Etiqueta: familia

  • Una familia especialista en carnes a la parrilla

    Evelyn Tapia Zurita  (I) 
    redaccion@revistalideres.ec

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    Los fines de semana asando carnes en parrilladas con familiares y amigos fueron la única experiencia previa de Homero Vinueza para abrir el restaurante La Parrilla de Homero, un negocio que este mes cumplió 15 años en Quito y tiene cuatro locales.

    Vinueza tiene 62 años, de ellos, 32 los dedicó a la docencia. La mayor parte de su carrera la pasó en un colegio privado, en donde ejerció la docencia y cargos directivos en países como España, Irlanda, Inglaterra y República Dominicana.

    El emprendedor confiesa que siempre que viajaba, se fijaba con atención en los detalles de la decoración, el servicio y la carta de los restaurantes que visitaba. Le gustaba, aunque entonces no tenía planeado tener un restaurante.

    Años más tarde, en el 2004, con una inversión de USD 12 000 que reunió a lo largo de su carrera, y luego de una investigación de mercado, abrió su primer restaurante en la avenida República de El Salvador y Naciones Unidas, en un local de 50 metros cuadrados, con ocho mesas y tres empleados.

    Vinueza cuenta que decidió hacerlo para no tener que seguir viajando fuera del país con su familia por causa del trabajo.

    “Una noche en el dormitorio de mi hijo conversando, le dije: ya me quiero quedar en Ecuador, ¿pero qué hago? Además de ser profesor, lo único que sabía era hacer parrilladas”, recuerda.

    La matriz de la Parrilla de Homero todavía funciona en el lugar en el que se abrió el primer local, pero ahora es más grande y comparte terreno con otros dos negocios del empresario: el restaurante de sushi Mizu y el bar Buskers.

    Con los cuatro locales de la Parrilla de Homero y los otros dos negocios gastronómicos, atienden mensualmente a unos 15 000 comensales.

    Vinueza cree que el éxito de sus emprendimientos radica en tres fortalezas que ha tratado de mantener desde el 2 de marzo del 2004, cuando abrió su primer local. Primero, tenía que ser un restaurante semiformal, con mesas sin manteles que le permitan al comensal sentirse cómodo.

    Segundo, tenía que ofrecer platos de calidad y buen sabor sin que eso signifique demandar precios altos. “Sabía que iba a tener menos utilidad, pero con precios bajos terminaría vendiendo más y así ha sido hasta ahora”, dice.

    Julio Ospina, proveedor de carne de pollo, destaca el alto nivel de calidad que demanda la Parrilla de Homero. “Trabajamos hace ocho años con ellos y siempre han sido muy serios. Nos solicitan un gramaje específico para los cortes que requieren”.

    El tercer punto clave es la calidad en la atención al cliente. Para ello, dice Vinueza, el secreto es estar completamente involucrado y presente en el negocio.

    “Se necesita estar muy cerca. Ahora contamos con más personal, tenemos un trabajo más sistematizado y, aún así, tenemos jornadas de 09:00 a 23:00. Pero, como es un negocio familiar, nos apoyamos y nos turnamos para poder descansar y no descuidar el negocio”, manifiesta.

    Mario Jarrín, quien vive en la zona del primer local, cuenta que visita el restaurante hace 10 años por la calidad y agilidad del servicio. Además, destaca el buen sabor de los cortes.

    El sabor de la carne se debe a que el negocio cuenta con una planta de refrigeración en la que el producto permanece a temperatura de -2 ° para que el músculo del animal se madure y tenga un sabor más jugoso.

    Sus hijos, Homero y Daniela Vinueza Ortiz, añade, son parte de la historia de crecimiento de sus restaurantes. Los dos comenzaron desde su adolescencia a ayudar a su padre. Se involucraban en la parrilla y atendían como meseros. “Siempre estaban aquí después de sus clases, yo quería que aprendan que nada en la vida es gratis, que todo implica sacrificios”, señala.

    Hace dos años su hijo es el gerente general y Daniela se encarga de las estrategias de comunicación, imagen y publicidad. El joven señala que involucrarse desde la gerencia le ha permitido tomar decisiones para que los negocios se modernicen.“Nos hemos enfocado mucho en la innovación, así atraemos a nuevos clientes. El año pasado invertimos en una remodelación del restaurante de sushi, este año en el bar. En el 2020 esperamos abrir otro local”.

    ‘Hay que hacer las cosas con buena actitud’

    Hernán Castillo 
    Cocinero encargado de la parrilla

    Trabajo aquí desde hace casi 14 años. Antes sabía algo de hacer carne a la parrilla, pero en La Parrilla de Homero mejoré mucho y aprendí más. Creo que al restaurante le ha ido tan bien todos estos años, principalmente, porque la atención al cliente es excelente. También por la preparación de la comida. No hay secretos, solo se trata de hacer las cosas con amor. En un trabajo, cuando se hacen las cosas con mala actitud, nada sale bien. Eso no pasa aquí. Los términos de la carne, la presentación, todo es importante y los clientes lo valoran, por eso tenemos muchos clientes fijos, como de toda la vida. Con los dueños tenemos una buena relación, ellos son propietarios que están siempre pendientes de todas las cosas, para que todo salga bien. Diariamente tenemos bastante movimiento, sobre todo desde las 13:00 hasta las 15:00 y tenemos una clientela variada. Entre semana vienen grupos de amigos, gente de oficina. Los fines de semana vienen más familias. Entre los platos que más le gustan a la gente están el medio bife y el filet mignon.

