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  • Las pymes buscan estrategias para enfrentar los nuevos retos

    Giovanni Astudillo y Redacción Quito. (I) redaccion@revistalideres.ec

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    La empresa que sobreviva a la pandemia en América Latina deberá ser más productiva, innovadora, incorporar nuevas tecnologías y aprovechar la transformación digital y el teletrabajo. Esa fue una de las conclusiones del vicepresidente de Sector Privado de CAF, Jorge Arbache.

    Él participó de la conferencia Nueva economía y el futuro de las pymes latinoamericanas, que organizó este banco de desarrollo internacional y que se cumplió la semana pasada, en México.

    Para Arbache, este tipo de firmas tendrán un mayor y más acelerado crecimiento en el futuro que las tradicionales. Pero -dijo- se requieren políticas públicas para acceder a capacitación y tecnología. El 2020, la CAF redireccionó líneas de crédito por USD 1 600 millones, para apoyar a los bancos de desarrollo locales en sus estrategias con estas empresas.

    Además, apoya con programas de innovación, patentes, internacionalización, clúster e integración dentro de cadenas de valor.

    Arbache dijo que, debido a la pandemia, las pymes de la región han incursionado en nuevas tecnologías para reducir costos, ampliar mercados y aumentar la productividad, “pero no todas han tenido ni tienen la capacidad para acceder. Eso ocasionará una brecha entre las mismas pymes”.

    Para Arbache, en la actualidad hay oportunidades en áreas como comercio electrónico así como en servicios de salud, educativos, bienestar, logística, financieros y de pagos. “Lo intangible gana mayor importancia en la canasta de consumo, comercio internacional e inversiones extranjeras”.

    Otro de los participantes fue José De Luna, titular de la Unidad de Crédito Público de México. Según él, uno de los retos fundamentales de este sector es la alta tasa de mortalidad; sobre todo, de las nuevas pymes. “Menos del 50% sobrevive el primer año en la región, por lo que es importante tener un ecosistema que permita la sobrevivencia”.

    Para ello -agregó- es necesario contar con mejores habilidades empresariales, capacidad para entender los mercados y hacer negocios, planeación financiera, acceso a créditos, comercialización, contabilidad e integración a las cadenas de valor.

    Para De Luna, otro reto es la informalidad en las micro y pequeñas empresas, que afecta a su productividad y acceso a crédito.

    Dijo que covid-19 ocasionó el cierre de empresas y la reducción de ventas, pero también generó oportunidades como la digitalización y nuevos modelos de negocios y canales de distribución. Otra opción -añadió- son los tratados comerciales para diversificar mercados y obtener inversiones, conocimiento y tecnología.

    De esos retos están conscientes los industriales ecuatorianos. Por ello, la Cámara de la Pequeña Industria de Azuay lanzó la campaña nacional Somos Ecuador 786. El presidente de ese gremio, Fernando Romero, dijo que se escogió este número porque es el inicio del código de barras asignado a los productos nacionales.

    “Hay dos millones de productos nacionales que empiezan con este código. La idea es reactivar la economía de las empresas para generar empleo adecuado y reincorporar a quienes han salido durante la pandemia”. Esta campaña busca que el consumidor local adquiera los productos ecuatorianos.

    Otra estrategia, según Gustavo Ruiz, presidente de la Cámara de la Pequeña Industria de Pichincha, es impulsar los sistemas de gestión de calidad para llegar al mercado externo. Para ello, se requiere generar un mayor valor agregado. “El primer paso es la Comunidad Andina. Además, se busca aprovechar los acuerdos comerciales con los países europeos y que se concrete un tratado con Estados Unidos”.

    En cambio, el grupo de los 1 200 afiliados a la Cámara de la Pequeña Industria del Guayas apostó por las ventas electrónicas. Además, este gremio firmó un convenio con la Universidad Católica para realizar estudios de nuevos planes de negocios y productos.

    Los negocios que siguen actuaron ‘sobre la marcha’

    Redacción Quito. (I)
    Ante la revolución que generó covid-19 en la economía de los países de la región, los negocios tuvieron que aplicar, ‘sobre la marcha’, estrategias para continuar operando. Los ecuatorianos no fueron la excepción.

    Twins Grill, por ejemplo, es un restaurante de carnes a la parrilla, al estilo chileno/argentino, ubicado en el centro-norte de Quito, que apostó por digitalizar sus procesos de venta tras la pandemia. Abrió una cuenta de Whatsapp Business para que los clientes puedan ver el menú y los precios de manera electrónica, tanto si han hecho pedidos como si asisten al local; también permite a las personas comprar de manera remota e interactuar con los administradores de la cuenta.

    Asimismo, los propietarios del sitio optaron por cambiarse de un local cerrado a uno con una terraza en el exterior, que permite que los comensales puedan disfrutar sin temor de contagiarse. Con esto, dicen sus dueños, han logrado atraer más clientes presencialmente (80% bajo esa modalidad).

    También han buscado socios estratégicos que les permiten llevar un modelo de negocio colaborativo: proveedores que entregan productos, pero a la vez consumen la oferta de Twins Grill; entrega a diferentes repartidores, para que todos puedan ganar …

    Otros negocios, como los ubicados en el Centro Histórico de Quito, han optado por capacitarse en bioseguridad y técnicas para mejorar ventas a través de entidades públicas como ConQuito.

    Uno de ellos es Kukuruchos del Maní. John Ríos, administrador del sitio dedicado a la venta de este snack tradicional, así como habas, tostado, canguil y otros, explica que se concentró en normas de salubridad que incluyen desinfección del dinero y ventas para llevar.

    Actualmente, cada uno de los tres empleados del local labora a media jornada; los tres primeros meses de la pandemia la producción bajó al 30% de lo que originalmente se hacía, ahora mejoró y se subió al 50%.

    La Confitería El Gato, que vende todo tipo de dulces tradicionales, optó por las medidas de seguridad para que el cliente vuelva a sentir confianza y compre sus productos. Además, cuenta con un certificado que le entregó el Municipio de Quito por haber concluido el ciclo de capacitaciones del programa Activa tu negocio.

