muchas de las cuales están experimentando problemas.
Un menor ritmo
El síntoma más notorio es la caída en la tasa de crecimiento. De acuerdo con el pronóstico del Fondo Monetario Internacional, el Producto Interno Bruto regional debería aumentar apenas en 1,3% este 2015, una cifra muy inferior al promedio mundial.
La desaceleración no es nueva. “Completamos cinco años en los que el desempeño del periodo actual, es peor que el visto en el inmediatamente anterior”, explica José Juan Ruiz, el economista jefe de la institución.
Si se miran las cosas con un lente más amplio, es fácil afirmar que el área retornó al pasado. El alza del PIB entre 2010 y 2015 sería del 3,1% en promedio, muy similar al 2,9% observado entre 1990 y 1999.
Y la situación no mejora. El BID pronostica que entre 2016 y 2019 el crecimiento sería de apenas 3% por año. En consecuencia, se ven lejanas las épocas de la bonanza sucedida entre 2003 y 2008 cuando el ritmo subió al 4,7% anual.
Las razones son conocidas. La caída en los precios de las materias primas que exportan sobre todo las naciones suramericanas ha sido profunda. Petróleo, cobre, soya o maíz se encuentran muy por debajo de sus máximos recientes y los modelos usados para hacer pronósticos no permiten vislumbrar una recuperación pronta.
Pocas opciones
Al mismo tiempo, la política monetaria que usan los países más ricos es divergente. Mientras todo apunta a una tasa de interés más alta en Estados Unidos, Europa se encuentra inundada de liquidez, por cuenta de la estrategia usada por el Banco Central Europeo. Eso ha impactado las tasas de cambio de las monedas nacionales, tanto frente al dólar como frente al euro.
Teniendo en cuenta que la deuda externa, sobre todo del sector privado, subió mucho en tiempos recientes, es posible que algunas firmas tengan dificultades para pagar sus acreencias. Y aunque en principio sería fácil emitir papeles en otra divisa y acudir al Viejo Continente, la experiencia sugiere que no es tan fácil salir del billete verde.
Sea como sea, los bancos centrales latinoamericanos tienen menos cartas en su mano para estimular las economías de la región. Apretar o aflojar los intereses no solo tiene implicaciones cambiarias, sino que la inflación se encuentra por encima de los objetivos fijados por las autoridades, en la mayoría de los casos.
Y si por aquí llueve, por el lado de la política fiscal no escampa. El superávit que llegó a existir en las cuentas públicas ha desaparecido y los saldos en rojo se hacen más evidentes.
Según el BID, entre 2007 y 2014 el gasto oficial en América Latina y el Caribe subió en el equivalente de 3,7 puntos del PIB. Lamentablemente, la mayor parte de ese incremento se fue en salarios y subsidios, mientras que al capítulo de la inversión apenas se destinaron 0,3 puntos porcentuales. Tal realidad hace que los recortes sean difíciles de hacer.
Más de lo mismo
No obstante, hay que poner la casa en orden. Dependiendo de la realidad de cada país, el Banco sugiere recortes o conseguir más ingresos, a través de una mejor administración tributaria.
Pero quizás la mejor opción es la de “hacer más con lo mismo”, según las palabras del presidente de la entidad, Luis Alberto Moreno. Aunque la afirmación pueda parecer un contrasentido, hay un gran espacio para mejorar la eficiencia del gasto social.
En el documento que fue entregado a los ministros se observa que tanto en salud como en educación, al igual que en estrategias de lucha contra la pobreza, hay desperdicios. Un ejemplo es que hay subsidios para familias que no los merecen o prácticas que estimulan la informalidad.
Y adicionalmente, están pendientes las mejoras en productividad, que tienen su propia lista de recetas. La calidad de la educación, el acceso al crédito, los cuellos de botella en la infraestructura, todos forman parte de los elementos que le cuestan al crecimiento regional un par de puntos porcentuales al año.
