Las innovaciones disruptivas tienen el potencial de cambiar industrias enteras. Los jugadores más sagaces hoy suelen provenir del mundo de la tecnología. Se puede considerar a Uber dentro de esta lista. Con un potente modelo de negocio rompió el esquema tradicional del taxismo. A los gremios tradicionales del sector les cayó por sorpresa la irrupción y éxito de la empresa estadounidense.
En Colombia, una entidad del Estado ordenó a Uber cesar la prestación de sus servicios. La probable salida de la empresa del mercado colombiano provoca opiniones divididas. En muchos casos se pasa por alto que la causa para el descontento de los gremios son los costos de operación más bajos que tienen los conductores de Uber.
Hace muchos años que la mayoría de Estados se hicieron del control total del transporte colectivo. El cual ejercen a través de regulaciones y tasas impositivas. En el camino crearon burocracia especializada y fortalecieron a los poderosos gremios. Esto dispara los costos de operación para los taxis “legales”. Al final, los usuarios pagan la factura.
Como una alternativa de entrega de comida a domicilio llegó a Ecuador Uber Eats. Se trata de una nueva línea de la compañía internacional de transporte Uber.
La multinacional lanzó la aplicación en 2015 en los EE.UU.
Los restaurantes que concretan una alianza con Uber Eats obtienen servicio a domicilio a través de los repartidores de la empresa. Según Cristina Villareal, gerente de comunicación de la aplicación, a través de este convenio los restaurantes pueden acceder a más clientes y darse a conocer.
Actualmente, Uber Eats se encuentra en 250 ciudades del mundo, en 35 países. En América Latina está en México, Panamá, Costa Rica, Perú, Colombia, etc.
A mediados de este mes inició sus operaciones en Ecuador. Los clientes pueden encontrar más de 270 restaurantes; ahora solo se da el servicio en Quito y Guayaquil, aunque más adelante se prevé trabajar en otras ciudades del país. Villareal explica que los repartidores trabajan de manera autónoma. Esto permite a las personas organicen su propio horario de trabajo, según su disponibilidad. “Creemos que con Uber Eats podemos llegar a ser un motor y ayudar a dinamizar el tema del auto emprendimiento” comenta.
Para hacer uso de la plataforma digital los usuarios deben descargar la aplicación o visitar el portal web UberEats.com, elegir el plato de acuerdo al restaurante de preferencia, hacer el pedido y concretar el pago. El usuario puede rastrear al repartidor en tiempo real.
La variedad de platos típicos, la amplia oferta de restaurantes y la cultura gastronómica fueron los aspectos que motivaron a la empresa a operar en Ecuador.
Le atrajo que este país esté entre los 10 países más emprendedores del mundo, según Global Entrepreneurship Monitor (2017 – 2018). También tomaron en cuenta que en diciembre del 2017 existían 373 871 desempleados; la mayoría de hasta 30 años.
Las personas que quieran dar el servicio de delivery deben ser mayores de edad y contar con un medio de transporte (bicicleta, moto o vehículo) para movilizar los alimentos a los clientes.
Al conductor se le entrega una identificación y se ofrece un seguro para los repartidores. A los restaurantes registrados dentro de la aplicación móvil se les entrega una tablet con la que pueden procesar los pedidos. Asimismo, sirve como canal de comunicación entre los comensales y los socios repartidores.
Uber Eats trabaja con grandes y pequeñas cadenas de alimentos en el país. Algunos de los restaurantes en Quito con los que mantienen alianza son Papa John’s, Burger King, Subway, Go Green, Wok to Walk, Freshii, Dunkin Donuts, Pizza Hut, El Corral, Inca Burger, El Chacal, Fritadas Amazonas, entre otras. Mientras que en Guayaquil cuentan con El Capi, Naturissimo, Nice Lab, Ceviches To Go, Yogurt Persa, Munchies, Puerto Moro, entre otros.
Andrea Segura es una cliente que solicitó comida a domicilio a través de la aplicación. “El servicio es eficiente y el personal es capacitado para la entrega”.
