Más de 200 nuevos productos de exportación ingresaron al mercado de la Unión Europea (UE), tras la entrada en vigencia, el 1 de enero del 2017, del acuerdo comercial entre el país y el bloque.
La información la dio a conocer el Ministerio de la Producción.
Entre los productos nuevos están jugos y concentrado de papaya, derivados de frutas y vegetales, grasas y aceites de pescado, suplementos alimenticios, tipos madera, maíz dulce, aguardiente, entre otros.
La UE es el principal socio comercial de Ecuador, con el 23% de las ventas; seguido de EE.UU., con el 20%; China, con el 18% y Alianza del Pacífico, con el 12%.
Otro de los logros del acuerdo, según el Ministerio, ha sido la posibilidad de acceder a cooperación y asistencia técnica.
Para el viceministro de Comercio Exterior, Daniel Legarda, el trabajo de la Embajadora europea en Ecuador, Marianne Van Steen, fue clave para que alcanzar el primer acuerdo de tercera generación.
La semana pasada, la diplomática recibió un reconocimiento por parte del Gobierno por el apoyo para la concreción del convenio comercial.
Colombia y Perú examinarán incorporación de Ecuador al acuerdo con la Unión Europea. Foto: Archivo: Líderes
A pesar de los esfuerzos por incrementar los acuerdos comerciales del país con otros destinos, Ecuador cerró el 2019 solo con un nuevo tratado de este tipo.
En mayo pasado se concretó el convenio con Reino Unido. Una vez que este bloque tomó la decisión de separarse de la Unión Europea (UE), con la que Ecuador ya tenía un acuerdo previo, tuvo la necesidad de cerrar tratos con diferentes naciones.
A través de una rápida negociación en bloque, que incluyó a Colombia y Perú, se lograron consensos en materia de intercambio de bienes, reglas de origen e indicaciones geográficas. Se trató de que las condiciones sean similares a las que se tiene con la UE.
Mientras eso sucedía, otros procesos avanzaban. Durante el 2019 Ecuador movió su contingente para concretar su ingreso a la Alianza del Pacífico, integrada por México, Perú, Chile y Colombia.
Uno de los requisitos para conseguir este objetivo es contar con tratados comerciales con todos los países miembros. Con los andinos ya se posee uno en el marco del Acuerdo de Cartagena; con Chile se tiene el Acuerdo de Complementación Económica (ACE 65), que incluye solo intercambio de bienes y con México, uno de alcance parcial. Los dos últimos, como parte de la Alianza Latinoamericana de Integración (Aladi).
Aquellos dos acuerdos no son suficientes para integrar el bloque del Pacífico, por ello era necesaria una negociación para alcanzar tratados completos que incluyesen otros temas, a más del intercambio de productos, como compras públicas, propiedad intelectual, etc. El Gobierno ya inició este proceso, pero todavía no ha acabado.
David López, jefe técnico de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ), indicó que con Chile ya se cerraron los diálogos y el siguiente paso sería la ratificación del acuerdo, mientras que con México ya hubo el intercambio de términos de referencia (propuestas de cada parte) y la primera ronda de negociación sería durante este enero del 2020.
Hay buenas expectativas para el próximo año. “Se espera que en la reunión anual de la Alianza del Pacífico, en junio próximo, Ecuador ya haya cerrado una acuerdo amplio con todos los países, lo que facilite su ingreso como miembro pleno al bloque”, manifestó.
El técnico explicó que Ecuador no ha podido concretar la mayoría de acuerdos que tenía previstos para este año por motivos diferentes. En el caso de aquel con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA), por ejemplo, el Legislativo no ha dado trámite al tratado suscrito el 2018, por lo que no ha podido entrar en vigencia.
Los gremios esperan que a inicios del 2020 se trate el mismo, pase al Ejecutivo, se publique en el Registro Oficial y se implemente.
Mientras que con EE.UU. se han producido una serie de retrasos para realizarse la segunda reunión del Consejo de Comercio de Inversiones (TIC), debido a que ese país ha priorizado su agenda de renegociación del tratado con México y Canadá (T-MEC).
“La expectativa es que en el primer bimestre del próximo año tengamos la siguiente reunión del TIC. Sería la cita de autoridades y la de empresarios. La fecha está todavía por confirmarse. La intención de Ecuador es facilitar el camino para avanzar a una negociación de un tratado comercial”, dijo Xavier Rosero, gerente técnico de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor).
En cuanto a los acuerdos con Centroamérica, indica el directivo, en 2019 se terminó de negociar una ampliación de los acuerdos con Nicaragua y El Salvador. Con Guatemala se avanzó en la profundización del tratado actual.
Tanto Fedexpor como la CCQ creen importante, además, que se aproveche de mejor forma el tratado con la UE. Aseguran que hay mercado para los productos no tradicionales, pero se debe trabajar en su comercialización.
Ambos consideran, además, que es importante impulsar una agenda de competitividad para el sector productivo nacional.
Los sectores sensibles plantean gradualismo
Redacción Quito (I) redaccion@revistalideres.ec El posible acuerdo comercial con México es uno de los temas que más preocupa a los sectores de la manufactura nacional.
Los gremios no están cerrados a que Ecuador firme el convenio, pero proponen alternativas que le den tiempo a sus industrias para prepararse y competir con los bienes mexicanos, dice Pablo Zambrano, presidente de la Cámara de Industrias y Producción (CIP).
Algunas opciones son establecer cupos de importación sin arancel para ciertos productos mexicanos, crear cronogramas de desgravación paulatina e imponer requisitos de origen para los productos de México.
El 80% del calzado que se produce en Ecuador viene de Tungurahua, según Caltu. El cantón Cevallos es una de las zonas de producción. Foto: archivo / LÍDERES
En las primeras reuniones entre el Gobierno y el sector privado, cinco sectores han sido identificados como sensibles, es decir que se podrían ver afectados con el ingreso de productos mexicanos sin arancel. Estos son vehículos, electrodomésticos, acero y metalmecánica, textiles y calzado.
Según la CIP, se están elaborando listas de productos que cada sector considera que deberían tomarse en cuenta en las mesas de negociación.
El país norteamericano tiene una capacidad de producción mucho más alta que la ecuatoriana en áreas como ensamblaje de vehículos, producción de calzado y vestimenta. La Cámara Nacional del Calzado (Caltu) detalla que la producción de zapatos ecuatorianos al año es de 29 millones de pares en promedio; mientras que en México se producen alrededor de 245 millones de pares.
En el sector siderúrgico y metalmecánico también hay una asimetría en la capacidad de producción, lo que preocupa a las empresas nacionales. La Federación Ecuatoriana de Industrias del Metal (Fedimetal) estima que el sector produce 1,6 millones de toneladas de material metálico y México 30 000 millones de toneladas en un año.
“Hicimos conocer al Gobierno la lista de productos que consideramos se verían afectados, estamos a la espera que de a conocer los productos que México propone traer. Con base en eso esperamos definir propuestas de desgravación a lo largo de varios años”, dijo Guillermo Pavón, presidente de Fedimetal.
Lilia Villavicencio, presidenta de Caltu, señala que el sector del calzado propuso que los zapatos mexicanos ingresen al país con desgravación de aranceles progresiva a lo largo de 10 y 15 años. “Solo los productos especializados, que no se producen en Ecuador, deberían entrar directamente sin arancel”, menciona.
