Etiqueta: espacio

  • El jardín decorativo gana espacio en Quito

    REDACCIÓN QUITO

    Los jardines decorativos son un detalle que gana espacio en todo tipo de construcción. Los amantes de la jardinería y quienes se preocupan por la apariencia de sus edificios suelen buscar los servicios de jardineros expertos para que decoren las fachadas con plantas ornamentales.

    «Para cada arreglo no existe un espacio, modelo o materiales definidos», explica Marco Herrera, gerente de Uriarte Garden, cuyo vivero se encuentra ubicado en Pomasqui, al norte de Quito.

    Según Herrera, en la capital existe un segmento que disfrutan de la jardinería y por eso acuden a su vivero a comprar desde rosas u orquídeas, hasta palmas, pencos y césped. «Pero no todos conocen qué tipo de planta se adapata a determinado clima o espacio. No es igual el clima en el centro, que en los valles».

    Herrera se dedica a la jardinería desde hace 15 años. Ofrece sus servicios para casas, conjuntos residenciales, parques, restaurantes y edificios.

    «Hay empresas grandes o centros comerciales que piden un jardín con una pileta al interior del edificio», cuenta Olga Lamiña, dueña de la microempresa Diseños y Flores, ubicada en Nayón.

    En los espacios que más se construyen estos jardines son los conjuntos residenciales, las viviendas particulares de estrato social medio y alto, y en centros comerciales, restaurantes y edificios. Sus principales clientes son personas de estrato socioeconómico medio y alto.

    Olga Lamiña, dueña de la microempresa Diseños y Flores, ubicada en Nayón, al oriente de Quito, señala que el número de viveros aumentó en los últimos 10 años. Solo en la Asociación de Viveros de Nayón existen registrados más de 25 de estos negocios.

    Nancy Tituaña, dueña del vivero Diseño y Decoración, es una de las más conocidas decoradoras de jardines del sector y explica que la demanda jardines decorativos aumentó en su negocio un 60% en los últimos dos años.

    El costo de cada jardín puede variar según el tamaño y el tipo de plantas que se utilice para construir el jardín. También requiere materiales como rocas de río, vasijas de barro, juncos y esculturas.

    Por la venta de sus jardines decorativos, asegura Tituaña, puede facturar hasta USD 200 000 anuales. Sus principales clientes, asegura son personas de estrato social alto de urbanizaciones privadas como Rancho San Francisco, en Cumbayá. «Acabo de terminar allí un trabajo por USD 75 000».

    Tiempo y costos

    La temporada.  Mayo y abril son los meses en donde más se contrata jardineros para construir jardines decorativos, pero la temporada puede variar en función del clima.

    Los costos.  Cada jardín decorativo, dependiendo del tamaño y materiales utilizados, puede costar desde USD 50, en adelante. El espacio mínimo requerido es de un metro cuadrado

  • Trabajo, ¿hay espacio para el buen humor?

    ARTURO CASTILLO / Motivador y prof. de técnicas psicorrelajantes

    Nada hay más mortalmente serio que el trabajo. El estrés, la negación de tiempo para sí mismo y para la familia, la fatiga crónica, la asunción del mal genio e inconformidad de los jefes, el envejecimiento prematuro, la jubilación por obsolescencia, son cosas realmente serias, tributos al trabajo.

    Y como si todo ello fuera poco, hay quienes se empeñan en añadirle al trabajo algo más de dramatismo y sufrimiento. No faltan aquellos que sobreactúan su rol de jefes, para tortura de los demás.

    Juegan al ogro, a la bruja mala; parecen satisfechos de generar antipatía y temor entre sus subalternos. Disfrutan del silencio repentino cuando aparecen en escena; gustan de provocar incertidumbre, les encanta que las personas se sientan tontas, que duden de su inteligencia.

    Muchos jefes no sonríen, pues no quieren que el ambiente se ‘relaje’. Su forma de control consiste en la adustez. Ellos saben que nada comprometa más el ‘orden’ que la gente que está contenta, que se entrega al buen humor. Y el sentido del humor puede ser considerado subversivo.

