Tengo una casa en Atlanta y mi ropa está allí. Pero vivo en un avión”. La frase le pertenece a Francisco Crespo, un ejecutivo ecuatoriano que desde hace un año y medio, cuando asumió un nuevo cargo, ha visitado 42 ciudades en cerca de 25 países.
Este quiteño lleva 29 años trabajando para la misma empresa, con diferentes cargos en países como Ecuador, Perú, Chile, Argentina, México y EE.UU. Hoy es el Vicepresidente Mundial y Director de Crecimiento de Coca-Cola, la multinacional del sector de refrescos que tiene su base de operaciones en Atlanta (EE.UU.).
En el cargo actual es el líder de los equipos integrados de mercadotecnia global, estrategia corporativa y liderazgo comercial y de clientes de la firma.
Estas casi tres décadas han sido una experiencia que ha marcado la vida de este esposo y padre de tres hijas. Ingeniero Industrial, graduado de la Universidad de Los Andes (Colombia), Crespo se ha especializado en finanzas, marketing, liderazgo a través de programas en prestigiosas universidades e instituciones en todo el mundo, incluido el Programa de administración general de la Escuela de Negocios de Harvard.
Al repasar su trayectoria Crespo toma aire para recordar sus cargos en los países mencionados. En Perú, por ejemplo, fue director de marketing y operaciones. En Argentina tuvo funciones similares, pero también se encargó de la dirección de una embotelladora. Su primera gerencia general la asumió en Chile. Y en Brasil fue Vicepresidente de Operaciones. Crespo reconoce que en algún momento pudo estar pensando demasiado en sus logros profesionales. “He estado obsesionado con nuevos ascensos y eso es una equivocación porque uno deja de vivir el día a día, deja de ver el paisaje”, cuenta durante una entrevista concedida en un hotel de Quito, luego de una extensa jornada de reuniones con más ejecutivos de Coca-Cola, hace dos semanas.
Siempre de traje y corbata, este ecuatoriano que fue seleccionado nacional de natación recuerda que antes de llegar hasta Atlanta estuvo en México, como Presidente de la Unidad de Negocios de Coca-Cola en ese país. Allí lideró las operaciones de la compañía y fue responsable de la coordinación de un plan de inversión de USD 8 200 millones por siete años con embotelladores locales de Coca-Cola, según un comunicado facilitado por la empresa.
En México Crespo vivió una experiencia clave en su carrera profesional. Fue uno de los responsables de lanzar al mercado un producto que no tuvo la acogida esperada. Se trató de Coca-Cola Life. “Fue una idea con espíritu noble, pero al implementarla fallamos. El problema fue que resultó complejo que el consumidor entienda el producto”.
Tras esa experiencia salió fortalecido. “Uno debe estar consciente de que no es infalible. Uno se va a equivocar muchas veces y equivocarse es legítimo en la medida en la que se aprenda de esa equivocación. Ese aprendizaje se vuelve experiencia, conocimiento y luego valor”.
Roberto Mercadé es presidente de la División Latín Centro de la Compañía Coca-Cola y conoce a Crespo desde hace 16 años. “Francisco manejaba Chile y yo estaba recién llegado a Centroamérica. Desde esa fecha mostraba grandes habilidades ganando una simulación de negocios en el que participamos en el IAE Business School de Buenos Aires”.
A Crespo lo describe como un ejecutivo brillante, capaz de conectar la visión a la estrategia y a la táctica. “Tiene una habilidad de ver mas allá que la mayoría de nosotros y conecta los puntos con gran facilidad”. Mercadé añade que el ecuatoriano es muy curioso, absorbe información y la aplica a nuestro negocio como nadie. Es un líder disciplinado al cual todos queremos escuchar”.
Muhammad Abdullah, gerente General de Coca-Cola de Ecuador, trabajó con Crespo en México. Dice que entre sus virtudes están el pensamiento estratégico y la disciplina. “Además tiene el foco en las palancas de crecimiento más importantes. También tiene apertura a la innovación. Es un verdadero activo para nuestra empresa. Lidera con el ejemplo”.
Cuando no está viajando por el mundo, el día de este ejecutivo empieza a las 05:30. Enseguida se dirige a un centro privado donde nada 45 minutos. Regresa a su casa, desayuna junto a su esposa y a las 08:00 ya se encuentra en la oficina, donde responde correos electrónicos, asiste a reuniones y planifica con su equipo de 11 peronas que le reportan directamente. Trata de salir temprano, a las 19:00.
No se anima a pronosticar sus próximos pasos profesionales. “Es difícil pensar en el futuro y prefiero disfrutar el presente”.
Francisco Crespo Benítez viaja por el mundo y asiste con frecuencia a reuniones de negocios de Coca-Cola. Conferencias y lanzamiento de productos son parte de su agenda. Fotos: Galo Paguay / LÍDERES y Archivo Particular
Basta revisar las tiendas de aplicaciones móviles en el ‘smartphone’ para encontrar una oferta extensa. Tan extensa que no tiene la demanda esperada.
De hecho existen informes que hablan de un estancamiento de esta industria que despegó de la mano de los teléfonos inteligentes, en especial a partir del 2008 cuando Apple presentó su primera tienda de aplicaciones.
Un estudio de Flurry Analytics trae noticias al respecto y señala que el año pasado la industria de las ‘apps’ móviles tuvo un decrecimiento. En el 2017 el negocio creció 6%, cinco puntos menos que lo registrado en el 2016, cuando creció 11%. “Los usuarios ahora pasan más de cinco horas al día en sus teléfonos inteligentes, y utilizan ese tiempo entre experiencias de aplicaciones nuevas y viejas”.
El mismo informe, que se encuentra en línea, asegura que mientras el crecimiento de las aplicaciones se ha estancado, las personas diversifican su comportamiento cuando utilizan ‘apps’ en su teléfono móvil.
El principal uso es compras en línea. Esta categoría creció un 54% ya que los consumidores continúan visitando portales de comercio electrónico en las pantallas de sus equipos. “Los usuarios cada vez se sienten más cómodos comprando en el teléfono”, dice Flurry Analytics.
A las compras le sigue la categoría de Música, medios y entretenimiento, que creció 43% el año pasado, lo que reafirma el cambio de los usuarios a dispositivos móviles para consumir medios.
Para obtener estos y otros resultados sobre la industria de las ‘apps’, el estudio mencionado rastreó el año pasado un millón de aplicaciones en 2 600 millones de dispositivos a escala global.
En Ecuador, la industria de las aplicaciones está en desarrollo y ya se encuentra software local en sectores como comercio electrónico, transporte, banca y finanzas, mensajería, entre otros. Si bien no existen datos oficiales de cuántas ‘apps’ se han desarrollado en el país y cuántas personas las utilizan, sí se encuentran datos sobre las aplicaciones más descargadas.
