Etiqueta: empleo

  • La demanda de empleo ocasional subió en diciembre

    Washington Paspuel

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    En diciembre los negocios se ven en la necesidad de contratar personal extra para cumplir con el incremento de la demando o cubrir áreas que requieren más atención, como limpieza o guardianía.

    El contrato eventual u ocasional es una de las figuras de contratación que definidas en el Código del Trabajo.

    La ley reconoce a las empresas la facultad de contratar por periodos cortos de tiempo por crecimiento transitorio de la demanda de bienes o servicios, siempre que no sobrepase los seis meses continuos en un mismo año.

    Pese a la contracción económica que afecta al país en este año algunas empresas, especialmente del sector comercial, contrataron o contratarán más personal esta temporada.

    En algunos locales comerciales y empresas de servicios se recurre a esta figura para atender el aumento de la demanda.

    Funky Fish, una tienda de accesorios y ropa femenina en Quito, contrató tres personas más adicionales a su personal fijo a mediados de noviembre. Los empleó para atender el local más grande de esta cadena, ubicado dentro del centro comercial Quicentro Norte.
    Daniela Gavilanes, la administradora, indica que el proceso de contratación se inició a fines de octubre pasado.

    Este negocio contrata cada año personal extra que apoya a sus cinco empleados fijos. La demanda de empleo subió en esta empresa: les llegó un promedio de cinco carpetas diarias desde octubre, cuando ese mes del año pasado solo recibían tres diarias. Allí, el personal extra recibirá el sueldo básico más el pago de horas extras. Sammy Toapanta, de 18 años, consiguió una vacante como cajera. El joven busca adquirir experiencia laboral.

    En la tienda Do IT, de venta de carteras, zapatos y accesorios femeninos, en el norte de Quito, también se contrató personal temporal desde mediados de noviembre. Contrataron a tres para auxiliar de Ventas, y en las áreas de Bodega y Caja. La semana pasada sumaron una más para cobranzas en caja, menciona Gloria Rojas, administradora. La tienda abrió en julio del 2016, pero desde diciembre reciben seis hojas de vida por día.

    Las áreas de Atención al Cliente, Bodega y Distribución están entre las que más requieren personal extra temporal. En Fybeca, el personal adicional que contratan este año lo distribuirán en las áreas de Caja, Percha, Servicio de Empaque de Regalos y otros. La firma contrató este año 25 personas, tres más de las que contrató el año pasado para este mes de diciembre, según la Corporación GPF. Allí, la recepción de carpetas inició a inicios de noviembre.

    Según la firma, no exigen experiencia laboral, pero sí que los postulantes sean bachilleres.

    En la telefónica Claro, el personal extra les permite solventar el incremento de demanda en el área de Atención al Cliente, debido a la extensión de los horarios.

    En Guayaquil, las empresas siguen contratando personal ocasional para afrontar una mayor demanda en diciembre e incluso los primeros días de enero. En los exteriores del edificio de Corporación El Rosado (Mi Comisariato), en las calles Chile y Boyacá, en el centro de la urbe, es usual desde noviembre ver grupos de jóvenes con carpeta en mano, a la espera de un empleo.

    Jordan Aguirre, de 23 años, busca empleo desde hace tres meses. Un amigo que trabaja en uno de los locales de El Rosado le contó que iban a receptar documentos para puestos de cajeros y percheros. “Recién salí de la universidad, cualquier trabajo es bueno, aunque sea por un par de meses”.

    Otras compañías aprovechan actividades como las ferias de empleo que organizan las universidades para contratar personal temporal. El Banco del Austro participó en la feria laboral que en octubre de este año organizó la universidad Ecotec, en Guayaquil. El banco recibió más de 20 carpetas. «Los escogemos según el área de estudios, y los llamamos a entrevistas. Como muchos chicos están todavía estudiando, más que el rango salarial, lo que les interesa es ganar experiencia”, indica Cecibel Goyes, del área de Talento Humano de la compañía.

    En Mall del Sol, centro comercial en el norte del Puerto Principal, se contrató más personal para cubrir el aumento de movimiento en Navidad y Año Nuevo. Este mall se incorporaron 83 personas para las áreas de Marketing, y las tareas de limpieza y seguridad. Para el servicio de limpieza requirieron 45 personas, debido al incremento en la circulación de clientes, según la empresa.

    En algunos locales comerciales y empresas de servicios se recurre a esta figura para atender el aumento de la demanda. Foto: Referencial
    En algunos locales comerciales y empresas de servicios se recurre a esta figura para atender el aumento de la demanda. Foto: Referencial
  • ¿En una recesión se puede subir el salario?

    Redacción Quito

    El anhelado aumento de sueldo es un tema “tabú” en ocasiones dentro de las empresas. Y más cuando estas sienten el impacto de una recesión económica.

    Si bien es cierto, aumentar la remuneración salarial es parte de un incentivo en los empleados, los incrementos deben estar acordes a la realidad de las compañías, indica Cristina Pachel, gerenta de la firma Xpertisia. Ella añade que para solicitar el aumento de sueldo se debe considerar ciertos factores.

    Primero, el colaborador debe tomar en cuenta los resultados de las evaluaciones internas que cada año elaboran las empresas. “Constantemente se evalúa el trabajo de los empleados”, señala.