    Para empresas de mayor tamaño, responder a la demanda que surgió en la pandemia fue el motor para mantenerse. Ese es el caso de la firma avícola Avirico, productora de huevos, ubicada en la parroquia rural de Puéllaro.

    Nunca detuvo la producción
    (120 000 huevos diarios), mantuvo su nómina (40 personas) y aplicó medidas de bioseguridad para garantizar la salud del personal y la calidad de la oferta. Además, en este momento está en un proceso de calificación, con Agrocalidad, para implementar buenas prácticas en granjas.
    Marco Navarrete, gerente de esta compañía de más de 40 años en el mercado, explica que el dinamismo del sector motivó a que se ponga en marcha la implementación de una planta de balanceados, completamente automatizada, en la zona de Tocachi, en el cantón Pedro Moncayo. “Nos ayudará a ser más eficientes y con ello, a bajar costos”, dice.

    Otras iniciativas
    Giro de negocio. Loscocos, firma especializada en fabricar envases, tapas plásticas, moldes y más, durante la pandemia decidió producir envases para alcohol y jabón, entre otros artículos. Incluso, esto permitió a la empresa contratar cuatro personas adicionales; los dos primeros meses de la cuarentena, la producción subió 30% y el tercero 10%.

    Gremios. La Cámara de Comercio de Quito ha apoyado a empresas en la reactivación en procesos como construcción de cadenas de valor y otros.

    Reactivación regional y con ideas más sostenibles

    Los huertos urbanos en Quito  son un ejemplo de economía verde en la región. Foto: cortesía ConQuito
    Los huertos urbanos en Quito son un ejemplo de economía verde en la región. Foto: cortesía ConQuito

    Redacción Quito y EFE  (I)
    Representantes de la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana (EuroLat) instaron a una reactivación de la economía y las empresas tras la crisis causada por la pandemia de covid-19, con “solidaridad” y teniendo en cuenta los objetivos de transformación digital y verde.

    Jorge Pizarro, copresidente de EuroLat y del Parlamento Latinoamericano, insistió, durante la sesión plenaria de la Asamblea, que reunió a legisladores de ambos continentes la semana pasada de manera telemática, en la necesidad de que la reconstrucción de la sociedad tenga en cuenta el desarrollo sostenible.

    La idea es “que permita adecuarnos a las necesidades frente al cambio climático”, y consideró, igualmente, “vital” impulsar una transición para que “la economía digital permita crear empleo y salir reforzados en equidad social” en ambos lados.

    Pidió hacer énfasis en una visión “más solidaria” del papel de la economía, el comercio o los organismos multilaterales, que ayude a “recuperar confianzas y proteger y generar empleo de calidad” a la vez que se evite el proteccionismo.

    Mientras tanto, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) señala que el actual modelo de producción y consumo es insostenible y excluyente, y ha llevado a rebasar los límites ambientales del planeta. Además, “la pandemia nos recuerda que cuando destruimos la biodiversidad y los ecosistemas, también destruimos la vida.”

    Asimismo, la organización explica que la región está ante una oportunidad única para rediseñar su relación con la naturaleza. Considera que la reactivación debe ser verde, o no durará a largo plazo.

    El organismo, junto a la Organización Panamericana de la Salud (OPS), asegura que controlar la pandemia requiere de convergencia y articulación entre las políticas de salud, económicas, sociales y productivas. Se considera que es clave la aceleración en la transformación digital, la reducción de la dependencia regional de productos médicos importados y cambios en la matriz productiva, junto a un impulso de la inversión verde.

    La UE quiere colaborar en la reactivación de América Latina. El alto representante del bloque para la política exterior, Josep Borrell, aseguró que “mostrar solidaridad no es solo una cuestión moral, sino una manera de reforzar nuestra asociación estratégica”. Borrell puso en valor la relación entre Europa y América Latina y el Caribe en diferentes ámbitos.

    En Azuay se lanzó la campaña denominada Somos Ecuador 786, que busca integrar a dos millones de bienes nacionales. La idea es que el consumidor prefiera el producto ecuatoriano. Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES
    En Azuay se lanzó la campaña denominada Somos Ecuador 786, que busca integrar a dos millones de bienes nacionales. La idea es que el consumidor prefiera el producto ecuatoriano. Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES
  • Siete investigaciones se realizan por el coronavirus

    Redacción Cuenca  (I)

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    La Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) cuenta con 69 grupos de investigación, en los que participan docentes de sus cuatro áreas. Es decir, administrativa, socio humanística, técnica y biológica y biomédica. Sus integrantes desarrollan proyectos, producción científica, intercambio académico y formación.

    Según Silvia González, vicerrectora de investigación de la UTPL, la entidad invierte esfuerzos y recursos para fomentar la investigación en todas las áreas. Ella agrega que eso se logra con actividades de formación para docentes, en los que realizan colaboraciones externas en cada área de estudio y laboratorios con equipos de última tecnología.

    Además, dice González, tienen software para que los docentes puedan realizar sus investigaciones en colaboración con estudiantes de las distintas carreras, “quienes se benefician de becas para fomentar en ellos el espíritu investigador e incrementar la producción científica que se realiza en nuestra universidad”.

    González agrega que los resultados obtenidos han sido diversos, no solo con artículos científicos y libros publicados, sino también en colaboraciones con entidades gubernamentales y organizaciones no gubernamentales, que dan respuesta a la problemática de la sociedad.

    Por ejemplo, en el marco de la emergencia sanitaria por la pandemia, la UTPL ha generado siete proyectos de investigación, con la finalidad de contrarrestar los efectos ocasionados por la pandemia y generar propuestas viables. Algunos proyectos se han desarrollado para aplicarlos en el campus UTPL y otros se han ejecutado junto a entidades gubernamentales y ONG, señala González.

    Entre otros, están el impacto económico y propuestas de reactivación económica frente a covid-19 en Ecuador y estrategias y formatos de comunicación radiofónica y televisiva para la participación ciudadana frente al coronavirus. Además, la teleatención y recursos de la psicoeducación en la emergencia, evaluación de indicadores de salud mental y el diagnóstico del síndrome respiratorio agudo grave covid-19 en el sur del Ecuador.

