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  • Esta empresa viste a niños hace 20 años

    Mayra Pacheco

    redaccion@revistalideres.ec 

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    La experiencia adquirida durante décadas como vendedora y el apoyo de su familia y amigos permitió que Elena Izurieta, gerenta comercial de La Esperanza, creara su empresa hace 20 años.

    Este negocio, que se dedica a confeccionar prendas de vestir para niños de hasta 12 años, empezó atendiendo en una casa, en La Kennedy, en Quito. La inversión inicial fue de USD 250.

    Entonces, no tenía máquinas, pero enviaban los cortes de tela para que quienes prestan el servicio de maquila cosan, borden y estampen, recuerda Izurieta, de 75 años. Ella, desde su oficina, observa cómo sus colaboradores confeccionan vestidos, blusas, pantalones y más prendas.

    Inicialmente eran cuatro personas. Hoy tiene una nómina de 150 personas. También cuenta con 40 talleres que prestan el servicio de maquila. Algunos son emprendedores que han salido de esta fábrica.

    La empresa tiene 2 500 metros cuadrados. “Mi sueño era tener una fábrica de ropa de niños”, expresa Izurieta.

    La Esperanza, ubicada hace siete años Collaloma, en el norte de Quito, tiene presencia en cadenas de venta de ropa del país. Sus prendas se encuentran en Corporación Favorita, Etafashion, De Prati, Corporación El Rosado, Almacenes Tía, Súper Éxito y almacenes en provincias. Tiene alrededor de 200 clientes. Pero ofrece productos diferenciados.

    Para cada tienda se elaboran cada mes colecciones de 12 prendas de vestir exclusivas. Aunque la versatilidad de estas piezas permite formar hasta 20 conjuntos. Etafashion refiere que tiene entre sus perchas prendas de La Esperanza, porque son de buena calidad y los detalles hacen que la ropa sea única.

    En los diseños se destacan unicornios, flores, bordados, super­héroes y más personajes. La Esperanza tiene la marca Bambino. Hace 6 meses logró la certificación Fama, que le permite producir prendas de marca Disney. Cuenta también con la licencia Disney World que además le permite comercializar las prendas.

    Para la confección de esta ropa infantil se emplea materia prima nacional e importada. Al mes se usan en promedio 5 000 kg de tela. Entre los proveedores están Pat Primo Ecuador, J. Jersey y otros.

    Carlos Portilla, gerente comercial de Pat Primo, comenta que trabaja con La Esperanza desde 1999. “Esta empresa familiar es uno de nuestros clientes VIP. Los pedidos al año suman más de USD 500 000 y son cumplidos”.

    La inspiración para confeccionar estas prendas viene de la creatividad y capacitación. El personal visita tres veces al año ferias de moda en Lima, Medellín y Nueva York. La capacidad de producción mensual es 40 000 prendas, aunque la meta para el 2019 es llegar a 50 000. Para lograr esto se adquirió nueva infraestructura.

    La Esperanza factura al año USD 3,5 millones. La demanda es alta, porque se trabaja de acuerdo con las tendencias de moda y materiales de calidad. Esto ha hecho que reciba reconocimientos de sus proveedores. Incluso la Corporación Mucho Mejor Ecuador entregó en este año una calificación doble AA por cumplir con parámetros de calidad. Estas placas están en la oficina de Izurieta. El mercado es nacional, aunque La Esperanza exportó ya hace ocho meses a Bolivia.

    Esta empresa contaba en un inicio solo con cuatro colaboradores. Actualmente emplea a 150 personas
    Esta empresa contaba en un inicio solo con cuatro colaboradores. Actualmente emplea a 150 personas. Foto: Galo Paguay / LÍDERES
  • El acabado de PVC es su negocio

    Redacción Quito

    redaccion@revistalideres.ec (I)

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    Un modelo de negocios en el sector de la decoración y la construcción fue el que creó Kevo. Esta empresa brinda asesoría en la colocación de acabados para la construcción.
    La diferencia está en que los acabados que oferta esta compañía son elaborados con polímeros (plástico) y materiales compuestos.

    Kevo importa el material y guía al cliente en su proceso para colocar los materiales donde los requiera. La familia Sandoval arrancó esta empresa en el 2007 con un capital de USD 40 000 adquiriendo productos desde países como Inglaterra o China, explica Ricardo Novoa, gerente de producto de la compañía.

    El negocio se inició con la compra de revestimientos de PVC para interiores. Luego, el número de productos se amplió a vinil, pisos flotantes compuestos, tablones que reemplazan a los de madera, entre otros.

    Durante los dos primeros años, si bien existían ventas, estas no crecían con rapidez. Para impulsar el negocio, se puso en marcha un modelo integral de servicio, que ahora es el eje de la compañía; este incluye un análisis del producto, asistencia técnica, manuales de correcta colocación, capacitación de mano de obra local e instalación a elección del comprador.

    El modelo es el siguiente: cada vez que llega un cliente los asesores le presentan un catálogo de los productos. Luego le muestran imágenes para que visualice cómo quedaría la instalación. Se hace un presupuesto, el cliente paga y se coloca el producto.

    Si bien la empresa trabaja con clientes de diferentes sectores, el área médica es una de las más importantes. Kevo se encarga de dar asesoría y colocar sus productos en las instalaciones de diferentes casas de salud, tomando en cuenta las regulaciones de la Guía de acabados para interiores de hospitales del Ministerio de Salud.

    El material de Kevo se puede lavar y permite altos niveles de asepsia; evita que se generen hongos, mohos, óxidos, putrefacción o descascaramiento. Tanto el Ministerio como la Agencia Nacional Arcsa han tomado en cuenta el uso de acabados con polímeros y materiales compuestos para áreas hospitalarias, negocios de preparación de alimentos, industrias, entre otros espacios.