La pregunta, entonces, es si hay voluntad de hacer las tareas pendientes. Y aunque ninguna es fácil, el mensaje que se escuchó en Corea del Sur es que si las naciones latinoamericanas se quedan con los brazos cruzados, les va a ser muy difícil salir del laberinto.
Al otro lado del Pacífico
Una posibilidad que tienen las naciones latinoamericanas para mejorar su desempeño económico es mirar más hacia el Asia, sostuvo en la noche del pasado 28 de marzo en Busán el presidente del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Luis Alberto Moreno.
Durante la sesión inaugural de la Asamblea de la entidad, el exministro colombiano abogó por »una relación más equilibrada en lo comercial, basada en el largo plazo y en la construcción de lazos perdurables».
En su intervención, el funcionario internacional reconoció el peso creciente del continente más populoso del mundo en la región. Señaló que las exportaciones hacia los mercados asiáticos pasaron del 5 al 19% del total entre 2000 y 2012, mientras que las importaciones evolucionaron del 11 al 27%.
El comercio bilateral es el segundo más importante, después del de Estados Unidos y ya superó al que se tiene con la Unión Europea.
No obstante, hay que hacer más para vender bienes latinoamericanos con mayor valor agregado.
En ese propósito se destacó el ejemplo de Corea, que hace algo más de medio siglo tuvo un punto de partida similar al de la mayoría de naciones de la región y que hoy tiene un ingreso por habitante que casi triplica el América Latina.
Nada de eso será posible, afirmó Moreno, si el acertijo de la productividad no se resuelve. Desde la educación hasta la infraestructura se encuentran en la lista de tareas pendientes.
Por otra parte, el presidente del Banco destacó el papel del sector privado, con el cual el BID quiere trabajar más de cerca. »La ecuación no está completa si olvidamos (ese) liderazgo», afirmó.
Dependiendo de las aprobaciones que consiga, la institución debería aumentar el volumen de créditos en América Latina y el Caribe. En el 2014 financió 168 proyectos por un valor superior a los USD 13 800 millones.
Alianza para nueva línea de financiamiento
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Gobierno de Corea expandieron su actual y efectiva asociación con el establecimiento de una nueva línea de crédito de USD 100 millones.
El presidente del BID Luis Alberto Moreno y el viceprimer ministro y ministro de estrategia y finanzas de Corea, Choi Kyung Hwan, pusieron en marcha el Mecanismo de Cofinanciamiento para el Desarrollo de Infraestructura de Corea para América Latina y el Caribe.
Se espera que esa nueva línea de financiamiento, que tendrá un fondo inicial de USD 100 millones, sirva de plataforma principal de cofinanciamiento entre el BID y Corea, permitiendo a los socios financiar proyectos en una variedad de sectores para contribuir al desarrollo de la región.
El BID pronostica que entre 2016 y 2019 el crecimiento será de 3% Anual. Por ende, se alejan las épocas de la bonanza, entre 2003 y 2008, cuando el ritmo subió al 4,7% anual. Foto: Marcelo sayao/ EFE
«América Latina no supo aprovechar el boom económico» de los últimos años, debido a la falta de reformas estructurales, dijo ho, 24 de marzo, en Chile el director de la división de desarrollo productivo y empresarial de la CEPAL, Mario Cimoli.
Cimoli intervino en el seminario en el que se presentó el informe «Perspectivas económicas de América Latina 2015», realizado por el Centro de Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en colaboración con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y el banco CAF.
«Un proceso de este tipo necesita que existan unas precondiciones y América Latina no las tenía», señaló Cimoli, quien desgranó algunas de las recomendaciones que recoge el informe, que analiza sectores estratégicos como el fiscal, el educativo o el productivo.
La educación, una de las claves para dinamizar la economía de América Latina y avanzar hacia un crecimiento inclusivo, es uno de los deberes pendientes.
Según el informe, el 35% de los niños en edad para asistir a la pre-primaria no están matriculados, el doble que en la OCDE.