    Otro proyecto es el denominado HOPE2020, que es el sistema de desinfección y sanitización para el personal de la Técnica Particular de Loja.

    El campus principal de esta universidad está ubicado en Loja, pero también tiene sedes en Cuenca, Guayaquil y otras urbes. Foto: Archivo LÍDERES
    El campus principal de esta universidad está ubicado en Loja, pero también tiene sedes en Cuenca, Guayaquil y otras urbes. Foto: Archivo LÍDERES
  • El emprendedor opta por la colaboración

    Redacción Cuenca (I) 
    redaccion@revistalideres.ec

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    El Centro de Emprendimiento de la Universidad de Cuenca participó de la sexta edición del evento de educación en temas digitales Empower. Se realizó el 17 de octubre del 2020, de forma virtual.

    En este espacio participaron conferencistas como Sandy Carter, quien fue gerente general de IBM y, ahora, es vicepresidente de Amazon Web Services. También, Karina Canales, product Marketing Manager en YouTube y Bárbara Silva, de Singularity Summit Chile, entre otros personajes.

    Como parte de los temas que se analizaron estuvo el de las mujeres en la industria tecnológica, la mentalidad exponencial & Moon­shot Thinking (forma innovadora y disruptiva de afrontar retos o proyectos), el poder del marketing emocional, el poder digital Growth (crecimiento), cómo lograr las metas profesionales y hacer lo imposible, posible.

    Según la directora del centro de emprendimiento, Silvana Zalamea, en la actualidad, más que nunca, se necesita una educación digitalizada y se requiere que las mujeres y personas vulnerables se involucren, al igual que los emprendedores, por ello fueron parte de este evento. Participaron con 200 cupos para los estudiantes universitarios.

    Esta cita formó parte del apoyo que el Centro de Emprendimiento de la Universidad de Cuenca realiza con los emprendedores, que son estudiantes o no.

    En abril pasado, también impulsó un modelo colaborativo para 100 personas que se quedaron sin trabajo. Son economistas, químicos, abogados y otros profesionales con experiencias laborales.

    Ellos aprendieron a desarrollar herramientas colaborativas, uso de la tecnología, innovación, formación de negocios. La capacitación se efectuó de forma virtual. Fueron dos semanas se aprendizaje, que fue gratuito.

    El método colaborativo promueve el intercambio de bienes y servicios, a partir de un enfoque de solidaridad y beneficio mutuo y ahorro. “Esta colaboración ha surgido y se ha desarrollado en épocas de crisis como esta”. En la actualidad, ellos impulsan una caja de ahorro para autofinanciarse y se asesoran en función de sus conocimientos profesionales.

    Para Zalamea, es fundamental encontrar esa colaboración porque las condiciones actuales del mercado nacional son diferentes a las que hubo antes del inicio de la pandemia por covid-19.

    Añade que el asesoramiento está enfocado en la entrega de herramientas y conocimientos para innovar ante la nueva realidad. “Han surgido muchas iniciativas y soluciones para que la sociedad enfrente la pandemia”.

    Durante este año, dice Zalamea, también se contactaron con redes internacionales para buscar financiamiento cuando se presenten proyectos innovadores. Por ejemplo, la Universidad logró que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) destine USD 1 millón para los emprendimientos de base científica.

    Otro ámbito de trabajo es el apoyo al emprendimiento social en favor de mujeres y efectuó el evento Mujer empodérate y emprende. Allí, participaron 120 personas, que eran empleadas en almacenes, bachilleres… Con ellas se sigue trabajando para materializar sus iniciativas. Este centro cuenta con un equipo multidisciplinario, con profesionales expertos en producción, finanzas, legislación y áreas técnicas.

    Desde la izq., Jorge Delgado, Silvana Zalamea, directora del centro de emprendimiento, y Silvia Peña (der.). Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES
    Desde la izq., Jorge Delgado, Silvana Zalamea, directora del centro de emprendimiento, y Silvia Peña (der.). Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES
  • El TIC trazará la ruta para negociar

    Carolina Enríquez,  (I)
    redaccion@revistalideres.ec

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    Daniel Legarda, viceministro de Comercio Exterior, se refiere a la nueva reunión del Consejo de Comercio e Inversiones (TIC, en inglés), que se realizará en Washington. Cree que un nuevo Gobierno en EE.UU. no tiene por qué afectar un posible tratado.

    Esta semana se llevará a cabo una nueva reunión del Consejo de Comercio e Inversiones (TIC, por sus siglas en inglés), entre Ecuador y los EE.UU. ¿Qué se prevé para este encuentro?

    Será una reunión que se realizará el 10 de noviembre, seguida de algunas sesiones virtuales de carácter técnico. Todo ese martes nos vamos a mantener en la cita. Participará el ministro de la Producción, Iván Ontaneda; mi persona y dos miembros del equipo. Hay limitación física por covid-19.

    ¿Por EE.UU. quién asistirá?
    Altas autoridades, incluidas las que están delegadas para el hemisferio occidental.

    ¿Y del sector privado?
    No, son delegaciones oficiales.

    ¿Qué se tratará?
    Se realizarán tres cosas: la revisión del trabajo realizado por las seis mesas técnicas; aspectos a revisar en conjunto, para negociar textos y un acuerdo corto, y el examen de cuáles son los próximos pasos. Este último punto, seguramente, consistirá en la planificación de las reuniones de trabajo que se tienen que dar en los grupos que se definan y las fechas. Esas sesiones, tranquilamente, se podrán realizar de manera virtual.

    ¿A qué se refiere con negociar los textos?
    Exploraremos la posibilidad de poder negociar algunos textos, en ciertos capítulos que no tienen tanta sensibilidad y es más fácil poder avanzar. En el TIC analizaremos en qué aspectos podemos avanzar, en lo que se podría denominar como un acuerdo de primera fase o corto. Hablo de los primeros capítulos que contendría un acuerdo comercial como tal.

