Transformar el producto final de una hacienda lechera fue lo que logró Rodrigo Borja en El Tejar, ubicada en el cantón Alausí (Chimborazo).
En 2011 regresó al país tras estudiar en el Zamorano y comenzó a administrar la propiedad familiar. En esa época, la producción del lugar se centraba en alimentos andinos que, con el paso de los años, iban perdiendo rentabilidad.
Esto empujó a Borja a dedicarse a la ganadería lechera. Para 2009 contaba con 15 vacas, que producían al día, cada una, entre ocho y 10 litros de leche.
Ese producto lo entregaba a centros de acopio y queseras, para su posterior pasteurización e industrialización. Sin embargo, con la llegada de la pandemia dejó de recibir la leche y no tenía dónde colocarla diariamente.
“La cadena productiva se interrumpió. Era irracional botar el producto. Por ello tuve que vender directamente a compradores en la zona e incluso tuve que regalar”, comenta Borja. Pero eso no bastaba. Así que la mejor idea fue poner en marcha un proyecto en el que ya se habían realizado algunos ensayos: manjar hecho con higos de esa zona.
Con una inversión de unos USD 12 000 en la planta y 5 000 en maquinaria abrió la procesadora de derivados lácteos, que se encuentra dentro de la hacienda.
La iniciativa tiene su origen en el consumo, en Alausí, de higos rellenos con manjar; Borja busca que esa tradición no se pierda.
Carolina Bayas, quien vive en la zona, provee al ganadero de la fruta desde hace año y medio, cuando empezó los ensayos y luego con la producción oficial.
“Yo hago higos en almíbar y entrego eso. Tengo muchos árboles y como había mucho producto solíamos regalar. Pero luego comencé a hacer el dulce y a comercializar. A Rodrigo le vendo unos 50 kilos cada 15 días”, comenta.
Destaca el espíritu emprendedor de este empresario; cree que el sabor del manjar es rico y artesanal. Para esta proveedora, en la calidad dellácteo contribuye el tipo de insumos con que se prepara.
Rodrigo Borja es el empresario que desarrolló el manjar de marca Higole. Se vende en tres ciudades del país.
La leche del manjar tiene certificación orgánica, lo que aporta valor agregado a este y otros lácteos que se producen en el lugar. En El Tejar también se comenzó a elaborar quesos mozarela y, próximamente, Borja prevé contar con una cava de quesos maduros.
Previo a la pandemia la hacienda producía unos 300 litros diarios y ahora, 400. El Tejar cuenta actualmente con un ato de 80 animales (30 en producción).
Los derivados de este insumo se venden en Riobamba, Quito y Guayaquil a través de redes y personas que los colocan directamente. Una de ellas es Alfonsina Niama, quien hace unos cuatro meses compra el manjar de Borja, que se vende bajo la marca Higole.
“Tiene muy buen sabor y no es empalagoso. Es novedoso y como es producto de la Sierra tiene gran acogida en Guayaquil. Semanalmente adquiero 300 manjares. Los reparto en la ciudad”, dice.
Actualmente, Borja busca posicionar sus productos en el mercado, para más adelante dar el salto a cadenas de supermercados. Algunos de sus productos se han enviado al extranjero a clientes individuales que desean probarlos.
El 70% de la producción de leche de la hacienda se entrega al centro de acopio y el resto para la producción de derivados.
Borja señala que lo interesante de la industrialización y venta de su producto es que el margen de utilidad que ha obtenido le ha permitido hacer más inversiones y se proyecta a crecer. Una de las metas de la hacienda es llegar a procesar unos 600 litros día.
El fin del ganadero es, en algún momento, poder comprar leche a vecinos del sector donde está la hacienda, principalmente a pequeños productores (600 lt/d).
Las vacas de la hacienda producen leche certificada como orgánica. Eso le da más valor a los derivados.
Él aspira que la leche que en algún momento vaya a recibir sea de calidad y que al conseguir un mayor dinamismo comercial se logre mejorar el precio que se paga por litro a los productores.
Hoy, el valor de indexación en el país es de USD 0,42, pero en el mercado hay ganaderos que cobran menos por factores como la baja demanda en el país.
Actualmente, dos parejas de esposos del sector ya se benefician de la producción en la hacienda. Consiguieron trabajo en la planta. Adicional, en la propiedad se contrata a 15 jornaleros al mes.
En la hacienda El Tejar se pone especial cuidado en la preparación de quesos frescos. Luego se realizarán maduros. Foto: cortesía El Tejar
La economía estadounidense creció el 7,5% en el tercer trimestre del año frente a los tres meses precedentes, un rebote extraordinario tras el desplome registrado entre abril y junio pasados, pero parece estar perdiendo impulso a medida que acaba el 2020.
Los datos publicados por el Departamento de Comercio son los definitivos de las tres estimaciones que hace el Ejecutivo estadounidense sobre el PIB, e indican que la economía creció a una tasa anual del 33,4% en el tercer trimestre. El repunte fue ligeramente superior al esperado por los economistas, que habían pronosticado un crecimiento del 33,1% anual, y algo mejor que el pronosticado por el Departamento de Comercio en noviembre.
Las cifras se publicaron después de que el Congreso de EE.UU. aprobara un paquete de estímulo por USD 900 000 millones, para hacer frente a la devastación causada por la pandemia. Muchos economistas consideran que ese segundo rescate del año solo podrá tener un efecto limitado en los próximos indicadores, porque el paquete es mucho más moderado que el aprobado en marzo y no incluye ayuda para los gobiernos estatales y locales.
Para Tannya Lozada, la pandemia no implicó confinamiento, sino un recorrido por diferentes sectores del país trabajando en la lucha contra covid-19. Lo realizó como Directora General de investigación de la Universidad de Las Américas.
Su carrera la inició en la Universidad Católica, al estudiar Biología. Sus estudios de posgrado los realizó en el exterior: su maestría en la Universidad de Aarhus, en Dinamarca y su doctorado en Agroecología y Agricultura Sustentable en la Universidad de Goettingen, en Alemania.
Ha laborado en entidades públicas y privadas, colaborando en proyectos de carácter ambiental. Asimismo, ha sido académica y su última etapa la ha desarrollado en la UDLA; hoy, en el marco de la investigación sobre covid-19.
Explica que la entidad ha apoyado al país con diagnósticos para diferentes grupos, en algunos casos de manera gratuita; ella ha trabajado en dicho proceso. Ha impulsado a los estudiantes del laboratorio para que colaboren en el proyecto, pese a los riesgos, con todas las medidas de seguridad.