Los productores de zapatos tienen el reto de mejorar en términos de capacitación, tecnología, innovación y desarrollo de producto en los 10 o 15 años en que dure el proceso de desgravación de aranceles. Villavicencio menciona que el gremio ha dado pasos importantes en capacitación, entre ellos el programa de diplomado de tecnología de fabricación de calzado impulsado con la Universidad Técnica de Ambato.
Los ensambladores de vehículos proponen que se establezca un cronograma de desgravación de hasta 17 años y períodos de gracia, explica David Molina, representante de la Cámara de Industrias Automotrices del Ecuador.
Otro planteamiento es que en las reglas de origen que deben cumplir los vehículos mexicanos se establezcan condiciones como porcentajes mínimos de componentes ecuatorianos.
Molina menciona que antes de que se firme el acuerdo, el país requiere trabajar en mejorar la competitividad de los sectores sensibles. Proponeque se debe reducir la carga arancelaria a la cadena de proveedores de insumos para los vehículos y establecer mecanismos de devolución de impuestos a las empresas nacionales.
Los puertos son uno de los centros que más se dinamizan gracias a las firma de acuerdos comerciales. La infraestructura renovada es un plus tanto para exportadores como importadores. Foto: archivo / LÍDERES
Cerámica y luminarias son los principales productos para la decoración que se importan desde la Unión Europea (UE). El acuerdo comercial con el bloque, vigente desde enero del 2017, ha permitido que la oferta crezca.
Según la Cámara de Comercio de Quito (CCQ), las importaciones desde la UE de materiales de construcción y decoración crecieron 173,7% al comparar el 2016 (año anterior al acuerdo) con el 2018. Constructores y decoradores prefieren estos productos por variedad, calidad y precio.
La reducción de aranceles permitió acceder a acabados con mejores precios. En el caso de las cerámicas, por ejemplo, se pasó de uno mixto a uno ad valorem (sobre el valor).
“Este momento pagamos el 15,6%. Se ha desgravado en alrededor del 3% desde que entró en vigencia el acuerdo con la UE. En siete años, a partir de esa fecha, llegará a cero. Casi se dobló la importación”, indica Dalila Gómez, presidenta de la Asociación de Importadores de Cerámica Plana del Ecuador (Asimcep).
Solo en ese rubro, el crecimiento de las compras fue de 179,8%, según la CCQ. Hermel Flores, expresidente de la Cámara de la Industria de la Construcción (Camicon), explica que son productos que llegan, principalmente, de España e Italia. “No son masivos, sino de uso exclusivo. Son productos para pisos y paredes de cocina, baños, etc. También llegan mármoles, granitos, entre otros”.
Estos se usan en construcciones especiales o proyectos de alto nivel. La diseñadora María Fernanda Andrade, dueña de Andra Desing, coincide en que tanto cerámicas como luminarias han llegado con más fuerza desde Europa. También explica que todavía no se siente un alivio fuerte en los precios debido a que el mercado, por temas recesivos, continuó vendiendo ‘stock’ con valores de antes de la vigencia del acuerdo.
En el caso de las luminarias, las importaciones crecieron en 113,4% si se compara 2016 y 2018. Entre estas se encuentran halógenos, tubos eléctricos, tubulares, lámparas regulares, así como también de arco, de vapor, etc.
Sara Chiriboga, de Studio Noa, explica que el negocio ha traído complementos y accesorios europeos para inmuebles. “Para los clientes son artículos con un estándar de calidad a escala mundial. Además, marcan tendencia en la industria”.
Algunos de los productos que se trae al país son telas para decoración. En Sukasa se explica que entre los productos que han llegado de la UE se encuentra menaje de mesa y cocina (incluidas piezas cerámicas), así como decoración y lencería de cama y baño.
Estos provienen, principalmente, de Alemania, Italia, Holanda, Portugal, España, República Checa, Bélgica y Polonia. “La ventaja es que al cabo de 10 años los aranceles de la mercadería de Europa llegarán a cero. Esta reducción se realizará anualmente, de manera porcentual”, se dijo desde el sitio.
Algunos de los productos para hogar que llegan desde la UE son griferías, textiles para baños, cocina, equipos para la instalación dentro las mismas, etc.
Para la construcción, por su parte, los productos que más han llegado desde Europa son las planchas laminadas y manufacturas de metal. Del 100% de todo el grupo de ítems de este sector, estos acaparan el 25%; le siguen perfiles de acero, minerales, productos de madera, químicos, vidrios, papeles y cartones, etc.
Pintulac trae productos para la construcción desde la UE: porcelanatos, pisos flotantes, barnices, sellantes, pinturas y adhesivos. Pagan aranceles de hasta 15,6%.
En este negocio la importación de productos europeos creció 15% y ha reemplazado a ítems de los EE.UU. y asiáticos. “Son amigables con el ambiente, a la vanguardia en tecnología y con una excelente relación precio-calidad”.
Los productos refractarios de cerámica son algunos de los que llegan de países de la UE a Sukasa. Foto: Vicente Costales
Apoyo a diferentes negocios para que exporten a la Unión Europea (UE) es el objetivo del proyecto Expor Des.
La presentación se realizó este 29 de enero del 2019, en Quito. La iniciativa nació a través de un convenio de financiamiento entre el bloque europeo y el Gobierno nacional, representado por el ministerio de Comercio Exterior. De la ejecución se encarga Corpei.
El proyecto, que tiene una duración de 36 meses, arrancó en febrero del 2017. Tiene dos líneas de trabajo. Impulso a emprendimientos asociativos y a Pymes. El monto de financiamiento es de USD 5,3 millones; no se entrega el dinero en efectivo sino que se canaliza para el apoyo de las empresas en áreas como calidad, empaque, comunicación, etc.
Ligia Estrella, directora del proyecto, explicó que 98 pymes se han beneficiado. Estas exportan artículos agroindustriales, para cuidado personal, flores, etc. “Cada empresa puede tomar los servicios que necesite para ella, acorde a su realidad. En un periodo de entre 12 y 18 meses buscamos darles el impulso para que luego envíen sus productos al mercado de exportación”.
Este 29 de enero del 2019 estuvieron en la presentación compañías beneficiarias como Café Galleti, FL Procesados y Cereales Andinos. Se trata de productoras y exportadoras de productos no tradicionales.
Ena Escobar, representante de la primera empresa, la cual produce, comercializa y exporta café de especialidad, indicó que como parte de su proceso de internacionalización vendieron el grano como materia prima. Pero, la firma quiere enviar como producto terminado.
Para esto último necesitan seguir procesos y por eso participan en el proyecto de la UE. “Aplicamos y estamos en la fase terminal de implementación de los manuales de calidad con estándares europeos (…) mejorando las condiciones de trabajo también lo hacemos con la de los colaboradores y de la gente en la cadena”.
Otras firmas como República del Cacao trabajan en proyectos asociativos para apoyar a diferentes productores. José Merlo, coordinador de proyectos socio ambientales de la compañía, explica que operaron como empresa ancla para ayudar a un grupo de cacaoteros de Joya de los Sachas y Vinces.
En esta línea de trabajo, Expor Des apoya a 10 proyectos. Por cada dólar que se entrega del fondo no reembolsable de la UE, la contraparte pone otro.