    En ese sentido, tras la reunión del TIC ¿se van a iniciar las negociaciones del acuerdo comercial con los EE.UU.? ¿Será un proceso como con la Unión Europea? o ¿cuál es la diferencia en este caso?
    La diferencia es que tenemos un contexto complicado por las elecciones, tanto de EE.UU. como de Ecuador. Los avances que podamos hacer ahora no van a ser de un acuerdo comercial de todas las dimensiones que eso implica, ni de los 28 capítulos. Estamos caminando hacia allá, pero en el TIC no vamos a discutir eso, ni el inicio de una negociación como tal del acuerdo integral.

    ¿Qué exactamente se hará en esta ‘prenegociación’?
    Vamos a tomar ciertos capítulos que van a ser parte de ese acuerdo y vamos a lanzarlos y negociarlos. Serán temas que puedan resolverse rápidamente, de manera que enganchen a las dos administraciones para continuar en la agenda. Es un paso importantísimo. No es todo el acuerdo, sino partes.

    ¿Es la primera vez que EE.UU. hace eso?
    No. Lo ha hecho anteriormente con Japón, Brasil, Uruguay, entre otros. Hay algunos países con los que se ha hecho, no muchos. Es un paso más en la dirección hacia un acuerdo comercial. Para que eso se dé, más adelante, lo primero que se tiene que hacer es cerrar la negociación corta o de los aspectos que se pueden resolver rápidamente y luego seguir con los grupos de trabajo que se hayan establecido. Se debe lograr que la nueva administración de EE.UU. incluya a Ecuador en la negociación formal.

    ¿Cómo se logra eso?
    Por un lado, trabajamos con la Oficina del Representante de los EE.UU. (USTR, por sus siglas en inglés) en lo técnico, para avanzar en la mayor cantidad de temas posibles. Son como hitos que se van cumpliendo y nos ponemos cada vez agendas más ambiciosas hasta culminar en la apertura formal de las negociaciones. Para eso necesitamos la autorización del Congreso de EE.UU. Por lo tanto, hay un trabajo paralelo, que se está haciendo también allí. Se reforzará con la nueva administración.

    ¿Cómo impacta que para 2021 haya nuevos gobiernos y legislaturas en cada país?
    Este es un tema que trasciende gobiernos, una cuestión de país. La estrategia está pensada para que continúe su camino el momento en que haya cambio o continuidad en la administración de EE.UU., y en el Legislativo. Lo propio en Ecuador. Esto debe ser una política de Estado.

    En cuanto a los temas de fácil cumplimiento que se espera negociar, ¿en qué áreas se concentrarán? Entiendo que se incluirían aspectos laborales y ambientales.
    Son parte de… Ya hay mesas de esos temas en el marco del TIC. ¿Por qué? Porque están en la agenda de los acuerdos comerciales más recientes y EE.UU. los incluyó en el tratado con México y Canadá. Facilitación al comercio puede ser otro de los temas en que se pudiera avanzar.

    Además de las que usted mencionó, en el marco del TIC se formaron otras cuatro mesas de trabajo (agricultura, propiedad intelectual, acceso al mercado e inversión). ¿Se incluirán esos temas en la denominada fase 1?
    No. Las mesas – en el marco del TIC – han venido trabajando para que estemos lo más preparados posibles para entrar en una negociación integral.

    La Cámara de Comercio Ecuatoriano Americana indicó que en la mesa agrícola ha generado discusión el tema del otorgamiento de licencias previas de importación. Se asegura que existe discrecionalidad en el proceso. ¿Cómo mejorar esta situación?

    Es el Ministerio de Agricultura el que administra las licencias. Pero, sí, ese es el ‘feed back’ que hemos tenido. Hemos avanzado en el régimen de licencias para darle más certezas, pero nos falta trabajar en que se cumpla con los objetivos y recoja las preocupaciones de los socios internacionales.

    Mientras que en propiedad intelectual, la discusión se ha centrado en la piratería. ¿Qué se ha dialogado?
    Han habido allí extensas conversaciones. El núcleo de las preocupaciones está en el Código Ingenios. Parte del concepto de proteger a la propiedad intelectual por excepción y no por generalidad. En nuestras posibilidades está discutir una modificación a esa Ley, para proteger nuestra propiedad intelectual. Por ejemplo, los temas vegetales. Ahí hay desarrollo e inversión que se hace desde el sector privado para generar variedades que duren más, productos orgánicos y más.

    Si se dan los avances, ¿cómo se daría inicio a una negociación formal en EE.UU?
    El USTR debe emitir un informe en que recomienda la agenda comercial del país para el año siguiente. Este lo presenta al Congreso y es quien autoriza si se inicia. En ese país hay el denominado ‘fast track’, a través del cual el Legislativo puede aprobar o negar la negociación. Esa ley estará vigente hasta julio del 2021, pero es posible una renovación.

    ¿Y en Ecuador?
    Se presenta la solicitud formal al Comité de Comercio Exterior (Comex) y este autoriza al Gobierno el inicio del proceso. 

    Hoja de vida
    Formación. Economista por la Universidad Católica del Ecuador (PUCE). Maestría en Dirección de Empresas por la IDE Business School.
    Experiencia. Viceministro de Comercio Exterior del Ministerio de la Producción. Ha ostentado los cargos de presidente y vicepresidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor). Siguió desde el sector privado la negociación del acuerdo comercial entre Ecuador y la Unión Europea (UE). También ha estado al tanto de otros procesos de diálogo con países y grupos de naciones como la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA).

    Daniel Legarda, viceministro de Comercio Exterior. Foto: Archivo / LÍDERES
    Daniel Legarda, viceministro de Comercio Exterior. Foto: Archivo / LÍDERES
  • Bonos salariales sufrieron cambios

    Redacción Quito (I)

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    Se acerca diciembre y algunos trabajadores, generalmente de empresas grandes, esperan recibir el “bono navideño”, un incentivo salarial que ciertas compañías entregan anualmente. Pero es posible que un grupo de colaboradores no lo reciba este año o que, de recibirlo, sea de un monto menor al acostumbrado.

    De acuerdo con un estudio de la consultora Deloitte, el 42% de las firmas consultadas señaló que su esquema de remuneración variable se ha modificado debido a la situación actual. En el caso de los bonos anuales, un 50% lo eliminó, otras lo disminuyeron (14%) o difirieron el pago (7%).

