Etiqueta: taller

  • Un taller de mecánica para todo tipo de bicis

    Redacción Quito

    Durante un paseo de bicicleta en EE.UU., Fernando Isch decidió que su pasión se convertiría en su negocio. Así fue que en el 2006 inició, junto con un amigo, la firma Bikanics.
    Se trata de un taller especializado en arreglos de bicicletas. Después de seis años de operaciones lo vendió al Grupo Marathon, pero un año más tarde empezó por segunda ocasión.

    Su nueva apuesta, Bikefix, es un taller de reparación y mantenimiento especializado en bicicletas. En este se ofrece trabajo personalizado y un sistema de ‘bike fitting’. Esto quiere decir que a través de un análisis se asesora sobre la mejor posición, tamaño y manera de montar la bicicleta para mejorar el rendimiento y disminuir las lesiones.

    “Siempre pensé que el taller debía ser como un concesionario de autos, pero para las bicis”, agrega Isch. Por esta razón, y desde los inicios de su primer taller, decidió ser mecánico especializado en este segmento.

    En 2006 se convirtió en el primer ecuatoriano con un título de mecánico profesional otorgado por el United Bicycle Institute en Oregon y en 2008 realizó una certificación profesional en suspensiones.

    Con una inversión de USD 60 000, su nuevo taller cuenta con tres estaciones profesionales de reparación y un cuarto para realizar el ‘fitting’. La empresa está conformada por dos mecánicos más y dos colaboradores en el área administrativa. En promedio trabajan con 10 a 12 bicicletas diarias, llegando a una facturación mensual que rodea entre los USD 12 000 y 15 000.

    “Todavía existe un tema de desconocimiento sobre la tenencia de una bicicleta. Para muchos sigue siendo solo ‘una bici’ pero ahora son piezas mecánicas que pueden llegar a costar miles de dólares. Por esta razón necesitan cuidarse y mantenerse para incrementar la vida útil”, explica Isch.

    Los precios en su taller dependen del tipo de servicio que se requiere. El más básico que comprende lavada, lubricada y calibrada cuesta USD 15, mientras que el servicio más completo, que es una desarmada íntegra de la bicicleta, tiene un costo de un total de USD 60. De los trabajos realizados el 70% corresponde a reparaciones y mantenimiento y el 30% ‘bike fitting’.

    En este servicio, con costo de USD 100, los clientes pedalean en un rodillo electrónico que envía información al software biomecánico. Este programa analiza la posición y estilo para corregirlo. Al final el cliente obtiene un informe sobre su rendimiento.

    “Además, el fitting, en mis tres bicicletas, me ha ayudado a no lesionarme, tener dolores musculares y ha mejorado mi rendimiento competitivo”, afirma Mario Méndez, seleccionado nacional y de Pichincha para triatlón.

    Sus planes a corto plazo son abrir nuevos talleres en Quito, el primero en el Quito Tenis, en el norte de la ciudad. Luego esperan poder expandirse a escala nacional. Al momento cuenta con clientes en Galápagos, Ambato, Riobamba y Cuenca.

    Fernando Isch es el propietario y mecánico principal de Bikefix. Foto: Foto: Julio Estrella /LÍDERES
    Fernando Isch es el propietario y mecánico principal de Bikefix. Foto: Foto: Julio Estrella /LÍDERES
  • El vehículo inclusivo, en su taller

    Cristina Márquez (I)
    redaccion@revistalideres.ec

    Las bicicletas, motos y automóviles se convierten en nuevos objetos cuando ingresan al taller de Inclusivo. Esta iniciativa riobambeña se dedica a transformar todo tipo de vehículos convencionales en vehículos para personas con algún tipo de discapacidad.

    Juan José Ruiz, de 36 años, es el propietario de la microempresa y el creador de las innovadoras soluciones que se entregan a personas de escasos recursos económicos. Él combina piezas metálicas con motores, dispositivos eléctricos, pedales y otros artefactos, para ensamblar sus proyectos.

    El resultado final es un vehículo adaptado a su nuevo conductor. Cada detalle mecánico está pensado en la estatura, el tipo de discapacidad, el grado de motricidad y otros aspectos de los clientes.