    La empresa ha participado en proyectos médicos en laboratorios y hospitales, públicos y privados. Jaime López, gerente de Operaciones de la constructora Conserde Millenium, ha usado los productos en dispensarios.

    “Al ser material PVC es de fácil lavado e impermeable. Ayuda mucho para un acabado liso, uniforme y de alta calidad. Trabajamos con la empresa hace unos cinco años. El servicio es rápido y la firma cuenta con productos de buena calidad”, manifiesta. La constructora se dedica a la edificación prefabricada, por lo que también ha recibido la colaboración de Kevo en proyectos en casas y oficinas.

    Novoa asegura que Kevo innova de manera permanente. Ahora, por ejemplo, está arrancando un plan para realizar simulaciones 3D. Esto permitirá que los clientes puedan ver una imagen cada vez más real de cómo quedarán sus muebles, paredes, pisos, techos u otras áreas.

    Para guiar a los consumidores, Kevo tiene ingenieros que trabajan en los procesos de asesoría. Sin embargo, la compañía también cuenta con 20 maestros técnicos, quienes laboran de manera indirecta e independiente: reciben el material y lo instalan.

    La firma ha desarrollado proyectos en diferentes ciudades del país como Machala, Cuenca, Quito, La Maná, etc. Vende sus productos directamente, pero también a través de unos 15 distribuidores a escala nacional. “En lo que es Pichincha estamos totalmente cubiertos. Estamos en negociaciones para abrir un tipo consorcio en Manta y está en nuestras metas llegar a Guayaquil. Nuestro modelo de negocio es lo que es exitoso”, dice Novoa.

    Doris Arboleda, de DECORCasa A&R, está entre los distribuidores de la firma, en La Maná. Se dedica a ello hace ocho meses y destaca la calidad de los tumbados de PVC. Próximamente, comprará más productos para instalar en un proyecto de decoración de una casa móvil. Arboleda destaca la resistencia de los mismos y el servicio integral de Kevo.

    La compañía cuenta también con servicio posventa. Realiza visitas, de ser el caso, en las zonas de construcción para determinar que todo esté bien instalado y que se encuentre a gusto de los clientes.

    En las oficinas de Kevo, en el norte de la ciudad, los clientes reciben asesoría integral para la instalación de acabados para la construcción de PVC
    En las oficinas de Kevo, en el norte de la ciudad, los clientes reciben asesoría integral para la instalación de acabados para la construcción de PVC. Foto: Patricio Terán / LÍDERES
  • Alimento para mascotas, a un par de clics de distancia

    Redacción Quito

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    Entre dos y tres veces por mes, Carmen de Garzón tenía que viajar a Santo Domingo o a Quito para comprar el alimento que comen sus dos mascotas, Noah y Kira.

    Ella vive en Mindo y cuenta que no escatimaba hacer esos viajes con tal de comprar alimento de buena calidad. Pero esos viajes y el gasto en que incurría terminaron, porque ahora compra las croquetas de sus mascotas con un par de clics a través del sitio web Delimascotas.com y recibe el producto en su casa.

    Se trata de una tienda ‘online’ que funciona desde abril y ofrece 350 productos de 40 marcas de alimento de para perros y gatos.

    Eugenio Meza, Juan Esteban Dobronski, Leopoldo Dobronski y Gustavo Endara son los socios de este emprendimiento que arrancó en Quito, con una inversión de USD 50 000. El 70% de ese monto se destinó a abastecer de producto variado a su bodega.

    Se trata de un negocio familiar en el que querían incursionar hace varios años, recuerda Juan Esteban Dobronski. La idea se concretó a inicios de este año, añade, principalmente por iniciativa de su padre, Leopoldo, que es un amante de las mascotas.

    Juan Esteban cuenta que la familia estaba buscando emprender un negocio de tienda virtual porque él maneja ya un negocio de call center; mientras que Meza, que es su cuñado, tiene un negocio de desarrollo de sitios web.

    “Mi papá planteó vender alimento de mascotas y decidimos que era una buena idea. Sabemos que los perros y gatos son como un miembro más de las familias y las personas no escatiman en darles lo mejor”, dice.

    Los pedidos se reciben a través del call center y en el chat del sitio web; los envíos se realizan a toda la ciudad y hasta las periferias de Quito sin recargo adicional. El producto llega al domicilio hasta máximo las 24 horas siguientes de que se realice el pago.

    Dobronski señala que con esta estrategia quieren hacerse un espacio en este rubro tan competitivo y en un mercado en el que todavía hay personas que desconfían de las compras ‘online’.

    “Uno de los mayores retos ha sido la desconfianza de la gente en las compras en línea, pero hemos logrado crecer. La mayoría de nuestros clientes se vuelve un comprador asiduo”.

    Hugo Landázuri es uno de esos clientes. Él cuenta que por las facilidades que ofrece el sitio web, ahora compra presentaciones más grandes “porque no tengo que preocuparme por el peso y la movilización del paquete”.

    En estos casi seis meses, Delimascotas hace unos 120 envíos al mes y sus ventas han experimentado un crecimiento promedio mensual de 20%, cuenta Meza.

    El catálogo de esta tienda virtual, que trabaja con 20 proveedores, cuenta con una línea de alimento medicado desde hace un mes, en el que se ofertan alrededor de 28 tipos de producto para mascotas con problemas gastrointestinales, renales, hepáticos, entre otros.

    Este mes lanzarán una ‘app’ para celular y a futuro ofrecerán otros productos para mascotas.