    Homero Vinueza y sus hijos Daniela y Homero, comparten responsabilidades en la administración de los restaurantes de carnes y sushi, y del bar. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
    Homero Vinueza y sus hijos Daniela y Homero, comparten responsabilidades en la administración de los restaurantes de carnes y sushi, y del bar. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
  • La panela obtiene un ‘plus’ en manos de esta familia

    Mayra Pacheco

    Los beneficios que tiene la panela como endulzante impulsó a Fabián Mena, representante de Pakto Vida Natural, a desarrollar nuevos productos. Las primeras recetas para dar paso a este emprendimiento surgieron en un sitio improvisado en la cocina de su casa, ubicada en la comunidad de Buenos Aires, en Pacto, en el noroccidente de Quito.

    El propósito inicial de este ingeniero químico en alimentos era elaborar un producto para preparar bebidas refrescantes con sabor a frutas y panela. Con un presupuesto inicial de USD 300 y luego de varios intentos logró su objetivo. Esta preparación se empezó a vender en el 2015.

    Con este “polvo” que viene dentro de una funda plástica hermética se preparan bebidas de panela con sabor a naranjilla, maracuyá, lima-limón, tamarindo y otros. Este producto tuvo tanta acogida, en las ferias, que Elena Ramírez, madre de Mena, sugirió embotellar esta preparación para que se la consuma de manera inmediata.
     
    Para seguir creciendo en el mercado y desarrollar más productos, Pakto Vida Natural gestionó un crédito para invertir alrededor de USD 50 000 en una planta de producción de alimentos.

    Hoy tiene una destiladora, insumos para preparar estos productos y equipos. Aparte de la panela en polvo saborizada y las bebidas embotelladas, produce un polvo para preparar infusiones de panela con jengibre, caramelos con fines curativos, etanol y licores herbales. 

    Todo se hace con caña de azúcar que entrega principalmente la Asociación de Productores Agrícolas Nuevos Horizontes de Buenos Aires de Pacto.

    En este proyecto Mena cuenta con el apoyo de toda la familia. Son 12 hermanos y su padre Manuel. Cada uno tiene una actividad asignada en esta empresa. Ramírez falleció hace dos años.

    Pese a esta situación los Mena Ramírez continúan con este proyecto, que tiene 21 empleados fijos, pero que en total involucra a más de 80 familias de Pacto.

    Madres solteras, adultos mayores se involucran en los procesos de preparación de los caramelos o bebidas. Los productores de derivados de caña de azúcar aportan también con su parte. Pero no ha sido un trabajo fácil.

    Mena reconoce que si bien en esta parroquia rural de Quito, se cuenta con suficiente caña de azúcar para producir panela, algunas personas han optado por desarrollar otras actividades como la minería, porque los intermediarios no pagan un precio justo.

    En promedio, los intermediarios pagan a los productores de panela en promedio USD 28 por cada quintal, en cambio Pakto Vida Natural entrega USD 50 por el mismo producto.

    Así se quiere revalorizar el trabajo que se realiza en esta parroquia y promover el consumo de la panela que tiene un valor nutricional. “Este endulzante tiene minerales como hierro, calcio, sodio, magnesio. Estos son buenos para la salud. Además, los productos que elaboramos son orgánicos”.

    Por las características de estos alimentos, los productos que elabora este emprendedor son demandados por restaurantes, hoteles, tiendas naturistas y ferias.

    Bolívar Bustillos, propietario de un comisariato en el sector de Las Cuadras, comenta que adquiere estos productos desde hace tres años, porque tienen una alta demanda. “Los clientes prefieren estas bebidas en lugar de las gaseosas o energizantes”.

    Betty Idrovo, propietaria de una tienda naturista en Solanda, menciona también que la panela con jengibre y los caramelos son solicitados para tratar resfriados o enfermedades respiratorias. Ella incluso distribuye estos productos a otros negocios.

    Por unidades, el costo de cada sobre de panela en polvo saborizada es de USD 2, el paquete de caramelos a 1,50, y las bebidas a 1. Pero cuando se hace pedidos por mayor hay precios especiales.

    Actualmente, esta empresa vende sus productos a escala nacional. Para este año la meta es exportar estos productos al mercado europeo, donde lo orgánico tiene una alta aceptación entre los consumidores.

    Pakto Vida Natural factura alrededor de USD 120 000 al año. Para pedidos las personas se pueden comunicar al 098 281 597 o ingresar a la página web www.paktovidanatural.com.

    Manuel Mena (centro) junto a sus hijos es parte de este emprendimiento. Cada uno cumple con una actividad específica en esta empresa familiar. Fotos: Diego Pallero / LÍDERES
    Manuel Mena (centro) junto a sus hijos es parte de este emprendimiento. Cada uno cumple con una actividad específica en esta empresa familiar. Fotos: Diego Pallero / LÍDERES
  • La panela obtiene un ‘plus’ en manos de esta familia

    Mayra Pacheco

    redaccion@revistalideres.ec

    Los beneficios que tiene la panela como endulzante impulsó a Fabián Mena, representante de Pakto Vida Natural, a desarrollar nuevos productos. Las primeras recetas para dar paso a este emprendimiento surgieron en un sitio improvisado en la cocina de su casa, ubicada en la comunidad de Buenos Aires, en Pacto, en el noroccidente de Quito.

    El propósito inicial de este ingeniero químico en alimentos era elaborar un producto para preparar bebidas refrescantes con sabor a frutas y panela. Con un presupuesto inicial de USD 300 y luego de varios intentos logró su objetivo. Esta preparación se empezó a vender en el 2015.