    La cualidad más importante es que los vehículos tienen un bajo costo y son accesibles a todo el público. “El propósito de la empresa no es ganar dinero sino aportar soluciones de movilidad a las personas que lo necesitan”, cuenta Ruiz.

    Él fundó Inclusivo en el 2012, después de que un accidente laboral le causara una incapacidad temporal. Durante casi un año, él no pudo mover sus rodillas y experimentó todas las dificultades que las personas con discapacidades enfrentan a diario.

    “El transporte público no está pensado para las personas con discapacidad y moverse en taxi o contar con un vehículo propio es demasiado costoso y no todas las personas pueden hacerlo”, cuenta el emprendedor.

    Esa experiencia lo motivó. Transformó un espacio de su casa, situada en el centro de Riobamba, en un taller al que llama ‘el laboratorio de los sueños’, pues según él, al igual que en el laboratorio de Frankenstein, allí se crea nueva vida.

    Ruiz invirtió unos USD 15 000 de sus ahorros y algunos aportes solidarios de sus familiares y amigos, para adquirir máquinas soldadoras, cables y otras herramientas. Lo demás es cuestión de imaginación y creatividad.

    También se apoyó en sus estudios en la especialidad de electricidad, que cursó en el Instituto Carlos Cisneros, y en los conocimientos sobre mecánica que aprendió de su padre Luis Ruiz.
    El primer prototipo que diseñó se denominó ‘Inclusivo 1’. Ese vehículo está diseñado para las necesidades de movilidad de las personas que padecen la enfermedad ósea de Paget.

    Tiene la misma funcionalidad que un scooter eléctrico que en Estados Unidos y Europa cuesta entre USD 3 000 y 6 500. Pero su versión tuvo un costo final de USD 2 000, incluyendo el costo de la adquisición de una motocicleta de segunda mano.

    El ‘Inclusivo 1’ es la adaptación a una motocicleta automática, por lo que no requiere de embrague ni marchas, se manipula únicamente a través de botones instalados en el volante. Antes de diseñarlo Ruiz estudió cuidadosamente el tipo de discapacidad de su primer cliente, Galo Uvidia. Le realizó exámenes psicosensométricos y psicológicos.

    “Eso nos diferencia de cualquier otra marca disponible en el mercado. Todos tienen vehículos estándar para cada discapacidad, mientras que nosotros lo construimos en torno a las necesidades de cada persona”, afirma Ruiz.

    Tras tres meses de evaluaciones surgió el diseño del vehículo. La dificultad para mover las extremidades superiores se solucionó con un volante fácil de manipular y con botones y palancas más sensibles. Para asegurar la estabilidad y el equilibrio del vehículo, se modificó también el sistema de dirección de la motocicleta. Se instalaron dos llantas delanteras y una posterior aseguradas con una estructura metálica que impide que el vehículo se voltee.

    Según un estudio de mercado que se realizó antes de la creación de la empresa, en Chimborazo hay alrededor de 12 300 personas con discapacidad física. Y solo un 10% pertenece a un grupo económico activo y cuenta con los recursos para adquirir estos vehículos.

    El diseño fue presentado a entidades que promueven la inclusión de personas con discapacidad, sin embargo, ninguna apoyó el proyecto por lo que la empresa se financia con autogestión. De todos modos, él sigue con su misión.

    El cliente

    ‘Mejoré en mi trabajo de mensajero’

    Galo Uvidia. El primer cliente de Inclusivo

    Tengo 41 años y convivo con la enfermedad ósea de Paget. Es degenerativa y hace que mis huesos se encojan; no puedo mover las piernas y la motricidad de mis brazos es limitada.
    Hace tres años me movilizaba por las calles de la ciudad de Riobamba en una silla de ruedas convencional. Pero era difícil maniobrar adecuadamente y estuve cerca de accidentarme varias veces. Además, muy pocas personas me ayudaban.

    Desde que tengo el vehículo mi vida ha cambiado; ahora puedo movilizarme con facilidad y en poco tiempo, y gracias a eso pude mejorar en mi trabajo como mensajero en el Municipio de Riobamba.