    De otra parte, es un mal signo que los sujetos no sean capaces de burlarse de sí mismos, que no asuman sus lados absurdos, sus propias incoherencias. La imposibilidad radica en que se creen infalibles, perfectos. Y cualquier sospecha de que los demás ponen en duda su perfección les hace perder la cabeza.

    Dado que las empresas desarrollan una personalidad, una particular idiosincrasia, no es raro hallarse con ambientes agrios, con caras de pocos amigos, con expresiones defensivas. Son bombas a punto de explotar.

    Es en ambientes de ese tipo, que el llamado ‘clown’ puede hacer maravillas. Claro, hay payasos y payasos. Algunos pueden resultar irritantes, amenazantes, sobre todo si basan sus ‘actos’ en el escarnio y el ridículo, escogiendo, generalmente, a las personas más y tímidas.

    La burla pública es siempre contraproducente; de modo que los jefes de RR.HH., que tienen la brillante idea de ponerle a reír a la empresa, deben saber qué tipo de ‘clown’ contratan.

    La utilización de la comedia puede ser tremendamente eficaz para afirmar, por ejemplo, las medidas de seguridad industrial. Algo tan serio como eso, llevado al plano del humor, que identifique y magnifique los errores y malos hábitos de los trabajadores, sirve extraordinariamente.

    arturo.castillo@catarsis.ec «ES UN MAL SIGNO QUE LOS SUJETOS NO SEAN CAPACES DE BURLARSE  DE SI MISMOS, QUE NO ASUMAN SU LADO ABSURDO»

  • Ellos sí encuentran un espacio para parquear

    Mónica Orozco (I) Redacción Quito / LÍDERES

    Cuando era niño, su madre siempre le hacía rezar a Santa Rita, patrona de las causas imposibles, para conseguir un puesto de parqueo. En el 2009, José Daniel Terán, ya convertido en arquitecto, abrió una empresa que se especializa en desarrollos tecnológicos para las ciudades y que llamó, sin dudar, «Santa Rita, dame un puestito».

    Terán está convencido de que gracias a la tecnología ya no es necesario invocar a los santos para conseguir un espacio en un parqueadero.

    El caos vehicular que existía en España, donde Terán estudio Arquitectura Biodigital, y la falta de mano de obra llevó a ese país a invertir en automatización, en especial, en sistemas de parqueo, dice y consideró que era un nicho con potencial para desarrollar en Ecuador.

    Al volver al país, uno de los primeros productos que ofertó Terán fue el parqueo guiado: paneles al ingreso del estacionamiento y sensores que orientan al usuario sobre la disponibilidad de parqueos. Uno de sus primeros clientes fue el Centro Comercial Iñaquito (CCI).

    «Generó que los clientes consigan parqueo más rápidamente, optimicen su tiempo…», dice Ángela Echeverry, gerenta de operaciones del CCI. Además, mejoró la ocupación; antes cada plaza de estacionamiento se ocupaba 2,8 veces al día, hoy se ocupa 10 veces, dice.

    Instaló un sistema similar en Antara Plaza Gourmet. «Al principio era una novedad, pero hoy la gente quiere tener estas facilidades», dice Dayana Herrera, de administración y ventas de la constructora Obrum, que levantó la plaza.

    La mayor parte de tecnología que utilizan es austríaca y española. Pero Santa Rita se encarga de personalizar los sistemas de acuerdo a las necesidades locales, por lo que desarrollan software u otras soluciones para sus clientes.

    Por ejemplo, en Malecón 2000 no solo se automatizó el parqueadero, sino que se implementó el cobro con cajeros especiales distribuidos a lo largo de este espacio, los cuales eliminaron las colas a la salida de los estacionamientos. «Somos como un buen sastre que hace el terno a medida», dice Lucas Troya, socio y gerente comercial de Santa Rita, negocio que facturó USD 2 millones en 2013.

    Hoy automatizan parqueaderos internos, pero la meta es proveer todo tipo de sistemas inteligentes a los municipios para que mejoren su movilidad. Los parqueos inteligentes permiten visualizar por Internet las plazas libres y reservarlas, en tres minutos, diceTroya. En planes de desarrollo están centros de recarga de vehículos eléctricos, etc.