Investigadoras “Las autorías de los artículos de los investigadores jóvenes, hombres y mujeres, también son de ellos, no solo de aquellos con más experiencia. Es una mala costumbre que hay en diferentes lugares. Pero, ha ido cambiando.
Creé un grupo de investigadores jóvenes, hombres y mujeres, que regresaron al país luego de hacer sus doctorados. Talentos nacionales e internacionales.
Nosotros somos un grupo con un trato igual, no hay súper investigadores encima del resto. Siempre trato de identificar talentos jóvenes, especialmente mujeres.
En muchas ocasiones, es más difícil que las investigadoras tomen pasos fuertes o complicados. Eso es por muchas razones.
Se ha comprobado, por ejemplo, que cuando una mujer escribe un artículo científico tiene más temor y lo revisa muchas más veces que un hombre. Las mujeres somos más exigentes, nos criticamos más, nos observamos más.
Por eso es que he conocido talentos a los que hay que empujarles más, ayudarles para que salgan adelante, impulsarles a que se inscriban en el doctorado, a que confíen en sus capacidades y se formen como investigadoras”.
Participación femenina “En general, hay menos mujeres haciendo ciencia que hombres. Las razones pueden ser varias.
Probablemente, en esta área del conocimiento, así como en otras, el tema de la familia pesa mucho. Una mujer que tiene hijos o que está en etapa de maternidad va a disminuir el tiempo que puede dedicar a la investigación.
El mundo académico, el de la investigación, es muy competitivo. Realmente lo que se exige es un cierto nivel de producción y pasar eso a validación con los pares a través de las publicaciones.
He visto el sacrificio que deben hacer investigadoras que, por sus sueños de ser madres y otras razones, tienen que reducir el tiempo para hacer ciencia. Eso se nota. Los hombres no pasan nunca por este momento. Pueden tener hijos y siguen en el mismo nivel. En casos muy contados, el comenzar a hacer una familia impacta en su productividad. En las mujeres esa situación sí sucede.
Otro elemento que impacta en la participación de las mujeres en la ciencia es la falta de confianza en sí mismas”.
Apoyo “Es importante que las mujeres tengan jefes que confíen en ellas, que voten por ellas, que sean personas que no hagan chistes abusivos, que nos permitan ir construyéndonos como profesionales, entre otros aspectos”.
Sociedad “Todavía hay machismo. A veces se anuncia que existe ‘la primera mujer que hace algo en ciencia’. Todo el tiempo estamos recibiendo esos mensajes, como que seguimos siendo la diferencia y no lo común. Eso pasa porque a las niñas no se nos da la oportunidad de ser investigadoras.
A las niñas desde que son pequeñas se les dan regalos de TV, pero no sets de ciencia. Hay estudios que han demostrado que a medida que van creciendo las niñas, el sistema les va alejando de las ciencias y empujando a las humanidades. A los hombres se les pide ser buenos en matemáticas.
A la fecha, siguen siendo pocas las investigadoras. Todavía hay miedos, hay conceptos que se traen desde la casa o de los colegios. Las mujeres jóvenes suelen dudar mucho que puedan llegar a ser buenas investigadoras.
Las mujeres pueden llegar a ser grandes científicas. Las que ya estamos en la profesión podemos ayudar en ese sentido”.
Su visión Considera que las mujeres científicas son más críticas en cuanto a su labor. Es importante que se ayude a que su talento no se pierda. La sociedad impacta en las investigadoras.
Su perfil Investigación. En la pandemia viajó a Galápagos para el control de covid-19. Fue al Cuyabeno para la toma de muestras de la comunidad Siona. Destaca que se pueda apoyar a grupos vulnerables. Trabajo. En Conservación Internacional apoyó al Ministerio del Ambiente para impulsar el proyecto Socio Bosque. Se buscaba ayudar a gente con plantaciones nativas sin sacrificar su bienestar. En el hogar. Tiene dos perros y tres gatos.
Tannya Lozada colabora en el proyecto de diagnóstico de covid-
19 a grupos del país.Ha trabajado en las áreas pública y privada. Foto: Vicente Costales / LÍDERS
La pandemia modificó los hábitos de consumo de la ciudadanía, ocasionando un marcado repunte en de la demanda de ciertos productos, tales como medicinas y alimentos, mientras que otros artículos decayeron. El abrupto cambio motivó a empresarios a dar un giro a los negocios e incursionar en nuevas áreas, con miras a sobrevivir a la crisis.
Aunque no existe un dato concreto de cuántas empresas en el país se ‘reinventaron’, lo cierto es que en todos los segmentos hay muestras de esta transformación. Desde pequeños emprendimientos hasta grandes compañías volcaron sus esfuerzos hacia nuevos caminos, con tal de evitar el cierre y mantener plazas de trabajo.
Un caso es Corporación Azende, que a los pocos días de iniciar el estado de excepción (16 de marzo) dejó de fabricar el licor Zhumir para producir alcohol y gel.
Otra muestra es el sector textil y de confección. A raíz de la emergencia sanitaria, sondeos ciudadanos evidencian que los clientes desplazaron sus preferencias por adquirir prendas de vestir.
La caída en ventas fue precipitada. Según datos de la Asociación de Industrias Textiles del Ecuador (AITE), entre enero y abril de este año hubo una caída del 93% frente al mismo período del 2019.
Ante esa realidad, más fábricas y comercializadoras empezaron a confeccionar los productos que cobraron mayor demanda debido a la emergencia sanitaria, como mascarillas, tapabocas, trajes de bioseguridad, prendas para personal de la salud y ahora incluso se elaboran líneas de ropa a base de telas antifluidos con cubrebocas adaptados.
No obstante, dar este giro no ha sido sencillo para los negocios formales, porque las mascarillas, al igual que otros productos, requieren de registro sanitario que acredite su calidad y el trámite para obtenerlo es lento, comenta Javier Díaz, titular de la AITE.
Para tener una idea, alrededor de dos meses tardó la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) en conceder los permisos a solo cinco empresas agremiadas a la AITE.
Hasta el 17 de junio, la Arcsa ha aprobado 238 tipos de mascarillas que en su mayoría son de fabricantes ecuatorianos y chinos.