    Si las evaluaciones son positivas, el empleado puede tener un argumento en su favor para solicitar la revisión de su salario. No obstante, en momentos en que las empresas están ajustando sus gastos operacionales -y en ocasiones analizan un recorte de personal- existen otras opciones para sustituir el aumento de sueldo por el momento.

    Una de ellas son las recompensas emocionales: estas incluyen la posibilidad de aplicar el teletrabajo o brindar a los colaboradores un día libre cada tres meses señala la ejecutiva.
    Estos incentivos, a pesar de no sumar dinero al final del mes, permiten incrementar el compromiso de la empresa por el bienestar del trabajador en el corto y mediano plazo.

    Pero también es importante que los empleados muestren lealtad hacia la compañía en caso de que en la empresa no puedan aumentar los sueldos, debido a la coyuntura económica.

    Lorena Pástor, consultora de Talento Humano, explica que en las empresas es importante tener una política clara y definida en el tema de salarios. “Se debe indicar al posible empleado si es que en la empresa existe una revisión o aumento del sueldo cada año”.

    Los expertos también reconocen que las solicitudes para el incremento de salario se las puede presentar a mediados o finales de año. Usualmente las empresas grandes o las multinacionales estructuran las políticas salariales de manera anual, en los últimos meses de año, dice Pástor.
    Además, estas revisiones permiten evaluar el mercado en su sector. “Aquí se puede ponderar las remuneraciones; si el salario es muy alto, pese a que puede ser beneficioso también puede estancar al colaborador con el mismo sueldo a largo plazo hasta que se equilibre en el mercado; y si el salario es bajo corre el riesgo de que los empleados busquen otras opciones”, indica Pástor.

    En el caso de que algunas empresas no manejen estrategias o políticas de salarios, el panorama es más complicado para el colaborador. En esta situación se recomienda un primer acercamiento con el jefe inmediato para exponer los argumentos válidos que puedan sustentar el aumento de salario. Si hay un no por respuesta, pues lo mejor no es desmotivarse sino analizar de manera global la situación y tomar una decisión.

    Pástor explica que el mejor momento para saber sobre el aumento de salarios se da al negociar el contrato de trabajo: “es clave saber si la firma maneja las tablas sobre el incremento de sueldos”.

    Javier Verdesoto, gerente de la compañía de Nexus, especializada en temas de talento humano, explica que para evitar distorsiones entre empresa y empleados lo primero que se debe estructurar es una política salarial.

    Este esquema, dice este ejecutivo, debe estar relacionado con las evaluaciones y desempeños de los colaboradores. Además, señala Verdesoto, es la empresa la que determina los porcentajes a aumentar en el caso de que haya solicitudes de este tipo. Asimismo, las empresas deben considerar otros factores externos como la inflación, bandas salariales dictadas por el mercado y el Gobierno.

    Verdesoto señala que dentro de estas políticas es importante especificar la posibilidad de obtener bonos con parámetros medibles, como un incentivo para el colaborador. Así, pese a que la empresa esté pasando por un momento difícil este beneficio le permite fidelizar y fortalecer el compromiso con la compañía.

    Uno de los principales errores que cometen las empresas en este tema, además de no estructurar la política de salarios, es la falta de comunicación con los empleados. Esto puede generar distorsión al interior de la firma y malestar entre los empleados, coinciden los especialistas consultados.

    Por lo tanto, es importante que el departamento de recursos humanos de una determinada compañía siempre se capacite sobre estos temas.

    Otra opción para compensara los colaboradores de una empresa en tiempos de contracción económica, detalla el vocero de Nexus, es aplicar los ascensos a nuevos cargos con salarios más altos. Esto permite que un colaborador con un buen desempeño en una área determinada asuma un nuevo desafío.

    Todo esto sirve para generar tranquilidad y estabilidad en los equipos de trabajo y para mejorar los índices de productividad de la compañía. Siempre con el compromiso del equipo

    La evaluación de los colaboradores es el primer parámetro. También es necesario que las empresas fijen políticas claras al respecto. La comunicación es importante.
    La evaluación de los colaboradores es el primer parámetro. También es necesario que las empresas fijen políticas claras al respecto. La comunicación es importante.
  • Trabajo: ¿es la edad de oro un mito?

    Arturo Castillo

    El ser humano está condenado a trabajar. Literalmente. Sin embargo, es el propio trabajo lo que le humaniza, lo que da sentido a su existencia. La laboriosidad, que es una forma de estructurar el tiempo, es más que una virtud socialmente deseable; es, en realidad, una manera de salvarse a sí mismo del pánico de la nada.

    Durante la infancia, los seres humanos estructuran el tiempo con el juego, que no es otra cosa que una forma incipiente de trabajo. Lo lúdico, con su maravilloso estímulo anímico, implica también un hacer con el cuerpo, un hacer ‘oficios’, por decir de alguna manera.

    La escolarización, por otra parte, es la determinación social de que los niños necesitan estructurar su tiempo, tener una función específica en el mundo. Se les asignan tareas y responsabilidades, que están sujetas a medición.

    Los resultados, sin embargo, pueden arrojar datos preocupantes: el niño no trabaja con eficiencia, no cumple con las responsabilidades que se le asignan.

    Esa falta de interés resulta aún más inquietante cuando se trata de la adolescencia, la antesala de la adultez y de la adopción de roles sociales.