Estrella explicó que las empresas todavía pueden postular para beneficiarse del apoyo europeo. Hay cupos para las áreas de calidad y comunicación.
Este 29 de enero se presentó el proyecto Expor Des. Foto: Carolina Enríquez / LÍDERES
Fiel a su reputación de perseverante, la primera ministra Theresa May seguirá luchando por sacar a Reino Unido de la UE después de sobrevivir a una moción de censura lanzada tras el rechazo de su acuerdo de Brexit en el parlamento.
“Mi gobierno continuará su trabajo (…) Y sí, continuaremos trabajando para cumplir la solemne promesa que hicimos a la gente de este país, de cumplir con el resultado del referéndum y salir de la Unión Europea”, dijo tras obtener una muy ajustada confianza en la Cámara de los Comunes.
Sin embargo, en esa misma cámara 432 diputados, 118 de ellos de su propio PartidoConservador, tumbaron estrepitosamente el acuerdo de Brexit que le costó 17 meses y numerosos sobresaltos negociar con la UniónEuropea. Pese a todo, esta política de 62 años, que proyecta una imagen de frialdad un poco mecánica, está decidida a seguir adelante.
“Tengo el deber de cumplir con el referéndum”, que en 2016 decidió el Brexit, no deja de repetir.
Según Simon Usherwood, profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de Surrey, May permanecerá probablemente en el cargo hasta que logre la ardua misión del Brexit.
May llegó al poder en las caóticas semanas posteriores al referéndum de junio de 2016, en las que los británicos votaron por salir de la Unión Europea lo que provocó la dimisión del entonces primer ministro conservador David Cameron, de quien había sido ministra del Interior.
Pese a ser euroescéptica, se había pronunciado a favor de la permanencia en la UE, pero se implicó poco en la campaña y lo hizo insistiendo en la necesidad de limitar la inmigración, tema favorito de los partidarios del Brexit. Solo un año después de llegar a Downing Street, convocó unas catastróficas elecciones legislativas anticipadas destinadas a fortalecer su posición en las que, sin embargo, acabó perdiendo la mayoría absoluta y quedó dependiente del apoyo del pequeño partido unionista norirlandés DUP para poder gobernar.
Desde entonces innumerables ataques de todos los bandos la han hecho tambalearse. Varios de sus ministros la fueron abandonando por el pedregoso camino de la negociación. Pero May siempre ha sobrevivido. Y ha seguido adelante “a base de estoicismo y perseverancia”, señala Iain Begg, profesor de Ciencias Políticas en la London School of Economics.
Theresa Brasier -su nombre de soltera- nació el 1 de octubre de 1956 en Eastbourne, ciudad costera del sureste de Reino Unido.
Dio sus primeros pasos en política en 1986, año en que fue elegida concejala del distrito londinense de Merton antes de convertirse en diputada en 1997. De 2002 a 2003 fue la primera mujer en ocupar el cargo de secretaria general de su formación.
La propia May se describió una vez como “una mujer jodidamente difícil”, y su actual ministro de Relaciones Exteriores, Jeremy Hunt, advirtió no hace mucho: “No subestimen a Theresa May”.
Aunque sus enemigos la han acusado de tener poca altura de miras, todos coincidían en su laboriosidad.
La primera ministra británica, la conservadora Theresa May en una comparecencia en Downing Street. Foto: EFE
Desde hoy miércoles 10 de octubre hasta el sábado 13 de octubre del 2018 se desarrolla en Quito la Expo Europa, un evento para conocer en detalle las oportunidades de negocio que Ecuador, sus empresas y emprendedores, tiene en la Unión Europea.
La Embajadora de la Unión Europea, Marianne Van Steen, estará hoy miércoles desde las 15:00 en el set de Revista Líderes para comentar más detalles del evento y para analizar la vitalidad en las relaciones entre Ecuador y el bloque europeo.
En la foto, Marianne Van Steen embajadora de la Unión Europea en Ecuador. Foto Diego Pallero / LÍDERES
Una especie de ‘holding’ bananero. Así se puede definir a la Asociación de la Industria Bananera del Ecuador (Asisbane) que se creó en el 2006 y que en la actualidad agrupa a exportadores, productores y proveedores de insumos vinculados con la industria bananera en el país.
En su búsqueda de consolidar al sector, Asisbane trazó la estrategia de optimizar la comercialización del producto con miras a la exportación de una manera directa. Hoy, tras concretarse sus primeros objetivos, tiene 40 socios productores, distribuidos entre Guayas y Los Ríos.
El gerente comercial de la compañía, Alberto Jalil, cuenta que los primeros destinos de exportación fueron Rusia, países de la Unión Europea (UE), así como EE.UU.
Hoy en día, el mercado de Asisbane se distribuye así: 40% en Europa, 25% en el Oriente Medio y 15% en la nación norteamericana. El 20% restante se envía a Argentina, Turquía, Rusia, Japón y China.
En una primera etapa, Asisbane exportaba 12 000 cajas de banano semanal, aproximadamente. Ahora, el promedio es de 250 000 a la semana. Según Jalil, en los últimos cuatro años la compañía pasó de exportar 4,6 millones de cajas anuales a 12,6 millones, cifra que alcanzó el año pasado.
En materia de facturación, la asociación logró vender el 2017 cerca de USD 100 millones, entre los distintos mercados a los que llega. El gerente de la compañía bananera atribuye el éxito que tienen a la confianza de los clientes en la calidad de la fruta. “Hemos logrado formar un buen equipo de productores que ya tienen experiencia en el área”.
Asisbane posee, además, dos certificaciones internacionales. Cuenta con Global G.A.P. y Rainforest Alliance, que están relacionadas con las buenas prácticas agrícolas.
“Hacemos el contacto con las compañías para que realicen las auditorías en las fincas de nuestros asociados, es un proceso que toma unos dos meses. Nosotros les damos a los productores las herramientas necesarias para que se puedan certificar”, afirma Jalil.
La asociación agrupa unas 100 fincas, que se traduce en cerca de 5 000 hectáreas (ha) sembradas de banano.
Asisbane tiene un equipo de supervisión en diferentes zonas asignadas a cada proceso. “Con eso nos aseguramos de que la fruta sea empacada con todos los estándares de calidad que nos exigen nuestros clientes”, dice.
Asisbane reúne cerca de 5 000 hectáreas de siembra de la fruta, distribuidas en unas 100 fincas entre Guayas y Los Ríos.
Son cerca de 20 supervisores en campo, además de personal externo que se contrata para complementar los procesos. En total, la compañía posee 45 trabajadores, entre las áreas administrativa, de producción y logística, que incluye la sección naviera.
Asimismo, la asociación ofrece servicios a sus productores. Entre otros se cuentan: identificación de oportunidades en diversos destinos; información sobre el comportamiento de los mercados; representación ante entidades públicas y privadas.
El productor bananero Jarol Barquet es socio de Asisbane desde hace seis años. Su hacienda Ana María tiene 15 hectáreas de cultivo, de las que extrae poco más de 60 cajas de la fruta por hectárea. Actualmente dirige su exportación a Arabia Saudita, pues el cliente demanda una presentación de caja favorable para los pequeños productores.
