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  • Ellos cuidan de la higiene con insumos naturales

    Redacción Quito

    Productos para el cuidado personal y del hogar que no dañan el medioambiente forman parte de la oferta de Intiaromë. Para la compañía, el uso de insumos naturales es un eje fundamental.

    Sebastián Troya, gerente de la firma, comenta que su bagaje en la industria del cuidado personal influyó en la creación de la empresa. “Trabajo en este sector hace más de nueve años. Yo manejaba una de las marcas más importante en el mercado ecuatoriano; la desarrollé y luego la vendí. Gané el conocimiento y la experiencia para continuar con este negocio”.

    El empresario sabe que la gente está cada vez más consciente del tema ambiental y el impacto de los productos que se utilizan a diario. Él mismo estuvo en la búsqueda de artículos de cuidado personal hechos con insumos naturales.

    Comenzó a investigar y logró desarrollar el primer producto de la marca, es decir un desodorante libre de aluminio. En países como EE.UU., estos productos existen y su oferta es amplia.

    Fue así como surgió la compañía, que puso en marcha junto a su esposa Claudia Tobar. Su suegro, el ingeniero químico José Tobar, es quien se encargó de la investigación y desarrollo.
    Un total de USD 100 000 iniciales se usaron para comprar maquinaria, material para embalaje, registro de marca, entre otros. La planta de producción se encuentra en el Complejo Industrial de Itulcachi, en el oriente de Quito, cerca de la Panamericana Norte.

    La idea de esta empresa no solo es fabricar productos de buena calidad, sino que tenga un enfoque hacia el cuidado del cuerpo, mente y medioambiente. La compañía surgió en junio del 2018 y comenzó a comercializar sus productos desde este año.

    La marca comercial es Lulë, que significa flor en idioma albanés. En su línea de desodorantes, la empresa ofrece dos con aroma, que son unisex; otro para público masculino y otro sin fragancia; se pueden usar desde los 8 años, pues tienen una fórmula suave. Esta oferta se comercializa en 94 puntos de venta del país, uno de ellos Collage Cosmetics.

    “Destacamos la forma de hacer sus productos. Su presentación, además, es muy vistosa. La fórmula no tiene componentes controversiales. Responde a nuestro requerimiento, es decir tener una cosmética más consciente. Hay buenos comentarios de los consumidores”, explica Alejandro Jaramillo, gerente de marca de la boutique de cuidado personal.

    El último mes, en sus puntos de venta de Quito y Guayaquil, ha vendido unas 100 unidades.
    Intiaromë cuenta con una línea de hogar: aromatizantes para casa bidifusores y para auto.

    La presentación de estos productos es particular, pues los primeros vienen en un frasco que contiene el producto en dos densidades y, junto a este, unas pajillas para insertar y permitir que se consuma el aroma; los segundos se comercializan en una circunferencia de vidrio y madera que debe estar colgada para que el olor se disemine en el vehículo.

    En esta línea, Intiaromë cuenta con tres fragancias. “Son iniciales, queremos expandirlas a más. En el caso del aromatizante automotriz se puede controlar el olor de la fragancia y es posible usar el producto en clósets o casilleros”. Se venden en 73 puntos.

    Uno de estos últimos es Corporación Favorita. Esta explica que comenzó a vender la marca el 22 de marzo de este año; actualmente, se comercializan las dos líneas de productos. Destaca la idea de Intiaromë de aportar al cuidado del medioambiente y, al mismo tiempo, cuidar al ser humano.

    Troya explica que su oferta ha tenido una amplia acogida en el mercado debido al uso de ingredientes naturales entre los que están verbena, aceite de coco, té verde, ‘shea butter’, romero, esencias francesas, entre otros.

    Troya explica que entre sus proveedores se encuentran empresas ecuatorianas. Además, asegura que sus envases de desodorantes, cilíndricos y de polipropileno, sirven para reciclarse al 100%; un objetivo de la firma es poder dar al público la posibilidad de rellenar.

    Entre las metas que tiene la empresa a futuro está desarrollar más productos y exportar. También tiene un contrato para maquilar jabón líquido; eso sí, siempre bajo los estándares ambientales que maneja la compañía.

    Una empleada de la fábrica se encarga del proceso de etiquetado de los desodorantes de la firma. Estos productos tienen cuatro tipos de aromas. Fotos: Galo Paguay / LÍDERES
    Una empleada de la fábrica se encarga del proceso de etiquetado de los desodorantes de la firma. Estos productos tienen cuatro tipos de aromas. Fotos: Galo Paguay / LÍDERES
  • Bacterias y hongos son la materia prima de trabajo

    Carolina Enriquez

    Redactora (I)

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    La investigación es la base de esta empresa. Ecocycle Biotech se dedica a la fabricación de insumos agrícolas con alto valor agregado a partir de bacterias y hongos.

    Si bien esta compañía, de marca ECB, se constituyó en 2015, el proceso investigativo arrancó años antes. Fabricio Reinoso, Manuel Suquilanda y Francisco Zurita son los socios que la conforman; los tres aportaron con sus conocimientos sobre innovación, agronomía y administración.

    “Fabricio trajo la idea de Medellín luego de regresar de sus estudios de maestría. Se dio cuenta de que el segmento de productos para la agricultura y la alimentación orgánica era uno de los de mayor crecimiento”, explica Zurita. Reinoso y Suquilanda se dedicaron a la investigación y al desarrollo de los productos; el tercer socio se incorporó en el 2016 y fue quien se encargó de dar forma a la iniciativa y volverla comercial.

    La inversión inicial fue de unos USD 400 000, que incluyeron investigaciones, equipos, trámites y permisos de funcionamiento. La compañía se centra en tres elementos: alta eficiencia de los productos, equipos de trabajo que entienden las necesidades de los clientes y aplicación de conocimientos en varias áreas.

