DHL Express lanzó la aplicación DHL Latam eShop para acelerar el crecimiento del comercio electrónico en Ecuador, Argentina, Chile, Colombia, Perú, Uruguay y Panamá.
Mediante esta App, los compradores pueden acceder a más de 100 tiendas en línea de Estados Unidos. En esta misma plataforma se puede pagar por el producto, la transportación hasta el sitio elegido por el comprador y los impuestos.
Para el caso ecuatoriano, por el momento, solo se pueden traer paquetes, que estén dentro de la categoría de courier B o conocida como 4×4. Es decir, hasta cuatro kilogramos o USD 400.
Según Joakim Thrane, CEO de DHL Express Centro y Sur América, los usuarios tendrán acceso a las mejores ofertas del año que se generen durante fechas importantes como Black Friday, Cyber Monday y Navidad.
Son más de 8 500 millones de productos disponibles en categorías como tecnología, moda, artículos para el hogar, cuidado personal, librerías, jugueterías, fitness, videojuegos y muchas más. La aplicación se encuentra disponible para descarga en dispositivos iOS y Android.
En el ámbito regional, DHL Express proyecta un crecimiento de cerca del 40% en el volumen de envíos durante la temporada alta navideña en comparación con la del 2019. «Este crecimiento está impulsado, principalmente, por el crecimiento del comercio electrónico, el cual se expandió aún más durante la pandemia», aseguró Thrane.
Él agregó que en el continente americano, el 42% de los envíos en el 2019 fueron a través de comercio electrónico. El 2020, este volumen ya ha sobrepasó el 55%.
Según Thrane, hay muchos comercios de Estados Unidos que no ofrecen envíos a países de América Latina debido a los desafíos logísticos como los altos costos de entrega en la última milla, preocupación por posibilidades de fraude e, incluso, debido a la limitada capacidad de abastecimiento derivada de la emergencia sanitaria global.
Por esa razón, aseguró surgió esta aplicación para cerrar esa brecha comercial y desbloquear posibilidades de compra.
DHL Express cuenta con una nueva aplicación para facilitar el comercio electrónico en Ecuador. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
Los hermanos Ramiro y Fernando Valencia y Juan Pablo Zaldumbide se unieron para desarrollar la plataforma de movilidad sostenible Umayux Ecuador.
El nombre de la aplicación móvil está inspirado en un vocablo kichwa, que significa inteligente.
Las operaciones de la ‘app’ se proyectan, inicialmente, para Ibarra (Imbabura) y tiene cinco ejes: delivery, alquiler de bicicletas, tarjeta para pago digital de buses y taxis, así como parqueo tarifado.
Según Ramiro Valencia, cofundador de esta firma, la propuesta es brindar al cliente cinco servicios con un solo dispositivo.
La idea surgió hace dos años. El proyecto se ha desarrollado por fases. La pandemia aceleró la puesta en servicio de la ‘app’.
En junio último. la firma empezó operaciones con taxis convencionales y el servicio de delivery para restaurantes ynegocios.
El público objetivo de la empresa son personas de entre 25 y 50 años, que tienen más dominio de la tecnología. En el primer mes completaron 500 descargas.
En el diseño de la plataforma para taxis, los socios trabajaron, aproximadamente, 18 meses. A través del aplicativo, al solicitar una unidad, el usuario señala el sitio de salida y destino. El programa, que está elaborado con diferentes algoritmos, remite el nombre del conductor, la unidad y el tiempo estimado de arribo.
Iván Yánez, uno de los 20 taxistas aliados de Umayux, considera que la aplicación ofrece al cliente seguridad y al dueño del automotor ahorro de combustible, por la utilización de rutas óptimas.
La plataforma también cuenta con 40 locales asociados de las líneas de restaurantes y comercio. Estos, a través de la misma aplicación, interactúan con los compradores para recibir los pedidos.
Uno de los beneficios que se resalta es que los dueños de estos negocios no deben cancelar ninguna comisión a Umayux.
Esta marca ha diseñado protocolos para la recepción y entrega del producto, que está a cargo de seis repartidores. Los socios aseguran que las tarifas son módicas.
Con los ingresos que generen los dos servicios se busca apalancar la expansión de los demás, diseñados para lograr una ciudad más amigable con el peatón y conseguir una movilidad sostenible.
Por eso, el siguiente paso es el servicio de bicicletas equipadas con candado electrónico. Fernando Valencia, cofundador y responsable de electrónica, explica que con la ayuda de un teléfono celular el cliente ingresará un código QR para abrir o cerrar el cerrojo. Además, el dispositivo permitirá monitorear el desplazamiento de cada vehículo.