La transformación del sector textil, así como el crecimiento de las entregas a domicilio de distintos productos, tuvo un efecto colateral positivo en empresas de la industria gráfica, puesto que se volcaron a elaborar cajas y demás materiales de paquetería.
Esto ha dado un poco de oxígeno financiero a ciertas imprentas, luego de que la producción de libros y textos escolares para instituciones públicas enfrentó problemas de distribución, además de que varias empresas recibieron como pago bonos del Estado, difíciles de negociar en la bolsa.
Así lo comentó Mauricio Miranda, presidente del Sector Gráfico de la Cámara de la Pequeña y Mediana Empresa de Pichincha (Capeipi), en mayo pasado. La situación de la industria gráfica sigue todavía compleja.
Para dar un giro a las actividades tradicionales, sin mayores inversiones, las empresas deben aprovechar el potencial de su maquinaria instalada, reflexiona Andrés Robalino, portavoz de la Cámara de Industrias, Producción y Empleo (Cipem) de Cuenca.
La reinvención, agrega Robalino, no solo se concentra en la parte industrial sino también en la comercialización y distribución.
El confinamiento social llevó a que los empresarios incursionasen en el comercio electrónico y las entregas a domicilio, lo que permitió generar ventas por medios que antes eran poco usados por algunas firmas.
Esa ha sido la vía por la que más ha apostado la industria maderera y que ha potenciado los ingresos. Además, se dio más énfasis en la elaboración de muebles para el teletrabajo y estudios en el hogar, ahorrando espacios, comentó Christian Riofrío, titular de la Asociación Ecuatoriana de Industriales de la Madera.
La emergencia sanitaria hizo que entre marzo y mayo se movieran alrededor de USD 500 millones en ventas en línea, lo que representa casi un tercio de todo lo generado en el 2019, según la Cámara de Comercio Electrónico. Se proyecta que en este año, las ventas ‘online’ alcancen los USD 2 200 millones. 500 millones de dólares en ventas en línea se realizaron entre marzo y mayo del 2020
La empresa textil Hilacril concentró sus operaciones en fabricar mascarillas y trajes de protección. Foto: Cortesía Hilacril
En medio de todo lo que está viviendo el Ecuador, con la emergencia sanitaria y el frenazo de la economía, aún nos encontramos con buenas noticias. Desde el pasado 18 de mayo está vigente un nuevo mecanismo para constituir compañías en el país.
Se trata de la figura llamada Sociedades de acciones simplificadas o SAS. Este modelo permite que el emprendedor o el empresario levanten su compañía de manera legal, con un trámite mucho más sencillo y flexible, en comparación con los modelos tradicionales. Entre las ventajas están que solo se necesita de un socio, no tiene costo, los trámites se cumplen en línea, no se requiere de un capital mínimo y, el más importante, es que se combate a la informalidad.
Para los expertos se trata de una suerte de ‘traje a la medida’ para empresarios y emprendedores, porque ellos podrán crear su compañía según sus necesidades.
Las SAS ya tienen un antecedente en Colombia, donde en algo más de una década cerca de 500 000 empresas se han constituido bajo esta modalidad. Es, sin duda, un apoyo al emprendedor.
Las herramientas electrónicas son el principal aliado para los negocios digitales que están surgiendo como tales o para los tradicionales que están cambiando.
Plataformas, ‘apps’, programas y demás tecnología que funciona a través de la Internet son básicos para la gestión empresarial, particularmente poscovid-19.
“La idea es facilitar con todo esto los procesos de comunicación, registro, optimización de recursos, trazabilidad, contacto segmentado, entre otros para alcanzar clientes”, dice Sebastián Chiriboga, especialista en Emprendimiento e Innovación de la Cámara de Comercio de Quito.
Él explica que los propietarios de los negocios deben hacer una planificación para la digitalización en tres segmentos: administrativo, operativo y comercial.
En el primero, aconseja, se puede empezar utilizando software tipo ERP o CRM. Son herramientas que sirven para mejorar la gestión interna de los negocios: tienen módulos de contabilidad, administración de bodegas, manejo del personal, entre otros.
La optimización para pequeños empresarios puede llegar al 20% al manejar esta tecnología porque genera claridad sobre costos y gastos, permite tener mayor control sobre los empleados (registros biométricos de entrada y salida transparentes, por ejemplo), identificar los comportamientos de los clientes (saber qué compran más, si son recurrentes, etc.).
En la parte comercial se puede partir desde la presentación de productos en redes sociales y plataformas, hasta software especial para publicitar la oferta; otras herramientas, como Google Forms, sirven para conocer el grado de satisfacción del cliente a través de encuestas. En cuanto a lo operativo, es clave contar con mecanismos para trabajar de manera remota, chats privados para compartir información delicada, tecnología para gestión de proyectos, etc., dice Chiriboga.
El emprendedor debe saber que algunas de estas ayudas son gratuitas de manera permanente (Google Forms no tiene precio para quienes tienen Gmail) o poseen versiones sin costo dependiendo del número de usuarios (Vitrix 24, que sirve para gestión); otras ‘son software as a service’, que se cancelan como cualquier servicio básico en un monto cada mes y otras implican un pago único, aunque de valor mucho más alto.
Javier Albuja, coordinador técnico de ConQuito, explica que en el proceso de digitalización de un negocio se debe pensar en cómo satisfacer, a través de mecanismos tecnológicos, las necesidades o requerimientos de los clientes o posibles clientes. Agrega que no se debe optar por una solución tecnológica por el momento o la urgencia, sino que debe haber una planeación a largo plazo.
Detalla que hay alrededor de 180 soluciones tecnológicas que han desarrollado empresas ecuatorianas en diferentes ámbitos, entre los que están e-commerce, optimización de procesos, gestión de transporte, mecanismos de pago, contabilidad eficiente, etc.
Marco Galarza, director académico de Software de la Universidad de las Américas (UDLA), explica que Tenderati, por ejemplo, es una aplicación que opera como ‘mall digital’ y permite que un negocio electrónico pueda mostrar su oferta. Pueden registrarse no solo iniciativas que comercializan productos, sino profesionales que dan telemedicina o tutorías en línea, teleentrenadores deportivos, entre otros.
Sebastián Albán, gerente de Comunicaciones Unificadas de CenturyLink, explica que los emprendimientos más pequeños pueden optar, inicialmente, por usar redes sociales, luego plataformas y portales web. Una mayor evolución se da cuando se consolida el comercio digital directo.