    Actualmente, la oferta incluye seis productos certificados y validados para la agricultura orgánica, aunque también pueden usarse en el mercado convencional. Se trata de insumos que obligan a cambiar el chip del agricultor porque ya no son solo tratamientos curativos, sino preventivos.

    Los insumos se encuentran en dos líneas: biocontroladores y biofertilizantes. Los primeros son plaguicidas, insecticidas, fungicidas, entre otros; los segundos brindan los nutrientes que las plantas necesitan para crecer.

    Ninguno de estos productos es químico. La empresa cuenta con alrededor de 41 cepas nacionales, entre bacterias y hongos; estas sirven para prevenir o dar soluciones a cultivos propios del país.

    El primer producto que desarrolló la firma se llama Eficax. Es un insecticida de amplio espectro que han usado agricultores como Ana María Andrade.

    “Trabajamos con la empresa hace unos seis meses. Compro todo tipo de bioinsumos: insecticidas biológicos, Bactoterra para mejorar el suelo, productos para el control de hongos, etc. Esto se aplica en mi finca de palma y maracuyá, ubicada en el sector de La Concordia”, dice Andrade. Ella añade que los productos de ECB han aportado para evitar enfermedades en las plantas y generar un cuidado natural. “Eso permite el equilibrio en los cultivos”.

    Otros clientes son productores de banano, cacao, café, flores, papaya, guanábana, papa, entre otros. En menor cantidad gente que tiene pasto para la ganadería.

    Cuando la firma inició tenía tres clientes y hoy suma 60 (grandes y pequeños, productores para la venta local y exportación). Sus bioinsumos se venden en presentaciones de litro, galón y caneca.

    La comercialización es personalizada. Cuatro vendedores, quienes también son agrónomos, viajan a las zonas agrícolas para colocar la oferta; ellos brindan soluciones directas al agricultor y asesoran en cualquier duda que tuvieran.

    Otro de los clientes de Ecocycle Biotech es el Ingenio Azucarero del Norte. “Trabajamos con ellos hace dos años por la presencia de plagas (dos tipos de insectos). Son insumos amigables con el medioambiente. Ahora como estamos con el problema de que hay menos abejas es necesario usar menos químicos. Hemos tenido buenos resultados”, explica Silvia Anangonó, administradora de hacienda del Ingenio.

    Para desarrollar nuevas soluciones, Ecocycle Biotech hace investigación permanente, de corto y largo plazo. En el primer caso, por ejemplo, analizaron la compatibilidad de sus productos con el cobre que se usa en otros de venta general y en el segundo revisan un microrganismo que permitiría mejorar las condiciones de humedad de los cultivos.

    Ecocycle Biotech también hace investigaciones de muestras que mandan clientes puntuales.

    El objetivo de la empresa es emigrar como modelo de negocio. La idea es que en el laboratorio de otro país puedan producir, con sus cepas propias, en base a la metodología ecuatoriana.

    Una imagen de los laboratorios de la empresa, que se encuentran en el sector del antiguo aeropuerto, en el norte de Quito.
    Una imagen de los laboratorios de la empresa, que se encuentran en el sector del antiguo aeropuerto, en el norte de Quito. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
  • La oferta incluye huevos de gallinas que son felices

    Carolina Enriquez

    Redactora (I)

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    En el páramo de los Illinizas, a 3 200 metros de altitud, cientos de gallinas viven en libertad. Los huevos que producen las aves son parte de la esencia de Dicorne.

    Esta industria alimenticia nació hace tres años y está muy ligada con el cuidado del medioambiente, el fomento de productos ecuatorianos y la innovación.

    Se trata de una empresa familiar en la que Carlos Díaz y sus hijos Carlos, Pablo y José son los socios fundadores. Dicorne tiene en su oferta huevos ecológicos, mermeladas de tres sabores (higo, mandarina y limón), humus de dos tipos, chimichurri y ‘snacks’.

    Para el desarrollo de la planta de producción, ubicada en el sector del Chaupi (Pichincha), al pie de los Illinizas, se invirtieron USD 30 000. “Yo estudiaba en EE.UU. y allí había cosas que aquí no. Conversando con mis hermanos vimos otras alternativas que podíamos hacer y decidimos lanzarnos al mercado con alimentos apetecidos como la pasta de garbanzo, conocida como humus”.

    La planta de producción de la firma se encuentra altamente equipada.
    La planta de producción de la firma se encuentra altamente equipada. Foto: Galo Paguay / LÍDERES

    Tras esta salsa lanzaron los demás productos, en los que siempre han buscado diferenciarse. Un ejemplo de ello, dice Pablo, son las mermeladas de sabores que, regularmente, no hay en el mercado; su chimichurri es fresco y se debe refrigerar.

    En la línea de ‘snacks’ se ofrece chulpi en tres sabores. “Nuestro enfoque es tener productos tradicionales que no se han expuesto a escala internacional”, explica Pablo. Precisamente, tras participar en ferias internacionales, los empresarios han tenido acercamiento con compradores de países como México; aspiran, próximamente, exportar.

    Como parte de su espíritu innovador, hace dos años optaron por la producción de huevos de gallinas que viven sin ningún estrés.

    “El tema de las gallinas felices nació como una iniciativa de cambio en la crianza. Queríamos un nuevo producto dentro del mercado. Iniciamos con un corral móvil”, dice Carlos Díaz padre.

    Un trabajador se encarga de recolectar uno de los huevos de gallinas criadas en libertad.
    Un trabajador se encarga de recolectar uno de los huevos de gallinas criadas en libertad. Foto: Galo Paguay / LÍDERES

    Se trata de un proceso en el cual las gallinas viven en el campo en corrales que, cada semana, se mueven por diferentes lugares de un terreno. Los animales tienen la posibilidad de pasar el día caminando y comiendo en la naturaleza; por las noches pasan al galpón.