Asimismo, de acuerdo a las pruebas PISA, en educación secundaria la diferencia entre el desempeño de los estudiantes de la región y los de los países de la OCDE equivale a casi dos años de escolaridad, una cifras que empeoran en la educación terciaria.
Para Cimoli, la «necesaria reforma educativa, que países como Chile ya están llevando a cabo» debe ir de la mano de una transformación de la estructura productiva, que haga un especial énfasis en la diversificación productiva y en la competitividad.
«Todo lo que se haga en educación puede ser muy bueno pero si no diversificamos la estructura productiva y no fomentamos la pequeñas y medianas empresas tendremos latinoamericanos muy bien educados pero conduciendo un taxi», afirmó.
Ello, debe complementarse con avances en el área de la innovación, un sector que, según el informe, cuenta en la región con un stock de capital del 13 % del PIB, mientras que en los países de la OCDE es del 30%.
Según el análisis, estos datos se explican, en parte, por el bajo nivel de gasto en investigación y desarrollo, en especial por la limitada participación de las empresas.
La presentación del informe reunió en Santiago al director del centro de desarrollo de la OCDE, Mario Pezzini, al economista Pablo Sanguinetti, director corporativo de investigaciones socioeconómias del Banco CAF y al canciller chileno, Heraldo Muñoz.
Pezzini hizo referencia a la «mejora de la política fiscal» como herramienta para favorecer la reducción de las desigualdades.
«Cuando existía una bonanza económica se podía pensar en utilizar la renta para intervenir en la economía, ahora esta posibilidad se reduce, motivo por el cual es más urgente que se implementen reformas fiscales», afirmó.
De ahí que, tal y como indica el informe de la organización intergubernamental, sea necesario seguir fortaleciendo políticas macroeconómicas que reconstruyan la capacidad de respuesta monetaria y fiscal y pongan el acento en la prevención de la evasión y elusión fiscal, así como en el ámbito tributario.
Según el economista Pablo Sanguinetti, el conjunto de estas reformas podría revertir la desaceleración económica de la región, que hasta el momento sólo se ha limitado a dejarse llevar por los «vientos favorables».
«Ha llegado el momento de remar para crear», indicó Sanguinetti quien recordó que el crecimiento de los últimos años fue motivado por factores exógenos a la región.
El desafío de esta «segunda generación de reformas estructurales» es, según el representante del banco de desarrollo CAF, «volver a crecer a un ritmo del 4 % anual», pero esta vez, «hacerlo por mérito propio» y prescindiendo de los vientos de cola que hicieron despegar América Latina en la última década.
Un diagnóstico compartido por el jefe de la diplomacia chilena, Heraldo Muñoz, quien reafirmó «la necesidad» de implementar estas reformas para posibilitar la salida de la denominada «trampa del ingreso medio», según la cual los países permanecen estancados en el rango de niveles de renta media, y «posicionar mejor a América Latina dentro del mundo».
Se trata de un procedimiento simplificado de devolución condicionada de impuestos al comercio exterior; es decir, de aranceles y cargas tributarias para los exportadores. Foto: Joffre Flores/ El Comercio
La producción editorial latinoamericana, medida por el número de títulos con registro ISBN, fue en el primer semestre de 2014 un 4,8 % menor a la de igual periodo de 2013, con una participación en ascenso del libro digital, según el Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe.
En el último boletín «El libro en cifras», ese organismo dependiente de la Unesco y con sede en Bogotá reseña que de enero a junio de 2014 se registraron 83 162 títulos con ISBN (Número Internacional Normalizado del Libro) en América Latina, de los cuales 16.933 fueron editados en formato digital.
Esos libros digitales significan un 20,4 % del total y el porcentaje va en aumento, según el CERLALC, que no menciona cuál fue el porcentaje en el primer semestre de 2013.
En seis de los 19 países que comprende el estudio el libro digital supera el 20 % del total: México, Panamá, Costa Rica, Colombia, Honduras y Brasil.