Todo negocio electrónico necesita plataformas ‘omnicanal’, para que los clientes puedan contactar al negocio por diferentes canales. Permiten dar atención, obtener data, medir la retroalimentación de los consumidores, conocer requerimientos, etc.
Las redes sociales son una vitrina de promoción de los restaurantes
30% es el valor máximo que cobra una ‘app’ de envío como comisión. Foto: Archivo LÍDERES
Ir caminando por la vereda, cruzarse con un restaurante que exhibe su menú en la entrada, ingresar, pedir al mesero la carta y ordenar el plato de preferencia… hoy no es posible. El confinamiento por la pandemia del covid-19 está cambiando radicalmente las estrategias de mercadeo de restaurantes y negocios de comida en el mundo.
No se sabe si las formas tradicionales de hacer marketing volverán. Lo cierto es que la digitalización ya no es una alternativa, sino que se volvió imprescindible, tanto para darse a conocer como para mejorar procesos.
“La vitrina pasó de ser física a 100% virtual, si no estás en el radar digital, difícilmente vas a tener clientes”, dice Diego Proaño, dueño de Catzo Nadador, agencia de marketing gastronómico.
Los primeros espacios que pueden aprovechar los establecimientos gastronómicos o de venta de comida para acercarse a sus clientes son las redes sociales, principalmente Facebook, Instagram y Whatsapp. En una Fanpage, una cuenta de negocios en Instagram o un Whatsapp Business es posible, por ejemplo, cargar el menú o catálogo.
Pero se debe recordar que no se trata solo de vender, sino de generar contenidos de valor, que enamoren al cliente. En esto coinciden Proaño e Ibai Fernández, fundador de Aglaya, firma de marketing e innovación digital.
“La gente se aburre, quiere saber más, no solo conocer tus promociones. En estos momentos les interesa saber cómo estás manejando tu bioseguridad dentro del restaurante y en los envíos a domicilio. Esto lo puedes mostrar a través de un video”, dice Proaño.
Una vez que se permita la presencia de los comensales en los restaurantes, algunas cosas deberán cambiar por bioseguridad. Para evitar que las cartas pasen de mano en mano, el especialista recomienda enviarla mediante un PDF al teléfono celular de los clientes.
Adicionalmente, los que tengan mayor capacidad financiera podrían desarrollar aplicaciones para que los clientes ordenen desde allí sus pedidos dentro del mismo local.
Para una comunicación efectiva con el cliente, el Whatsapp Business se puede anclar al Facebook Messenger, la mensajería de Instagram y a una página web. Por este canal de comunicación, los negocios se pueden apoyar para concretar sus pedidos a domicilio y la forma de pago.
Además, pueden utilizar las conocidas plataformas móviles de envío de diferentes productos que existen en el mercado ecuatoriano este momento.
Proaño opina que algunas de estas aplicaciones no son del todo rentables, por el alto costo de comisión que cobran por cada venta que se concreta, pero sí funcionan como vitrina publicitaria. No obstante, han surgido algunas ‘apps’ locales más flexibles en temas de costos.
La telemedicina se extiende con el aparecimiento de covid-19
La práctica de la medicina es uno de los servicios prioritarios que hoy se mantienen activos, en medio de la cuarentena por el covid-19. Sin embargo, no está exenta de cambios ante una “nueva” realidad, que está afectando todo.
Si bien la telemedicina –prestación de servicios médicos a distancia, mediante el uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TICs)– lleva años en desarrollo, su práctica no ha sido tan extendida en Ecuador.
No obstante, esta alternativa se está volviendo muy necesaria, más aún en medio de una pandemia que exige distanciamiento social. Es por ello que se está poniendo en práctica en el sector público y privado, evitando de esta forma las aglomeraciones de personas en centros de salud.
La telemedicina es útil para dar seguimiento a tratamientos, por ejemplo, en el caso de padecer alguna enfermedad crónica. Hoy en día también se está usando para evaluar síntomas de covid-19.
La videoconferencia o videollamada es el medio más común para ofrecer una consulta a distancia. Hoy son variadas las herramientas que puede utilizar un médico para ello: Whatsapp, Skype, Zoom, entre otras. Para ello, es necesario que el paciente también cuente con alguna de estas aplicaciones. Pero, incluso una llamada telefónica, puede ser el canal utilizado para dar con un primer diagnóstico.
Los profesionales de la medicina también se pueden anclar a plataformas digitales locales, que están ofreciendo el servicio de telemedicina, pero además funcionan como directorio médico, y algunas incluso permiten gestionar el agendamiento de citas con sus pacientes, como es el caso de Doctoricy. Otras alternativas son TeleMédico y Jobra.
Para los consultorios médicos, y más aún para los propios doctores, mantener una activa comunicación con los pacientes es fundamental. Una alternativa para fortalecer este canal es el Whatsapp Business. Entre los beneficios de esta herramienta están que permite configurar un pequeño chatbot interactivo y cargar el catálogo de servicios, explica Xavier Peña, CEO de la consultora Innova Black.
Las consultas a domicilio también se apalancan en la tecnología, puesto que para ser atendido por un médico en casa se requiere solicitar previamente una cita.
Gracias una alianza público-privada, los afiliados activos y jubilados del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) están recibiendo consultas médicas a domicilio, a través del prestador externo Home Care Med.
El programa arrancó en enero pasado en la ciudad de Quito. El grupo objetivo de esta iniciativa vinculada al sector de la salud son adultos mayores (a partir de 65 años), menores de cinco años y personas con al menos 40% de discapacidad.
Al aparecer en Google losnegocios de servicios obtienen una ayuda
5 estrellas es la calificación máxima de un negocio en Google Business. Foto: Archivo LÍDERES
Los servicios de mantenimiento para el hogar, así como la mecánica de autos, se han publicitado por años con las recomendaciones de sus propios clientes, por medio del denominado “boca a boca”.
Pero, los tiempos están cambiando. Para los ‘millennials’ y más aún los ‘centennials’ las referencias por la web son valiosas. De hecho, es común que lo primero que hagan cuando requieren algún servicio de urgencia sea hacer una búsqueda en Google.
Es por ello que estar en el popular buscador puede ser de gran ayuda. Y para ello no se requiere de un portal web. Un pequeño negocio puede registrar su perfil de forma gratuita en Google Business, que permite geolocalizar el establecimiento en Google Maps y dar a conocer algunos datos básicos, como dirección, horarios de atención y número de teléfono para contacto, entre otros.