Carlos Loaiza, propietario de “Típico de vos” asoció su restaurante con Uber Eats. “La empresa nos permite promocionar nuestra marca en el mercado nacional”.
Uber Eats permite realizar pedidos de comida a domicilio a través de su aplicación móvil en Quito y Guayaquil. Foto: cortesía Uber Eats
La red de transporte privado Uber perderá su licencia para operar en Londres a partir del 30 de septiembre, informó este viernes 22 de septiembre, Transport For London (TfL), el ente regulador del transporte de la capital británica, pero la empresa ya anunció que apelará la decisión.
Según esta entidad, a Uber no se le prolongará la licencia de operador de transporte privado cuando expire la que dispone a fin de mes. Tras realizar una investigación, Uber «no sirve ni es adecuada» para operar en Londres, añadió el organismo, alegando que no muestra suficiente responsabilidad en lo que se refiere a la seguridad de los pasajeros.
Los principales problemas incluyen el modo en que Uber reporta agresiones criminales serias y su forma de revisar los antecedentes penales de los nuevos conductores. TfL también se mostró preocupado por Greyball, el software utilizado por la empresa, que «podría ser usado para impedir el pleno acceso de entes reguladores y para evitar que las autoridades hagan cumplir las regulaciones y la ley».
«Todas las empresas en Londres tienen que acatar las normas y mantener estándares altos que esperamos, sobre todo cuando se trata de la seguridad de los clientes», señaló el alcalde de Londres, Sadiq Khan, en un comunicado. «Proveer un servicio innovador no puede ser a expensas de la seguridad de los clientes», agregó el alcalde.
Ahora la empresa estadounidense tiene 21 días para apelar la decisión y podrá seguir operando mientras dure el proceso. El gerente general de Uber en Londres, Tom Elvidge, ya anticipó que la compañía apelará para «defender el sustento de los conductores y la elección de millones de consumidores londinenses que usan la aplicación». Más de 40.000 personas se quedarán sin trabajo por esta decisión, dijo Elvidge en un comunicado, en donde también destacó que la empresa está comprometida con la seguridad y que sus conductores son sometidos a las mismas revisiones de antecedentes que aquellos que manejan los famosos taxis negros de la ciudad.
«Uber opera en más de 600 ciudades en todo el mundo, incluyendo más de 40 pueblos y ciudades aquí en el Reino Unido. Esta prohibición le mostrará al mundo que, lejos de estar abierto, Londres está cerrado a empresas innovadoras que dan la opción de elegir a los consumidores», señaló. En Londres operan también otros servicios privados de transporte. La aplicación MyTaxi, que pertenece a Daimler, aprovechó la decisión de TfL para ofrecer un descuento del 50 por ciento a los usuarios hasta fines de septiembre.
Uber, fundada en 2009 en Estados Unidos, ofrece servicios de transporte colectivo en 56 países. Foto: Archivo.
Desde este 13 de julio de 2017 a las 16:00, la aplicación para teléfonos móviles Uber comienza a funcionar en Ecuador. Actualmente, este servicio opera ya en más de 600 ciudades en 77 países del mundo.
Uber está disponible para teléfonos inteligentes con los dos principales sistemas operativos: iOS y Android. Saulo Passos, director de comunicaciones para Uber en Latinoamérica, asegura que la tecnología de esta aplicación permite conectar a ciudadanos que necesitan un medio de transportación con personas que están en capacidad de proveerlo.
Mientras que en varios países forma de pago predominante es mediante el uso de tarjeta de crédito, los conductores de Uber en Ecuador sí aceptarán dinero en efectivo. Inicialmente no estará habilitado el pago mediante tarjeta de débito. Passos, no obstante, asegura que actualmente se está trabajando para habilitar este método de pago en el país.
Tras instalar la aplicación y realizar las configuraciones iniciales de registro de usuario, Uber despliega un mapa de la ciudad y ubica al usuario mediante las herramientas de geoposicionamiento. Desde ahí, la Uber hace la pregunta ¿A dónde vas? Para que los usuarios puedan colocar el punto hacia el que se van a dirigir.