Ocho se encuentran en el rango de 10 % a 20 % y solamente en cinco la participación se sitúa por debajo del 10 %.
Tras advertir de que por segundo año se registra una variación negativa en los títulos con ISBN en el primer semestre, el CERLALC señala que hay que tener en cuenta que siempre la actividad es mayor en el segundo, cuando suele haber un repunte, y que la disminución no fue generalizada.
De los 19 países de los que hay datos, en trece hubo crecimientos en el número de títulos registrados.
Brasil, que es el país con mayor número de títulos registrados en el primer semestre, es también el que más contribuyó a la caída de la cifra regional, seguido por Perú y Paraguay. Los 34 163 títulos brasileños significan el 41 % del total registrado por los 19 países, cuatro puntos menos que en igual periodo de 2013.
Con 13.535 títulos reportados, Argentina, por el contrario, gana espacio en el segundo lugar (16,3 %), seguido por México (16,1 %) y Colombia (8,3 %), con 13.371 y 6.899 títulos respectivamente.
Otros países con crecimientos destacados en el primer semestre de 2014 son Guatemala, El Salvador, República Dominicana, Panamá y Costa Rica, señala el boletín.
El país que menos títulos con ISBN reportó en el primer semestre de 2014 fue Venezuela, con 1 550.
El estudio revela también que la aportación de los editores comerciales al número total de títulos bajo seis puntos con relación al primer semestre de 2013, de 60 a 54 %, y por el contrario subieron las contribuciones de organizaciones no gubernamentales y autores-editores, que supusieron un 21 % y un 12 % del total, respectivamente.
El taller de diseño puede estar en Los Ángeles o México y los negocios hacerse en Nueva York o Miami, pero París sigue siendo la vitrina ideal para mostrar la moda al mundo, según creadores y expertos presentes en la semana de la moda de la capital francesa.
“Los diseñadores eligen París, sigue siendo el sueño de todo diseñador”, explicó a la AFP el creador chileno Octavio Pizarro, que tiene un estudio creativo en Santiago pero conserva su base en París. “Probablemente no sea donde los negocios se hacen, pero es donde se muestra. París te da algo intangible: te perfecciona el gusto, que es sofisticado y preciso como un alfiler”.
Pizarro vende sus modelos en Estados Unidos, Gran Bretaña, Alemania o República dominicana o a clientas de alta costura en Chile. Este año presentó en privado una colección de moda femenina otoño-invierno que contrasta con las anteriores. “Mi mujer era muy estructurada y la quise despeinar un poco sin que pierda el chic”.
Según Pizarro, América latina “es un continente que tuvo una evolución importantísima en estos últimos 7 u 8 años, en todo lo que es la moda, el gusto de las mujeres y el interés que tiene por la moda internacional”.
“Latinoamérica es un nuevo mercado y las grandes marcas de lujo están mirando hacia ella porque hay países que están muy bien económicamente y Europa está difícil. Tenemos raíces europeas y entonces los gustos son un poco los mismos”.
Apostando a esa evolución, la revista Harper’s Bazaar en español organizó esta semana en la embajada de México en París un evento que reunió a la flor y nada de la creación regional, con diseñadores de México, Colombia, Chile, Argentina y Venezuela.
Entre las invitadas figuraban entre otras las mexicanas Daniela Villegas (joyas), Gladys Tamez Millinery, radicada en Los Ángeles donde crea sombreros, o Sara Beltrán, que diseña joyas y comparte su tiempo entre Nueva York y Jaipur, en la India.
“En Paris nació la moda, la semana de la moda de París es la más prestigiosa del mundo, y no hay mejor lugar para darle cabida a los diseñadores latinoamericanos”, explicó a la AFP Brenda Díaz de la Vega, directora editorial de Harper’s Bazaar en español, con base en Ciudad de México, donde también se editan otros referentes de la moda, como la versión latinoamericana de Vogue o Elle México.