    La moto inclusiva alcanza hasta 60 kilómetros por hora, funciona con gasolina y puede recorrer hasta 400 kilómetros con 10 litros de combustible.

    Antes me demoraba más de una hora desde el Municipio hasta el Instituto Carlos Garbay. Ahora voy más rápido y los automóviles me respetan.

    Juan José Ruiz, de 36 años, es el propietario de la empresa y el autor de las innovadoras soluciones de transporte. Su taller se encuentra en Riobamba. Foto: Glenda Giacometti / LÍDERES
    Juan José Ruiz, de 36 años, es el propietario de la empresa y el autor de las innovadoras soluciones de transporte. Su taller se encuentra en Riobamba. Foto: Glenda Giacometti / LÍDERES
  • Equipos de ‘Emprende Ahora’ recibieron taller de mentoría

    Sofía Ramírez

    Los 23 equipos del programa social ‘Emprende Ahora’ de la Unidad Patronato Municipal ‘San José’ presentaron sus proyectos de negocio a 16 empresarios de la capital. Lo hicieron el pasado 9 de julio durante el ‘Taller de Mentoría’ o ‘Speed Mentoring’ realizado en el auditorio de la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable y Saneamiento (Epmaps), en Quito.

    Durante la ronda de negocios, los representantes de firmas como Metropolitan Touring, Pacari y otras hablaron con miembros de los 23 equipos. El objetivo era retroalimentar las fortalezas y debilidades de cada proyecto, además de generar redes de contacto y compartir experiencias y caso de éxitos.

    María Fernanda Pacheco, presidenta del Patronato San José, mencionó que durante un mes y medio los equipos que integran el programa ‘Emprende Ahora’ se capacitaron en temas de marketing, imagen corporativa, presentación de proyectos y un prototipo de su proyecto.

    Este programa intergeneracional que desarrolla el Patronato San José busca insertar a los adultos mayores en las cadenas productivas de la capital. Además integra la participación de jóvenes universitarios o profesionales para consolidar una sinergia de conocimientos y experiencias entre ambos segmentos de la población.

    Luego de la jornada de mentoría se seleccionarán 10 proyectos finalistas y en la premiación a realizarse el próximo 16 de julio se premiarán a los tres lugares con un capital semilla, fondos que ayudarán al desarrollo de las empresas ganadoras.

    Los equipos de 'Emprende Ahora' recibieron asesoría de empresarios.  Foto: Cortesía/Unidad Patronato Municipal San José.
    Los equipos de ‘Emprende Ahora’ recibieron asesoría de empresarios.
    Foto: Cortesía/Unidad Patronato Municipal San José.
  • Una noche y dos días para probar ideas innovadoras en Quito

    Pedro Maldonado

    Los esfuerzos para generar innovación y emprendimiento continúan en Quito. Este viernes 17 de abril, arranca la segunda edición del Lean Startup Machine Quito, organizado por el Buen Trip Hub, un espacio de trabajo colaborativo de tecnología e innovación.

    Alrededor de 70 emprendedores participarán en el programa que se desarrollará hasta este domingo 19 de abril. La meta es probar ideas innovadoras y pensar en grande, señala Helene Billaud, representante de Buen Trip Hub, sitio en donde se realizará este encuentro (Foch y 6 de Diciembre).

    Los emprendedores contarán con la guía de 12 mentores nacionales y extranjeros; ellos son también emprendedores con experiencia en desarrollo de productos y servicios.

    El Lean Startup Machine empieza esta noche con la formación de equipos y selección de ideas.

    El sábado se cumplirán talleres sobre desarrollo de clientes, se conocerán casos de éxito y los participantes saldrán a las calles a compartir su idea para probar si existe aceptación.

    El domingo continuarán los talleres y se presentarán las ideas en las calles; en la tarde se seleccionarán las mejores ideas.

    Todas las ideas que participen deben cumplir un requisito: solucionar problemas de los potenciales clientes.

    Lean Startup Machine es un espacio que surgió en Nueva York en el 2013 y se reproduce en la región.