Esta ubicación es compartida con los conductores registrados en Uber que se encuentren cerca de la del usuario,
estableciendo así la conexión para que se efectúe el viaje. Una vez aceptada la carrera, la ‘app’ despliega al usuario los nombres del conductor que lo va a recoger, así como el color, marca y placas del auto que este utiliza. La aplicación funcionará inicialmente en las ciudades de Quito y Guayaquil.
Saulo Passos director de comunicaciones corporativas de UBER para América Latina Foto Pavel Calahorrano / LÌDERES
El alcalde de la ciudad Jaime Nebot afirmó que no otorgará el permiso a la compañía internacional de taxis, que funciona a través de una aplicación móvil y que permite su localización GPS.
En la sesión de concejo de este 23 de septiembre del 2016, el Personero municipal reveló que la decisión va encaminada a proteger “la economía” del gremio de los taxistas locales.Directivos de Uber estuvieron días atrás en la urbe conversando con las autoridades porteñas para intentar abrir camino en el Puerto Principal, en la Costa ecuatoriana.
La compañía nació en Estados Unidos en el 2009 y actualmente tiene presencia en ciudades de Colombia, perú, Argentina y está por ingresar a Bolivia.
Durante la sesión de Concejo también se decidió también, en segundo y definitivo debate, la exoneración por una sola vez del pago de la segunda revisión técnica anual a la que están obligados los taxistas locales.Nebot aclaró que el tema surgió ante la “crisis que atraviesa el país” y que afecta particularmente en la ciudad, a 15.000 taxistas regulados.r en Guayaquil
Uber, fundada en 2009 en Estados Unidos, ofrece servicios de transporte colectivo en 56 países. Foto: Archivo.
La empresa de transporte compartido Uber comenzó este 14 de septiembre del 2016 a ofrecer viajes con automóviles sin conductor en Pittsburgh (Pensilvania), el primer ensayo con clientes habituales en Estados Unidos.
Por el momento, serán cuatro Ford Fusion los que circulen por las calles de Pittsburgh y ofrezcan el servicio habitual de transporte en la primera prueba real de la compañía de vehículos sin conductores.
Al ser una prueba, estos primeros viajes serán gratuitos y se ceñirán al centro de la ciudad. En los vehículos irán también un ingeniero y un empleado de la empresa para intervenir en caso de que el sistema automático cometa algún error.
«Hoy estamos invitando a nuestros pasajeros más fieles en Pittsburgh a ser los primeros en experimentar el futuro. Si un coche autónomo de Uber está disponible, lo enviaremos junto con un conductor de seguridad para asegurar que el viaje transcurra sin problemas», afirmó Travis Kalanick, cofundador de la empresa en un comunicado.
Kalanick remarcó que «las pruebas en carretera son cruciales para el éxito de esta tecnología» y «crear una alternativa viable a tener un coche en propiedad es importante para el futuro de las ciudades».
Uber espera ofrecer viajes al aeropuerto en meses y en un año cubrir el área metropolitana completa de Pittsburgh, donde viven 300 000 personas.
La empresa radicada en San Francisco marcó como ambicioso objetivo sustituir en el futuro sus más de 1,5 millones de conductores por automóviles automáticos.
«Realmente creo que la cosa más importante que van a hacer los computadores en los próximos 10 años es conducir coches», señaló Anthony Levandowski, líder del departamento de vehículos autónomos de la empresa.
La firma seleccionó a Pittsburgh como centro de su departamento de conducción automática ya que es sede de la Carnegie Mellon University, uno de los principales institutos de investigación en esta tecnología, y por las peculiaridades geográficas de la ciudad con colinas, puentes y mal tiempo que hacen del lugar un perfecto campo de pruebas.