    Con este “polvo” que viene dentro de una funda plástica hermética se preparan bebidas de panela con sabor a naranjilla, maracuyá, lima-limón, tamarindo y otros. Este producto tuvo tanta acogida, en las ferias, que Elena Ramírez, madre de Mena, sugirió embotellar esta preparación para que se la consuma de manera inmediata.

    Para seguir creciendo en el mercado y desarrollar más productos, Pakto Vida Natural gestionó un crédito para invertir alrededor de USD 50 000 en una planta de producción de alimentos.

    Hoy tiene una destiladora, insumos para preparar estos productos y equipos. Aparte de la panela en polvo saborizada y las bebidas embotelladas, produce un polvo para preparar infusiones de panela con jengibre, caramelos con fines curativos, etanol y licores herbales. Todo se hace con caña de azúcar que entrega principalmente la Asociación de Productores Agrícolas Nuevos Horizontes de Buenos Aires de Pacto.

    Los caramelos de panela y jengibre se producen de manera artesanal. Estos son recomendados en caso de resfriados. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
    Los caramelos de panela y jengibre se producen de manera artesanal. Estos son recomendados en caso de resfriados. Foto: Diego Pallero / LÍDERES


    En este proyecto Mena cuenta con el apoyo de toda la familia. Son 12 hermanos y su padre Manuel. Cada uno tiene una actividad asignada en esta empresa. Ramírez falleció hace dos años.

    Pese a esta situación los Mena Ramírez continúan con este proyecto, que tiene 21 empleados fijos, pero que en total involucra a más de 80 familias de Pacto.

    Madres solteras, adultos mayores se involucran en los procesos de preparación de los caramelos o bebidas. Los productores de derivados de caña de azúcar aportan también con su parte. Pero no ha sido un trabajo fácil.

    Mena reconoce que si bien en esta parroquia rural de Quito, se cuenta con suficiente caña de azúcar para producir panela, algunas personas han optado por desarrollar otras actividades como la minería, porque los intermediarios no pagan un precio justo.

    En promedio, los intermediarios pagan a los productores de panela en promedio USD 28 por cada quintal, en cambio Pakto Vida Natural entrega USD 50 por el mismo producto.

    Así se quiere revalorizar el trabajo que se realiza en esta parroquia y promover el consumo de la panela que tiene un valor nutricional. “Este endulzante tiene minerales como hierro, calcio, sodio, magnesio. Estos son buenos para la salud. Además, los productos que elaboramos son orgánicos”.

    Por las características de estos alimentos, los productos que elabora este emprendedor son demandados por restaurantes, hoteles, tiendas naturistas y ferias.

    Bolívar Bustillos, propietario de un comisariato en el sector de Las Cuadras, comenta que adquiere estos productos desde hace tres años, porque tienen una alta demanda. “Los clientes prefieren estas bebidas en lugar de las gaseosas o energizantes”.

    Betty Idrovo, propietaria de una tienda naturista en Solanda, menciona también que la panela con jengibre y los caramelos son solicitados para tratar resfriados o enfermedades respiratorias. Ella incluso distribuye estos productos a otros negocios.

    Por unidades, el costo de cada sobre de panela en polvo saborizada es de USD 2, el paquete de caramelos a 1,50, y las bebidas a 1. Pero cuando se hace pedidos por mayor hay precios especiales.

    Actualmente, esta empresa vende sus productos a escala nacional. Para este año la meta es exportar estos productos al mercado europeo, donde lo orgánico tiene una alta aceptación entre los consumidores.

    Pakto Vida Natural factura alrededor de USD 120 000 al año. Para pedidos las personas se pueden comunicar al 098 281 597 o ingresar a la página web www.paktovidanatural.com. 

    Jissela Aguas, producción de alimentos y control de calidad: ‘Esta empresa nos ayuda a salir adelante’

    Para los habitantes de esta parroquia rural, Pakto Vida Natural representa una oportunidad para salir adelante y aprender cosas nuevas. Soy madre soltera, tengo 26 años y me resultaba complicado obtener una plaza de trabajo, porque a veces no era compatible con mi realidad.

    Pero desde hace tres años esta empresa me ha permitido trabajar durante la jornada que mis hijos están en clases. Y cuando ellos salen podemos estar juntos para cuidarles y ayudarles con las tareas. Además, este trabajo me ha permitido desarrollar nuevas destrezas.

    Preparamos productos diferentes con la panela: bebidas embotelladas, caramelos, licores y solo empleamos productos naturales. Son alimentos únicos, que tienen una alta acogida y eso permite que más gente se involucre en este proyecto. Por esto recibimos un ingreso que es mejor con relación a lo que podría obtener como jornalera, cortando la caña. La otra alternativa sería salir al pueblo a buscar trabajo, pero hay pocas opciones y además no podría cuidar bien de mi familia.

    Manuel Mena (centro) junto a sus hijos es parte de este emprendimiento. Cada uno cumple con una actividad específica en esta empresa familiar. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
    Manuel Mena (centro) junto a sus hijos es parte de este emprendimiento. Cada uno cumple con una actividad específica en esta empresa familiar. Foto: Diego Pallero / LÍDERES
  • El presupuesto brinda orden a las finanzas de la familia

    Redacción Quito

    Una vida ordenada, principalmente en lo que se refiere a lo financiero, le evitará problemas. Por ello es clave iniciar el año con un plan de ingresos y gastos estructurado.