    Xavier Verdesoto, CEO de Nexos Talent / EFH Ecuador, explica que la compleja situación económica que atraviesan el país y el mundo, debido a la pandemia, ha hecho que las organizaciones tengan que optimizar sus gastos, con ajustes en sus compensaciones laborales. Recuerda que muchas empresas paralizaron sus actividades durante los primeros meses de cuarentena.

    “Los trabajadores van a ver una reducción de sus ingresos, pero deben ser conscientes que están viviendo la sobrevivencia de las empresas para mantenerse en el mercado”, añade Verdesoto.

    Roberto Estrada, socio de Deloitte Consulting, señala que el impacto salarial para los trabajadores puede ser de hasta una caída del 30 o 40% de sus ingresos.

    Las compensaciones salariales suelen otorgarse en empresas grandes, generalmente multinacionales, con políticas salariales consolidadas. En cargos ejecutivos, lo común es que se entreguen anualmente; en mandos medios y operativos, de manera mensual y también se combina con incentivos trimestrales.

    En diciembre, las reciben principalmente los cargos medios y operativos, de áreas como comercial, producción, servicio al cliente y ahora, probablemente, se incluirán ‘delivery’ y comercio electrónico. Para niveles ejecutivos, aclara Estrada, lo común es esperar hasta febrero-marzo del siguiente año, una vez que se cerraron los estados financieros y se aprobaron por el Directorio.

    Según el estudio de Deloitte ‘Estrategia empresarial al retorno de las actividades’, en el que participaron 108 firmas, un 43% de las empresas que modificaron sus bonos anuales lo hicieron en todas las áreas; mientras tanto, otro 43% lo hizo en cargos ejecutivos.

    “La eliminación se dio en las empresas más afectadas por la crisis, como aviación, turismo y hotelería. Se ha modificado en consumo masivo, retail, construcción, etc.”, precisa el vocero de la consultora, quien aclara que en algunos casos el cambio significó incluso una mejora, en ciertos negocios que se han visto impactados positivamente en la crisis.

    Otro tipo de compensaciones como los subsidios también se eliminaron (50%) o redujeron (37%) en todas las áreas. Los subsidios más comunes son para transporte o alimentación.

    Lourdes Solís, trabajadora de una empresa de comercio electrónico, dejó de obtener USD 85 que recibía al mes como subsidio para alimentación y transporte, tomando en cuenta que desde que comenzó la pandemia se ha mantenido teletrabajando.

    Las comisiones en áreas comerciales, de cobranza y otras también han sufrido ajustes, como reducción de metas o cambio de política. En el caso de las horas extras, la mayoría de las empresas (76%) que hicieron modificaciones en sus remuneraciones variables dejaron de pagarlas, por cambios en sus jornadas.

    Para un trabajador de una empresa de logística aérea, que prefirió la reserva de su identidad, la eliminación de horas extras (entre nocturnas y fines de semana) representó una baja de USD 400 en sus ingresos mensuales.

    El CEO de Nexos Talent/EFH Ecuador señala que en la situación actual es importante aplicar otro tipo de compensaciones variables, como apoyo en la salud emocional, tanto a los trabajadores como a sus familiares, de tal forma de brindarles tranquilidad.

    Otro tipo de incentivos, añade, son las capacitaciones en línea, acorde con las necesidades actuales de la organización, las cuales ya han venido aplicando algunas empresas durante este año.

    Por otro lado, es posible compensar con otros subsidios a los trabajadores, como apoyarles en el financiamiento de Internet en el hogar o mejora del plan de conectividad, coinciden los expertos.

    El subsidio de equipos de bioseguridad y toma de pruebas rápidas para detección del covid-19 es otro tema que han contemplado muchas empresas en el contexto de la pandemia, aclara Estrada.

    Andrés Robalino, director ejecutivo de la Cámara de Industrias, Producción y Empleo de Cuenca, recuerda que la situación de las empresas continúa siendo compleja y que requerirán de más tiempo para estabilizarse. “Estoy seguro que buscarán la mejor opción para los empleados y el negocio, sin que esto implique nuevamente un hueco financiero”.

    50% de las compañías eliminó los bonos anuales dentro de su esquema de compensaciones laborales.

    Un sondeo señala que el 42% de 108 empresas consultadas modificó sus esquemas de remuneraciones variables por la situación actual. Un 50 de las compañías eliminó los bonos anuales dentro de su esquema de compensaciones laborales. Imagen: www.freepik.es
    Un sondeo señala que el 42% de 108 empresas consultadas modificó sus esquemas de remuneraciones variables por la situación actual. Un 50 de las compañías eliminó los bonos anuales dentro de su esquema de compensaciones laborales. Imagen: www.freepik.es
  • La realidad aumentada llegó a sus envases

    Redacción Cuenca  (I)

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    Lácteos San Antonio, que fabrica los productos de la marca Nutri, innovó sus envases e incursionó en la realidad aumentada, para mostrar la historia de más de 100 personajes vinculados con su cadena de producción.

    La empresa, que tiene su fábrica en el Parque Industrial -en el norte de Cuenca-, realiza la renovación completa del portafolio de productos en las líneas de leche, bebidas saborizadas, néctares, avenas, quesos, mantequilla y crema de leche. Es un proceso que lo inició hace dos años.

    Según el director Comercial de Lácteos San Antonio, Pablo Vélez, se realizó el cambio de imagen y envases y durante este mes se lanzaron los nuevos diseños para su línea de leches. “Se cambió hacia un estilo más moderno y que surgió de un proceso de co-creación con los consumidores”.

    Es decir, explica Vélez, no fue pensado por una agencia o un grupo de expertos, sino es un trabajo de varios meses en el que intervinieron e interactuaron diferentes clientes. Ellos explicaron qué es lo que quieren observar en aspectos como el color, los mensajes o la información del producto.

    Lácteos San Antonio, también, decidió apostar por la realidad aumentada, que ya se aplica a los envases de diferentes productos. Se trata de una experiencia interesante, señala Vélez, porque el envase cobra vida y, a través de este, se cuentan las historias de los pequeños ganaderos y otras personas, que forman parte de la cadena productiva de la firma.