Los primeros viajes serán gratuitos. En los vehículos irán un ingeniero y un empleado de la empresa para intervenir en caso de que el sistema automático cometa algún error. Foto: EFE
El servicio estadounidense de transporte vía teléfono inteligente Uber aceleró su marcha hacia el desarrollo de automóviles sin chofer. En Estocolmo el constructor automotor sueco Volvo anunció la semana pasada una alianza con Uber para ofrecer desplazamientos en automóviles autónomos, para lo que prevén una inversión conjunta de USD 300 millones .
“Esto implicará que Uber añadirá los sistemas de conducción autónoma que desarrolló él mismo con un vehículo Volvo como base”, precisó el grupo sueco en un comunicado.
Uber y Volvo ya se habían aliado en Estados Unidos fundando un ‘lobby’ favorable a los automóviles conducidos mediante ordenador, junto a algunos de sus competidores, Lyft en el caso del primero y Ford en el del segundo, así como junto al gigante de Internet Google. Ambas sociedades se encuentran muy adelantadas en el desarrollo de estos automóviles del futuro, que permitirán a sus pasajeros desplazarse hasta sus destinos sin necesidad de tomar el volante.
Volvo prueba un auto autónomo en las calles de la ciudad sueca de Gotemburgo y Uber hace lo mismo en Pittsburgh, Estados Unidos, con un modelo fabricado por la estadounidense Ford. La alianza Uber-Volvo tendrá rápidamente resultados prácticos y a fin de mes comenzará en Pittsburgh un proyecto piloto.
El auto tendrá una persona en el asiento del acompañante pero ella no conducirá; simplemente vigilará las operaciones. Uber no dijo cuántos autos serán desplegados en esos tests, pero el diario Wall Street Journal mencionó que serían una centena de Volvo XC90.
Según Uber, no solo experimentará con Volvo sino también con autos de Ford. “Más de un millón de personas mueren en accidentes de auto cada año. Esas son tragedias que las tecnologías de conducción autónoma pueden ayudar a evitar. Pero nosotros no podemos hacerlo solos”, dijo el presidente de Uber, Travis Kalanick “Volvo es líder en términos de seguridad”, añadió.
La sueca Volvo participará de la alianza con el modelo XC 90. Foto: Cortesía Volvo
Usa lentes de marco grueso, luce una barba densa y acude a su trabajo en bicicleta. Bernardo Montúfar es un ‘millennial’ ecuatoriano que brilla en el extranjero. Y quién mejor que un representante de la generación Y para encargarse de las operaciones y logística en Centro y Suramérica (Costa Rica, Panamá Colombia, Perú, Argentina, Uruguay y Chile) de una de las firmas más disruptivas de los últimos tiempos, a escala global: Uber.
Esta ‘startup’ es considerada como una revolución en el transporte urbano. Su plan es simple: solo se necesita un auto propio, licencia y los correspondientes seguros para registrarse como conductor de Uber. Técnicamente cualquiera puede serlo. Y cualquier persona con un teléfono inteligente puede bajar la aplicación y convertirse en pasajero pagando a través de la misma.
Pero la influencia de Uber va más allá del transporte. Esta firma es una de los precursoras exitosas de un modelo denominado como economía colaborativa: personas que adquieren un bien o servicio a otras que están dispuestas a ofrecerlo de manera eficiente. Un ganar-ganar. Uber lanzó su aplicación, en 2010, en San Francisco (EE.UU.) y desde entonces no ha parado de crecer. Ahora está presente en 462 urbes a escala mundial. Hace un par de semanas celebró 1 billón de viajes alrededor del planeta
En principio, Uber incluso fue prohibida en Alemania y en varias capitales del mundo taxistas han protestado porque han sentido que su negocio está en peligro.
De hecho, las últimas protestas ocurrieron hace dos meses en Argentina y Chile, territorios en los que Montúfar coordina el equipo de conductores.
“Es una oficina muy abierta, no hay oficinas separadas y trato jerárquico”. Así describe Montúfar el ambiente del centro de operaciones de Uber en Bogotá, donde trabaja desde hace nueve meses.