Además, permite que quienes visiten el establecimiento califiquen el lugar y hagan comentarios, lo que servirá de referencia para quienes realicen una búsqueda en Google. “Esto te ayuda a darte a conocer. La gente se fija en las calificaciones (visibles con estrellas), pero sobre todo en los comentarios”, comenta Xavier Peña, CEO de Innova Black. No obstante, aclara que para aparecer en los primeros lugares si se requiere invertir.
Si es un profesional independiente en oficios como plomería, electricidad, carpintería, pintura, mecánica, etc; otra forma de llegar al cliente es buscar aliarse con ‘startups’ que hoy en día se dedican a ofrecer este tipo de servicios para el hogar, entre otros, mediante aplicaciones móviles.
Una de ellas es Jobra, una ‘app’ que conecta talentos profesionales en una gama de servicios con clientes que están buscando resolver alguna necesidad. Esteban Dueñas, fundador de la aplicación, dice que se hacen controles médicos diarios a los profesionales que están dando estos servicios, de manera de evitar cualquier contagio por covid-19.
Otra opción similar es Aló Maestro, un portal web y aplicativo móvil desde los cuales se pueden solicitar servicios para trabajos de mantenimiento o reparación en el hogar. La plataforma web Yala Servicios se ha enfocado, principalmente, en auxilio vial, pero también ofrece servicios para el hogar; en su web aparecen varias vías de contacto.
La limpieza para el hogar y oficinas también se está ofreciendo a través de aplicaciones móviles. Es una nueva alternativa de hallar clientes para quienes se dedican a este oficio, principalmente las trabajadoras remuneradas del hogar. La ‘app’ Yana se especializa precisamente en este servicio; al momento tiene 12 asistentes activas, en Quito y los valles.
Redes sociales como Facebook y principalmente Whatsapp son vitales para darse a conocer y mantener una comunicación.
Las soluciones tecnológicas, en la era poscovid-19, son claves para la gestión de los procesos administrativos, operativos y comerciales de las iniciativas electrónicas. Software para contabilidad, encuestas de satisfacción en línea y más están en la lista. Foto: Archivo LÍDERES
La biblioteca de Gizella Greene está poblada por libros en los que se habla de nutrición y cocina. Unos están en español y otros en inglés. La mayoría tiene líneas y párrafos subrayados a lápiz o esferográfico. Hay unos que tienen notas al pie de la página y otros pequeñas notas adhesivas de varios colores en sus bordes.
A esos libros, la dueña de SuperFoods Ecuador, vuelve con frecuencia. Ahí están, por ejemplo, ‘Dieta SuperFoods’ de Julie Morris o ‘Everyday Superfood’ de Jamie Oliver, “Tenemos un restaurante vegetariano vegano, en el cual con la chef hemos creado platos que permiten a la gente una alimentación sana pero con sabores tradicionales”, cuenta.
Uno de sus libros preferidos es ‘People before profit’, de Bob Moore, un emprendedor estadounidense al que tuvo la oportunidad de conocer en persona hace unos años, cuando realizó un viaje a Estados Unidos.
Moore es una leyenda viva en el mundo de la producción de alimentos naturales y saludables en Estados Unidos. Lo que más recuerda Greene del fundador de Red Mill Natural Foods es la forma en que se relacionaba con sus empleados. “Se sabía el nombre de toda gente y recordaba a las personas con la que conversa la importancia que tiene para un emprendedor no darse por vencido aún teniendo todo en su contra, como le sucedió cuando la planta de su empresa fue consumida en su totalidad por un incendio”.
Antes de convertirse en emprendedora, Greene trabajó durante 10 años en una aseguradora. Allí alcanzó los cargos más importantes pero siempre sentía que había algo más que hacer. Así que un buen día decidió salir de su zona de confort y renunció.
Greene cuenta que hubo un libro, que aún es parte de su biblioteca, que la ayudó a tomar la decisión de emprender. Se trata de ‘Padre rico, padre pobre’ de Robert Kiyosaki, un clásico del mundo empresarial. “El libro me ayudó a generar un cambio de 180 grados en mi vida. Me impulsó a lanzarme al agua y eso es lo que más le cuesta a una persona que quiere emprender”.
Algo que siempre hace es surtir a su biblioteca de nuevos libros. Uno de las últimas incorporaciones es ‘La cultura en el mundo de la modernidad líquida’ de Zygmunt Bauman. En este libro, que por estos días lo lleva a todas partes, ha encontrado nuevas ideas sobre el comportamiento vinculado al consumo de las personas, en las últimas décadas.
La teoría principal de Bauman, sociólogo polaco que murió en el 2017, era que la sociedad del siglo XXI vive en un mundo líquido, donde todo se mueve con tanta rapidez, que nadie tiene tiempo para reflexionar sobre lo que está haciendo o puedo hacer.
Sentada en medio de su biblioteca y la de su hijo Sebastián (está convencida de la importancia de inculcar el gusto por la lectura desde los primeros años de infancia) cuenta que el último libro que se compró y que comenzará a leer en las próximas semanas es ‘Mi historia’ de Michelle Obama. “Es un libro que me atrae porque cuenta el proceso de superación de una mujer que llegó lejos”. Mi libro de cabecera
‘Padre rico, padre pobre’ Gizella Greene recomienda la lectura del libro de Robert Kiyosaki porque cree que puede ayudar a muchas personas a convertirse en emprendedores. “Les va a ayudar a salir de su zona de confort y buscar su propia realización profesional’.
Gizella Greene junto a la pequeña biblioteca que tiene en su casa. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
En ocho capítulos se concentra la Ley de Emprendimiento e Innovación, aprobada el 7 de enero del 2020 por unanimidad en la Asamblea. El documento contiene 57 artículos, 11 disposiciones reformatorias, tres generales y 14 transitorias.
Definir conceptos, generar institucionalidad, delinear políticas para el fomento del sector emprendedor y la creación de nuevos negocios, impulsar la cultura emprendedora, establecer fuentes de financiamiento alternativas, regular el ‘crowfunding’, definir condiciones laborales y establecer los parámetros para reestructuración de los emprendimientos son los puntos claves.
Andrés Zurita, director de la Alianza para el Emprendimiento y la Innovación (AEI), rescata este último elemento porque establece con claridad el proceso de cierre de negocios y ofrece a la persona la posibilidad de generar otro que sí pueda funcionar.