    La persona adulta, por su parte, se afirma en el mundo con el trabajo. La llamada ‘edad productiva’ no solo hace alusión a la capacidad del sujeto para generar recursos materiales, dinero, sino también al desarrollo de su potencial mental y espiritual, de su capacidad creativa.
    Dependerá de varios factores para que esa “edad productiva” sea satisfactoria, para que el individuo se sienta autorrealizado. En muchos casos, el trabajo ha estado plagada de dificultades, con períodos de desocupación e incertidumbre.

    El tránsito de la “edad productiva” a la “edad de oro”, casi al final de la vida laboral, debiera deparar a las personas experiencias gratas, enriquecedoras.

    Lastimosamente, el acortamiento de la vida productiva, con el estigma de la edad y la obsolescencia, deja pocas posibilidades para que los individuos disfruten su “edad de oro”.
    El pragmatismo empresarial, la falta de un sentido humanista del trabajo, hacen que quienes han servido largos años a la sociedad acaben relegados, insatisfechos.

    El crepúsculo de la existencia, la inevitable decadencia, son expresiones naturales, pero que en ningún caso imposibilitan para trabajar y producir, para compartir las riquezas de la experiencia. Hay personas que tienen los arrestos necesarios para seguir en la brega, para asumir retos.

    La historia da cuenta de individuos que a sus sesenta tuvieron un repunte, que experimentó una especie de renacimiento, dejando importantes legados en los más variados ámbitos.

    La “edad de oro” no es un mito, tampoco algo restringido a lo laboral, a la productividad; se trata, en realidad, de una etapa inherente al proceso vital humano. Puede manifestarse de manera impetuosa, súbita, con una recuperación del entusiasmo por vivir, por sacarle a cada día el ‘summum’, lo más precioso.

    Y si se expresa en el trabajo, la persona dejará gratos recuerdos, por su calidad humana y por su profesionalismo.

    Las empresas debieran sacarle el mayor provecho posible a la “edad de oro” de sus trabajadores, pues ellos constituyen la memoria de la organización. En muchos casos, son los poseedores del ‘know how’, que necesita ser recuperado y transferido. Debieran ser la élite formativa, debieran “vaciarse” de todo lo que saben.

    En realidad, nadie más que ellos está en capacidad de colaborar para la transición generacional, para inspirar a los jóvenes profesionales, que siempre necesitan de figuras representativas.

    Estadísticas del país

    En el 2015, en el Ecuador se contabilizaban más de 386 000 personas con edades comprendidas entre 65 y 69 años, según cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC).

    Además, se contaron 289 000 personas con edades que oscilaban entre 70 y 74 años.
    En el rango  de más de 75 años e INEC contabilizó el año pasado más de 432 00 personas.

    La edad de oro puede manifestarse con una recuperación del entusiasmo por vivir, por dar más. Foto: Ingimage
    La edad de oro puede manifestarse con una recuperación del entusiasmo por vivir, por dar más. Foto: Ingimage
  • OIT pide acciones para generar empleo digno

    Agencia EFE

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    La OIT instó la semana pasada a los países a reformular sus políticas migratorias para erradicar el paradigma actual, que centrado en la seguridad nacional olvida los beneficios de la migración y los retos laborales que esta enfrenta, como la discriminación o la informalidad.

    “Gran parte de los flujos migratorios tienen como motivación principal el tema laboral, la búsqueda de empleo. Por ello, el paradigma no puede ser la seguridad en frontera o nacional”, dijo en una entrevista el director regional de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para América Latina y el Caribe, José Manuel Salazar.

    En la presentación en la Ciudad de México del informe “La migración laboral en América Latina y el Caribe”, Salazar recordó que los Gobiernos han de dar “un manejo apropiado” a los grupos de personas que se mueven “buscando una oportunidad de trabajo”. Según este estudio, en el mundo hay actualmente 232 millones de migrantes y el 65 % de ellos -150 millones- son personas que se desplazan para trabajar.

    El informe toma como base el análisis de once corredores migrantes. Nueve intrarregionales y dos extrarregionales, hacia Estados Unidos y España. El documento revela que en Latinoamérica el flujo no se ha detenido, y de hecho la cifra de trabajadores migrantes dentro de la región aumentó de los 3,2 a los 4,3 millones de personas entre 2010 y 2015, y de 25 a 37 millones en América del Norte (EE.UU. y Canadá), para un total de 41,3 millones.

    En Estados Unidos se contabilizaron 21 millones de migrantes latinoamericanos, y en España hay casi 1,3 millones de extranjeros provenientes de América del Sur, informó la OIT con base en cifras oficiales de cada país. Si el sector laboral “está bien regulado, la OIT tiene una creencia muy fuerte de la que (la migración) puede ser muy beneficiosa”, apuntó Salazar, pues señaló que esta ayuda a incrementar el producto interno bruto (PIB) del país receptor y las remesas del país de origen.

    El titular regional de la OIT -agencia perteneciente a la ONU que cuenta con la participación de 187 Estados miembros- recordó que la Agenda 2030 de las Naciones Unidas establece un serie de objetivos relacionadas con flujo migratorios para lograr un “crecimiento inclusivo, sostenido y sostenible”.

    El estudio también identifica que existe una alta proporción de trabajadores migrantes en la economía informal, y que a menudo enfrentan explotación, discriminación y bajo acceso a la protección social.