Los servicios de mensajería y comunicación ocupan los primeros puestos, tanto para teléfonos con sistema Android, como iOS. WhatsApp, Messenger y Facebook lideraron el año pasado las descargas en los dos sistemas operativos, según un artículo publicado en el blog Formación Gerencial. Luego aparecen Instagram, Spotify, Snapchat, OLX, Youtube y otras, en distinto orden según la plataforma utilizada. En esta suerte de ‘top ten’ no aparecen aplicaciones desarrolladas en Ecuador.
Allí se evidencia lo competitivo que puede llegar a ser esta industria tecnológica, en la que no hay fronteras, según fuentes consultadas por LÍDERES.
Para Carmen de la Cerda, de la incubadora y coworking Buen Trip Hub, la descarga de aplicaciones es un tema que cada día se lo piensa más. Para explicarlo usa una metáfora que aprendió en una maestría en medios digitales: “La pantalla de un teléfono móvil es como un terreno y cada aplicación que se descarga es un nuevo lote. Hay que preguntarse cuánto terreno (memoria, uso y costos) se puede ceder. Es como un tema de bienes raíces”.
Para De la Cerda, cada ‘app’ es un centímetro cuadrado que se pone en uso en un dispositivo móvil y, tal como en un terreno real, el reto está en aprovecharlo de la mejor manera.
Otro aporte lo realiza Lauren Kressler, gerente de Focus, una empresa de investigación de mercado. Para esta investigadora es necesario tener claro que si bien en Ecuador crece el uso de teléfonos inteligentes (hasta el 2016 el 53% de teléfonos activados en el país eran ‘smartphones’), no necesariamente estos equipos son de alta gama y de gran capacidad de memoria.
“Eso supone que hay que priorizar las fotos del hijo, archivos del trabajo o la aplicación que se usa cada mes o dos meses. Cuando la memoria disminuye, por lo general la persona decide borrar una aplicación de su teléfono”.
Según Kressler, puede haber ‘apps’ con muchas descargas, pero de bajo uso. Allí se evidencia el hábito que tiene o no una persona para utilizar una aplicación. El reto, insiste, está en aprovechar los equipos y las aplicaciones.
Cerca de 140 países garantizan en sus constituciones la igualdad entre hombres y mujeres. Pero otros, cerca de 40, aún no contraen este importante compromiso, según datos de la ONU.
El organismo añade que las desigualdades a las que se enfrentan las niñas puedan empezar en el momento de su nacimiento y perseguirles durante toda su vida. En algunos países, las niñas se ven privadas de acceso a asistencia sanitaria o a una nutrición adecuada, lo que conlleva una mayor tasa de mortalidad.
A medida que las niñas entran en la adolescencia, las disparidades entre los géneros se incrementan. El matrimonio infantil afecta a las niñas mucho más que a los niños y la ONU tiene datos: a escala mundial, casi 15 millones de niñas menores de 18 años contraen matrimonio cada año, esto es, unas 37 000 al día.
También dice que cerca de un tercio de los países en desarrollo no ha logrado la paridad entre los géneros en la enseñanza primaria.
Hay más estadísticas preocupantes. El 35% de las mujeres de todo el mundo ha sufrido violencia física y/o sexual a manos de sus parejas o de otras personas. Unas 133 millones de niñas y mujeres han sufrido alguna forma de la mutilación genital femenina en los 29 países de África y el Oriente Medio, donde esta nociva práctica es más habitual, con un alto riesgo de hemorragia, infección prolongada (incluido el VIH), complicaciones en el parto, infertilidad y muerte.
Para enfrentar y cambiar esta realidad, la ONU promueve la igualdad de género y asegura que “es esencial en todos los ámbitos de una sociedad sana”.
Entre las propuestas está invertir en programas de educación para las niñas y aumentar la edad para contraer matrimonio. Estas acciones pueden generar unos beneficios de USD 5 por cada dólar gastado. La inversión en programas que mejoran las actividades generadoras de ingresos para las mujeres puede generar beneficios de USD 7 por cada dólar gastado en solucionar estas problemáticas. En conclusión, según el organismo, es posible decir que invertir en niñas y mujeres es un buen negocio para la sociedad en general.
En Ecuador, el Estado ha implementado progresiva y sistemáticamente en su ordenamiento legal y en sus políticas públicas, los compromisos en materia de derechos humanos que se derivan de la ratificación de la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer.
En este sentido y comprometidos con la Agenda 2030, el Gobierno nacional se ha comprometido a trabajar en igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, niñas y adolescentes. La Asamblea Nacional, por ejemplo, aprobó el 27 de enero de este año, la Ley Orgánica Integral para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, que crea el Sistema Nacional Integral para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres fundamentado en cuatro ejes: prevención, atención, protección y reparación.
El trabajo es retador, en espacial cuando se leen estadísticas nacionales. Según la Encuesta Nacional de Relaciones Familiares y Violencia de Género contra las Mujeres, realizada por el Instituto Ecuatoriano de Estadísticas y Censos en el 2011, 6 de cada 10 mujeres han vivido algún tipo de violencia de género por cualquier persona. Según esta encuesta realizada a mujeres y adolescentes mayores de 15 años, se determinó que 1 de cada 4 mujeres han padecido violencia sexual. La violencia psicológica es la forma más recurrente y alcanza el 53,9%.
El Gobierno nacional se ha comprometido a trabajar en igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres. Foto: Archivo / LÍDERES
Todo producto que un país exporta tiene un valor agregado, un grado de intensidad de investigación y conocimiento. Así, por ejemplo, un detergente elaborado en Estados Unidos, o un alimento procesado hecho en Suiza, por citar dos ejemplos, pueden tener detrás de sí una serie de procesos que los convierten en productos con un alto valor agregado o con una intensidad de conocimiento superior a la de productos de otros países.
Esta calidad de la oferta exportable se mide en el Índice de Complejidad Económica (ICE) y en el Índice de Complejidad de Producto (ICP). Estas herramientas, que se basan en una fórmula matemática, dieron paso al ‘Atlas de la complejidad económica’, desarrollado por la Universidad de Harvard y el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT por sus siglas en inglés).
El ICE se calcula por medio de dos variables: diversidad (que mide la variedad de productos que un país produce) y ubicuidad (que cuantifica el grado de especialización que requiere la producción de cada producto). Este indicador es considerado un método de predecir el crecimiento económico futuro, así como para explicar variaciones internacionales en temas de ingresos generados por exportaciones.
El ranking del ICE del 2017, que se elabora con información del 2011 al 2016, es liderado por Suiza, Japón y Singapur. En América Latina destacan Panamá (24), México (25), Brasil (44), Colombia (45) y Costa Rica (47). Ecuador aparece en el puesto 82, en el listado que agrupa a un total de 124 países.
