El matcha, un polvo de un verde intenso, deleita los paladares en Japón y en el extranjero, donde incluso se usa para elaborar helados, dulces o bombones, un nuevo filón con el que los japoneses intentan frenar el declive del consumo de té en su propio país.
En una tienda de venta de té de Shizuoka, la principal provincia productora del país, los clientes se abalanzan sobre un recipiente con siete helados de matcha, cuyo color verde va cambiando de tonalidad en función del sabor. Parecen más interesados en ellos que en el té, su materia prima.
“El número de consumidores japoneses de té disminuye”, explica Shigehiko Suzuki, jefe de la compañía Marushichi Seicha, que dispone de varios comercios en las islas.
Este empresario de 55 años comenzó a trabajar con té matcha hace 20 años, y hace nueve se lanzó con los helados del mismo. “La demanda de matcha se encuentra en fuerte expansión en zonas de Asia y en EE.UU., en cuanto a helados, postres y café”.
El año pasado, Japón exportó más de 5 000 toneladas de té verde (de todo tipo de variedades), 10 veces más que hace dos décadas. Con el paso de los años, el interés por el matcha fue en aumento.
El matcha se vende dos veces más caro que el sencha, el té verde en hojas más producido en Japón. Históricamente, Japón descubrió el té al comienzo del siglo IX. Procedía de China y se usaba por sus propiedades medicinales. Hubo que esperar al siglo XVI para el desarrollo del matcha en Kioto, indisociable de la ceremonia del té.
Actualmente, esta variedad se vende en tiendas, al estilo de las “coffee shops”. Estas tratan de modernizar la imagen que se tiene del té, sobre todo entre los jóvenes, explica Mikito Tanimoto, que abrió hace dos años.
La “barista” de salón trabaja entre paredes de un blanco inmaculado y taburetes altos. Aquí los clientes se toman su tiempo y saborean distintas variedades, entre las 43 propuestas. Se da ambiente al sitio.
Helados, postres y otros productos se fabrican con té matcha en Japón. Despierta curiosidad en los turistas. Foto: AFP
Sebastian Mármol fundó MobilVendor en 2012. Esta empresa ofrece software y servicios. Luego de siete años, la compañía se afianzó en el mercado nacional y hoy se expande a otros países.
La empresa nació luego de un traspié de Mármol. “En 2012 tenía un proyecto dedicado a la robótica que no funcionó, así que busqué otros sectores en los que pudiera emprender. Había estudiado la carrera de ingeniería comercial con especialidad en finanzas en la Universidad Católica del Ecuador. Este conocimiento, sumado a mi interés por la tecnología, derivó en la creación de la empresa que tengo hoy ”.
Más adelante, se integró al proyecto Alexey Ignatyev, de origen ruso, quien se mantiene como el principal socio de Mármol.
Uno de sus primeros desarrollos fue para aplicar en el sistema Android. “Cuando empecé con este proyecto, vi el potencial que tenía Android y no me equivoqué, a pesar de los comentarios de otras personas ”, relata.
Su producto estrella se llama igual que la empresa, MobilVendor, un sistema de punto de venta (POS) de tipo software como servicio (‘software as a service’). Está dirigido a medir la fuerza de ventas de tiendas, supermercados, distribuidoras y demás compañías dedicadas al sector del consumo masivo.
Funciona en la web y en plataformas móviles. Es modular, es decir que se agregan servicios o herramientas complementarias, según las necesidades del cliente, el tamaño del negocio o el número de empleados.
El sistema permite a las empresas optimizar sus recursos en temas de logística y rastreo, merchandising, contabilidad, ventas y atención al cliente.
MobilVendor, como negocio, se enfrentó a un gran desafío: la desconfianza y el desconocimiento de la gente sobre la tecnología. Por ello, comenta Mármol, al principio fue necesario ofrecer sus servicios puerta a puerta, explicar su funcionamiento y ventajas. Hoy, su cartera de clientes supera las 500 empresas. Esto gracias a que, según dice Mármol, está bien posicionado en el mercado.
Para Fabian Puente, Gerente Comercial de Confiteca, la experiencia de trabajo con MobilVendor es buena . “Su tecnología es muy amigable con el usuario y se adapta fácilmente a las necesidades del cliente”, comenta.
Mármol cree que el secreto de su éxito es trabajar para los consumidores. “Estoy muy inmerso en nuestros desarrollos e intento posicionarme como un cliente más. Gracias a eso, logramos que nuestro software no sea complicado de utilizar y que las personas puedan trabajar inmediatamente luego de la implementación.”
Sin embargo, la empresa no deja de lado el acompañamiento, pues se encargan de brindar inducciones, capacitación y toda la ayuda que los negocios requieran.
Manuel Godoy, Coordinador de la Unidad de Comercio Digital de COILE, comercializadora de condimentos ILE, comenta que usar MobilVendor les permite optimizar el tiempo. “La ventaja de esta herramienta es que se trabaja en línea, de manera que se sincronizan automáticamente los pedidos y es más fácil realizar la facturación. Además, es sencillo de utilizar”, detalla el directivo.
La empresa lanzó, recientemente, otro servicio llamado XVODigital, dirigido a la implementación de chatbots y, pese a su corta vida, es una gran fuente de ingresos para la firma. “Con esta nueva plataforma estamos facturando USD 3 000 mensuales”. La facturación de MobilVendor ha crecido. En 2017 fue de USD 1,2 millones; la proyección de ingresos para 2019 es de 1,7 millones.