Diseñar en California, desfilar en París
Según de la Vega, “los diseñadores de América latina pueden llegar tanto o mas lejos que los de Estados Unidos o Francia, ya no existe esa barrera de que son de América latina y no tienen esa posibilidad: ellos están demostrando que se puede”. “Y lo estamos viendo en cine y en gastronomía. En esas tres áreas, la influencia de América latina empieza a relucir en todo el mundo”.
Además del gigante Sao Paulo en Brasil, explica la editora, los otros grandes polos de la moda en América latina, son Colombia, México y Venezuela, mientras que en materia comercial los mayores sustentos a la industria están en Panamá, Colombia, Perú y México.
El colombiano Juan Carlos Obando tiene su taller de creación en Los Ángeles, pero decidió presentar su colección en París al margen del programa oficial de la Semana de la Moda, donde el único latinoamericano este año es su compatriota Esteban Cortázar.
La idea de crear en Los Ángeles y presentar en la ciudad luz tiene un antecedente de peso: el propio Hedi Slimane, director artístico de la legendaria casa Saint Laurent lo hace desde 2012.
“Antes desfilaba en Nueva York, es la primera vez que presento mi colección en París”, dice Obando, “lo cual es un paso grande en mi carrera”. “Hace un par de años, participamos en un programa de Vogue que se llama ‘Americans in Paris’ e hicimos muchos proyectos aquí: nuestro negocio creció muchísimo gracias a París”. “ Pensamos que era importante construir una parte editorial por encima de la colección en sí y del mercado, vamos a ver qué pasa”, comenta el colombiano, que define como “despreocupada” su moda: “una manera relajada de vestirse de noche sin perder la elegancia”.
La latina, con personalidad y dinero
¿Qué define a la mujer latinoamericana? Según Obando “es un constante baile entre lo seductor y lo sofisticado. No le gustan tanto los brillantes ni las plumas, es muy sencilla, pero sexy”.
«La moda en América latina esta creciendo”, señala. “Es genial ver a la nueva generación que está saliendo y que tiene una voz y una identidad mucho más propia, una generación que ha crecido en un mundo globalizado y tiene una cabeza mucho más global”.
Una opinión que comparte el mexicano José Sánchez, que lleva 33 años en la moda. Se especializa en ropa de cuero diseñada en la capital mexicana, fabricada en Tijuana y salida comercial en México, Brasil y Estados Unidos.
“La mujer mexicana está queriendo descubrir al mundo”, comenta Sánchez. “ Pero no solo consume marcas italianas o francesas, sino que está pidiendo moda mexicana. El producto mexicano puede competir con cualquier otra marca del mundo”.
El chileno Octavio Pizarro apuntala esa visión de la clienta latina. “En cultura de moda –asegura–, son más que muchas europeas: saben perfectamente qué es lo que se usa, viajan mucho y tienen gran poder adquisitivo. En Chile hay mujeres sofisticadas, únicas y con personalidad, lo que yo llamaría la personalidad latina”.
El colombiano Esteban Cortázar fue el único latinoamericano que presentó su colección en la Semana de la Moda de París 2015. Foto: AFP
En los últimos veinticinco años la deuda pública externa de América Latina y el Caribe percibió una reducción «notable», pues a comienzos de los año 90 representaba poco más del 70 % del PIB mientras que en 2014 era un 16 %, 54 puntos porcentuales menos, reveló hoy, 9 de marzo, un informe de la Cepal.
Un estudio de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) titulado «Panorama Fiscal de América Latina y el Caribe 2015. Dilemas y espacios» señaló que los niveles de endeudamiento «son muy distintos entre países».
Brasil encabeza la lista con la deuda pública más elevada de América Latina (63,5 % del PIB en 2014), aunque en términos de deuda neta el monto es muy inferior (37 %), seguido por Uruguay, Colombia, Argentina, El Salvador, Costa Rica Honduras o México, con niveles de endeudamiento moderado (entre 36 % y 44 % del PIB).