La iniciativa, asimismo, está diseñando una tarjeta única de movilidad. Se trata de un sistema prepago para buses urbanos, taxis, parqueo tarifado, sin tener que cancelar en efectivo. Juan Pablo Zaldumbide, gerente tecnológico de la firma, resalta la utilización de herramientas novedosas como el procesamiento en la nube, lo que permitirá atender a un sinnúmero de usuarios.
Este graduado de ciencias de la computación en Australia explica que a medida que se conecten más usuarios se vincularán con otros servidores virtuales, por lo que el crecimiento es ilimitado. “Cada día se van agregando nuevas cosas. Es un mejoramiento continuo en la programación y funcionalidad de Umayux”.
Los USD 25 000 invertidos provienen de ahorros. El emprendimiento genera siete fuentes de empleo, incluida la de los cofundadores. Ellos antes incursionaron en instalación de cableado estructurado, servicio de ingeniería eléctrica y una tienda electrónica.
25 000 dólares han invertido los emprendedores en el desarrollo de la ‘app’
En Ibarra, creadores y colaboradores de Umayux impulsan esta aplicación como una alternativa para la gente. Foto de la página de Facebook Imbabura en línea
Revista Líderes presenta a sus lectores este lunes 22 de junio del 2020 un informe sobre cómo la clase media vive con menos ingresos. Un estudio establece que el 77,2% de los hogares de ese grupo poblacional de Quito enfrenta una afectación en su economía. Se prioriza alimentos, servicios básicos y educación. En nuestra sección Emprendedores, la producción del carchi se puede ver en una plataforma digital. Mira nuestra edición impresa.
Portada de la Revista Líderes del lunes 22 de junio del 2020.
Una alianza liderada por el Banco Interamericano de Desarrollo lanzará David-19, una aplicación para luchar contra la covid-19 utilizando ‘blockchain’ que permitirá a los ciudadanos de Latinoamérica compartir datos sobre el coronavirus para ayudar a los gobiernos, pero sin exponer su privacidad.
“Todos nos sentimos muy indefensos contra este coronavirus, sin embargo, si todos somos David-19 podemos vencer al Goliath del coronavirus”, explicó Alejandro Pardo, especialista del laboratorio de innovación del BID.
La iniciativa será lanzada esta semana y busca -mediante una campaña ciudadana- proveer información útil a los gobiernos en la gestión de la pandemia.
La idea de David-19 es establecer un registro común descentralizado sobre el estado de cada usuario, si está en fase de cuarentena o desconfinamiento, permitiendo generar mapas de situación de riesgos, sentando las bases tecnológicas para el desarrollo de un “pasaporte sanitario digital”.
La idea surgió viendo experiencias puestas en marcha en Asia, sobre todo un proyecto de “trazabilidad” en Singapur y una estrategia sobre el distanciamiento social en Corea del Sur, pero a diferencia de estas herramientas esta iniciativa pide la participación voluntaria y mantiene el anonimato de los datos.
Lo que hace la ‘app’ es compartir y gestionar de manera rigurosa y con privacidad si una persona está confinada o no, si tiene inmunidad, si es asintomática, si presenta síntomas o está enferma.
Para ello, el laboratorio de innovación del BID buscó socios tecnológicos como Everis, IOVlabs y World Data para lograr en algo más de un mes una plataforma digital con el objetivo de que el covid-19 pase de ser “un enemigo invisible a uno visible”.
“Puede suponer la primera experiencia a escala regional del uso de un modelo de identidad soberana que deja bajo el control de cada ciudadano sus datos personales, permitiendo responsabilizarse y colaborar activamente en el control de la pandemia”.
Pardo está encargado de LACChain, un alianza global para el desarrollo en América Latina y el Caribe del ecosistema de la tecnología blockchain, una cadena de bloques descentralizada usada en la criptomoneda bitcoin. Para él, las características de esta tecnología son únicas ya que son globales, abiertas y, sobre todo, “sociales y solidarias”.
Una persona le muestra los documentos a una policía en un control de circulación, en Buenos Aires. Foto: EFE
La infancia y juventud de Esteban Dueñas Galarza estuvieron marcadas por la vida en el campo. Hoy, con 28 años, se mueve entre la ingeniería civil y la tecnología.
Nació en Quito, pero se crió en Ambato. Sus primeros años los vivió en el centro de la ciudad y desde los 8 años, en una casa de campo, en la parroquia rural de Izamba, al norte de Ambato.
“Mi mamá pensó que lo mejor para mi crianza era llevarme al campo. Al principio fue un choque, pero me terminó gustando. Hice amigos y aprendí sobre la crianza de animales”, cuenta.