A futuro, la compañía tiene un objetivo claro: establecerse como una marca reconocida internacionalmente. Actualmente, tiene presencia en otros países de Latinoamérica como Costa Rica y México. En este último, lleva presente cinco años, pero recientemente han ganado impulso gracias a un acuerdo logrado con la multinacional Danone.
En Ecuador, la plantilla de la empresa se compone de 26 personas. En México tienen tres empleados.
Sebastian Mármol fundó MobilVendor en 2012. Foto: Patricio Terán / LÍDERES
La disciplina financiera es básica al utilizar una tarjeta de crédito. Conocer los cupos y usarlos con inteligencia es una de las condiciones, al igual que cumplir con los pagos y los plazos.
Estas exigencias, que en la práctica pueden resultar complicadas para algunos, se multiplican cuando la persona decide contar con dos o más tarjetas de crédito. En ese caso la disciplina debe ser mayor.
Los expertos señalan que el número ideal dependerá de la persona, de sus comportamientos de gasto, de las metas financieras que tenga, de manera en la que maneja dinero, entre otros factores.
Pablo Pérez, catedrático de la Universidad San Francisco deQuito y consultor en temas financieros, indica que el perfil del usuario de la tarjeta es fundamental. “No es lo mismo una persona que tiene ingresos fijos que una que no los tiene”.
Como ejemplo señala que una persona que trabaja en relación de dependencia, un profesional independiente o un consultor que ofrece servicios a empresas son ejemplos de quienes pueden contar con dos más tarjetas. “Un consultor que viaja por el país o el extranjero contratado por una empresa debe cubrir sus gastos de hotel, transporte, comida, etc. Para esos y otros gastos vinculados con su trabajo debe contar con una tarjeta diferente de la que usa para asuntos personales”.
Si la persona viaja con frecuencia fuera del país, por trabajo o descanso también se recomienda tener varias tarjetas. Para Gary Flor, presidente de Ceforcom, es conveniente tener dos o más tarjetas, ya que por un lado no lleva dinero en efectivo y, por otro, asegura los pagos, en vista de que no todas las tarjetas son aceptadas en todos los negocios y países.
“También se pueden presentar casos en los cuales por fallas del sistema informático, algunas tarjetas no son aceptadas en los establecimientos”.
Flor añade que es adecuado tener dos o más tarjetas de crédito para aprovechar descuentos, ofertas por temporadas, por liquidaciones o por cierre de negocios. Eso sí, advierte, no se debe destinar más allá del 40% de los ingresos para el pago de deudas. “Entonces hay que chequear siempre la capacidad de pago, es decir, la diferencia entre nuestros ingresos y egresos”.
Otro consejo es tener una tarjeta extra, pero ‘bajo llave’ y usarla solo en emergencias como una enfermedad o un accidente. Allí, dicen los expertos, la tarjeta es un respaldo y hay que tener mucha voluntad para tenerla bien guardada.
¿Qué hacer cuando una entidad financiera ofrece una segunda tarjeta? Pablo Pérez explica que esta acción se trata, en pocas palabras, de un crédito de consumo y de corto plazo, con un cupo o monto para consumir. Allí hay un riesgo porque se trata de una tarjeta de consumo y no de trabajo como en el ejemplo del consultor.
Este experto también recomienda estar atento a los costos que no se explican con claridad. “Muchas veces se ofrece tarjetas con un cupo preaprobado y sin costos. Pero cuando llega el estado de cuenta sí hay unos costos por servicios como auxilio mecánico, acumulación de millas, entre otros”.
Los expertos añaden que una tarjeta de crédito es un instrumento práctico que puede mejorar nuestras finanzas personales, siempre y cuando la sepamos utilizar. Y más allá del número de tarjetas, la recomendación es siempre tener clara la capacidad de pago, para evitar problemas financieros.
El número ideal dependerá de la persona, de sus comportamientos de gasto, de las metas financieras que tenga, de la manera en que maneja el dinero, etc.
La percha es variada. Lomitos en agua, en aceite girasol, de soya y de oliva. La oferta se completa con otras variedades gourmet. En latas hay presentaciones desde 80 hasta 950 gramos, en ‘pouch’ y en envases de vidrio.
La industria atunera ecuatoriana tiene una capacidad de producción de 500 000 toneladas al año. El mayor porcentaje se destina a las exportaciones y se calcula que entre un 10% y 20% se queda para el consumo nacional.
El mercado local lo lideran Negocios Industriales Real S.A. (Nirsa), con su marca Atún Real, seguida de Vancamp’s de la Industria Inepaca y Conservas Isabel.
Pero hay otros competidores en el mercado con productos premium, gourmet y ‘food service’, como Yeli de Marbelize S.A., que tiene su planta en el Parque del atún, en Manta. Produce ‘Yeli el atún gourmet’, una marca con valor agregado. Además, es pionera en ofrecer el producto en empaques novedosos como frascos de vidrio y ‘pouch’ de aluminio.
Rafael Trujillo, director ejecutivo de la Cámara Nacional de Pesquería, señala que cada año aparecen más productos. “Pero que existan más marcas no significa que haya crecido el consumo, sino que hay más competencia”.