    Foto: Sáshenka Gutiérrez / EFE El director regional de la Organización Internacional del Trabajo para América Latina y el Caribe, José Manuel Salazar,habló del tema.
    Foto: Sáshenka Gutiérrez / EFE
    El director regional de la Organización Internacional del Trabajo para América Latina y el Caribe, José Manuel Salazar,habló del tema.
  • Asociaciones para crear oportunidades de empleo juvenil

    Agencia IPS

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    Es difícil olvidar lo difícil que fue conseguir el primer empleo, la búsqueda, la frustración del rechazo, el nerviosismo de la entrevista o el primer día de trabajo. Y con el alarmante desempleo que aqueja a muchos países, el ingreso al mercado laboral es cada vez más difícil para los jóvenes.

    Pero imaginen cuánto más difícil es para quienes no cuentan con apoyo parental. La desventaja es mayor para los jóvenes de hogares alternativos, en familias en riesgo de separación o que sufrieron algún trauma infantil, tuvieron una infancia difícil o carecen de una buena formación escolar.

    Para ellos, el primer empleo es una cuestión de supervivencia, es la diferencia entre una vida independiente y digna o una signada por las dificultades y el abandono. Para ellos, es señal de confianza.

    No es de sorprender que la falta de capacidades y de formación sean los factores principales detrás de la falta de trabajo y del empleo irregular. Los jóvenes que abandonan sus estudios y que tienen un certificado de enseñanza secundaria constituyen los 73 millones de jóvenes menores de 25 años que están desempleados.

    La situación se agrava en las regiones más pobres. Más de uno de cada tres jóvenes, 37,8% en los países en desarrollo, son quienes trabajan y están agobiados por la pobreza, según el informe Tendencias Mundiales del Empleo Juvenil, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

    En otras palabras, tienen un empleo irregular y pocas oportunidades educativas y menos protección social.

    Conscientes de las dificultades económicas y sociales, los responsables de redactar los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS) incluyeron varios compromisos para ayudar a combatir el desempleado juvenil.

    El concepto central es reconocer que empoderar a los jóvenes a través de la capacitación y el trabajo es fundamental para reducir la pobreza, la desigualdad y construir un mundo mejor.
    Pero los ODS son solo un paso hacia ese fin.

    Con un desempleo juvenil que afecta a 13% de los menores de 25 años, casi tres veces más que los mayores de esa edad, es necesario repensar la estrategia para desarrollar las capacidades que necesita la generación del milenio, y en especial quienes crecen en entornos vulnerables o marginados.

    El Día Internacional de la Juventud, celebrado el 12 de septiembre, se aprovechó para pensar en cómo ayudar a los jóvenes.

    Para reducir el desempleo, los gobiernos deben redoblar la inversión en capacitación y en una educación de calidad que pueda adaptarse a estos tiempos.

    Y, se puede ser más creativo en las asociaciones con el sector privado, por ejemplo, mediante oportunidades de formación y de tutorías. Después de todo, invertir en el bienestar de niños y niñas y ayudar a los jóvenes a que tengan un buen comienzo en su vida independiente, con el tiempo, genera beneficios y promueve un desarrollo económico positivo.

    Aldeas Infantiles forjó ese tipo de asociaciones en los últimos años con el fin de crear oportunidades para los jóvenes. La organización vinculó estudiantes y adultos jóvenes, muchos de los cuales se criaron en hogares alternativos o en familias en riesgo.

    Por ejemplo, la asociación GoTeach con la empresa alemana Deutsche Post DHL Group ofreció a más de 7 000 jóvenes de entre 15 y 25 años en por lo menos 26 países capacitación y oportunidades de hacer carrera. Pero sobre todo, les dio esa primera oportunidad y confianza que necesitaban.

    Es una forma de que los jóvenes se hagan cargo de su vida definiendo sus necesidades y participando en el diseño de su formación.

    Tras el lanzamiento de GoTeach, en 2011, se observó que los jóvenes tenían más confianza en sus perspectivas de trabajo.

    Pero también mejoraron su autoestima, se sintieron más inspirados por las alternativas laborales y más motivados a conducir su propio futuro. Muchos, además, desarrollaron una relación especial con sus mentores voluntarios, quienes, a su vez, dijeron que les fue útil contribuir a crear mejores comunidades.

    Esas iniciativas muestran cómo las organizaciones internacionales, los gobiernos, la sociedad civil y las empresas pueden contribuir al logro de los ODS.

    En las oficinas de ConQuito, en el sur de Quito, jóvenes se acercan a buscar una oportunidad de trabajo. La entidad ofrece capacitaciones. Foto: Foto: Paúl Rivas/ LÍDERES
    En las oficinas de ConQuito, en el sur de Quito, jóvenes se acercan a buscar una oportunidad de trabajo. La entidad ofrece capacitaciones. Foto: Foto: Paúl Rivas/ LÍDERES
  • 24 millones de pares de zapatos fabrica Ecuador

    Modesto Moreta (I)  redaccion@revistalideres.ec

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    La inversión en la compra de maquinaria con tecnología de punta, la capacitación de la mano de obra en un diplomado en tecnología del calzado, el funcionamiento de un laboratorio de pruebas físico-mecánicas, etc. son unas de las estrategias que aplican los socios de la Cámara del Calzado (Caltu), para recuperar sus ventas.

    Durante el último año, la producción de este producto cayó en un 25%. Según los ejecutivos de Caltu, en el 2013 hubo una producción de 33 millones de pares de zapatos. Esta cantidad creció en el 2014 a 35 millones y el año pasado decreció a 34 millones.