Hasta los 15 años, edad en la que regresó a vivir a Ambato, fue hijo único. Luego, nació su hermana menor, hija de un segundo matrimonio de su madre, Alexandra Galarza, junto a Fabián Fabara, a quien considera un padre y quien tuvo alta influencia en sus intereses profesionales. Fabara es ingeniero civil, por ello Esteban se vinculó desde joven con la industria de la construcción.
Se graduó de Bachiller Físico-Matemático en el Instituto Tecnológico Superior Bolívar y decidió estudiar Ingeniería Civil en la Universidad Técnica de Ambato.
Comenzó a trabajar desde adolescente. Con 14 años fue mesero en un restaurante de su madre. Y a los 16 atendía un bar en la hacienda de la familia en Izamba. También crió animales en esa localidad, entre la época universitaria y años posteriores.
Paralelo a sus estudios, tuvo sus primeras experiencias en la construcción. Fue residente en obras de jardines infantiles. También participó en la construcción de casas en la Refinería de Esmeraldas. Los últimos dos años de universidad, trabajó para la empresa de Fabara en la construcción de zonas recreacionales para el Ejército, en el oriente del país, y en proyectos en Ambato.
Una vez graduado, trabajó para la Empresa Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Ambato, como Superintendente de Obra, y posteriormente para el Municipio de Ambato, durante un año, como Técnico del Departamento de Planificación.
“Trabajar en el sector público me permitió aprender cómo funcionan los procesos burocráticos en proyectos de obras de construcción”, comenta Esteban.
Carlos Vayas, su exjefe en el Municipio de Ambato, lo considera una persona que siempre aportaba con soluciones. “Era un gran aporte para el equipo. Además, es un joven carismático”.
Esteban renunció al Municipio en febrero del 2016 y comenzó a construir casas en Ambato como profesional independiente. Ese mismo año, fundó MF Ingenieros junto a su tío Mauricio Fabara. Con esta empresa han desarrollado redes de agua potable, un edificio de parqueaderos y soterramiento de cables, en Tena, Ambato y Quito.
Paralelo a su profesión, por un interés personal, Esteban venía autoeducándose en temas tecnológicos y de desarrollo de ‘start ups’ y aplicaciones. En 2018, conoció sobre un concurso organizado por un holding internacional: Naterin, y se presentó con un proyecto de una ‘app’ que permitiera mejorar el acceso al trabajo.
“En mi carrera me he dado cuenta que los profesionales siempre están en rotación. No tienen facilidad para acceder al trabajo. Y por otro lado, como ingeniero civil, siempre me pedían ayuda con profesionales en plomería”.
Luego de un proceso de calificación de seis meses, Esteban quedó seleccionado con su proyecto, junto a otra ‘start up’ de Ecuador. Con acompañamiento del holding, desde septiembre del 2018, comenzó a trabajar de llenó en el desarrollo de la ‘app’, que finalmente se denominó Jobra y fue lanzada al mercado en junio del 2019. Desde la aplicación se conecta a talentos en servicios para el hogar con clientes.
En febrero pasado, Esteban participó con Jobra en el evento anual de Startup Grind, en Silicon Valley, California, una oportunidad que le permitió conectarse con inversionistas y aceleradoras.
Serguei Proaño, gerente de Alquimiasoft, proveedora de Jobra, lo describe como una persona con mucha iniciativa y que constantemente busca innovar. “Siempre ve oportunidades en cada situación”.
“Esteban es una excelente persona. Siempre trata de ayudar a los demás. Es muy responsable en lo laboral y también, arriesgado, tiene una idea y la ejecuta”, comenta su amigo Esteban Sevilla, con quien recientemente se asoció en una nueva empresa de diseño estructural: Build Up.
Esteban Dueñas Galarza Es ingeniero civil y fundador de Jobra, aplicación para servicios de hogar. Foto: LÍDERES
Dar a conocer un bien o servicio, desarrollar catálogos y obtener ‘feedback’ automático de los clientes son algunos de los beneficios que trae para los negocios Whatsapp Business.
Se trata de una aplicación de descarga gratuita que está disponible para Android e iOS, destinada a ofrecer servicios para pequeñas y medianas empresas. “Facilita las interacciones con los clientes, ya que ofrece herramientas para automatizar, organizar y responder rápidamente a los mensajes”, indica la web a la ‘app’.
Aunque su funcionamiento es igual al de Whatsapp Messenger (enviar textos, fotos, etc.) contiene herramientas digitales corporativas. Jonathan Muñoz, experto en esta aplicación y profesor de Marketing School, explica que la ‘app’ permite crear un perfil del negocio: nombre (con la posibilidad de establecer si es una empresa verificada); descripción de las actividades que realiza; dirección de correo electrónico; sitio web; geolocalización; horarios; etc.
