Etiqueta: gastronomía

  • Una oferta de té para todos los paladares

    Redacción Guayaquil

    Bethsy Buitrón gusta del té desde que era una niña. Ella estudió gastronomía en Argentina hace cinco años, en donde se especializó como sommelier de té. Hoy es la propietaria de Camelliastea, en Guayaquil. El negocio oferta té y postres con base en esta infusión. Además, tiene líneas de conservas, de vinagres y aceites saborizados.

    Camelliastea surgió el año pasado, cuando Buitrón volvió al país tras culminar sus estudios. Su idea era abrir un negocio en el que pueda aprovechar sus conocimientos sobre el té y transmitirlos. Así, en diciembre pasado, invirtió USD 1 000, de ahorros personales para preparar productos derivados del té.

    El nombre lo eligió basándose en el nombre de la planta del té Camellia sinensis. Los productos los prepara sola, en su domicilio, ubicado en el norte de Guayaquil. El sistema de ventas es online. Los pedidos los recepta a través de Facebook e Instagram (CamelliasteaEC). Esta red social ha sido fundamental para la promoción de sus productos.

    Por ejemplo, Priscilla Chang conoció de la oferta de Camelliastea, a través de Instagram. Para ella, el té de Camelliastea es de exquisito sabor y buena calidad. «Yo consumo té, de tres a cuatro veces al día, y para mí es importante poder adquirir un té de las características con las que los hace Bethsy».

    El té viene en dos presentaciones: tubos de 10 gramos y bolsas de 6 gramos. El precio es de USD 7 y 3,50, respectivamente. Los sabores van desde canela y té verde hasta Madagascar y té negro. Los postres son cheesecake, bombones, churros, bizcocho, donas, galletas, génoise y más, con base en té verde.

    Las variedades del vinagre son estragón, manzana, frambuesa, finas hierbas, y rosas, entre otros. Por otro lado, los aceites tienen sabores como romero y ajo; hongos y perejil; finas hierbas; tomates deshidratados y pimienta de Jamaica…

    Para estas preparaciones, Buitrón se provee tanto del exterior como localmente de los insumos. Utiliza cacao y rosas ecuatorianas en algunas de sus mezclas. En cambio, la materia prima para el té verde y el té negro es traída principalmente de Asia.

    Lidda Campos es otra clienta de Camelliastea. Ella consume té verde de esta marca una vez al día -hace aproximadamente un mes- durante el desayuno. Para ella, un té natural es necesario en su régimen alimenticio, que se enfoca en consumir productos naturales. «Antes no tenía dónde adquirir un té que no sea preparado industrialmente. El de Camelliastea cumple con mis expectativas», dice.

    Como estrategia de crecimiento, Buitrón abrirá en agosto un ‘tea shop‘ en Urdesa (norte de Guayaquil).

  • Michael Ruiz: ‘El europeo gusta de la gastronomía nacional’

    Redacción Guayaquil

    ‘Vivo en España desde 1999. Desde ese año me formé en el área de gastronomía, incluyendo una especialización como sumiller, avalado por la Cámara de Comercio de Madrid.

    Trabajé en diversos restaurantes en la ciudad, como La Fundición, La Cantera, Mesón de Águila y El Fogón de Trifón.

    Hoy, soy el propietario de Paralelo Cero, uno de los más renombrados de Madrid. La idea de abrir este restaurante surgió en el 2008. Inicialmente quería hacerlo en Ecuador, pero junto a mi socio de esa época, Pedro Duart, vimos una gran oportunidad en España.

    El fin fue dar a conocer la gastronomía ecuatoriana al cliente europeo, con una fusión de elementos mediterráneos. Así, en el 2011, abrimos el local, con el financiamiento del Banco Pichincha.

    La elección del sitio fue estratégica. Paralelo Cero está ubicado en el exclusivo barrio de Salamanca (centro), en medio de dos calles comerciales: Serrano y Velásquez. Se encuentra en la zona denominada ‘la milla de oro’, que nos otorga distinción frente al público al que queremos llegar.