    Todas las ideas que participen deben cumplir un requisito: solucionar problemas de los potenciales clientes. Foto: Archivo/Líderes
    Todas las ideas que participen deben cumplir un requisito: solucionar problemas de los potenciales clientes. Foto: Archivo/Líderes
  • Un taller enseña cómo se hace la joya y… la vende

    Redacción Cuenca

    Tres factores han contribuido a una reducción en la venta de joyas artesanales en Cuenca. El primero es el aumento en el precio de los metales (oro, plata y cobre) que se da desde el 2004.

    El segundo, y consecuencia de ese incremento de precio, es la importación desde Brasil, China, Perú y Panamá de joyas en oro golfi y metales no puros. El tercero es la acogida de la bisutería que se comercializa vía catálogo y se paga a plazos. Ante este cambio en el mercado, Fausto Ordóñez, quien es joyero desde 1985, cambió su estrategia para incrementar las ventas en su taller en Cuenca (centro).

    El año pasado invirtió unosUSD 8 000 y amplió su taller. Instaló vitrinas para exhibir sopletes, balanzas, entre otros instrumentos que usaban los joyeros a inicios del siglo pasado. También exhibe 50 piezas elaboradas por artistas cuencanos, y donadas a Ordóñez, para que mostrara el talento orfebre del artesano azuayo.

    El recorrido por la casa museo, que tiene un área de 150 m², dura unos 20 minutos y allí Ordóñez explica la evolución de ese oficio, desde 1800 hasta hoy. Además, enseña cómo se elabora una pieza.

    Una de las visitantes, Cristina Sandoval, tras conocer en vivo cómo se elabora una joya se animó a comprar una pieza trabajada por este cuencano.

    La reacción de Sandoval es precisamente lo que busca Ordóñez. Por eso ni la entrada, ni el recorrido por la casa museo tiene un costo. Su objetivo es que el visitante entienda el proceso de elaboración y, si se anima, compre alguna pieza.

    Esta estrategia le ha significado cambiar su público objetivo desde el 2010. En ese año vendía sus productos a unos 10 extranjeros al mes y ahora suman 60. “Esto se debe al museo”, enfatiza Ordóñez.

    Al finalizar el recorrido por esta suerte de galería, un libro para firmas reposa en una mesa en madera caoba. Allí constan mensajes de coreanos, estadounidenses, brasileños, argentinos, chilenos… Concuerdan en que la experiencia de conocer la labor detrás de una joya es gratificante.

    Ana Martínez visitó este lugar la semana pasada y conoció por primera vez cómo se elabora una joya. Por eso no dudó en llevarse una pieza aChile, tras resaltar los materiales que utiliza este orfebre.

    Los trabajos

    El proceso. La elaboración de una joya toma hasta 24 horas. Ordóñez realiza los pasos más importantes para enseñar a los visitantes.
    Su inventario. Entre piezas e instrumentos tiene más de 500 artículos, para graficar la historia de la joyería en la capital azuaya.

  • En su taller se diseña el cuaderno personalizado

    Redacción Quito

    Logotipos personalizados, fotografías, caricaturas… son utilizados por Alexandra Jaramillo en Personalízate, una microempresa guayaquileña que elabora cuadernos con diseños elaborados a pedido del cliente.

    Esta iniciativa fue, en principio, el proyecto de tesis que Jaramillo presentó en la Universidad Católica de Guayaquil hace dos años para graduarse como ingeniera en Gestión Empresarial. La tesis se convirtió en su emprendimiento en diciembre del año pasado, con una inversión de USD 5 000.

    Personalízate dio a conocer su producto a través de las redes sociales y el primer cuaderno estuvo listo en febrero, anticipándose al regreso a clases en la Costa. En su primer mes facturó USD 4 000.

    Cuatro personas trabajan con Jaramillo en un taller ubicado en una oficina, en el sector de la Alborada, al norte de Guayaquil. Cuenta con dos computadoras en donde diseñan las portadas de los cuadernos con el material que envían sus clientes y maquinaria para el anillado y perforado de hojas. “Hay quienes piden colores o caricaturas que los identifiquen, otros quieren fotos, mensajes… algo original que los diferencie”, dice Jaramillo.