Otra herramienta es la creación de catálogos de los bienes o servicios que se oferta. Se pueden incluir fotos con descripciones. Asimismo, a través de un enlace se brinda al cliente la posibilidad de que se contacte con otros números de teléfono para obtener mayor información de un tema.
Ejemplo: una empresa de bienes raíces que funciona en Quito y vende departamentos en otras ciudades, puede colocar en el enlace otros número de teléfonos para que se contacten con los vendedores de distintos sitios.
Sin embargo, la interacción es la clave de esta ‘app’ empresarial. José Rivera, CEO de Tikinauta y experto en redes sociales, explica que por ejemplo en Whatsapp Business se pueden establecer mensajes predeterminados, de hasta 200 caracteres, para dar información al cliente. En el caso de mensajes personalizados se genera cercanía y se rompe con la idea de un proceso robotizado.
La ‘app’ tiene otro beneficio que son las listas de difusión. “A través de esta añadimos números sin necesidad de guardarlos uno por uno, sino en bloque (…) Sin embargo, no se permite enviar mensajes tipo spam; es decir, solo se pueden enviar a los teléfonos de la lista, los cuales son parte de los contactos del teléfono”, dice Rivera.
El número con el que se debe abrir la cuenta de Whatsapp Business debe ser completamente diferente al personal. Es necesario adquirir otro teléfono y otro chip.
Muñoz explica que si se decide tener Whatsapp Business en un teléfono ya no es posible usar Whatsapp Messenger.
Existe la posibilidad que en las páginas web o los blogs de Wordpress se coloque el ícono de Whatsapp Business, con el número de teléfono, para un contacto más rápido. Cuando el cliente pulsa ese ‘link’, se le enviará directamente a la ‘app’ y, una vez allí, podrá realizar consultas, pedidos de bienes o servicios, entre otros.
Ocre, negocio dedicado a la belleza, recibe solicitudes de servicios e inquietudes con esta herramienta. “Usamos la ‘app’ hace un año. Nos permite comunicarnos directamente con el cliente, fijamos citas, etc. El 40% de los pedidos que recibimos lo hacemos a través de Whatsapp Business”, dice Paula Vargas, vocera de Ocre.
Precisamente, las cifras son claves para las empresas. Sebastián Chiriboga, especialista en Emprendimiento e Innovación de la Cámara de Comercio de Quito, indica que la ‘app’ genera estadísticas sobre los mensajes que se entregaron y se leyeron con éxito. Él explica que cada vez hay más empresas que se dedican a gestión de ventas por whatsapp.
A futuro
Elio Zambrano catedrático de la Universidad de Las Américas destaca que Whatsapp Business, Facebook e Instragram, al ser parte del mismo grupo, van a estar inteconectadas. Si se publicita en una se publicitará en todas.
Añade quecomprar vía Whatsapp Business es fácil para el consumidor, por la cercanía en el uso de la app de mensajería. Considera que seguirá creciendo y ofreciendo más herramientas.
Esta herramienta permite crear un perfil empresarial, ofrecer catálogos, etc. Es gratuita y su uso se propaga entre emprendedores y pymes. Foto: Freepik.es
Hoy hay varias aplicacionesmóviles que ofrecen hacer compras, pero existe una que se distingue porque se especializa en adquirir productos en supermercados y en establecimientos de artículos para el hogar.
Los responsables del proceso no solo se limitan a conseguir lo que el cliente desea, sino que también asesoran para dar con el producto de mejor calidad y dar un buen servicio.
De todo esto se encarga Tipti. Se trata de una ‘app’ ecuatoriana; sus fundadores, Pierangela Sierra y Rafael Luque, son del país al igual que el software, que se desarrolló en Loja.
La empresa empezó a operar a finales de 2017; funciona en Quito, Guayaquil y Cuenca. En apenas dos años ha logrado posicionarse entre las mejores del mercado nacional.
Durante este tiempo ha recibido premios vinculados al comercio electrónico entre los que figuran el reconocimiento a la mejor pequeña y mediana empresa (pyme) del sector en Ecuador, otorgado el año pasado en los Ecommerce Awards.
Su éxito ha sido tal que pasó de facturar menos de USD 80 000 en el primer año a cerrar el 2019 con ventas superiores a los USD 2 millones. Gracias a ello, para 2020 está entre sus planes expandir el servicio a dos ciudades más y llegar a Centroamérica.
El nombre es un acrónimo de la frase ‘Tiempo para ti’. En ese concepto radica el éxito de la compañía, puesto que se la pensó para satisfacer las necesidades de personas que no disponen de tiempo suficiente para realizar sus compras de víveres y más productos necesarios.
Luque indica que debido a que salen tarde de sus trabajos, las personas tienen dificultades para aprovechar los días de descuentos en los supermercados. Ahí es cuando Tipti actúa.