En Ecuador se calcula que el consumo anual de atún está entre 7 y 8 kilos per cápita. Según la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el consumo de pescado crecerá 33% en América Latina y el Caribe para el 2030. La región es una potencia acuicultora, pero tiene bajos consumos, solo 9,8 kilos por persona al año.
Las conservas de atún a escala global han aumentado. En el 2017 la demanda internacional fue de USD 7 246 millones y en volumen 1,5 millones de toneladas, según un estudio de Group Cassinelli.
Andrés Aguirre, gerente de Ventas Internacionales de Nirsa, menciona que la marca en Ecuador es una prioridad, junto al mercado externo. El 65% de la producción se destina a las exportaciones, principalmente va a la Unión Europea. En el 2018 su producción alcanzó las 60 986 toneladas. Tiene una capacidad instalada para procesar 72 000 toneladas de atún y también sardinas, caballa y macarela en la planta de Posorja (Guayaquil), donde trabajan más de 5 000 personas.
Nirsa, que el año pasado cumplió 60 años, tiene un amplio portafolio de productos con la marca Real, pero destaca en conservas en atún. En presentaciones especiales tiene atún en salsa sabor a mayonesa, tipos mexicana, rusa y California; encebollado y paté gourmet y picante.
Melissa Aguirre, gerente de Congelados de Nirsa, señala que el consumidor busca practicidad, calidad y productos saludables. Destaca el uso del ‘abre fácil’ en las latas de atún y el ‘pouch’.
Hay un producto que se considera ‘premium’ y que resalta en los últimos tiempos en las perchas por el buen sabor. Es la Ventresca, que se obtiene del despiece del atún, y es la parte conocida como la panza del pescado. La presentación es en pequeñas láminas en aceite de oliva. En la marca Real se encuentra en latas redondas, mientras Conservas Isabel y Yeli ofertan en latas rectangulares.
En tanto, en las capturas de la flota la variedad barrilete es la mayor porcentaje, con 66%. Seguido de aleta amarilla, con 20% y patudo, con 13,5%. En el 2018 las capturas totales sumaron 271 331 t, que equivalen solo al 50% de la materia prima que requiere la industria y el resto se importa.
Atún Real lidera el mercado local, donde también destacan Vancamp’s, Isabel y Yeli. El consumo anual per cápita en Ecuador es entre 7 y 8 kilos. La Ventresca destaca. Foto: Cortesía NIRSA / LÍDERES
Juan Pablo Grijalva es el gerente general de la Asociación de Ganaderos de la Sierra y Oriente (Agso) detalla las dificultades por las que atraviesa el sector ganadero. También habla sobre el consumo de lácteos en el país y la prohibición impuesta al suero de leche.
La semana pasada se prohibió la comercialización de suero de leche en el país. Este tema destapó, de alguna manera, una serie de problemas en el sector ganadero. ¿Qué está pasando?
Lo del suero de leche es la razón por la que se están tomando medidas en el Gobierno. El sector ganadero es extremadamente importante para la economía, tenemos cerca de 280 000 unidades productivas lecheras en el país, de todos los tamaños, en todas las provincias. La leche se concentra más en la Sierra, pero hay producción en la Amazonía y en la Costa. La leche es como un ‘vaso comunicante’ entre el campo y la ciudad, no hay otro producto que conecte tanto al país.
¿Tan importante es el sector lechero? Es sumamente importante. A veces no es tan visible por la gente, en especial en la ciudad. Pero en el campo es vital. Hablamos de que la leche para el campo es como el sueldo. En muchas zonas no hay otras fuentes de ingresos. ¿Por ejemplo? En Tungurahua o Cotopaxi. Allí no existen otras opciones, son zonas muy altas para hacer agricultura, con condiciones climáticas adversas. ¿Se puede decir que el sistema del sector ganadero es frágil? Yo diría que es un sistema robusto en términos de que la gente está allí recibiendo sus ingresos. El problema es que puede recibir ingresos altos y bajos. Y cuando funciona vía intermediarios, muchas veces el ganadero recibe ingresos extremadamente bajos.
¿Qué tan fuerte es la presencia de los intermediarios? Hay muchos, y ellos compran o pueden dejar de comprar durante uno o dos días. Se ha establecido una práctica nada positiva en la que algunas industrias compran unos días y otros no. Eso es tremendo porque las vacas producen todos los días y si no se las ordeña se enferman.
¿Existen demasiados intermediarios? No. Pero son 5,5 millones de litros de leche que se producen al día. 2,5 millones de litros van a las industrias formales y el resto se queda en la informalidad y allí están los intermediarios. Ellos venden a empresas o queserías pequeñas y precarias, sin control.
¿Entonces existe una sobreproducción de leche? Con este escenario y con la vocación para producir leche en el país tenemos algunas hipótesis. Los agricultores, de papa por poner un ejemplo, se dedican a la ganadería para tener un ingreso permanente. Eso ha hecho que la producción suba. El problema es la sobreoferta de leche para el mercado local. Además, el consumo ha bajado por la situación económica, hasta un 10% según algunos estudios. También influyó el semáforo a los alimentos. Por otro lado está la sustitución de leche por bebida láctea. Esa última es un producto de la industria que mezcla un 60% de leche y un 40% de suero de leche. Esa bebida, se dice, ha sustituido el consumo de leche. El suero de leche es un subproducto que sale de la elaboración del queso y puede confundir a la gente que piensa que es leche. Esto al final afecta al ganadero.