    Los cuadernos se hacen con pasta dura o cartulina y los precios varían desde los USD 2 hasta los USD 6. Los cuadernos son hechos de forma artesanal con cartón laminado, papel couché, papel bon y alambre de doble anillo.

    Esta microempresa también personaliza tarjetas de presentación que cuestan desde USD 1 en adelante. “Hay clientes que nos piden calendarios con las fotos de la familia o de los hijos, el diseño lo decide el cliente ”, cuenta Jaramillo.

    Twitter es su principal plataforma de difusión. En esta red social promocionan sus productos, también reciben pedidos. Además, fue la plataforma de la campaña Dona tus hojas, con la que subsidiaron el costo de cuadernos para personas de bajos recursos.

    Con una capacidad de producción de 40 cuadernos diarios, Personalízate elabora cuadernos para personas particulares y entidades educativas de Guayaquil como Steiner Internacional y en el Instituto Stabile. En este último personalizó las agendas de sus 34 profesores, confirmó su subdirectora Karla Freire.

    Cinthya Sarmiento, estudiante de últimos año de colegio, quiso personalizar todos sus cuadernos. “Es una idea única porque yo misma elegí los colores y a la semana me entregaron los 10 cuadernos universitarios que pedí”.

    Datos

    La producción. Tiene capacidad para producir hasta 40 cuadernos por día.
    El mercado. Sus clientes van desde estudiantes, hasta entidades  educativas.
    Precios.  Hay  cuadernos desde  USD 2 hasta USD 6, según el material y tamaño.

  • En este taller la asociación es parte del arreglo automotriz

    Redacción Quito

    Desde 1994, Yamil Simon se dedica a la mecánica, pintura, enderezada, electricidad, vidriería y chapistería de vehículos de toda marca.

    Su primer taller arrancó en la Av. De Los Shyris (Quito), luego de abandonar su empleo en Budget, donde trabajó como gerente de mantenimiento. Hoy, cuenta con dos talleres propios en Quito.

    El último se estableció en el sector industrial de la capital, ubicado en la avenida Eloy Alfaro. Con una inversión de USD 2,5 millones adquirió un terreno de 2 800 metros. Luego adecuó las instalaciones y compró maquinaria y equipos como cama de enderezado, sueldas mig, desabolladores, cortadoras de plasma…

    Esta inversión nació como una necesidad de tener algo de su propiedad, indica Simon, pues el otro taller funciona en terrenos que pertenecen al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social y que los utiliza en comodato, desde el 2007.

    Entre las innovaciones que Su Auto le dio al nuevo taller está la protección del medioambiente y de los empleados. Esto es posible al implementar hornos italianos y al trabajar con la empresa de producción de pintura Sherwin Williams, que le provee pintura base al agua, que elimina productos tóxicos.

    Fausto Valverde, asesor técnico de Sherwin Williams, dice que trabajan con el taller hace un mes. El servicio y la calidad de trabajo fueron decisivos para este convenio. “Hemos pintado unos 25 autos en el tiempo que trabajamos juntos. En comodato se entregó una mezcladora para los tintes”, comenta.

    También Su Auto incorporó el servicio de auto sustituto para los clientes. Un servicio que brinda a través de Simon Renta Car, una firma que también es de su propiedad. Esta surgió hace 10 años, junto con el crecimiento de Su Auto.

    Para Simon, la estrategia de éxito radica en el talento humano. “El equipo lo conformamos hace 10 años. La gente tiene la camiseta puesta”. Además de la capacitación de los técnicos e ingenieros y el cumplimiento de los contratos. Cuando empezaron, el negocio contaba con 10 personas, actualmente son 70.

    A los talleres ingresan unos 30 vehículos diarios. Sus clientes se dividen entre aseguradoras y particulares. Una de las 15 empresas con las que trabaja es Panamericana, Seguros y Reaseguros. “Tenemos relación con ellos alrededor de cuatro años. El taller ha crecido mucho por su buen trabajo (técnicos, herramientas) y responsabilidad. De Panamericana tienen unos 65 vehículos al mes”, dice Jorge Mera, director de Indemnizaciones.