    La idea, agrega el ejecutivo, es que el consumidor conozca de dónde proviene la materia prima. Además, la marca busca destacar el trabajo de los ecuatorianos porque sus ejecutivos consideran que en esta época de pandemia, crisis económica e incertidumbre, es conveniente mostrar historias positivas y buenas.

    Según él, no es difícil acceder a la realidad aumentada. Primero hay que descargar la aplicación PackStory en cualquier smartphone o tablet y está disponible para IOS y Android.

    Luego se debe escanear al personaje insignia de la marca, que es la vaca Toña. De esa forma se puede mirar un video de 30 segundos en realidad aumentada de la pequeña ganadera cañarense, Ana Chuqui. Además, hay más de 100 videos -sin realidad aumentada- con las historias de otros personajes de todo Ecuador.

    Vélez explica que los nuevos empaques conservan dos elementos fundamentales de la marca que son el logotipo y la vaca Toña. Mientras tanto, la renovación está relacionada con los colores que son más llamativos y que evocan modernidad y permiten al consumidor identificar fácilmente al producto en los puntos de venta. Además, solo quedaron los mensajes relevantes.

    Lácteos San Antonio invirtió USD 200 000 en la renovación de los envases, diseño e incorporación de la realidad aumentada. Además, en las sesiones de trabajo con los clientes, campañas de publicidad y de comunicación, en la cooperación, entre otros aspectos, señala Vélez.

    El mercado
    Las ventas. Según el director Comercial de Lácteos San Antonio, Pablo Vélez, el 2020 ha sido complicado para todos. “Nosotros, al estar en la categoría de alimentos, no hemos sufrido tanto. Pero al final del año, nuestro resultado no será el que esperábamos”. La facturación del 2020 se reducirá un 5% con respecto al 2019 y prevén crecer un 6% el 2021.

    La afectación.  Las líneas más afectadas son los productos en envases personales y los relacionados con las loncheras como las bebidas saborizadas, néctares, avenas, entre otros.

    15 000 proveedores, entre pequeños y medianos ganaderos de la Sierra centro y sur, tiene la firma.

    La fábrica y las bodegas de la compañía están instaladas en el Parque Industrial, en el norte de Cuenca. Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES
    La fábrica y las bodegas de la compañía están instaladas en el Parque Industrial, en el norte de Cuenca. Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES
  • Con productos ecológicos atienden el mercado local

    Patricia González (I)  patriciag@elcomercio.com

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    Tomás Rodas y Juan Marcelo Vidal son amigos desde la niñez, tienen 23 años y son estudiantes de la Universidad del Azuay, en Cuenca. Cursan su último año de carrera: Rodas en Estudios Internacionales y Comercio Exterior, y Vidal en Derecho.

    El gusto por los negocios y el comercio los impulsó a emprender, comenta Marcelo. Y, también, el interés por resolver problemas actuales con opciones que resulten innovadoras, añade Tomás.

    Fue así como luego de investigar y hacer distintas pruebas, identificaron el problema de los plásticos de un solo uso y la necesidad del mercado de tener opciones de envases ecológicos para alimentos.

    En octubre del 2018 desarrollaron su primer producto mínimo viable: un plato de hoja de palma Areca, de 10 pulgadas de diámetro, con el que nació Ecompake.

    El emprendimiento requirió de una inversión de USD 10 000. Durante los primeros meses, la firma cuencana fabricó sus platos, con una prensa semiautomática.

    Los primeros puntos de venta fueron tiendas de productos orgánicos y ecológicos. Desde un comienzo dieron impulso a la venta directa, a través de redes sociales.

    En el primer trimestre del 2019 comenzaron a ingresar a los supermercados. El volumen de producción que les demandaban sus nuevos clientes los obligó a tercerizar la producción en el exterior, desde julio del pasado año. Actualmente, sus productos son fabricados por tres proveedores de Asia, lo que les ha permitido abarcar el mercado nacional e incrementar su portafolio.

    Comercializan 19 ítems de productos. En hoja de palma tienen platos cuadrados en diferentes tamaños, bandejas y ‘bowls’. En fibra de bambú, platos redondos y envases con tapa para ‘delivery’. La línea de bambú la lanzaron recientemente al mercado.

    Tanto los productos de palma como los de bambú son 100% naturales y compostables en casa, colocándolos al fondo de una maceta con tierra, aseguran los fundadores de la marca. Los de palma son, además, reutilizables.

    Tomás Rodas y Juan Marcelo Vidal, cofundadores de la marca de productos ecológicos Ecompake, con sede en la ciudad de Cuenca.
    Tomás Rodas y Juan Marcelo Vidal, cofundadores de la marca de productos ecológicos Ecompake, con sede en la ciudad de Cuenca.

    La firma también vende cubiertos de madera reciclada. Por último, en la línea de higiene personal, ofrece hisopos de hoja de bambú y algodón orgánico.

    Al año importan cerca de 1 millón de unidades de cubiertos de madera, 600 000 de productos de palma y unas 20 000 cajas de 200 unidades de hisopos. En platos y envases de bambú, proyectan 1,2 millones de unidades.

    Sus platos y bandejas se venden en ‘six pack’. Los precios varían de acuerdo a los modelos, tamaños y materia prima. Los de bambú son más económicos, puesto que el proceso de elaboración es menos artesanal y trabajoso que los fabricados con base de palma.

    Los productos se venden empacados en cajas de cartulina de bagazo de caña de azúcar, biodegradable, que les provee la Imprenta Grafisum. “Nos ha ido muy bien. Trabajamos con ellos desde sus inicios”, comenta John Durán, gerente general de la imprenta.

    Actualmente, están en más de 115 puntos de venta, entre cadenas de supermercado y farmacias, supermercados locales, restaurantes, cafeterías, tiendas de productos orgánicos, entre otros.

    Café Bucay, en Guayas, sirve los productos de su cafetería en platos de palma y cubiertos de madera de Ecompake. “Nos encantan sus productos. Son muy lindos y amigables con el ambiente”, comenta José Luis Guerrero, propietario del establecimiento. Al mes le compran unas 3 000 unidades.