Asimismo, destaca la creación de la llamada Sociedad por Acción Simplificada (SAS). “La empresa simplificada permite que se la desarrolle de manera unipersonal y ya no es necesario contar con un socio para que funcione. Es más fácil la creación”.
Entre sus observaciones al texto está el hecho que no se hayan incluido incentivos tributarios. Sin embargo, estos ya se han introducido en otras normativas como la Ley de Fomento y la Ley de Simplificación y Progresividad Tributaria. Por ejemplo, en esta última se incluyó el régimen tributario especial para microempresas; entre los beneficios está el pago del 2% del impuesto a la renta sobre los ingresos brutos y no el 25% sobre la utilidad, así como también el hecho que este tipo de negocios en el país ya no están obligados a llevar contabilidad.
Wilson Araque, director del Observatorio de la Pequeña y Mediana Empresa y participante en los debates de la Ley, Cree que el texto se concentra más en crear instituciones vinculadas al sector y no en “acciones”concretas y de aplicación inmediata.
En el capítulo II se crea el Consejo Nacional para el Emprendimiento y la Innovación, la Secretaría Técnica para esta institución y el Consejo Consultivo para el Emprendimiento y la Innovación. El primero tiene como fin fomentar el emprendimiento a través de diferentes estrategias; el segundo, dar seguimiento a las resoluciones del Conein y coordinar acciones; y el tercero, dar asesoría.
Una de las funciones del Conein es formular políticas y lineamientos vinculantes para el acceso al crédito a los emprendedores en el sistema financiero nacional (SFN). Asimismo, dentro de la norma se establece que el SFN, público y privado, deberá desarrollar productos específicos para los emprendedores.
Para Araque los enunciados no son suficientes, sino que la creación de fuentes de financiamiento debe ser inmediatas, pues también lo son las necesidades de los dueños de negocios.
En su capítulo V, la Ley define cuáles son las formas alternativas de financiamiento entre las que están el capital semilla, de riesgo y la inversión ángel. Establece que en el caso que el inversor sea el Estado debe remitirse a los lineamientos establecidos en el Código orgánico de la economía social de los conocimientos, creatividad e innovación, vigente desde el 2016. Allí se establece que el Estado creará programas de financiamiento de capital semilla y de riesgo o podrá aportar fondos ya existentes con el mismo fin.
Para Patricio Alarcón, presidente de la Federación de Cámaras de la Producción, son importantes las regulaciones propuestas, pero también se requieren acciones en la parte laboral. La nueva Ley determina que se creará un contrato de emprendimiento y para ello es necesario un acuerdo ministerial.
Ahora el documento está en manos del Ejecutivo, que tiene 30 días para vetarlo o allanarse. Luego vendrán los reglamentos y Zurita espera que la ley esté aplicable a mediados de año.
‘Hay que ver lo que pasa en mercados que nos aventajan’
Rafael Luque, cofundador de Tipti La ley ayudará tremendamente porque los emprendimientos bien canalizados y financiados pueden impactar de manera importante a la economía de un país. No todos los emprendimientos triunfan, pero generan dinamismo en el mercado, ofrecen trabajo y ayudan a desarrollar y cazar talentos.
Por otro lado, los emprendimientos que triunfan pueden captar mucho capital que se invierte en el país y contribuye con financiamiento externo aplicado.
Rafael Luque maneja Tipti, una start up ecuatoriana que se enfoca en facilitar las compras en el supermercado con una ‘app’. Opera desde fines del 2017. Foto: archivo / LÍDERES
Como beneficios esperamos flexibilidad tributaria. Todos debemos pagar impuestos, pero los emprendimientos, principalmente los de comercio electrónico, se programan para perder dinero durante varios años hasta alcanzar el punto de equilibrio. No puede ser que en este país una empresa que tiene inversiones, fondeos por goteo o por financiamientos, si tiene pérdidas por tres años, tenga riesgo de intervención y liquidación, cuando los planes para llegar a un punto de equilibrio sean a partir del quinto año.
También esperamos mayor flexibilidad en los costos de transacciones bancarias. Para el caso específico del comercio electrónico, los costos del Ecuador para transacciones electrónicas son muy altos; los negocios exponenciales se basan en poder generar el punto de equilibrio por el número de usuarios que se alcance y no por el margen en cada transacción.
Otro tema que debe tenerse en cuenta es el laboral. En el país, los requisitos legales para contratación terminan afectando al emprendimiento. Por eso ciertos emprendimientos no contratan, sino que subcontratan o llegan a acuerdos para los pagos, lo que genera menor estabilidad y capacidad de planificación.
Las decisiones que se tomen en adelante deben incorporar leyes internacionales y reglas del juegos que están guiados por mercados y experiencias de países que nos llevan ventaja.
‘La resiliencia es la fortaleza del emprendedor ecuatoriano’
Daniela Peralvo, cofundadora de Impaqto
Una ley en conjunto con iniciativas que apoyen a impulsar el ecosistema de emprendimiento en el Ecuador puede facilitar el desarrollo de emprendimientos que dejen un impacto positivo y una huella en la economía del Ecuador.
La ley para los emprendedores e innovadores tiene que ser de naturaleza sistemática, es decir que no solo tiene que considerar las normas en sí mismas, sino sus relaciones con las entidades del Estado y los sujetos de la ley.
Daniela Peralvo es una experta en temas de emprendimiento e innovación social. Al frente de Impaqto, capacita a nuevos emprendedores. Foto: archivo / LÍDERES
Se requiere brindar oportunidades para los emprendedores e inversionistas a través de regulaciones que faciliten la creación de fondos de capital con diversos mecanismos de inversión para etapa temprana, los cuales toleren el riesgo y puedan invertir en emprendimientos que están empezando, pero que tienen potencial para crecer.
La simplificación de trámites para que los emprendedores puedan enfocarse en el crecimiento de sus empresas, tal como se plantea en el documento aprobado por la Asamblea, es algo que puede ofrecer un gran beneficio a los emprendedores en el corto y en el mediano plazo.
Existen fortalezas y debilidades. El ecosistema emprendedor ecuatoriano tiene la fortaleza de ser resiliente lo que obliga a los emprendedores a buscar soluciones a los diversos problemas que se enfrentan en su camino.
Una de las debilidades del ecosistema es pensar en pequeño. Tenemos que cambiar eso, se necesita pensar globalmente con un enfoque en escalar para tener un mayor impacto.