    Lo más difícil al inicio fue romper el estereotipo del ecuatoriano que existe en España, relacionado con su comportamiento. Lo logramos, demostrando profesionalismo y con la calidad de nuestros productos. La acogida fue excelente. Los comentarios sobre el restaurante y el país fueron positivos. Pero fue un gran reto lograr ese cambio.

    Paralelo Cero tuvo una época complicada a inicios del 2012, producto de la crisis europea. Pero a partir de octubre de ese año la clientela se incrementó y ha mantenido un ritmo sostenido de crecimiento. Hoy, recibimos a 5 000 visitantes al mes en promedio. Más del 90% de los visitantes son europeos y turistas de todo el mundo. Los ecuatorianos son pocos.

    La distribución fue también clave. El local cuenta con tres áreas: una reservada, para 10 personas; el área general, para 40 comensales; y un área de mesas altas, enfocada en piqueos y coctelería.

    Esta área es importante, ya que atrae la atención del cliente, por la variedad de la oferta. Allí tenemos una máquina de carbónicos y ofertamos más de 50 marcas de ginebra, 15 de vodka, 10 de whisky, 10 de ron… de todo el mundo, entre ellas marcas nacionales; por ejemplo, Pílsener. Club y Zhumir se usan como ingredientes de los cocteles.

    Otro fuerte es la oferta de vinos. Tenemos una carta de más de 180 referencias. Además, ha sido fundamental ofertar platos para el alcance de todos. Los hay desde 12 euros (USD 15) hasta los 30 (USD 39). En promedio, una visita bordea los 35 euros (USD 45).

    El trabajo personal y profesional reflejado en Paralelo Cero ha sido reconocido. Por ejemplo, en el 2011 el sitio recibió el Premio Metrópoli al Restaurante Revelación de Madrid, que reconoce lo mejor de la gastronomía madrileña.

    Ese año fui seleccionado como uno de los 100 Latinos Madrid. Se trata de un premio que identifica y reconoce la labor de los latinoamericanos residentes en l a ciudad, que con su esfuerzo contribuyen al desarrollo de España».

    Estudios

    Cocina. Estudió en la Casa de Campo de Madrid.

    Sumiller. Se especializó en el Instituto de Formación Empresarial de la Cámara de Comercio de Madrid.

    Máster. Es máster en Comercialización de Vinos por la Universidad Rey Juan Carlos.

  • La gastronomía se toma Lima en septiembre

    Redacción Guayaquil y Agencias

    Todas las variedades imaginables de cebiche, platos con múltiples cereales andinos o extraños peces y frutos de la Amazonía… serán los protagonistas de Lima (Perú), hasta el próximo 15 de septiembre. La consigna es comer y probar nuevos sabores en la gigantesca muestra gastronómica Mistura, que abrió sus puertas al público el pasado 6 de septiembre.

    La mayor feria culinaria en Latinoamérica, instalada en un enorme predio junto al océano Pacífico, busca promover la gastronomía como herramienta de desarrollo sostenible, inclusión social e identidad cultural.

    «Mistura es un encuentro que se ha ido consolidando desde abajo y desde el interior de Perú, con un impacto muy positivo en el país y en el mundo «, dijo el presidente Ollanta Humala al inaugurar la exposición, el 5 de septiembre.

    La sexta edición de la muestra anual reúne una gran diversidad de productos y especialidades que han hecho famosa a la cocina peruana en el mundo.

    Secciones especiales de la muestra están dedicadas al café, al pisco, a diferentes variedades de pan y chocolates.

    El evento gastronómico reúne a una treintena de cocineros llegados de todo el mundo, desde el catalán Albert Adriá, hermano del famoso Ferran Adriá de El Bulli; al brasileño Alex Atalá (D.O.M); el sueco Magnus Nilsson (Faviken) y el peruano Gastón Acurio.