    Oahu Açai Bar vende sus helados saludables con frutas con las cucharas de madera de la empresa cuencana. “Nos ha ido muy bien, cumple nuestras expectativas”, dice Carolina Dvorquez, propietaria del negocio, con locales en Guayaquil y Salinas.

    Lucía Vernaza es distribuidora de los productos de la empresa ecológica en Esmeraldas, donde se encuentran en la tienda en línea Afrobambú, junto a otros productos alternativos al plástico. “Han tenido una buena acogida”, comenta Vernaza, quien próximamente surtirá de los productos de Ecompake a una bolonería.

    La pequeña empresa, que facturó el pasado año USD 80 000, participa junto a otras pymes en un proceso de selección de la Alianza para el Emprendimiento y la Innovación (AEI) para ingresar a Panamá, de la mano de Grupo Rey.

    ‘He aprendido a cuidar más el ambiente’
    Catalina Quezada / Administradora
    Tengo 53 años y soy Ingeniera en marketing. Trabajé para el área de importaciones y compras nacionales de tres empresas de la familia Rodas, durante 16 años. Luego, continué como asesora independiente, en las mismas áreas. Había un vínculo de amistad con Tomás, porque laboré para las empresas de su padre. Al principio comencé a ayudar a Ecompake externamente y luego como contratada. Me encargo de la administración, les ayudo con contactos de posibles clientes y les colaboro con la parte logística de las importaciones, con la nacionalización y el transporte a las bodegas. En las mañanas trabajo en la oficina y en las tardes, de ser necesario, hago teletrabajo. Ha sido una experiencia muy enriquecedora, me gusta ver que cada día se va haciendo realidad el proyecto en el que empezaron a trabajar como un deber universitario. Me han enseñado a cuidar el ambiente con pequeñas acciones en la oficina, como no botar plásticos, reciclar y reutilizar. Buscamos ser ejemplo. Lo más retador ha sido reeducarme con ellos en el tema ecológico.

    Rubén Chimborazo y Ramiro Jara, trabajadores de Ecompake, embalan los productos en la bodega de la empresa para su distribución a los clientes. Fotos: Xavier Caivinagua / LÍDERES
    Rubén Chimborazo y Ramiro Jara, trabajadores de Ecompake, embalan los productos en la bodega de la empresa para su distribución a los clientes. Fotos: Xavier Caivinagua / LÍDERES
  • Una iniciativa ecuatoriana está en la búsqueda de pymes innovadoras

    Redacción Líderes (I)

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    El proyecto ‘AEInnova – Innovando Post covid-19’ fue uno de los ganadores de la IV convocatoria al Fondo de Innovación, organizado por la Cooperación Técnica Alemana (GIZ) y el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana.

    La iniciativa ganadora fue presentada en conjunto por la Fundación para el Desarrollo Empresarial y Social (Fedes), en asociación con el Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca (Mpceip), y la Alianza para el Emprendimiento e Innovación (AEI). La presentación oficial se realizó de manera virtual este martes 10 de noviembre del 2020.

    El proyecto, dirigido a empresas medianas y grandes, busca generar capacidades y proyectos de innovación que les permitan adaptarse a las condiciones actuales y recuperar su volumen de negocio. Se tiene previsto que se beneficien al menos 10 empresas consolidadas y 15 pymes del ecosistema innovador, vinculadas a la AEI.

    Las empresas participantes recibirán asesoría de un experto y contarán con hojas de ruta con acciones de innovación, para afrontar los desafíos generados por la pandemia. También aumentarán sus capacidades para adoptar nuevas tecnologías y prácticas de sostenibilidad que les permita recuperar su volumen de negocio.

    Además, serán vinculados a una red de expertos y de colaboración mediante una comunidad. El director ejecutivo de la AEI, Andrés Zurita, indicó que esta experiencia piloto es escalable hacia el Mpceip y las cámaras de industrias, para ser replicada en otras empresas y pymes del país.

    Los interesados en participar podrán registrarse en este enlace.

    La presentación del proyecto ‘AEInnova - Innovando Post covid-19’ se realizó de manera virtual este martes 10 de noviembre del 2020. Foto: Facebook Fundación FEDES
    La presentación del proyecto ‘AEInnova – Innovando Post covid-19’ se realizó de manera virtual este martes 10 de noviembre del 2020. Foto: Facebook Fundación FEDES
  • La pandemia dio paso a optimizar más sus servicios

    Cristina Márquez. (I)
    redaccion@revistalideres.ec

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    El servicio personalizado y atento caracteriza a Motofast, un negocio de encomiendas y transporte puerta a puerta, que se diversificó y creció en la pandemia por el covid-19. Sus socios se aliaron con otros emprendimientos para mantener las fuentes de empleo de más de 50 familias.

    Gabriel Vega y Luis Rangel se radicaron en Riobamba en el 2017. Ambos son oriundos de Venezuela y migraron debido a la crisis económica que en ese tiempo empezaba a agudizarse en su país.

    Ese mismo año invirtieron cerca de USD 3 500 en la adquisición de una motocicleta y un celular para iniciar su empresa de encomiendas. Lo hicieron tras analizar el mercado local y las necesidades de sus clientes potenciales.

    “En Riobamba trabajé en un restaurante, una cafetería, una empresa de celulares y una empresa de encomiendas. Esa experiencia me ayudó a identificar las preferencias de la gente y diseñar mi negocio”, cuenta Gabriel Vega.

    En su estudio de mercado descubrió que aunque ya había varias empresas similares, los servicios que ofrecían eran limitados. Así que buscaron formas novedosas para mejorar la experiencia y la atención a sus clientes.

    Ellos, por ejemplo, se encargan de hacer compras de todo tipo y se aseguran de que sus clientes escojan los productos a través de videollamadas o mensajes de texto. Además, realizan gestiones como depósitos bancarios, trámites institucionales y otros.

    En un inicio el negocio surgió para sustentar a los dos socios, pero al poco tiempo más jóvenes se sumaron al emprendimiento y el objetivo cambió. Ahora buscan respaldar a otros migrantes.
    “Queremos apoyarnos y generar fuentes de empleo. Todos nuestros repartidores son nuestros coterráneos, que vinieron al país para mejorar la vida de sus familias”, dice Gabriel.