¿Cómo se dio la aparición de esta bebida láctea? Hay zonas muy alejadas y producir esta bebida láctea es más barato que producir leche. Esta bebida láctea puede llegar a sitios alejados porque tiene más margen para transporte, distribución, etc. Eso dicen las industrias que elaboran y ofertan este producto.
¿Qué efectos sintió el productor con la aparición de esta bebida? El problema es que el ganadero no puede vender toda su leche y el precio está bajando, a pesar de que existen acuerdos ministeriales que se deben acatar. Pero el informal no acata. El ganadero pierde…
El ganadero está complicado. Pero se están buscando soluciones como elevar el consumo local con campañas o exportar. El reto es que por tener el dólar se compite con países que devalúan sus monedas.
Ese problema aqueja a varios sectores.
No podemos competir directamente con otros países. Por eso hemos planteado un fondo lechero pagado por los productores y apoyo del Gobierno, para sostener la leche, base de la economía rural. Un grupo dice que se elimine el suero de leche y por eso la medida anunciada la semana pasada. Pero como estas son tesis, deben ser probadas y comprobadas. La medida no es una prohibición, sino que exista autoconsumo de suero.
¿Qué significa eso? Que una empresa que produce quesos y tiene suero de muy buena calidad, con certificaciones BPM, puede elaborar bebida láctea solo con el suero que procesa. No puede salir a comprar suero en el mercado. La medida prohíbe la movilización de este suero de leche. En este momento no debería haber suero circulando por el país.
¿Qué pasa si estas iniciativas y medidas no funcionan? No es una sola medida, son varias. Hay que seguir con campañas de consumo de lácteos o productos hechos con lácteos.
¿Y si no sube el consumo? Allí viene la figura de exportación. O se apoya los envíos al extranjero o baja la producción, lo cual sería tremendo. Cuando la producción baja es muy difícil recuperarla.
¿Qué piensa que pasará hasta fines de año? Ya hay una primera medida tomada por las autoridades. La exportación es a la que yo le doy más fuerza, porque tenemos vecinos que necesitan leche. Perú, por ejemplo, importa de Nueva Zelanda, Uruguay, Chile.
¿Ecuador está listo para exportar leche? Ya hemos exportado. Este momento es difícil por los precios pero ya podemos exportar. Para esto podemos apoyarnos los ganaderos. Exportar es una de las mejores soluciones. La calidad es de primer nivel, es leche de campo y se pueden solventar temas sanitarios.
En la actualidad, Juan Pablo Grijalva es el Gerente general de la Asociación de Ganaderos de la Sierra y Oriente (Agso), gremio al que se conectó cuando él tenía 27 años de edad. También está al frente de la Sociedad Industrial Ganadera El Ordeño, una organización del sector de lácteos. Foto: Julio Estrella / Líderes
Se espera que el gasto en publicidad digital supere a la de los medios tradicionales en Estados Unidos por primera vez en 2019, un hito importante para la industria, dijo el miércoles una firma investigadora de mercado.
La firma eMarketer dijo que el gasto en publicidad digital en Estados Unidos crecerá 19% a 129.340 millones este año, lo que representa un 54% del total de dólares invertidos en publicidad.
El informe detalla que los dispositivos móviles representarán la mayor parte del gasto en publicidad digital, con más de dos tercios del total, unos USD 87 060 millones este año.
“El cambio constante de la atención de los consumidores hacia las plataformas digitales ha llegado a un punto de inflexión con los anunciantes, forzándolos a virar hacia lo digital para aumentar las ganancias en alcance y beneficios, que están desapareciendo en la publicidad en medios tradicionales”, dijo la directora de pronósticos de eMarketer, Monica Peart.
Según el rastreador de mercado, el gasto en publicidad televisiva disminuirá 2,2% a USD 70 830 millones este año, con la ausencia de elecciones nacionales y de grandes eventos como los Juegos Olímpicos o la Copa del Mundo.
Aseguró que es probable que las elecciones presidenciales del próximo año en Estados Unidos conduzcan a un crecimiento en el gasto en publicidad en televisión, pero que la tendencia bajista continuará después de eso.
La publicidad impresa está recibiendo el mayor golpe, y se pronostica que el gasto en ésta disminuya 17,8% este año, dijo e Marketer.
El informe dijo también que el “ duopolio ” de Google y Facebook verá su primer descenso en la participación del mercado publicitario, al 59,3%, desde el 60% del año pasado.
La caída provendrá principalmente de Google, que se espera que pierda un punto porcentual de participación de mercado, a 37,2%, mientras que Facebook tendrá un alza marginal a 22,1%, dijo el informe.
El informe detalla que los dispositivos móviles representarán la mayor parte del gasto en publicidad digital. Foto: Archivo / LIDERES
La cartera bruta de las cooperativas del Ecuador pasó de USD 6 490 millones en octubre del 2017 a 8 471 millones en el mismo mes de este año. Al respecto, el 55% del crédito se destinó para consumo y el 45% para producción, rubro en donde están el crédito a la microempresa, a la vivienda y al comercio.