    Primero, se debe saber que hay presupuestos para dos tipos de personas: las que tienen ingresos permanentes y las que no. Para las primeras lo recomendable es hacer un presupuesto anual; a las segundas se aconseja que lo realicen de forma mensual.

    Bertha Romero, especialista en finanzas personales del programa de educación Tus Finanzas, asegura que las personas pueden armar su plan en una hoja electrónica de Excel, una tabla de Word o, simplemente, en papel.

    El documento se debe dividir en dos secciones: ingresos y gastos. En la primera parte está el sueldo a recibir, fondos de reserva, décimos (si no los acumula), bonos fijos, dinero por cobro de arriendos, entre otros. Mientras que en la segunda se deben de incluir los egresos que, a su vez, se dividen también en dos: los necesarios (alimentos, vivienda, pago de deudas) y los que no lo son como viajes, diversión y más.

    “Es importante que el documento contenga un detalle del ingreso estimado para el año. Por otro lado, lo que todo el mundo se olvida de poner y debe ser el primer egreso del mes es el ahorro. Por lo menos, el 10% del ingreso total debe ser para este rubro”.

    Una manera de conseguir esta meta es tener una cuenta adicional, con bloqueo para sacar el dinero por determinado tiempo, de la que se debite un porcentaje fijo cada mes. La disciplina es clave para este propósito en el año. También lo es para equilibrar las finanzas.

    Si sus deudas y gastos por deudas y otros rubros sobrepasan el 40% de sus ingresos es una alerta para que haga un ajuste: deje de comprar comida o bebidas calientes a media mañana o media tarde, lleve a la oficina su propio almuerzo en vez de comer en restaurantes, reduzca gastos de entretenimiento, etc.

    El buró de crédito Equifax explica que al armar un presupuesto se debe tener claro que el pago a cuotas de cualquier obligación no debe comprometer los ingresos futuros. “Es fundamental que pague sus cuentas a tiempo para evitar recargos o multas”.

    Una alternativa para ser más ordenado en sus finanzas es, según Luis Naranjo, jefe técnico de la Cámara de Comercio de Quito, el uso de aplicaciones móviles de presupuestos familiares.

    Él destaca dos de ellas. PocketGuard, que funciona tanto para Android como para iOS, es una aplicación de administración de planes financieros y seguimiento de cuentas bancarias, todo en uno; muestra cuánto tienen las personas en sus cuentas, así como cuánto pueden gastar por día.

    Por su parte, Dollarbird, también para Android e iOS, “adopta un enfoque colaborativo centrado en el calendario para el presupuesto y el seguimiento de gastos. Puede agregar, eliminar y editar egresos e ingresos pasados y futuros en una vista estilo calendario”.

    El uso de las ‘apps’ le permitirá conocer si está cumpliendo con lo presupuestado. Algunas le brindan alertas para saber si se sobrepasa el dinero que debe destinar para cada mes del año.
    “Es importante que siempre, cada 30 días, tenga un margen para cualquier imprevisto”,explica Naranjo. Entre estos se encuentra el daño de algún electrodoméstico o del auto, una consulta dental urgente, el pago de algún trámite, el pago de un bien o servicio no previsto para el hogar, entre otros.

    Este monto debe ser adicional al de un ahorro para emergencias, que debe tener una cantidad mucho mayor. Según Equifax, este fondo debe destinarse ante la pérdida de trabajo, tratamientos médicos por una enfermedad o accidente de tránsito, calamidad doméstica, etc.

    Cualquier movimiento financiero, según Romero, debe quedar registrado por escrito, tanto en el presupuesto mensual como en un registro de gastos; este debe manejarse en un documento diferente al primero.

    Asegúrese de ser disciplinado. Los expertos coinciden en que cuando una persona hace cuentas mentales lo más seguro es que confunda u olvide algunas cifras.

    Tener un plan de ingresos y gastos es clave en familias y empresas. Expertos recomiendan que todo movimiento debe quedar registrado por escrito.
    Tener un plan de ingresos y gastos es clave en familias y empresas. Expertos recomiendan que todo movimiento debe quedar registrado por escrito.
  • Proquim está en su tercera generación

    Carolina Enriquez

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    Trabajar de la mano entre un abuelo, su hijo y su nieta ha sido la receta para el éxito de Proquim, una industria de artículos de limpieza, la mayoría detergentes, con 50 años en el mercado.

    Desde hace seis meses la tercera generación de la familia Ponce se incorporó a la empresa para aportar en la operación. Sin embargo, mantener el negocio por más de medio siglo no ha sido fácil.

    Pedro Ponce, ahora de 98 años, fue el fundador de la compañía. Al inicio, junto con otros tres socios, arrancaron como importadores del detergente Teepol, de la marca de lubricantes Shell; pero, luego esta firma anglo holandesa les propuso que produzcan en el país.

    El fundador explica que en esos primeros años se dedicaron a producir y vender siete productos de limpieza, con el eslogan de “las siete ayudas eficaces”. Una de las estrategias que aplicó fue rodearse de ingenieros químicos que desarrollaran fórmulas para productos de alta calidad.

    “Si se piensa a largo plazo hay que pensar en buscar apoyo. Para ofrecer calidad se necesitan técnicos con conocimientos y excelentes materias primas”, indica. Asimismo, en la segunda mitad del siglo XX la compañía adquirió acero inoxidable, una novedad para la época, que permite que los productos sean inocuos.