    El negocio, que hasta febrero contaba con ocho repartidores, creció desde que en el país se declarara la emergencia sanitaria. Hoy laboran 20 motociclistas.

    Ellos se capacitaron sobre medidas de bioseguridad y adquirieron equipos de desinfección para evitar contagiarse y garantizar la seguridad de sus clientes. También incrementaron la publicidad en redes sociales y sumaron nuevos servicios a su menú.

    La demanda de encomiendas se multiplicó y los repartidores no lograban abastecer todos los pedidos, por lo que ampliaron sus horarios de atención. “El teléfono sonaba todo el tiempo. La gente que ya nos conocía nos pedía que hiciéramos sus gestiones en instituciones públicas, porque tenían miedo de salir”, dice Luis.

    Al menos cinco restaurantes también se reactivaron gracias al trabajo de los repartidores. Esos establecimientos tuvieron que cerrar sus puertas debido a la falta de ingresos para cubrir los gastos.

    Datos del negocio
    Facturación.  USD 6 500 es el promedio de cada mes.
    Repartidores. Aportan una contribución de USD 0,25 por cada encomienda que realizan.
    Diversificación. También ofrece el servicio de transporte de muebles y objetos pesados.
    Expansión. En Quito y Ambato dan el servicio, con más proyección de cobertura.
    Aplicación.  Una ‘app’ está en desarrollo y se presentará en el 2021. La meta es competir con otras plataformas.

    220 pedidos atienden cada día los repartidores del emprendimiento.

    Gabriel Vega y Luis Rangel son los propietarios de Motofast. 20 repartidores trabajan en la empresa. Foto: Glenda Giacometti/ LÍDERES
    Gabriel Vega y Luis Rangel son los propietarios de Motofast. 20 repartidores trabajan en la empresa. Foto: Glenda Giacometti/ LÍDERES
  • Un giro de negocio con conciencia ambiental

    Priscilla Alvarado. (I)
    redaccion@revistalideres.ec

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    Traer los sabores ancestrales de la cocina polaca a la mesa de los ecuatorianos motivó a Giuliana Nowakowski a emprender su negocio de caldos envasados en Guayaquil.

    Le Zuppé salió al mercado en enero del 2020, con USD 2 300 como inversión inicial, que se destinó a adquirir materia prima, ollas especializadas, creación y diseño del logo. La firma nació bajo el concepto de marca paraguas. Esto quiere decir que aglutinaría a diferentes productos, con el fin de aprovechar el nombre principal.

    Luego de renunciar a su trabajo en el sector naviero en el 2018, la propietaria de Le Zuppé barajó varias ideas de productos para lanzar al mercado.

    Fue en junio del 2019 cuando finalmente decidió que elaboraría caldos concentrados para venderlos en envases de vidrio que, más adelante, se pudieran reciclar. La preparación del concepto de la marca y perfeccionar la receta le tomó más de seis meses.

    El concentrado de pollo fue el producto con el que se lanzó al mercado. La sopa tiene como base carne de aves criadas en una granja ecológica de Guayas. Los pollos son libres de hormonas, químicos para engorde o productos para acelerar su crecimiento.

    Don Bala es su proveedor de materia prima. La empresa cría y comercializa pollos semiorgánicos. José Antonio Balarezo, su propietario, dice que los caldos son un producto no solo diferente, sino que llama la atención del público al ser novedoso y natural.

    Nowakowski
    señala que la idea de su negocio es brindar una experiencia culinaria y garantizar que los productos obedezcan el principio de una marca que preserva el ambiente. “Queremos que la gente, cuando vea los concentrados, sepa que estamos alineados a lo natural, sano y al reciclaje”.

    Su ascendencia polaca fue un elemento clave para inclinarse por este giro de negocio. Por influencia de sus abuelos, originarios de ese país, conoció el mundo de los caldos desde pequeña.

    Según la joven, de 28 años, la cocina polaca tiene como ingrediente principal los concentrados líquidos hechos a base de vegetales o de huesos de algún animal. “Esto transporta al comensal a una experiencia cercana al campo y al amor de casa”, relata.

    Por esta razón, Le Zuppé nació con la idea de implantar en la retina del consumidor ecuatoriano el concepto de caldos líquidos, por encima de los colocados en el mercado, que se presentan en forma de cubitos o en polvo.

    Luego de la aceptación del concentrado de pollo, lanzó casi cinco meses después tres productos nuevos. Un caldo vegano, un vinagre de guineo y una lasagna hecha con láminas de palmito.

    Mónica Torres, copropietaria de Alpeso, adquiere los productos del pequeño negocio para colocar en las perchas de su tienda desde sus inicios. “Son 100% naturales y libres de aditivos, tienen una muy buena aceptación en el público”.

    Actualmente, comercializa y producen mensualmente 200 envases de 700 mililitros (ml) de caldos de pollo y vegetales y 40 frascos de 40 ml de vinagre de guineo. Las lasagnas las elaboran bajo pedido. Los precios de los productos van desde USD 7,50 a 13.

    Su catálogo se vende, por el momento, en ocho puntos en Quito, Cumbayá, Machala y Guayaquil.

    Para impulsar sus ventas, la joven también se apalanca en redes sociales. A través de Instagram gana clientes en diferentes partes del país. Según Nowakowski, los caldos son un mercado aún por explotar en Ecuador. Por esta razón, su meta en el corto plazo es lanzar una variedad de concentrado de res. “Esperamos posicionarnos localmente y, más adelante, llegar a internacionalizar nuestros productos envasados”, afirma la emprendedora.

    2300 dólares fue la inversión inicial que dio vida al emprendimiento

    La emprendedora Giuliana Nowakowski muestra los productos que se comercializan en ocho puntos de distribución de cuatro urbes del país. Foto cortesía de Giuliana Nowakowski
    La emprendedora Giuliana Nowakowski muestra los productos que se comercializan en ocho puntos de distribución de cuatro urbes del país. Foto cortesía de Giuliana Nowakowski