El cliente hace el pedido y los colaboradores de la ‘app’ se encargan de la adquisición de la despensa. El usuario tiene el poder de elegir los productos, el lugar de abastecimiento, la fecha en la que desea que se haga la compra, así como la hora y sitio en donde recibirá el encargo, explica el emprendedor.
Cualquier miembro de la familia puede usar la aplicación. Cada miembro añade en el carrito familiar los artículos que requiere en una compra.
El centro de atención a clientes y proveedores está habilitado 364 días del año. Solo el 1 de enero no atienden ningún tema. Foto: Costales / LÍDERES
La plataforma digital funciona en ‘smartphone’, tableta o computadora. Las compras se pagan con tarjeta de crédito o débito, transferencias electrónicas y se aceptan pedidos en efectivo de hasta USD 25.
El usuario puede escoger mercadería de entre 20 cadenas comerciales como La Favorita, Coral, Dilipa y otras; también hay 10 pequeños negocios. Se puede realizar pedidos de varios establecimientos.
A los responsables del proceso se los conoce como ‘shoppers’ (compradores, en español). Son personas con perfiles relacionados al manejo de alimentos; acceden a una formación antes de brindar el servicio.
Tienen por función elegir los mejores productos y en caso de no encontrar lo que indica el pedido, ellos se contactan con el cliente y le exponen las opciones que hay en la vitrina.
La empresa cuenta con 70 ‘shoppers’ en las tres ciudades. Entre ellos hay chefs que, además de comprar, asesoran al usuario en cómo combinar los alimentos y prepararlos mejor. Además de ellos, hay un centro de asistencia que gestiona las inquietudes y reclamos de clientes y proveedores.
Saidy Larrea se graduó de la carrera de gastronomía en la Universidad San Francisco de Quito. Empezó como ‘shopper’ cuando la firma inició operaciones, ahora es la responsable de todos los compradores y de supervisar que los clientes estén satisfechos.
Por su experiencia, asegura que la clave para la evolución de la plataforma está en la calidad del servicio.
María Andrade, habita en Sangolquí, al oriente de Quito. Empezó a usar la ‘app’ desde hace un mes, a raíz de que se fracturó el brazo y no podía hacer las compras de la despensa para su familia. Conoció la plataforma a través de redes sociales y ahora la recomienda con seguridad.
“Al principio tenía mis dudas, pero puedo asegurar que el servicio ha sido excelente. Pago con tarjeta y no he tenido problemas. Siempre llegan a tiempo y con lo que pedí. Por eso ahora les recomiendo a mis familiares que la usen”, comparte María.
Los planes de expansión de la marca auguran buenos pronósticos y son el resultado de un manejo responsable e innovador del negocio, que tiene como eje fundamental al consumidor, sostiene Rafael.
Cifras de la empresa
100 000 clientes registrados tiene la aplicación. De ellos cerca de 16 000 son frecuentes.
80% de las compras que se hacen el portal se han hecho con asistencia de los ‘shoppers’.
30 tiendas proveedoras son en las que el cliente puede adquirir productos. Hay cadenas grandes y negocios pequeños.
90 puntos de cobertura tiene la plataforma en las tres ciudades donde opera: en Quito son 39, en Guayaquil 26 y en Cuenca 25.
Pierangela Sierra, CEO de Tipti
Para nosotros es muy importante el consumidor. Cuando creamos el concepto de nuestro servicio lo hicimos pensando en darle facilidad a todas las personas que tienen una situación compleja en términos de tiempo. Para algunos ciudadanos comprar en el supermercado se vuelve una tarea que muchas veces no se puede cumplir. Buscamos ‘shoppers’ gastrónomos, que sepan elegir bien los alimentos.
Los ‘shoppers’ revisan las características de los productos antes de escogerlos. Si no encuentran lo pedido, sugieren otras opciones al cliente. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
Cada vez se vuelve más cercano que las finanzas y la tecnología se unan para revolucionar el mercado de los servicios financieros, a través del emprendimiento y la innovación. Mujeres WOW es una aplicación que obedece este principio.
La ‘start up’ nace desde un grupo de emprendedores y se dirige hacia emprendedores, según cuenta su CEO, Ana María Monteverde. Ella junto a sus hermanos Gabriela y Carlos, más un especialista en productos tecnofinancieros o ‘fintech’, idearon una solución creativa para mejorar el acceso a financiamiento y apoyar a las empresarias del país.
Mujeres WOW utiliza tecnología ‘blockchain’ para la calificación alternativa de créditos. Es decir, mediante un algoritmo pueden puntuar sus atributos y de esta manera se crea una calificación crediticia para la interesada.