La información se desprende del informe que presentó la Asociación de Bancos del Ecuador (Asobanca), este lunes 26 de noviembre del 2018.
El saldo de las captaciones o depósitos cerró a octubre de este año en USD 8 578 millones, lo que significó un crecimiento anual de 17%. Según las estadísticas los depósitos de las cooperativas fueron por 7 329 millones en octubre del año pasado.
El documento de Asobanca trae más datos. El total de activos, por ejemplo, alcanzó USD 11 182 millones, contrastando a lo obtenido en octubre de 2017 (USD 9 406 millones). En términos anuales esta cuenta creció en 18,9%.
También se informa que la liquidez y la solvencia bajaron. El primer indicador fue de 19,7% para octubre de 2018; decreció en 4,9% con relación al mismo mes del año anterior. La solvencia bajó del 18,3% al 17,2%.
La utilidad neta pasó de USD 86 millones a 137 millones. Además la morosidad bajó del 5,38% al 3,74% entre octubre del 2017 y de este año.
La moneda estadounidense también perdió terreno frente al franco suizo. Foto: Mario Faustos/ EL COMERCIO.
“La energía mueve al mundo y todos la necesitamos para alcanzar nuestros sueños día a día”. La frase la repiten Juan David Gómez y Demetrio Santander los fundadores de Waykana, una marca que promueve el consumo de la planta de guayusa en innovadoras presentaciones y con varios beneficios.
En la Amazoníaecuatoriana se encuentra la hoja de guayusa conocida como la planta con más cafeína del mundo. Es un energizante natural que puede despertar a cualquier persona sin la necesidad de consumir café.
Los fundadores de Waykana cuentan que su empresa trabaja con comunidades kichwas en las cuales hay la oportunidad de innovar constantemente. La empresa exporta más del 90% de sus productos; posee una oficina en Houston, Texas y quiere abrir una oficina en Europa para alcanzar ese mercado.
El objetivo es posicionar la guayusa en Ecuador como el mate en Uruguay para que los ecuatorianos se sientan orgullosos de sus propios productos.
Waykana tiene varios proyectos con las comunidades que les provee de la materia prima. Uno de ellos se denomina “bancarización”. La idea es trabajar con los 150 agricultores que están en la selva y brindarles acceso a la banca, ya que con esto pueden tener acceso al crédito y a oportunidades de desarrollo.
De esta manera, pueden recibir su sueldo a través de una cuenta bancaria generando una relación directa entre estos dos sectores al incrementar el impacto social mejorando la calidad de vida de sus agricultores.
Los emprendedores sociales también buscan rescatar la cultura quichua mediante audiovisuales que reflejan cómo es el estilo de vida de estas comunidades y con un programa de voluntariado nacional e internacional para que las personas puedan ir a la selva y conocer más de esta región.
La idea no se queda ahí. Juan David y Demetrio no descansan y siguen investigando sobre su producto estrella y buscan más nichos de mercado. Uno de estos es crear píldoras naturales de guayusa para dar más energía a las personas.
El marketing es uno de los puntos que más se está reforzando en la actualidad, pero lo que más mueve e impulsa a los fundadores es preocuparse por el impacto social y ambiental. Por ejemplo, a nivel de agricultura se promueve la utilización de maquinaria que cuide el medioambiente y la hoja de la guayusa, así como el no uso de químicos ni fertilizantes.
En la parte social se está implementando la agroforestería para que los productores tengan sus sembríos propios.
Una historia sobre la tradición de las comunidades indígenas kichwas de la Amazonía dice que estas comunidades diariamente se despiertan muy temprano, antes del amanecer, y reúnen a todos en comunidad. Comparten un pilche o vasija con agua de guayusa, discuten las actividades que deben realizar y los sueños que han tenido la noche anterior.
Según los emprendedores, la bebida tiene beneficios como la prevención de la oxidación de las moléculas del cuerpo hasta ayudar a mujeres con problemas de infertilidad. También tiene agentes antidiabéticos y provee energía equilibrada en el cuerpo.
Juan David Gómez y Demetrio Santander son los fundadores de Waykana. Ellos trabajan con comunidades de la Amazonía. Foto: Impaqto
En el país no hay mayor distinción en los préstamos que dan las cooperativas, si se toma en cuenta el segmento en el que están. Sí podrían diferenciarse por montos, es decir, por su estructura financiera las entidades más grandes pudieran ofrecer créditos más altos, aunque no es la regla.
Así lo indica Édgar Peñaherrera, gerente general de la Red de Integración Ecuatoriana de Cooperativas de Ahorro y Crédito (Icored), la realidad de la entrega de préstamos por parte de cooperativas en Ecuador.
En el país, de acuerdo con datos de la Unión de Cooperativas de Ahorro y Crédito del Sur, estas entidades cubren a 200 cantones en todo el país. En ciertos sectores se trata del único eje de intermediación financiera; de hecho, la tasa de ruralidad supera el 75%.
La cartera que manejó el sector cooperativo, hasta febrero del 2018, fue de USD 8 680 millones. Las operaciones de crédito superan las 1,4 millones.
En 2017, la entrega de créditos creció en 21,72% en montos, en relación con el año anterior. “El sector cooperativo, a pesar de la situación económica del país, siempre ha estado consciente de la necesidad de recursos que tienen nuestros socios. En esa dinámica no hemos dejado de colocar préstamos”, indica Juan Pablo Guerra, presidente de Ucacsur.