    Este emprendimiento quiteño genera unas 10 plazas de trabajo directos, entre transporte y call center. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
    Este emprendimiento quiteño genera unas 10 plazas de trabajo directos, entre transporte y call center. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
  • En mayo del 2019 se habilitarán vuelos Quito-París

    Redacción Quito

    Desde el 14 de mayo del 2019 habrá un vuelo directo entre Quito y París. Así lo anunció Quiport, mediante un comunicado en el que se detalla que la ruta será temporal hasta el 26 de octubre del año próximo, durante la alta temporada del verano europeo.

    Los vuelos serán operados por Joon, la aerolínea de bajo costo que es parte del grupo Air France-KLM. Los clientes contarán con un vuelo directo entre las capitales ecuatoriana y francesa, operado en un Airbus A340 con capacidad para 278 pasajeros. La aeronave está equipada con las nuevas cabinas de larga distancia de Air France y ofrece tres clases: Business, con 30 asientos; Premium Economy con 21 asientos y Economy con 227 asientos.
    Además se informó que habrá tres vuelos por semana entre el 14 de mayo y el 26 de octubre de 2019.

    “Para el equipo de Air France-KLM en Ecuador es un orgullo inmenso anunciar al mercado el lanzamiento de la ruta Quito – París. Este vuelo directo de Air France operado por Joon tiende un puente entre Ecuador, Europa y el mundo. A través del hub de París-Charles de Gaulle nuestros clientes podrán conectar con los 184 destinos de la red aérea internacional de Air France.”, afirmó Marie-Noëlle Landázuri, Gerente de Air France y KLM para Ecuador.
    Lanzada en diciembre de 2017, Joon ha transportado más de dos millones de clientes en Europa y en el mundo desde París. Su flota está compuesta por aviones Airbus A320 y A321 en la red de media distancia y Airbus A340 en la red de larga distancia.

    Andrew O´Brian, Presidente y Director General de la Corporación Quiport, señaló que la noticia es un motivo de orgullo. “La ruta representa el éxito de nuestra estrategia de desarrollo de rutas orientado a incrementar la conectividad de Quito y el Ecuador a destinos de relevancia a escala mundial”.

    Imagen referencia. Desde el 14 de mayo del 2019 habrá un vuelo directo entre Quito y París. Foto: Archivo / LÍDERES
    Imagen referencia. Desde el 14 de mayo del 2019 habrá un vuelo directo entre Quito y París. Foto: Archivo / LÍDERES
  • El agua adquiere sabor en esta planta

    Mayra Pacheco

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    El agua que se envasa en la planta procesadora de AQessent, ubicada en el Recreo, adquiere un sabor y olor especial.

    Desde hace un año Francisco Mena y Patricia Chávez, socios de AQessent, decidieron darle un toque especial a este líquido, que generalmente no tiene olor ni sabor. Pero, esto no fue un límite para estos emprendedores.

    Mena, químico ambiental, conocía las características del agua a detalle, porque desde los 13 años trabajaba en un laboratorio que analizaba muestras de agua, que era propiedad de sus familiares. “Me fascinaba ver a detalle los componentes del líquido vital”.

    Esta experiencia le motivó a estudiar química ambiental, en EE.UU. Y más adelante a crear su propia empresa.

    En esta iniciativa le apoyó Chávez, quien tiene una maestría en productos nutracéuticos, en Italia. Para esto, invirtieron inicialmente unos USD 10 000, en equipos y materia prima.

    AQessent se creó en junio del 2017 como una opción de bebida refrescante saludable. No tiene colorantes, preservantes químicos ni saborizantes artificiales, pero al levantar la tapa del envase se percibe un olor intenso.

    Esta agua aromatizada tiene tres sabores, producto de la combinación de plantas medicinales y frutas cítricas. Por ahora se cuenta con hierbaluisa-limón, anís-mandarina, y canela-naranja.

    Más adelante está planificado incluir nuevas opciones. Pero esta vez la idea es ofrecer sabores frutales como piña, maracuyá, fresa, mango, durazno, cereza, uva verde, mora azul, sandía y otros.

    Desde que se inició esta empresa, estos saborizantes se adquieren en Magic Flavors, que produce estos insumos en función de las necesidades de los clientes. La creación de las alternativas para estas aguas se desarrolló de manera conjunta.

    Para AQessent se entrega alrededor de 10 kilos de saborizantes naturales e idénticos al natural, cada dos meses. Cada uno cuesta entre USD 15 y 20, según sus características.

    Las bebidas vienen en tres presentaciones de 300 mililitros (ml), 475 ml y 1000 ml. Cuentan con registro sanitario. La capacidad de producción de esta empresa es de 10 000 envases por mes.

    El producto va dentro de unos envases de vidrio, tapados de manera hermética. Mensualmente, se compran alrededor de 2 000 botellas en la Importadora Castro. En esto se invierte USD 360.

    Este tipo de envase, según Mena, garantiza que el agua se preserve y no se contamine con químicos. Las botellas son reutilizables.

    Actualmente, AQessent se vende en restaurantes, hoteles, hosterías y ferias. En noviembre próximo los emprendedores tienen planificado participar en la Feria de Alimentos y Bebidas que se realizará en Cumbayá.

    Y están en conversaciones para entrar en cadenas de supermercados y de farmacias, por la alta demanda que tiene el agua en las ferias.

    También se hacen entregas a domicilios a los clientes, en Quito y los valles, sin recargos extras.

    Las personas pueden hacer los pedidos a los números 022 657 134 o 098 438 8426. La cantidad mínima para hacer la entrega es un paquete de 12 unidades de 300 ml o seis de un litro.

    Miguel Carrera, cliente, comenta que él pide con frecuencia estas bebidas desde hace un año, porque considera que son una opción saludable. En su caso, su sabor favorito es canela-naranja.

    “Me gusta porque, aunque no tiene mucho sabor, su olor es bastante intenso”, dice Carrera.

    Galo Carvajal, quien fue diagnosticado con diabetes, consume también este producto, porque tiene prohibido consumir bebidas con endulzantes. En promedio, Carvajal adquiere hasta 10 paquetes al mes porque consumen, incluso, sus nietas que lo visitan. Cada uno cuesta USD 9.

    “Esta agüita me ha sentado muy bien, tiene un sabor muy sutil, pero muy sabroso a la vez”, expresa.

    Por unidades, las aguas cuestan desde USD 0,99 (300 ml) hasta USD 1,99 (litro). Estas ventas han permitido que AQessent facture alrededor USD 15 000 en este primer año de funcionamiento.

    La empresa tiene 10 colaboradores. Por ahora, la planta procesadora tiene unos 20 metros cuadrados, pero el objetivo es expandirse en el mediano plazo y ofrecer nuevos productos.

    “El agua es nuestra pasión y queremos mantenernos en el mercado”, expresa Mena.

    La planta procesadora de esta agua aromatizada funciona en el sector de El Recreo, en el sur de Quito. Cuenta con tres sabores combinados entre hierbas aromáticas y frutas cítricas. Foto: Mayra Pacheco / LÍDERES
    La planta procesadora de esta agua aromatizada funciona en el sector de El Recreo, en el sur de Quito. Cuenta con tres sabores combinados entre hierbas aromáticas y frutas cítricas. Foto: Mayra Pacheco / LÍDERES
  • Arreglos florales que duran más de un año

    Redacción Quito

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    El encanto, los colores y los diseños de las flores se convirtieron en la pauta para la pareja de esposos que decidió incursionar con su marca de rosas preservadas al mercado nacional.

    Bárbara Salazar y Andrés Fuseau crearon la marca Belle Fleur Ecuador, en mayo de 2017.

    En este negocio se elaboran rosas eternizadas. Estas flores preservadas se entregan al público en una caja forrada a mano, con estilos personalizados. “La idea es crear diseños florales sobrios, elegantes y de calidad con un toque de sentido de moda y tendencias de colores”, comenta Salazar.

    Belle Fleur ofrece al público más de 15 diseños de cuerina para la decoración de las cajas. La emprendedora asegura que este material es libre de crueldad animal.

    El tiempo de duración de la flor es de, aproximadamente, un año, considerando que puede tener un lapso más extenso de vida, según el diseño de la rosa y el cuidado.

    La marca permite al cliente diseñar su propio arreglo floral: combinación de colores a su elección y una dedicatoria agregada en la cuerina de la caja. Se puede incluir en el recuerdo detalles como chocolates u otros objetos.

    La tienda realiza sus ventas, únicamente, a través de Internet. En bellefleurecuador.com se ofertan los productos de la firma, así como vía redes sociales.

    Las rosas preservadas de la marca han llegado a todo el país. De igual manera, el negocio ha recibido pedidos de visitantes que desean llevar sus productos como obsequios para sus familiares.

    El negocio mantiene convenios con Servientrega y SendMe (Guayaquil). Estas empresas se encargan de la distribución directa del producto.

    Inicialmente, Belle Fleur recibió asesoría de TypoStudio y Sideralsoft. Estas organizaciones se encargaron de la creación de la página web y de la publicidad de la marca en el mercado local. Actualmente, el encargado del marketing es Fuseau.

    Del manejo, de la parte creativa, artística, diseño de producto y fotografía de los arreglos florales se encarga Salazar.

    La pareja de emprendedores asegura que mantiene tres tipos de clientes: los de ocasión, para eventos sociales; los que buscan decorar hogares u oficinas y los corporativos, que solicitan diseños con el logo de su empresa plasmado en la caja.

    Las rosas con las que se elaboran los productos provienen de florícolas en diferentes provincias y algunos sitios extranjeros.

    Belle Fleur tiene, también, arreglos de rosas simétricos, es decir, en empaques con formas geométricas. Sus productos tienen nombres franceses: La Bisou, La Jolie, La Mini, La Petite, La Midi, La Grand, La Carré y La Maxime.

    El precio depende de la cantidad de rosas que se requiera. Los costos van desde USD 20 por un rosa preservada (La Bisou), hasta USD 250 las 49 flores eternizadas (La Maxime).

    De la misma manera, la marca utiliza tres tamaños diferentes de flores: minirosa, rosa estándar y rosa gigante. Los colores varían entre arcoíris y metalizados.

    Esta empresa también comercializa rosas preservadas de jardín y orquídeas eternizadas.

    Los clientes de Belle Fleur pueden entregar a los emprendedores sus propias macetas o bases a su elección para que en el negocio de decoración realicen los arreglos florales con los botones. Siempre se usa producto preservado.

    La microempresa requirió una inversión inicial, entre materia prima, diseño de marca, adecuación y publicidad de, aproximadamente, USD 15 000.

    Los ingresos mensuales del negocio oscilan entre USD 4 000 y 5 000. Las ventas se incrementan en fechas festivas en febrero, mayo y diciembre. En esa época los montos mensuales alcanzan hasta USD 10 000.

    A pesar de que el negocio se mantiene en el mercado desde hace menos de un año, los ingresos y las ventas suben cada mes.

    Andrea González es una de las clientes de Belle Fleur. Ella solicitó el pasado mayo dos arreglos florales de 36 rosas preservadas. “El diseño de las cajas y los colores vivos de las flores son un obsequio perfecto para cumpleaños y día de la madre”, manifiesta de forma entusiasmada.

    Bárbara Salazar exhibe algunos diseños de su línea de productos florales,  en su taller ubicado en Cumbayá.  Foto: LÍDERES
    Bárbara Salazar exhibe algunos diseños de su línea de productos florales, en su taller ubicado en Cumbayá.
    Foto: LÍDERES
  • Ellos emprenden sin mirar la edad

    REDACCIÓN QUITO (I)
    redaccion@revistalideres.ec

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    Teresa Quevedo llegó acompañada de su hija, su nuera y dos nietas. Estaba emocionada y sonriente, al punto que posó en varias ocasiones para las fotografías que registraban un momento muy particular en su vida. Esta madre y abuela acababa de empezar una nueva etapa: ahora también es una emprendedora.

    Junto con un grupo de seis personas, todas con más de 60 años, pensaron en un champú para personas como ella que deben cuidar sus canas, aunque también hay algunas que prefieren ocultarlas. Quevedo asistió durante más de un mes al curso de emprendimiento que dictó la Universidad Andina Simón Bolívar (UASB) a un grupo de 30 abuelitos que forman parte del programa 60 y Piquito, que impulsa el patronato San José del Municipio de Quito.

    Canas al aire. Ese es el nombre del producto que lo pensó y concretó con sus compañeros. “Aprendimos mucho, desde la planificación de un emprendimiento, hasta cómo poner el precio al champú”, cuenta con emoción.

    El pasado 10 de julio fue la ceremonia de investidura de estos emprendedores. Todos estaban contentos, así que no dudaron en lanzar sus birretes al aire, al final de la ceremonia. Los flashes de las cámaras de fotos iluminaban sus rostros sonrientes. Los familiares de los graduados no escondían su emoción y los abrazos y los gestos de afecto se repetían en el salón.

    A pocos metros de la sala, los emprendedores ya exhibían sus productos. Allí se podía encontrar perfumes, bisutería, galletas, tamales, adornos para el hogar y una larga oferta de artículos pensados y elaborados por personas que no siempre tienen estas nuevas oportunidades de ser útiles y sentirse productivas.

    Los abuelitos enseñaron sus proyectos de emprendimiento. La oferta de alimentos fue una de las que mayor acogida tuvo en la feria. Foto: Vicente Costales
    Los abuelitos enseñaron sus proyectos de emprendimiento. La oferta de alimentos fue una de las que mayor acogida tuvo en la feria. Foto: Vicente Costales


    Rosa María Ortiz
    , de cabello corto y lentes, fue profesora de lectura de niños de 5 y 6 años durante 40 años. Se jubiló hace tres y empezó a sentirse mal. Sentía que debía hacer algo y se decidió por elaborar pesebres con material reciclado. La espuma flex que sirve para empacar televisores o electrodomésticos se convirtió en la materia prima con la que esta mujer emprende.

    Ortiz cuenta con una socia que elabora las figuras que complementan el pesebre. Las dos fueron parte de esta cuarta promoción de emprendedores de la tercera edad. En la muestra de sus productos, Ortiz explicaba con esmero cada detalle de los nacimientos.

    La idea de conectar abuelitos con el emprendimiento siempre estuvo latente en la UASB. El tema se concretó tras una reunión con el Patronato San José. Es un proyecto que logró activar el voluntariado, explica Wilson Araque, vicerrector de la universidad y director del Observatorio de la Pyme de la misma entidad. “Todos los profesores que apoyamos este programa ayudamos sin esperar nada a cambio”.

    Desde mayo del año pasado, en las cuatro ediciones del programa se han ‘graduado’ cerca de 150 personas. Estos cursos, asegura Araque y se confirma al mirar la exhibición, también permiten elevar la autoestima de los abuelitos. “Todos los participantes tienen experiencia en distintas materias”. Las clases se dieron en la mañana, a partir de las 09:00. Allí se enseñó sobre emprendimiento, temas tributarios, trámites, ventas, entre otros puntos propios de los negocios. Quevedo, Ortiz y los demás participantes del programa reconocen estar satisfechos con lo aprendido y con lo hecho.

    Ahora trabajan puliendo detalles. Por ejemplo, Carmen Benavides, quien presentó una línea de perfumes alista las etiquetas para los envases. Ella aprovecha para entregar tarjetas con su número telefónico a la espera de clientes. El esfuerzo deja claro que las ganas de emprender no tiene edad.

    Planes

    La Universidad Andina Simón Bolívar planea un programa para que estos emprendedores se conviertan en una suerte de asesores de pequeñas empresas en un futuro cercano. “Será un espacio para aprovechar la experiencia y conversar sobre ideas”, dice Wilson Araque, vicerrector del centro de estudios.

    Un nuevo ciclo  de capacitaciones para adultos mayores está previsto en septiembre próximo. El Patronato San José aspira graduar tres nuevos grupos el próximo año.

    En la feria que  se cumplió en el salón Espejo participaron autoridades de la universidad. Ellos compartieron sonrisas, abrazos y fotografías con los emprendedores, la mayoría con pelo cano.

    La cuarta edición  del programa de emprendimiento duró alrededor de un mes.

    Los participantes del programa tuvieron una ceremonia de graduación bastante emotiva ,en uno de los salones de la Universidad Andina. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
    Los participantes del programa tuvieron una ceremonia de graduación bastante emotiva ,en uno de los salones de la Universidad Andina. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
  • Prendas de vestir con telares reciclados

    Redacción Quito

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    La idea de tener algo propio y la necesidad por generar ingresos para su familia, permitió que Verónica Díaz lance su marca Verid en el mercado.

    El emprendimiento surgió en el 2012, cuando Díaz decidió radicarse en Cumbayá y crear un negocio propio que le permitiera pasar tiempo con sus hijos y que le generara ingresos laborales.

    La emprendedora incursionó en el mercado con una boutique en el sector de Cumbayá. Ella viajaba constantemente a EE.UU. para comprar ropa y vender las prendas en el negocio que había posicionado al norte de Quito.

    Sin embargo, las ventas decrecieron a partir de las restricciones que se implementaron en el país, con la aplicación de salvaguardias para productos importados.

    Un curso de costura y confección permitió que la joven empezara a fabricar sus propias prendas de vestir. Estos productos se colocarían en el mercado.

    Con poca acogida y grandes cantidades de ropa, Díaz creó una variedad de productos para llamar la atención del público.

    En la actualidad, Verid cuenta con una línea de productos entre los que están alpargatas, accesorios (collares, aretes y pulseras), sacos, pañuelos, blusas, ponchos, bufandas, entre otros.

    “Lo innovador de la marca es que mis productos son fabricados con prendas de vestir recicladas. Las alpargatas se confeccionan con telas restantes”, indica.

    El calzado se produce con estándares similares a los zapatos americanos Toms. La emprendedora quiso rescatar diseños ancestrales, que generen identidad en los compradores de la marca.

    La materia prima para la fabricación de sus productos es local. “Apoyamos a la economía del Ecuador y tratamos de consumir primero lo nuestro”.
    Por esta razón, los materiales provienen de diversas ciudades como Otavalo, Latacunga, Machachi, Loja, Cuenca, Napo, Ambato

    El emprendimiento, actualmente, trabaja con tres artesanos que colaboran con el diseño y fabricación de algunos de sus productos. A parte, cuenta con dos vendedoras dentro de su local, que también se encargan de la distribución de la indumentaria.

    Verid es un emprendimiento independiente que piensa expandirse a escala internacional.
    Tiene como proyecto, a corto plazo, crear puntos de venta en el exterior que le permitan generar mayores ingresos y tener reconocimiento de la marca nacional.

    El público objetivo de la joven son mujeres. Actualmente, la emprendedora lanzó su línea de accesorios y prendas de vestir para niñas desde los dos años.

    La inversión inicial, tomando en cuenta materiales, producción, diseño, distribución y maquinaria fue de unos USD 10 000.

    Desde el 2012 hasta la actualidad, Verid ha mantenido un crecimiento anual del 5% en sus ventas.

    Los ingresos son de USD 3 000 mensuales. Sin embargo, las ventas suben en las jornadas festivas como día de la Madre, Navidad, San Valentín, entre otros.

    Los clientes de Verid oscilan entre 70 y 100 al mes. Esta cifra sube en participaciones en las ferias.

    Sandy Orellana es una cliente satisfecha. Adquirió productos y accesorios de la marca. “El calzado es demasiado cómodo y elaborado con materiales de calidad”.

    Este negocio cuenta con diseños exclusivos. En el caso de las alpargatas, Díaz indicó que tienen varias colecciones con colores, “combinaciones que marcan la moda actual. Incluimos en nuestras alpargatas las actuales, con plataformas y mucho más”.

    La emprendedora busca ofrecer al público zapatos cómodos para madres de familia, ejecutivos que quieren estar en casa sin zapatos formales y otros segmentos a los que les interesa estos productos.

    Verónica Díaz presenta algunos de sus productos en su local ubicado en Cumbayá. Mantiene una línea de productos con material reciclado. Foto: LÍDERES
    Verónica Díaz presenta algunos de sus productos en su local ubicado en Cumbayá. Mantiene una línea de productos con material reciclado. Foto: LÍDERES
  • Una cadena de piscinas que opera todo el año, en Quito

    Redacción Líderes

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    Redacción Quito (I)
    Redaccion@revistalideres.ec

    Salía cansado del trabajo y los únicos sitios que encontraba para desestrarse de forma sana en la noche eran los gimnasios. Buscaba en Quito un área de recreación acuática a la que pudieran asistir ejecutivos, familias, niños, etc.

    Mario Sambache no se quedó lamentando e hizo que las cosas sucedan. Con una inversión inicial de USD 200 000 levantó el Complejo Recreacional Kaersam en La Rumiñahui, en el norte de Quito, en un terreno de su propiedad en el que funcionaba otro negocio.

    El emprendimiento abrió sus puertas en el 2002 con la idea de ofrecer a la comunidad “un espacio de esparcimiento, relax, salud e integración de la familia”. El centro de recreación acuática tiene un área 2 400 metros cuadrados (m2) y cuenta con piscina, sauna, turco e hidromasaje.

    También incluyó alternativas no acuáticas para el público como un gimnasio, aromaterapia y un bar con bebidas y snacks.

    Los clientes pueden comprar su entrada individual: USD 9 adultos y 5 niños. También pagar por tarjetas para 10 entradas por USD 75 y USD 70 por el mes. Hay programas para parejas y familias.

    Sambache considera que se debe dar un servicio permanente a los clientes por lo que no cierra ningún día del año y abre 13 horas diarias: de 06:30 a 21:30. La idea es que el público, de diferentes edades y condiciones, pueda acceder sin la limitante de un horario.

    Uno de los extras de este negocio es que toda la infraestructura es cubierta, por lo que no importa el momento del día ni el clima para acceder a los servicios del lugar.

    El propietario mantuvo un único Kaersam por seis años. En el 2008 abrió dos sucursales, luego de arrendar dos instalaciones en el norte de la ciudad; la una está ubicada en Pusuquí y la otra en la sede de la Unión Nacional de Periodistas (UNP), en Iñaquito.

    En todas se ofrece los mismos servicios para los clientes. Sin embargo, el complejo de Pusuquí es de mayor tamaño y cuenta con otras áreas como un parque infantil, canchas deportivas, etc.

    La cadena ofrece cursos permanentes para bebés desde los tres meses hasta personas de la tercera edad. El plus de la empresa para los clientes que quieren aprender a nadar es que pueden acceder en el horario que cada uno considere, de lunes a domingo; para ello Kaersam tiene 10 instructores que cada año renuevan su certificación y están capacitados.

    El complejo, además, cuenta con su propia escuela de natación y ha participado en diferentes competencias, incluso, en aguas abiertas. Madres de nadadores que se han formado en este sitio destacan la calidad deportiva.

    Una de ellas es Jenny Flores, quien asegura que a sus tres hijos la escuela les ha generado disciplina en sus vidas. “Somos clientes unos 12 años. La atención es buena y lo importante es que siempre hay limpieza. Vivo cerca y también he usado los servicios”.

    Kaersam se ha mantenido firme a pesar de las dificultades económicas que ha enfrentado el país en los últimos años. La estrategia que ha aplicado es la diversificación de servicios; por ejemplo, el sitio ofrece acceso a spa y fiestas infantiles acuáticas.

    En estas últimas los niños pueden disfrutar del área húmeda, pero también divertirse en saltarines, inflables, pistas deslizables, cañón de burbujas, espuma, entre otros servicios.

    Durante los meses de clase, el negocio ofrece tareas dirigidas y, durante el verano, cursos vacacionales en los tres centros acuáticos, de 07:30 a 19:30, para los niveles básico, medio y avanzado.

    Hace un año Sambache hizo una alianza estratégica con la firma Fisioquality, para ofrecer terapia acuática. Yadira Gordón, fisioterapeuta aliada de la firma y coordinadora de terapia en el complejo de Naciones Unidas, dice que usan las propiedades del agua para pacientes en diversos estados.

    “Aprovechamos los beneficios en lesiones osteomusculares. En el agua no hay carga en las articulaciones y se genera mayor flujo sanguíneo, lo que ayuda a disminuir procesos inflamatorios y brinda más movimiento. Los pacientes neurológicos mejoran su estado de ánimo. Hacemos ejercicios y técnicas específicas”.

    La atención a los pacientes funciona con la misma lógica del complejo, es decir, en los tiempos en los que se acomoden.

    Mario Sambache, propietario del Complejo Kaersam.  La atención es de lunes a domingo. Foto: Julio Estrella / LÍDERES
    Mario Sambache, propietario del Complejo Kaersam. La atención es de lunes a domingo. Foto: Julio Estrella / LÍDERES
  • La ruta para llegar a una ciudad inteligente está llena de retos

    Redacción Quito

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    Una ciudad inteligente es el nuevo reto que tienen las autoridades, las universidades, los empresarios y, por supuesto, los ciudadanos.

    A escala global, Nueva York encabezó el año pasado un ranking de las también llamadas ‘smartcity’. En la región, las líderes fueron Buenos Aires y Santiago de Chile, según un estudio realizado por la Escuela de Negocios de la Universidad de Navarra (España), llamado ‘Cities in Motion’.

    El índice analizó 180 ciudades y se elaboró con base en indicadores como economía, habitantes, medioambiente, cohesión social, planificación urbana, gobernanza y participación urbana, gestión pública, tecnología, movilidad, transporte y proyección internacional.

    Cada una de esas variables significa un desafío que las urbes modernas deben superar en su camino para ser una ‘smartcity’.

    El tema fue motivo de un congreso internacional que se cumplió la semana pasada en Quito, que se llamó Smart City Ecuador. Durante dos días se abordaron temáticas como sustentabilidad, urbanismo, seguridad, transporte, tecnología, entre otras.

    Allí intervinieron autoridades y expertos en la materia. En las ponencias se abordó el potencial que tienen las nuevas tecnologías para facilitar una serie de servicios, así como para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.

    La transformación digital y su impacto en el día a día de las personas fue analizado por Horacio Werner, partner senior de Innovus Consulting, con sede en Miami. Él detalló que la Internet de las Cosas será parte clave en el desarrollo de las urbes modernas.

    Este experto mencionó, por ejemplo, que en la actualidad “solo el 2% de los dispositivos conectados a Internet están conectados entre sí”. Ese porcentaje equivale a unos 300 millones de dispositivos a escala global. Werner anticipó que para el 2020 se espera una aceleración y que la cifra de dispositivos conectados entre sí llegue a 50 000 millones.

    En este proceso, asegura Werner, estarán involucrados vehículos, escuelas, hospitales, entidades públicas, electrodomésticos, etc. “Es una aceleración total”.

    Pero la tecnología no será el elemento de mayor peso. El vocero de Innovus se refirió al peso que tienen las personas. “Las ciudades de la región han servido para una construcción social y de trabajo que no es fácil cambiar”.

    Para ejemplificar habló sobre la generación de empleos en el sector público y la dificultad que sería reemplazarlas con los avances tecnológicos. “Hay temas que se deben entender y medir. El sector público genera mucho trabajo y no se puede desechar a esas personas así nomás”.

    Para Werner, la clave de toda ciudad siempre serán sus habitantes. “No debemos robotizarnos, no podemos perder la sensibilidad por la transformación digital”. En su intervención citó una frase de Shakespeare. “¿Qué es la ciudad si no su propia gente?”

    Pablo Osorio, investigador de temas urbanos, coincide con Werner. Él asegura que muchas veces se relaciona el término de ciudad inteligente con la utilización de software informático para la gestión de la ciudad. “Es fácil pensar que mientras más aplicaciones móviles tienen las personas en sus teléfonos inteligentes, o si tenemos una central de gestión de semáforos nos estamos acercando a una ciudad inteligente. Pero es una ilusión”.

    Osorio considera que la gestión pública de las ciudades no siempre se beneficiada de estos artilugios. “Prefiero pensar en una ciudad inteligente como aquella en la que se ha desarrollado una especie de software social, una inteligencia ciudadana basada en el conocimiento del entorno que permite actuar conforme a ella”.

    Como ejemplo dice que en una ciudad inteligente de verdad sus habitantes saben de dónde vienen el agua y los alimentos que consumen, también saben adónde van los desechos que producen. “Todo esto les permite actuar en consecuencia: ahorro de agua, consumo de alimentos sanos y locales, menos desperdicio”.

    El papel del ciudadano, según este investigador, es involucrarse con la vida de la ciudad, conocer aquellas cosas que le hacen bien y aquellas que le hacen mal.

    Los retos, entonces, son grandes. Más aún cuando las estadísticas muestran el peso poblacional de las ciudades. Un estudio de la ONU señala que más de la mitad de la población del planeta (54,6% o 3 600 millones de personas) vive en ciudades. Y para 2050 el 70% de la población mundial (más de

    6 000 millones) vivirá en ciudades: 64,1% de las personas en países en desarrollo y 85,9% de los habitantes en países desarrollados.

    Las personas, el centro del desarrollo

    Una ciudad inteligente es aquella que coloca a las personas en el centro del desarrollo. Pero también incorpora tecnologías de la información y comunicación en la gestión urbana y usa estos elementos como herramientas para estimular la formación de un gobierno eficiente que incluya procesos de planificación colaborativa y participación de los ciudadanos.

    Esa es la definición que brinda el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en un estudio titulado La ruta hacia las Smart Cities. “Al promover un desarrollo integrado y sostenible, las ciudades inteligentes se tornan más innovadoras, competitivas, atractivas y resilientes, mejorando así vidas”, añade la publicación del BID.

    El camino es complicado. Según el estudio del organismo multilateral, un proyecto integral de ciudad inteligente debe tomar en cuenta los aspectos humanos, sociales y medioambientales de los centros urbanos con la finalidad de mejorar la vida de las personas. Por lo tanto, debe incorporar aspectos relativos a la gobernanza, a la infraestructura y al capital humano y social.

    Para Horacio Werner, partner senior de Innovus Consulting, uno de los puntos claves es aprovechar lo que el llama la “propiedad intelectual local”. Esto quiere decir que en lugar de importar o comprar tecnología hay que desarrollar talento propio, un recurso que tiene toda sociedad.

    Respecto al uso de datos que se recolectan gracias a la tecnología, Werner asegura que el desarrollo de una urbe dependerá de la analítica de esos datos. “Hoy en día solo el 10% de datos recopilados son utilizados para generar procesos en las ciudades. La clave es tener datos abiertos”.

    Este experto añade más ‘ingredientes’ y habla de factores cruciales como liderazgo, expertos en datos, en procesos y en riesgos. “Hay que alinear a la población”, asegura Werner.

    Buenos Aires y Santiago de Chile encabezan la lista de las ciudades más inteligentes de América Latina, según un estudio realizado por la Escuela de Negocios de la Universidad de Navarra (España), seguidas por Ciudad de México, Medellín (Colombia) y Montevideo. El índice abarca el estudio de 180 ciudades.

    La capital argentina se ubicó en la casilla 83 en la tabla general. Otras capitales latinoamericanas de este ránking fueron Bogotá(113), Lima (116), Quito (130) Brasilia (143), Ciudad de Guatemala (149), entre otras. El ránking mundial está encabezado por Nueva York, Londres y París.

    Gabriel Lanfranchi, Director del Programa de Ciudades del Cippec, en Buenos Aires, comenta, en una entrevista para Infobae, que una ciudad inteligente debe incluir a los distintos sectores de la sociedad que participan ella: el sector público, el privado, la academia y las organizaciones de la sociedad civil. “Todos construimos la ciudad”.

    Este experto en temas de desarrollo urbano añade que las ciudades se han convertido en el escenario de la ocurrencia de la vida, del hábitat, de todo el mundo. Más del 50% de la población mundial de hoy es urbana y en Argentina está en el orden del 90 o 92%. “Por lo tanto la cultura se genera en las ciudades, las ideas, la economía, gran parte de las cuestiones de la vida sucede en las ciudades”.

    ¿A dónde nos va a llevar la tecnología? Es difícil saberlo, dice Lanfranchi. “Lo que sí sabemos es que va a tener que ser una relación muy fuerte con el tema ambiental y climático”. El experto se imagina que una ciudad donde vamos a usar mucho menos el auto, con autos autónomos probablemente o bicicletas autónomas como están diseñando en el MIT.

    180 ciudades

    Los datos del  índice de ciudades inteligentes provienen de fuentes como la Unesco, el Banco Mundial o Euromonitor.

    El índice abarca el  estudio de 180 ciudades y se elabora con base en indicadores como economía, habitantes, medioambiente, cohesión social, planificación urbana, gobernanza y participación urbana, gestión pública, tecnología, movilidad, transporte y proyección internacional.

    Para Gabriel Lanfranchi,  Director del Programa de Ciudades del Cippec será necesario encontrar una nueva forma de movilidad que consuma mucha menos energía. El experto piensa que las personas tendrán que caminar más y eso nos permitirá “volver a encontrarnos”

    Una pareja camina por el puente de Brooklyn. Nueva York encabezó el año pasado un ranking global de ciudades inteligentes. Foto: Don Emert / AFP
    Una pareja camina por el puente de Brooklyn. Nueva York encabezó el año pasado un ranking global de ciudades inteligentes. Foto: Don Emert / AFP