    Durante 25 años, Pedro Ponce comandó la compañía hasta que asumió su hijo Christian, quien compró la parte que les correspondía a sus nueve hermanos. Él explica que le tocó vivir tres momentos empresariales críticos.

    En 1987 Proquim perdió una marca de insecticida, que representaba el 33% de sus ventas; luego enfrentó la crisis del sucre, cuando Ponce hijo tenía que comprar materia prima en dólares y vender en moneda local, lo que le impedía a la empresa generar suficientes ingresos para pagar a esos proveedores. El tercer impacto fue la llegada de gran cantidad de productos de limpieza importados, tras la dolarización aplicada en el 2000.

    Para enfrentar estos momentos puso en marcha estrategias como lanzar productos para segmentos específicos como Dish Lav, para quienes lavan platos en máquinas; control de costos; compra de materias primas en la región o el país, apoyo a los colaboradores…

    La empresa ha entregado utilidades durante 48 años y trata de compensar en todo lo que pueda a sus 10 trabajadores. Por ello es que la rotación es muy baja.En esto está de acuerdo Alejandra Ponce, nieta del fundador.

    “Al estar mi papá por 25 años era importante contar con su experiencia y combinarlo con ideas frescas”. Ella ha diseñado promociones, nuevas formas publicitarias, retroalimentación con los clientes, impulso de las ventas, etc. Hoy, el 70% de las ventas de Proquim está en el sector de ‘retail’ y el 30% en el industrial.

    Algunos datos

    A futuro. Christian Ponce dice que el reto de mantener la empresa en la tercera generación es grande. Entre las medidas planeadas está fabricar nuevas líneas de producción, concretar alianzas o trabajar en el área de alimentos a través de la venta de bicarbonato y otros insumos para la cocina.

    Detergente líquido. Este fue un producto que surgió dado el creciente uso de las lavadoras. Actualmente, dice Ponce hijo, producen 150 000 litros al año. También cuentan con otras líneas de productos como aquellos limpiamuebles.

    Cifra
    200 000 kilos de detergente en polvo produce Proquim al año, en promedio.

    Alejandra, Christian y Pedro Ponce,  propietarios de la empresa Proquim. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
    Alejandra, Christian y Pedro Ponce, propietarios de la empresa Proquim. Foto: Vicente Costales / LÍDERES
  • Una familia que vende bocaditos típicos por el país

    Redacción Quito

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    Era 1 990 y Elena Jiménez buscaba una manera para ganarse la vida. Así fue como nació Productos Grays, un negocio que elabora bocaditos con granos y otros productos tradicionales.

    Maní de sal, habas fritas y ajonjolí son algunos de los productos que el negocio comercializó desde sus inicios. Grace Logroño, gerente e hija de la fundadora, dice que iniciaron vendiendo a una bodega que luego se convirtió en un supermercado.

    Hace cinco años su madre, por problemas de salud, se retiró del negocio y se fue a vivir a Ventanas (Los Ríos), donde su abuela tiene una finca. La plantación provee a este negocio de todos los insumos que requieren para la fabricación.

    Grace se encarga ahora de las operaciones del emprendimiento. De hecho, Productos Grays tiene ese nombre en su honor.

    Se trata de una iniciativa familiar. Su padre y su hermano menor, Eduardo y Diego Logroño, también colaboran.

    Al inicio, Elena era quien se encargaba de la producción, pero ahora, además de su familia, el negocio tiene cuatro colaboradores. “Todos nos ayudamos mutuamente. Me siento orgullosa porque mi hermano, que solo tiene 16 años, ha adquirido responsabilidades y me ayuda mucho. El personal, además, recibe capacitación”, detalla la gerenta.

    El emprendimiento arrancó con tres productos. Luego fue incrementando con habas de dulce y maní con ajonjolí blanco; ahora espera ampliar su oferta con fruta deshidratada o seca y para ello están sacando registro sanitario.

    El año pasado, tras incorporarse al Programa de empresas solidarias e innovadoras de ConQuito, desarrolló un nuevo producto. “Es un ‘snack’ para deportistas. Se trata de una bolitas rellenas de chía y encapsuladas por un recubrimiento de higo. En algunas también hemos hecho una cobertura de chocolate negro. Además, les incorporamos ajonjolí”.
    Estos productos son ideales para quienes necesitan mantenerse activos durante el día o para quienes realizan actividades atléticas.

    “Elaboramos todos los productos tradicionales de manera artesanal. El maní, por ejemplo, lo tostamos; las habas sí las freímos y las de dulce contienen panela. Son productos saludables, con un toque diferente, pero que son propios de nuestra cultura gastronómica”, manifiesta Grace.

    Según ConQuito, este negocio se destaca porque practica los principios de la economía popular y solidaria. Lo cataloga como socialmente responsable.

    Productos Grays se comercializan en Quito y otras ciudades del país. Actualmente, la oferta de este negocio se encuentra en Baños, Quevedo, Babahoyo, Latacunga, Ambato, Ibarra, Cayambe, etc.

    Los ‘snacks’ han llegado también fuera del continente. En el yate Darwin, que navega por Galápagos, también se los ofrece.

    Juana Armijos, administradora de este navío, indicó que conoció del emprendimiento por una entrevista de radio. Ahora llevan fundas grandes de maní para que consuman los turistas; lo compran debido a su calidad.

    La familia Logroño busca que su negocio siga creciendo. Espera seguir capacitándose para ofrece a sus clientes un trato óptimo y aumentar su línea.

    La idea, además, es que más personas conozcan que estos productos buscan resaltar alimentos propios del territorio nacional.