    Los corrales se mueven a través de un tractor. Las gallinas, que están acostumbradas al traslado, no se encuentran hacinadas; existe un amplio cuidado técnico de las aves por parte de la empresa.

    Cuando arrancó este proyecto, se contaba con 300 gallinas en el primer corral; la inversión inicial, incluyendo animales, corrales y equipamiento, fue de USD 17 000. Los dueños dicen que, aunque es difícil cuantificar, el número de aves aumentó exponencialmente; ahora tienen cinco corrales móviles en producción y cuatro en desarrollo, en Pichincha, Imbabura y Tungurahua.

    La producción de huevos también ha incrementado. Se trata de un alimento sano que, al igual que el resto de la oferta, se vende en cadenas de supermercados, tiendas especializadas, delicatessen, restaurantes, etc.

    “Hace año y medio estamos trabajando con Dicorne. Comercializamos el humus, ciertas mermeladas, el chimichurri y los huevos. Son de muy buena calidad, tenemos buen servicio del proveedor, son productos ecológicos y respetuosos del medioambiente”, señala Amanda Purtschert, propietaria de Floralp Delicatessen.

    Consumidores de los productos como Lucía del Carmen Paredes destacan el sabor que tienen. “Los huevos son una alta fuente de proteína. Me encanta la presentación y, sobre todo, me gusta que tratan bien a los animales”.

    Los huevos se presentan en cajas de 12 unidades. Al igual que en los empaques del resto de productos, el distintivo de los mismos es la imagen de los Illinizas.

    El color de la cáscara de estos productos difiere, según la raza de las gallinas. Esta empresa tiene aves ponedoras de cuatro tipos.

    En promedio, cada gallina pone huevos por dos años; se calcula que cada animal produce 280 unidades en un año. Para este proyecto productivo, Dicorne cuenta con tres socios estratégicos

    Actualmente, la empresa se encuentra trabajando para obtener la certificación de Buenas Prácticas de Manufactura (BPM) y de Haccp. Apoya, además, a la iniciativa ambiental 1% for the Planet.

    ‘Me gustó saber preparar alimentos’

    Janeth Obando, asistente de planta productiva

    En Dicorne trabajo desde que arrancó la producción. Me parece interesante el trabajo que realizo, elaborar productos nuevos es agradable. Crear un alimento desde cero me llama mucho la atención y compartir con mis compañeros es bueno. Las personas que trabajamos en la planta, que somos tres, hacemos de todo: limpieza, industrialización, empaque, despacho, etc. Nos desenvolvemos bien en todo, pero también nos hemos especializado en ciertas actividades. En este empleo he aprendido sobre la elaboración de diferentes alimentos y sobre manejo de personal. Muchas veces me desenvuelvo como jefe de personal, porque tengo que estar pendiente del ingreso del personal. También me dedico a controlar la entrada de mercadería, producción, cálculo de lo que se va producir, despacho, laboratorio,. etc. Como parte de nuestro trabajo nos piden que realicemos control de calidad y análisis, para asegurar que nuestros productos sean buenos y no se genere ningún tipo de problema.

    Los productos de Dicorne se fabrican en un ambiente natural, a los pies de los Illinizas (Pichincha).
    Los productos de Dicorne se fabrican en un ambiente natural, a los pies de los Illinizas (Pichincha). Foto: Galo Paguay / LÍDERES
  • Elaboran productos en acero, según la necesidad

    Redacción Quito

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    Tener un negocio propio fue, a diferencia de muchos, la primera opción de los hermanos Esteban y Sebastián Arcos, de 30 y 32 años de edad.

    En el 2010, poco antes de graduarse de ingeniero mecánico en la Universidad San Francisco de Quito, Sebastián adquirió junto con Esteban (administrador de empresas) un taller automotriz.
    Luego de este primer emprendimiento, que mantuvieron hasta el 2014, se asociaron con amigos en una empresa de construcción, que desarrollaba pérgolas, modulares, puertas, pasamanos, entre otros tipos de estructuras.
    Fue entonces cuando conocieron a Fernando Guallichico, un experto en acero inoxidable, y quien fue una pieza clave para la creación de un nuevo negocio: Simetrika, empresa especializada en el desarrollo de productos elaborados en acero para la construcción y el campo industrial.
    Tras la asociación de los hermanos Arcos y Guallichico, la firma comenzó a operar en abril del 2016, con una inversión inicial aproximada de USD 25 000.
    En la línea de construcción, elaboran estructuras metálicas para los cimientos de una edificación, como el caso de las vigas. Para los acabados, desarrollan puertas diversas (para garaje, bodegas, etc.), baños, pasamanos, cisternas, pérgolas, entre otros elementos.
    Uno de sus clientes en esta rama es A10, firma especializada en acabados de construcción, para la cual han desarrollado chimeneas en acero y diversas estructuras metálicas, como puertas y pérgolas. “Conocen muy bien el material y cómo utilizarlo”, comenta Diego Medina, director de proyectos de A10.
    Producto de las exigencias de los propios clientes, el portafolio de productos incluye también sistemas contra incendios, que han desarrollado para obras de construcción y florícolas.
    Además, gracias a la experiencia de Fernando, se han especializado en la fabricación de tanques industriales y otras maquinarias con diversos usos.
    Por ejemplo, para el sector florícola han elaborado tanques para la preparación de fertilizantes orgánicos, un producto que se ha convertido en necesidad para estas firmas, por las exigencias de los mercados a los que exportan.
    También los han desarrollado para la elaboración de productos de limpieza y aseo personal; para derivados lácteos; para maduración de cerveza artesanal y extractores de mosto; para almacenaje de agua caliente –recubiertos con poliuretano– en edificios; etc.
    La cervecera artesanal Santana Brewing Company es un cliente antiguo de Fernando Guallichico, que se ha mantenido con Simetrika, en el desarrollo de tanques para grado alimenticio. “Les mandamos a hacer según nuestro requerimiento, cada vez que necesitamos un tanque más grande o uno adicional”, explica Sebastián Navarro, jefe de Producción.
    El costo de los tanques depende de las dimensiones. Uno de 100 litros puede costar USD 500, mientras que uno de 30 000 litros, USD 50 000. Los equipos cumplen con el grado alimenticio 304 y el grado químico 316. Esto garantiza la calidad del acero inoxidable y, por otro lado, la no propagación de baterías y la pureza del producto.
    La empresa cuenta con unos 15 proveedores. Uno de ellos es la importadora y comercializadora de acero IPAC, que le provee de tuberías, perfiles y otros materiales para estructuras. “La frecuencia de compra varía, según los proyectos que tengan”, comenta Patricia Tirado, asesora comercial de estructuras y proyectos.
    Simetrika ha trabajado en el desarrollo de unos 50 proyectos, cerró el año pasado con una facturación de USD 230 000. Para este 2019 esperan cerrar el año con USD 250 000, detallan los socios.
    La firma ha desarrollado cerca de 12 productos en la rama industrial y alrededor de 20 en la línea de construcción y acabados. El taller se encuentra ubicado en el valle de Cumbayá, en Quito.
    Para Esteban Arcos, una de las fortalezas de la empresa es el valor agregado de sus productos. Por ejemplo, en las pérgolas incluyen un canal de agua dentro de las columnas que se conecta con aguas reciclables, con el fin de brindar un enfoque ecológico. Por otro lado, añade, se preocupan por ser aliados de sus clientes, al ofrecerles un servicio personalizado.

