En diciembre, un nuevo reto se presenta para el trabajo remoto y presencial: la gestión del tiempo entre la tarea laboral y las festividades de Navidad y fin de año.
Si bien, para los festejos se deben respetar los días libres por ley, existen factores que se deben tomar en cuenta para tener un correcto desempeño laboral durante las celebraciones.
Sebastián Lima, director de Calidad y Servicio de Adecco, señala que, al igual que en jornada presencial en las empresas, la comunicación y planificación previa permitirá que los empleados organicen su tiempo con relación a las actividades propias de su puesto de trabajo.
En ese sentido, la exigencia deberá estar volcada a la consecución de objetivos propios del área sin dejar de lado la flexibilidad de horario. Sobre todo, porque los días libres de Navidad y fin de año son en mitad de semana.
Según Adecco, en estas fechas, las áreas de recursos humanos y jefes directos deben estar coordinadas para establecer jornadas flexibles para los empleados. Sobre todo, considerando que en muchos casos, parte de la plantilla, está en teletrabajo y la imposición de horarios extensos puede afectar a la motivación y productividad del colaborador, con resultados negativos.
En Ecuador, 444 138 personas trabajan desde casa, tanto en el sector público como privado. Para Lima, en esta época se habla de colaboradores orientados a resultados, por lo que, si las empresas se enfocan en esta competencia, no tendrán que preocuparse por la baja productividad que pudiera darse en Navidad y fin de año, sino generar una experiencia satisfactoria del colaborador.
En la firma Oriflame, por ejemplo, se han establecido ciertos indicadores para medir la productividad en los días previos a las festividades. Patricia Aguirre, coordinadora de Recursos Humanos, explica que se implementó un cronograma de fechas de entregas de reportes e informes, en el caso del personal administrativo. El equipo de bodega, en cambio, será evaluado con aspectos como cumplimiento de entregas, velocidad de repartos, entre otros.
Mariela Rosero, dueña de una tienda de electrodomésticos en Guayaquil, dice que adecuó el horario de trabajo de sus colaboradores, para que se labore durante jornadas más largas, pero que estén libres el 24 y 25 de diciembre.
En este sentido, el reto de las empresas para mantener su productividad no solo se centrará en aplicar herramientas laborales efectivas en las festividades de diciembre, sino en implementar métodos de largo aliento que aseguren una correcta sostenibilidad empresarial en el siguiente año.
Roberto Salas, CEO del Consorcio Nobis y fundador de Gestión Sustentable, señala que hay un punto clave en el que se debe trabajar: una agenda compartida de competitividad y productividad. En ese sentido, el rol de los equipos de trabajo de una empresa (directivos y plantilla) debe estar interconectado para priorizar y definir acciones que hagan la diferencia a largo plazo.
Gonzalo Argandoña, socio líder de consultoría en PwC Ecuador, asegura que para reconfigurar las estrategias se requieren examinar macrotendencias globales y los cambios específicos de cada sector; incorporando la digitalización y herramientas tecnológicas para mejorar la eficiencia y agilidad en los procesos clave.
“Alcanzar los nuevos objetivos a largo plazo requiere reestructurar la filosofía de inversión, su ejecución y capacidades relevantes; para ello será clave digitalizar su modelo operativo y equipar a la fuerza laboral, para atender nuevas demandas”, dice Argandoña.
Para el próximo año, destaca el ejecutivo, se debe considerar que donde hay cambios, hay nuevas posibilidades para actuar, transformar y avanzar.
444 138 personas se encuentran en teletrabajo en el país, en el sector público y privado
Cronogramas con fechas de entrega y cumplimiento de metas, entre los elementos que considerarán las empresas en la jornada laboral de Navidad y fin de año. Foto: www.freepik.es
Julio José Prado,presidente de la Asociación de Bancos Privados, asegura que aunque en el 2020 se espera un crecimiento lento de la economía, la banca no contraerá el crédito, pues está iniciando el año con utilidades más altas y otros indicadores récord.
¿Cómo cerraron los principales indicadores de la banca en el 2019, un año de desaceleración económica? Iniciamos el 2019 con una tasa de crecimiento de 2% en los depósitos, si eso se mantenía, hubiéramos terminado el año con una tasa de contracción de depósitos bancarios de -4% y eso era muy preocupante. Pero cerramos con un crecimiento del 7%. Dos factores ayudaron a revertir la tendencia negativa. Uno fue el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que inyectó liquidez a la economía, y el segundo factor fue que la banca consiguió USD 1 000 millones de bancos internacionales, inversionistas extranjeros, entre otros. Con esos recursos internacionales se capitalizaron USD 400 millones en crédito; es decir, la banca puso más capital para fondear nuevas líneas de créditos. Con esta estrategia, la banca entregó un récord histórico en créditos en el 2019 que llegó a los USD 30 000 millones.
Las condiciones para obtener financiamiento extranjero empeoraron luego del paro de octubre y la escalada del riesgo país. ¿Cómo enfrentará la banca un escenario de bajo crecimiento económico o desaceleración en el 2020?