    Lilia Villavicencio, presidenta de la Caltu, explicó que antes del 2008 la producción de calzado a escala nacional llegaba a menos de 14 millones de pares anuales.

    En esa época el ingreso de los zapatos chinos y de otros países afectó a la gran industria, la pequeña industria y el área artesanal, que comenzó a cerrar sus puertas. Solo sobrevivieron alrededor de 600 empresas en el país.

    Pero en el 2009, el Gobierno protegió al sector a través de la aplicación de salvaguardias y la vigencia un arancel mixto al ingreso del producto importado. Eso ayudó a alcanzar un crecimiento importante de la producción. Pero nuevamente está afectado por el contrabando que ingresa de Perú y de Colombia.

    Ahora, buscan que la Asamblea desarrolle una Ley que sancione en forma drástica esta ilegalidad.

    El gremio, junto al Gobierno, también busca impulsar campañas que motiven el consumo del producto nacional. La idea es que los ecuatorianos dejen de salir a comprar en los países vecinos.

    Esto promoción se iniciaría en los próximos días. “La salida de divisas nos está dejando sin el circulante y empeorando la situación económica”, dice Villavicencio.

    Mientras eso ocurre, vía promociones, implantación de nuevas tecnologías en las industrias del calzado y capacitación de la mano de obra, para que elabore un calzado que compita, se busca recuperar el mercado local.

    El sector, junto al Ministerio de la Producción, también puso en marcha los laboratorios para pruebas físicas y mecánicas. La inversión bordea USD 136 000. El objetivo es que los fabricantes de zapatos den la garantía a sus clientes con productos de alta calidad.

    El sector busca evitar que más empresas cierren y que crezca la desocupación. Según un informe de Caltu, 187 talleres cerraron y 1 870 personas quedaron en la desocupación durante el último año.

    Hasta el 2015, en el país funcionaban 5 000 empresas confeccionistas entre grandes, medianas y pequeñas, que daban trabajo a 100 000 personas en el país.

    En medio del escenario económico actual, el sector ha puesto en marcha otras estrategias de impulso como ofertas y promociones por la temporada escolar.

    A los clientes de los asociados a Caltu les dan un descuento del 10% en las compras. También obsequian esferográficos, cartucheras y otros incentivos. La finalidad es recuperar las ventas.

    Cada empresa del calzado tiene una situación diferente, entre ellas Plasticaucho Industrial, en Ambato, que es una compañía referente que está presente en el mercado de calzado por 80 años.

    Sebastián Sánchez, supervisor comercial, indica que anualmente facturan USD 80 millones. Dentro de la marca se divide el sector calzado con el nombre Venus e industrias diversas.
    La producción de zapatos representa el 91% de sus ventas. Esta firma, según Sánchez, hasta ahora ha mantenido los volúmenes estables de ventas. “Somos una empresa bastante estable en el área financiera y que cumple con todas las obligaciones tributarias, vamos a la par con el 2015”.

    Otra firma es la fábrica de Calzado Vecachi, que da empleo a 62 personas. Esta mediana industria produce 220 pares diarios en sus líneas colegial, escolar, damas, ejecutivo y casual. Para competir en el mercado con productos de calidad adquirió tecnología de punta y normas de calidad.

    Calixto Peñaloza, gerente de la firma, explica que compiten en el mercado pese a la reducción de las ventas. Por eso han aplicado algunos mecanismos para la comercialización de sus productos.

    Citó por ejemplo, que si el cliente compra en la tienda virtual obtiene un 10% de descuento ingresando a www.vecachi.com.ec. La firma tiene 31 años de presencia a escala nacional.
    El Gobierno busca sustituir las importaciones de calzado, de acuerdo a sus política.

    Una imagen de la producción de calzado en la empresa Vecachi. La entidad emplea a 62 personas y produce al día 220 pares de zapatos. Están en la competencia pese a la baja de ventas. Foto: Glenda Giacometti / Líderes
    Una imagen de la producción de calzado en la empresa Vecachi. La entidad emplea a 62 personas y produce al día 220 pares de zapatos. Están en la competencia pese a la baja de ventas. Foto: Glenda Giacometti / Líderes
  • Las algas son fuente de empleo y de innovación

    Orlando Milesi, IPS  (I)

    Las algas marinas, un alimento rico en nutrientes que estuvo presente en la dieta regular de varios pueblos originarios de América del Sur, aparecen ahora como una alternativa en la búsqueda de garantizar la seguridad alimentaria de América Latina y otorgar empleo a miles de habitantes de las zonas costeras de la región.

    “Trabajo en las algas desde los cinco años. Ahora tengo 50. Tengo un patrón a quien siempre le vendo y quien, según dice, las usa para hacer cremas y plástico”, cuenta la alguera Zulema Muñoz, en el pueblo costero de Matanzas, a 160 kilómetros al sureste de Santiago de Chile, sobre el océano Pacífico.

    Las algas marinas se han utilizado como alimento humano desde la antigüedad, especialmente en China, la península de Corea y el Japón. Al emigrar a otras regiones, los naturales de esos países han llevado su uso a sus nuevos países, por lo que pueden encontrarse productos a base de algas saladas, desecadas y frescas en casi todas las partes del mundo.

    Según cifras de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), cada año en el mundo se recogen unos 25 millones de toneladas de algas marinas y otras algas para su uso como alimento, en cosméticos y fertilizantes, además de procesarse para extraer espesantes o utilizarse como aditivo para piensos.