    Simon añade que para mantener esa distribución en su cartera de clientes, y luego de una mala experiencia, pidió a las aseguradoras que le entreguen los “suficientes para poder trabajar”. La facturación mensual es de unos USD 200 000.

    La empresa

    Los talleres. Están ubicados en la Calle de los Rosales y Río Coca. El segundo en Los Arupos y Eloy Alfaro.
    Las carreras. La pasión por los autos se refleja en las carreras de autos. Yamil y su hijo han participado en competencias de pista y rally.

  • The Edge y Disney Institute preparan taller

    The Edge Group realizó el lanzamiento del Taller Interactivo de Creatividad e Innovación, que se realizará en Quito el 23 de noviembre.

    Este programa busca brindar la oportunidad a las organizaciones de desarrollar y descubrir fuentes frescas de soluciones para enfrentar los retos diarios y maximizar el flujo de innovación y creatividad de las empresas del país, todo bajo la metodología utilizada por Disney Institute.

    Disney Institute es una extensión de The Walt Disney Company que tiene como intención el desarrollo profesional y el entrenamiento de compañías externas.

    El instituto exhibe el “negocio detrás de la magia”, a través de seminarios, talleres y presentaciones a compañías de distintas industrias. A través de sus conferencias y servicios, Disney Institute permite a las organizaciones aprender de las competencias centrales de The Walt Disney Company y adaptarlas como soluciones catalizadoras del cambio positivo y del desarrollo de las organizaciones.

    El taller está dirigido a todas las personas que estén interesadas en capturar y utilizar el potencial creativo que existe dentro de su organización.

  • El cuidado ambiental es norma en su taller

    Redacción Quito

    En el valle de Tumbaco (nororiente de Quito), hace un par de años, no había muchos talleres automotores a donde acudir por algún daño en la pintura en un vehículo, y los pocos que había demoraban hasta una semana en la reparación, por simple que esta fuera. Ese es el comentario de Roberto Dávalos, un morador del sector.

    Esto fue lo que motivó a los hermanos Carolina y Víctor Hugo Mora a crear Autología, un taller en donde los problemas menores de enderezado y pintura se pueden solucionar en el transcurso del mismo día. Además, ofrecen servicios de lavado, mecánica general, cambios de aceite y filtros, chequeos, ABC…

    En el 2010 se reunieron para consolidar su idea, hicieron un estudio de mercado y abrieron una oficina para revisar todo lo necesario para levantar el negocio. Este proceso duró dos años mientras importaban maquinaria y adecuaban las instalaciones de su taller en ese sector.

    Alentados por el posible aumento que sufrirá el parque automotor de Tumbaco, con la apertura del nuevo aeropuerto de Tababela, los hermanos Mora hicieron una inversión de USD 250 000.

    Con este dinero instalaron una cabina de pintura al horno, un laboratorio computarizado de colorimetría, el sistema de enderezado, elevador de vehículos y demás herramientas de trabajo. Finalmente abrieron las puertas en enero del 2012.

    Reparar un raspón de unos 20 centímetros de largo en estos talleres cuesta en promedio USD 70 y es de entrega inmediata. Por supuesto, todo depende de la profundidad del daño.

    “Hay muchas amas de casa que sin querer topan el carro en la puerta del garaje, por ejemplo, y quieren reparar el daño antes que llegue su esposo. Si son reparaciones menores se hacen el mismo día”, cuenta Carolina Mora, gerenta Comercial de Autología.

    Víctor Mora es el gerente General y cuenta que uno de los principales objetivos fue abrir un taller mecánico con una estricta política de preservación ambiental. Por ello, formaron varias alianzas con gestores ambientales, como Punto Verde y Biofactor, que les ayudan con el reciclaje de desechos como los filtros de los carros, plástico, chatarra…

    Como parte de estas políticas el taller cuenta con 750 metros de área verde, la cabina de pintura posee filtros -tanto en piso como en techo- para evitar la contaminación; las lijadoras rotorbitales tienen un sistema de aspiración centralizado para evitar que las impurezas se derramen en el piso o en el ambiente.

    Además, Autología está en proceso de construcción de un área especial para la manipulación de aceites y filtros usados, que tendrá un sistema de drenaje especial para evitar cualquier contaminación del suelo y del aire.

    En su primer año de existencia, Autología atiende al mes a unos 250 autos y factura unos USD 30 000 en el mismo período. Sus principales clientes, además del público, son las aseguradoras.

    Seguros Oriente, por ejemplo, trabajan desde hace cuatro meses con este negocio. Marco Salcedo, jefe de Siniestros de esa empresa, destaca que en Autología “cuentan con muy buena infraestructura y equipo técnico”.

    Un criterio similar es el de Fernando Páez, gerente de la Sucursal Quito de Seguros Generali. Este ejecutivo considera que al estar ubicado este taller en Tumbaco, se convierte en un sitio estratégico que le ha permitido atender mejor a sus clientes en el valle. Por ello destaca los servicios de Autología.

    El negocio en breve

    Los precios por la atención.  Entre otros servicios, el lavado de un auto en este negocio, por ejemplo, va desde los USD 6 hasta los USD 14,99.

    La nómina.  A inicios del 2012 en Autología trabajaban ocho personas, contando a sus directivos, hoy suman 13 en total.

  • En su taller los diseños pasan del papel a las camisetas

    REDACCIÓN QUITO

    La creatividad de Luis Cobo, un diseñador gráfico de 33 años impresionaba a sus amigos. Tanto, que ellos querían sus dibujos en sus camisetas. Por ello, comenzó a realizar sus creaciones en papel ‘transfer’, para que sus amigos pudieran estampar sus gráficos en sus prendas, a su gusto.

    Gracias a las primeras camisetas, los diseños de Cobo se hicieron conocidos, y no solo los amigos querían tener una. Por ello, al conocer el éxito que tenía su iniciativa en su círculo social una amiga le dijo: «¿Por qué no dejas de ser shunsho y sacas a la venta tus camisetas?». Gracias a ese cuestionamiento nació el nombre para su marca: Shunshoo, que buscaba reflejar moda con diseños auténticos, buena calidad y hecho en Ecuador.

    Su primera colección, que se presentó en el 2007, tuvo cuatro modelos para hombre y mujer. La comercialización era directa y la promoción se basaba en recomendaciones a amigos y conocidos.

    Pero no fue hasta el año pasado que decidió dar un nuevo impulso a la marca. Por esta razón, se unió al proyecto María José Cardona, profesional en marketing y temas financieros. En agosto del año pasado, Shunshoo presentó su nueva colección. Los socios invirtieron USD 2 000 para confeccionar 200 camisetas.

    La manufactura se realiza en pequeñas empresas textiles de Quito, al igual que el estampado. Mientras que la promoción se la realiza por medio de redes sociales como Twitter y Facebook.

    Actualmente, al mes esta iniciativa vende un promedio de 13 camisetas. La distribución es directa y también la comercializan en el bazar Messklan, en el norte de Quito. Y la facturación mensual bordea los USD 320, en promedio.

    Cardona y Cobo, definen a su público objetivo como jóvenes de clase media, universitarios, a los que les gusta la moda alternativa. Por ejemplo, uno de sus clientes desde que inició el emprendimiento son los integrantes de la banda de pop-rock Revés.

    Eddy Zumárraga y Andrés Noboa, integrantes de esta agrupación quiteña, señalan que las camisetas de Shunshoo les dan el «estilo y la imagen» que necesitan. Siempre las usan en sus presentaciones. y gracias a ello, se han sumado nuevos clientes.

    Uno de ellos es Alberto Pérez. Este estudiante universitario comenta que cuando las vio le llamó la atención su diseño «fuera de lo común», por ello adquirió dos. «Es buena la calidad del estampado y de la tela».

    En esto coincide Paula Molina, quien compró tres camisetas a principios de este año. «La tela es de buena calidad y los diseños muy originales».

    El producto

    El empaque.  Las camisetas se venden en un envase de lata, que tiene una etiqueta de la marca.

    El precio. Cada unidad se comercializa a USD 25, tanto los modelos para hombre como para mujer.