Ana María explica que en la aplicación, las mujeres califican a otras mujeres obedeciendo el modelo W2W (Women to Women), según su rol como compañeras de trabajo, de estudios, clientas o proveedoras. Gracias a esta calificación, la comunidad se encuentra en constante expansión y obtiene una retroalimentación completa, explica Monteverde.
En la aplicación se pone como eje principal la reputación digital. Según Monteverde, actualmente, este es un requisito que pesa ya que las entidades bancarias indagan mucho sobre cuestiones básicas que son encontradas en redes sociales. “Con la ‘app’ motivamos a las mujeres a calificarse unas a otras y de esta manera construir perfiles crediticios para su impulso empresarial”.
Este mecanismo ya tiene casos de éxito. Empresas como Lenddo (opera en Colombia y Filipinas) o Lending Club (EE.UU.), utilizan la reputación digital y la actividad en redes para determinar una calificación de crédito.
Con la aplicación, que aún está en su fase de desarrollo, se aspira a otorgar préstamos de hasta USD 10 000, de forma digital e instantánea, sin la necesidad de un aval o de garantía.
Este monto es el resultado del análisis de mercado que realizaron los mentalizadores para saber cuánto necesita un emprendedor para repotenciar su negocio.
Uno de los requisitos es la estabilidad de al menos seis meses con el negocio. Para los mentalizadores, luego de este tiempo se conoce si un negocio puede prosperar y requiere pasar al siguiente nivel.
Actualmente, la comunidad, cómo le llama Monteverde, ya cuenta con un grupo de 400 mujeres interesadas que constantemente le dan la retroalimentación necesaria para saber qué necesita un emprendedor y así repuntar en el mercado local.
La iniciativa de facilitación crediticia también busca la capacitación. Por ello, dentro del portafolio de la aplicación móvil estarán disponibles módulos en video para capacitar a las mujeres sobre cómo invertir el dinero.
A la fecha, Mujeres Wow está trabajando en el lanzamiento de la versión beta y en diálogos con bancos y cooperativas de Ecuador para la colocación del capital de los créditos.
Los emprendedores ven a futuro lanzar nuevos productos como Empresarios Wow, Pymes Wow, Estudiantes Wow y expandirse hacia otros segmentos. Además, quisieran ser una ‘start tup’ unicornio por haber producido una disrupción en el mercado. Logros del start up
Entre las 50 mejores ‘start up’ del Ecuador, en el Start up Summit 2019 , en Quito.
Finalista en el Fintech World Challenge Accelerator de Panamá (Panamá).
Ranking de 50 Impact Maker Award Xynteo Challenge 2019 Oslo (Noruega).
Tercer lugar en el Global Business Challenge – University of Queensland (Australia). Segundo lugar de Challenge Mujeres Innovadoras (Ecuador).
Ana María Monteverde, CEO de Mujeres WOW, adelantó que se lanzará el producto a mediados del 2020. Foto: Mario Faustos / LÍDERES
Los antecedentes de Virtual Create se remontan al 2010 en Caracas, Venezuela. La empresa, dedicada al marketing digital, la fundaron Ronald Hernández, su esposa y un socio.
Con la profundización de la crisis venezolana, Hernández, hijo de madre ecuatoriana, decidió emigrar a Ecuador en 2015. Entre sus planes estaba expandir Virtual Create.
Le hizo la propuesta de asociarse a un familiar ecuatoriano: Ricardo Loor. En agosto de ese mismo año abrieron una nueva empresa en Ecuador con el mismo nombre. El capital inicial fue de USD 2 000.
En un principio, la idea era mantener el personal y los proyectos que tenía la firma en Venezuela, pero la compleja situación del país caribeño lo hizo insostenible.
Hernández y Loor, ambos ingenieros en sistemas, dieron un giro al negocio, para dedicarse al desarrollo de tecnología. La empresa comenzó a funcionar en los espacios del coworking Impaqto, en Quito.
A consecuencia de una necesidad de la empresa, nació un producto que les ha permitido posicionarse en el mercado por la acogida que ha alcanzado. Se trata de Facturero Móvil, un software que permite emitir facturación electrónica, entre otros documentos.
Tras haberlo usado para consumo propio y realizar algunas pruebas con amigos, lanzaron el producto en febrero del 2016. La herramienta permite emitir también notas de crédito, retenciones, guías de remisión y liquidaciones de compra. Todos los documentos son válidos ante el Servicio de Rentas Internas. Además, ofrece otros servicios gratuitos como registro de transacciones, gastos, listado de clientes y productos, y proformas.
El producto está dirigido, principalmente, a personas naturales y pequeñas empresas. Pero, también tiene entre su portafolio a medianas y grandes. En total, son cerca de 1 800 clientes de distintos sectores: alimenticio, textil, de publicidad, repuestos automotrices, estudios jurídicos, etc.