    La FAO añade que la acuicultura marina, especialmente de algas y moluscos, contribuye a la seguridad alimentaria y al alivio de la pobreza, pues la mayoría de sus productos se obtienen con actividades pesqueras que van de pequeña a media escala.

    Zulema Muñoz sale del mar cargando dos matas de algas de la variedad cochayuyo, que acaba de arrancar de las rocas a las que se adhiere, en la costa del océano Pacífico. Foto: Orlando Miles / IPS
    Zulema Muñoz sale del mar cargando dos matas de algas de la variedad cochayuyo, que acaba de arrancar de las rocas a las que se adhiere, en la costa del océano Pacífico. Foto: Orlando Miles / IPS

    América Latina, una región de 625 millones de personas, con más de 34 millones de ellas padeciendo hambre según cifras de la propia FAO, países como Argentina, Brasil, Colombia, Cuba, Ecuador, México, Perú y Venezuela, han explorado la producción de algas marinas.

    En Chile, “estudios llevados a cabo en Monte Verde (región de Los Lagos, 800 kilómetros al sur de Santiago), demostraron que allí, en uno de los primeros asentamientos humanos de América, las personas incorporaron en su dieta algas marinas”, explicó Erasmo Macaya, investigador principal del Laboratorio de Estudios Algales de la chilena Universidad de Concepción

    Áxel Manríquez, chef ejecutivo del hotel Plaza San Francisco, en Santiago, asegura que en la actualidad existe “un reencantamiento con las algas, sobre todo porque los veganos consumen muchas”.

    Recuerda que en la cocina peruana, “producto de su mestizaje con China, de su influencia, ha incorporado algas en su cocina Chifa. En Chile solo tenemos influencia china en el norte y por eso nuestras algas se van todas para Asia”.

    Las algas “son sumamente potentes: tienen muchos nutrientes y, además, son un producto muy sano porque su salinidad es regulada por el océano. No tienen exceso de sal y, además, se pueden consumir crudas o cocidas. Nos ayudan en nuestro metabolismo y a incorporar yodo. Los asiáticos no padecen hipertiroidismo porque consumen muchas algas”, destaca el experto culinario.

    Chile posee más de 700 especies de macroalgas marinas descritas, de las que solo 20 especies son utilizadas comercialmente. “Desafortunadamente los estudios sobre biodiversidad y taxonomía son muy escasos y también reciben poco financiamiento”.

    Otras investigaciones en curso, dice, permitirán incrementar el valor agregado de las algas convirtiéndolas en biocombustibles, bioplásticos, productos con aplicaciones en biomedicina, entre otros, una tendencia que cobra relevancia a escala mundial.

    Durante las últimas décadas, la demanda ha crecido más deprisa que la capacidad para satisfacer las necesidades con las existencias de algas naturales.

    En Chile, de las 430 000 toneladas de algas extraídas en 2014, 51% correspondió a huiro negro o chascón. Si se suman otras dos especies de algas pardas, la huiro palo y la huiro totalizan 71% de toda la biomasa que se extrae.“Esto es muy preocupante considerando que todas estas especies cumplen roles ecológicos tremendamente relevantes, forman bosques submarinos que albergan una alta y rica biodiversidad”, alerta Macaya.

    Para hacer frente a ese problema, el Gobierno chileno impulsó una ley de Bonificación de Cultivo y Repoblamiento de Algas, que compensará a los pequeños algueros (pescadores artesanales y o microempresas) con el objetivo de aumentar el cultivo y la cosecha de algas y, de paso, reconvertir laboralmente a muchos trabajadores.

    El uso de las algas es actualmente cotidiano aunque muchos no lo advierten: productos de uso diario como pasta de dientes, champús, cremas, jaleas, leche, remedios, incluyen entre sus compuestos algunos elementos derivados de algas, llamados ficocoloides, como carragenina, agar y alginatos. También están presentes en la alimentación, por ejemplo con el nori, alga japonesa utilizada para la preparación del sushi.

    Las algas sirven como alimento y son usadas en distintos platos asiáticos. Foto: IPS
    Las algas sirven como alimento y son usadas en distintos platos asiáticos. Foto: IPS
  • La limpieza los reunió en un solo negocio

    Redacción Líderes

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    ‘Olvídate de las tareas del hogar. Kasa Limpia te ofrece soluciones integrales a la puerta”.
    Bajo ese eslogan, 21 emprendedores (17 mujeres y 4 hombres) formaron en Ibarra, la capital de Imbabura, una microempresa que atiende las necesidades de las casas y oficinas.

    Equipadas con escobas, aromatizantes y trapeadores, entre otros implementos de limpieza, los integrante de Kasa Limpia dejan ‘brillando’ los inmuebles.

    Todo inició hace tres meses. Hilda Herrera, concejala del Municipio de Ibarra, recuerda que crearon el proyecto laboral, como una alternativa ante la falta de empleo.

    “Cada semana llegaba a mi oficina gente solicitando trabajo. No sabíamos qué hacer. Pero, barajando ideas surgió la propuesta”.

    Poniendo las cartas sobre la mesa se dieron cuenta que eran 70 personas, que tenían experiencia en diferentes actividades: limpieza, electricidad, plomería, construcción, lavado de autos…

    “Descubrimos que esas tareas eran nuestro potencial”, explica Jenny Gaibor, presidenta de la asociación Kasa Limpia. La propuesta es una actividad puntual por horas. Más aún en este tiempo en que muchas familias dejaron de contratar los servicios de las empleadas domésticas, ante la crisis, explica la dirigente.