Los inversionistas buscan emprendimientos robustos en términos de ‘escalabilidad’ y a menudo los emprendimientos en el Ecuador están en etapas tempranas y no están listos para recibir inversión. Ese es otro punto importante que tiene que mejorar el ecosistema emprendedor.
‘Esperamos que existan facilidades para equivocarse’
Ernesto Kruger, CEO de Kruger Labs
Una ley, per se, no ayuda en nada si es que no se norma y se reglamenta de acuerdo con la realidad que viven los emprendedores. Si ahora hay algo como la nueva ley es bueno y bienvenido, lo importante es que realmente sirva de apoyo, en especial en los temas como el de fondos de inversión, pues en Ecuador es difícil invertir y peor atraer inversión extranjera directa.
Veo algunas falencias que pueden mejorarse: no hay estímulos, ni deducciones de impuestos a los inversionistas. Eso no es bueno ni sirve para darle velocidad al dinero de inversión.
Ernesto Kruger es emprendedor e inversionista. Conoce de cerca el mundo de las start ups. Se interesa en nuevas tecnologías. Foto: archivo / LÍDERES
En lo laboral no se entienden ciertos puntos. Un emprendedor no tiene para pagar la seguridad social en sus etapas tempranas y al crear un contrato laboral debe ser cuidadoso a partir de un número determinado de empleados, de lo contrario no habrá emprendedores, porque el riesgo de liquidar personal es muy alto.
Creo que la seguridad social debe ser para empresasconsolidadas y superando un número de empleados. Lo laboral debe crear un cambio más profundo a todo nivel, eso moverá el Emprendimiento.
Esperamos que existan facilidades para equivocarse, es decir contar con fondos, probar hipótesis y quebrar rápido y fácilmente; eso ayuda al dinamismo de lo que es el emprendimiento e innovación.
En la nueva ley se aborda la reestructuración de emprendimientos, pero creo que se debe reglamentar muy bien y habrá que establecer un mecanismo fácil de implementar.
Entre los puntos buenos de la nueva ley está el crédito del sector público en condiciones preferenciales. Aparecen también las opciones de capital de riesgo y la modalidad de ‘crowdfunding’, que ayudará al financiamiento colaborativo. También se espera que en el futuro se simplifiquen los tramites de propiedad intelectual o la obtención rápida de registros sanitarios. ‘Ecuador permite una rápida retroalimentación de ideas’ Yoder Macas, CEO de Sspot
La idea principal de un emprendimiento innovador es probar y validar las ideas y productos en el mercado lo más rápido posible. En este contexto, la ley de emprendimiento e innovación ayudará a delimitar un panorama apto para poder hacerlo.
Sin embargo, creo que aún veremos fracasos y el camino para emprender todavía será duro. La ley es completamente necesaria. La creación de un emprendimiento innovador radica en probar ideas y convertirlas en productos o servicios comercializables y rentables, no en gastar recursos económicos y de gestión en procesos burocráticos que no aportan en nada al fin de mi emprendimiento: probar y crecer.
Yoder Macas es el CEO y fundador de Sspot, una start up enfocada en la movilidad. La iniciativa gana mercado y suma reconocimientos. Foto: archivo / LÍDERES
Si bien la política de gestión de capitales para el emprendimiento tiene un nuevo horizonte con la ley, eso no garantiza el acceso a ellos. Ya que en el momento de levantar capital hay que tratar de reducir los riesgos principales para los inversionistas como el tamaño de mercado al que un emprendimiento apunta así como el equipo que va hacer que las cosas pasen. Y estos temas se relacionan más al fortalecimiento de una cultura emprendedora especializada.
Ahora esperamos acceso a más mercados. Ecuador es un país para probar ideas, no para comercializarlas. No podemos competir con un músculo financiero grande, pero sí con ideas y emprendimientos con una visión de mercado global. Así como la simplificación de la tramitología que conlleva tener y manejar una empresa.
Ecuador es un mercado que permite tener una retroalimentación rápida de nuestras ideas para saber redireccionar nuestras empresas.
Una debilidad que tiene el ecosistema emprendedor es la falta de visión y especialización que se tiene en el emprendimiento. De nada sirve tener emprendimiento sin innovación.
Las ferias son un espacio para visibilizar los emprendimientos. Sin embargo, la Ley establece que debe generarse una estrategia y programas específicos con esta finalidad. Foto: archivo / LÍDERES
Dado que la próxima década será crucial para lograr un sistema de producción y consumo más respetuoso con el medioambiente, la innovación de las empresas y la concienciación de la ciudadanía en prácticas como el reciclaje resulta cada vez más necesaria, según varios expertos.
Los incentivos para que los ciudadanos participen se van desplegando y en las calles mexicanas ya se observan máquinas que a cambio de entregar las botellas de plástico otorgan puntos o premios y, en paralelo, el ciudadano ya puede pagar servicios como Netflix mediante la entrega de latas de aluminio usadas.
El presidente de la Asociación Nacional de Industrias del Plástico (Anipac), Raúl Mendoza, apunta que tiene que haber “campañas que difundan de manera adecuada la correcta disposición de envases posconsumo, así como la reducción, la reutilización, el reciclaje, para poder gestionar de manera adecuada el residuo”.
“Se requiere de mucha información, mucha conciencia, todos nosotros como ciudadanos requerimos de esa información y conciencia para no generar más desinformación”.
El plástico no es malo por ser plástico, lo que es cuestionable es lo que se haga como ciudadanos y sociedad cuando se termina con su función y uso.
Mendoza considera que la economía circular, basada en la reutilización y en dar valor a lo que aparentemente ya no lo tiene, es una realidad y debe normalizarse en los próximos años si se quieren cumplir los objetivos de desarrollo sostenible.
“Todos estamos virando hacia la economía circular, no es si vamos a subirnos o no como industria y como sociedad, sino cuándo nos subimos”, afirma.
En México, la industria del plástico tiene cerca de 70 años y la transición hacia una “nueva economía de los plásticos dicta que para el 2025 los plásticos de un solo uso deben desaparecer”.
“Si como industria trabajamos en que (los plásticos) sean compostables, reciclables, reusables, o tengan un plan de manejo veremos resultados en 2025-2030”.
Entre tanto, emergen posibilidades para que los ciudadanos vean el reciclaje como algo accesible e intuitivo. En la capital mexicana ya es habitual ver máquinas que, a cambio de botellas vacías, otorgan puntos con los que se pueden pagar servicios digitalmente.