La firma tecnológica lo tenía en la mira desde que trabajaba para Citibank Colombia, en el área de derivados financieros. Uribe llegó a la banca apalancado en su ingeniería en sistemas que la obtuvo en la Universidad de Notre Dame (EE.UU.) y un MBA de Wharton, Universidad de Pensilvania, también en EE.UU.
Montúfar se inició en el área de analítica de datos en la banca, “entre corbatas y cifras”. Cuando terminó la secundaria, en 1998, tenía tres opciones para estudiar: ingeniería en sistemas, ingeniería eléctrica o ingeniería de computación, que es una mezcla de las dos. Se decidió por la última porque le permitía elaborar hardware y software.
Andrés Burbano, su amigo desde la infancia, comenta que desde la infancia Montúfar fue un chico brillante y muy cercano a las computadoras. Burbano, actual presidente de la Asociación Ecuatoriana de Software, recuerda que los dos compartían ese gusto por la informática y por los juegos en computadores.
Gracias a su capacidad, rememora Burbano, a Montúfar le adelantaron momentáneamente de curso. “Pasó a un curso superior por sus conocimientos avanzados, pero regresó porque no era conveniente para él, porque estaba separado de sus amigos”.
Cuando concluyó sus estudios universitarios, Montúfar quiso vincularse a empresas relacionadas a la industria de la robótica. Sin embargo, terminó en el sector bancario, en el área de finanzas cuantitativas.
En ese ámbito lo conoció Diego Borrero. Él fue su jefe en Alpax, banco de inversión. Borrero sostiene que Montúfar es un joven ejecutivo con alto potencial. “Independientemente del entorno en el que se encuentra, es el tipo de persona que siempre destaca. Lo ha hecho a lo largo de su vida académica y profesional, moviéndose siempre dentro de ambientes de excelencia y altamente competitivos”, dice Borrero.
Pero no todo es trabajo para Montúfar. Sus horas libres las dedica a la cocina, uno de sus pasatiempos. Con su acento —una mezcla de, colombiano, quiteño y rezagos de inglés— cuenta que le gusta preparar platos ecuatorianos como menestra o cebiches.
Alfonso Amaya es su compañero en Uber. Este colombiano cuenta que trabajar con Montúfar es agradable. “El ambiente es muy distendido y de mucha creatividad. Estamos encargados de que la interacción entre conductores y pasajeros fluye bien”, detalla Amaya en una conversación telefónica.
Su CV
2004. Analista financiero en Bank of America. 2005. Bachelor of Science, Computer Engineering de la Universidad de Notre Dame. 2006. Estuvo en el banco de inversión Alpax, 2011. Trabajó en derivados financieros en Citibank, en Colombia. 2011. Obtuvo un MBA en la Universidad de Pennsylvania (EE.UU.).
Servicios para ciclistas, mascotas, etc.
Redacción Quito (I)
Para los usuarios colombianos, Uber es una aplicación con diferentes servicios. Permite desde la adopción de un cachorro a pedir un rescate en caso un incidente durante un paseo en bicicleta. Esta plataforma se ha convertido en un laboratorio de experimentos para nuevos productos de la región.
Ahora la firma cuenta con servicios como Uber Black, un servicio ‘premium’ con autos espaciosos, o Uber X, la versión más económica y la más polémica. Consiste en que un particular ofrece el servicio de transporte sin distintivo alguno y sin necesitar licencia adicional.
El portafolio de servicios va desde Uber Pet, que permite llevar al pasajero una mascota, muy práctico si se tiene que ir al veterinario, a Uber Bike, que consiste en subirse a un coche que lleva un transporte especial para bicicletas. Si se pincha la llanta de la bicicleta, si gana el cansancio o se hace de noche la aplicación permite conseguir un vehículo con un cargador de bicicletas.
Otra opción, Uber Van, sirve para reservar una furgoneta de entre siete y nueve plazas. Mientras que Uber English permite moverse en vehículos de alta gama pequeños. De vez en cuando hacen promociones temporales, como Uber Ice Cream, para reparto de helados. O Uber Puppy, una iniciativa que promueve la adopción de cachorros de perro.