    Como una estrategia para realizar un trabajo organizado y profesional, se capacitaron con el apoyo del Municipio de Ibarra. En el Centro Económico de Desarrollo, recibieron talleres sobre fortalecimiento organizativo, emprendimiento y administración de microempresas.

    La formación estuvo a cargo de la Fundación Ninacay. Finalmente, tras dos meses la mano de obra estaba lista. 21 personas aprobaron el curso de capacitación.

    Dalia Salas, quien llegó hace 23 años de Esmeraldas a Ibarra, es una de las socias del proyecto laboral. Tiene muchas expectativas.

    Espera el apoyo de la ciudadanía para llevar un pan a su casa. Ella es madre soltera y tiene tres hijos. Antes, comenta, laboraba como vendedora ambulante. Sin embargo, esa labor era poco segura y los ingresos inestables.

    El perfil de sus compañeros es parecidos. Provienen de familias de escasos recurso económicos. Pero con muchas ganas de trabajar. Ese es el caso de Eduardo Tana, de 65 años, carpintero que repara pisos y muebles de madera a domicilio.

    La lista de actividades que oferta Kasa Limpia es amplia: limpieza de casas y oficinas. El costo fluctúa entre USD 5 y 25 dependiendo de la extensión y el requerimiento.

    También, lavado de automóviles (USD 5). Labores de plomería, electricidad, cerrajería…

    El lavado y planchado a mano de una docena de ropa vale USD 4. El dinero entra en un fondo común y se entrega en partes iguales entre los socios. Los contactos se realizan vía telefónica a los números: (06) 2658 112 o 097 953 2 559.

    Los socios de Kasa Limpia son un equipo multidisciplinario que ofrece desde limpieza de oficinas hasta cerrajería. Foto: Patricio Espinoza / LÍDERES
    Los socios de Kasa Limpia son un equipo multidisciplinario que ofrece desde limpieza de oficinas hasta cerrajería. Foto: Patricio Espinoza / LÍDERES
  • Ministra española de Empleo elogia intercambios iberoamericanos sobre trabajo

    Agencia EFE

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    La ministra en funciones de Empleo y Seguridad Social de España, Fátima Báñez, elogió hoy los intercambios de buenas prácticas de la Conferencia Iberoamericana de Ministros de Trabajo y Seguridad Social, que celebra el lunes 2 de mayo del 2016 y mañana su novena edición en la ciudad colombiana de Cartagena.

    «Es una reunión muy constructiva y muy válida para todos. El ejemplo de las buenas prácticas en Latinoamérica siempre es una manera de coordinarnos, de aprender juntos y de acertar más con las experiencias que se han puesto en marcha en otros países y han sido exitosas», dijo Báñez a Efe tras la apertura de la conferencia.

    La cita, que hace parte del ciclo de encuentros previos a la XXV Cumbre Iberoamericana de jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará también en Cartagena el 28 y 29 de octubre próximo, pone el acento en el mercado laboral juvenil, algo que destacó la ministra española.

    «No hay políticas económicas acertadas sin que haya empleo. Y por eso el empleo es el eje de todas las cumbres iberoamericanas. En este caso también el empleo juvenil, porque los jóvenes son nuestro futuro pero tienen que tener ya presente, porque así prosperamos todos los países», apuntó.

    Báñez consideró que los intercambios sobre trabajo son beneficiosos «aunque luego cada uno tenga su perfil propio, su tejido productivo propio» y se mostró agradecida de que durante la instalación de la conferencia se haya «puesto a España como ejemplo de un país que progresa creando riqueza en forma de empleo».

    «Eso es fruto de varias cosas», consideró la Ministra, que destacó el modelo de mercado laboral existente en su país.

    «A mí me gusta decir que el modelo de mercado de trabajo en España es un modelo de flexiseguridad europeo. Flexibilidad para las empresas pero también, y es muy importante, seguridad para los trabajadores, para que tengan empleo de calidad en el medio y largo plazo, ese es el modelo que hoy tiene nuestro país», expuso.

    Para Báñez, el «reto» en los próximos años «es conseguir que en España trabajen 20 millones de personas, que es como decir que la recuperación le ha llegado a todo el mundo, a todo aquel que quiere trabajar y todavía no puede hacerlo».

    La reunión de dos días de Cartagena está organizada por la Secretaría General Iberoamericana (Segib) y tiene como lema «Juventud, Emprendimiento y Educación».

    La agenda de trabajo, en la que participan ministros de Trabajo y representantes de más de 20 países y sus respectivas delegaciones, está repartida en cinco sesiones que tratarán temas como «Los jóvenes en el futuro del trabajo», donde se avanzará en el diseño de políticas públicas que permitan crear estrategias para generar empleo, informó la Segib.

    Igualmente se discutirá la «Formación para el trabajo y empleo juvenil», donde se hará un análisis de las políticas públicas que permitan a los Estados promover el acceso de los jóvenes al mercado de trabajo y la articulación de la educación secundaria y del sistema de formación profesional.

    La ministra del Empleo y la Seguridad Social de España, Fátima Báñez, habla hoy, lunes 2 de mayo de 2016, durante la IX Conferencia Iberoamericana de Ministros de Trabajo, Empleo y Seguridad Social en Cartagena (Colombia). Foto: EFE
    La ministra del Empleo y la Seguridad Social de España, Fátima Báñez, habla hoy, lunes 2 de mayo de 2016, durante la IX Conferencia Iberoamericana de Ministros de Trabajo, Empleo y Seguridad Social en Cartagena (Colombia). Foto: EFE
  • Dos marcas nacen de esta firma

    Sofía Ramirez

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    El chocolate orgánico Minka y la harina de pescado Titán son los dos proyectos de Avalmarti, que busca posicionarse en el mercado local y extranjero.

    Esta empresa ecuatoriana nació en el 2008, de la mano de Jorge Martínez, su gerente general, y de Luis Ávalos, de 60 años y socio de la firma. Ambos se conocieron cuando eran vecinos por el sector de El Batán, en el norte de Quito. Siempre se encontraban para hacer deporte, manifiesta Jorge Martínez, de 38 años.

    Unos cuatro años antes, este quiteño graduado de ingeniero agropecuario en la Universidad del Azuay se desempeñaba como encargado del área comercial de una firma privada que entregaba productos balanceados, mientras que su colega gerenciaba una empresa productora de harina de pescado. “Cuando nos conocimos con Luis, tuvimos mucha empatía y siempre hablábamos de negocios mientras caminábamos por el Parque Metropolitano”, dice Martínez.

    Entonces, la empresa de Luis Ávalos se quedó con ‘stock’ de harina de pescado por vender (por una negociación que no se concretó) y pidió a Jorge que la vendiera entre sus clientes. La comercialización se dio con éxito y ahí se dio el primer acuerdo para unir esfuerzos, y crear Avalmarti.

    La primera línea de negocio a la que le pusieron ideas y cabeza fue Titán, la harina y aceite de pescado que se comercializa en empresas atuneras del país.

    La harina, dice Martínez, desde sus oficinas en Tumbaco (al oriente de Quito), es elaborada con base en ‘scrap’ o subproducto del atún; mientras que el aceite de pescado contiene omega 3.

    Para esto, ellos contrataron a la empresa Tadel en Manta, para que maquile sus productos. Con la harina de pescado, por ejemplo, empezaron a vender unas 800 toneladas de harina de pescado al año y así fue creciendo la empresa, sostiene el empresario.

    Jacinto Alvear es gerente de planta de Molinos Champion, que produce balanceados para pollos y camarones en Guayaquil. Desde hace dos años, dice, la firma adquiere 3 000 toneladas de harina Titán. El empresario comenta que decidieron que Avalmarti sea su proveedor debido a la buena calidad de la harina: “Tiene un 58% de proteína óptimo”, dice.

    Durante esos siete años y hasta el 2014, con la venta de estos productos recaudaron un capital de USD 500 000. Con esto decidieron crear una nueva línea de negocio, pero esta vez enfocada en la producción de chocolate orgánico negro. La marca se denomina Minka. La primera acción para dar vida a este producto fue la investigación sobre los cultivos del cacao; y luego iniciaron con la búsqueda de cinco fincas ubicadas en Guayas, Esmeraldas, Manabí, Napo, y Cotopaxi (parroquia La Maná). Esto, con la idea de elaborar un solo tipo de chocolate orgánico negro por cada finca.

    El arranque de la producción de esta barra de chocolate fue de 5 000 unidades. Y Avalmarti también la maquila en la empresa Ecuatoriana de Chocolates.

    Serena Rivadeneira, gerenta comercial de esta fábrica -que solo maquila chocolate gourmet-, señala que acogieron a Minka debido a la trazabilidad del producto. Es decir, que el cliente final podrá saber de donde viene la ‘pepa’ del cacao hasta su procesamiento.

    Ecuatoriana de Chocolates, desde hace más de dos años, maquila 16 marcas de chocolate gourmet, y en planta trabajan 14 personas.

    Con ambos productos, Avalmarti logra expandirse hacia mercados extranjeros, además de consolidar clientes en Ecuador. Por ejemplo, a inicios de este año, se exportaron 2 000 barras de chocolate Mirka a Corea del Sur y EE.UU., mientras que Titán sigue posicionándose en el Ecuador.

    Gerente de proyecto

    Juan Román 
    Para impulsar Minka, nos encargamos de desarrollar las barras de chocolate orgánico negro, con cacao fino de aroma. Además, supervisamos el control de todos los procesos de producción, hasta el empacado. Minka salió a la venta en diciembre del año pasado. El producto está integrándose al mercado de manera progresiva en supermercados locales. Para los clientes externos, hemos participado en ferias en Europa y EE.UU. con Pro Ecuador,

    Las Cifras
    40 clientes tiene Avalmarti hoy en día.
    14 personas trabajan en la empresa, incluido el consejo directivo.
    25 000 barras de Minka se producen al mes.
    80 000 dólares será la inversión para el 2016.
    5 orígenes de cacao se usa en Minka
    2 líneas  de negocios tiene Avalmarti.
    65 por ciento de proteína tiene la harina de pescado Titán.

    Jorge Martínez es el gerente general de Avalmarti. Esta empresa nació en el 2008 y tiene dos marcas: Titán (harina de pescado) y Minka (chocolate orgánico). Foto: Diego Pallero / LÍDERES
    Jorge Martínez es el gerente general de Avalmarti. Esta empresa nació en el 2008 y tiene dos marcas: Titán (harina de pescado) y Minka (chocolate orgánico). Foto: Diego Pallero / LÍDERES