    En un país donde la gastronomía es una pasión, se espera que medio millón de peruanos y más de 20 000 extranjeros se acerquen a Mistura a disfrutar de las especialidades que ofrecen las regiones peruanas.

    «Mistura es hoy la feria gastronómica más importante de América Latina y la única en el mundo que, además de alta cocina, da espacio a los productores de todo el país», dijo Bernardo Roca Rey, director de la Asociación de Gastronomía peruana, organizadora del evento. Campesinos de las sierras y de la selva amazónica, y pescadores de la extensa Costa peruana presentan sus mejores creaciones culinarias, en un sitio invadido de aromas y cocinas humeantes.

    Se trata de un total unos 130 restaurantes de todo el país, que ofrecen sus platos a precios accesibles.

    Una de las grandes atracciones este año en Mistura es la instalación de un gran acuario de 600 metros cuadrados, que cautiva a todos los visitantes.

    Mistura
    Extensión. Más de 4 000 metros cuadrados están destinados a esta feria.

    Invitados. Albert Adriá, Andoni Luis Aduriz y José Andrés, Rene Redzepi y Massimo Botura, son algunos de los invitados.

    Actividades. Parte de las actividades son foros y charlas.

    LA CIFRA:
    20000 extranjeros prevé recibir esta feria

  • Un emprendimiento que mezcla sabores exóticos y el mundo 2.0

    Redacción Quito

    Mayté Bravo pudo combinar dos de sus pasiones para iniciar su negocio: la gastronomía y el ciberespacio. Esta guayaquileña, que es analista de sistemas de profesión, también ha ejercido el periodismo. Por ello, un blog y Twitter se han convertido en sus herramientas de trabajo.

    Fue ahí, en su página personal denominada La Cocina de Palas que su emprendimiento comenzó a tomar forma.

    En el blog, cuyo nombre surgió gracias a su pseudónimo virtual de Twitter, ‘@cartasdepalas’, Bravo publicaba sus recetas de cocina favoritas.

    Ella recuerda que su primera publicación la realizó en marzo del año pasado; un instructivo para preparar lasaña casera tuvo éxito entre sus followers. Luego, gracias a las sugerencias y recetas, su blog comenzó a ganar popularidad.

    Por ello, una de sus amigas le sugirió que ese era el espacio propicio para promocionar una de sus preparaciones que tenía éxito entre sus conocidos: su famosa mermelada artesanal.

    Pero la mermelada de Bravo no solo tenía un buen sabor y el valor agregado de ser elaborada con procesos artesanales y caseros, sino que los sabores y las combinaciones, aunque en principio suenen extrañas y exóticas, cautivaban a los paladares de sus degustadores.

    Ají y pimiento, cebolla, kiwy y banano, tomate de árbol… eran algunas de las opciones que ofertaba en la red. Aprovechó que el nombre de su blog era conocido y así nacieron las mermeladas La Cocina de Palas, en julio del año pasado.

    A los tuiteros les llamó la atención las extrañas fusiones y comenzaron a hacer sus pedidos. Pero para poder cumplirlos, Bravo realizó una inversión aproximada de USD 2 500, que los destinó a la compra de materia prima, frascos y un ‘Thermomix’ (máquina especializada para mezclar, amasar, cortar…).

    Actualmente, al mes tiene una facturación promedio de USD 250. El año pasado, en Navidad, elaboró 300 unidades para Indumaíz, que entregó la mermelada a sus empleados.

    Alejandro Lozada, gerente Indumaíz, señala que le recomendaron el producto y le llamó la atención por la preparación artesanal. Confiesa que luego de probarla y de obsequiar a sus empleados, se convirtió en un cliente. «Me gustó mucho la de ají y pimienta», añade.

    Juan Fernando Carpio, economista y tuitero, comenta que las mermeladas que más le gustan son la de cebolla y la de ají y pimienta. Él destaca la atención que Bravo brinda a sus compradores.