    Más datos

    La gerente. Grace Logroño es ingeniera en finanzas y auditoría. Al entrar al programa Pesi, de ConQuito, logró desarrollar una estrategia de marketing y ventas. Previo a ello la situación de comercialización era complicada.

    Premio. Productos Grays hizo una prueba en Quicentro Sur por dos días el año pasado. La sorpresa fue que el público compró gran cantidad de la oferta: 300 fundas. El negocio ganó el premio Testing Lab de ConQuito y ganaron la permanencia por seis meses en una isla del centro comercial.

    Grace Logroño se encarga personalmente de la producción de maní de sal, habas fritas, entre otros bocaditos. Foto; Armando Prado / LÍDERES
    Grace Logroño se encarga personalmente de la producción de maní de sal, habas fritas, entre otros bocaditos. Foto; Armando Prado / LÍDERES
  • La adicción al trabajo afecta a mente y cuerpo

    Diana Serrano

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    “Eran las dos de la mañana y seguía, sin preocuparme, frente al computador de mi oficina”, cuenta Sandra Valdivieso, diseñadora gráfica de 32 años, que durante aproximadamente tres años dedicó gran parte de su tiempo a obligaciones laborales, sin quejas y, por el contrario, con mucha satisfacción.

    Este comportamiento se denomina adicción al trabajo o ‘workaholic’ y se caracteriza por una necesidad incontrolable de trabajar de forma constante.

    Un artículo publicado en diciembre del 2017 por el Foro Económico Mundial, cita un estudio de la consultora española Randstad el cual afirma que el 39% de los trabajadores no se desconecta de su trabajo durante sus vacaciones, por voluntad propia.

    Esta actitud puede responder a una adicción por el trabajo. Según Esteban Prado, psicólogo clínico y psicoterapeuta, la adicción no solo se define por la intensidad de un comportamiento, sino por el impacto negativo en otros aspectos como la familia o las relaciones interpersonales. El experto la califica como un comportamiento autodestructivo.

    Para José Luis Naranjo, socio de la consultora de recursos humanos Newlead, existen tres factores que pueden desencadenar en adicción al trabajo.

    El primero es por las motivaciones y aspiraciones que tiene el trabajador. Si su deseo es comprar una casa o dar mejor educación a sus hijos, no le importará destinar más horas de trabajo para aumentar sus ingresos, dice Naranjo.

    El segundo factor es la pasión que un trabajador puede sentir por lo que hace. En este caso, el dinero queda en segundo plano y lo importante es alcanzar el desarrollo profesional.

    La tercera causa es la dependencia al trabajo, que muchas veces se relaciona con aspectos emocionales que no le permiten a la persona sentirse bien en otros ambientes.

    El alto rendimiento y el trabajo sin límites de tiempo, le pasaron la factura a la diseñadora Valdivieso, quien a los pocos meses de trabajo, empezó a padecer de insomnio, inapetencia y dolores musculares.

    En numerosas ocasiones, y cada vez más, tanto los adictos al trabajo como las personas que no lo son, reciben comunicaciones fuera del horario laboral por parte de sus jefes. Según el estudio de Randstad, un 56% de empleados señala que no se desconecta porque sus superiores esperan que siempre esté pendiente del teléfono o del correo electrónico.

    Esto genera dos tipos de estrés, según explica al Foro Económico Mundial el psicólogo clínico, Fernando Mansilla.

    “Sufren por un lado por el trabajo, porque las demandas pueden ser a cualquier hora y no se tiene control sobre ellas; eso es estrés laboral. Pero además se sufre estrés familiar porque cada vez que llaman al trabajador, este se tiene que marchar y puede darse un problema con su familia”.

    Hay países que están regulando la llamada desconexión digital como es el caso de Francia, donde a principios del 2017 entró en vigor una ley que no exige apagar el teléfono ni prohíbe el envío de correos electrónicos, pero sí insta a buscar soluciones negociadas entre jefes y empleados.

    Esta legislación pone sobre la mesa un problema que se ha incrementado en los últimos años y que cada vez afecta a un mayor número de trabajadores.

    En Estados Unidos, en 1983, se creó la fundación Workaholics Anónimos, para brindar apoyo grupal a adictos al trabajo. Sus integrantes coinciden en que esta adicción les produjo pérdida de amigos y problemas en sus relaciones sentimentales.

    Problemas psicológicos y físicos son las principales afecciones del adicto al trabajo.
    El psicólogo Prado recomienda preguntarse ¿qué estoy desatendiendo en mi vida por dedicarme a esta actividad? Si la respuesta es extensa, lo mejor es tomar acciones para superar la adicción.

    Una de ellas es buscar apoyo grupal, en la que la persona se pueda sentir identificada con otras personas que atraviesen la misma situación.

    Prado también recomienda que estas reuniones se conviertan en un hábito de vida, que le permita a la persona adicta encontrar un soporte para no recaer.

    El ambiente laboral donde se desenvuelve el trabajador es clave para evitar o ayudar a sobrellevar un adicción. Por eso Naranjo recomienda que las empresas mantengan políticas y campañas para equilibrar la vida personal y profesional, como por ejemplo el Family Day, en el cual el trabajador disfruta de un día laboral de esparcimiento para compartir con su familia.

    Foto: Ingimage
    Foto: Ingimage
  • El chocolate artesanal se elabora en familia

    Cristina Marquez

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    Las barras de 3H Chocoatl se pueden disolver en leche o en agua. Con solo un pequeño pedazo del chocolate y un poco de canela, la bebida adquiere un sabor y aroma intensos, además de un gusto original.