En el otro extremo, con niveles inferiores a 22 % del PIB se encuentran Chile, Perú y Paraguay.
En el informe, el Organismo de las Naciones Unidas destacó que la carga tributaria aumentó cinco puntos del PIB entre 2000-2013 en la región, con una estructura de impuestos regresiva. Motivo por el cual la incidencia de la política fiscal sobre la distribución del ingreso es «poco significativa».
De ahí que la Cepal urja a continuar promoviendo acciones dirigidas a «combatir la evasión y la elusión fiscal, reducir los tratamientos preferenciales y, en general, fortalecer la tributación sobre las rentas de capital».
La caída de los precios de los productos básicos es otro de los temas a los que hace referencia el informe. El descenso del coste implica «una reducción de las rentas provenientes de los recursos naturales no renovables, lo cual debilita las finanzas públicas de los países exportadores», señala.
Las principales conclusiones del documento serán presentadas este martes durante la primera sesión del XXVII Seminario Regional de Política Fiscal, que será inaugurado por la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena, y el ministro de Hacienda chileno, Alberto Arenas.
La reunión es organizada por la Cepal con el copatrocinio del Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial, el Banco Interamenricano de Desarrollo (BID) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
El evento cuenta con el auspicio de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), gracias al programa conjunto CEPAL/AECID «Renovación del Pacto Fiscal en América Latina y el Caribe.
La fuerte apreciación del dólar y la prolongada caída del euro han generado un terremoto en el sector turístico que amenaza con provocar pérdidas millonarias a tourperadores y mayoristas que trabajan en América Latina, dijeron a Efe expertos del sector privado y responsables públicos.
Las oscilaciones cambiarias de los últimos meses se han convertido en un tema candente de la ITB, la mayor feria de turismo del mundo, que desde el martes y hasta hoy, domingo 8 de marzo, reúne en Berlín a 10 000 expositores de 186 países y a más de 100.000 visitantes profesionales.
Además señalaron a Efe que están convencidos de que la debilidad del euro lastrará al turismo del viejo continente a América Latina en el medio plazo, y no antes, ya que los paquetes se negocian con mucha antelación.
Algunos, principalmente cargos públicos, confían en que la caída paralela de muchas monedas locales, como el real brasileño, el sol peruano y los pesos argentino y colombiano, amortig e la depreciación del euro y no retraiga el turismo europeo.
Diana Spehn, directora general para Perú de South American Tours, mayorista dedicado al turismo europeo y norteamericano en América Latina, reconoció que «por supuesto que es un tema» de preocupación y que sus efectos se van a notar «especialmente a partir del año que viene».
Además, apuntó, el turismo estadounidense en América Latina va a tener un buen comportamiento este año, pero más animado por el dinamismo de la primera economía global que por la fortaleza relativa de su moneda.
«El tipo de cambio no es un tema en Estados Unidos, pero es el tema de conversación en la ITB», destacó Sephn.
Robert Werner, asesor turístico de la agencia Ruppert para Sudamérica, coincidió en que el turismo europeo a la región «va a bajar definitivamente» a causa del tipo de cambio, pero no de forma inmediata, sino en el futuro.
Esto va a tener drásticas consecuencias para los operadores, estimó Werner, que dudó de que «muchos especialistas chiquitos» puedan «sobrevivir» en este nuevo contexto.
Para el ministro brasileño de Turismo, Vinicius Lages, la depreciación del real, que alcanzó el nivel más bajo de los últimos diez años y se comercializa a tres unidades por dólar, es favorable para la llegada de turistas extranjeros.
«Crea condiciones en términos de competitividad y precios», expresó.
La ministra ecuatoriana de Turismo, Sandra Naranjo, indicó que la caída de las monedas de Brasil y Argentina empezará a sentirse este año en la industria turística de su país, que ya sufrió en 2014 los efectos de las devaluaciones en Perú y Colombia, dos mercados tradicionales.
«Gran parte del turismo de Perú y Colombia es fronterizo, y esos son los primeros viajes que se recortan», explicó Naranjo.
Por su parte, la gerente de mercados globales de la agencia gubernamental Turismo Chile, Debbie Feldman, admitió que la cotización del dólar «siempre afecta» al turismo hacia Latinoamérica.
Señaló además que un dólar alto podría mermar la afluencia de turistas a su país, sobre todo brasileños, a raíz de la rápida depreciación del real durante los últimos meses.
Representantes de Venezuela, otro de los países con turbulencias cambiarias, declinaron hacer comentarios a Efe, mientras que desde el Instituto de Promoción Turística (INPROTUR) de Argentina, Sebastián Pérez opinó que, pese a la caída del euro, el tipo de cambio aún resulta «favorable» para los turistas europeos que viajan a su país, en referencia a la fuerte caída del propio peso.
Aunque subrayó la «necesidad» de que los visitantes cambien sus divisas «a cambio oficial» en los bancos y entidades autorizadas por el gobierno argentino, a diferencia del mercado «blue» donde las divisas extranjeras se cotizan a un nivel superior.
Thomas Borausky, representante en Alemania de Tangol, una agencia especializada en rutas por Argentina, explicó que estas oscilaciones en el tipo de cambio pueden retraer al turista europeo, pero pueden suponer un aliciente para el viajero estadounidense. «Es difícil estimar el efecto agregado total», indicó.
La ITB de Berlín comenzó el pasado miércoles con 10 096 expositores, repartidos en unos 160 000 metros cuadrados, y hoy cierra sus puertas esta 49 edición de la principal feria internacional del sector.
La mayor Feria Internacional del Turismo inició el pasado 4 de marzo en Berlín, Alemania. Foto: AFP
La gigante brasileña de la construcción Odebrecht considera que es un buen momento para invertir en América Latina, pese a la desaceleración económica en la región, y mira con interés a Perú, Colombia, México, Panamá y Cuba.
Jorge Barata, director ejecutivo de Odebrecht Latinvest – brazo de inversiones en infraestructura del conglomerado empresarial en el resto de América Latina- dijo que el mal momento para el precio de las materias primas no deber ser un obstáculo ni desanimar a quienes tienen inversiones de largo aliento.
«No porque el precio del petróleo, del gas o del mineral está bajo, vamos a dejar de participar en una inversión que tiene una visión de 20 años. Tenemos que ver el (plazo) histórico y, usando medias históricas, tomar la decisión de inversión», dijo Barata, quien tiene su base de operaciones en Lima.
«Nuestra percepción es que justamente en estos momentos (de desaceleración) es cuando el país más necesita de inversión (…) Cuando se invierte en una situación de necesidad, que ayuda al país a salir de un momento bajo, se le da importancia al proyecto. Dicen, hay que impulsarlo porque seguro le da 1 punto más al PIB. Eres escuchado, ayudado, todos los organismos se interesan», comentó.
Perú, Colombia, México, Panamá y Cuba
«Es un buen momento (para invertir), no me cabe duda, y en Perú principalmente. Hay un sólido modelo de concesiones que va madurando», explicó, Barata.
En Perú tienen 14 proyectos, entre concesiones y obras. «Después de Perú es Colombia, que está logrando conseguir el control de la seguridad. Eso genera tranquilidad para que las empresas comiencen a invertir. Antiguamente era peligroso andar en carretera y preferían viajar en avión, y ahora hay 25 licitaciones de carreteras allá», explicó.
En la lista también está México, y Panamá «con crecimiento grande en los próximos años». En Cuba, Odebrecht estuvo a cargo de la construcción del puerto de Mariel, y ahora trabaja en la remodelación del aeropuerto de Cuba y en la modernización de haciendas azucareras.
«Brasil vio que Cuba tiene un potencial. Ahora, con esta anunciada apertura de Estados Unidos, eso va a dar una velocidad impresionante», explicó, y agregó que están mirando con atención proyectos relacionados con la minería, aunque no entregó detalles. «Es un país que ha estado por muchos años parado. Con esta apertura se puede generar mucho crecimiento», sostuvo.
Emisiones de deuda
Odebrecht, que en Perú lleva adelante la construcción del gasoducto sur peruano, prepara una emisión de deuda para financiar la última etapa de la obra, por unos USD 4 100 millones de dólares, que debería concretarse para junio de 2015, a siete años plazo, y en donde 14 de 15 bancos extranjeros ya tienen comprometida su participación.
«Estamos optimistas que esto va a ocurrir en las condiciones que pretendemos y servirá para cerrar el gasoducto». Luego de que la obra esté en operaciones, se hará una nueva emisión de largo plazo, a 25 años, para captar también USD 4 100 millones, pagar la deuda previa y operar con tranquilidad, explicó el ejecutivo.
Barata reiteró que de este gasoducto, que recorrerá 1 134 kilómetros desde el yacimiento de Camisea en la selva peruana hasta la provincia costeña de Ilo, esperan concluir el primer y segundo tramo en diciembre de 2016 y operar comercialmente en marzo del 2017. El último tramo, en tanto, se culminará en diciembre de 2017 y estará en operaciones en marzo de 2018
Trabajadores de Odebrecht en la Hidroeléctrica Pisayambo, en Ecuador. Foto: Glenda Giacometti/ El Comercio
El clima para los negocios en América Latina cayó en enero a su peor nivel desde comienzos de 2009, informó este 12 de febrero el centro privado de estudios económicos Fundación Getulio Vargas (FGV) de Brasil.
El llamado Índice de Clima Económico (ICE) de América Latina cayó desde 80 puntos en octubre del año pasado hasta 75 en el primer mes de este año, según el sondeo realizado trimestralmente por la FGV en asociación con el Instituto de Estudios Económicos de la Universidad de Múnich entre 1.071 especialistas de 117 países.
El ambiente para los negocios, el peor en seis años, viene cayendo gradualmente en la región desde los 95 puntos que registró en enero de 2014 y se ubicó en enero 26 puntos por debajo del promedio de los últimos diez años (101 puntos). Según la Fundación, el empeoramiento del clima para los negocios se produjo tanto por la caída del Índice de Situación Actual (ISA), que refleja el análisis coyuntural de los analistas, como por la caída del Indicador de Expectativas (IE), que evalúa las previsiones de los mismos para los próximos seis meses.
El Índice de Situación Actual para la región cayó desde 88 puntos en enero de 2014 hasta 64 puntos en octubre del año pasado y hasta 58 puntos en el primer mes de 2015. El Indicador de Expectativas bajó a un menor ritmo, desde 102 puntos en enero de 2014 hasta 96 puntos en octubre y hasta 92 puntos el mes pasado. «Todos los indicadores se encuentran en la zona desfavorable del ciclo económico y ese empeoramiento generalizado muestra un avance en el deterioro del clima económico», según la Fundación.
La caída del clima de negocios en América Latina contrastó con la ligera mejoría del mismo en el mundo en general, desde 105 puntos en octubre hasta 106 puntos en enero, impulsado por un mejor ambiente tanto en Estados Unidos como en la Unión Europea, en donde el índice saltó desde 104 puntos hasta 113 puntos en tres meses, y en Japón. Los autores del estudio atribuyen la caída del índice en América Latina principalmente al empeoramiento de la evaluación de Bolivia, Colombia, Ecuador y México.
El clima para negocios en Bolivia bajó desde 124 puntos en octubre hasta 110 puntos en enero, el de Colombia desde 117 hasta 90, el de Ecuador desde 84 hasta 80 y el de México desde 97 hasta 84. «En los tres primeros países el empeoramiento puede estar asociado principalmente a la caída de los precios de los hidrocarburos», según el informe.
En la imagen la Bolsa de Valores de Buenos Aires. La economía de la región mostró un decrecimiento en los últimos seis años. Foto referencial: EFE