El ICE indica que en el 2016 Ecuador exportó 76 productos con ventaja comparativa. Esta medición intenta determinar si la participación en las exportaciones mundiales es mayor a lo que se esperaría de acuerdo al tamaño de su economía de exportación y del tamaño del mercado global de los productos comparados.
Colombia, por su parte, tuvo 126 productos con ventaja comparativa, mientras que Suiza, el líder del ICE, registró 188 productos con las mismas características. Los números muestran las distancias entre Ecuador y esos dos países.
Para Nelson Baldeón, vocero del MIT en Ecuador, en una economía global altamente competitiva y basada en la tecnología, hay que evaluar el valor agregado de las exportaciones. “En el país, en general, seguimos haciendo los mismos productos y para “innovar” hacemos una presentación diferente. Eso no es suficiente”.
Para explicar la brecha de innovación que Ecuador tiene con los países líderes, Baldeón menciona un ejemplo: en Suiza se desarrollan estómagos artificiales que permiten probar nuevos alimentos que se venden a escala global. “Con eso se ofertan productos alimenticios de alto valor agregado, para un ‘target’ específico”.
El vocero del MIT asegura que la clave es la investigación y desarrollo. “Estos dos factores permiten tener productos de exportación muy competitivos”.
¿Existe algún ejemplo en Ecuador? Baldeón considera que la empresa Terrafertil, con sus frutas deshidratadas constituye un caso exitoso.
El sector camaronero realiza investigación y desarrollo con fuerza. Eso permite que el camarón ecuatoriano llegue hoy en día a 50 países. Inversión en laboratorios y en plantas empacadoras, así como en procesos cada vez más tecnificados son parte de esta industria que el año pasado vendió más de 900 millones de libras y USD 2 860,3 millones, lo que significó un crecimiento del 17% en relación con el 2016.
Si bien el camarón es tratado como un bien primario, los exportadores destacan el alto valor agregado que existe en la producción. Allí están los laboratorios donde se crían las larvas, hay seguimiento científico y se da un mejoramiento genético.También se cuenta la tecnificación en las camaroneras. El resultado es un camarón más resistente y robusto, que gana mercado.
Para Daniel Legarda, presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), el sector camaronero es un buen ejemplo de la complejidad económica. “Tiene procesos, desarrollo e investigación muy grandes. Hay plantas de balanceados, laboratorios y mucho trabajo”.
Al analizar los resultados de Ecuador en el ICE, Legarda anota que en el pasado se dieron intentos por modificar la estructura productiva “con un Estado central planificador y actor fundamental, que elegía sectores productivos”.
Eso -añade- hizo perder tiempo porque se intentó dar saltos muy grandes y riesgosos para una economía como la ecuatoriana. Legarda cree que para lograr mayor valor agregado en las exportaciones se requiere un cambio de estrategia productiva en el país.
El país suma ejemplos de desarrollo e innovación
Las instalaciones de la empresa ecuatoriana Terrafertil están en Tabacundo, al norte de Pichincha. Foto: Archivo / LÍDERES
Alcanzar mayores niveles de producción con valor agregado es un reto para Ecuador y para la mayoría de países de la región. En el ranking del Índice de Complejidad Económica (ICE) 2017, ningún país de los 13 de América Latina que incluye la lista, aparece en los primeros 10 puestos.
Panamá y México recién se hacen un lugar en el puesto 24 y 25 respectivamente. Entre los países de la región, Ecuador, con el puesto 82, solo está por encima de Venezuela y Guatemala.
Andrés Robalino, director ejecutivo de la Cámara de Industrias de Cuenca, explica que uno de los limitantes es la naturaleza del tejido empresarial del país. Según datos de la Superintendencia de Compañías, en Ecuador el 81% de las empresas son micro y pequeñas empresas.
De ahí que, por sus presupuestos, dice Robalino, la mayoría de empresas no cuentan con recursos suficientes para invertir en investigación, innovación y capacitación, que son los requerimientos básicos para ofrecer un producto con valor agregado.
“Las multinacionales, las empresas más grandes son las que tienen mayor capacidad para invertir en investigación y tener sus propios departamentos de innovación. Los gerentes de las empresas pequeñas generalmente son todólogos”, señala.
Aún así, en Ecuador, en los últimos años, varias empresas han hecho esfuerzos importantes para destacar en esta área. En el ránking ICE anterior, que evalúa el periodo 2006-2010, Ecuador estaba en el puesto 90.
Terrafertiles un caso excepcional. Fundada en el 2005, inició operaciones como una exportadora de fruta seca. Para el 2009 continuó con su crecimiento y presentó la marca Nature’s Heart.
Su valor agregado está en su cadena productiva, que incluye la siembra, cosecha, secado, selección de los frutos deshidratados, el empacado y la distribución. El empacado es uno de los puntos más altos: éste permite que sus productos lleguen a los consumidores, dentro y fuera del país, listos para consumirse.
Esto despertó el interés de la suiza Nestlé, que en febrero adquirió una participación mayoritaria en Terrafertil.
En un mercado en el que la moda está altamente industrializada y la tendencia “fast fashion” (moda desechable) Metier se enfoca en ofrecer un producto que preserve la tradición de los tejedores de paja toquilla, pero que esté a la altura de los requerimientos de los locales de moda más exclusivos de Italia y Estados Unidos.
Uno de los sombreros de paja toquilla que ofrece esta marca toma 11 meses en elaborarse, por la complejidad del tejido.
“Es el sombrero más fijo, tiene 56 nudos de paja por cada pulgada lineal y requiere un nivel de elaboración que no cualquier tejedor puede alcanzar”, cuenta Alessandro Benincasa, cofundador de esta marca lanzada en el 2009.
Benincasa destaca que ofrecer un producto tradicional, como el sombrero de paja toquilla, con estilos vanguardistas implicó inversión en investigaciones de mercado en Barcelona, Italia y Londres.
Otro caso es chocolates Pacari. Esta marca suma unos 200 premios internacionales a la calidad, además, seis tipos de certificaciones -entre orgánicas, biodinámicas y de comercio justo- que demandaron hasta tres años de trabajo,cuenta Santiago Peralta, propietario.
Él añade que el valor agregado de su marca radica en productos orgánicos, libres de transgénicos, elaborados con una formulación que les permite ser consumidos por personas intolerantes al gluten y a la lactosa.
“Desarrollamos productos en los que cuidamos cada paso de la cadena de producción. No solo compramos materia prima, sino que también la desarrollamos y la mejoramos”, señala.
Cifra 82 es el puesto que ocupa Ecuador en este ránking que evalúa a 124 países.