    El secreto, según los fundadores del emprendimiento, es que se trata de pasta pura de cacao. El producto no tiene saborizantes sintéticos, azúcares, grasas adicionales y tampoco ningún tipo de conservantes.

    “Nos esforzamos por rescatar el sabor original del chocolate, tal como lo bebían los ancestros. Además, al ser un producto totalmente natural, tiene varios beneficios para la salud”, afirma Jorge Ávalos, gerente de este emprendimiento.

    El proceso de producción de las barras consiste en secar las semillas de cacao, tostarlas, molerlas y retirar la grasa natural de la planta, hasta lograr la textura de una pasta. Todo ese proceso se realiza de forma artesanal en casa de la familia Ávalos.

    Jorge y sus hermanos se enamoraron del sabor del chocolate en su infancia. Ellos son oriundos del cantón Cumandá, al sur de Chimborazo, un sitio privilegiado para la producción de cacao fino de aroma debido al clima y a la altura.

    Su madre, Laura Yuqui, preparaba chocolate artesanal con los frutos que se recogían en las plantaciones de su casa. “El sabor de ese chocolate nunca se igualó a los otros que podíamos comprar en la tienda. Ahora sabemos que se debe a la preparación artesanal y a la calidad de nuestro cacao”, afirma el emprendedor.

    Antes de iniciar el negocio, la familia Ávalos se dedicaba a comercializar el cacao de sus plantaciones. Las semillas se enviaban a Guayaquil, sin embargo, se sentían perjudicados en los precios por los intermediarios.

    El valor del quintal del cacao decayó y la familia estuvo en crisis en varias ocasiones. Jorge, hoy de 35 años, decidió en el 2014 renunciar a su trabajo como técnico en mantenimiento de empresas privadas para mejorar la economía de su familia y fundar un emprendimiento propio.

    La investigación de mercado y la prueba de recetas duró casi dos años. Jorge experimentó con cacao de diferentes variedades y sembrado a distintas alturas, así descubrió diferencias de sabor en el cacao que se produce en la Amazonía, en la Costa, y en Cumandá, que es una zona tropical situada justo en los límites entre Chimborazo y Guayas.

    Cuando encontró la variedad que él consideraba perfecta elaboró barras de prueba para obtener opiniones de degustadores expertos. “Cuando logré obtener el sabor ideal, supe que había acertado en el blanco y que este chocolate impulsaría mi empresa”.

    En un inicio su familia no apoyaba la decisión de invertir en la idea de Jorge, pues desconfiaban del mercado que ya estaba copado con chocolates de más de una decena de marcas muy populares y posesionadas. Pero al final, optaron por confiar en el producto y se lanzaron al mercado.

    Ahora la empresa está integrada por cinco miembros de familia, cada uno cumple un rol importante. Édgar Ávalos y su madre Lorena se encargan la producción de cacao en Cumandá; ellos también se encargan del primer tueste de las semillas.

    Jorge y su esposa Ana María Martínez, se encargan de la manufactura de las tabletas de chocolate. Lo hacen en su casa, situada en el norte de Riobamba. Allí instalaron un taller en el que logran producir 4 000 barras al mes.

    Entre tanto, su padre Jorge y su hermano menor Edwin, se encargan de buscar mercado y pactar convenios para distribuir los productos. Actualmente, las barras se entregan en las tiendas Tía, ERPE, Santa María y Camari, además en comerciales naturistas de Riobamba, Latacunga y Guayaquil.

    Con esos canales de venta la facturación mensual del negocio bordea los USD 4 500.
    Los planes no se detienen. Para este año nuevos productos se sumarán al menú de la empresa familiar este año. Se trata de nuevas barras con endulzantes naturales y manteca de cacao.

    La idea de este emprendimiento es dar valor agregado a sus productos y diferenciarse de la competencia.

    Más datos

    Nuevos productos  se sumarán al menú de la empresa familiar este año. Se trata de nuevas barras con endulzantes naturales y manteca de cacao.

    Las barras de  chocolate que elabora 3H Chocoatl pesan 200 gramos tienen un precio muy competitivo: USD 1,60.

    La familia hizo  una inversión inicial de USD 5 000 para obtener registros sanitarios e implementos de cocina.

    Exportar es  la meta a largo plazo de este pequeña empresa ubicada en Chimborazo. El área de comercialización ya ubica posibles mercados en Italia y España.

    Jorge Ávalos es el gerente de este emprendimiento que tiene su base de operaciones en Chimborazo. Foto: Cristina Márquez / LÍDERES
    Jorge Ávalos es el gerente de este emprendimiento que tiene su base de operaciones en Chimborazo. Foto: Cristina Márquez / LÍDERES
  • Nueve de cada 10 empresas en el país son familiares

    Redacción Líderes

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    La tendencia se mantiene. En el tejido empresarial ecuatoriano, las compañías de origen familiar son mayoría. Así lo sostiene un estudio elaborado por la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES) presentado en Guayaquil.

    El ‘Primer Informe sobre el estudio de la Empresa Familiar en Ecuador’ señala que el 90,5% (45 250) de las empresas registradas en la base de datos de la Superintendencia de Compañías se clasifican como familiar. Mientras que el 7,9% son de propiedad dispersa no familiar y el 1,7% de propiedad desconocida.

    El estudio se hizo en base a las 50 000 empresas (entre grandes, medianas, pequeñas y microempresas) constituidas en la Superintendencia.