  • El mar fue el eje de este congreso gastronómico

    Del lunes 1 al jueves 3 de octubre, en Guayaquil, se realizó el Congreso Latitud Cero. Se trató de un evento gastronómico, turístico y académico, que reunió la tradición culinaria del país, con la presentación de reconocidos cocineros locales y extranjeros.

    La localidad escogida para este congreso fue el Teatro Sánchez Aguilar . El primer día de Latitud Cero lo inauguró el chef español Joan Roca. Durante su ponencia, reafirmó la tendencia que los chefs globales están siguiendo actualmente: cocinar para que la memoria del comensal divague por sus recuerdos y que esa cocina sea sostenible.

    El chef Ángel León, del restaurante español Aponiente, no pudo asistir al congreso, pero envió a su representante, Juan Luis Fernández, y su compañero, Carlos Caballero. Su exposición se basó en el juego de la memoria y la incidencia que el ambiente marino tiene durante ese recorrido gastronómico.

    También asistieron al congreso, como ponentes, el chileno Rodolfo Guzmán, el español Josean Alija, los ecuatorianos Pablo Pavón y Michael Ruiz, la japonesa Keiko Nagae, entre otros reconocidos nombres y rostros del mundo culinario.

    El evento, cuyo tema central este año fue el mar, tuvo el aval del Ministerio de Cultura, Ministerio de Turismo e instituciones educativas locales.

    La Escuela de los Chefs coordinó la logística y apoyó también con la organización del evento, que es una iniciativa de Espai-Epicur.

    El objetivo, según los organizadores, fue crear un evento que involucre a todos los actores del sector gastronómico nacional, para fomentar su desarrollo.

    Los asistentes tuvieron la oportunidad de escuchar las experiencias de los expositores, ver preparaciones en vivo y degustar los platillos preparados por estos reconocidos cocineros a escalas nacional e internacional.

  • Máquina de empanadas tiene su patente mundial

    Claudia Polanco Yermanos. EFE

    Una máquina para producir empanadas colombianas a gran escala, creada por una empresa de la ciudad de Manizales, obtuvo una patente internacional que permitirá introducir este aparato en 180 países y ampliar el consumo mundial de este producto típico.

    Solo en Colombia se consumen diez millones de empanadas diarias, una delicia gastronómica que en esta nación se acostumbra a freír y está hecha a base de maíz y con un relleno de carne de res o de pollo, arroz, papa y verduras.

    Esta aventura empresarial comenzó hace cuatro años, detalla la gerenta de Maquiempanadas, Emma Mesa. «Decidí seguir el sueño de mi papá, Carlos Mesa, de tecnificar la industria de alimentos étnicos latinos, como empanadas, patacones, arepas y pupusas, que por generaciones se han hecho a mano».

    Pasado este tiempo, Maquiempanadas ha logrado «una patente de registro de marca y una patente PCT (Tratado de Cooperación en materia de Patentes) que nos protege en 180 países en el momento en el que queramos introducir nuestras máquinas en dichos mercados».

    Para lograr su objetivo, Maquiempanadas buscó el apoyo de entidades como el Servicio Nacional de Aprendizaje e iNNpulsa Colombia, la unidad del Gobierno que promueve el emprendimiento de alto impacto y la innovación. También de Manizales Más, una alianza constituida por actores públicos, privados y académicos que fomenta el desarrollo económico y la creación y crecimiento de las empresas de esta urbe, una de las que conforman la región del Eje Cafetero.

    Estos patrocinios son fundamentales, argumentó Mesa, pero lo importante «es tener una idea, el deseo de sacarla adelante y el convencimiento de que esa iniciativa es en beneficio de la comunidad».

    Bajo esa premisa, padre e hija idearon un mecanismo compuesto de acero inoxidable, polipropileno, cerebro electrónico y contador, que en sus versiones manual, semiautomática y automática produce entre 300 y 2 000 empanadas por hora. El invento se comercializó inicialmente en Colombia, pero después la familia Mesa observó que las posibilidades de exportar la máquina eran enormes «porque todos los países de América Latina tienen sus propias empanadas, con variaciones en la masa y en el relleno».