El sector camaronero es un buen ejemplo de investigación y desarrollo. En la foto se observa la planta empacadora de Cofimar; la firma invirtió USD 10 millones en los últimos dos años. Foto: Archivo / LÍDERES
El Pacto Global es una iniciativa de la ONU, que surgió en 1999. Es una oportunidad para que el sector empresarial se vincule de forma coordinada con la ONU en sus propósitos de desarrollo. A este proceso se sumaron los objetivos del milenio y ahora la agenda 2030 y sus 17 objetivos de desarrollo sostenible. En Ecuador Corporación Ekos preside el capítulo del Pacto Global. LÍDERES habló con su gerente, Mauricio Morillo.
¿Cómo se dio su vinculación al Pacto Global? En todos los países el Pacto Global permite constituir una organización. En Ecuador, el Pacto Global ya tiene estatutos, su normativa y sus formatos de gobierno. Cada dos años los miembros se reúnen en asamblea y eligen una empresa que preside el grupo en el país. La empresa elegida dirige el Pacto por dos años, en este caso es Ekos a la que represento legalmente. Es una dinámica interesante porque cualquier organización puede aspirar a tomar la presidencia del Pacto Global, capítulo Ecuador.
¿Qué empresas estuvieron antes? El primer liderazgo lo tuvo Pronaca, después Telefónica. Hemos crecido de 44 a casi 120 organizaciones activas en Ecuador. A escala global son más de 15 000. Es una comunidad de desarrollo sostenible.
¿Qué posibilidades tienen las empresas al ser parte del pacto global? Son enormes. El primer punto a destacar es que las empresas aceptemos que ya cambiaron las reglas de los negocios. Hoy para ganarse la lealtad del consumidor y seguir vendiendo su producto o su servicio, una empresa va a tener que estar enmarcada en el concepto de desarrollo sostenible. No por presentar un buen producto hoy en día se puede maltratar a los colaboradores o utilizar materiales nocivos, violar normas… Con el Pacto Global de la ONU se crean buenos vínculos con los clientes y ellos se enteran y están seguros de que su proveedor cumple el desarrollo sostenible. Al ser una red de redes hay un networking con el mundo entero. Se pueden contactar a empresas similares a la de uno que haya avanzado en su modelo de negocios, con los conceptos de sostenibilidad.
¿Qué debe hacer una empresa para estar dentro de esta red de redes? En el Pacto Global toda empresa, pequeña o grande, tiene el mismo voto. Tienen los mismos derechos y eso hace al pacto muy atractivo y diverso. El requisito mínimo es tener 10 colaboradores y contar con una representación legal para entregar documentación que se revisa en la ONU, en Nueva York. Ahora hay que cumplir responsabilidades porque cada año la vara será más alta. Ya le dimos sustento al pacto Global en Ecuador y ahora trabajamos para obtener resultados y cumplir las metas trazadas.
¿En Ecuador se cumple esa diversidad de la que usted habla? Sí, tenemos empresas de distintos sectores, emprendimientos pequeños, así como grandes compañías.
¿Qué logros se han obtenido hasta el momento? En Ecuador el Pacto Global surgió en el 2011. Los logros han sido establecer la organización, darle estatutos, razón jurídica. Se han contactado decenas de empresas. Este año estamos dando un paso enorme con el reconocimiento a las buenas prácticas de desarrollo sostenible. El martes 21 de noviembre se darán estos reconocimientos a 60 prácticas de unas 50 organizaciones. Eso permitirá hacer público que en Ecuador se cumplen buenas prácticas de desarrollo sostenible.
Mauricio Morillo, como gerente de Corporación Ekos, preside el Pacto Global de la ONU, en Ecuador. Foto: Patricio Terán / LÍDERES
Imaginar un mundo sin telefonía móvil, sin Internet de alta velocidad o sin redes sociales nos resulta muy difícil. Trabajar hoy en día sin apoyarnos en aplicaciones móviles, conexiones inalámbricas o fibra óptica es impensable.
Pero hace 20 años, el ambiente tecnológico en Ecuador y el mundo era otro. Una conexión a Internet era un privilegio de pocos, al igual que los teléfonos móviles. A escala global la situación no era muy diferente. Pero a partir de la primera década de este siglo el panorama tecnológico cambió para siempre. Una larga lista de innovaciones salió a la luz y transformó la manera de entender el mundo y de conectar personas y negocios.
La inteligencia artificial se aceleró. La impresión 3D se convirtió en una alternativa para solucionar problemas globales. Los vehículos eléctricos y autónomos pasaron de los guiones de la ciencia ficción para convertirse en innovaciones fantásticas.
La Internet de las cosas, los smartphones, las redes sociales, la nube o el big data se convirtieron en parte del día a día de empresas y emprendedores. Estas innovaciones trajeron soluciones, pero también plantearon interrogantes sobre la mejor manera de aprovecharlas, sin que los usuarios se conviertan en autómatas o, peor aún, rehenes de estos desarrollos tecnológicos.
El equipo de LÍDERES, con la ayuda de empresarios y académicos, elaboró un listado de 20 innovaciones desarrolladas en los últimos 20 años. No es un listado definitivo, pero sí es un registro que nos ayuda a entender cómo evolucionó el mundo de la mano de las nuevas tecnologías.
La Impresión 3D
Las impresiones 3D tienen sus orígenes en la mitad de la década de 1980, con el método de la estereolitografía, un proceso de impresión orientado a maquetas, a través de prototipos rápidos.
Como toda tecnología, ha evolucionado paulatinamente y tomó fuerza en los últimos 10 años. Se han desarrollado diferentes técnicas de prototipado y tipos de máquinas, con el objetivo de obtener, de manera rápida y exacta, una réplica tridimensional de los diseños generados por un software. Por eso hoy en día se pueden hacer impresiones 3D de toda clase de objetos, desde alimentos, hasta órganos del cuerpo humano, pasando por viviendas, puentes y un largo etcétera
Su versatilidad y costos cada vez más bajos permiten que esta tecnología emergente tenga un potencial elevado en el mediano y corto plazos.
Smartphones y tablets
En 1968 apareció el dispositivo que dio paso a las tablets. Tuvieron que pasar más de 30 años, para que la tecnología evolucionara y Microsoft, la presentara con el nombre como hoy se la conoce.
Por su parte, los primeros smartphones fueron creados por IBM en 1992. El ‘boom’ de esta tecnología empezó con el sistema operativo Windows Pocket PC en el 2000, pero el surgimiento del iPhone y del sistema iOS revolucionó la industria de la telefonía móvil y de los smartphones, en 2007. Esto dio paso a Android OS de Google (el mayor competidor de iOS) lanzado meses después de la llegada del iPhone.