    El estudio, que se elaboró en un período de ocho meses, también aborda el tipo de empresa por región. En la Costa, el 90,7% son empresas familiares; en la Sierra es el 89,8%, en el Oriente el 97% y en Galápagos el 95,7%.

    En cuanto a los sectores a los que pertenecen las empresas familiares destacan comercio, actividades profesionales, el sector inmobiliario y la construcción, transporte, manufactura, servicios y agricultura.

    El estudio se hizo en base a las 50 000 empresas (entre grandes, medianas, pequeñas y microempresas) constituidas en la Superintendencia. Foto: Archivo / LÍDERES
    El estudio se hizo en base a las 50 000 empresas (entre grandes, medianas, pequeñas y microempresas) constituidas en la Superintendencia. Foto: Archivo / LÍDERES
  • Un sueño que se edifica en familia

    Carolina Enriquez

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    En el 2003, el sueño de toda una vida de Ricardo, Luis Fernando y Julio Padrón se hizo realidad. Iniciaron su propia constructora, a la que denominaron Herpayal.

    Este nombre está profundamente ligado con la historia de la compañía familiar. Corresponde a una contracción de las palabras hermanos Padrón Ayala.

    Desde que la firma arrancó, con una inversión de USD 200 000, sus propietarios tenían claro que se especializarían en construir en una zona en la que pudieran ofrecer a sus clientes amplios espacios, pero con la misma calidad de edificios ubicados en el centro norte financiero de la ciudad.

    Fue así como dieron con terrenos en Ponciano Alto. La empresa ha contribuido al desarrollo urbanístico de este sector de Quito con la construcción de suites y departamentos por 14 años.
    La principal característica de estas viviendas es su amplitud.

    Julio Padrón, gerente de la compañía, explica que en el centro norte financiero los constructores, usualmente, se ven obligados a limitarse en el diseño y servicios debido a los espacios de construcción. Mientras que en Ponciano tienen mayores posibilidades.

    Durante los nueve primeros años, la empresa se concentró en proyectos de pocas unidades habitacionales. Sin embargo, tuvo un punto de inflexión durante el ‘boom’ de la construcción.
    En el 2012 creció, lo que permitió que su facturación supere el USD 1 millón. Complementario a la construcción, reforzaron las acciones en servicio al cliente.

    Esto lo destaca Carolina Suárez, quien adquirió una suite y un departamento a Herpayal. “Tengo que resaltar la seriedad que tienen para la entrega. Me gustan los materiales que usan, la interacción con los clientes y las facilidades que nos dan siempre”.

    Con esto se refiere al servicio posventa. Una vez que la persona adquiere los departamentos y requiere arreglar algún daño en el mismo, realizar una instalación, hacer reformas, etc., puede solicitar el apoyo de la constructora.

    Por ejemplo, explicó Julio, si alguien necesita hacer conexiones para colocar lámparas pueden llamar a la empresa y un equipo especializado acude al sitio y desarrolla el trabajo requerido.

    Pero, la constructora ha seguido innovando. En 2015, con la llegada de la segunda generación de la familia Padrón, se desarrollaron procesos de marketing y se generaron fuentes de trabajo tras la apertura de su propia área de diseño. Antes subcontrataban.

    Una de las fortalezas de la compañía, de acuerdo al gerente, es el manejo financiero. Este factor fue trascendental para que Herpayal enfrente la crisis del sector durante los últimos dos años.

    Esto, sumado a que la empresa asumió actividades que antes subcontrataba y evitó inversiones en proyectos de grandes dimensiones, fue clave para mantener el flujo de caja. Con ello la constructora ha podido ofrecer préstamos con facilidades a sus empleados.

    Julio Padrón explica que la visión de él y su familia no solo es el desarrollo de un negocio sino la responsabilidad social para con sus trabajadores. La compañía entrega y asume el almuerzo para el personal, ofrece espacios de tiempo para que puedan estudiar, da asesoría financiera, entre otros. “Queremos devolver a los empleados la alta fidelidad y calidad que han tenido con nosotros”.

    Entre las proyecciones de la compañía, de hecho, está el reforzar las actividades en materia de responsabilidad social y seguir creciendo en la construcción de proyectos. El objetivo de la firma es que cada año aumente el monto de facturación con relación al año inmediatamente anterior.

    Como parte de su crecimiento la compañía ha incursionado en la oferta de otros dos servicios. “Hemos dejado abierta la posibilidad de hacer planificación para terceros, construcción para terceros en algún momento, etc. Asimismo, damos asesoría legal inmobiliaria, no solo en el tema de la compra sino en cuanto a los aspectos patrimoniales. Hay clientes que quieren comprar para su familia, para inversión, para poner en comodato, etc. También, analizamos la parte tributaria”, indicaron los directores de la compañía.

    La empresa también tiene como objetivo dar valor agregado para sus clientes, por lo que se esmeran en los acabados que, al final, se convierten en un elemento más de la decoración. Los proveedores de la compañía son nacionales y extranjeros, dependiendo de los productos para sus proyectos.

    Córcega es uno de los últimos proyectos construidos por Herpayal, empresa dirigida por  el ingeniero  Julio Padrón, en el sector de Ponciano, en el norte de Quito. Foto: Foto; Julio Estrella / LÍDERES
    Córcega es uno de los últimos proyectos construidos por Herpayal, empresa dirigida por el ingeniero Julio Padrón, en el sector de Ponciano, en el norte de Quito. Foto: Foto; Julio Estrella / LÍDERES