    El taller de Simetrika, empresa especializada en productos de acero, está ubicado en el valle de Cumbayá, en Quito. Laboran 12 trabajadores fijos. Fotos: Vicente Costales / LÍDERES
    El taller de Simetrika, empresa especializada en productos de acero, está ubicado en el valle de Cumbayá, en Quito. Laboran 12 trabajadores fijos. Fotos: Vicente Costales / LÍDERES
  • Él le da un toque de color a los tambores

    Mayra Pacheco

    Redactora (I)

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    La pasión de Daniel Romero por la música y su creatividad impulsaron a este emprendedor a fabricar tambores personalizados.

    Luego de dejar su trabajo como ingeniero automotriz, en el 2011 se dedicó a fabricar prototipos de tambores. Tenía experiencia, porque a partir de los 16 años empezó a modificar su batería.

    En este proceso empleó acrílico y un material diferente a la madera que se utiliza tradicionalmente, para hacer el cuerpo de este instrumento musical. Inicialmente, invirtió USD 1 500.

    La versatilidad del acrílico le permitió obtener un resultado final novedoso. Así, abrió Alpha Custom Drums, en enero del 2014.

    En el ensamblaje de estos instrumentos musicales se emplean partes que son importadas. Por ejemplo, la superficie donde se golpea, la base y otras.

    Estas son elaboradas por Aquarian, una empresa en Estados Unidos, por pedido de Alpha Custom Drums. Por eso, se incluye la marca de esta última en estas piezas.

    El resto del trabajo se complementa utilizando acrílico y aluminio en el taller que tiene Romero, CEO de Alpha Custom Drums, en El Labrador, en el norte de Quito. Allí trabaja con cinco personas.

    En este sitio, con una alta precisión e imaginación, se crean los diseños. Para el cuerpo del tambor se puede optar por colores vivos o neutros. En total, tiene 24 alternativas. Si el cliente prefiere se hacen motivos personalizados o se colocan luces led.

    Rafael Rengifo, asistente de diseño, menciona que desde hace tres años realiza los grabados que solicitan los clientes en los tambores. Dependiendo de la complejidad se toman hasta tres horas para plasmarlos usando un láser especial en. “Cuando se obtiene el resultado final es chévere”:

    La altura de estos equipos se puede también elegir. Todo depende del matiz musical que busquen los artistas. La superficie tiene un diámetro de 14 pulgadas. Más adelante, desarrollará nuevos modelos para otros tamaños.

    “El material de los tambores es resistente. Además, el sonido que se obtiene es especial”, expresa Romero, de 35 años.

    En promedio, solo en acrílico se invierten USD 600 al mes.

    Los principales clientes de Alpha Custom Drums son bateristas, porque este instrumento es parte del set de una batería.

    El ensamblaje de este instrumento se hace bajo pedido. Este proceso dura una semana, porque se requiere del uso de máquinas especiales. La capacidad de producción es de ocho unidades al mes. Estas tienen garantía sobre defectos de fábrica. Y también se brinda mantenimiento.

    Las ventas se hacen en tiendas de Quito y Machala. Para otras ciudades se hacen envíos.
    El precio base de un tambor es de USD 399. Pero varía según la altura y el nivel de personalización. Esto le permite facturar alrededor de USD 3 000 al mes.

    Actualmente, la marca auspicia a nueve bateristas profesionales de Ecuador y de Estados Unidos. Pero también estos tambores han sido solicitados por artistas de México, Colombia y Perú.

    Félix Cueva, baterista de Madbrain, comenta que desde hace tres años usa estos tambores. “Ha sido una experiencia excelente. Me gusta la calidad, el diseño”.

    Aparte de los tambores, Alpha Custom Drums comercializa desde el 2017 ropa estuches para las baquetas y accesorios.

    Más adelante espera ensamblar baterías completas personalizadas. Actualmente, se están haciendo los prototipos. Y en el corto plazo, la meta es expandirse en los países vecinos.