Barquet cuenta que desde que forma parte de la asociación, sus ventas al extranjero pasaron de 20 contenedores semanales a 200. Él decidió integrarse a Asisbane, pues le genera garantía sobre el destino de su producto. “Te da seguridad de saber dónde estás colocando la fruta y que no vaya a haber problemas con los clientes”, dice.
Jalil asegura que las principales demandas que hacen los compradores a los exportadores son calidad y certificaciones. “Cada vez el consumidor es más exigente con lo que recibe y compra en los supermercados”.
A su juicio, la competencia también se ha fortalecido. Los principales rivales son Costa Rica, Guatemala y Colombia, países que han aumentado su producción. “Con ellos nos dividimos los clientes europeos”, comenta.
Jalil cree que Ecuador está incrementando su presencia mundial gracias a los acuerdos comerciales, pero sostiene que aún es necesario apuntar a una mayor diversificación para poder competir mejor. Es por ello que confía en que la firma del Acuerdo de Asociación Económica Inclusiva con la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA) va a representar una oportunidad importante.
En la primera etapa, Asisbane exportaba 12 000 cajas de banano semanal. En la actualidad, el promedio es de 250 000 cajas por semana.Fotos: Mario Faustos / LÍDERES y cortesía Asisbane
Durante el primer año del acuerdo comercial entre Ecuador y la Unión Europea (UE), el atúnfue el producto cuyas exportaciones en valor crecieron más en relación con otros. Así lo indican las estadísticas tanto de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor) como de la Cámara de Comercio de Quito (CCQ). Las ventas aumentaron más del 50% en un año.
A este producto le sigue el banano. Sus resultados mejoraron gracias a que el valor de la tasa de ingreso al territorio europeo, por tonelada métrica, casi se equiparó con el de los competidores, que ya tenían un tratado con la UE.
“En adelante hay otros productos como camarón y flores con un crecimiento de ventas más modesto. Ahora, en el caso de las frutas tropicales hubo un crecimiento del 10%. En este grupo están las que se envían frescas, congeladas, con algún proceso de tratamiento, etc. Son como USD 90 millones adicionales”, dijo Xavier Rosero, gerente técnico de Fedexpor.
Entre estas frutas se encuentran piña, mango, maracuyá y papaya. Por otro lado, también hay un importante crecimiento de las ventas en valor de la palma, tanto natural como de sus derivados.
Rosero señaló que en la mayoría de estos productos también se generó un aumento del volumen de exportación. La excepción fue el cacao, cuyas ventas en dólares aumentaron, no así en cantidad. El bloque europeo poco ha variado en el tipo de productos que demanda del país. Los envíos, en su mayoría, corresponden a materias primas y productos semielaborados, principalmente del grupo de tradicionales.
Según Fedexpor, con el convenio también ganaron los trabajadores. “Calculamos 22 000 nuevas plazas de empleo potenciales por el crecimiento de las exportaciones (…). Aquellos sectores cuyas ventas más subieron, demandaron más mano de obra”.
Para Europa, el acuerdo también ha significado más demanda de sus productos. David López, director económico de la CCQ, explica que las principales importaciones de Ecuador corresponden a artículos necesarios, principalmente, para la industria y para el sector médico y químico.
Entre los artículos demandados están aceites de petróleo para diferentes fábricas, piezas para barcos o naves nuevas, productos farmacéuticos, etc. En cuanto a bienes de consumo, se encuentran vinos y automotores.
Según la Asociación de Empresas Automotrices del Ecuador (Aeade), en el 2017 ingresaron 15 nuevos modelos de autos al país de origen europeo. Las marcas que ampliaron su oferta fueron Peugeot, Chevrolet, Skoda, Citroën, Fiat, BMW y Mini . En promedio, el año pasado la participación de los autos europeos en el mercado ecuatoriano fue del 4%, un alza en relación con el 2016, cuando se ubicó en 2,4%. En el primer trimestre del 2018, la participación alcanzó el 6%.
Para Genaro Baldeón, presidente de Aeade, este incremento es consecuencia de la eliminación de los cupos para la importación de autos y a la desgravación progresiva de los aranceles.
Entrevista con Marianne Van Steen embajadora de la Unión Europea en Ecuador. Foto Diego Pallero / LÍDERES
Marianne Van Steen: ‘Hay interés a largo plazo en otros sectores del acuerdo’
¿Cuál es el balance del primer año de vigencia del acuerdo entre Ecuador y la Unión Europea (UE)?
Estamos satisfechos con los resultados. En un año, el flujo comercial entre ambos lados creció, es algo que no lo habíamos pensado. El resultado se debe a un proceso de recuperación. Para el bloque europeo ayudó la eliminación de los cupos de vehículos y de las salvaguardias. Mientras que el acuerdo comercial permitió a Ecuador recuperar la competitividad en los productos tradicionales como el banano.
Además del tema comercial, ¿qué avances hay en otros aspectos del acuerdo como propiedad intelectual, contratación pública y otros? Si miramos los otros sectores, porque efectivamente no se trata solo de flujos comerciales, sino también de ofrecer un marco legal más estable para atraer inversiones, flujos de servicios, integrar mercados, hay interés pero más a largo plazo. Es bastante temprano para tener estadísticas o cifras que demuestren el resultado. ¿Qué sucede en el caso de ingresos de nuevas inversiones de la UE, al país? Hay algunas inversiones, pero no han sido tan importantes porque es muy temprano. La ventaja es tener un marco legal estable.
¿Qué inversiones se realizaron? Hay tres países de la UE: España, Países Bajos e Italia, que han invertido el año pasado, según datos que hemos recibido del Banco Central. El monto fue de USD 129 millones, entre los tres. ¿Qué se requiere para atraer inversiones de la UE? Ecuador es uno de los países de América Latina que no ha atraído muchas inversiones, en los últimos 10 o 15 años. La decisión para los inversionistas es influenciada por el tratado, pero hay otros factores como las denuncias de los tratados bilaterales de inversión (TBI), el nivel de crecimiento, la estabilidad política. Los inversionistas de la UE no van a invertir en países que no respetan normas ambientales o laborales. Esto se contempla en el acuerdo, como parte del comercio justo. Además, tampoco las inversiones suceden de un rato a otro. ¿Cómo fue el proceso de implementación de los beneficios del acuerdo con los vecinos, Perú y Colombia? Es muy difícil comparar con Ecuador porque es un país diferente. Colombia y Perú tienen varios acuerdos comerciales, por lo que es complicado saber si antes del tratado (con la UE) invertían más o menos. En Ecuador hay un antes y después del acuerdo. En general, hay que decir que es normal que cuando entra en vigencia un convenio, hay demora. ¿Qué ha sucedido en el ámbito de compras públicas?
No se habla mucho porque también es difícil tener estadísticas. Lo más importante es que se da apertura. Por ejemplo, si hay una compra pública y la empresa cumple con todos los requisitos, está abierta para las compañías europeas que están en condiciones de competir con una compañía ecuatoriana. Actualmente se llevan a cabo capacitaciones para que las empresas ecuatorianas puedan exportar a la UE ¿Cómo va este proceso? Sabemos que no es fácil entrar en el mercado europeo. Tenemos más de 500 millones de potenciales consumidores, en 28 países. Las empresas grandes conocen sobre el proceso de exportación. El desafío es la incorporación de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) y las organizaciones de la economía popular y solidaria (Eps). ¿Cómo se está trabajando con este segmento? Tenemos un proyecto, en el que se ha invertido más de USD 11 millones, para el sector. Hay 200 organizaciones elegidas y 10 asociaciones, que reciben capacitaciones, tras un diagnóstico de sus procesos de producción. Se hace un plan de acción, que es cofinanciado para que puedan mejorar sus procesos y logren exportar. ¿Lograron las mipymes entrar al mercado europeo el año pasado? Además del crecimiento de las empresas grandes, hay algunas mipymes que hemos ayudado, ya que han ingresado con nuevos productos como mermeladas de mango, tejidos, cerámicas, cueros bovinos tratados y otros.
Lo orgánico es sinónimo de valor agregado
Urcohuasi es una de las firmas que tiene certificados orgánicos y consta en el catálogo Ecuador Certificado. Foto: Archivo / LÍDERES
El consumo de productos orgánicos es una tendencia que no deja de crecer en el mundo. Según el reporte 2018 de la Federación Internacional de Movimientos de Agricultura Orgánica (Ifoam), se cultivaron 7,5 millones más de hectáreas orgánicas en el mundo que en el 2015. La agricultura orgánica es un sistema de producción que minimiza el uso de recursos no renovables y no utiliza fertilizantes o plaguicidas sintéticos.
Se trata de una tendencia en la que la comunidad europea tiene alta participación. Según Ifoam, dos países europeos son los mayores mercados para este tipo de productos, Alemania y Francia. De ahí que los productores del país encontraron en ese nicho una oportunidad para competir con certificaciones orgánicas que le dan a sus productos valor agregado frente a los de otros países.
Según Pro Ecuador, entre los principales productos orgánicos que se exportan a los países de la Unión Europea (UE) están banano, cacao, panela, quinua, plátano, chocolate, frutas procesadas y frutas deshidratadas.
Isabel González, representante de la empresa Agroapoyo, que tiene certificaciones orgánicas para ocho de los 30 productos que ofrece, cuenta que la firma obtuvo certificaciones en el 2014 y desde entonces ha invertido unos USD 2 000 al año para mantenerlas.
“Tenemos que competir con quienes tienen moneda propia y pueden bajar sus precios devaluando. Por eso nos toca ofrecer un producto con valor agregado, que es lo producido de manera orgánica”, dice la empresaria. Actualmente, esta firma envía productos como chifles, mango deshidratado, uvillas y aceite de coco a República Checa y Suecia.
Aunque, reconoce que necesita empaparse más de las particularidades de cada país de la comunidad para aprovechar el acuerdo comercial con ese bloque, para lo que espera este año diseñar una estrategia empresarial.
“Ha sido un proceso complicado, aunque mucha de nuestra agricultura es orgánica porque no usan químicos, no se puede exportar mientras no se esté certificado y en los sectores rurales los proveedores no están familiarizados con esos procesos”, añade.
Según el Catastro de Operadores Orgánicos de Agrocalidad, en el Ecuador existen 1 100 productos con certificación orgánica. Además, el Catálogo Ecuador Certificado, del Ministerio de Comercio Exterior, detalla que en 23 provincias del país existen 36 246 hectáreas registradas para producción orgánica.
Con la entrada en vigencia del acuerdo comercial con los europeos, los productos ecuatorianos gozan desde hace un año y cuatro meses de un acceso preferencial a este mercado en cuando al aspecto arancelario. Esto se ha traducido en mayores ventas, pero los productores nacionales enfrentan nuevos retos.
“El reto de los ecuatorianos es potenciar sus exportaciones a través de la diferenciación, una de ellas es llegar a ciertos nichos, como la producción orgánica y sostenible”, explicó el Ministerio de Comercio Exterior vía correo electrónico.
Daniel Pilamunga, administrador de la Corporación de Productores y Comercializadores Orgánicos Bio Taita Chimborazo (Coprobich), señala que las ventas a este mercado se han incrementado desde el 2014.
Coprobich es un emprendimiento que produce y exporta quinua con certificación orgánica a Francia, Alemania, Bélgica y Holanda. En el 2014 exportó a esos países unas 85 toneladas de este cereal andino. Mientras que el año pasado, la cifra subió a 235 toneladas.
Según Pilamagua, estos resultados obedecen al crecimiento de la demanda de este tipo de productos en Europa, pero también por el acuerdo comercial. En julio, añade, Coprobich comenzará a exportar nuevos productos a estos países. Entre ellos, menciona harina de quinua orgánica, avena con quinua y barras energéticas para los diferentes clientes que tienen.
Cifra 36 246 hectáreas para producción orgánica existen en el país
Tres claves para fortalecer la exportación de servicios
El turismo es el principal servicio que exporta. Representó el 61% de las exportaciones de servicios en el 2016. Foto: Archivo / LÍDERES
El mercado de la Unión Europea (UE) no se limita a la importación de productos tradicionales ecuatorianos. Aparte del banano, langostinos, atún, cacao y otros, los servicios tienen una puerta abierta en esta comunidad.
El convenio vigente entre Ecuador y la UE desde enero del 2017 permite exportar servicios tradicionales y no tradicionales, refiere Daniel Legarda, presidente ejecutivo de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor).
En la primera categoría constan transporte / turismo, telecomunicaciones y prestaciones financieras. Lo otro abarca tecnologías de información (software), educación (idiomas) y diseño gráfico.
La oferta es diversa, pero desde que entró en vigencia el acuerdo con la UE no se han exportado servicios a esta comunidad internacional, según Pro Ecuador. Para fortalecer esta actividad, el sector exportador considera que se debe trabajar en tres aspectos.
Primero, se requiere contar con información detallada sobre las transacciones que se hacen en este ámbito, aunque Legarda reconoce que a diferencia de la comercialización de productos hay ciertas limitantes.
El intercambio de servicios no pasa precisamente por Aduana, hay transacciones de este tipo que se hacen de manera ‘on line’ y eso complica el registro. Para disponer de información detallada sobre la exportación de servicios se requiere del apoyo del Banco Central del Ecuador (BCE) y del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).
La cifra sobre servicios exportados en el 2017 es de alrededor de USD 2 300 millones, informa Fedexpor. Ahí se incluyen, principalmente, viajes y transporte. Con relación al total de exportaciones FOB del año anterior (USD 19 122 millones), según el Banco Central del Ecuador (BCE), este tipo de ventas representa el 12%.
Otros aspectos que se deben tomar en cuenta son los temas impositivos y de políticas públicas. Al no existir convenios de doble tributación se dificulta la provisión de estas prestaciones. Para esto se requiere normativas que consideren la realidad de este sector y ofrezcan un tratamiento diferenciado. Además, se requieren incentivos.
Finalmente, para ganar más espacio en este mercado internacional se debe fortalecer y capacitar el talento humano para desarrollar nuevas prestaciones a empresas y personas en la comunidad europea y en el exterior.
En este aspecto se requiere establecer estándares de calidad, enfatizar el manejo de idiomas y promocionar estos servicios en conjunto con las oficinas comerciales como Pro Ecuador. Para abrir este mercado, a fines del año anterior se organizó la VII convención anual de la Asociación Latinoamericana de Exportadores de Servicios (ALES).
En esta cita se celebraron ponencias y conferencias magistrales en materia de exportación de servicios y se organizó una rueda de negocios entre exportadores ecuatorianos y compradores internacionales de 16 países.En estos encuentros hubo 97 exportadores inscritos y 32 compradores internacionales. En total se realizaron 268 citas de negocios.
Según las estimaciones consultadas a los compradores, el evento generó expectativas de venta por alrededor de USD 5,8 millones, precisa Pro Ecuador. A la par, esta entidad adscrita al Ministerio de Comercio Exterior trabaja en conjunto con Corpei, Fedexpor, Aesoft, en el proyecto Expor Des con la finalidad de internacionalizar a 10 empresas ecuatorianas (pymes) del sector software hacia mercados europeos y latinoamericanos. Actualmente, se realiza el análisis de las empresas para medir su potencialidad, fortalezas y debilidades.
Marianne Van Steen, embajadora de la UE en Ecuador, expresa que los servicios que se oferten deben tener un valor agregado y ser competitivos. Es decir, que tengan un buen precio y calidad.
“Por el acuerdo no hemos visto en este momento un incremento de las exportaciones de servicios ecuatorianos. Se puede, pero se tiene que trabajar en la calidad, en el precio y se tiene que especializar en un sector”, enfatiza la embajadora de la UE.
En Manta se encuentran las principales procesadoras y exportadoras de atún que se envía al bloque europeo. Foto: Cortesía Fishcorp
Wayú es un emprendimiento social que funciona desde hace cinco años en Quito. Fue creado con el objetivo de generar fuentes de empleo para madres que tienen hijos que padecen cáncer.
Este emprendimiento elabora infusiones y snacks de frutas deshidratadas sin aditivos ni conservantes, que llegaron a Suiza, Inglaterra, Francia, Alemania, Canadá, Francia y Estados Unidos. Estas ventas se lograron a través de participaciones que tuvo Wayú en ferias internacionales.
Según la directora del proyecto, Sandra Cobo, el 2017 exportaron USD 400 000, de los cuales el 50% fue adquirido en Europa. Enviaron un contenedor a Suiza y otro a Francia y menores cantidades al resto de destinos. Para el 2018 prevé triplicar las exportaciones al aprovechar el acuerdo comercial con la Unión Europea (UE).
Wayú es parte de las 108 micro, pequeñas y medianas empresas que exportan a la UE y que fueron seleccionadas por la Corpei para aumentar sus ventas a Europa. Forman parte del programa de Fortalecimiento a Mipymes ecuatorianas para la internacionalización a la Unión Europea, que tiene un fondo de 10 millones de euros y es cofinanciado por la UE.
Este programa, que empezó el 2017, es ejecutado por la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor) y la Corpei y tiene el apoyo del Ministerio de Comercio Exterior y de Pro Ecuador.
La Corpei escogió a 98 mipymes del sector de bienes y 10 de servicios, que ya exportaron. En cambio, Fedexpor lidera el proceso de otras 120 firmas, que tienen potencial para vender por primera vez.
Según Cobo, en el caso de Wayú buscan mejorar su participación en ferias, promoción y empaques, pese a que en este último aspecto ya tienen avances.
Anteriormente, señala Cobo, aprendieron que los empaques deben tener la información del producto en el idioma del país de destino. Wayú cuenta con empaques en francés, italiano, inglés y, próximamente, en alemán.
Este programa, que se centra en firmas que facturan hasta USD 5 millones al año, tendrá dos años más de vigencia. Según la directora de Consultoría y Proyectos de la Corpei, Liggia Estrella, al principio se inscribieron 641 empresas, que pasaron por un proceso de autoevaluación y cumplimiento de requisitos. Las escogidas son empresas que se dedican a las flores, café, cacao, confitería, alimentos procesados como snacks, frutas deshidratas, papas nativas, chifles, polvos para hacer jugos de frutas exóticas, entre otras.
En la actualidad, agrega Estrella, se realizan visitas personalizadas para afinar la ayuda, que será individual y que se cumplirá en los próximos dos años. “El objetivo es aumentar sus exportaciones”.
El programa cuenta con la denominada caja de herramientas. En el caso de las firmas que ya han exportado o realizado envíos de muestras a la UE tiene un componente mayor de promoción para lograr el cierre de los negocios. Además, adaptaciones de normativa y empaques, cambio de etiquetas, calidad y estrategia de publicidad y comunicación.
En cambio, las otras (con potencial de exportación) se centran más en la capacitación. Según el gerente técnico de Fedexpor, Xavier Rosero, las 120 empresas con potencial de exportación que fueron seleccionadas, funcionan en 17 provincias. La mayoría se dedica a elaborados de cacao, textiles, madera, alimentos procesados…
Rosero explica que, en la actualidad, se realiza un diagnóstico de su capacidad exportadora para hacer un mapeo sus debilidades y fortalezas. Se analiza el empaque, infraestructura, tecnología, sistema de calidad, promoción y se implementará un proceso de fortalecimiento, de acuerdo con la caja de herramientas.
Rosero dice que se realizarán capacitaciones, cursos, seminarios y talleres. Fedexpor prevé ofrecer más de 40 talleres. Ahora, están por cerrar los diagnósticos y desde el próximo mes empezarán con la caja de herramientas.
El bloque europeo trae oportunidades
El mercado europeo se ha convertido en una oportunidad para el crecimiento de las mipymes ecuatorianas, debido a que es un mercado donde los productos de exportación no petrolera tienen mayor aceptación. Así lo asegura Marianne Van Steen, embajadora en Ecuador de la Unión Europea.
A partir de enero del 2017, fecha que entró en vigencia el acuerdo comercial con la Unión Europea (UE), hasta noviembre de ese año, el intercambio comercial entre el país y el bloque económico creció 23%, con un saldo positivo de la balanza comercialpara Ecuador de USD 1 045 millones, según datos de Fedexport.
Este organismo asegura que las mipymes representan el 60% del total de las exportaciones. En el caso de las que realizan envíos a la UE, Daniel Legarda, presidente de Fedexport, considera que el porcentaje es mayor.
Natluk es una pequeña empresa que ofrece productos del mar, como camarón y langostinos. Las exportaciones a la UE comenzaron en noviembre del 2016. Cuando entró en vigencia el acuerdo, las oportunidades comerciales crecieron.
El año pasado la empresa envió entre 10 y 15 contenedores a seis clientes. Para este año la cifra estimada de envíos es de 80 contenedores, señala Verónica Dahik, gerenta de Natluk. Los camarones están entre los principales productos de exportación hacia la UE, junto con el banano y las conservas de atún.
En cuanto a productos no tradicionales están flores, vegetales congelados, artesanías. Van Steen asegura que también han ingresado al mercado europeo frutos exóticos como tamarindo, piña, aguacate. Otros frutos y los granos andinos (quinua, amaranto, chía) también tienen potencial de comercialización en la UE.
En cuanto a las importaciones, se destacan productos farmacéuticos, aparatos médicos, vehículos y máquinas. Según Van Steen, las exportaciones desde el bloque hacia Ecuador crecieron 38%, no solo por el acuerdo, sino por otros factores ocurrido el 2017, como la eliminación de salvaguardias y la reducción de 2 puntos del impuesto al valor agregado (IVA).
Exporganic es una de las pymes que se benefició del acuerdo comercial. Su propietario, Jimmy Terán, asegura que usualmente las ventas al bloque eran complicadas por las distancias y las exigencias de calidad.
“A partir de la firma del acuerdo ganamos un apoyo directo y estamos trabajando en mejoras de nuestro producto y ampliación de mercado”, señala.
En el 2017, Exporganic envió un cargamento de 10 toneladas de frutas deshidratadas –mango, piña y banano– a España y a Alemania. Fue la primera experiencia con el producto, pues hasta el 2016 solo exportaba banano orgánico.
El envío de fruta deshidratada estaba entre los planes de la empresa, pero fue el acuerdo multipartes, lo que los animó a iniciar la exportación, recuerda Terán.
La compañía, cuya planta está ubicada en el kilómetro 29 vía a Daule, en Guayas, exporta desde el año 2004 banano orgánico a Estados Unidos, principalmente; aunque también había realizado algunos envíos a determinados países europeos.
Terán asegura que este año seguirá asistiendo a ferias y misiones comerciales para aumentar el volumen de exportación hacia el bloque, porque –a su juicio– cada vez existe mayor interés de los clientes europeos por los productos ecuatorianos.
El mercado
Según el presidente de la Asociación de Industriales Textiles del Ecuador, Javier Díaz, para exportar a la Unión Europea hay que considerar que son 27 países con distintas culturas e idiomas
y distintos perfiles de consumidores. Por ello, es necesario estudiar a qué clientes quiere atender y de qué país. Hay que contratar estudios de mercado y se puede hacer con las oficinas comerciales del Ecuador.
Además, agrega Díaz, hay que conocer cuáles son los requerimientos técnicos que exige cada país como normas de etiquetado o salubridad tanto para productos textiles como infantiles. Por ejemplo, para ingresar con ropa infantil a Alemania solo se puede hacer con ropa 100% en algodón y que no tenga químicos ni colorantes.
La oferta no tradicional crece entre los compradores de Europa
Frutas nacionales comienzan a ganar terreno en el mercado de productos no tradicionales de exportación al mercado de la Unión Europea.
Según la embajada del bloque en Ecuador, entre los alimentos cuyas ventas se incrementaron en el 2017 con relación al año anterior se encuentran piñas con un 32%, limones con 41%; tamarindos y maracuyá con un 64%. Asimismo, se registraron exportaciones de productos que antes no se vendían como nueces en cáscara, mandarinas, cocos desecados, toronjas , etc. “Esto permite pensar que serían nuevas frutas potenciales para exportaciones a los 28 estados de la UE”, dice el organismo.
Al cumplirse un año de vigencia del acuerdo, la delegación diplomática indicó que “otras importaciones de la UE desde Ecuador que crecieron visiblemente, a pesar que sus montos de ventas son aún pequeños, pero demuestran que existe oportunidades de negocios”. Allí están plásticos, barcos y estructuras flotantes, productos farmacéuticos, calzado, etc. Ecuador también tiene definidos productos potenciales que pudieran despertar interés entre los compradores del bloque.
Según Pro Ecuador, entre estos se encuentran pimienta sin triturar, etileno, azúcar de caña o de remolacha, suéteres, chalecos de punto o algodón, frutillas, madera contrachapada, malta, entre otros.
La entidad explicó que la tendencia en Europa es preferir lo natural a lo procesado. Existe aumento de orgánicos principalmente en mercados de ese continente como Dinamarca, Suecia, Austria, Alemania y Francia.
La Federación Ecuatoriana de Exportadores explicó el año pasado que los exportadores deben trabajar para aprovechar las oportunidades con el mejoramiento de procesos, presentación, etc.
Wayú funciona hace cinco años en el norte de Quito. Sus infusiones y snacks de frutas deshidratadas llegaron a Suiza, Inglaterra, Francia, Alemania, Canadá, Francia y Estados Unidos. Foto: Patricio Terán / LÍDERES
Al menos siete acuerdos comerciales, totales o parciales, están al momento en proceso de negociación o concreción por parte del Gobierno ecuatoriano.
En este último caso se encuentra aquel con la Unión Europea (UE), que se firmó el pasado viernes en Bruselas (Bélgica). Ahora, el país está a la espera de que el Parlamento Europeo lo ratifique para que pueda entrar en vigencia el próximo 1 de enero del 2017.
Como parte de este acuerdo consta la posibilidad de que más de 300 productos de la oferta exportable nacional accedan con cero arancel al bloque europeo. Entre ellos se encuentran café, cacao, camarón, brócoli, atún, frutas, procesados, entre otros. El país también logró el acceso sin pago de aranceles para productos que hoy no están protegidos, bajo determinadas condiciones.
Para el banano, por ejemplo, se consiguió una baja, hasta el 2020, del arancel a 75 euros por tonelada métrica (t/m). De esta manera existirá una diferencia de un euro por t/m con los aranceles de los competidores del país por cuatro años, pero luego de eso se alcanzará el mismo nivel de esos países.
Otros beneficios se pueden lograr con nuevos acuerdos que Ecuador pueda firmar. Daniel Legarda, presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), explica que uno de los procesos es con El Salvador, con cuatro rondas. “Originalmente se esperaba que se cierre este año, pero los cronogramas se han movido (…) falta una ronda más. Había algunos intercambios de productos pendientes como el de los textiles”.
En el caso de otros países centroamericanos como Honduras la negociación avanza, dice Legarda. Con Costa Rica el proceso se encuentra en etapa de estudio de factibilidad. El ministro de Comercio Exterior, Juan Carlos Cassinelli, indicó la semana pasada que existen avances con otros bloques como el de la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA). Con este se espera arrancar el proceso este mes.
“Productos ecuatorianos como el banano, atún, camarón y rosas frescas podrían aprovechar los mercados de dicho bloque integrado por Islandia, Noruega, Liechtenstein y Suiza, estados que bordean un Producto Interno Bruto de USD 1 012 billones”, señala el Ministerio.
En junio del año pasado se dio un paso importante con ese bloque cuando ministros representantes de los miembros del EFTA y autoridades ecuatorianas firmaron una Declaración Conjunta de Cooperación para mejorar sus relaciones comerciales bilaterales. Esto es un procedimiento previo a la negociación de un acuerdo. Así ocurrió con Mercosur, Colombia, Perú y Panamá.
Legarda indica que este es un bloque importante. También explica que otros acuerdos se encuentran en otra etapa como aquel con Turquía. “Está en stand by porque las ofertas que hace no son lo suficientemente interesantes como para los productos de Ecuador”. En donde sí hay avances es con Corea del Sur, que ya se encuentra en la quinta ronda de negociación. “Estamos buscando puntos ganar ganar”, dijo Cassinelli.
En los últimos años el comercio bilateral ha sido deficitario; es decir, Ecuador compra mucho más a Corea del Sur que lo que le vende. Entre enero y agosto, el saldo de la balanza comercial con ese país fue negativo en USD 263,7 millones.
Entre los productos ecuatorianos que van a ese destino están desperdicios de cobre, camarones, langostinos y aluminio. Del país asiático llegan, en cambio, vehículos, televisores, plásticos, etc.
Según el Ministerio de Comercio Exterior, “la modalidad de entendimiento con Ecuador incluirá compromisos de cooperación, transferencia de conocimientos y apoyo tecnológico, y al mismo tiempo, favorecer el interés de Corea del Sur por invertir en Ecuador”.
En Centroamérica se abren mercados para la producción local
Ecuador alcanzó acuerdos parciales con Nicaragua, Cuba y Guatemala para tener un mejor acceso a los mercados. La inclusión de nuevos productos para las exportaciones y mayores preferencias arancelarias son parte de los puntos fuertes que se discutieron con estos países centroamericanos.
El acuerdo con Nicaragua se suscribió en julio pasado con el objetivo de establecer un mecanismo para la administración de las preferencias arancelarias acordadas entre ambos países. Frente a esto, 96 productos o ítems ecuatorianos entrarán sin aranceles a Nicaragua y 90 del país centroamericano ingresarán sin restricciones a tierras ecuatorianas.
Entre los productos ecuatorianos que serán beneficiados están la línea blanca, atunes, muebles de madera, grasas y aceites en brutos, bombones, caramelos y confites, cajas y cartones de papel, productos de acero y más. “Esto significará para Ecuador potenciar y diversificar los rubros no petroleros de la balanza comercial hacia Nicaragua”, se explicó desde la Embajada del Ecuador en Nicaragua, vía correo electrónico.
Mientras que los productos que ingresarán de Nicaragau con mejores condiciones son el ron y los puros. Actualmente, Ecuador mantiene una balanza comercial positiva con Nicaragua. Al momento, el acuerdo está en proceso de aprobación por parte de las entidades encargadas en ambos países, por lo que aún no hay un intercambio de los mencionados productos con las preferencias arancelarias.
Daniel Legarda, presidente de la Federación Ecuatoriana de Exportadores (Fedexpor), comentó que con Nicaragua se negoció una lista de productos bastante acortada, que corresponde a la misma que se negoció para el ingreso de Nicaragua a la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi). “Ese acuerdo ya está cerrado”.
En el caso de Cuba, el embajador Rafael Dausá Céspedes, explicó que el acuerdo está en fase de análisis y preparación de las solicitudes y en el intercambio de información de intereses entre ambos países. Se trata de la ampliación y profundización del Acuerdo de Alcance Parcial de Complementación Económica al amparo de la Aladi. “En esencia, con esta ampliación se aumentarán las preferencias arancelarias y consecuentemente habrá mayor competitividad para los productos de ambos países”, dijo Dausá.
Ecuador se interesa en productos de este país relacionados con el sector biofarmacéutico, bebidas alcohólicas, equipos e instrumentos médicos, tabacos y productos metalmecánicos.
Hoy en día, el acuerdo incluye además del acceso al mercado, disciplinas comerciales como normas de origen, medidas sanitarias y fitosanitarias, normas técnicas, solución de controversias.
Durante el año se dieron, además, varios acercamientos entre los empresarios al mercado cubano. En enero, una delegación de empresarios ecuatorianos participó en la Feria Internacional Habana 2016, donde hubo interés por productos como plásticos, pesca, flores, chifles, lácteos y más.
Otro de los acuerdos alcanzados fue con Guatemala, con el que se alcanzó un Acuerdo de Complementación Económica en 2011. En este se incluyen 700 partidas. Ahora se trabaja en una ampliación, que incluirá a 200 partidas adicionales, según Pilar Neira, consejera comercial del Instituto de Promoción de Exportaciones e Inversiones.
Para Neira, el mercado guatemalteco, representa un potencial para productos ecuatorianos, por lo que hay empresas que proyectan ingresar a este mercado.
El acuerdo actual posibilitó el ingreso de productos ecuatorianos al mercado guatemalteco, entre los que se puede mencionar, cocinas, sardina, camarón, confitería, grifería, cerámico y otros.
Para Luis Luna, analista de comercio exterior, Ecuador tiene que avanzar en acuerdos con socios con significado. “Acuerdos con Guatemala o Bielorrusia no impactan en la economía”. El país también tiene un acuerdo con la Comunidad Andina.
Otros datos
Nicaragua ha exportado a Ecuador productos como desechos de hierro o acero, desperdicios de papel para reciclar, fungicidas, tintas de imprimir, escribir o pintar, desperdicios y recorte de plástico, los cuales representan el 98,5% de las exportaciones totales de Nicaragua a Ecuador.
Estas exportaciones a Ecuador representaron aproximadamente unos USD 4,1 millones, en 2015.
La balanza comercial fue favorable en el período comprendido entre 2011 y 2015. Datos de Guatemala. Ecuador exporta a ese destino camarones, langostinos, polipropileno, cueros, estufas de mesa, etc. Desde esa nación se trae insecticidas, azúcar de caña, entre otros.
Venezuela. En el caso de este país, las exportaciones se derrumbaron consecutivamente desde el 2010. Este era un mercado atractivo para la exportadores, sin embargo, la demora en los pagos a los ecuatorianos generó desaliento.
Otros países. Las ventas a destinos con los que ha habido acercamientos comerciales como Siria e Irán son marginales si se las compara con el total de las exportaciones.
A través de un total de 31 oficinas comerciales en el exterior (OCES), Ecuador busca diversificar mercados y su oferta de productos para incrementar las exportaciones. Estas entidades han operado durante todo el período de Gobierno. Sin embargo, desde el 2012 están a cargo de la Agencia de Promoción de Exportaciones e Inversiones, Pro Ecuador.
Ecuador tiene OCES en 26 países y, según la entidad, el trabajo que han desarrollado ha permitido el alza de las exportaciones.
Ecuador no apunta aún a un acuerdo con EE.UU.
El sector exportador espera que en algún momento se logre concretar un acuerdo comercial con EE.UU. Aunque ahora eso no está en la mira del Gobierno, los empresarios destacan los acercamientos que durante los últimos meses ha realizado el Régimen para impulsar los temas comerciales y de inversiones.
El pasado miércoles, en una entrevista para la cadena de televisión Teleamazonas, el ministro de Comercio Exterior, Juan Carlos Cassinelli, señaló que “EE.UU. es un socio comercial importante para el Ecuador. Junto con la UE representa más del 60% de las exportaciones no petroleras. El Ministerio ha tenido mucho cuidado en fomentar la relación comercial”.
En julio pasado el Ministro realizó una gira en la que se reunió con miembros de la Cámara de Comercio de EE.UU. donde dio a conocer los productos ecuatorianos de exportación y expuso los programas de inversión del país. Asimismo, se reunió con los representantes de las cuatro oficinas comerciales del país en territorio estadounidense para revisar el trabajo de las mismas e impulsar sus actividades.
Durante el viaje Cassinelli mantuvo un encuentro con John Melle, representante del área comercial del Gobierno de EE.UU. con el objetivo de solicitar la inclusión del atún, brócoli, alcachofas y flores cortadas ecuatorianas en el Sistema General de Preferencias de ese país, proceso que se espera se pueda concretar en diciembre. Otra cita con este funcionario fue en octubre.
Cassinelli dijo que seguirán avanzando en la relación comercial con EE.UU. independientemente de quién sea el presidente estadounidense.
Con relación a un acuerdo comercial el Ministro señaló que “el no estar en este momento inmersos en una discusión de un tratado de libre comercio no significa que no desarrollemos una conversación seria, dinámica y más aún, con los EE.UU., siendo el destino comercial que es”.
El vicepresidente Jorge Glas fue a Bruselas para la firma del acuerdo con la Unión Europea. Foto: John Thys/ AFP