El crédito de consumo representa el 51,4% de toda la cartera de crédito de las cooperativas; los microcréditos tienen el 37%; el inmobiliario es el 8,9%; y el comercial y educativo está por debajo del 2,7% de la cartera.
En la Cooperativa Atuntaqui, por ejemplo, se concentran en ofrecer microcréditos de consumo y de vivienda. Su mercado se concentra en Imbabura, aunque tiene tres oficinas en Pichincha.
En el caso de los microcréditos, entrega hasta USD 40 000 con un plazo de hasta 60 meses; los de consumo en ese mismo monto y plazo, mientras que los hipotecarios incluyen desembolsos de que llegan a USD 100 000 con un plazo de hasta 10 años.
Ciertas cooperativas, dentro del área de microcrédito, tienen subproductos que pueden estar destinados a la compra de autos, maquinaria, entre otros. Eso lo maneja cada institución.
La Cooperativa 29 de Octubre tiene tres tipos de microcréditos, cuyos montos mínimos y máximos difieren. En el destinado para minoristas, por ejemplo, lo menos que se puede solicitar son USD 100 y el máximo 1 000, con un plazo de hasta 48 meses.
También ofrece créditos de consumo, comercial y de vivienda.
Los primeros tienen montos máximos de desembolso de hasta el 60% y el 80% del sueldo, según el caso; los segundos están destinados a pequeñas y medianas empresas, para capital de trabajo, financiamiento de pasivos y activos fijos; mientras que los hipotecarios son para adquisición, construcción y reparación de vivienda, así como para compra de terreno para construir una casa, con un plazo máximo de hasta 15 años.
Según Icored, los montos crediticios en las cooperativas son dispersos y no se puede establecer un promedio porque existen entidades en zonas rurales en las que los socios no requieren de montos altos, mientras que en las grandes ciudades la tendencia es siempre a solicitar volúmenes mayores. “En las socias de Icored el promedio en microcrédito bordea USD 5 000”, dice Peñaherrera.
Las cooperativas, explica, hacen esfuerzos por contribuir a incrementar la inclusión financiera, “por ello las personas de escasos recursos económicos han encontrado en ellas una posibilidad de acceder a los servicios financieros, en ahorro y crédito; buscando generar un emprendimiento para garantizar su sustento”.
Microempresario es sinónimo de esfuerzo y trabajo
Agricultores, comerciantes, emprendedores, amas de casa y otros encarnan al microempresario ecuatoriano.
A este actor de la economía ecuatoriana es fácil encontrarlo en mercados, así como en centros comerciales o en tiendas de barrio. También están en el campo o en pequeños locales establecidos en garajes de casas y desde hace pocos años en las redes sociales.
La agricultura, la ganadería y la pesca son las principales actividades en las que están los microempresarios. Los datos de la Red de Instituciones Financieras de Desarrollo señalan que en esas tareas se cuentan alrededor de 1,6 millones de personas.
Luego está el comercio con unos 893 000 microempresarios y más atrás destaca el sector de la construcción con 395 000, según los datos de la RFD que tienen corte en diciembre del 2017.
En total, el país tenía hasta el mes señalado 4,1 millones de microempresarios, lo que representa el 51% de la población económicamente activa. Otros datos de la RFD señalan que 6 de cada 10 microempresarios tienen menos de 45 años y que el 60% son hombres y el 40%, mujeres.
Un ejemplo es Lourdes Zapata. Esta mujer renunció a su trabajo y hace dos años montó su emprendimiento: Polifoamflex, en donde elabora almohadas según los requerimientos de los clientes.
En su taller ubicado en el sector de La Argelia, en el sur de Quito, Zapata realiza las mezclas de materias primas, que son importadas desde Estados Unidos; las coloca sobre moldes especiales, fabricados especialmente para estos productos. En el proceso de fabricación de las almohadas colaboran ocho personas. El área de trabajo tiene 50 metros cuadrados.
Zapata es una microempresaria con un trabajo que puede calificarse como estable. Pero no todos los microempresarios generan más de un empleo.
Wilson Araque, director del Observatorio, dice que entre los microempresarios hay dos grupos: el primero está integrado por personas que de manera individual desarrollaron un pequeño negocio. El segundo grupo es el de pequeños comerciantes o productores que deciden asociarse o crear cooperativas para mejorar sus posibilidades de éxito.
Araque advierte que en el primer grupo muchas veces están microempresas que incorporan una o dos personas, que por lo general son familiares y no siempre son remunerados. “Estos negocios ofrecen productos baratos porque dentro del costo no incorporan la mano de obra”.
Según Araque, el no valorar a esos factores tiene un efecto: los precios de sus productos son muy bajos. “La ganancia es mínima, se convierten en negocios de subsistencia y no crecen”.
En el grupo de los que deciden asociarse, las posibilidades de crecer son mayores, aseguran los expertos. El Consorcio de Lácteos Tungurahua (Conlac-T) está integrado por cinco asociaciones localizadas en Pilahuín, Quero, Baños y Pelileo. Las queseras procesan 2 500 litros diarios para producir 1 500 quesos que es el valor agregado. Fanny Masabanda, gerente del Consorcio, explica que al menos 25 000 litros se venden a grandes industrias.