    Daniel Romero , en el taller de Alpha Custom Drums en El Labrador.
    Daniel Romero , en el taller de Alpha Custom Drums en El Labrador. Foto: Diego Pallero / EL COMERCIO
  • Ellos producen más de 80 alimentos deshidratados

    Evelyn Tapia

    Redactora (I)

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    En una época en la que el desperdicio de alimentos perecibles es un problema que va en aumento, Roberto Baldeón y Gabriela Dillon crearon un emprendimiento que busca reducir esa tendencia a través de la técnica de deshidratación de alimentos.

    “La deshidratación es una de las formas más antiguas usadas por el hombre para conservar los alimentos. Hoy en día ayuda a muchos negocios que tienen problemas al comprar productos en cantidades no adecuadas, que luego terminan dañándose”, explica Baldeón.

    Hace cuatro años, con una inversión de USD 6 000, en una casa arrendada en El Inca, en el norte de Quito, los emprendedores compraron un horno y pusieron en marcha Alimentaria Dibal, que ofrece productos deshidratados.

    Actualmente, Dibal tiene una variedad de 80 deshidratados, entre frutas y verduras, como naranjas, kiwis, piñas, mora, tomate, zanahoria y otros, que se comercializan al granel a restaurantes y negocios del sector de alimentos, que los usan para infusiones, postres, barras energéticas, etc.

    En sus primeros meses de funcionamiento el negocio tenía unos cinco clientes, hoy cuenta con 43 compradores en Quito, Guayaquil y Cuenca y tiene una facturación mensual promedio de USD 8 000.

    “Fuimos tocando puertas en restaurantes primero, mostrando los beneficios de los productos deshidratados, que son más fáciles de almacenar, que tienen más duración y que el sabor se potencia más con la deshidratación. Así, varias personas reemplazaron la fruta y el vegetal perecible por deshidratados”, cuenta Baldeón.

    Entre sus clientes está Angie Morales, dueña de la marca de infusiones Qantu. Ella cuenta que eligió a Dibal por la calidad, los precios y la seriedad de la empresa. “Son muy puntuales en la entrega, cuidan mucho la madurez de la fruta, lo que incide en su sabor y calidad. De sus productos, mi favorita es la piña”, señala.

    Al principio, recuerda Dilon, buscaban productos en los mercados, pero decidieron eliminar los intermediarios en la cadena y buscaron directamente a los productores, para estar seguros de que los insumos están libres de químicos. Esto, además, les permitió reducir costos y pagar un precio justo a los productores.

    Priscila Anaguano es una de los 17 proveedores de materia prima de Dibal. Trabaja con la empresa hace un año y les entrega pimiento morrón rojo, tomate y albahaca que se cultivan en el valle de Íntag (Imbabura). Al mes les provee de 240 kilos. “Nuestro producto es fresco y eso es lo que ellos exigen. Piden un producto sano, limpio, que esté bien tapado”, detalla.

    Con la buena acogida de la línea de deshidratados, los emprendedores decidieron hace dos años ofrecer además conservas y condimentos, que se comercializan bajo la marca Productos Serra.

    Actualmente, el 70% de sus ventas corresponde a los deshidratados y 30% a la nueva línea.
    Su producto estrella es el pesto, una pasta elaborada con tomates deshidratados, macerados en aceite de oliva y especias.

    En la línea de condimentos destacan el polvo de naranja y mostaza, el de limón con romero y el de cebolla con pimiento, que se puede usar para todo tipo de carnes.

    “Desarrollar esta línea ha sido un proceso de ensayo y error, porque no somos chefs o expertos, el único secreto es que nos gusta comer bien y somos exigentes en los sabores. Fuimos probando, experimentando y llegamos a esto”, menciona Dillon.

    Dillon trabajaba como administradora en un hostal y Baldeón es ingeniero en Sistemas.

    El siguiente paso del negocio es incrementar la producción y llegar a las cadenas de supermercados, porque actualmente Productos Serra se vende en tiendas especializadas y en ferias como Farmers Market, que se realiza los martes, sábados y domingos en el Paseo San Francisco.

    Este año invertirán USD 50 000, con lo que se mudarán a una planta más grande, ubicada en Calderón, con maquinaria que les permitirá duplicar su producción actual, que es de
    24 000 kilos mensuales. Esto les permitirá incrementar sus ventas en un 15%, calculan los emprendedores, además buscarán más proveedores.

    Gabriela Dillon y Roberto Baldeón fundaron este negocio. El emprendimiento comenzó con una inversión inicial de USD 6 000.
    Gabriela Dillon y Roberto Baldeón fundaron este negocio. El emprendimiento comenzó con una inversión inicial de USD 6 000. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
  • Esta ‘app’ apunta a los servicios de limpieza

    Patricia González

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    La economía colaborativa continúa su expansión hacia múltiples ramas. En Ecuador ha sido recurrente su uso para servicios de transporte o comida a domicilio. Pero, ahora, en Quito, los usuarios tienen a su alcance servicios de limpieza para casas u oficinas.

    Juan Camilo Sepúlveda venía conceptualizando la idea desde hace algunos años, incluso tuvo un piloto del proyecto, pero para entonces se desempeñaba como Gerente de Easy Taxi en el país, una responsabilidad que le impedía dedicarle el tiempo necesario que requería el emprendimiento.

    A finales del año pasado, Brian Ibujes, amigo y compañero de trabajo, le propuso asociarse con la idea de sacar el proyecto adelante. En enero del 2019 se sumó también Bruno Valarezo como socio tecnológico.

    En conjunto, comenzaron a trabajar en una aplicación móvil que permitiera solicitar servicios de limpieza y, a su vez, a las personas interesadas en brindarlo, ofrecer sus servicios. El lanzamiento oficial fue en junio.

    Se trata de un emprendimiento con visión social, que busca promover la independencia económica y vinculación laboral de mujeres madres, cabezas de hogar. Por ello decidieron denominar a la aplicación Yana, nombre que proviene de la palabra quechua Yanapay, que significa ayudar.

    Por otro lado, comenta Sepúlveda, también aspira a ser una ayuda para las familias, con la limpieza de sus espacios, dándoles la posibilidad de invertir ese tiempo para compartir en familia. En el caso de oficinas o locales comerciales, buscan ser un soporte para otros emprendedores.

    La ‘app’ es de descarga gratuita y está disponible en iOS y Android. Los usuarios tienen la posibilidad de reservar el servicio, seleccionando el día y las horas. Las modalidades de prestación van desde dos horas hasta ocho horas de servicio, con costos desde USD 13 hasta 31. El pago puede ser con tarjeta de débito, crédito, transferencia o efectivo.

    Las asistentes o prestadores del servicio tienen la opción de escoger la solicitud que le convenga, según la cercanía u horario. Su ganancia corresponde a un 70% del pago de cada prestación.

    El proceso de selección de las asistentes es estricto: deben contar con experiencia y cumplir ciertos criterios. Además de la entrevista y una prueba, Yana realiza una visita en sus domicilios para conocer el entorno familiar y sus condiciones socioeconómicas.

    Al momento, Yana cuenta con tres mujeres como prestadoras. Una de ellas es Elvia Lárraga, de 42 años, madre soltera de tres hijos menores de edad. Se ha dedicado a este oficio desde muy joven. Recientemente, laboró para una empresa de limpieza, pero renunció por malas condiciones laborales: horas extras, incluidos fines de semana, no pagadas, atrasos en la remuneración, entre otros aspectos.

    Con Yana comenzó hace un mes, luego de haber recibido capacitación sobre la utilización de la ‘app’ y el servicio.“En un inicio me costó el uso de la aplicación, pero ya la manejo bien”, comenta Elvia, quien ya ha limpiado dos casos y dos departamentos. Paralelamente, trabaja como repartidora de flores en Nayón.

    Zulaida Cosío, una cliente, ha utilizado el servicio en tres ocasiones para la limpieza de su casa. “Me parece muy práctico. Además, fue una buena experiencia. La señora limpió muy bien y fue muy respetuosa y honrada”.

    A mediano plazo, una de las metas del emprendimiento es contar con un servicio de guardería para las asistentes que lo requieran para el cuidado de sus hijos, mientras ellas trabajan.

    Juan Camilo Sepúlveda y Brian Ibujes, dos de los socios de Yana. Foto: Galo Paguay / LÍDERES
    Juan Camilo Sepúlveda y Brian Ibujes, dos de los socios de Yana. Foto: Galo Paguay / LÍDERES
  • El penco, esencia de sus bebidas

    Mayra Pacheco

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    Los pencos que crecen en zonas áridas del país y que a veces pasan inadvertidos son el ingrediente estrella en Agave Spirit. En esta empresa se usa su néctar, flores y fibras para elaborar una variedad de bebidas, destilados, conservas, alimentos y artesanías.

    Estos productos son el resultado de una serie de investigaciones y pruebas que ha realizado Diego Mora, gerente de Agave Spirit, desde hace más de 15 años. Él se interesó en esta planta silvestre tras conocer que su uso se estaba perdiendo, en zonas como en la Mitad del Mundo, en Quito.

    Para intentar mantener viva la tradición de extraer el chawarmishki, que es la savia del penco, Mora decidió en el 2014 darle un valor agregado a esta materia prima, para esto creó Agave Spirit. Inicialmente invirtió USD 200.

    Con este líquido dulce, que tiene un tono blanquecino, y las flores de agave, aprendió a elaborar una serie de preparados.

    Actualmente, ofrece chawarmishki pasteurizado, jugos saborizados, miel, vinagre, miske (bebida alcohólica), mizhqueza (cerveza), flores de penco en conservas, y helados. Estos alimentos tienen propiedades nutritivas, probióticas e incluso medicinales.
    Cecilia Flores, quien consume este producto, asegura que el chawarmishki le permitió recuperarse, tras una enfermedad a los huesos. “No podía caminar, pero tras consumir esta bebida me siento mejor”.

    Israel García, cliente, comenta que por las propiedades nutricionales de las bebidas compra estos productos semanalmente. “Estos aportan a mi salud, saben bien y son de calidad”.
    En el proceso de elaboración de estas bebidas y alimentos se emplean solo ingredientes naturales, para mantener la esencia de esta planta nativa, que crece sin necesidad de la intervención de la mano del hombre.

    La materia prima se adquiere a cuatro familias que producen en la Mitad del Mundo y la provincia de Cotopaxi. Cada semana recibe 400 litros. En esto se invierte alrededor de USD 600.

    “Ellos reciben un precio justo por la savia de penco que se entrega de manera periódica”, precisa Agave Spirit.

    Christian Tito, productor, comenta que vende desde hace tres años alrededor de 100 litros de chawarmishki. En promedio, por cada litro recibe USD 0,80 centavos.

    Con esta materia prima se realiza las preparaciones en la planta de producción ubicada en la Ciudadela El Señor del Árbol, ubicada en el norte de Quito. En total, en este sitio trabajan 30 personas, entre colaboradores directos e indirectos.

    La comercialización se realiza en Quito y Guayaquil, en tiendas de productos orgánicos, y en ferias de emprendimientos. El precio de los jugos oscila entre USD 2 y 3, mientras que los destilados cuestan USD 20 y 35, el que es reposado en barriles de roble.

    En este año, la meta de Agave Spirit es exportar el miske. “Estamos en conversaciones con los Estados Unidos para vender nuestros destilados de penco”, refiere Mora.

    Si bien las bebidas alcohólicas de Agave Spirit se elaboran con agave como se hace el tequila en México, su preparación -sostiene Mora- es distinta y por esto su sabor es diferente.
    Esto permitió que esta pequeña empresa ecuatoriana participe como ponente en marzo pasado en el Simposio Internacional del Agave, en México.

    Aparte de la fábrica de bebidas y alimentos, esta empresa elabora artesanías y promueve la cultura alrededor del penco, en la Casa del Agave, ubicada en la Mitad del Mundo.

    En este sitio, que está a un costado de la planta, las personas pueden conocer más sobre las propiedades y usos del agave, previo una reservación. El ingreso cuesta USD 5.

    El recorrido se inicia en un mirador en donde se aprecia varias especies de penco. Incluso, en este espacio los turistas pueden experimentar las propiedades de las raíces del agave.

    Al avanzar se conoce los utensilios que se emplean para extraer el chawarmishki, la importancia de esta planta en América y los otros productos que se pueden obtener del penco.
    Entre estos instrumentos musicales, tambores, alpargatas hechas con fibra de cabuya, correas, elementos de arquitectura hechos con chawarquero (flor del penco). La visita incluye el acceso a la destilería, la tienda, degustación de productos y un recorrido por la ruta del agave en la zona.

    Este servicio más la venta de las bebidas, alimentos y artesanías generan un ingreso de USD 30 000 al año. Pero este 2019 quieren duplicar esta cifra.

    Diego Mora, gerente de Agave Spirit, y Andrea Villarroel, jefa de Innovación, organizan recorridos para los visitantes que acuden a la planta. Fotos: Galo Paguay / LÍDERES
    Diego Mora, gerente de Agave Spirit, y Andrea Villarroel, jefa de Innovación, organizan recorridos para los visitantes que acuden a la planta. Fotos: Galo Paguay / LÍDERES
  • La salud es el foco de esta plataforma tecnológica

    Evelyn Tapia

    (I) redaccion@revistalideres.ec

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    Cuando la madre de Samir Zeidan sufrió un quebranto de salud, por la emergencia la familia la llevó al hospital más cercano. “Se tuvieron que realizar exámenes que ya se había realizado antes por no tener el historial clínico ahí, gastamos USD 2 000 por eso”, recuerda Zeidan.

    De esa mala experiencia surgió la idea de diseñar una plataforma que reduzca en lo mínimo esas molestias en los sistemas de salud.

    En el 2016, Samir comenzó a desarrollar Goctors, un sistema en el que se ha invertido USD 1 millón, para juntar en una misma plataforma a prestadores de salud y de seguros, con los pacientes.

    Se trata de una ventanilla única para atenciones en servicios de salud, pero en la web. Junto a Zeidan trabajan otros tres fundadores: Marcelo Salvador, Andrés Torres y Salvador Basile. El negocio genera 12 empleos.

    “Queríamos facilitar la relación paciente-doctor. Que cuando estés enfermo, la única preocupación sea sanar, no pensar si el seguro cubre, si tienen tu historial clínico. En la banca casi todo es on line y en la salud seguimos en papel y lápiz”, señala Zeidan.

    Goctors es un software que permite al paciente gestionar bajo un usuario toda su información referente a salud. Por ejemplo, recetas, radiografías, resultados de exámenes y construir así en un mismo sitio su historial médico.

    Por otro lado, ese mismo sistema es una herramienta de gestión para los médicos, que pueden tener su agenda en línea, revisar el historial de sus pacientes, dar recetas, pedir resultados de exámenes, etc. Además, la herramienta ofrece la opción de facturación electrónica y cobro con tarjeta.

    Salvador cuenta que el proceso de sacar a flote el negocio ha sido complejo principalmente por lo difícil que es conseguir financiamiento para emprendimientos de tecnología en el país.

    En el 2017, los socios participaron en el concurso Liga de Emprendedores Extraordinarios, que organiza la Corporación Financiera Nacional (CFN), con lo que obtuvieron un premio de USD 30 000. Luego aplicaron a un préstamo de USD 200 000 en esta entidad pública.

    También obtuvieron recursos por USD 120 000 del programa Microsoft Sponsorship, que selecciona a emprendimientos con alto potencial de innovación.

    Este año esperan concretar alianzas nuevas con entes del extranjero, pues participaron en el Global Entrepreneurship Summit 2019 (GES2019), en Países Bajos.

    Este es un foro que reúne líderes mundiales en emprendimiento e innovación, para respaldar acuerdos de inversión y políticas que impulsen estos negocios.

    Zeidan explica que actualmente 50 prestadores del área de salud en el país han adoptado el sistema de Goctors, con lo que ya registran unos 200 000 usuarios, entre médicos y pacientes.

    En una segunda etapa, los emprendedores saldrán a captar pacientes para que se registren de manera gratuita. El modelo de negocio genera ingresos por cada cliente que llegue a un prestador gracias a Goctors.

    Se espera generar USD 1,2 millones en ingresos en el primer año de esta segunda etapa.

    También se generan ingresos cuando el prestador traslada un proceso que antes se hacía manual a uno automático mediante la adopción de Goctors.

    Natalia Bustamante, coordinadora de proyectos del Sistema Médico (Sime) de la Universidad San Francisco, cuenta que hace un año conocieron el software y este año decidieron integrar su sistema al de Goctors. “En Ecuador tenemos un sistema de salud fragmentado, toda la información médica no está integrada y eso es un derecho que deberían tener todos los pacientes. Con esta herramienta, los médicos van a tener acceso a lo que pasa con el paciente más allá de Sime”, señala.

    Sime tiene 90 médicos en cinco sucursales y atiende a 120 000 pacientes al mes aproximadamente.

    Pablo Espinosa, gerente vida, asistencia médica y accidentes de AIG Metropolitana, cuenta que integraron su sistema al de Goctors el 1 de junio. Esperan que la herramienta sea usada por 40 000 de sus clientes. “Es una prestación de servicio muy innovadora que ata a los actores de las redes de salud y ayudará a mejorar la experiencia de los clientes”.