    Maquiempanadas, que actualmente cuenta con 10 empleados directos, ya vende sus equipos en Estados Unidos, Centroamérica, Ecuador, Francia, Australia, Suiza, España y Canadá, tanto a colombianos como a dueños de restaurantes de otras nacionalidades que han querido optimizar su producción.

    Los Mesa se enfocaron en fabricar aparatos para trabajar materias primas que se constituyen en la base alimentaria de los latinoamericanos, como el maíz, la yuca y el plátano, y que tienen un valor en el mercado que oscila entre los USD 5 000 y 25 000.

    Números
    Las ventas del año anterior.  En el 2013 la facturación de Maquiempanadas fue de USD 175 000 y este año están enfocados en fortalecer su mercado en EE.UU. «por la gran cantidad de latinos que compran masivamente alimentos típicos de sus lugares de origen», dice Emma Mesa.La visión.  El propósito es, según la representante de la compañía, «que en cada planta en el mundo en la que se hagan platos étnicos haya una máquina marca Maquiempanadas por ser una solución económica y eficiente que mejora la realización, estandariza el producto y hace crecer las ventas». En la región llegan a Centroamérica y Ecuador.

  • El mercado gastronómico busca su marca

    Redacción Quito

    Quesos de cabra, miel de abeja, pan, yogur, tortillas, mantequilla… preparados de formas tradicionales y sin insumos químicos. Estos productos son elaborados por Alimentos Agroecológicos, una de las primeras asociaciones que forma parte de la Sociedad Ecuatoriana de Gastronomía (SEG).

    Esta agrupación pretende impulsar la comida nacional, sus saberes y sabores para internacionalizarla. La SEG fue presentada el pasado 19 de marzo y busca reunir a los actores que participan en la cadena de producción de la gastronomía ecuatoriana. El objetivo principal es que todos tengan las mismas oportunidades en el mercado para consolidar la marca de la comida local.

    A través de una identidad gastronómica, por medio del redescubrimiento de los sabores y productos endémicos, se trata de incursionar en mercados internacionales. Con la marca se pretende avalar eventos y difundirlos, desarrollar proyectos y brindar consultorías.

    Pero para conseguirlo la SEG tiene como primera tarea encontrar a todos los participantes vinculados al sector gastronómico, como chefs, productores de alimentos, universidades, restaurantes, y también empresas o personas que de una u otra forma están ligadas al sector alimenticio, dice Grace Donoso, del comité de la SEG.

    Mientras que Patricia Donoso, presidenta de esta agrupación, comenta que se intenta unir a productores, artesanos, servicios, gremios… con el fin de apoyarse de forma más efectiva. El proceso de afiliación de los socios demorará tres meses; mientras tanto realizarán actividades, como curso de catadores de chocolates en abril.

    La primera gran actividad de la SEG será la realización conjunta de los eventos Cero Latitud (cine independiente) y Ecuador Cultura Gourmet, que se llevará a cabo en el parque Bicentenario (Quito), del 1 al 5 de octubre. Este es uno de los mecanismos que busca la SEG para posicionarse en el medio.

    Este encuentro se planificó en noviembre pasado, a través de una reunión entre Mauricio Acuña, de Cero Latitud y Patricia Donoso, junto a otros miembros de la SEG. Las dos agrupaciones unieron sus actividades para generar mayor apoyo y fondos gubernamentales.

    La SEG consigue su financiamiento con aportaciones de cada miembro; el monto que tienen que abonar es de USD 200 para ser parte de la sociedad. Al momento ya tiene 18 miembros entre organizaciones, personas, hoteles, cofradías y algunos alumnos.

    Alimentos Agroecológicos, que se unió a la SEG la semana pasada, está conformada por 14 personas. Por medio de su afiliación buscan la oportunidad de ganar reconocimiento por los turistas y llegar a hoteles con sus productos, así lo asegura Ximena Porras, su vocera.

    • 18 miembros tiene esta nueva asociación
  • 10 nuevas franquicias de Perú quieren aterrizar en Ecuador

    Redacción Quito

    Perú confía en el potencial de su gastronomía para expandir su oferta de servicios en el Ecuador. Por ello, una delegación de Promperú mantuvo -la semana pasada- reuniones en Quito y Guayaquil, con el objetivo de cautivar al inversionista ecuatoriano y aterrizar con otras marcas en el país.

    En el portafolio se ofrece una decena de restaurantes y productos alimenticios: Bravo Restobar, Estadio Fútbol Club, El Huarike, Las Canastas, Restaurante Caplina, Niqei, El Escondite del Gordo, Q’Churros, Wuju y Curich.

    Las inversiones, en algunos casos, van desde los USD 10 000 y pueden bordear el medio millón de dólares, según el tipo de negocio, la adecuación física, la rentabilidad, la capacitación, etc.

    El coordinador general del Departamento de Exportación de Servicios de Promperú, David Edery, explicó que Ecuador es un mercado atractivo para las franquicias peruanas de gastronomía y eso se refleja con la presencia de reconocidas marcas peruanas en Quito y Guayaquil. Mencionó, por ejemplo, a China Wok, Segundo Muelle, Embarcadero 41, Hanzo, Osaka, Tanta… Actualmente, en el vecino país operan 319 franquicias, que generaron ingresos por USD 284 millones en el 2012. En el 2010, la facturación alcanzó los USD 188 millones. Estos negocios también otorgan 12 800 puestos de trabajo. En Perú funcionan 220 000 restaurantes y, de ellos, unos 1 500 se encuentran en el exterior.

    La embajadora peruana en Quito, Elizabeth Astete, destacó el crecimiento de las franquicias dentro del sector de servicios de la oferta exportable de su país. «Estamos cultivando el concepto de excelencia a través de la gastronomía peruana». En el 2012, la exportación de servicios le generó a Perú USD 5 130 millones, indicó la diplomática.

    De acuerdo con las cifras de Promperú, las marcas que lideran la expansión internacional de las franquicias gastronómicas peruanas son: China Wok (56), La Mar (8), Astrid & Gastón (7), Tanta (8), Segundo Muelle (4), Bembos (4), Osaka (4), entre las más importantes.

    En cuanto a los países de destino, Chile se encuentra en primer lugar con 28 franquicias peruanas. Le siguen: El Salvador (16), Ecuador (13), Panamá (7), México (6), Guatemala (6), etc. Según Edery, el 40% de turistas que va al Perú, lo hace con fines gastronómicos.

    El negocio en cifras
    El efecto arrastre en el país. En Perú actualmente existen 85 escuelas de gastronomía.El turismo. Un 97% de turistas se siente satisfecho de la gastronomía.319 franquicias operan en el Perú. 34% es de marcas locales.

  • La preparación del pollo tiene un componente más natural

    Redacción Quito

    La venta de pollos preparados es un negocio que tiene acogida en Quito y quienes desean competir tienen que innovar. Bajo ese principio, Papi Gallo entró en el mercado.

    Este sitio se abrió el 1 de septiembre del 2012, cuando Esteban Páez, su dueño, tenía 25 años. «Yo trabajaba como asesor comercial en una distribuidora de licores. A mí me correspondía el área de restaurantes y hoteles. Siempre entraba por la cocina de estos sitios y me gustaba el ambiente. Laboré tres años y ahorré. Fue entonces que decidí ponerme un restaurante, aunque no sabía de qué».

    La primera decisión que tomó este emprendedor fue buscar un local. Un día su padre le comentó que había una casa antigua en la calle Luis Tufiño, en el sector de La Rumiñahui (norte).

    Le gustó el sitio y fue en ese momento que decidió poner un local de pollos, con un concepto revolucionario: cero grasa.Así, puso en marcha el montaje del futuro restaurante. Primero, remodeló la casa con una inversión de USD 25 000. Además, contaba con 15 000, pidió un crédito bancario de 20 000, a tres años plazo, y solicitó 10 000 a sus padres.

    Fue entonces que se concentró en el concepto culinario. Para ello, buscó asesoría e instaló una parrilla, que también cumple la función de horno. La grasa natural del ave cae en unos recipientes y la preparación es totalmente sana.

    «Soy cliente desde que se inició este negocio. Me gusta, porque no usan aceites ni nada de esas cosas, evitando así males como el colesterol alto. Además, la atención es personalizada», indica Paulina Valencia, quien siempre acude al sitio.

    Páez atiende permanentemente en el restaurante, que funciona siempre, excepto la noche del 31 de diciembre.

    Al inicio solo se ofertaba pollo, consomé, ensaladas, arroz y papas, pero tras un año de funcionamiento se diversificó y hoy en el menú constan seco de pollo estilo peruano, chaulafán, carnes… Todos se preparan con un concepto saludable.

    Esta idea le ha permitido crecer al sitio «como la espuma» y casi ha se logrado recuperar la inversión inicial. «Falta poco para pagar el crédito», comenta Páez.

    El año pasado, el sitio facturó USD 90 000. Al inicio vendía 6 500 en promedio al mes y ahora hasta 8 000.

    Asimismo, el número de empleados creció. Empezó con dos colaboradores y ahora están tres de planta y uno temporal. «Esta labor me ha ayudado bastante. Lo conseguí a través de Socio Empleo», dijo Paola Cabezas, mesera del sitio.

    Directo a franquiciar
    Iniciativa.  Esteban Páez está dispuesto a franquiciar su negocio en USD 2 000. Por ese monto, se otorga el uso de la marca, imagen, recetas, etc. Él ganó un concurso para ofertar 700 pollos a Aglomerados Cotopaxi, en la Navidad pasada.60 es la cantidad de pollos que vende el fin de semana

  • Premian al sabor de la región

    Bruselas, EFE

    Licores y cervezas componen mayoritariamente la lista de 74 productos de 12 países de Latinoamérica premiados la semana pasada en Bélgica por su sabor y calidad tras pasar el examen de 120 cocineros y sumilleres internacionales.

    El pasado viernes se conocieron los ganadores de la décima edición de los International Taste and Quality Awards, que cada año reúnen en Bruselas a 60 chefs y 60 sumilleres de reconocido prestigio para catar productos de consumo corriente, venidos de todo el mundo y premiar a los más excelentes.

    Este exigente jurado evaluó a ciegas la calidad y el sabor de más de 1 250 productos de 75 países y entregó a los mejores una, dos o tres estrellas doradas.

    Colombia fue el país latinoamericano que más distinciones consiguió con 20 productos premiados, en tanto que Bolivia, Brasil, Ecuador, Perú y México recibieron cada uno ocho reconocimientos. Les siguieron Argentina, con cuatro productos premiados y Venezuela, con tres, mientras que Uruguay, Paraguay y Guatemala recibieron cada una dos reconocimientos y Costa Rica uno.

    Además un café colombiano y una cerveza boliviana se llevaron el premio Crystal, máxima distinción que se concede a aquellos productos que han obtenido la puntuación más alta (tres estrellas) tres años consecutivos.

    Los productos latinoamericanos que más éxito tuvieron entre el jurado fueron las cervezas, que coparon 28 de los 74 premios, seguidas de las bebidas espirituosas, con 20 premios entre licores, tequila, aguardientes y cachaça brasileña.

    Todos los fabricantes que sometieron sus productos a examen de forma voluntaria podrán ahora lucir el sello distintivo que otorga el International Taste and Quality Institute sobre sus envases o en campañas promocionales.