Para hacer uso del facturero, los clientes deben registrarse en la aplicación y configurar su cuenta con la información tributaria requerida, incluida la firma electrónica, que puede gestionarse en línea desde la herramienta.
Para hacer uso del facturero, los clientes deben registrarse en la aplicación y configurar su cuenta con la información requerida.
Los usuarios pueden adquirir paquetes prepagados, según sus necesidades. Los costos van desde USD 5 hasta 380, dependiendo del número de documentos (entre 20 y 4 000). También se ofrece planes mensuales pospago para clientes que requieren mayor número de facturas por la dinámica de su negocio. Los planes, en ese caso, van desde USD 35 a 140.
Elías Linzán, quien se dedica a la distribución de suplementos nutricionales, utiliza Facturero Móvil desde hace tres años. Adquiere un paquete de 1 000 documentos, que le alcanza para cerca de un año. Utiliza las facturas y notas de ventas. “Me ha ayudado a ganar tiempo y evitar errores, porque los cálculos son automatizados. La herramienta es espectacular”.
Otro de sus clientes es Katiusca Vargas, contadora independiente, quien suele adquirir un paquete de 100 documentos, que le rinde para un año. Un 60% de sus clientes, en su mayoría pequeñas y medianas empresas, también son usuarios de Facturero Móvil. “Me parece excelente. Al momento que emito la factura, le llega al cliente y se registra en el SRI”, comenta.
A la par que brinda facturación electrónica, Virtual Create ha continuado con consultorías para desarrollo tecnológico, incluso retomó el tema del marketing. En 2016, Grupo Laar contrató sus servicios para una de sus marcas: Laarcom, especializada en seguridad electrónica.
A raíz de ese primer contacto, dos accionistas del Grupo, Marcelo y Andrés Arteaga, hicieron la oferta de asociarse. Desde mayo del 2017, Virtual Create está integrada por cuatro socios y forma parte de Grupo Laar, brindando soporte a las distintas marcas del conglomerado, además de contar con clientes externos.
En la empresa laboran 10 personas. Laura Carrazco es la única que se dedica por completo a Facturero, específicamente de atención al cliente y el área administrativa. “Trabajamos por cumplimiento de objetivos”, señala.
La firma tecnológica factura al mes alrededor de USD 200 000. Para el próximo año, prevé lanzar un nuevo producto, denominado Pardux, para la gestión de tiendas en línea, que incluya botones de pago, facturación electrónica, logística, etc.
Las cifras
2 000 dólares fue el capital inicial de Virtual Create.
5 dólares es el valor mínimo de un paquete en Facturero Móvil, que incluye 20 documentos.
1 800 clientes es el portafolio de la herramienta de facturación electrónica.
10 es el número de empleados de Virtual Create.
60 000 dólares reinvirtió la empresa cuando pasó a Grupo Laar.
200 000 dólares es la facturación mensual.
Ricardo Loor, gerente general
La asociación de Virtual Create con Grupo Laar nos dio estabilidad como empresa porque tenemos proyectos a largo plazo, de acá a cinco años, con las marcas del Grupo. Algunos muy grandes. Estamos desarrollando un sistema completo para Laarcourier. Además, para el próximo año vamos a lanzar un nuevo proyecto para comercio electrónico, especializado en la gestión de tiendas en línea, con botón de pago, facturación electrónica y logística de envío, incluidos.
Parte del equipo de Virtual Create y Facturero Móvil. La empresa funciona en las oficinas de Grupo Laar, que integra 17 marcas, en el norte de Quito. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
El ritmo de adopción de la Internet de las cosas (IoT) está aumentando. Más personas, empresas e incluso actividades productivas están pasando de la fase de exploración a la de aplicación.
La firma guayaquileña Palosanto Solutions es un ejemplo. Esta empresa toma muy en cuenta a la industria 4.0 y con ese pretexto diseña y elabora tarjetas electrónicas enfocadas en soluciones IoT llamadas Yubox.
Este tipo de soluciones permiten controlar un sinnúmero de actividades desde la Nube. Según Édgar Landívar, uno de los mentalizadores de Yubox, el producto es tan diverso que es difícil encasillarlo en una funcionalidad. Lo más sencillo sería una tarjeta electrónica enfocada en soluciones rápidas y eficaces.
Hace tres años, Landívar y su hermano José Luis pensaron en buscar la forma de embarcar a su empresa en la era tecnológica.
Palosanto Solutions nació hace 20 años, en 1999, y está dedicada al ámbito tecnológico. Uno de los productos estrella que salió desde esta suerte de laboratorio tecnológico fue Elastix, un software de comunicaciones unificadas que reúne un PBX con IP, correo electrónico, mensajería instantánea, fax y funciones colaborativas.