    Adrián Alcánt: ‘Materializar ideas es el reto permanente’
    Programador senior en Goctors

    Trabajo desde diciembre del 2017 con Goctors, estoy a cargo de desarrollo de software. En el equipo de tecnología trabajamos cinco personas y hay básicamente tres áreas: el área de desarrollo, pruebas y la de experiencia de usuario. Lo que hace destacar a Goctors es que logra la integración de todos los actores que participan de los servicios de la salud en un mismo ligar. Además, todo está pensado desde el lado del usuario, somos pacientes trabajando para los pacientes, por eso tratamos de crear para ellos un ecosistema amigable que les permita interactuar de manera fácil. Desarrollar esta plataforma nos ha tomado tiempo, no ha sido fácil, pero es un reto, porque trabajar en un emprendimiento no es igual a trabajar en una empresa con mucha trayectoria y procesos rígidos ya establecidos. Aquí nuestro día a día es interpretar ideas, aterrizarlas y materializarlas. Eso es muy satisfactorio, porque podemos ser proactivos con ideas y descubrir nuevas habilidades, contribuyendo en varias áreas.

    El emprendimiento ganó en el 2017 el concurso Liga de Emprendedores Extraordinarios, que organiza la Corporación Financiera Nacional (CFN). Foto: LÍDERES
    El emprendimiento ganó en el 2017 el concurso Liga de Emprendedores Extraordinarios, que organiza la Corporación Financiera Nacional (CFN). Foto: LÍDERES
  • Las cooperativas fondean a los emprendedores

    Redacción Cuenca (I)
    redaccion@revistalideres.ec

    USD 52,8 millones de préstamos concedidos por las cooperativas de ahorro y crédito se destinaron a rubros relacionados con actividades productivas y de microcrédito en Morona Santiago. Ese monto se registró entre enero del 2018 y abril pasado, de acuerdo con datos de la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria (SEPS).

    Los recursos se orientaron a la compra de franquicias, marcas, licencias, terrenos, edificios, vehículos para fines comerciales y productivos y equipos. También, para adquirir maquinaria, servicios, bienes de capital, consumo de microempresarios, construcción y capital de trabajo.

    Tres socios de la compañía de transporte Escotour Abanico de Macas pidieron entre USD 40 000 y 50 000 para la compra de las busetas. El gerente, Henry Rivadeneira, por ejemplo, solicitó USD 42 000 a un plazo de cinco años para comprar una buseta para 16 pasajeros. “Estamos al día en los pagos. Fueron importantes los préstamos para el crecimiento de esta empresa, que tiene 14 socios”.

    Escotour Abanico tiene contratos de transporte con los planteles educativos de Macas, Municipalidad, ECU-911 y entidades gubernamentales. Laboran normalmente desde hace cinco años.

    Ahora, dice Rivadeneira, tramitan los permisos para constituir la empresa Macabeos Tours y requieren una flota de 10 furgonetas. Los recursos prevén solicitar a la cooperativa Cacpe Gualaquiza, que se fundó hace 29 años y en la actualidad tiene 16 800 socios.

    Según el gerente de esa entidad, Patricio Pérez, se entregan créditos desde USD 500 hasta 80 000 y no existe restricción para el microcrédito. “El monto depende de qué tan avanzado esté el negocio o el emprendimiento”.

    Cacpe Gualaquiza tiene más de 3 800 operaciones de crédito colocadas en Morona Santiago. De esa cifra, el 40% corresponde a microcrédito y el resto a consumo. “La gente pide para actividades agrícolas y ganaderas como el cultivo de la pitahaya, guanábana, café, cacao, tilapia, pero también para comercio. En la provincia no hay grandes empresas, por lo que la gente busca emprender para generar empleo”, señala Pérez.

    Rogelio Silva es propietario del Centro Naturista Las Colmenas, ubicado en Macas. Funciona desde hace 10 años y tiene una sucursal en el cantón Sucúa.

    Él solicitó USD 10 000 hace dos años para adquirir mercadería para su local. Vende jarabes, cápsulas, suplementos vitamínicos y otros productos. “El crédito fue importante porque si no, no hubiese podido crecer en mi negocio. Siempre faltan productos o salen nuevos y hay que tener variado”.

    Silva cuenta que vende entre USD 200 y 300 al día. Antes ya pidió otro crédito de USD 5 000 para montar el local. Acabó de pagar y solicitó el segundo.

    Para Luis Elizalde, dueño de la Granja El Lojanito, también fue importante el apoyo cooperativo. Pidió USD 5 000 y paga desde hace un año, de los cuatro de plazo. “El negocio está bien”. Compra ganado en las ferias de los cantones Limón Indanza y Morona.

    En la actualidad, tiene 400 pollos y entre octubre y abril llega hasta 1 000. Además, tiene 40 vacas para ganado de carne y leche. Sus animales los comercializa en Macas, la capital provincial. La Granja El Lojanito está ubicada en la comunidad de Yuquipa, en la carretera Macas-Puyo.

    Las estadísticas

    Las entidades. De acuerdo con información de la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria, en la provincia de Morona Santiago funcionan 33 agencias de cooperativas de ahorro y crédito. La mayoría en los cantones Morona, Gualaquiza, Santiago y Sucúa.

    Los créditos. El 2018, las entidades de la economía popular y solidaria entregaron un total de USD 137,68 millones distribuidos en 16 929 operaciones de crédito en Morona Santiago. En el primer cuatrimestre del 2019 fueron USD 39,69 millones, en 5 495 préstamos.

    Rogelio Silva (izq.) es propietario del Centro Naturista Las Colmenas, ubicado el centro de Macas. Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES
    Rogelio Silva (izq.) es propietario del Centro Naturista Las Colmenas, ubicado el centro de Macas. Foto: Xavier Caivinagua para LÍDERES