Hoy son un recurso multimedia, con el cual se puede realizar llamadas y compartir mensajes con imágenes y videos. Estos dispositivos se convirtieron en herramientas de trabajo y entretenimiento. Las memorias USB No existe certeza de quién o cuándo se inventó la primera memoria USB. Algunos atribuyen esta invención a la empresa Israel M-Systems, y otros a IBM.
Con esta innovación fueron varias las empresas que intentaron enriquecerse con sus patentes, pero al final solo crearon sus propias versiones.
Desde entonces, las memorias de 8 MB han crecido exponencialmente, llegando a una capacidad de almacenamiento de hasta un terabyte, en la actualidad. La memoria USB permite copiar contenido rápidamente, sin la necesidad de usar software de grabación. Facilitan la transmisión de información de un equipo a otro y sustituyeron casi en su totalidad al CD y DVD. Hoy su el uso de estos dispositivos baja a causa de otra innovación: la nube.
Los Biocombustibles
A finales del siglo XIX, Rudolf Diesel, un ingeniero alemán, inventó un prototipo de motor que utilizaba aceite de maní que luego derivó en el gasóleo. A lo largo de los años, estos combustibles han cobrado y perdido protagonismo, principalmente por cuestiones de precio, frente a combustibles derivados de petróleo. Asimismo, han sido cuestionados por el uso de recursos naturales y su impacto a la naturaleza. Sin embargo, la tecnología moderna ha diseñado varios sistemas donde la contaminación se puede convertir en biocombustible renovable. Hoy en día, la silvicultura, la industria y los residuos agrícolas se utilizan para producir bioenergía que pueden almacenarse durante un período indefinido y convertirse en energías sostenibles.
El Bitcoin
La crisis financiera iniciada con el derrumbe de las hipotecas subprime en los EE.UU. en el 2008, la recesión global y la crisis de la deuda soberana en algunos países de Europa fueron los factores que impulsaron el surgimiento de una nueva moneda electrónica: el bitcoin.
Antes aparecieron varias monedas digitales que, en su mayoría, no cumplían con medidas de seguridad. Por ejemplo, el tolken del dinero digital puede ser duplicado y gastado dos veces. La forma de solucionar este problema es que una fuente de confianza verifique si un tolken ya ha sido usado.
Hoy en día, existen más de 11 millones de bitcoin creados, y más de 3 millones de personas comprando y usándolo en todo el mundo. Esto ha provocado que ciertos países como Canadá planeen crear su propia moneda virtual.
Los vehículos eléctricos
Los automóviles eléctricos existieron incluso antes que los vehículos de combustión. Entre 1832 y 1839, el escocés Robert Anderson inventó el primer carruaje de tracción eléctrica. Para 1900 este tipo de vehículos eran los más vendidos del mercado. Sin embargo, en el siglo XX, las mejores se dieron a mayor velocidad en los autos de combustión, lo que provocó la desaparición de la industria del automóvil eléctrico. Pero, en 1996, resurgió con el EV-1 de General Motors.
La necesidad de reducir las emisiones de gases al ambiente e incentivos gubernamentales, promovieron su fabricación y comercialización.
Para 2016 existían más de 10 000 modelos en el mundo. Se espera que la demanda de autos eléctricos siga en aumento, junto con la infraestructura de carga y la baja de precios.
La robótica
Las películas de ciencia ficción dieron poderes a los robots, desde realizar tareas repetitivas del ser humano hasta llegar a otros planetas. Con los años, la realidad se acercó a la ficción. El origen de la robótica actual se ubica en la industria textil del siglo XVIII, con el desarrollo de una máquina textil programable, herramientas mecánicas que fueron impulsadas por la Revolución Industrial.
El desarrollo de la inteligencia artificial en los años 50 permitió emular el procesamiento de información humana con computadoras. En 1954, el ingeniero George Devol patentó el primer robot programable.
La industria robótica fue evolucionando. En el 2000, Honda lanzó un robot humanoide para ayudar a las personas con problemas de movilidad. En enero 2004, los robots Spirit y Opportunity aterrizaron en Marte.
La economía colaborativa
Compartir un viaje en auto con un desconocido, colocar en arriendo una habitación o departamento por épocas cortas o comprar artículos usados está de moda.
Estas acciones forman parte de una tendencia relativamente nueva, denominada economía colaborativa, que se basa en compartir de recursos.
Una característica común es el uso de plataformas tecnológicas (redes sociales o portales web), que permitan la interacción entre individuos de forma masiva, promoviendo el consumo colaborativo.
Algunos ejemplos son las aplicaciones móviles Uber, que ofrece servicio de transporte en autos particulares, y Airbnb, para ofertas de hospedaje en casas ocupadas o no.
Pero, actualmente, la economía colaborativa se amplia a otros sectores como la logística de entrega de productos.
Las redes sociales
El desarrollo de las redes sociales se dio de la mano con la masificación de la Internet y la posibilidad de estar conectado a la red a través de dispositivos móviles.
Las primeras redes sociales surgieron en los años 90. Pero su auge fue en la primera década del 2000. En el año 2002 se lanza el portal Friendster, pionero en la conexión online de amigos. Un año después se inaugura MySpace y en 2004 aparece Facebook, actual líder del mercado, con más de 1 800 millones de usuarios activos.
Hoy, las redes sociales son parte de la vida de millones de personas, cubriendo necesidades e intereses de todo tipo: sociales, informativos, profesionales, negocios, etc.
Luego de Facebook, entre las redes más populares de la actualidad se encuentran Whatsapp, YouTube, Instagram, LinkedIn, Twitter y Pinterest.
Big data
Estrategias de mercadeo más exitosas, recorte de gastos y producir más en menos tiempo son algunos de los beneficios que ha generado el Big Data, nombre con el que se conoce al manejo de grandes bases de datos.
Los avances informáticos son los que han permitido almacenar, organizar y analizar datos de forma sencilla y efectiva.
Los primeros pasos del Big Data se dieron en los laboratorios de IBM, en los años 70. Pero el término se utilizó por primera vez en 1997, en un artículo publicado por dos investigadores de la NASA. Ese mismo año, Google lanza su buscador, el primer lugar de búsqueda de datos en Internet.
En 2009 surge el ‘Business Intelligence’; desde entonces el uso de la información se ha convertido en un activo comercial en las empresas para obtener ventajas competitivas. La energía eólica
Si bien la energía eólica, que se obtiene a partir del viento, se ha utilizado desde la antigüedad, esta empezó a tener una demanda mayor a partir de los años 80.
En China, España, Alemania, Estado Unidos, India, por ejemplo, se han instalado parques eólicos, para aprovechar este recurso natural y transformarlo en electricidad. La energía eólica es una fuente de energía barata y competitiva con relación a otras fuentes convencionales.
Además, esta no genera afectaciones al ambiente, porque no emite gases contaminantes como los combustibles fósiles (diésel y gasolina).
La infraestructura eólica facilita también la dotación de electricidad en regiones remotas y aisladas que no tienen acceso a la red eléctrica. Sin embargo, cuenta con intermitencias al depender del aire.
Blockchain
La cadena de bloques o ‘blockchain’ es un método para registrar datos. Esta tecnología se aplica para administrar un sistema digital de transacciones con monedas virtuales, acuerdos, contratos u otros que requieran ser verificados y almacenados de manera independientemente. Este concepto de cadena de bloques fue aplicado por primera vez en el 2009 como parte de Bitcoin (moneda virtual).
Por sus características esta tecnología permite que la actividad que realiza cada usuario se distribuya a través de varias computadoras de todo el mundo, conectadas a determinado servicio o entidad.
De esta manera, cualquier persona de la red puede acceder a una versión actualizada. Esto hace que el sistema sea transparente y que su modificación sea imposible, porque siempre queda un registro.
Los drones
Los vehículos aéreos no tripulados más conocidos como ‘drones’ cada día son más populares. Estos aparatos que son operados desde la tierra usando una aplicación permiten captar en tiempo real fotografías y videos aéreos.
Últimamente, gracias a que los precios de fabricación bajaron, su uso se ha popularizado. Actualmente, estos aparatos se utilizan para realizar una investigación, entretenimiento u otros fines profesionales.
Entre los múltiples usos están la búsqueda de personas, trabajos periodísticos, eventos sociales, emergencias, en el control de las fronteras y otros.
Los drones tienen GPS y la autonomía de su batería puede durar horas. Además, según sus sensores pueden medir la calidad del aire, la temperatura y la humedad, la presencia de ciertos microorganismos, detectar incendios forestales.
Loud
La nube o Cloud es un nuevo modelo de uso de los equipos informáticos. Esta consiste en trasladar parte de los archivos y programas personales a un conjunto de servidores a los que puedes acceder a través de Internet, desde cualquier sitio.
En si la nube, permite almacenar la información particular de una persona o empresa en servidores que están al alcance de los usuarios previo la validación de sus datos y de su contraseña.
De esta manera cada usuario puede abrir, revisar y hasta modificar la información o usar sus programas, aunque estos no estén utilizando su computadora personal o del trabajo. Redes sociales como Facebook, Gmail, Pinterest y más almacenan la información de sus usuarios en la nube. Esto permite que acceder a las cuentas desde cualquier dispositivo.
La Nanotecnología
La nanotecnología es una ciencia, relativamente nueva. Esta surgió en la década de los 80. Desde su descubrimiento ha permitido estudiar, analizar, estructurar, formar, diseñar y operar materiales a escalas moleculares (de tamaño muy reducido). En los últimos años, la nanotecnología ha contribuido para desarrollar microprocesadores o ‘chips’ con varias funciones. Estos son capaces de resolver cálculos matemáticos, almacenar información, recargar baterías de dispositivos tecnológicos, identificar enfermedades y hasta contribuir a la extracción de petróleo. Los científicos esperan que en un futuro próximo, la presencia de la nanotecnología tenga más acogida en campos como la microelectrónica o la medicina, debido a que ya existen más de 40 antitumorales basados en estas tecnologías.
Las Aplicaciones móviles
Los diferentes íconos que tenemos en el teléfono móvil o en la tablet son programas informáticos diseñados para operar en esos equipos. Conocidas como ‘apps’ permiten ejecutar una tarea concreta: redactar un texto, navegar por Internet, jugar, chatear, pedir un taxi, pedir comida a domicilio, etc. Su origen se remonta a finales de los años noventa cuando existían la agenda, juegos como ‘snake’ y editores de ringtones. Están disponibles a través de plataformas operadas por gigantes tecnológicos. Se emplean en diversos ámbitos como el profesional, para el acceso a servicios, actividades de ocio y recreación, además de elementos educativos. Se cuentan por cientos de miles, pero solo pocas tienen alta demanda. Son pagadas y gratuitas,y su meta es facilitar la vida de los usuarios.
La inteligencia artificial
Lo que alguna vez fue el título de una película de ciencia ficción, hoy en día es una de las mayores revoluciones aplicadas en la industria. En palabras sencillas se trata de la inteligencia exhibida por máquinas.
En esta innovación juega incluso lo cognitivo, es decir la capacidad de entender y razonar ante ciertos estímulos. Al respecto se han clasificado en tipos como los sistemas que actúan como humanos (imitan su comportamiento) y los sistemas que piensan como humanos (relacionados con la toma de decisiones).
El término data de 1956, pero en las últimas décadas los avances han sido numerosos y actualmente 2 600 millones de smartphones en el mundo poseen esta tecnología. Sus avances están causando impacto en sectores como transporte, medicina, entre otros.
La internet de las cosas
Es un concepto que se refiere a la interconexión digital de objetos cotidianos con Internet con el objetivo de arrojar información en tiempo real que permita tomar decisiones.
Conocido como IoT por sus siglas en inglés, el término fue empleado en 1999 por Kevin Ashton, un investigador del Massachusetts Institute of Technology, durante unos estudios en el campo de la tecnología de sensores.
El IoT tomó mayor relevancia a partir de 2008 ya que fue una época en la que se consideró había más objetos conectadas que personas.
Esta tecnología apunta a una mejor calidad de vida y en la cotidianidad existen diversos ejemplos. Por ejemplo, las zapatillas inteligentes que miden la distancia recorrida, sensores para el jardín, puertas de garaje inteligentes, entre otros.
La fibra óptica
Es un medio de transmisión empleado habitualmente en redes de datos y telecomunicaciones. Consiste en un hilo muy fino de material transparente, vidrio o plástico por el que viajan pulsos de luz que se traducen en datos.
Su uso es múltiple ya que permite enviar gran cantidad de información a largas distancias a velocidades superiores a las de un cable convencional para que el usuario pueda acceder a distintos tipos de servicios.
Se emplea en campos como la arqueología o aplicaciones militares. En la medicina esta tecnología permite explorar las cavidades internas del cuerpo humano a partir de técnicas endoscópicas y aparatos como laringoscopios y laparoscopios.
En Ecuador existen 66 000 kilómetros de fibra óptica, de acuerdo con el Ministerio de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información.
Empresarios, académicos y periodistas elaboraron una lista de 20 innovaciones que revolucionaron al planeta. Foto: Referencial
La semana pasada se cerraron las inscripciones de la campaña Ecuador cambia al mundo. El 15 de septiembre se venció el plazo para que los emprendedores propongan ideas locales para solucionar problemas globales y participen en esta iniciativa que la promueven la Alianza para el Emprendimiento y la Innovación (AEI), con el apoyo de CAF Banco de Desarrollo de América Latina y el Semanario LÍDERES.
Hasta el cierre de esta edición la AEI registraba más de 110 inscritos. La cifra definitiva de las ideas participantes en la campaña se conocerá esta semana.
Además, la semana pasada se cumplió en las instalaciones de Grupo EL COMERCIO el cuarto foro de la campaña. El encuentro se desarrolló bajo el tema ¿Cómo Quito puede ser el motor para que Ecuador cambie al mundo? Contó con la participación de Álvaro Maldonado, secretario de Desarrollo Productivo del Municipio de Quito; Camilo Pinzón, presidente de la Corporación para el Emprendimiento y la Innovación; y Pablo Zambrano, vicepresidente de la Cámara de Industrias y Producción.
Ellos hablaron, entre otros temas, sobre las fortalezas que tiene la capital del Ecuador en temas productivos y de emprendimiento.
Para Maldonado, Quito se está convirtiendo en un caso de estudio en positivo a escala nacional y regional. El vocero del Municipio aseguró que la capital es una ciudad dinámica, con un aeropuerto nuevo y un Metro subterráneo en construcción.
Al pensar en las fortalezas de la ciudad, Maldonado consideró importante analizar que la oferta exportable de Quito es distinta a la oferta exportable del país. “Ecuador exporta materias primas, pero Quito exporta valor agregado”.
Como ejemplos mencionó las flores producidas en fincas que son “casi laboratorios”. También, mencionó el software, la línea blanca y los vehículos. “Uno ve que hay alto valor agregado que se va a la región andina y a Centroamérica. Quito se volvió una ciudad industrial y tecnológica”.
Todo esto permite pensar que la capital aportará a la campaña Ecuador cambia al mundo. Otro dato que se compartió en el foro fue respecto al peso de las universidades asentadas en Quito. Según Maldonado, el 31% de los establecimientos de educación superior está en la capital.
Camilo Pinzón, como titular de la Corporación para el Emprendimiento y la Innovación, comentó que la universidad ecuatoriana cumple con generar conocimiento y sus laboratorios de investigación, que sirven para conectarse con el sector empresarial. Pero advirtió que aún hay un largo camino por recorrer. “No hay excusa para que la universidad ecuatoriana no promueva emprendimientos que puedan tener impacto global. La universidad debe motivar a que las personas se atrevan a plantear ideas”.
Pinzón cree posible que con un trabajo conjunto entre empresas, universidades y sector público se pueden solucionar grandes problemas. Como ejemplo mencionó a Hand Eyes, un emprendimiento tecnológico ecuatoriano pensado en las personas con discapacidad visual y reconocido a escala local e internacional.
Otra de las fortalezas de Quito, como motor de cambio, es su industria, según Pablo Zambrano, vicepresidente ejecutivo de la Cámara de Industrias y Producción. El gremio que representa, dijo Zambrano, engloba el 80% del producto interno bruto de la ciudad. “Hay que resaltar la vocación del empresario quiteño para arriesgarse e invertir en temas como el software que se exporta a la región. Eso es motivo de orgullo”.
También, resaltó los encadenamientos productivos que permiten que desde Quito se exporten productos como vehículos, flores, chocolates, entre otros bienes.
Álvaro Maldonado, Camilo Pinzón y Pablo Zambrano en el foro ¿Cómo Quito puede ser el motor para que Ecuador cambie al mundo?. Foto: Armando Prado / LÍDERES
La invención del sistema de absorción atómica espectroscópica, uno de los componentes esenciales del wifi, así como los primeros billetes de polímero para reducir el impacto ambiental causado por el alto consumo de papel, son solo algunas de las invenciones de Csrio.
Este instituto, que funciona en la localidad de Clayton South, en Melbourne, Australia, es patrocinado por el Gobierno Federal australiano. Allí trabajan unos 150 especialistas que se dedican a la investigación científica, industrial y ambiental.
El objetivo es ayudar a las industrias a mejorar sus procesos, reducir costos y volverlos más sustentables y ecológicos. Desde su fundación, hace más de un siglo, en 1916, el instituto ha trabajado en el desarrollo de sistemas de control de plagas para apoyar a la agroindustria, entre otras áreas.
Pero su mayor fortaleza es su investigación sobre recursos naturales y minería. Es que en Australia, esta es la industria con más inversión de capital, allí operan las empresas mineras más grandes del mundo y tienen grandes depósitos de minerales y metales preciosos en Pilbara y Queensland.
“Proveemos de tecnología y soluciones ambientales. El desarrollo científico es una de las prioridades de nuestro Gobierno, por eso tenemos aquí los mejores especialistas de Australia, investigando sobre las industrias más importantes”, afirma Kathie McGregor, líder del grupo Innovación de Procesos Químicos.
Las instalaciones principales en Clayton, en el distrito La Victoria, ocupan cerca de 2 hectáreas de terreno y lucen como el escenario de una película galáctica. Hay ensayos de equipos, experimentos y maquinarias en desarrollo en cada espacio de la infraestructura.
La investigación sobre el cobre, cómo extraerlo y procesarlo, es una de las estrellas de esa entidad. En uno de los laboratorios, Kishna Mohanarangam investiga una nueva combinación de ácidos para solidificar y transformarlo en láminas.
Con esa investigación se espera reducir la cantidad de químicos contaminantes que usualmente aplican las industrias para procesar el cobre en bruto. Esa nueva solución que pronto se venderá a las empresas, también es más económica y sustentable.
Las investigaciones sobre el cobre se consideran prioritarias y estelares, por los desafíos que enfrenta esa industria. El cobre es uno de los ‘commodities’ más fuertes en Australia. La caída de precios por la crisis económica de China, (su principal comprador), la disminución en los volúmenes de extracción de minerales y la disminución de la calidad son algunas de las mayores preocupaciones.
“El cobre es de los metales más requeridos en el mundo moderno. Siempre habrá mercado y siempre habrá demanda, porque se requiere para baterías, carrocerías, cables… Llevamos toda una vida investigando nuevos métodos para procesarlo y para mejorar la calidad del producto final”, afirma Mohanarangam.
Jonathan Law, director de Recursos Minerales del Csrio, explica que todas las soluciones e investigaciones que se realizan en esa entidad están enfocadas en el incremento de la productividad y en lo que llaman ‘la minería del futuro’.
“No hay duda de que la innovación desempeñará un papel fundamental en la transformación de la industria. Nuestro éxito en llegar a ella depende de que la industria, los equipos y servicios tecnológicos y el sector de la investigación se unan para trabajar en estos desafíos comunes”, afirma Law.
Los programas científicos son una de las fortalezas del trabajo del instituto. ‘Mining3’, un proyecto colaborativo de Csrio y CRCMining, es otra iniciativa para enfrentar los desafíos de la minería a gran escala. “Se unió el sector minero y el sector de la innovación, en búsqueda de soluciones”, explica Law.
La investigación de este proyecto, que fue enfocada con cinco metas, busca reducir los costos y la inversión de capital con el diseño de nuevos equipos de exploración y extracción de minerales en suelo duro, en minería superficial e incluso en minería bajo tierra.
Más información Financiamiento. Csrio depende del Gobierno Federal de Australia, y es una institución anexa al Ministerio de Industria, Innovación y Ciencia.
El Gobierno invierte cerca de USD 600 millones de dólares en las investigaciones de Csrio. Otra parte del financiamiento corresponde a la venta de sus invenciones a las empresas.
Csrio también investiga en Chile para apoyar a las empresas mineras australianas, que operan en ese país. Una de las metas es ampliar los estudios a más países de Latinoamérica considerados dentro del circuito minero, como Perú y Argentina.
Los laboratorios de Csrio son el punto de partida de una serie de investigaciones científicas. Foto: Cristina Márquez / LÍDERES
Diferenciar la calidad del camarón ecuatoriano frente a sus competidores y posicionarlo como una marca a nivel mundial es el objetivo planteado por el ministro de Comercio Exterior, Juan Carlos Cassinelli y el presidente ejecutivo de la Cámara Nacional de Acuacultura (CNA), José Antonio Camposano.
Ambos suscribieron, la semana pasado, un convenio de cooperación público-privado para ejecutar el proyecto de construcción y promoción de la marca Camarón del Ecuador, que se estima concluya en un año.
Según las autoridades, la primera parte del proyecto, que comenzó este año, consiste en un estudio de la situación actual del camarón; el siguiente será el desarrollo de los estándares de calidad para que la marca sectorial sea otorgada. Posteriormente se elaborará la marca como tal y se hará un estudio de posicionamiento en el mercado. Finalmente, para el 2018 se prevé continuar con la implementación de la estrategia de promoción a nivel internacional.
“Es necesario trabajar en un estándar nacional superior y posicionarlo, de tal forma que salgamos del mercado ‘commoditie’ y ofertemos un producto con valor agregado. Desarrollar una marca nos va a ayudar no solamente a fortalecer las buenas prácticas que tenemos en el país, sino también posicionarlas en los mercados destino”, asegura el presidente ejecutivo de la CNA.
La inversión por parte del Ministerio de Comercio Exterior para este proyecto será de USD 110 000 y la inversión que realizará la Cámara Nacional de Acuacultura llegará a USD 690 000.
Según Camposano, el volumen de exportación camaronero ha venido creciendo en los últimos siete años a una tasa promedio entre el 12 y el 15% anual. Además, el país aporta con el 11% del mercado mundial del crustáceo. En al actualidad el sector camaronero genera en el país más de 200 000 plazas de empleo de forma directa e indirecta.
Para Cassinelli, el camarón ecuatoriano tiene buenas condiciones de producción, buenas prácticas laborales y de medioambiente, características que le han permitido al Ecuador crecer “sustancialmente” frente a sus competidores en los últimos años a escala internacional.
La marca sectorial Camarón del Ecuador, explica Cassinelli, permitirá identificar al producto ecuatoriano en cualquier lugar del mundo e identificarlo como un producto de excelencia y de calidad. “En este momento estamos dando el primer paso, la firma del convenio interinstitucional es la primera piedra simbólica para lograr el objetivo”, asegura el funcionario.
Por su parte, el representante del sector privado reitera que el camarón ecuatoriano cumple con todos los estándares ambientales y sanitarios que exige el mercado y además tiene una de las más importantes certificaciones en acuacultura: la certificación ASC .
“Cuando se creó esta certificación, Ecuador pidió ser el primer país en certificarse bajo esos estándares de calidad. Pocos pensaban que se podía cumplir porque son estándares muy exigentes; sin embargo, Ecuador logró en el año 2013 certificar la primera firma bajo el estándar ASC y de ahí se han firmado muchos más”. Para Camposano, esto demuestra que el país ya ha sido líder en proyectos de sostenibilidad. Uno de los principales mercados al cual se exporta el camarón es la Unión Europea (UE).
Según datos del Banco Central del Ecuador, entre el 1 y el 20 de enero de este año las exportaciones a la UE aumentaron con relación al mismo período del año anterior. En enero del 2016 se exportaron USD 40 millones y en el mismo mes del 2017 fueron USD 43 millones.
Juan Carlos Cassinelli, ministro de Comercio Exterior, junto con José Antonio Camposano, presidente de laCNA. Foto: Joffre Flores / LÍDERES
El Presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil, Pablo Arosemena, es ahora parte de la comunidad Young Global Leaders (YGL), formada por emprendedores líderes y con visión global. En este grupo, sus integrantes debaten y esbozan las soluciones a los grandes problemas del mundo dentro del Foro Económico Mundial.
En esta comunidad están personalidades del mundo empresarial como el creador de Facebook Mark Zuckerberg, así como los co-fundadores de Google Larry Page y Sergei Brin, la presidenta de Yahoo, Marissa Mayer, y políticos como David Cameron, ex ministro de Gran Bretaña
Desde el 2004, YGL —comunidad creada por Klaus Schwab, fundador del Foro Económico Mundial- se ha esforzado por crear una plataforma de jóvenes líderes capaces de definir y asumir los retos del futuro, además de impactar en la vida de las próximas generaciones.
Arosemena fue selecto entre líderes latinoamericanos para recibir esta distinción, que pasa por un proceso de nominación calificado, donde se reconoce el liderazgo en sus áreas de responsabilidad. Algunos de los criterios utilizados por el Foro Económico Mundial para elegir a los integrantes de la comunidad son: contar con una probada experiencia de liderazgo, ser audaz, valiente, orientado a la acción, ser decidido a utilizar sus talentos de liderazgo para hacer del mundo un lugar mejor, con perspectiva global y compromiso.
Esto permite al Foro elaborar una selección que luego se revisa y valida por Heidrick & Struggles, una consultora encargada exclusivamente de la búsqueda de talento.
Para el Ecuador es un honor que este 2017 se otorgue este reconocimiento a un líder gremial, Para Arosemena, unirse a esta generación de líderes a nivel mundial constituye un camino para continuar con la defensa de los principios de libertad, según un comunicado.
La Cámara de Comercio de Guayaquil se siente honrada de que su Presidente, uno de los más jóvenes en la actividad gremial, forme parte del proceso de internacionalización más importante de su historia, mediante sus participaciones en el Foro de Jóvenes Líderes Globales y el Foro Económico Mundial.
Presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil (CCG), Ec. Pablo Arosemena Marriott. Foto: Archivo / LÍDERES