Si no se daba el paro en octubre y los otros eventos de noviembre y diciembre, la banca hubiera podido conseguir inversiones extranjeras por al menos USD 300 millones más de los USD 1 000 millones. Esperamos que el 2020 sea un año de lento crecimiento y sabemos que hay riesgos, pero la banca comienza el año con buenos indicadores y buena utilidad. El 70% de la utilidad del 2019 se va a revertir en mayor capitalización de los bancos. Las utilidades se convertirán en mayor capacidad de apalancar créditos. En el 2020 esperamos un crecimiento de los créditos y depósitos en el país.
¿Qué requiere la banca en el 2020 para mantener indicadores positivos?
Necesitamos que se concrete la reforma al Código Monetario que quedó pendiente el año pasado. También se requiere la reforma laboral; aunque no es un tema bancario, sí es importante para el sector productivo, y las empresas son nuestros clientes. Con esta reforma se relajarían las condiciones de contratación en el sector productivo y habría mayor crecimiento y demanda de crédito. En la última parte del 2019 sentimos menor demanda de crédito de empresas, sobre todo el crédito orientado a más inversiones y de largo plazo. Las empresas piden sobre todo crédito para capital de trabajo, que es a muy corto plazo.
¿Cómo evalúan el comportamiento de las diferentes líneas de crédito en el 2019?
El crédito tuvo un buen desempeño en el 2019 en general. Hasta diciembre, las líneas de crédito que más crecieron fueron el microcrédito y del consumo, este último, porque hay más demanda de crédito de consumo en hogares, pero también en empresas que quieren seguir manteniendo capital de trabajo, pero no buscan inversiones a largo plazo. Esperamos que el crédito del sector productivo se vea revitalizado. Nos preocupa que el sector que menos demanda préstamos es el de la construcción y el inmobiliario, que en el 2019 solo creció un 3%. Buena parte de los USD 1 000 millones que se consiguieron del exterior fueron para microcrédito, crédito productivo, para mujeres emprendedoras y crédito verde.
Julio José Prado, presidente de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador. Foto: Armando Prado / LÍDERES
¿Qué cambios claves debe tener la reforma monetaria?
Esperamos que la reforma al Código Monetario nos lleve a estándares de la normativa internacional Basilea. La banca no necesita menos regulación, sino mejor regulación. Solo Ecuador y Venezuela no están alineados a la normativa de Basilea. Otro punto a solucionar en la reforma es que el rol de la Superintendencia de Bancos, de la Junta de Regulación Monetaria y otras entidades, no está del todo claro y eso no permite generar confianza; además, el Banco Central necesita ser independiente del Gobierno de turno. También debe haber cambios en el manejo de la liquidez, que en Ecuador es un tema político. Con esos cambios podríamos destinar más recursos al crédito productivo y demás.
¿Qué cambios deben darse en las normas de manejo de liquidez de la banca?
A la banca se le obliga a invertir el 2% de su liquidez en bonos del Estado, el 3% en la banca pública. Esas prácticas no están en línea con las prácticas internacionales. Tenemos paquetes de liquidez que no deberían estar ahí y podrían ir a crédito productivo.
¿Cuál debería ser el perfil del Directorio del Banco Central para dotar al ente de independencia? Nosotros no intervenimos en la redacción de la propuesta del Banco Central sobre cómo debería conformarse el Directorio en el proyecto de ley que se presentó el año pasado. Desde la banca sostenemos que es clave que el Central se vuelva a convertir en un banco de bancos, que sea un banco de reservas, que no sea un banco del Gobierno de turno. Como se elija al directorio le compete a los expertos en temas monetarios. La semana pasada el país cumplió 20 años de dolarización. ¿Qué ha sido lo positivo y lo negativo que ha dejado el sistema a nuestra economía? La dolarización nos permite separar los vaivenes políticos de lo económico. Ahora tenemos un sistema bancario fuerte, técnico y profesional y a pesar de las coyunturas económicas negativas, recesiones, cambios políticos y mala normativa, el país ha mantenido el nivel de crecimiento, se han evitado devaluaciones, inflaciones y no ha habido más crisis bancarias. La dolarización estabilizó la economía, pero no soluciona todos los problemas. Un problema latente es la falta de competitividad.
¿Tras el feriado bancario y la dolarización cómo ha cambiado la banca ecuatoriana en estos 20 años? Los bancos que hicieron malos negocios y tomaron demasiados riesgos sufrieron y desaparecieron. Los que permanecieron son bancos solventes, técnicos y que tienen estandarización igual a la banca internacional. La banca de hoy es muy líquida, tiene los niveles de liquidez más altos de la región. Tenemos bancos fuertes, estables y diversificados. Y los indicadores también han mejorado. Antes de la dolarización la morosidad bancaria estaba por encima del 42% y ahora es del 3%; en 1999 el país tenía 40 bancos y hoy son 24. En depósitos totales antes de la dolarización, el monto era de USD 3 500 millones y actualmente superan los USD 29 000 millones; esto es cerca del 28% del PIB. Hay mucho por hacer. Panamá usa el dólar y tiene un nivel de depósitos por encima del 100% del PIB.
¿La banca está lista para competir con entes extranjeros? ¿Qué falta?
Hemos dicho a las autoridades que estamos listos porque tenemos entidades sólidas y una moneda fuerte. La banca internacional no viene a Ecuador porque no hay una normativa adecuada y el impuesto a la salida de divisas no atrae a los inversionistas. Con los cambios legales que esperamos, la banca de afuera vendría.
Su hoja de vida
Formación. Doctor en Administración y Economía de la Universidad de Lancaster. Estudió en el Instituto de Estrategia y Competitividad de la Escuela de Negocios de Harvard. Tiene un máster de IDE Business School. Se graduó de Economía en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador (PUCE).
Experiencia. Es presidente ejecutivo de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador desde el 2015 y desde año pasado es presidente del Comité Latinoamericano de Innovación Bancaria de la Federación Latinoamericana de Bancos . Fue director de investigaciones y líder del Departamento de Economía de IDE Business School.
Julio José Prado, presidente de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador. Foto: Armando Prado / LÍDERES
El desempleo juvenil es otro reto que enfrenta el Ecuador. Hasta marzo pasado, 9,6% de personas con edades comprendidas entre 18 y 30 años estaban desempleadas, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos. Además, 54 de cada 100 jóvenes tenían un empleo inadecuado y 36 contaban con trabajo adecuado.
Bajo este panorama, empresas privadas, gremios, universidades y entidades públicas manejan programas que buscan mejorar los indicadores de empleo joven.
El pasado 4 de julio, por ejemplo, se presentó en Guayaquil la Alianza por los Jóvenes, una iniciativa privada que agrupa a 22 empresas que están comprometidas en mejorar las habilidades y competencias de cerca de 13 000 jóvenes, de entre 18 y 30 años de edad, en los próximos dos años. Solo en este año se planea capacitar a 1 500 jóvenes del país.
La firma del sector de alimentos Nestlé lidera esta propuesta, que globalmente ha sido impulsada desde el 2013. La presidenta ejecutiva de la compañía en Ecuador, Virginia Matos de Barría, explica que para cumplir con la meta se ejecutarán pasantías, carreras de formación dual, impulso al primer empleo y apoyo al emprendimiento.
En esta firma, el 30% de su nómina está integrada por jóvenes de 18 a 30 años. Este grupo se desempeña en diferentes tareas en áreas como marketing, ventas, operaciones, entre otras actividades. La compañía también cuenta con un programa de pasantías para estudiantes universitarios como una primera oportunidad de conectarse con el mundo corporativo.
Según Nestlé, jóvenes que han iniciado su carrera en la empresa se han desarrollado de manera permanente y hoy en día ocupan posiciones destacadas como directores y gerentes.
Otra compañía que es parte de esta alianza es Arca Continental. Magaly Polo, directora de Capital Humano, sostiene que la firma promueve la inserción laboral con o sin experiencia en condiciones dignas e igualdad de oportunidades. Añade que en lo que va del 2019 el Centro de Reclutamiento de Arca Continental ha vinculado laboralmente a 100 jóvenes. Además, las empresas que conforman grupo (Tonicorp, Inalecsa y Arca Continental) cuentan con cerca de 10 000 colaboradores y más del 20,4% de la nómina son jóvenes. “Ellos ocupan cargos en todas las áreas, incluso gerencias”.
Desde el sector público también existen programas enfocados en el empleo de los jóvenes. El Ministerio de Trabajo cuenta con el programa Mi Primer Empleo que fue creado el año pasado, para una duración de cuatro años. La iniciativa acoge a jóvenes de 18 a 26 años de edad, pertenecientes a instituciones de educación superior.
Desde su implementación, 1 860 jóvenes han sido incorporados en pasantías y prácticas preprofesionales en empresas privadas, gracias a este programa. La meta es beneficiar a 60 000 jóvenes hasta el 2021, según indica el Ministerio de Trabajo.
Según la entidad, al 5 de julio de 2019 estaban vigentes 2,4 millones de contratos laborales. De este total, el 31%, es decir 737 361 contratos vigentes, corresponden personas con edades entre los 18 y 30 años de edad.
El pasado 4 de julio se cumplió en Guayaquil, la feria El futuro es joven, que se desarrolló durante la creación de la Alianza por los Jóvenes. Foto: Elena Paucar / LÍDERES
El Ministerio firmó la semana pasada un convenio con la Universidad Central del Ecuador para que estudiantes puedan realizar pasantías preprofesionales en el sector privado, como parte del programa Mi Primer Empleo. Los estudiantes serán seleccionados de acuerdo con los requerimientos y necesidades de las empresas.
En la Cámara de Industrias y Producción (CIP) también se aplican programas al respecto. El gremio es parte del Consejo Nacional del Trabajo, que propuso reformas laborales para fomentar el emprendimiento y la contratación por jornadas.
La Cámara también impulsa la Corporación Formados, la cual se encarga de proyectos de formación dual para impartir conocimientos técnicos a través de prácticas profesionales en empresas. Este sistema, de origen alemán, permite incrementar la empleabilidad de los jóvenes. Los estudiantes pasan el 50% de su formación en una universidad, recibiendo conocimientos teóricos y el restante 50% lo realizan ejecutando prácticas en empresas formadoras. “Esto garantiza un aprendizaje transversal, aumento la productividad empresarial e incremento de inserción laboral juvenil de manera expedita”, según el presidente ejecutivo de la CIP, Pablo Zambrano.
Para Ingrid Bonilla, consultora en formación dual, el modelo requiere más promoción ya que solo el 25% de estudiantes universitarios conoce el sistema. Esta experta agrega que para generar empleo a través de la formación dual hay que conocer los logros alcanzados en otros países.
Emprendimiento, formación dual y tecnología son ayudas
A escala regional, el desempleo juvenil es un tema preocupante. La tasa de desempleo urbano entre los jóvenes latinoamericanos y caribeños llegó a 13,3%, una proporción que triplica la de los adultos y es más del doble que la tasa general de desempleo promedio en la región, de 6,1%, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Además, 6 de cada 10 jóvenes que sí consiguen ocupación se ven obligados a aceptar empleos en la economía informal, lo que en general implica malas condiciones de trabajo, sin protección ni derechos, y con bajos salarios y baja productividad.
Seis de cada 10 jóvenes que sí consiguen ocupación se ven obligados a aceptar empleos en la economía informal, según estadísticas de la OIT. Foto: Cortesía
América Latina y el Caribe cuentan actualmente con 110 millones de jóvenes entre 15 y 24 años. Y según la OIT, se estima que unos 20 millones de jóvenes ni estudian ni trabajan, “debido en gran parte a la frustración y al desaliento por la falta de oportunidades en el mercado laboral”.
En esta coyuntura, la tecnología, la capacidad de emprender y la formación dual se presentan como tres herramientas para vincular a los jóvenes con el mundo laboral. Para CelsoMalipensa, líder de PwC en Ecuador, se requiere de jóvenes más digitales, que tengan visión de negocio, una visión global y que identifiquen las áreas laborales de su interés para desarrollar sus capacidades.
La OIT recomienda apoyar el espíritu emprendedor de los jóvenes para que consoliden sus iniciativas. El organismo añade que el cambio tecnológico acelerado que se vive hoy en día reta a los sistemas de educación formal y de formación profesional a anticipar los cambios y ofrecer las habilidades no solo técnicas, sino de carácter y socioemocionales que demanda el mundo del trabajo en el siglo XXI.
La misma OIT dice que la formación dual es una modalidad poderosa de formación profesional.
Para Ivo Runge, asesor de formación profesional en la Cámara de Industrias y Comercio Ecuatoriano-Alemana, la formación dual es una inversión en el futuro al nivel de una empresa en tema de empleo. “A largo plazo y con una buena calidad de la implementación, la formación dual resulta útil a las empresas”, dice Runge.
El programa de formación dual se desarrolla en ciudades como Cuenca. Este sistema de capacitación, de origen alemán, permite incrementar la empleabilidad de los jóvenes. Foto: Archivo LÍDERES
La economía de Ecuador crecerá un 1,0 % en 2017, después de haber caído un 1,5 % el año anterior, y se proyecta un avance de 1,3 % en 2018, afirmó el jueves 14 de diciembre la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
La recuperación fue liderada por el consumo privado y, en menor grado, por el gasto del Gobierno y las exportaciones, precisó la Cepal en su Balance Preliminar de la Economía Regional.
El organismo de Naciones Unidas detalló que el resultado deficitario del sector público ecuatoriano (4,7 % del PIB) contribuyó a un aumento de la deuda que ascenderá a un 45,7 % del PIB.
La Cepal aseguró que este mayor nivel de deuda y su rápido crecimiento plantean desafíos de corto y mediano plazo para la política fiscal, dado que podría implicar un ajuste del gasto público, lo que «restaría fuerza a la demanda interna».
En 2017, un escenario externo favorable debido al alza de los precios del petróleo y a una amplia liquidez en el mercado internacional permitió colocar bonos soberanos por 5.500 millones de dólares, lo que sostuvo una moderada expansión del gasto público. La acción también evitó la caída de las reservas internacionales, mantuvo la liquidez del sistema financiero y permitió el aumento del crédito interno en todos sus segmentos (de un 14 % a octubre de 2017).
La baja inflación favoreció un ligero aumento real del salario base unificado, la disminución del desempleo y contribuyó a mantener el consumo.
Para este año se espera un déficit global equivalente al 4,7 % del PIB, en comparación con el 7,4 % en 2016.
El tipo de cambio real efectivo a octubre de 2017 tuvo una variación anual del 14,9 %, aunque la magnitud de este resultado estuvo influida por una variación del 183,3 % del tipo de cambio real bilateral respecto del bolívar.
Las importaciones acumuladas entre enero y septiembre aumentaron un 23,2 % en términos interanuales, mientras que las exportaciones crecieron un 15,5 % en ese mismo período. El total de la inversión extranjera directa (IED) en este semestre fue de 360 millones de dólares, lo que equivale a un aumento interanual del 10 %.
El PIB por habitante cerrará con una baja del 0,5 % en 2017, mientras la inflación debería terminar el año con una tasa del – 0,1 % y el desempleo en un 5,5 %, que representa una disminución del 1,3 % respecto del año anterior.
La balanza de pagos cerrará con un superávit de 192 millones de dólares en la cuenta corriente y un déficit de 231 millones en la cuenta de capital y financiera.
Para 2018, la Cepal espera que Ecuador continúe su crecimiento en un 1,3 %, dado que si se excluyen las amortizaciones de deuda, no se considera una reducción del gasto y en las proyecciones de los precios del crudo se prevé un precio promedio levemente superior al de 2016.
En esta línea, el impulso fiscal será probablemente menor que en 2017, pero el programa de créditos del Banco Central podría compensar parcialmente la pérdida de espacio fiscal.
La baja inflación favoreció un ligero aumento real del salario base unificado, la disminución del desempleo y contribuyó a mantener el consumo. Foto: Referencial
La situación no varía. Ecuador se mantiene rezagado en el Índice Mundial de Innovación. Este año, el país se ubicó en el puesto 92 entre 127 economías analizadas.
Si bien hubo una ligera mejora frente al 2016, cuando Ecuador ocupó el puesto 100, los datos dejan ver que el país se mantiene bastante atrás en esta materia.
La clasificación anual, divulgada por décima vez por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) en colaboración con la Universidad de Cornell de EE.UU. y la escuela de negocios francesa Insead, evalúa el grado de innovación en 127 economías mediante docenas de parámetros, que van desde la presentación de solicitudes de patentes al gasto en educación. Suiza es por séptimo año consecutivo el líder absoluto de la clasificación
En Ecuador, el tema se analiza con detenimiento e inquietud. En la Subecretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación señalan que el índice de la OMPI cuenta con parámetros que miden realidades distintas a las de países como el nuestro, es decir, no son comparables. “Se toman además datos relegados, lo cual genera que los reportes estén desactualizados para muchos países, entre estos el Ecuador”.
Para Camilo Pinzón, director de EDES Business School de la UTPL y vocero de la Alianza para el Emprendimiento y la Innovación, la ubicación de Ecuador en el índice se debe a cuatro variables: la seguridad jurídica, que tiene una percepción negativa; la capacidad de generar conocimiento científico, que tiene mucho por avanzar; la inversión en educación, en especial en bachillerato y universidad, que debe ser mayor; y la poca inversión privada en investigación y desarrollo (I+D).
Según Pinzón, si el país se enfoca en mejorar esos puntos críticos “mejoraremos en el ranking de innovación”. Este analista señala que es necesario que la academia, el sector público y la empresa privada trabajen de manera coordinada. Si ese triángulo funciona, la innovación despunta y se generará riqueza y bienestar. Eso es lo que ocurre en los países que lideran temas de innovación”.
Otra mirada es la de Nelson Baldeón, vocero en Ecuador del Massachusetts Institute of Technology (MIT). Él considera que es complicado hacer innovación con un discurso político, socialista en este caso. “La innovación, la producción y la competitividad se dan con mercados abiertos, acuerdos comerciales, apertura de fronteras”.
El vocero del MIT añade que toda innovación se da de manera espontánea y natural y cita como ejemplo Silicon Valley, en Estados Unidos, donde los investigadores y científicos inventan algo y ven si funciona y si no es así siguen buscando, trabajando: “Claro que hay regulaciones, pero no se puede normar la innovación”.
Al respecto, la Subecretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación cree que la regulación es necesaria, pero reconoce que se debe simplificar la normativa.
Para el presidente de la Cámara de Industrias y Producción, Richard Martínez, un marco jurídico ayudará. “Es oportuno plantear una ley de quiebras de tal manera de que quienes se arriesguen a innovar y emprender tengan un marco jurídico que los respalde”. Creatividad y diversión
Los ejemplos ayudan a entender lo que es la innovación y algunos se presentaron la semana pasada en el foro Disrupción, Innovación aplicada para todos, en Quito.
Un ejemplo que se contó en el encuentro fue el de un equipo de cirujanos que buscaba ser más eficiente y decidió copiar el modelo de trabajo de los equipos técnicos de pits de Fórmula 1. Ellos se demoran segundos en cambiar los neumáticos de los autos.
Este ejemplo sirve para demostrar cómo enfocarse en una sola cosa, trabajar todos en sincronía, bajo presión y con la coordinación de una persona. “Encontrar este tipo de soluciones es innovar, asegura Alex Grots, experto en Design Thinking (método de diseño en empresas) y metodologías ágiles para innovar e implementar resultados tangibles en grandes corporaciones y start ups”.
La innovación en las empresas, a decir de Grots, pasa por fases como la exploración y la explotación de la idea y se trata de tomar decisiones –pese a una gran incertidumbre– sin saber cuál será el resultado.
Para fomentar la innovación en las corporaciones, aconseja Grots, se debe crear una cultura de creatividad en los colaboradores, como lo hacen firmas como Alphabet, propietaria de Google.
Además, las ideas innovadoras deben tener resultados tangibles y, por sobre todo, deben ser divertidas. “La diversión puede cambiar el comportamiento de las personas”, señala el experto. Es decir, todas las ideas, además de ofrecer soluciones, deben ser entretenidas para que las personas quieran usarlas.
Chile y Costa Rica, los mejores de la región
GINEBRA , EFE (I)
Chile y Costa Rica son un año más las economías latinoamericanas más innovadoras, seguidas de México, aunque han perdido posiciones con respecto a 2016, según el Índice Mundial de Innovación, de la OMPI.
Suiza, Suecia, Holanda se ubican en los tres primeros lugares. Les siguen EE.UU., el Reino Unido, Dinamarca, Singapur, Finlandia, Alemania e Irlanda.
Chile se sitúa en el ránking mundial en el puesto 46, lo que significa dos posiciones menos que el año anterior, en tanto que Costa Rica ha perdido incluso ocho puestos, hasta el 53. México sin embargo, el tercer país latinoamericano en el ránking, ha escalado tres posiciones, hasta el puesto 58.
Le siguen Panamá (63), Colombia (65), Uruguay (67), Brasil (69), Perú (70), Argentina (76), República Dominicana (79), Jamaica (84), Paraguay (85), Trinidad y Tobago (91), Ecuador (92), Guatemala (98), El Salvador (103), Honduras (104) y Bolivia, el último país latinoamericano en el ránking, se sitúa en el puesto 106.
En los últimos años, las clasificaciones del Índice Mundial de Innovación en la región no han mejorado significativamente con respecto a otras regiones, y actualmente ningún país de América Latina y el Caribe presenta mejores resultados en innovación con respecto a sus niveles de desarrollo.
El informe destaca que las principales economías de América Latina y el Caribe (Chile, México, Brasil y Argentina) presentan resultados particularmente importantes en lo que respecta a instituciones, infraestructura y desarrollo empresarial.
Chile, México, Brasil y Argentina presentan asimismo buenos resultados en cuestiones relativas a capital humano e investigación, como pueden ser la calidad de las universidades, el número de estudiantes que siguen estudios superiores y la existencia de empresas internacionales de Investigación y Desarrollo (I+D), y a las tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC).
Ello es así “gracias a la calidad de los servicios estatales por Internet, que atraen a un gran número de usuarios”, resalta el texto presentado por la OMPI.
Economías subsaharianas
En general, el índice de innovación revela que sigue habiendo un desfase en la capacidad innovadora entre países en desarrollo y desarrollados, y califica de mediocre la progresión general en actividades de investigación y desarrollo, tanto a nivel estatal como de las empresas.
“La innovación es el motor del crecimiento mundial, cada vez más dependiente de los conocimientos, pero son necesarias más inversiones para promover la creatividad humana y el rendimiento económico”, sostuvo el director general de la OMPI, Francis Gurry.
Un grupo de economías de ingresos medianos y bajos ha obtenido resultados considerablemente mejores en innovación que lo que habría podido pensarse: en total 17 economías pueden calificarse de “artífices de innovación” este año, lo que constituye un ligero incremento respecto de 2016. Nueve proceden de la región de África subsahariana, incluidos Kenia y Ruanda, y tres economías proceden de Europa del Este.
No lejos de gigantes de la innovación como China, Japón (14) y Corea del Sur (11) se encuentran varias economías asiáticas, entre otras, Indonesia, Malasia, Singapur, Tailandia, Filipinas y Vietnam, que se están movilizando para mejorar sus ecosistemas de innovación.
La semana pasada se desarrolló en Quito el foro Disrupción, Innovación aplicada para todos. Allí se habló de la necesidad de crear una cultura de creatividad en las organizaciones. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
Las exportaciones de los países de América Latina se contraerán 5% en 2016, arrastradas por el menor dinamismo de la demanda mundial, reportó este miércoles la Cepal.
“En 2016, el valor de las exportaciones de la región caerá por cuarto año consecutivo y se contraerá 5% debido al menor dinamismo de la demanda mundial por sus productos y la creciente incertidumbre”, dijo el reporte de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
La reducción es, no obstante, sustancialmente menor a la registrada el año previo, cuando los envíos latinoamericanos cayeron 15%.
Las importaciones, en tanto, se reducirán en 2016 un 9,4%, una cifra similar a lo que lo hicieron el año pasado. El comercio intrarregional registrará por su parte una caída de un 10%.
La dinámica del comercio exterior que registra América Latina y el Caribe tiene “el peor desempeño en ocho décadas”, según advierte la Cepal, que resalta “ una coyuntura especialmente difícil para las economías de la región”, por “la combinación de un persistente sesgo recesivo y el proteccionismo”.
“Debemos diversificar la estructura productiva de América Latina y el Caribe para impulsar la recuperación económica. Hay que seguir apostando a la diversificación, a las cadenas de valor, a las cadenas productivas como fundamento y a la integración intrarregional, que hoy son más necesarias que nunca”, declaró Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la Cepal, al presentar el reporte en Santiago.
Para el período 2017-2020, el reporte de la Cepal muestra una modesta recuperación: el valor de los envíos e importaciones crecerá a una tasa media anual cercana al 3%.
Fotografía cedida por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL de la mandataria, Michelle Bachelet (i); junto al Presidente de la República Popular China, Xi Jinping (c); y la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena (der.). Foto: EFE
La mayoría de las bolsas latinoamericanas terminó la jornada del martes 27 de octubre con descensos, en línea con los signos rojos de la sesión en Europa y en Wall Street, y a la espera de los anuncios de la Reserva Federal (Fed) sobre una posible subida de los tipos de interés y el impacto de esa decisión en la economía global.
El parqué neoyorquino finalizó con un retroceso del 0,24 % en el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, y quedó en 17.581,43 unidades, el selectivo S&P 500 cedió un 0,26 % y se ubicó en 2.065,89 enteros y el índice compuesto del mercado Nasdaq perdió un 0,09 % y cerró en 5.030,15 puntos.
El día estuvo marcado por la cautela ante la reunión de política monetaria de dos días que el Comité de Mercado Abierto de la Fed inició hoy, y que mañana dará a conocer si hay nuevas medidas sobre las tasas de interés, próximas al 0 % desde hace siete años.
Sin embargo, a pesar de los descensos de hoy, y si no hay cambios bruscos en los próximos días, Wall Street vislumbra un cierre de mes con el mejor octubre desde 2011, gracias a las fuertes ganancias que ha registrado el parqué neoyorquino en las negociaciones previas.
Wall Street se dejó llevar por una jornada negativa que se vivió al otro lado del Atlántico, donde las principales bolsas europeas registraron pérdidas encabezadas por Lisboa que restó un 2,11 %, seguida de Madrid (-1,49 %), Milán (-1,10 %), París (-1,02 %), Fráncfort (-1,01 %), Londres (-0,81 %) y Zúrich (-0,65 %).
Para completar el día gris en materia de índices bursátiles, los principales corros latinoamericanos se comportaron en línea con Europa y EE.UU. y concluyeron sus negociaciones en terreno negativo, con el descenso más pronunciado en Buenos Aires (1,13 %) pero con Montevideo rompiendo la tendencia al subir un tímido 0,21 %.
El mercado de Sao Paulo bajó un 0,35 % y su índice Ibovespa cerró en 47.042 puntos tras una compraventa por 5.912 millones de reales (unos USD 1.519 millones).
El parqué mexicano restó un 0,75 % y el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) finalizó en 44.698,01 unidades, en una sesión en la que se negociaron unos USD 831,2 millones .
El corro de Buenos Aires perdió un 1,13 % y el índice Merval terminó en 11.693,81 enteros, con un total de transacciones que totalizó unos USD 30,9 millones.
La rueda santiaguina retrocedió un 0,75 % y su indicador principal, el IPSA, quedó en 3.875,79 puntos, al cabo de movimientos por aproximadamente USD 76,59 millones.
La plaza de Colombia descendió un 0,80 % y su índice de capitalización Colcap llegó a 1.238,47 unidades, al totalizar negocios por USD 35,5 millones.
El índice S&P/BVL Perú General de la Bolsa de Lima alcanzó 10.680,11 enteros tras depreciarse un 0,94 %, luego de efectuar operaciones por USD 6.502.813.
En contravía de la tendencia se comportó la ronda bursátil de Montevideo que subió un 0,21 y su índice Imebo se ubicó en 4.113,23 puntos, después de hacer negocios por USD 2.494.603.
La mayoría de las bolsas latinoamericanas terminó la jornada del martes 27 de octubre con descensos. Foto: Archivo
Entre el 2006 y 2014, la pobreza en Ecuador, medida por el consumo, se redujo del 38,3% al 25,8%, según información difundida la mañana de este lunes 13 de abril del 2015 por el Instituto Ecuatoriano de Estadística y Censos (INEC).
En una rueda de prensa conjunta con la Secretaría Nacional de Planificación (Senplades), el INEC presentó los resultados de la Encuesta de Condiciones de Vida 2014, en la cual constan los indicadores de pobreza y desigualdad, además de datos sobre salud, fecundidad y salud materna, uso del tiempo, vivienda, etc.
Pabel Muñoz, titular de la Senplades, señaló que la disminución de la pobreza en los gobiernos pasados se explicaba por el crecimiento, pero no hubo una política redistributiva como la que existe actualmente. Asimismo, destacó que el problema de la pobreza es multidimensional y que existe una estrategia para erradicar la pobreza extrema, la cual se redujo más de la mitad en los últimos ocho años.
En materia de pobreza, sin embargo, las diferencias entre las zonas y urbanas y rurales seguían al cierre del 2014. Si bien la pobreza ha caído en ambas zonas, en las áreas rurales afecta al 47,3%, mientras en las zonas urbanas al 15,5%.
Pabel Muñoz, titular de la Senplades, señaló, en rueda de prensa, que existe una estrategia para erradicar la pobreza extrema en el país. Foto archivo: Vicente Costales / El Comercio
IBM destacó este 4 de marzo el «gran momento de Colombia«, que es su tercer mercado en América Latina después de Brasil y México. Ratificó su apuesta de seguir invirtiendo en el país.
«Hoy uno mira en Colombia todos los indicadores y son fabulosos para hacer negocios», declaró el presidente de IBM en Colombia, Álvaro Merino, en el marco de la Convención 2015 Open Your Mind: Razones para creer que la compañía celebra en Cartagena.
Merino señaló que el país «tiene un potencial de crecimiento muy grande» y mencionó indicadores como la penetración de internet, el uso de banda ancha, la descentralización, la ubicación geográfica, además de acuerdos como la Alianza del Pacífico -que integra con Chile, México y Perú-, además del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en los últimos años.
«IBM va a tener inversiones muy por encima de otros países de la región, justamente por este potencial que existe en el país», agregó el directivo, sin precisar montos o detalles. Merino indicó que IBM, que está en Colombia hace 75 años, «ve la posibilidad de generar un círculo virtuoso, de beneficios» para los ciudadanos, el Gobierno y las empresas.
Resaltó además que para la firma tecnológica la «expectativa de crecimiento» en Colombia «está muy por encima del resto de países de Latinoamérica».
La convención de IBM reúne durante dos días a un centenar de ejecutivos y expertos en tecnología, en un espacio que, según Merino, les permite analizar el sector, compartir experiencias y evaluar las tendencias del mercado.
Cartagena acoge la Convención 2015 Open Your Mind: Razones para creer. Foto: Yomaira Grandett/ GDA
El sistema bancario ecuatoriano y sus indicadores financieros están considerados como ‘saludables’ y dentro de los patrones adecuados, según la información obtenida en entidades del sistema y reguladoras. Sin embargo, los analistas financieros tienen opiniones divididas.
Un sector cree que las regulaciones ocurren en un momento inoportuno cuando se muestra una evidente desaceleración de la economía. Otro sector, opina que en los últimos años se ha fortalecido el patrimonio de la banca. En el largo plazo, las medidas podrían provocar una reducción del número de Instituciones Financieras (IFIS) y el afloramiento de otras más grandes y más sólidas.
Bajo el panorama actual, las cifras muestran un aumento del volumen de crédito del sistema financiero privado. Según cifras del Banco Central del Ecuador, el crédito de las IFIS fue de USD 1 493 hasta julio del 2011 pero aumentó a USD 1 805, en el mismo período de este año.
Para el analista financiero Alberto Acosta Burneo, el Gobierno fortalece a la banca pública y frente a la privada aplica una política de mayores controles. “Estas políticas reducen el ámbito de acción de la banca privada frente a la estatal como es el caso del financiamiento hipotecario”.
Acosta dice con respecto al aumento del Fondo de Liquidez, es desde todo punto de vista positivo. Sin embargo, argumenta que no es el momento adecuado. “La economía está perdiendo impulso, en comparación con el año pasado que fue fuerte. Esta medida retira liquidez de la banca”, cita Acosta.
Para Mario Burbano, representante de Mutualista Pichincha, los indicadores de la banca son positivos y la solvencia patrimonial es más alta que nunca. “El portafolio ha crecido sin deterioro de su calidad”.
Burbano cree que todavía no se ha tenido mayor éxito en lograr una profundización financiera en la sociedad ecuatoriana y esta es una tarea pendiente.
En el largo plazo, el representante de la mutualista dice que el proceso de profundizar el control del riesgo operativo por parte de las autoridades va a continuar.
Carlos Morlás es decano de la Facultad de Economía de la Universidad Ecotec, en Guayaquil. Sobre el conjunto de reformas al sistema financiero comenta que el Gobierno busca algunos fines. Cita el caso del Fondo de Liquidez, mediante el cual se busca fortalecer la dolarización, aumentar el circulante e inyectar más dólares en la economía. Los fondos servirían para financiar proyectos en el Ecuador.
Morlás considera que es verdad que hay una cierta desaceleración de la economía, pero eso tiene más que ver con la incertidumbre que existe en el sector privado.