El conductor lleva a la mascota candidata para que juegue con el amo potencial. Si ambos se gustan y el dueño cumple los requisitos, basta formalizar un certificado para que el perro se quede.
Bernardo Montúfar trabaja en las oficinas de Uber en Bogotá, la base de operaciones para América Latina de la firma que nació en EE.UU. Foto: Paúl Rivas / LÍDERES
El gigante estadounidense Uber anunció ayer, 12 de febrero, que obtuvo fondos por 200 millones dólares para extender en mercados emergentes su servicio de transporte que enfurece a taxistas de todo el mundo.
El aporte fue hecho por el grupo inversor LetterOne (L1), que encabeza un magnate ruso, según un comunicado conjunto.
“Nuestra meta es simple: brindar un servicio confiable y a precios asequibles para todos con solo apretar un botón”, dijo el jefe ejecutivo de Uber, Travis Kalanick.
“El conocimiento de los mercados emergentes que tiene L1 será crucial para acceder a más ciudades y abrir más posibilidades para usuarios y conductores”, añadió.
Mijail Fridman, el multimillonario ruso que preside L1, dijo estar entusiasmado con su asociación con la compañía estadounidense.
“El altamente talentoso equipo de dirección de Uber tiene la necesaria visión y competencia para hacerla una de las compañías más prominentes del mundo en negocios tecnológicos”, indicó Fridman, cuyo holding abarca empresas financieras, de telecomunicaciones y de energía.
Uber, cuya base está en San Francisco, permite conseguir transporte a través de una aplicación de celular. Se ha expandido por más de 60 países despertando generalizadas protestas de los taxistas y autoridades locales.
La empresa tiene un valor de entre 50 000 y 60 000 millones de dólares.
Uber, fundada en 2009 en Estados Unidos, ofrece servicios de transporte colectivo en 56 países. Foto: Archivo.
El Ayuntamiento de Los Ángeles aprobó hoy (25 de agosto) el plan que permitirá a empresas como Uber y Lyft recoger viajeros en el Aeropuerto Internacional de Los Ángeles (LAX), que se convertirá en el más grande de EE.UU. en aceptar este tipo de servicios de bajo coste.
La medida fue aprobada con 9 votos a favor y 6 en contra en una sesión del pleno municipal en la que volvió a quedar patente la desconfianza de numerosos concejales sobre las garantías que ofrecen esas compañías que compiten por el negocio del taxi y que conectan conductores con viajeros a través de una aplicación de móvil.
«Es una gran victoria para los pasajeros, a los que se les dan más opciones seguras y convenientes para llegar hasta su casa desde el aeropuerto», aseguró el concejal Mike Bonin, que representa al distrito 11, en el que se encuentra LAX, y es uno de los principales valedores de esta iniciativa respaldada también por el alcalde, Eric Garcetti.
Los opositores señalan que existe un doble estándar cuando se trata de regular las actividades de los conductores de Uber y Lyft frente a las compañías de taxi tradicional, sometidas a unos controles más estrictos de las autoridades.
Como parte de la nueva normativa, se tomarán las huellas a los chóferes de Uber y Lyft para confirmar que no están fichados por las fuerzas del orden. Además, esas empresas deberán llevar control de las operaciones que realizan sus conductores en el aeropuerto.
Según el diario ‘Los Angeles Times’, si Uber y Lyft cumplen con las exigencias municipales podrían empezar a recoger viajeros en el aeropuerto en cuestión de semanas. Hasta ahora, estas compañías únicamente podían llevar viajeros hasta las terminales.
LAX es el segundo aeropuerto más importante del país en número de viajeros, solo superado por Hartsfield-Jackson en Atlanta, y el quinto del mundo, aunque carece de servicios de tren o metro y la única forma de desplazarse hasta las instalaciones es por carretera.
En California, estos servicios de transporte de bajo coste ya se aceptan en aeropuertos como el de San Francisco, San Diego y Santa Ana.