Landívar cuenta que cuando se trabaja con tecnología “tienes que trabajar pensando en el futuro. Tuvimos un modelo exitoso pero siempre se aspira a innovar y llegar más allá”.
Por eso, en el 2016 los hermanos vieron que existía la necesidad de ofrecer soluciones, mantener controlado todo a través de la Nube e incluir el IoT en todo.
Así comenzó el proceso para conseguir versión 1.0 de la tarjeta Yubox Node. Landívar cuenta que este producto, como todo lo que resulta de un emprendimiento, fue a ‘prueba y error’. El prototipo final es el resultado de tres intentos fallidos y una inversión de casi USD 300 000 entre investigación y desarrollo.
Édgar Landívar es uno de los mentalizadores de este desarrollo tecnológico que tiene dos prototipos: Yubox Node y Yubox Companion.
En todo el proceso participaron al menos 16 personas, como ingenieros electrónicos, ingenieros mecánicos, expertos en microprocesadores e ingenieros en software con experiencia en captura y análisis de datos.
El primer paso fue diseñarlo, saber qué se incluiría en la placa base y definir el tamaño.
Los modelos Node y Companion son de color verde y sus tamaños son de un dedo pulgar y de la palma de la mano. En mayo pasado se consiguió la versión final.
Con la tarjeta terminada se realizó el prelanzamiento en julio de este año. A través de Twitter se organizó un concurso en el que se obsequiaba una tarjeta con panel solar a quien sugiriera la mejor aplicación para la tarjeta.
Inicialmente era una tarjeta y un ganador, pero la acogida fue tal que se terminaron entregando cuatro tarjetas en Quito, Venezuela, Colombia y México.
En estas diminutas placas existen más de 50 sensores que detectan temperatura, humedad y presión barométrica. Es programable a través de puerto USB y tiene conectividad wifi y Bluetooth.
Además, tiene micrófonos incorporados y funciona como controlador de movimiento de vehículos o de productos que forman parte de una cadena logística como ‘pallets’ en el sector agroindustrial. “Se los puede colocar en cualquier lugar y se los utiliza de acuerdo con la necesidad del cliente”, explica Landívar.
La funcionalidad de Yubox va acorde al módulo que se le coloque. El CEO de Palosanto Solutions explica que existen 20.
El desarrollo ya se usa en EE.UU. La empresa agrícola californiana Growers Transplanting INC (GTI), utilizan las tarjetas electrónicas para controlar los más de 500 000 metros de cultivos de frutilla desde junio. Con las placas y los modulos adicionados vigilan la luminosidad del ambiente, la humedad y la temperatura del suelo donde están las frutillas.
Según Landívar, EE.UU. es un potencial comprador de soluciones inteligentes para el agro. Por ello, apuntan a masificarse en ese país y hallar distribuidores para empezar a exportar a Argentina, México y España.
Por el momento, la estrategia para ganar terreno y clientes en Ecuador y países de Latinoamérica es la realización de sesiones de entrenamiento para conocer la funcionalidad de Yubox.
“Enseñamos absolutamente todo sobre Yubox en un taller de 40 horas”, señala el ejecutivo. Sin embargo, Ecuador aún no se inclina de manera decidida a la era tecnológica. Una muestra de ello es que en el país solo se han colocado unas 120 tarjetas de las casi 1 000 que se produjeron desde mayo de este año.
En este mes se colocarán 85 en la Escuela Politécnica del Litoral (Espol) para medir la energía dentro de todo su campus.
La meta para 2020 es producir 11 000 tarjetas con manufactura ecuatoriana. En la actualidad, Yubox se diseña en Ecuador pero se ensambla en China.
“Las tarjetas tienen ‘made in Ecuador’, a pesar de que la manufactura sea a través de intermediarios”, dice Landívar.
En Guayaquil se realiza el diseño y ya cuando regresa la tarjeta está manufacturada, los ingenieros se encargan de soldar unas pequeñas piezas.
Por esta razón, Yubox a través de Palosanto está tratando de ganar un espacio dentro de la Zona Especial de Desarrollo Económico del Litoral (ZEDE). La empresa entregó la carta de intención y espera la aprobación de parte del Gobierno para acceder a un espacio dentro de esta zona.
Para noviembre próximo está previsto realizar el lanzamiento oficial de los dos prototipos, en Guayaquil.
El precios promedio de estas tarjetas en el mercado es de USD 55 a 100, depende de los módulos que se escojan. Los módulos más demandados son los de calidad de aire y microlocalización.
En un pequeño laboratorio, en el norte de Guayaquil, y con la ayuda de un microscopio y osciloscopio se sueldan partes y piezas importadas. Fotos: Enrique Pesantes / LÍDERES