El financiamiento también incide. Adriana Amaya, profesora de emprendimiento e innovación de Espae-Espol, señala que en el 2016, un 45% de los encuestados por el estudio Global Entrepreneurship Monitor acudieron al sistema bancario.
Por lo contrario, el uso de inversionistas informales se incrementó en el 2016 al 33% subiendo tres puntos porcentajes con relación al 2015. “Los recursos propios representan la principal fuente de financiamiento: el 99%”.
La billetera móvil es el proyecto bandera este año
La billetera móvil será el nuevo servicio tecnológico, que ofrecerán las cooperativas de ahorro y crédito en el país. Este aplicativo será lanzado hasta mediados del 2018 y está a cargo de la Red Transaccional Cooperativa Conecta.
El proyecto empezó a mediados del año pasado. Hasta la actualidad, 25 instituciones financieras del sector cooperativo han firmado la carta de intención para ser parte de este nuevo servicio.
Según el vicepresidente de la Red Conecta, Ramiro Baldeón, no se trata de un servicio relacionado con el dinero electrónico, sino de un aplicativo en el cual el teléfono móvil estará atado a una cuenta de ahorros o corriente.
Mediante esta alternativa el usuario podrá efectuar transacciones y estará interconectado con la red Conecta (cooperativas de ahorro y crédito) y la red bancaria.
Baldeón dice que desde el ámbito técnico estarán listos desde el próximo mes, pero es necesario esperar por los temas normativos. Por ello, considera que funcionarán antes de finalizar el primer semestre de este año.
La intención es que 72 cooperativas del país, entre grandes, medianas y pequeñas, sean parte del proyecto. Es decir, las mismas que están conectadas a la red de cajeros automáticos de Conecta.
“Hay que esperar un tiempo para que cada institución se vaya sumando al servicio”. La billetera móvil, explica Baldeón, permitirá realizar débitos, cobranzas, transferencias… Es decir, los locales comerciales no necesitarán contar con un aparato para hacerlo como ocurre con las tarjetas de débito.
Conecta es la administradora de la red de cajeros automáticos y tarjetas de débito de 72 cooperativas de ahorro y crédito ecuatorianas. “Proveemos este servicio que a la vez se interconecta con la red nacional bancaria. Con ello, los socios de estas cooperativas tienen acceso a la totalidad de cajeros automáticos del país”.
Además, ofrecen una red de compras para que los socios de estas entidades accedan a 19 000 puntos de venta en el Ecuador. Baldeón señala que con las cooperativas de ahorro y crédito ofrecen otros servicios tecnológicos como las transferencias de remesas desde el exterior.
Además, cuentan con una ventanilla móvil que es utilizada por los operarios de las cooperativas, que van, por ejemplo, a los mercados para recibir ahorros o recaudar el pago de créditos.
Con esta herramienta tecnológica, dice Baldeón, no hace falta desplazarse a las instituciones financieras, sino que se recauda directamente. A través del teléfono móvil se pueden registrar los depósitos y el funcionario de la cooperativa cuenta con una impresora, que se conecta a través Bluetooth para entregar el recibo.
Baldeón señala que el propósito del sector cooperativo es generar la inclusión financiera para que cada vez más personas puedan transar en estas instituciones y dejen de lado la informalidad. “En estos objetivos, la tecnología es una herramienta importante”.
Él dice que la tecnología tiene una gran dispersión entre las diferentes cooperativas y esa diferencia es evidente entre las instituciones grandes y las muy pequeñas. Baldeón añade que Conecta ofrece tecnología de primer nivel en medios de pago y “estamos bastante equiparados al sistema financiero”.
Otros detalles Los controles internos. Según Ramiro Baldeón, de la Red Conecta, la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria es estricta en el cumplimiento de estándares tecnológicos de seguridad. Por ello, una de las funciones de Conecta es incentivar a las instituciones cumplan con esas exigencias.
Las aplicaciones. Las cooperativas como JEP, CREA, Alfonso Jaramillo, Cámara de Comercio de Ambato, entre otras, cuentan con aplicaciones para consultar saldos, efectuar transacciones…
Foto: Diego Pallero / LÍDERES
La Cooperativa Atuntaqui tiene tres oficinas en Quito. Una imagen de una de ellas, en el sector de El Ejido.
Larry Yumibanda es el presidente del directorio del Colegio de Economistas del Guayas dice que Ecuador pasa una “estandeflación”. Se trata de una situación que no ha vivido la economía moderna nacional. El gremio propone varias medidas para salir de aquello.
Tomando en cuenta el análisis del Fondo Monetario Internacional (FMI), Ecuador está en deflación. ¿Cuál es el impacto en la economía? Primero hay que decir que desde hace 86 años, aproximadamente, Ecuador no ha entrado en este proceso. El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) muestra que el dato de inflación anual, de septiembre del 2017 a febrero de este año, ha sido negativo por seis meses consecutivos. Hay caída de precios por falta de consumo en los hogares y poca inversión empresarial.
¿Cuándo comenzó a gestarse esta situación en Ecuador? A raíz del terremoto y de la crisis económica del 2016 los precios se desaceleraron de manera más rápida y llegamos a esta situación. Hay muchos productos que están influyendo en esta reducción.