El mexicano Luis Felipe Molina cuenta su caso mientras inserta sus botellas en una de estas máquinas, en un parque del centro de la capital. Lleva cerca de dos meses acudiendo semanalmente a entregar los envases y acumula ya cerca de 78 botellas entregadas.
“Entras a la tienda de Google, descargas la aplicación Innovation y cuando abres tu aplicación te dan un código QR”, explica Molina sobre el funcionamiento de este sistema. La máquina escanea el código y te permite insertar las botellas. Cada botella es un punto.
Además de esto, cabe destacar lo que hace la Industria Mexicana de Coca-Cola (IMCC). La compañía comparte algunos consejos prácticos para incentivar y facilitar el acopio, y reciclaje de envases, para contribuir a conseguir un mundo sin residuos.
Entre ellos, dice que “no es necesario que enjuagues tu botella y mucho menos que le introduzcas objetos porque eso podría dificultar su proceso de reciclaje”.
Recomiendan también aplastar el envase, pues esto “ayuda a reducir hasta 4 veces el tamaño de una botella y hace que su traslado a los centros de acopio sea más fácil”.
Además, indican que las tapas de los envases también se pueden reciclar, por lo que lo más adecuado es entregar las botellas tapadas. Por último, lo ideal es llevar las botellas a un contenedor exclusivo de tereftalato de polietileno (PET).
Reciclaje de PET El caso de la IMCC es uno de los casos de éxito de reciclaje en México gracias a un modelo de acopio de reciclaje. Del 56% de PET que se acopia en México, la IMCC representa el 35%.
Gracias a sus dos plantas de reciclaje, PetStar e IMER, tiene la capacidad de procesar más de 85 000 toneladas al año de este material. De igual forma, el IMCC ha conseguido que el 43% de su portafolio se componga de envases retornables que son una muestra del compromiso con la economía circular, porque por cada envase retornable se dejan de producir 25 con resina virgen.
Destaca también su innovación en el ecodiseño y producción de envases sustentables con la incorporación de resina reciclada, con lo que ha conseguido que millones de sus botellas tengan más de una vida útil posconsumo.
El objetivo de la compañía es que para el año 2030 se recolecten y reciclen el equivalente al 100% de sus envases vendidos para alcanzar un Mundo sin Residuos.
Así como contar con 50% de resina reciclada en todos sus envases para la misma fecha. Esta meta coincide con las políticas que está impulsando el Gobierno de México con su plan Cero Basura, con el reciclaje como uno de los pilares esenciales.
Como un ejemplo de ello, cerca de 3 000 jóvenes participaron desde junio a agosto pasado en el movimiento ambiental Verano Sprite, durante el que se realizaron 10 limpiezas de cuerpos de agua en todo el país, para recuperar espacios verdes y urbanos de gran valor.
En total, se recolectaron más de 24 toneladas de residuos, como residuos orgánicos, botellas, plásticos, vidrio, llantas y colillas de cigarros, entre otros.
Sobre estas iniciativas, Martín Manjarrez, profesor de posgrado en el programa de Pedagogía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), dijo a EFE que “las calificaría como excelentes”.
Pero advirtió que, aunque “es una ayuda, no tenemos que pensar que eso va a ser el hito; o que va a resolver los problemas. Queda mucho por hacer aún”.
Un hombre deposita un envase de plástico en la máquina recolectora. Foto: EFE
Tipti es una ‘app’ que lleva alimentos de la percha a la casa. Este e-commerce tiene cerca de dos años y medio y ha evolucionado: comenzó con siete ‘shoppers’ gastrónomos y ya suma más de 60 en Quito, Guayaquil y Cuenca.
“Ahora trabajamos en las áreas de marketing, operaciones, servicio al cliente, desarrollo… Y estamos buscando inversiones para lograr la expansión nacional e internacional”, dice Saidy Larrea, encargada de operaciones de Tipti.
Esta idea de negocio fue parte de la feria El futuro es joven, que se desarrolló durante la creación de la Alianza por los Jóvenes, hoy 4 de julio del 2019. 22 empresas privadas se comprometieron a mejorar las habilidades y competencias de cerca de 13 000 jóvenes, de entre 18 y 30 años de edad, en los próximos dos años. Solo en 2019 planean llegar a 1 500.
Nestlé lidera esta propuesta, que globalmente ha sido impulsada desde el 2013. La presidenta ejecutiva de la compañía en Ecuador, Virginia Matos de Barría, explica que lograrán esa meta a través de pasantías, carreras de formación dual, impulso al primer empleo y apoyo al emprendimiento.
Cervecería Nacional es parte de la alianza. Roberto Moreno, gerente de asuntos de Gobierno de la compañía, proyecta que generarán 100 empleos, siete planes de carrera acelerada con visión de reclutamiento, 100 pasantías adicionales y 15 mentorías o programas de desarrollo.
Jóvenes más digitales, que tengan visión de negocio, también una visión global y que identifiquen las áreas laborales de su interés para desarrollar sus capacidades. Esos son los atributos que destaca Celso Malipensa, líder de PwC en Ecuador, quien encabeza la alianza. Y hacia eso se enfocan con esta propuesta.
Esta iniciativa cuenta con el respaldo de diez organizaciones, entre ellas instituciones públicas. Uno de sus socios estratégicos es BanEcuador. Su presidente, Jorge Wated, recordó el impulso al emprendimiento juvenil, por medio de créditos que van desde USD 500 a 500 000, con asistencia técnica y apoyo para la búsqueda de mercado.
“Ecuador es uno de países con mayor nivel de emprendimiento, pero también de emprendimientos que mueren en tres años. Sin embargo, cuando hay alguien que ayuda a que no caigan, la probabilidad de que se mantengan es mayor”.
La iCreativa Virtuality ha superado la barrera de los tres años. Este emprendimiento cuencano creó un simulador virtual 100% ecuatoriano y además diseña escenarios personalizados en las áreas de educación, seguridad industrial y entretenimiento.
“Hemos elaborado más de 20 diseños para diferentes marcas, empresas y proyectos; y nos estamos abriendo camino con nuevas empresas”, cuenta Katherine Barros, encargada de Gestión de Proyectos de este negocio que arranca risas y gritos en quienes usan sus visores de realidad virtual.
Virtuality creó un simulador virtual 100% ecuatoriano y además diseña escenarios personalizados en las áreas de educación, seguridad industrial y entretenimiento. Foto: Elena Paucar / LÍDERES