Si se observan las tablas del INEC, entre esos productos se encuentran prendas de vestir, alimentos, muebles, restaurantes, centros de recreación y cultura, etc. ¿Por qué estos y no otros? Normalmente, este tipo de productos los consume la clase media. El sector popular, este momento, está precisando compra de artículos de primera necesidad, tomando en cuenta los precios y no la calidad. Descartando los alimentos y las prendas de vestir, para la mayoría de la población los otros segmentos no son necesarios. El consumo de la clase media es el que más ha pesado en la deflación porque ha logrado disminuir gastos y precisar solo cierto tipo de productos.
¿Cuáles? Especialmente los que tienen que ver con alimentación, salud, vivienda, etc. Creo que ha habido una emigración del consumo hacia lo básico, hacia lo estrictamente necesario. Los otros productos, que también son parte del cálculo de la inflación, han tenido una caída en su consumo, por lo que los negocios han bajado los precios para poder comercializarlos.
Una de las tablas del INEC, que muestra la inflación anual en el mes de febrero, determina que el rubro de alimentos, que incluye artículos de consumo básico, ha presionado también para alcanzar cifras negativas. Si estos aún se consumen, ¿por qué se da ese resultado? Eso es normal por cuestiones climáticas, en este caso por el proceso de invierno que estamos viviendo. Es una cuestión cíclica. Pero, en general, la situación es compleja y hay que tomar medidas para poder enfrentarla.
¿Cuáles? Hay que ver cómo se da estimulos a la clase media. Por ahí debe ir la salida. Pero, tome en cuenta, hay productos que todavía tienen una inflación positiva y que son los que se consumen por ser necesarios como educación, alojamiento, agua, gas, entre otros.
Es complejo, tomando en cuenta la situación económica que enfrenta el país. Hay un estancamiento del Producto Interno Bruto (PIB). Eso, sumado al proceso de deflación, como Colegio de Economistas del Guayas hemos denominado ‘estandeflación’. Es un círculo negativo. Hay temas que se mantienen casi sin variación en la economía como, por ejemplo, las condiciones de empleo: seis de cada 10 ecuatorianos o están en el desempleo o tienen un trabajo inadecuado, subempleo. ¿Como gremio han hecho alguna propuesta ante esto? Sí, sobre todo porque se trata de un proceso nuevo. La ‘estandeflación’ es una situación que nunca la ha vivido la economía ecuatoriana moderna. Como Colegio, partimos de un escenario en el que debe hacer equilibrio entre la oferta y la demanda. Creemos que debe estimularse la demanda de hogares y empresas.
¿Qué incluye su plan? Primero debe haber una disminución de impuestos, principalmente del impuesto al valor agregado. Creemos que debería bajar un punto. A su vez, planteamos la eliminación de las devoluciones de este gravamen. Un segundo aspecto está ligado con la inversión pública, en especial la de infraestructura, debe reactivarse. Recordemos que se paralizó en vista de que no tenía fondos el Gobierno. El único sector que en los actuales momentos puede dinamizar la economía es el Estado. Como tercer punto, a través de una resolución de la Junta de Política y Regulación Monetaria y Financiera debe haber una disminución del encaje legal y de las tasas de interés. Si han bajado los precios, debe también bajar el valor del dinero.
La demanda puede aumentar, pero ¿qué pasa si las empresas no producen o los negocios no tienen ‘stock’? Si se estimula la demanda se la debe satisfacer. ¿Cómo? Es importante ayudar al sector empresarial. A través de la disminución del impuesto a la renta, al 20%. Los recursos que se liberalicen se deben usar para investigación, desarrollo y tecnología de las compañías. Una empresa que se vuelve más productiva puede subir salarios y con eso crece el consumo. ¿Solo ese impuesto? En el país debe crecer la inversión extranjera directa (IED) y un factor para lograrlo es la eliminación del impuesto a la salida de divisas. Este, además, distorsiona las importaciones y las encarece.
Anteriormente, usted decía que el Estado debe reactivar la inversión pública pero, al mismo tiempo, reconoció que no tenía fondos. ¿Cómo se logra, entonces, eso? Si se hace una nueva emisión de bonos, por ejemplo, debería haber una particularidad, algo diferente. Depende del equipo económico que busque ampliar los plazos, bajar tasas de interés, etc. Lo ideal sería que mínimo nos entreguen con cuatro o cinco años de gracia. Esto para poder salir de deudas y que los recursos puedan usarse para la construcción de carreteras, escuelas, entre otros.
¿Debería definirse mecanismos para salir de la deflación dentro del plan económico? Esperemos que sí.
¿Cuánto le toma a un país salir de la deflación? Depende de la situación. Se necesita inyectar recursos.
Hoja de vida Formación. Economista de la Universidad de Guayaquil. Magíster en Negocios Internacionales y Comercio Exterior de la misma universidad.
Experiencia. Presidente del directorio del Colegio de Economistas del Guayas. Actualmente, también se desempeña como parlamentario andino y es presidente del Comité Cívico Bicentenario de Guayaquil.
Trayectoria. Ha sido asesor de la Alcaldía de Guayaquil y profesor titular del área de economía internacional y política económica de la facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Guayaquil. Fue concejal y presidente de la comisión de turismo. Fue vocal del Tribunal Electoral del Guayas. Analista en temas económicos.
Larry Yumibanda es el presidente del directorio del Colegio de Economistas del Guayas. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO